Godafoss - Islandia

Recordó parte de la conversación de había tenido con Jo respecto a lo que quería Johan y…era tan raro el concepto que prefirió no seguir con el tema, aunque le quedó la duda de si era feliz porque eso de “haber asumido cosas” y la reticencia, o la forma, de responder el día que habían salido junto a Thalos al bar…

Sin embargo, cuando el tema rondó sobre Gelion y Johan le soltó que era una perra en celo Arleen abrió los ojos desmesuradamente y se coloreó de una forma abrupta, como aquella persona que no toma sol y de pronto se expone a mediodía quedando como un camarón.  No obstante, pese a corregir, las palabras fueron tan violentas que la dejaron sin palabras. La pregunta la hizo fruncir el ceño porque es que… Sexual. No podía evitar tensar los labios mientras las memorias de su última situación desbordaban su mente. Tenía que estar mal, tenía que tener algo fallado en la cabeza. Aquella certeza hizo que su rubor se redujera paulatinamente. ¿Cómo podía siquiera pensar en algo así después de lo que le habían hecho? Los recuerdos siguieron sofocándola y de sólo recordar los olores, el tacto y las sensaciones se mareó un poco y las náuseas hicieron aparición. Si hubiese comido algo lo habría devuelto ya…

La voz de Johan la sacó un poco de aquel escena y su  sugerencia de subir algo a sus redes le hizo hacer un gesto negativo. No quería nada más de su vida en internet. Era suficiente lo que había. Era más que suficiente. Respiró profundo y dejó escapar el aire en un largo suspiro.  Dudaba que Gelion la buscara. No tenía ninguna razón para hacerlo.

Le sonrió muy brevemente a Johan cuando le puso la mano en el hombro y habló de las expectativas. Vaya si lo sabía ella…Ese era su problema, siempre tenía expectativas altas de todo y acababa profundamente decepcionada. El repentino “secuestro” de Johan la pilló tan desprevenida como su violenta descripción pero se dejó llevar…

Lo primero que escuchó fue el agua y cuando su vista realmente tomó la imagen que le ofrecían, habló -Oh... por Merlín- Parpadeó sorprendida, el paisaje le robó las primeras palabras desde que Johan la había violentado vocalmente. Se quedó engarzada en su brazo como necesitando un momento antes de sostenerse por sí misma... simplemente mirando en silencio, queriendo absorber toda la belleza que aquel paisaje representaba mientras intentaba adivinar dónde se encontraban.

El lugar en el que abrió el portal resultó ser un tanto más frío que Inglaterra, pero el paisaje lo compensaba con creces. Soltó el brazo de Arleen en cuanto cerró el portal a sus espaldas, deteniéndose unos segundos a contemplar las maravillas de la naturaleza en estado salvaje. Respiró hondo como si quisiese absorber todo el aire puro que pudiese, soltándolo después de manera relajada.

- ¿Qué te parece? lo he visitado un par de veces por mi cuenta. Y como te prometí viajar a algún sitio...aquí está. ¿Habías estado tan al norte alguna vez? - allí estaban completamente solos por el momento, al menos hasta que invitasen a alguien más.

- Si decidimos traer aquí a algunos refugiados habrá que ir a las zonas de ciudad. Todo dependerá de hacia dónde se dirija el velo ese. - pero eso no había manera de saberlo, a no ser que Thalos tuviese más información que él. Le hizo una invitación para pasear por la zona, aunque indicándole que tuviese cuidado para ver por dónde pisaba. La verdad es que no iba vestida como para hacer una ruta larga.

- Podría avisar a Yaroslav para que tuvieras la cita aquí...- dejó caer mirándola de reojo para ver qué le parecía, aunque en ese lugar iba a ser difícil quedarse cerca para cotillear. - A no ser que hoy no tengas muchas ganas con todo el lío.

Cuando Johan se alejó se abrazó a sí misma, encantada de lo que estaba mirando. Le gustaría tener las habilidades de Giordano para poder capturar la belleza de aquel paisaje y quizás, si tuviera una casa, colgarlo en medio del salón -No- Le respondió a Johan -Solamente fuimos a Escocia algunas veces cuando estaba pequeña, con unos familiares nobles de mi padre- Explicó y luego se giró hacia él -Gracias…Es muy hermoso- Dijo antes de volver a girarse para contemplarlo en silencio. ¿Sería capaz de recrear algo así? Intentó grabarse los sonidos, el aroma, la calidez del sol… todo en sólo aquellos minutos para intentar hacer algo parecido cuando tuviera la oportunidad.

La magia se rompió poco después cuando los asuntos acuciantes que les incumbían hicieron su entrada estelar. Arleen tardó un poco en apartar la mirada del sitio antes de ver a Johan -Es una buena idea. ¿Quieres que vayamos a verlos? Quizás es buena idea explicar la situación y llegar a un acuerdo con las autoridades- Que Jo no dijera que no había aprendido de su equivocación respecto al hospital. Empezó a caminar con cuidado arrastrando su baúl, concentrándose en las partes más planas del terreno.

