LORE PENDRAGON
La esposa del difunto Charles Pendragón vio ascender al trono a su hijo mayor Edward, al que tuvo que hacer entender que sus deseos de venganza por la muerte de su padre y hermana debían esperar.
Las fuerzas de los Pendragón y de sus aliados, las 9 familias que se unieron a ellos tras su expulsión de Ouroboros, habían menguado considerablemente. Una nueva batalla sería inviable para ellos.
Tintagel fue abandonado y se reagruparon en Ávalon, la isla contaba con una gran extensión de tierra para todos, así como de una defensa mágica importante que les guarecía de todo peligro exterior. Las nieblas de Ávalon.
Allí pasaron varios años aislados del mundo exterior, recuperando fuerzas, entrenando y transmitiendo a los más jóvenes los conocimientos sobre sus poderes, así como un nuevo gran objetivo marcado para la familia: la venganza.
Durante este tiempo los dragones de tierra firme comenzaron a salirse de control debido a que la familia Pendragón no se hacía cargo de ellos. Los ataques a aldeas y ciudades se incrementaron.
En la isla continuaron con la cría de dragones, consiguiendo ejemplares mucho más puros y nobles además de mejorando el vínculo con ellos. Eso les permitió seguir indagando sobre las escrituras que Charles Pendragón tan interesado estaba: los dragones primigenios.
La comunidad de la isla era fiera y guerrera, sin embargo la vida allí era segura. Solamente realizaban pequeñas salidas a tierra firme para proveerse de materiales y elementos que no se podían encontrar en la isla.
Sin embargo, la desgracia volvió a ellos en forma de enfermedad y la población de dragones mermó considerablemente. Así pues a finales de 1400 decidieron ir en busca de dragones a tierra firme. Gracias a los avances en el control sobre dragones consiguieron llevar a la isla a casi todos los que se encontraban en Gran Bretaña.
Las búsqueda de venganza siguió presente generación tras generación, a la espera de una señal que les indicase el momento adecuado para completarla. Una señal del Árbol Sagrado.
Pocas veces aparecieron en tierra firme desde esa fecha, sin embargo en 2020 algo cambió, En Inglaterra la magia fue revelada a los humanos y comenzó a fraguarse una nueva guerra.
Debatieron en Ávalon su intervención, la unión a la causa de Terméritus Jones podría ser provechosa. Al fin y al cabo compartían ideales. Sin embargo el Dictador mágico hizo algo que no le gustó a la familia.
Comenzó a doblegar dragones a su servicio. Por aquel entonces Aelle Pendragón, al compartir edad con Terméritus viajó hasta Londres para hablar con él.
Los términos del pacto fueron complicados, pues los Pendragón no querían ayudar a Terméritus con la guerra por haber usado los dragones a su favor.
Así pues, finalmente consiguieron recuperar varios dragones que llevaron con ellos a Ávalon mientras que los que seguían al Dragón Smaug se quedaron a las órdenes de Terméritus.
Las fuerzas de los Pendragón y de sus aliados, las 9 familias que se unieron a ellos tras su expulsión de Ouroboros, habían menguado considerablemente. Una nueva batalla sería inviable para ellos.
Tintagel fue abandonado y se reagruparon en Ávalon, la isla contaba con una gran extensión de tierra para todos, así como de una defensa mágica importante que les guarecía de todo peligro exterior. Las nieblas de Ávalon.
Allí pasaron varios años aislados del mundo exterior, recuperando fuerzas, entrenando y transmitiendo a los más jóvenes los conocimientos sobre sus poderes, así como un nuevo gran objetivo marcado para la familia: la venganza.
Durante este tiempo los dragones de tierra firme comenzaron a salirse de control debido a que la familia Pendragón no se hacía cargo de ellos. Los ataques a aldeas y ciudades se incrementaron.
En la isla continuaron con la cría de dragones, consiguiendo ejemplares mucho más puros y nobles además de mejorando el vínculo con ellos. Eso les permitió seguir indagando sobre las escrituras que Charles Pendragón tan interesado estaba: los dragones primigenios.
La comunidad de la isla era fiera y guerrera, sin embargo la vida allí era segura. Solamente realizaban pequeñas salidas a tierra firme para proveerse de materiales y elementos que no se podían encontrar en la isla.
Sin embargo, la desgracia volvió a ellos en forma de enfermedad y la población de dragones mermó considerablemente. Así pues a finales de 1400 decidieron ir en busca de dragones a tierra firme. Gracias a los avances en el control sobre dragones consiguieron llevar a la isla a casi todos los que se encontraban en Gran Bretaña.
