Fábrica de androides

Gracias al apoyo de Thalos pude recuperarme un poco mientras la esencia de díctamo hacía su efecto, fueron unos minutos realmente cruciales para mi y mientras discutía con la invitada de Khaled aproveché para tomar dos pociones herbovitalizantes de golpe, estaban malísimas pero al menos me servirían para aguantar el tipo, por desgracia no actuaron lo suficientemente rápido como para cubrir al renegado pero la chica pelirroja fue lo suficientemente Ágil como para cubrirnos a ambos del ataque que probablemente también me habría alcanzado.

Me encontraba entre ambos una vez solucionado lo de la reina de hielo cuando empezaron a cotillear sobre Johan y claro, no es que me guste meterme en asuntos ajenos pero si no me queda más remedio -aaah! que mal por Johan, tiene una familia preciosa y yo aquí, soltero y sangrando ¿será la barba?- poco a poco me iba encontrando mejor y en poco pude caminar por mi propio pie, momento en el que pude darle el golpe final a Jed pero este atacó a Thalos que cayó malherido, aquello era el cuento de nunca acabar -Me parece que me vas a deber otra- de nuevo la esencia de díctamo cumplió con su función, jamás volvería a salir de la isla sin ella.

Vertí una dosis sobre las heridas de Thalos y mientras escocían lo recogí con ayuda de Erika para salir de aquella maldita fábrica de una vez por todas con el portal del Soul Reaper.

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Poción herbovitalizante 20 dosis + 100 ps = 120ps
Esencia de díctamo : 8/10 dosis

Había intentado buscar un sitio donde pegar unos cuantos tiros y SAM me había dicho que ni de coña, después había probado con la espada pero no era capaz de usarla correctamente. OBVIAMENTE. Yo no era ella. Más tarde había intentado pillar uno de los cazas que habían sobrevivido al traslado, los putos soldados me lo impidieron porque "SAM decía que no era prudente usar su espacio aéreo y los Capitanes tenían que dar permiso" (Léase con voz de burla y molesta)

Necesitaba hacer algo, y el puto SAM me había sugerido algún trabajo manual, bueno...la habitación me había dado puzles, pero yo le dije que necesitaba otra cosa. Al final me había traído a su fábrica hacía unas horas, ahí guardaban cosas humanas y las mejoraban, además de producir sus propias piezas.

Así que ahí estaba con el capó de un coche de mierda levantado, pringándome entera de líquidos y grasa y enroscando y desenroscando tuercas con rabia mientras maldecía. De cuando en cuando daba algún golpe a la chapa con las herramientas. En resumen, no estaba de buen humor. Estaba MUY cabreada. Tiré de un cable con rabia y gruñí algo como.-Puta mierda de todo-Y volví a agacharme dentro del motor destrozado.

Deambulaba por la torre medio perdido tras leer los informes, cuando habia visto a Carrie salir por una de las ventanas y me habia puesto a seguirla. Johan me había llamado entonces, para una fiesta de cumpleaños. Me alegraba que Arleen tuviera animo de celebrar eso después de lo ocurrido en la habitacion de Gelion pero a mi no me apetecía lo más minimo aguantar la cara alli delante de la gente...ni aparentar que me importaba más de la cuenta. Muy probablemente, acabaria agriándoles la fiesta.

La seguí por las calles, se estaba alejando más de lo que pensaba que haría en principio, y sentía curiosidad por saber donde iba. En cierto punto la perdí de vista y acabé vagabundeando cerca de la fábrica, un tanto perdido, tratando de recordar si habia pasado por alli anteriormente durante mi fuga en la Ciudadela hacía ya más de un año...cuando S.A.M pretendia sacarnos replicas y matarnos despues. Cómo cambiaban las cosas. Gelion me había traido aqui él mismo, en calidad de prisionero. Ahora observaba con los ojos bicolor cómo habia evolucionado la zona de las fabricas. Había más...bullicio. Los androides parecían ir más a su aire. No se paraban a mirar raro a cualquier humano que pasara.

Finalmente di con una cabellera rojiza, estaba metida hasta los codos en el capo de un coche. Ah...mi coche, aquel tan bonito, había quedado en Londres. Me acerqué, viendo como maltrataba a aquella máquina. Fruto de su frustración y enfado, supuse.

- Que intentas hacerle? Romperlo, o arreglarlo?

Resoplé dentro del capó al escucharle y se podía ver que mi cuerpo se aflojaba deshinchándose. Me incorporé y apoyé las manos en el borde abierto de la chapa donde se suponía que delante tenía el motor. Las manos pringadas hasta los codos de mierda.