La mención de Yaroslav y la cita la hizo morderse el labio inferior. Aún tenía reciente los recuerdos que Eámon y sus esbirros habían grabado a fuego en su mente -¿Él sabe? ¿lo que sucedió?- Inquirió manteniendo la mirada baja, aparentando concentración en el terreno. La cita con él, que por cierto el nombre le sonaba, era diferente a las demás porque… Porque ella era distinta. Suspiró quedamente -Mejor hoy no, Johan… Estoy un poco nerviosa aún, mejor me enfoco en temas laborales o… lo que sea que estemos haciendo-

Con lo de "buena familia" que era Arleen le extrañó que no hubiese viajado más con sus padres y hermanos durante su infancia, aunque supuso que la gente de Ouroboros no sería mucho de salir por ahí. La dejó disfrutar del paisaje un poco más antes de ponerse a con otros temas, como lo de ir a hacer inspección del lugar. - De acuerdo. Aunque dudo que haya autoridades por aquí. Diría que las cosas no han vuelto a la normalidad casi en ningún sitio. Es como en Londres...demasiados grupos intentando hacerse con el poder. En realidad ninguno puede decir que sea legítimo. - le jodía internamente que su intento de hacerse pasar por el reyezuelo ese no hubiese llegado a buen puerto, y que aparentemente no hubiese manera de formar un gobierno que no fuese un caos.

Se distrajo brevemente con eso hasta que ella le respondió sobre lo de Yaroslav, dudando unos segundos sobre lo que ella quería saber. - Mm...creo que no. No ha estado al tanto de nada de eso, ni lo ha hablado conmigo. - la miró con cautela como tanteando el terreno, suponiendo que prefería que el otro no supiese nada. Seguramente estaba más cómoda así. - Pues vale, ya lo aviso otro día. Sin prisa. - le hizo gracia eso de temas laborales, aunque en realidad era un poco eso y un poco de "turismo", si es que se podía llamar así.

- Pronto anochecerá, así que podemos ir a la caza de una aurora boreal. ¿Quieres ir a robar más ropa o llevas suficiente?

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¿Encuentran gente al pie de la cascada? éxito/fallo

si encuentran, nivel de hostilidad del 1 al 10

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No había considerado que el mundo estuviera tan complicado como Londres y no pudo evitar que su rostro le mostrara la decepción profunda que le daba aquel panorama. A veces, cuando se ponía en modo dramático, pensaba que se sentía mucho más viva que cuando creía tener los días contados. Ahora su vida era simplemente una eterna etapa de supervivencia.

Apartó la mirada en silencio y fue caminando con cuidado sabiendo que aquellos pensamientos no eran muy positivos ni buenos para ella -Me sentí  muy defraudada cuando supe que tu concepto de felicidad era abstracto- Le confesó mientras miraba el piso tratando de no perder el equilibrio. Hacía referencia a la conversación que habían tenido aquel día previa a la pelea con Thalos -Pero ahora lo entiendo- Es que en el mundo en el que vivían no había forma de ser feliz. Sólo tenías que apreciar los mínimos momentos en los que parecía que todo iba bien.

Inspiró profundamente y dejó escapar el aire sonoramente -Vale- Igual se enteraría. Seguro. Empezaron a descender observando un pueblo no muy lejano en el que parecía haber vida. Johan planteó su pregunta  y Arleen miró al cielo con curiosidad. Sinceramente, no estaba muy por la labor de “cazar”, es más, ni siquiera sabía a qué se refería exactamente. Pero si era ejercicio físico quizás la sacaba de su atasco mental -Tengo mis botas de misión, tienen un tacón más bajo y estable- Anunció forzando una sonrisa -Es buena idea… seguro son más bonitas en persona-

Al llegar finalmente abajo la formación que les dio la bienvenida era de todo menos alegre y acogedora. La piel de Arleen se erizó por completo cuando un pequeño estremecimiento de miedo le recorrió de pies a cabeza. Logró ubicar un arma mientras empezaban a hablar en un idioma que ella no conocía. Se acercó un poco a Johan, lo justo para estar a la mano en caso de tener que escapar -Hola- Saludó mostrando su mejor sonrisa y sacudiendo suavemente la mano que no le picaba -Venim…-

Frunció el ceño cuando escuchó su móvil y lo sacó del bolso de mano para ver la llamada. El hospital de nuevo. ¿Qué habría pasado? ¿La Pendragon, quizás? -Tengo que atender- Le dijo a Johan y se alejó un poco para hablar por teléfono, recibiendo el reporte. Se giró hacia él con cara de circunstancias justo antes de recibir un SOBERANO PESCADO en la cara que le robó un gemido ahogado. Ese fue el primero pero de pronto les llovieron pescados como si se tratara de una tormenta oceánica extraña y Arleen gritó histérica hasta alcanzar a Johan que les abrió un portal hacia el hospital para salir de ahí.