Entrada al servidor (subterráneo). Zonas 1, 2, 3, 4, 5

Miré de reojo a unas personas cortarse intencionalmente y marcarse con sangre entre ellos en una especie de siniestro ritual, así que aparté la mirada rápidamente. Hasta ahora, nadie parecía haber notado mi presencia, o tal vez me habían visto pero no dijeron nada al respecto.

Nos alertaron sobre un gas pero avanzar era lo único que podíamos hacer, así que contuve la respiración, me tapé la nariz y la boca con el interior del codo y fuí junto al grupo. Avancé corriendo por el pasillo doblando en la esquina para detenerme en la sala donde estaban todos reunidos y en la que había una bifurcación de pasillos. Allí ya no había tanto humo, así que supuse que ya no tenía porqué taparme. Tosí dejando escuchar la flema que tenía y sorbiendo los mocos para que vuelvan a su lugar en mi nariz evitando que se caigan.

Miré los caminos, uno iba hacia adelante (izquierda) y el otro hacia la derecha (arriba), corrí hacia el de adelante mirándolo todo maravillado por la tecnología que había allí, quería ver lo que aquel lugar tenía para mi y no podía esperar. Allí encendí el sable de luz azul y lo utilicé para alumbrar y ver lo que había en el lugar saliendo de la sala circular y dejándola atrás de forma definitiva.

COLLINS CORRE HACIA LA IZQUIERDA EN EL MAPA Y SALE DE LA SALA 5

Cuando cayó la puerta mucha gente empezó a moverse, una peliblanca que parecía cagarse en todo el mundo, apagó el gas y eso le dio algo de tranquilidad a Amaya porque no sabía por cuánto más podía aguantar la respiración. Se incorporó y cuando lo hizo de pronto Bellatrix se giró hacia ellos con los ojos negros, aquello la sorprendió más aún cuando los portales se abrieron  y parecían querer tragarse a los guardias. La General clavó su escudo en el piso con fuerza para no resbalarse y maldijo con fuerza.  Los guardias se resbalaron pero ninguno llegó  a colarse porque la bruja pareció volver en su cuerpo.

Tenía que hablar con Sayid.

Después de eso una pelirroja se puso a hacer algo con el aire ayudandolos a respirar, pero antes de movilizarse Amaya necesitaba reagruparse -Kyllian ¿Cómo estás?- Preguntó en voz y luego dio una orden mental al pelotón para organizarse, ver las heridas y recontar unidades. Incluía a Matvey así que le miró haciendole un gesto para que se uniera. Sin embargo, pronto Dorian dio la mala noticia. Habían dos Guardias que al quitarles el casco estaban llenos de llagas y sin pulso alguno. Amaya dejó caer los párpados apenas un segundo -Realiza el protocolo- Ordenó la General y el resto de los guardias, excepto dos que flanqueaban a Bella, se pusieron a mover los cuerpos.

La bruja se desmayó y Amaya se acercó a ella con un gesto de mala hostia -Habéis amenazado la vida de mis guardias. Que no vuelva a ocurrir- le dijo seriamente porque Amaya era una persona que aunque solía respetar a los Descendientes, también se trataba de que ganaran su respeto. Y Bella, por muy elegante y etérea, no lo tenía -Necesito que abráis un portal hacia la zona de urgencias del hospital y se transporten a nuestros compañeros. Sus cuerpos descansaran en Ouroboros-

Tras eso la escuchó hablar de lo que había por el pasillo de adelante y Amaya asintió. Dirigió un pensamiento a Matvey.  "Tenemos que dividirnos y no podéis seguir en el grupo de Arleen. O esperáis al grupo de Vishous u os toca con los otros". Sabía que no era necesario decir lo de los Pendragon, entonces se incorporó y miró por el pasillo con cierta reticencia. Respiró profundamente. Dos de los guardias, los que custodiaban a Bella, se encargarían de llevar a sus compañeros al hospital y volver.  

Se acercó a Sayid y le sonrió a Arleen, estaba bien, dentro de todo. Delante de ella se cogió una poción reabastecedora y se la bebió-Escuchen. Voy  a ir por ese pasillo con el resto del pelotón, hay dos bajas- Le informó a Sayid con una mirada seria y apretó las muelas -Dejo a dos guardias con Bella para que envien los cuerpos a Ouroboros.  Tenemos que dividirnos - Musitó la General y señaló el pasillo que había indicado la vidente. Reunió  a los seis guardias y le dio la orden a Kyllian para que viniera con ella, tras ello avanzaron por el pasillo con ella en la cabeza.