Las búsqueda de venganza siguió presente generación tras generación, a la espera de una señal que les indicase el momento adecuado para completarla. Una señal del Árbol Sagrado.
Pocas veces aparecieron en tierra firme desde esa fecha, sin embargo en 2020 algo cambió, En Inglaterra la magia fue revelada a los humanos y comenzó a fraguarse una nueva guerra.
Debatieron en Ávalon su intervención, la unión a la causa de Terméritus Jones podría ser provechosa. Al fin y al cabo compartían ideales. Sin embargo el Dictador mágico hizo algo que no le gustó a la familia.
Comenzó a doblegar dragones a su servicio. Por aquel entonces Aelle Pendragón, al compartir edad con Terméritus viajó hasta Londres para hablar con él.
Los términos del pacto fueron complicados, pues los Pendragón no querían ayudar a Terméritus con la guerra por haber usado los dragones a su favor.
Así pues, finalmente consiguieron recuperar varios dragones que llevaron con ellos a Ávalon mientras que los que seguían al Dragón Smaug se quedaron a las órdenes de Terméritus.
El árbol en sus orígenes se encontraba en Tintagel, era un ejemplar grande y frondoso en el jardín principal. La mujer de Charles disfrutaba a menudo de la lectura bajo su sombra.
Con la huída a Ávalon, Igraine sumida en la tristeza ordenó trasladar el cuerpo de su marido a la isla y con ella se llevó una semilla del árbol.
Igraine Pendragón no poseía las cualidades mágicas de su esposo, sin embargo su condición de bruja le había otorgado la capacidad de vincular almas a otros seres vivos. Hundió la semilla en el vientre del cuerpo de su esposo y con ella, le enterró en la isla.
Con el paso de los años el árbol creció, mucho más que su predecesor, adquiriendo en poco tiempo unas proporciones descomunales para un árbol común. El brillo de sus hojas indicaba que la magia brotaba en él y conforme más miembros de la familia y guerreros fenecían el árbol parecía ejercer más poder en Ávalon.
Igraine transmitió su poder durante varias generaciones y poco a poco se entremezcló y avanzó consiguiendo que el linaje Pendragón, de alguna forma, fuese inmortal a través del árbol. Podían comunicarse con él, con sus ascendentes, sabios luchadores que les recordaban el cometido de la familia.
Poco a poco sus raíces se extendieron por la isla, consumiendo la energía mágica de la misma para él. Las nieblas de Ávalon se disiparon haciendo que la barrera que les protegía del mundo se quebrase. Se alimentaba de la magia de la isla.
Aquello era contraproducente para los habitantes, por lo que hubo pequeñas revueltas entre los vasallos de la familia. Los Pendragón debían asegurar la protección de las 9 casas vasallas a toda costa, así que intentaron dialogar con el árbol.
La naturaleza del árbol no hacía posible su supervivencia como la del resto de plantas del mundo, necesitaba magia y si no era de la propia isla, debían encontrar la manera de satisfacerle. Su respuesta fue: sacrificios. Para el día a día era suficiente con pequeños sacrificios animales, pero cada ciertos años precisaba de su sangre, la de los Pendragón, para sobrevivir.
Se le otorgó el nombre de Sanguis Ligno y comenzaron a adorarlo como a un dios. Las sacerdotisas de sangre se encargaban de su cuidado y de comunicarse con él, tanto para escuchar sus deseos como para pedirle favores.
Los deseos del Sanguis Ligno debían cumplirse sin ninguna otra opción, así como su necesidad de sangre de la familia. A cambio, el Árbol Sagrado levantaba las Nieblas de Ávalon y las hacía densas ocultándoles del mundo, les proporcionaba valentía, coraje y protección; y les guiaba en su objetivo principal: la venganza.
Durante muchos años siguieron mimando y adorando al árbol, asegurándose de proporcionar bienestar a su pueblo. Esperando que las azules hojas del Sanguis Ligno se tornasen rojas.
Con la huída a Ávalon, Igraine sumida en la tristeza ordenó trasladar el cuerpo de su marido a la isla y con ella se llevó una semilla del árbol.
Igraine Pendragón no poseía las cualidades mágicas de su esposo, sin embargo su condición de bruja le había otorgado la capacidad de vincular almas a otros seres vivos. Hundió la semilla en el vientre del cuerpo de su esposo y con ella, le enterró en la isla.
