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INVIERNO

Enero 2.043

Trama XI: After the Blackout (trama de transición y exploración)
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AÑO 2.043
Durante siglos sus mundos permanecieron separados, pero eso terminó. El mundo mágico y el humano se encontraron y se desató la guerra, extendiéndose alrededor del mundo sin control. Miedo, odio, ambición...todas ellas armas poderosas. El choque entre la raza humana y la mágica resulta ya imparable. Uno por uno van cayendo, ¿quién será el primero en morder el polvo?
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Shyvanna Pendragon
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {03.01.21 15:08}

Castillo Pendragon
Hace 12 años atrás.


Las notas inundaban la sala de música. Eran rápidas y apresuradas, armoniosas en sí mismas, pero atormentadas. Una melodía que emanaba de un piano de cola para irradiarse más allá de la aquella sala, hacia los pasillos del castillo principal de los Pendragon. No era el canto de sirena al que estaban acostumbrados pero cuando Shyvanna tocaba el piano…No era otra cosa que…

Un grito de ayuda.

Sus dedos se movían furiosos a través de las teclas, golpeándolas para descargar todo aquello que era incapaz de poner en palabras. En ellos había pequeñas tiras, sus antebrazos, descubiertos de las mangas de vestido azul medianoche que llevaba, también tenían numerosos parches y gasas que le habían colocado los curanderos después de haber sido atacada por uno de los dragones.

Ella sabía… Lo sabía.
Era suyo.

Las notas se apuraron alcanzando su punto más agudo, cual grito estridente, para ahogar el grito que la rubia estaba conteniendo mientras se mordía el labio. Había dejado de llorar hace un tiempo pero mantenía la nariz y los ojos rojos. Ahora estaba furiosa y frustrada. ¿Por qué era tan difícil entenderlo? ¿Por qué Artamir no quería hacer su yawë con ella? ¿Por qué todos los demás dragones parecían estar ansiosos pero él, siendo un dragón plateado, era tan arisco?

De pronto cogió las estúpidas partituras de Moonlight de Beethoven y las tiró al piso para tocar lo que a ella le apeteciera. No tenía mente ni concentración para escribir una canción de piano pero siempre que se dejaba llevar lograba tranquilizarse así que tocó, tocó y tocó buscando sacarse ese sentimiento de pesar del pecho.
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {03.01.21 19:10}

Un quinceañero Darren, con ondulada melena rubia y pecas salpicadas por toda la cara andaba a solas por el pasillo de la residencia Pendragon. Había conseguido, otra vez, escaparse de las pesadas y aburridas clases de protocolo. Darren las odiaba profundamente. Él prefería andar volando encima del dragón que le acompañaba, recorrer mundo, conocer gente, pasarse las noches en vela contemplando las estrellas, observando los colores del otoño de las Highlands o ver quién era capaz de tirar piedras más lejos desde los acantilados de Dover. Fuera, fuera todo lo posible de la niebla de Avalon.

Él quería ser libre. Lejos de todas esas normas. Lejos de tantos protocolos, de imagen, de regañinas y de castigos. Que se encargara su hermano mayor de aguantar al maestro, de las normas o a su padre. Para eso él era el heredero y los demás, meros secundarios. Conocía de sobra la reacción de su padre, sabía que aquello le enfurecería y le castigaría. Su abuela le reprendería por no saber estar. Pero para aguantar el sermón primero deberían encontrarlo.

De dirigía de forma sigilosa por los pasillos menos transitados del castillo al campo de cultivo de berzas. Aquel era un punto de encuentro secreto que tenía con Alwaid, su dragón dorado, cuando necesitaba escapar de las paredes frías del castillo. Para llegar hasta él debía pasar por un pasillo vacío y abrir un pequeño pasadizo que rodeaba la habitación de su hermana, bajar las escaleras por el torreón y ser libre. Estaba a punto de entrar en estrecho pasillo cuando se percató de la música envolvente que emanaba de la habitación de Shyvanna. Debía estar dándole vueltas a algo por cómo tocaba. Miró a ambos lados del pasillo y se inmiscuyó en la habitación. Alzó la vista para mirar a su hermana cuando cruzó la puerta y se dejó caer sobre las láminas de madera. Disfrutó de la música en silencio mientras se dejaba caer, relajado. Alwaild podría esperar un poco más aunque seguramente se fuera sin esperarle, no era la primera vez que le dejaba solo.
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {03.01.21 20:49}

La llegada de Darren no le interrumpió, Shyvanna marcaba un ritmo frenético con los dedos sacando notas apresuradas del piano tan turbulentas como su propio corazón. No estaba acostumbrada a ser rechazada, no estaba acostumbrada a no obtener lo que quería. Desde pequeña había resaltado por su facilidad de conexión con los dragones, había aprendido su lenguaje y a volar sobre ellos con mucha más antelación que algunos de sus hermanos.