Tiro defensa para PNJS (por ronda pasada)

Son 10 PNJS x 20 de defensa mágica:  200 de defensa mágica.
Son 10 PNJs x 150 PS C/U: 1.500PS.

Daño:  40 PS de Daño x 10 pnjs: 400 de Daño - 200 (defensa) = 200 de Daño  - 1500: 1300PS (dos guardias muertos)

8 PNJS de ahora en adelante. (dos con Bella)

Amaya PS : 129 + 5 PS: 134PS (poción reabastecedora)
9 Dosis restantes.

El miembro 'Amaya Hua' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

---

'Defensa Mágica' :

Le sonrió a Wthyr cuando hizo lo mismo que ella y ante la alerta, Shyvanna utilizó su casaca como su hermano mayor y se protegió del gas. De pronto se fijo en una figura que le miraba, un tipo algo pálido, la rubia se llevó el dedo a los labios chupándose la herida en un gesto cuanto menos erótico antes de guiñarle un ojo.  Al escuchar lo de Reiv, la rubia se rió brevemente -Haberlo avisado antes, le habría ofrecido un poco- Indicó risueña.  Como era de esperar, todo el mundo hizo su trabajo a servicio de los Pendragon para abrirles paso.

Lasaña pasó a través de ellos hacia el feral de pelo negro del que se había quedado con ganas en el parlamento. Bajó el brazo de Darren para avanzar con una nueva presa a la vista -Bien hecho- Felicitó a la dragona sonriendole con gracia y acomodandole el pelo, luego se puso de rodillas y le acarició el rostro como si lo conociera de toda la vida, después de eso lo atrajo hacia sus pechos para estrujarlo después de que llegaran Reiv y Juliet- Mirar que haber inhalado eso...Pobrecito mío- Murmuró mirando a Juliet cuando pedía espacio -Por supuesto- Ayudó exageradamente a Kyllian para que se incorporara con una sonrisita. Luego le dio un toque en la nariz - Me debes un baile- Ignoró el llamado de sanadores del otro lado.

Después de eso observó el despliegue de magia de Juliet y no dudó en ir abrazarla -Muy bien hecho- Le reconoció y al oír eso de dividir suspiró asintiendo porque, a fin de cuentas, ellos ejecutarían todo de mejor manera. Estaba segura. Miró hacia donde se movían los guardias de Ouroboros y luego el chiquillo que no conocía. Por procurar que no hubiese problemas  -Vamos por aquí, cubriremos más terreno con personal eficaz- Le indicó a Juliet y luego a sus hermanos, los Guardias Pendragon los escoltaron y Shyvanna empezó a caminar  con su sensual balanceo de caderas hacia aquel lado segura de que sus guardias le protegerían. Incluso de aquel vampiro que ahora no veía -Juliet, Lasaña- Llamó para que la siguieran pues sus hermanos ya la escoltaban, haciendo que gran parte del grupo se fuera por el pasillo indicado.

En cuanto se recibió el mensaje por el Palantir  informando de que era el momento adecuado para la llegada del siguiente equipo, la gente comenzó a prepararse.

Miré con desdén a los magos congregados en aquel desdichado intento de homenaje, cualquier cosa con tal de alimentar sus frágiles egos. Intercambié una mirada con Zaphira para procurar distraerme de las ganas de putearlos, asi en general.  Dos grupos habian partido antes que nosotros, y la expectativa en los que quedaron reunidos en la plaza no era poca.

Decian que avanzasemos rapido, pero  nos habian proporcionado imagenes de donde se encontraban ahora. Por ende, solo tuve que cambiar ligeramente algunos aspectos del hechizo de activación del portal para alterar un poco la ubicación en la cual se abriría la otra parte.... Con la piedra de los tres mundos fue extremadamente sencillo.

Atravesé el portal al abrirlo, esperando que los demás siguieran. Puse mi pie sobre la sala 5 y me hice a un lado, manteniendo el portal abierto hasta que cruzase el ultimo asignado a este...grupo.  