-Nunca he sido de arreglar cosas.-Contesté mirándole con seriedad. ¿Qué hacía allí? Miré alrededor. Ahí no había humanos ni magos a parte de nosotros. Entorné los ojos y me aparté buscando un trapo cercano, empezando a frotar mis manos. Había a venido a asegurarse de que no estaba jodiendo más el cuerpo de ella, seguro.-No necesito una niñera.-Comenté con molestia antes de meter la mano en la chaqueta que había dejado en un taburete y saqué como 5 tarros de pastillas para dejarlos sobre la mesa de herramientas.-No voy a matarla si eso es lo que te preocupa y todo esto...-Presenté con la mano los botes sonriendo falsamente.-Es lo que me han dado para traer de vuelta a tu Erika.

Volví cerca del coche.-Y sí, me las estoy tomando. Y no, no ha vuelto todavía.-Me eché el trapo al hombro apoyando una mano de nuevo en el coche e hice un aspaviento con la mano.-Así que puedes quedarte tranquilo y hacer tus movidas de Capitán.

Vi lo que hizo y esbocé una mueca por el destrozo que habia llevado a cabo ahi dentro. Pero no habia venido a enseñarle de mecánica a Carrie, ni a Erika.

- No vengo a hacer de niñera. - repliqué molesto. Por qué pensaba que eso era lo que venia a hacer? Pero siguió hablando modo metralleta, sacando un monton de tarros de pastillas que me hicieron alzar las cejas.

"está tratandose eso?"

Sonrisa falsa incluida, me despachó rapidamente, terminando por mandarme a la mierda más rapido de lo que yo habia calculado que lo haría. Yo no me habia movido del lado del coche en el tiempo que duró su exposición de motivos, y parecía algo descolocado y ofendido.

- Deja de tratarme tan mal. - terminé por soltarle cruzado de brazos. - O voy a acabar enamorándome de ti también.

Apoyé una mano en mi cadera mientras seguía cargando mi peso con la otra mano sobre el coche y fruncí el ceño negando.-No te trato mal.-Es más, creía que estaba siendo bastante correcta a decir verdad. Después simplemente arqueé una ceja al escuchar aquello.

Intenté mantenerme seria pero toda mi postura se fue a la mierda cuando se me escapó una risa y me llevé la mano a la boca tratando de pararla (seguramente pringándome por ahí), la risa continuó, fresca y sincera, tan irresistible que incluso me llevé una mano al abdomen que se resentía. La recuperación de la operación había sido bastante buena pero aún molestaba un poco. Me llevé la otra mano al extremo del ojo para limpiar alguna lagrimilla y negué.-Serás rarito.-Murmuré entre risas negando de nuevo mientras poco a poco iba bajando la intensidad de la carcajada aquella.

Me agaché para colocar de nuevo mi parte superior en lo que era el motor y trasteé con algo.-¿Para qué has venido entonces? -Pregunté desenroscando un tapón mientras giraba la cabeza hacia él para mirarle desde mi posición.-¿O simplemente lo niegas porque te jode que tenga razón?-Sonreí de medio lado y volví a mirar el tapón.

No sabía muy bien por qué había dicho eso, quizá un poco a modo de broma, quizá para molestarla, quizá no, pero la dejé paralizada unos segundos y luego se rio a carcajada limpia en mi cara. Pero se rio con gusto y sinceridad, y eso...eso lo disfruté. Disfruté la escena. Llevaba demasiado tiempo sin ver esas facciones contraerse por la risa sincera y despreocupada. En cualquier caso, el chascarrillo mereció la pena.

- ¿qué? no me crees? Tú sigue portándote así de harpía y verás. Eso es el depósito del líquido limpiaparabrisas, pon la rosca en su sitio si no quieres que se llene de mierda. - apunté al ver lo que estaba haciendo. Luego puse los ojos en blanco con una mueca por sus ultimas palabras, cruzado de brazos todavia.

- No me preocupa eso. Venia a preguntarte como estabas. He leido tu informe...hasta entonces no sabía el alcance de tus heridas. - no quise andarme con rodeos. -Te he visto golpear guardias y puertas por igual, y arrojar espadas al suelo. Ahora golpeas coches.

"no te culpo, este sitio saca de quicio a cualquiera..."