Arrugó la nariz y finalmente emitió un gruñido de frustración antes de finalizar la melodía presionando las teclas durante un largo rato tras eso el silencio se cernió sobre ella. Se mordió el labio antes de cerrar los ojos -Me ha rechazado de nuevo- Susurró con la voz quebrada pensando el precioso vinculo que tenían Darren y Alwaid o Goth y Wthyr, iba mucho más allá de sólo cabalgarlos hacia el amanecer…Ella quería eso, lo envidiaba…Quería que alguien la quisiera y la protegiera porque así lo deseaba, no porque el vínculo de la familia pudiera ser invocado; no porque fuera lo que se esperaba de ellos.

Se mordió el labio y se llevó las manos lastimadas a la cara soltando un suspiro, no quería volver a llorar pero se encontraba sin posibilidades. Su corazón sabía a dónde pertenecía pero era imposible derrumbar los muros que había levantado Artamir. Conocía su historia y por eso…Quería darle una segunda oportunidad, deseaba hacerlo, que volviera a vivir ese vínculo con ella -Y no avanzo en mi magia…- Murmuró bajando las manos y mostrándoselas, las heridas habían sido curadas por los sanadores porque lo que ella había aprendido no era suficiente pero…Simplemente, se aburría mucho leyendo en los libros. El resto de clases prácticas eran mucho mejores, incluso hasta soportaba el bordado, pero aunque sabía que debía investigar su don la lectura le causaba estrés -La abuela me dijo que mañana tenía una clase especial con ella- Dijo con miedo en su voz, todos sabían de qué iban las clases individuales de su ascendiente.

Apartó las manos y volvió a ponerlas sobre el piano, esta vez, apoyó la cabeza en el hombro de Darren y cerró los ojos para tocar otra canción. Sólo un poco más tranquila, la simple presencia de su mellizo allí le reconfortaba. Con él podía ser absolutamente sincera.
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {06.01.21 18:52}

El rubio Pendragon avanzó en silencio por la habitación hasta alcanzar el banco del piano y sentarse al lado de su hermana melliza. Agradecía los acordes de su piano pues sanaban su mente, tranquilizaban su nervio y suavizaban su pulso. Le gustaba ver los dedos de su hermana moviéndose entre las teclas de ese instrumento y sintió un poco de envidia por no poder tener otras ocupaciones que no fuesen las impuestas por su padre. Su horario estaba lleno de clases: clases de protocolo, clases de magia de sangre, clases de magia de control del dragón, clases de esgrima y lucha con espada. Aquello le hastiaba y le hartaba. Si él era el segundo en la línea de descendencia, ¿por qué no le dejaban tranquilo y que se dedicaba a cultivar otros intereses? Observas las nubes pasar por el cielo azul, las hojas caer con el baile del viento. Pero las artes clásicas eran cosas de mujeres y las contemplativas solo estaban destinadas a ciertas personas y él no era una de ellas. “Agradecerás todo el esfuerzo que estamos volcando en ti para cuando seas un gran líder”, le recriminó su padre y su abuela en más de una ocasión.

