Gruta de las conchas

El miembro 'Anteia Malfoy' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Curación' :

Al ver el panorama no me quedé realmente tranquila... Era normal no fiarse de la gente ajena, pero en realidad me dio rabia que el chico ése se negara a aceptar mi ayuda... Por una vez que soy buena persona... Ante su fría respuesta no pude hacer más que un simple ruido de confusión y, por si fuera poco, no pude defender mi posición por su rápida partida.

Por lo menos hubo alguien más considerado, o eso parecía por el momento. Pronto me di cuenta de que un chico con el pelo azul me estaba llamando. No puedo negar que era bastante guapo, aunque en realidad la mayoría de chicos tiene su puntillo si se sabe mirar bien. En fin, este era apuesto de verdad, miraras por dónde lo miraras.

Cuando me preguntó el nombre me pilló desprevenida y no pude evitar que un ataque de nervios se apoderara de mí.

-¿Como te atreves a tal desfachatez? ¿Porqué debería decirle mi nombre a un tipo como tú? Ni siquiera se si sois de fiar, tan solo quiero ayudar porqué parecía que lo necesitabais...

Luego de pensar en lo imbécil que había sonado al decir eso decidí corregir...-Ehm... Me llamo Rosalind, pero puedes llamarme Rosa... o Rose... o como prefieras, no es que me importe mucho en realidad...

Recuperé un poco la cordura y me acomodé cerca de donde estaba el chico para disculparme.

-Perdón por mi reacción... No soy de por aquí y hace días que no tengo donde caer muerta...

No es que sirviera de mucho disculparse después de mi gran entrada triunfal, incluso yo misma desconfiaría de mí. Tomé aire, respire hondo y con un profundo suspiro esperé por una respuesta.

La gente empezó a marcharse, cada mochuelo a su olivo, como podría decirse. Yo decidí que me haría cargo de Corvo y de Emily, que los pobres habian acabado inconscientes tras la batalla. Ahi quedaban tan solo ellos, yo, Ares, Lykaios y...una elfa nueva recien llegada que tenia un actitud la mar de sospechosa, por como se presentaba.

Habia escuchado las palabras de ellos, sobre que el chip de sus cuellos les impedia usar la magia o ir a algun hospital cuya localizacion pudiesen comprometer. Me puse en pie y me aproximé a ellos, gracias a las sanaciones recibidas con anterioridad, me encontraba en plena forma.

-Lykaios, voy a llevarrme a Emily y a Corrvo al hospital del bosque de Serrwod. He oido lo de que no podeis usarr magia...en cuanto los deje, vuelvo y os llevo a donde me pidáis. No crreo que os apetezca quedarros aqui tirados.

Me despedí de ellos con un gesto rapido, me acerqué a los inconscientes de Corvo y Emily y desapareci de alli....

OFF:

[...]

Al cabo de unos cuatro minutos regresé, esta vez sin nadie, tras haberlos dejado en el hospital de Sherwood al cuidado del personal de allá. Cuando hube comprobado que estaban en buenas manos, retorné al lugar, y me quedé en pie junto a los dos de la Brigada, esperando a que se decidiesen a decirme donde podia llevarlos.

56 - 5 Sangrado = 51 PS
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Vaya... la elfa que llegó al lugar de casualidad y se ofreció a ayudar se gastaba un humor muuuuuuuy potente. Por lo visdto, Anteia era familiar de Lykaios y era gracioso ver como la llamaba "mamá" de una manera pesarosa como sintiendose sobreprotegido, lo cual no pude evitar reir un poco. Y sobre que alguien me apadrine mágicamente parece que iba a estar difícil, y cuando me dijo como los alumnos solían obtener sus plazas en Ouroboros hasta me asusté, me daba miedo llegar y meter la pata y quedar totalmente en ridículo, ¿porqué mi situación no podía ser un poco más sencilla?

Pronto nos iban a llevar a algún lugar a descansar, reponernos, curar del todo las heridas y posiblemente por fin quitarnos los chips anti magia, lo cual era un alivio saber que por fin ibamos a recuperar los poderes mágicos, una vez que te acostumbras a tenerlos, aunque haya estado un tiempo antes de usarlos sin querer ni siquiera mirarlos, es una gran putada por no decir una mierda espichada en un palo. Me sentía cada vez más cansado, me costaba mantenerme en pie, todo me empezaba a dar vueltas y las piernas me fallaban, por no decir temblaban un poco, cuando me quise dar de cuenta, todo a mi alrededor estaba borroso hasta que me desmayé y caí al suelo, donde todo se transformó en negro, oscuro y solitario.

Anteia se fue finalmente llevandose a Matvey, cada vez quedabamos menos aqui. La elfa de pelo rosa se aproximó pero parecio indignarse por mi pregunta. Si hubiese tenido energias, mas energias, me habria reido a carcajadas.

-Desfacha-qué? Cualquier persona capaz de pronunciar esa palabra es capaz de decir su nombre antes y gastar menos energias! Claro que somos de fiar! Somos la Brigada de las Mil Grullas! -   me crucé de brazos y sonreí de lado, mirando a Yaros que me informó que se iba a llevar a unos heridos al hospital, nuestra Emily entre ellos. -Dale, rusky. Luego te pido que nos lleves a un sitio super secreto....