Con el paso de los años el árbol creció, mucho más que su predecesor, adquiriendo en poco tiempo unas proporciones descomunales para un árbol común. El brillo de sus hojas indicaba que la magia brotaba en él y conforme más miembros de la familia y guerreros fenecían el árbol parecía ejercer más poder en Ávalon.
Igraine transmitió su poder durante varias generaciones y poco a poco se entremezcló y avanzó consiguiendo que el linaje Pendragón, de alguna forma, fuese inmortal a través del árbol. Podían comunicarse con él, con sus ascendentes, sabios luchadores que les recordaban el cometido de la familia.
Poco a poco sus raíces se extendieron por la isla, consumiendo la energía mágica de la misma para él. Las nieblas de Ávalon se disiparon haciendo que la barrera que les protegía del mundo se quebrase. Se alimentaba de la magia de la isla.
Aquello era contraproducente para los habitantes, por lo que hubo pequeñas revueltas entre los vasallos de la familia. Los Pendragón debían asegurar la protección de las 9 casas vasallas a toda costa, así que intentaron dialogar con el árbol.
La naturaleza del árbol no hacía posible su supervivencia como la del resto de plantas del mundo, necesitaba magia y si no era de la propia isla, debían encontrar la manera de satisfacerle. Su respuesta fue: sacrificios. Para el día a día era suficiente con pequeños sacrificios animales, pero cada ciertos años precisaba de su sangre, la de los Pendragón, para sobrevivir.
Se le otorgó el nombre de Sanguis Ligno y comenzaron a adorarlo como a un dios. Las sacerdotisas de sangre se encargaban de su cuidado y de comunicarse con él, tanto para escuchar sus deseos como para pedirle favores.
Los deseos del Sanguis Ligno debían cumplirse sin ninguna otra opción, así como su necesidad de sangre de la familia. A cambio, el Árbol Sagrado levantaba las Nieblas de Ávalon y las hacía densas ocultándoles del mundo, les proporcionaba valentía, coraje y protección; y les guiaba en su objetivo principal: la venganza.
Durante muchos años siguieron mimando y adorando al árbol, asegurándose de proporcionar bienestar a su pueblo. Esperando que las azules hojas del Sanguis Ligno se tornasen rojas.
La casa Keops: Los descendientes de Cleopatra ocupan parte de la costa de la isla de Ávalon. Se relacionan comercialmente con casi todos los demás linajes.
Cultivan y construyen pero también tienen un gran control sobre la estrategia militar y la política.
La casa Lothbrok: Es la más unida al linaje Pendragón, se han consumado matrimonios entre las dos familias durante cientos de años. Algunos les consideran familia, mientras que otros siguen viéndoles como unos vasallos bastante brutos.
Los Lothbrok son muy dados a ocupar cargos militares. Se establecieron en otra parte costera de la isla.
La casa de Atila: Se relacionan entre ellos y pocas veces se aparecen en reuniones sociales con el resto de linajes. Se alojaron en la parte montañosa de la isla, buscando el clima frío (que Ávalo tiene muy pocos días al año). Drenan parte de la energía del Sanguis Ligno para hacer predicciones astronómicas.
Los Hammurabi: Se puede ver a varias mujeres de éste linaje rondar el templo del Sanguis Ligno, al cual también veneran.
Su código fue inscrito con caracteres cuneiformes en una estela de piedra de diorita de forma cilíndrica. Este código también se encuentra en alguno de los templos Pendragon, y es utilizado cuando hay que realizar ajusticiamientos. Intensifica la magia de justicia de los descendientes de Hammurabi. Son también protectores de los templos.
La casa de Midas: Rondan los sótanos del castillo Pendragón, donde tienen salas especiales para la investigación alquímica. Ocupan parte del centro de la isla, como comerciantes.
La casa de Hipatia: Suelen ser los consejeros del linaje Pendragón, siendo su ascendente Cedric de Hipatía el sustituto de Merlín.
La casa de Pelayo: También forma parte del grosor de las fuerzas militares. Asimismo son excelentes espías por su habilidad de intangibilidad.
Los Aduladores: También tienen un espacio en el sótano para sus experimentos con venenos. Sus guerreros son expertos asesinos y trabajan en las sombras, siendo capaces de cubrir su estancia en un lugar con su manipulación de masas.