Apoyé mi mano sobre la suya cuando se hizo el silencio en la habitación, notando la suavidad de su piel salpicada de magulladuras y arañazos. La miré con mis ojos verdes esmeralda a los suyos y le susurré levemente. -Lo siento- Busqué mi otra mano libre para colocarla por debajo de la de Shyvanna y darle calor, apretándolas levemente. Alcé la mirada levemente hacia ella, dibujando una sonrisa sincera -Estoy seguro que aprenderá a quererte como los demás. Y cuando llegue ese día descubrirá a la hermosa persona que tengo delante. Solo daos…. Un poco más de tiempo- Lo último sonó más a un ruego que a otra cosa, pues sabía que su hermana no pecaba precisamente de paciencia, quizás. Le cogió las dos manos heridas cuando se las enseñó y las ocultó debajo de las suyas, le hubiera podido encantar hacer magia de sanación como rama de la magia de sangre, pero… no. A él le estaban enseñando cómo usar aquella magia para combatir, para crear temibles armas. Sabía, aunque le daba temor, que aprendería a matar a un hombre haciéndolo estallar su corazón o hervirle la sangre hasta que pudiera hacerle sangrar por todos los orificios de su cuerpo. ¿Cómo sería aquello de sanar? Debía de ser una sensación agradable, le pareció. -Me he vuelto a escapar de la clase de protocolo- Respondí sinceramente cuando dijo que mañana tenía clase con la abuela. Él se la volvería a ver con la madre del patriarca y aquello le generaba un pavor que le enmudecía. Se mordió el labio mirando a las teclas del piano, suspirando y al poco notó á cabeza de Shyvanna sobre sus hombros, escuchando los primeros acordes de la canción. Sintió su corazón en paz. Cerró los ojos y respiró profundamente, hinchando el pecho hasta que lo soltó, casi sin pensar. -¿Y si nos fugamos? No tendríamos que volver a ver la cara de la abuela, ni los gritos de padre, ni las clases… solo ser… libres, decidir qué queremos ser, qué nos gusta. Podríamos elegir nuestro futuro. Tengo a Alwaid esperando abajo, yo te enseñaré a hablar con los dragones-
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {08.01.21 9:58}

-No es tu culpa…Soy yo- Murmuró cuando le dijo lo siento. Su tono era sosegado, quizás replanteándose hacer su yawë con otro dragón. Pero es que Artamir… Inspiró profundo mientras sentía el calor de las manos de su hermano y apretaba sus dedos con los propios. Le observó, en silencio, mientras hablaba pensando que quizás Artamir podría darse cuenta de ello. Sin embargo, lo del tiempo no le gustó y puso los ojos en blanco -Llevo dos años detrás de él- Expresó, agobiada y frunció el ceño para luego mirarlo -¿Alwaid no puede hablarle de mi? Me conoce, sabe cómo soy…- Quizás si oía de sus compañeros dragones sería distinto. Lo que no sabía es cuánto tiempo más ella podía esperar por él. Odiaba su rechazo.

Alzó la mirada, con picardía, hacia Darren cuando mencionó que se escapó de la clase de protocolo -Te vas a buscar problemas por no saber qué cuchara se utiliza para la sopa o si el vaso es para el agua- Pregunta trampa, por supuesto, pero había complicidad tanto en los ojos como en la sonrisa de su hermana. A ella también le aburrían las clases pero al menos eran un poco más prácticas que las de historia, geografía o demás deberes que sólo tenían una pila de libros sin dibujos, sin colores, sin magia en ellos… Prefería su mente, en su mente todo brillaba, todo tenía vida propia…Todo era mejor así que se escapaba ahí con frecuencia incluso estando en clases.

La melodía, mucho más tranquila, emergió. Esta vez Shyvanna no tocó nada ya compuesto simplemente miró las teclas, recordó sus sonidos y el vibrar de la música a través del instrumento y fue armando la melodía según su corazón le dictaba. Que nadie luego le pidiera las notas porque no las recordaría. Nunca lo hacía. Cada una de sus piezas era única y mágica…Y quedaban en el olvido poco después. De pronto la música paró al escuchar a su hermano soltar semejante sugerencia. Levantó un poco la cabeza y lo miró parpadeando levemente. Todo lo que pintaba hizo que su mente divagara y se fuera mucho más allá de los límites de Avalon pero entonces recordó… Recordó eso que los hacía tan diferentes -Puedes hacerlo- Mencionó con una sonrisa y le tomó el rostro entre las manos -Tú puedes hacerlo, tienes a Alwair, sabes cómo pelear y puedes defenderte si la guerra llega a rozarte… Si rastrean tu sangre para ubicarte siempre los atraeré hacia mí… - Sonrió ampliamente, el proyecto le parecía increíble y sabía que él sería feliz, le acarició levemente las mejillas.