"nah, no tan secreto"

-Y la verdad, no nos vendrian mal las dotes de una elfa sanadora, por qué no nos acompañas? Me fío de los elfos....Rose. Rose me gusta. Rose te llamaré. A mi me puedes llamar Lykaios. - alargué una mano hacia ella para estrecharla con fuerza.

-Entonces has llegado al lugar correcto. Vendrás con... ey! - en ese momento sentí que Ares a mi lado se derrumbaba, y llegué justo a cogerlo para que no se diera de morros contra el suelo. Lo sujeté y tomé su pulso, y suspire al notar que seguia siendo normal. Debía estar agotado. Supuse que en algo se notaba la mayor resistencia de los hombres lobo... Con cierto esfuerzo, lo cargué con ambos brazos. -Seguro que puedes echarle un vistazo a mi amigo, verdad...? Llevamos dias de problema en problema.

Yaroslav llegó de nuevo, y le pedí que nos llevase a todos a la playa de Durdle Door, incluida Rose. Si la elfa se arrepentia de acompañarnos...bueno, siempre podia ir a darse un baño en la playa (?) y marcharse. Pero por el momento, no podiamos permanecer alli mas tiempo, asi que nos marchamos.

Al responderme Lykaios lo mire por encima del hombro, o lo intenté... en realidad era mas alto que yo.... En fin, lo miré mal, no hay más.

-Tsk.... no cuesta tanto. Desfachatez ¿Ves? Justo después de eso noté lo remilgada que parecía, tantos años bajo tan estricta "educación" me habían pasado factura. Al pensar eso no pude contener mi risa.

-Pffffft... tienes razón hahahaha si que es una palabra extraña.

Luego me serené y le dije con un tono mas condescendiente.

-Perdón, me tuve una educación un tanto peculiar... Pero bueno, no importa demasiado. ¿¡SOIS DE LA GRAN BRIGADA?! He oído hablar de vosotros desde que llegué aquí! Seguís las ordenes del viento entre formidables fiestas y desmadres! ¿Me equivoco?

Sin darme cuenta me puse demasiado eufórica y ocupé sin querer el espacio personal del herido. Rápidamente rectifiqué.

-Uhm... En fin no me molesta ir con vosotros y eso de la playa me mola bastante... pero no tengo bañador.

Dije mientras me acercaba al amigo de Lykaios para ver que podía hacer por él.

-Aún no tengo demasiada experiencia... quizás no te pueda quitar el sangrado pero como mínimo te sentirás mejor.... Por cierto ¿Como te llamas?

Dije mientras lo curaba con un intento de amable sonrisa. Juro que lo intenté... Los trabajos de cara al publico no son mi fuerte...

Me quedé sorprendida, hice una curación increíble y además detuve el sangrado! La verdad es que solo había curado una vez a alguien...

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Curación: 10 Habilidad ficha + 30 Dados = +40 a Ares + El sangrado a paseo F)

El miembro 'Rosalind Humphries' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Curación' :

Aparezco con Ellyos y Victorya en la Gruta de las Conchas, pero para cuando llegamos ya no queda absolutamente nadie, únicamente quedan los restos de la batalla. Árboles caídos, tierra revuelta, marcas de ruedas de jeep, sangre en el suelo, escorpiones muertos...restos de una batalla campal. Murmuro un 'mierda' por lo bajo porque hemos llegado bastante tarde y por allí no se ve a nadie, ni para bien ni para mal. Echo un vistazo por los alrededores, llamando a voces a algunos de los míos. No sucede nada. Normalmente no me suele pasar eso de llegar demasiado tarde a un sitio, suelo llegar cuando es necesario, a tiempo para participar en la batalla o para sacar a gente herida, pero esta vez no sucede nada de eso.

Pasados algunos minutos de búsqueda decido sacar la moneda, mandando un mensaje masivo para que me respondan sobre lo sucedido. Paseo nervioso de un lado a otro mientras espero respuesta, hasta que por fin llega un mensaje de Yaroslav. Suspiro aliviado, comunicando a Ellyos y a Vic lo que ha sucedido. - Están todos más o menos bien, han trasladado a los heridos a los hospitales y han derrotado a una especie de bicho demoníaco. Esa parte está medio en ruso, no lo entiendo bien. - Yaroslav solía colar palabras en ruso en medio de sus mensajes y a veces resulta difícil de leer, incluso estando acostumbrado a ello. - También dice que había gente de la Alianza, pero que se fueron sin atacar porque se fueron persiguiendo a su dragón, o algo así...- no me termino de enterar muy bien, el mensaje es algo telegráfico. Más tarde le preguntaré, pero al menos creo entender que ha sido por un problema interno porque han ido tras uno de su grupo y no del nuestro. - Tenemos que aprovechar sus debilidades para hacernos con el control. - como ya no tenemos nada que hacer aquí nos desaparecemos los tres, rumbo a alguna zona de interés estratégico.