Los sin nombre: El linaje oculto, se exilió a una zona de la isla en la que jamás han tenido trato con los demás. Solamente aparece su representante en las reuniones en la mesa redonda del castillo. En cualquier caso no muestra signos violentos hacia el resto de casas que habitan Ávalon.
Cultivan y construyen pero también tienen un gran control sobre la estrategia militar y la política.
La casa Lothbrok: Es la más unida al linaje Pendragón, se han consumado matrimonios entre las dos familias durante cientos de años. Algunos les consideran familia, mientras que otros siguen viéndoles como unos vasallos bastante brutos.
Los Lothbrok son muy dados a ocupar cargos militares. Se establecieron en otra parte costera de la isla.
La casa de Atila: Se relacionan entre ellos y pocas veces se aparecen en reuniones sociales con el resto de linajes. Se alojaron en la parte montañosa de la isla, buscando el clima frío (que Ávalo tiene muy pocos días al año). Drenan parte de la energía del Sanguis Ligno para hacer predicciones astronómicas.
Los Hammurabi: Se puede ver a varias mujeres de éste linaje rondar el templo del Sanguis Ligno, al cual también veneran.
Su código fue inscrito con caracteres cuneiformes en una estela de piedra de diorita de forma cilíndrica. Este código también se encuentra en alguno de los templos Pendragon, y es utilizado cuando hay que realizar ajusticiamientos. Intensifica la magia de justicia de los descendientes de Hammurabi. Son también protectores de los templos.
La casa de Midas: Rondan los sótanos del castillo Pendragón, donde tienen salas especiales para la investigación alquímica. Ocupan parte del centro de la isla, como comerciantes.
La casa de Hipatia: Suelen ser los consejeros del linaje Pendragón, siendo su ascendente Cedric de Hipatía el sustituto de Merlín.
La casa de Pelayo: También forma parte del grosor de las fuerzas militares. Asimismo son excelentes espías por su habilidad de intangibilidad.
Los Aduladores: También tienen un espacio en el sótano para sus experimentos con venenos. Sus guerreros son expertos asesinos y trabajan en las sombras, siendo capaces de cubrir su estancia en un lugar con su manipulación de masas.
Los sin nombre: El linaje oculto, se exilió a una zona de la isla en la que jamás han tenido trato con los demás. Solamente aparece su representante en las reuniones en la mesa redonda del castillo. En cualquier caso no muestra signos violentos hacia el resto de casas que habitan Ávalon.
Es un compromiso entre señores y vasallos que se realiza mediante una ceremonia pública solemne bi-anual. Consta de varias partes:
Homenaje. El vasallo coloca sus manos entre las de su futuro señor y declara su voluntad de ser su vasallo, diciendo Señor, me hago hombre vuestro. El señor le responde Os recibo y tomo por hombre.
Juramento de fidelidad. De pie, con la mano bajo el Sanguis Ligno, el vasallo dice Yo te seré fiel a ti, con fe recta, sin malas artes, como un hombre debe serlo para con su señor, sin engaños a sabiendas. Tras esto cortan su mano y la unen dejando caer unas gotas a las raíces del árbol.
Osculum. El señor le dice a su nuevo vasallo Os recibo y tomo por hombre y os beso en señal de la fidelidad.
Investidura. Es la entrega por parte del señor de un objeto que simboliza la concesión material que se va a entregar al vasallo.
Los servicios que el vasallo debía prestar son principalmente dos: consejo y auxilio.
Entre las obligaciones que se incluyen en el auxilio está la ayuda militar, que podía dividirse en obligación de asistir a las grandes expediciones militares, la cabalgada, o deber de acudir a las correrías de devastación, y la guardia, o servicio de vigilancia armada o custodia.
En el consejo se incluían aquellos deberes para con el señor que implicasen consejo en la corte. En ellos deben asistir
a las asambleas del Descendiente de Pendragón y estar presentes en los actos de vasallaje de otros individuos.
Ambas partes se comprometían a guardarse lealtad y no traicionar el vínculo que se establecía entre ellos. Las obligaciones contractuales de la relación vasallática quedaban sin efecto para una parte si la otra incumplía gravemente las suyas (felonía). En este caso los Pendragon pueden usar su magia de sangre para castigar a los vasallos que incumplan.
Homenaje. El vasallo coloca sus manos entre las de su futuro señor y declara su voluntad de ser su vasallo, diciendo Señor, me hago hombre vuestro. El señor le responde Os recibo y tomo por hombre.