-Sabes que yo no puedo- Tenía dos hermanas más, la insufrible de Lake y la chiquilla de Gwen. Tenía que hacer lo posible porque su papel se alargara lo suficiente para que ellas disfrutaran de esa libertad que ella había tenido. A esa altura, Shyvanna ya sabía que Wthyr tenía sus deberes…Pero ella también, al ser la primogénita…Y ya se lo habían informado. Hace dos meses. Prometida con Aric Lothbrock, heredero y futuro líder del clan  vasallo de vikingos. No estaba mal, al menos no le odiaba  -Estoy prometida, no tengo dragón y ni siquiera sé sanar bien. Me comerían viva allí afuera, lo sabes…Pero tú sí. Tú puedes… y yo te ayudaré- Darren era el segundo...Y estaba Cedric en caso de que a Wthyr le sucediera algo.
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {14.01.21 21:21}

El rubio bajó la mirada, apesadumbrado, culpable por el comentario que le había hecho a su hermana sobre el tiempo que podría haberle llevado contactar con el Artamir., no recordando que Shyvanna llevaba dos años detrás del dragón plateado. Para él había sido todo mucho más fácil, porque había estado con Alwaid desde que era un infante. No sabía si su padre lo había preparado así a propósito para que el pudiera conseguir el yawë a pronta edad y poder ostentar el poder de ser jinete desde bien pronto. Para el rubio Darren, el dragón era como un hermano, era como su segunda persona de confianza y el Alwaid entendía perfectamente a su jinete. Habían crecido juntos, se habían escapado de Avalon juntos… -Se lo diré. Para que te ayude. Pero dale más tiempo, Artamir es un dragón antiguo y no ha vuelto a tener jinete desde que muriese el único. Tiene su carácter y una herida en su alma que todavía no ha podido curar. No pretendas ser Lucía Pendragon, sino Shyvanna, usa tus encantos, no los que usaría cualquier otra que ya ha fracasado donde tú vencerás-

Apartó la mirada de Shyvanna cuando le miró con picardía, sintiendo hastío. Bufó molesto por el comentario porque no le hacía gracia, sabía que le iban a reprender por haber vuelto a faltar. Luego se agobió por lo que pudiera y se trató de colocar el pelo rubio hacia atrás con su mano, aunque el peinado no duró y el pelo recuperó su posición original -Odio Ouroboros y odio sus estúpidas normas. No quiero esa isla para nada. Ni a ella ni sus malditos descendientes. ¿Para qué me sirve saber las normas de los banquetes si no quiero celebrar ninguno con ellos?- Dejó caer los brazos, cansado, ofuscado. Odiaba esas clases, no les encontraba sentido, eran inútiles. Ouroboros estaba en la boca de todo el mundo hasta la saciedad de una forma tan cansina que la aborrecía. -¿Por qué no puedo aprender a sanar como tú? Solo me enseñan cómo utilizar la magia para dañar, para matar, pero no para curar…- Extendió su mano por encima de la pierna, entre ellos. Aquel puño había creado una pequeña daga tan solo unas horas antes, mientras entrenaba con Freyja, del linaje Lothbrock, en el patio de armas.

Tenía la mirada clavada en Shyvanna cuando la música cesó y se permitió hacerle una pequeña sonrisa cómplice, la cual le devolvió. Sin embargo… ¿por qué no hablaba de nosotros? ¿Por qué habría de traerlos hacia ella? La miró sin terminar de entender a qué se refería, y la respuesta que temía no tardó en llegar. -¿¡Cómo que no?!- Le gritó enfurecido y dolorido. Se levantó del asiento y se tuvo que retirar del piano para dirigirse hacia la cama, al otro extremo de la habitación. Se cruzó de brazos y escuchó con el gesto torcido lo que a él le parecieron escusas bastante nimias. Se volvió hacia ella, exasperado -¡Qué tontería! ¡Claro que puedes! Que le den al matrimonio, que le den a esas estúpidas normas y a padre. Que le den a A... a los Lothbrock, a Whtyr con su prepotencia. No quiero que me ayudes, quiero que vengas conmigo. Quiero que puedas ser libre. Quiero poder ser libre. Solos tú, yo y Alwaid- Al final terminó por sentarse en la cama para poder mirar a su hermana de frente, dejando caer los hombros con un gran peso -Apenas sé luchar ni manejar la magia de sangre. No sé sanar, cosa que tú sí sabes hacer. Solo necesitamos entrenamiento. Si voy solo caeré- Reconoció con un suspiro, tocándose con la yema de los dedos el brazo izquierdo.