-oh vamos...sabes me estoy portando bien.-Murmuré haciendo fuerza para terminar de desenroscar la tapa esa. -Te he mandado a la mierda muy correctamente.-Soplé el tapón lleno de porquería y le miré alzando ambas cejas por su explicación sobre el coche. En respuesta tiré el tapón a mi espalda por encima de mi hombro con la mueca de una sonrisa en mi cara.

Me incorporé de nuevo para ir a la mesa de herramientas y coger cualquier cosa parecida a una llave inglesa.-¿En serio crees que pretendo arreglar este trasto?-Me acerqué dando un par de golpecitos con la llave en el coche. Entorné los ojos y volví a agacharme, enganchando la llave en cualquier tuerca. Sonreí de medio lado negando.-Eso cuenta como hacer de niñera.-Solté haciendo fuerza con la herramienta después frunciendo mi ceño. Suspiré incorporándome una vez más.-Puedo seguir con tu cara si quieres.-Solté y luego alcé ambas manos como pidiendo tiempo.-Siempre que no te enamores de mi. -Dije burlona.

Apreté mis labios mirando hacia el motor de mierda y encogí un hombro.-Me quedaba sin cosas permitidas por SAM para descargar mi frustración así que era esto o follarme al primero que me cruzase y cruzar los dedos para que lo hiciese bien. Así que...-Mostré el coche de mierda con la mano y una mueca de cierto disgusto.-Prefería ahorrarme el sermón de que no estaba tratando bien el cuerpo de tu amorcito. Oh...claro...-Sonreí de medio lado pero expresión de disgusto, es decir, era la reina de la ironía, mientras tiraba de la camiseta hacia arriba para mostrar una cicatriz con bastante buen aspecto.-También querrás comprobar esto. Seguro que estará encantada cuando vuelta, descuida.-Tiré hacia abajo y volví a meterme de lleno en el coche, haciendo fuerza con la llave.-¿Algo más?

- Luego no digas que no te he avisado.

Y ahi iba el tapon. No, estaba claro que no pretendia arreglar nada, solo pasar tiempo destrozando algo.

- Te diría que hay maneras mas productivas de echar el rato pero mentiría. - yo mismo tenia problemas en averiguar como ocupar el tiempo. Y no, ir a una maldita fiesta de cumpleaños no era.... - No prometo nada, me gustan agresivas. - pasé una mano por mi mandibula que raspaba por una falta de afeitado, cuando amenazó con seguir con mi cara a menos que me enamorase.

Lo de follarse al primero que pillase me pilló un poco desprevenido asi de primeras y me provocó celos. Pero eh, no había nada entre nosotros. Ni si quiera si se tratara de Erika tendría derecho para exigirle nada.

"bueno, ya sabes que yo lo hago bien"

Pero me mordí la lengua antes de decir nada.

- Johan me ha llamado antes porque estan haciendo un cumpleaños en la cantina de Chalmun. Por qué no te unes a ellos? Yo no voy a ir. - le dejé claro por si eso era un problema para ella. - Tendrán cerveza.

Me enseñó la cicatriz. Parecia en buen estado y ella no parecia afectada. Pero se le daba bien ocultar ese tipo de cosas. Carrie era una buena mentirosa.
- Es tu cuerpo, Carrie. Tú eliges. Sin Carrie no hay Erika, y sin Erika no hay Carrie. Cuando antes entiendas eso mejor para ti.

"Si, seguro que está encantada. Ya no tendrá por qué tener miedo de que vuelva a tocarla"

- Es todo, te dejo sola, chica grande.

Le eché un ultimo vistazo, guardé las manos en los bolsillos y sonreí un poco. Luego me di la vuelta para salir de aquel odioso lugar, aunque quizá volviera en algun momento dado que... eso de arreglar coches no sonaba tan mal. O motos. Era eso o ponerme a montar bombas por ahi.

Suspiré hondamente cruzando ambos brazos.-Esta ciudad es un poco mierda , sí- Alcé ambas cejas por la confesión y sonreí de medio lado.-Créemelo sé.-Lo sabía porque bueno había estado a veces en esos momentos, aunque fuera solo desde el fondo, e incluso había llegado a tomar el control por un momento en alguna ocasión.

Mis ojos se entornaron por lo del cumpleaños.-Ya estaba invitada pero nunca me han ido los cumpleaños, ni las fiestas...supongo que no querían gente muy sociable cuando se inventaron una vida para mi en el ejército.-Expliqué y tras encoger los hombros volví al coche continuando con el trabajo.-La cerveza suena bien pero tengo en la habitación.