Juramento de fidelidad. De pie, con la mano bajo el Sanguis Ligno, el vasallo dice Yo te seré fiel a ti, con fe recta, sin malas artes, como un hombre debe serlo para con su señor, sin engaños a sabiendas. Tras esto cortan su mano y la unen dejando caer unas gotas a las raíces del árbol.
Osculum. El señor le dice a su nuevo vasallo Os recibo y tomo por hombre y os beso en señal de la fidelidad.
Investidura. Es la entrega por parte del señor de un objeto que simboliza la concesión material que se va a entregar al vasallo.
Los servicios que el vasallo debía prestar son principalmente dos: consejo y auxilio.
Entre las obligaciones que se incluyen en el auxilio está la ayuda militar, que podía dividirse en obligación de asistir a las grandes expediciones militares, la cabalgada, o deber de acudir a las correrías de devastación, y la guardia, o servicio de vigilancia armada o custodia.
En el consejo se incluían aquellos deberes para con el señor que implicasen consejo en la corte. En ellos deben asistir
a las asambleas del Descendiente de Pendragón y estar presentes en los actos de vasallaje de otros individuos.
Ambas partes se comprometían a guardarse lealtad y no traicionar el vínculo que se establecía entre ellos. Las obligaciones contractuales de la relación vasallática quedaban sin efecto para una parte si la otra incumplía gravemente las suyas (felonía). En este caso los Pendragon pueden usar su magia de sangre para castigar a los vasallos que incumplan.
El funcionamiento de la isla es simple, el linaje Pendragón se encarga de asegurar el bienestar de sus vasallos y ellos les sirven en sus cometidos.
Rinden pleitesía al Descendiente de Pendragón, así como todos lo hacían con Arturo.
Pocas veces se ha visto algún atisbo de rebeldía por parte de las casas vasallas, excepto cuando las Nieblas de Ávalon se disiparon y en contadas ocasiones por falta de comida o desacuerdos temperamentales.
Para la familia Pendragón es muy importante mostrarse tal y como Charles siempre dijo que debían ser: fieros, rectos, implacables. Por ello la seriedad impera en las reuniones con los Descendientes de las casas Vasallas en el salón de la mesa redonda(que trasladaron desde Tintagel).
Las relaciones comerciales entre ellos son fructíferas, así como las uniones matrimoniales. Sin embargo, la familia Pendragón no suele mezclarse con el resto de casas, salvo en contadas ocasiones, siendo la preferida la de los Lothbrok, tal vez por su fiereza en batalla.
Rinden pleitesía al Descendiente de Pendragón, así como todos lo hacían con Arturo.
Pocas veces se ha visto algún atisbo de rebeldía por parte de las casas vasallas, excepto cuando las Nieblas de Ávalon se disiparon y en contadas ocasiones por falta de comida o desacuerdos temperamentales.
Para la familia Pendragón es muy importante mostrarse tal y como Charles siempre dijo que debían ser: fieros, rectos, implacables. Por ello la seriedad impera en las reuniones con los Descendientes de las casas Vasallas en el salón de la mesa redonda(que trasladaron desde Tintagel).
Las relaciones comerciales entre ellos son fructíferas, así como las uniones matrimoniales. Sin embargo, la familia Pendragón no suele mezclarse con el resto de casas, salvo en contadas ocasiones, siendo la preferida la de los Lothbrok, tal vez por su fiereza en batalla.
La relación de la familia Pendragón con los dragones ha variado bastante desde los tiempos de Charles.
Cada Pendragón tiene asignado un dragón acompañante, en ocasiones les une su fecha de nacimiento, otras veces se destinan por otro tipo de características.
La familia les cuida y ellos les protegen. Su vínculo es tan intenso que en ocasiones no puedes diferenciarlos.
Desde la llegada de Goth Morgon Agunnaryd el vínculo se intensificó con cada generación. El dragón que compartía vida con Cedid Pendragón (Padre del actual Descendiente ), murió junto a él.
Son familia.
Cada Pendragón tiene asignado un dragón acompañante, en ocasiones les une su fecha de nacimiento, otras veces se destinan por otro tipo de características.
La familia les cuida y ellos les protegen. Su vínculo es tan intenso que en ocasiones no puedes diferenciarlos.
Desde la llegada de Goth Morgon Agunnaryd el vínculo se intensificó con cada generación. El dragón que compartía vida con Cedid Pendragón (Padre del actual Descendiente ), murió junto a él.
Son familia.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.