<< FLASHBACK >>

Avalon. 20 años atrás.

El sol rozaba el atardecer cuando Hebe, de apellido Hipatia, volvía del ritual del Sanguis Ligno. Las sombras al andar la acompañaban por los pasillos y el naranja del sol acariciaba sus mejillas. Cantaba en su mente mientras caminaba en silencio los salmos del ritual, disfrutando su juventud y saludando animosamente a los guardias que se encontraba de camino. ¡Y es que aquello eran buenas noticias y ella era una de las afortunadas que podían presumir de saberlo! El grupo de sacerdotisas del árbol fueron las primeras en enterarse de la buena noticia de que su señora, Ágata Pendragon, se encontraba en cinta por quinta vez. Así pues, quisieron agradecerle al árbol la buena nueva con una ofrenda que implicaba melodías vocales que todavía se repetían en su memoria. No se había cambiado y su vestido de los rituales, de suave seda de color perla, ondeaba a cada paso que daba.

Se dirigía con la noticia a los aposentos de su hermano, el patriarca del vasallaje, cuando escuchó gritos y gruñidos que procedían de algunas de las habitaciones cercanas del ala del castillo que se abría próxima a ella. Miró a su alrededor, se cogió el vestido con ambas manos y corrió hacia la puerta de la habitación que se encontraba entreabierta. En el suelo se encontraba el dragón Alwaid, el que se le había designado al segundo hermano de sus señores, a Darren. Por cómo se encontraba en el suelo parecía herido, quizás un ala y gruñía por el dolor. A su lado, una silueta de un niño de 7 años gimoteaba que él le iba a curar. Se fijó en el rubio con detalle, a pesar de que lo tenía de espaldas, pudo comprobar con horror, cómo portaba una pequeña daga con una de las manos y con la otra se había abierto cortes profundos en todo el brazo. El charco de sangre, brillante a la luz del sol del atardecer, era de un tamaño descomunal para ser de un niño de aquella edad. Ahogó un grito y corrió a la sala de su señor.

Irrumpió en el despacho, donde Cedric Pendragon hablaba con su Consejo, formado por los vasallos más sabios de los linajes. Le gritó horrorizada la imagen y ambos salieron hacia la habitación del hermano rubio. El señor abrió la puerta de un golpe haciendo que el niño soltara el cuchillo al suelo y tratara de ponerse en pie. Hebe miró la situación desde el quicio de la puerta, enmudecida. El niño miró con profundo terror a su padre y este le cruzó la cara con un bofetón. Darren trató de no llorar -Pero papá… Alwaid se hizo daño al tratar de volar y yo…. Yo quería curarle como hace Shyvanna cuando me hago daño en las rodillas, no sé que he hecho mal… Papá… A Alwaid le duele mucho- Hebe se mordió el labio y contempló, en silencio.

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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {29.01.21 10:39}



Encantos… ¿Qué más encantos podía mostrarle al dragón? Observó a Darren en crudo silencio. ¿Acaso no entendía que no sabía qué más hacer? Tocó un par de teclas, arrastrando su mirada hacia el piano mientras pensaba. La gente no estaba acostumbrada a que ella, en su plena intensidad y obsesión, soliera abandonar su objetivo. La estrategia empezó a formarse delante de ella. No solía usarla demasiado porque implicaba un gran riesgo pero… Si aquello no funcionaba, estaba dispuesta a pasar página. Tenía 15 años…Y no tenía un dragón mientras todos los demás tenían su yawë. Ella también quería esa conexión con alguien ¿Por qué era tan difícil?

No tenía ni preguntas ni respuestas para Darren cuando habló de Ouroboros. A ella le daba curiosidad la isla, no por sus descendientes sino por la creciente obsesión de su linaje por volver a ella. ¿Qué tenía eso que no tuviera Avalon? -No se trata sólo de Ouroboros sino de lo que los vasallos esperan de nosotros- Le soltó mientras miraba las teclas y las tocaba un poco al azar, en una nota grave que fuera en concordancia con sus sentimientos. Sin embargo…Cuando el tema cambió… Shyvanna lo observó. Su mirada zafiro se clavó en la de su hermano con un gesto profundamente serio. Era un tema… Era un tema complicado. La magia de sanación no era nada para jugar, su abuela le había exigido muchísimo a Shyvanna cuando empezó a mostrar las facultades porque eran rituales bastante más dolorosos y extraños. Por no mencionar peligrosos si el sanador se traspasaba los límites -Puedo intentar enseñarte- Murmuró -Pero la abuela dice que si no naces con el “don” es muy probable que nunca lo desarrolles-