Escuché aquello y fruncí el ceño algo confusa, que yo tenía que entenderlo decía. YO. -Aplícate el cuento gilipollas.-Murmuré dentro del capó y cuando se despidió me incorporé mirándole con mala leche. -¿Ves como  tenía razón?-Bajé el capó de golpe- Has venido a hacer de niñera, comprobar que todo estuviese bien y ahora te largas a enrollarte con tu cita.-Terminé la comparación y observé mientras se iba. No me había hablado mal, ni amenazado, ni siquiera parecía enfadado e incluso había bromeado. Eso era inquietantemente extraño.

-Ey! -Gruñí antes de lanzarle la puta llave inglesa que pasó volando por su lado. Me apoyé en el capó con la mano y señalé otro coche cercano.-¿No te apetece ayudarme a destrozar aquel otro?

"Lo mismo voy a su habitacion y le birlo la cerveza"

- Qué cita ni que mierdas? Qué dices? - farfullé cuando ya me estaba dando la vuelta. Si era ella la que iba buscando un polvete! Me detuve cuando la llave inglesa pasó peligrosamente cerca de mi oreja y me di la vuelta para mirarla seriamente.

- En serio? - miré el coche. - No.

No quería destrozarlo. O bueno, sí. No lo sabía. La verdad si me apetecía romper cosas. Pero los coches....nah, si me hacia con algo, era con una moto. Que le follen al coche, yo solo queria el que tenia en Londres. Además, me habia invitado a quedarme?

Miré el coche, era chatarra para desguace practicamente. A ver, tenia salvacion pero...

- Aunque pensándolo mejor... - me di la vuelta y de camino, elegí un mazo de la mesa de herramientas. Me lo pensé durante tres segundos antes de cargar el movimiento y estamparlo contra los faros delanteros y la chapa del morro.

Sí, la verdad es que sentaba bien.

Rechazó mi oferta. Fruncí más el ceño. El puto desagradecido... Así que era verdad, sólo había venido a comprobar que no estuviese haciendo una locura con el cuerpo de Erika. Encogí un hombro.-Pues que te den.-Mascullé antes de darme la vuelta para ir hacia el otro coche.

Y de pronto estaba ahí con el mazo. Crucé mis brazos y arqueé las cejas por el impacto en los faros, asentí con cierta aprobación y cogí de la mesa una llave más grande o lo que fuera eso. Me acerqué por el lado de la ventanilla y como si fuera un bate dando a una pelota la destrocé.-¿Mejor?-Pregunté bordeando el coche pasando por detrás de Thalos para ir a la otra ventanilla.-¿En serio no has pillado lo de la niñera? Como en las películas...ya sabes, cuando comprueba que el niño está bien y se marcha al salón con el novio.-Expliqué como si fuese un poco cortito y destrocé la otra ventanilla. Tiré la llave al suelo y me enzarcé con el retrovisor intentando arrancarlo con mis propias manos.

Miré el pequeño destrozo causado y despues escuché el porrazo de Carrie contra el coche. Con el ceño fruncido y la mandibula algo apretada, gruñí la respuesta.

- Sí. - pero no suficiente. Habia algo maravilloso en destrozar cosas a golpes. Asi que no me quedé ahi y continué, rompiendo el otro faro, la entrada de ventilacion del morro, los componentes del motor o lo que quedaba de él...

- O sea que era una referencia? Como...Solo en Casa?

"ahi no hay niñeras"

- No he visto muchas de ese género. - y ahora la tomé con una puerta, golpeandola con ganas hasta doblarla. En un momento dado, usé las manos como ella, para arrancarla cuando estaba medio desprendida. Pareciamos un par de lunáticos. Un par de androides de mantenimiento que estaban alli se acercaron y se nos quedaron mirando aparentemente algo desubicados.

Empujé con todo mi cuerpo acabando por desencajar el retrovisor que quedó colgando mientras él seguía dando porrazos con la maza en el morro.-Ajá-Asentí caminando hacia la mesa de nuevo , a una columna cercana.

Desabroché la sudadera que llevaba encima para dejarla junto a la chaqueta del taburete a la par que negaba.-No.-Cogí una barra de metal apoyada sobre la columna y pasé a su lado.-Esa va de un niño que mete una paliza a unos ladrones.-Seguí mi camino a la parte trasera y golpeé con fuerza esos faros. Tras eso miré a los androides desubicados con el ceño fruncido.-Tenemos permiso de vuestro jefe, así que dejaos de miraditas. -Les hice un gesto con la cabeza para que se largaran-¿Aquí no tenéis música o qué? MÚSICA!-Grité en alto, esperando que pasase como en la habitación y empezó a sonar algo a todo volumen, algo bastante acorde.