El grito de luego no se lo esperó y frunció el ceño. Se giró en el banco del piano para observarlo mientras le hablaba con aquel tono. Estaba…Estaba…En su límite. ¿Qué lo había hecho explotar esta vez? Le recorrió las facciones lentamente mientras se incorporaba y se acercaba a él. Finalmente lo rodeó con los brazos con fuerza en un silencioso abrazo. Dejó que los dedos de su mano se deslizaran por su espalda tratando de relajarlo, no le había pasado desapercibido el gesto. Cerró los ojos y se dejó la vida en aquel gesto.

If I could just go back ten years
And say you're doing fine my dear
Don't let them tell you who to be
You're enough and in time you'll see


Si sólo fueran conscientes de lo que lograrían alcanzar y, sin embargo, ver que en ese momento estaban más centrados que nunca en lo que necesitaban, en lo que querían. Si sólo supieran

-Iré-

FLASHBACK

Isla “pequeña”, infierno grande. La forma en la que Cedric había partido, el sonido de sus zancadas, generaba realmente que la isla temblara. Los murmullos fueron rápidos y Shyvanna que se encontraba bordando horriblemente en uno de los jardines con una de sus primas se incorporó con curiosidad…Porque curiosidad era lo único que vibraba en su cuerpo en ese momento.  La ruta que estaban tomando hizo que la rubia apretara el paso y, al mismo tiempo, se escondiera en cada resquicio para no ser descubierta.

Ágil avanzó entre las sombras pero cuando Hebe se quedó en la puerta del cuarto de Darren con ese gesto no pudo evitar echar a correr dentro. Alwaid estaba en el piso y Darren sangraba. La rubia miró a su padre un segundo pero no esperó por aprobación, no preguntó si quiera. Tomó la daga y se abrió una herida en la mano para usar su propia sangre y dibujar varias runas en su brazo. Para entonces, aún era nueva en aquello y…sufría. Se arrodilló al lado de Darren y colocó la mano por encima de las heridas y cerró los ojos. La calidez de su magia pronto se convirtió en dolor cuando cada una de las heridas se abría en la tierna carne del brazo Shyvanna haciendo que la manga rosa de su delicado vestido acabara empapada del líquido carmesí, absorbiendo las heridas con premura. Las lágrimas cubrieron sus mejillas pero intentó no gritar porque no quería avergonzarse delante de su padre. Se alejó de Darren cuando terminó de curarle y entonces se observó a sí misma, sus propias heridas y se concentró en parar la sangre y cerrarlas. Pero el dolor…Era mucho. La abuela le había hablado de los límites…

Volvió  dibujar una runa sobre su piel, donde no estaban las heridas, para reforzar su magia. Empezó a temblar, sintiendo el esfuerzo mágico en su cuerpo pero no se detuvo. Gruñó un poco cuando la última de las heridas se resistió pero finalmente las cerró. Lo suficiente para que la nueva piel tuviera un ligero tono rosado a diferencia de la antigua. Tendría…que ir a la enfermería luego pero estaba bien. Las había cerrado. Aún con los ojos llorosos y la nariz roja se acercó a Alwaid -Shh…- Pero Cedric no le permitió acercarse más y la tomó del brazo con más suavidad de lo que se esperaba, con Darren también hizo algo parecido pero con más brusquedad -Llévatelos- Espetó y no esperó respuesta, cerró la puerta en sus narices. Shyvanna se soltó bruscamente de la sacerdotisa y la empujó para tocar la puerta -¡Papi puedo hacerlo! ¡Déjame hacerlo! ¡Es Alwaid!- Le gritó a su padre golpeando bruscamente porque estaba cerrada con magia. Hebe intentó calmarla y Shyvanna la miró mal, lanzándole un escudo para que se fuera. Tras eso cogió a su hermano de la mano y se fue corriendo de allí.
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PASADO ~ Ella grita lo que yo callo Empty Re: PASADO ~ Ella grita lo que yo callo {}

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