Me apoyé en el capó para subirme a la parte trasera y continué con la barra, el cristal trasero estalló en cachitos.-Hablo de las que luego llega un psicópata y mata al novio de la niñera.-Continué antes de otro golpe. Pasé al techo golpeando unas cuantas veces más y finalmente bajé pegando un pequeño salto para quedar a su lado algo exhausta , soltando la barra al suelo que tintineó.-¿Aún tienes ganas de destrozar más cosas?-

Cuando arranqué la puerta la tiré por ahi, y pasé a seleccionar una herramienta nueva, un destornillador. Lo miré, me trajo recuerdos. Recuerdos malos.

Lo clavé con saña en uno de los neumáticos, reventándolo a la segunda puñalada. Se empezaría a desinflar tras eso. Con la musica por lo menos ya no se oian tanto los llamativos porrazos que estabamos dando y mucho menos los gruñidos de esfuerzo. Mejor. Ahora en lugar de lunaticos pareciamos de una banda de grunge, destrozando cosas.

- O sea que se carga a mi ligue siendo yo la niñera. No tiene sentido. - arrugué la nariz pasando el antebrazo por la frente para limpiarme un poco el sudor que habia roto con la intensa y repentina actividad destructora.

- Podría cargarme el taller entero y aun necesitaría mas. - dije sinceramente, haciendo luego un gesto con ambas manos y una mueca con los labios, en un claro "booom". Solté el destornillador junto a ese gesto, viendola bajar del coche. - Pero también tengo hambre. - empezaba a ser consciente. Obviamente y como la gran mayoria de los exiliados de Londres, llevaba unos horarios de mierda y no recordaba cuando habia comido la ultima vez. - Paso de ir a la torre. Buscaré algo por las calles. Te unes?

-A ti te perseguirá durante toda la película hasta que acabes matándole.-Terminé de explicar entre golpe y golpe, antes de dar por finalizada la masacre del coche.

Mis cejas se alzaron cuando pillé lo de explotar cosas. Le miré de arriba a abajo y sonreí de medio lado.-Me refería a otro tipo de cosas.-Comenté sin cortarme y luego me aparté estirando mis brazos hacia arriba, los músculos de la espalda se sentían bien.-Pero puedes preguntarle a SAM si tiene algún lugar en el que puedas explotar cosas.-

Guardé los botes de pastillas en la chaqueta y tras coger la otra sudadera le miré y señalé alrededor arqueando una ceja.-¿Te da pinta de que en este sitio tienen comida para humanos por la calle?-Me acerqué de nuevo.-Tendremos que ir a nuestro gueto particular de humanos si quieres algo más que aceite o electricidad.

- qué otro tipo de cosas? - estábamos hablando de destrozar, no? No entendí esa sonrisa de medio lado.

- ah, si. Otra cosa que me revienta. Tener que ir pidiendo permiso para todo. - pero ahora mismo éramos refugiados....cobayas en observación...dios, de verdad odiaba esta situación. - a pesar de que todo es mucho más cómodo. - en cuanto a necesidades básicas cubiertas, no podíamos quejarnos.

Asentí emitiendo un breve sonido irónico similar a una risa cuando habló de volver al getto, había pensado lo mismo que yo.

- vamos...y nos llevamos la comida fuera de la torre. A darles envidia a esos androides - añadí con un poco de maldad.

Le hice un gesto para que me acompañara fuera. Había hablado en plural asi que supuse que me acompañaría.

Alcé ambas cejas cuando preguntó observando sus ojos tratando de descifrar si realmente no lo había pillado o se estaba haciendo el tonto. Destrozar mi cuerpo contra ese coche, estuve a punto de decir pero simplemente sonreí y negué. -Nada que no se pueda hacer más tarde.-Concluí apartándome. Tal vez fuese el caos hormonal o los miles de pastillas que tenía dentro pero ya me habían advertido que no era prudente confundir a los allegados de Erika ni a mi misma.

-No se diferencia mucho de la base.-Respondí mientras recogía mis cosas y cuando llegué a su lado de nuevo encogí un hombro como respuesta. Parecía un ok.-Tendré que limpiarme antes toda la grasa de las manos.-Murmuré mientras abandonábamos los coches destrozados y la fábrica.