Observé la situación: algunos marchaban por las bifurcaciones y otros presentaban heridas y evidentes problemas respiratorios. Localicé a Adramelech y Lyosha y entrecerré mis ojos en su dirección. Cuando terminó de pasar la gente, cerré el portal.

Me aproximé a mi hermana y a Adramelech, con tranquilidad.
- Supongo que aun no han dado con el núcleo. - miré frente a nosotros. - deberiais adelantaros e indicarnos la ruta más adecuada.


Lyo se mostró de acuerdo, en su estilo, y siguió para delante dejando aquella sala. Nosotros no tardariamos en irnos por un lado u otro

off: lyo out

El momento más agobiante fue finalmente resuelto por Lyosha, que con su poder de metal se encargó de cerrar las rendijas por las que salía el gas. Luego la bruja de los portales se encargó de eliminar más gas tóxico por aquel portal, aunque por el momento no me quité el casco que me protegía un poco, por si acaso. El resto de compañeros había salido de aquello con mayor o menor fortuna, y en aquel breve instante de descanso pude por fin acercarme a la hija de Lyran. Durante los primeros minutos de misión no había tenido tiempo de decirle nada entre unas cosas y otras, pero ahora quise interesarme por cómo estaba. Todavía recordaba que le había prometido a su padre que le debía un favor a los Knox, por haberme sacado de los calabozos y por haber intercedido en favor de los Soul.

- Azahar...¿estás bien? - Sabía que ella se las arreglaba bien, y que además era sanadora. No parecía estar tan tocada como otros del grupo. - Creo que lo mejor sería que esperaseis aquí unos minutos mientras vamos abriendo camino y nos aseguramos de que esté despejado. - me giré a Lyosha al escucharla decir lo del vampiro, mirando alrededor para tratar de localizarlo. Ni idea de quién era. Conocía a casi todos los que estaban allí, aunque había algunos nuevos. La "visión" que comentó Bellatrix era bastante extraña, pero no parecía suponer un problema. - Azar o ruta sexual, parecen lo mismo. - comenté de modo irónico por la información que se nos había dado. A nuestras espaldas se abrió un portal, directo a la sala en al que estábamos reuniéndonos todos, empezando a ser ya demasiados.

- Khaled. No, por ahora no. Esto parece un laberinto de pasillos. El resto no debería tardar mucho en llegar. Cuanta más superficie cubramos más rápido iremos. Voy a adelantarme. Seguidme si queréis. - desconocía si ellos permanecerían con su grupo de origen o si cambiarían, pero dejé atrás la sala circular para comenzar a andar hacia el pasillo que parecía menos problemático.

--------------

off: Adra sale a pasillo 6

Pocos segundos después de verme atrapado por el gas, la puerta cedió de alguna forma que no pude ver por la propia nube. Sin pensarlo corrí como un loco hacia la siguiente sala, que, por suerte, no había ninguna trampa. Una vez allí nos dimos cuenta de que íbamos con dos cadáveres.

”Oye, Cath, ponme en la línea 1” Pensé en voz alta, como código para Cath de que quería hablar mentalmente a solas con ella, mientras hacía un gesto con los dos dedos en las sienes. -No puede hacer algo Matvey con estos cadáveres? Quizá nos puedan ayudar con su nigromancia - Le transmití cuando estaba seguro de que solo me escuchaba ella.

La Soul peliblanca, Bella y la dragona pelirroja se ocuparon del problema de la trampa venenosa, por la cual estaban bastantes de los presentes jodidos. -Ey gente, por qué no paramos aquí para recuperarnos un segundico - Dije al tiempo que me sentaba en el suelo y sacaba mi tupper de arroz con pechuga de pollo, mi batido de protes y los cigarros. no tardé ni 5 minutos en consumir todo aquello.

Lo bueno es que tuve espectáculo con la comida, ya que Bella hizo de las suyas y todo se lió un poco, acabando desmayada. Me acerqué a ella y la zarandeé con fuerza para ver si volvía en sí, cosa que, sorprendentemente, funcionó a tiempo para seguir a nuestro grupo. Me era indiferente la dirección que tomáramos.

OFF: Se va para arriba (derecha)

Me alejé de Arleen un momento para poder proteger a Giordano y esperar que pudiera también con esa trampa pero al parecer no era como las otras -Mierda...- dije para mi mismo, el resto del grupo intentaba abrir la puerta y cuando lo consiguieron la presión del gas se redujo, había que hacer algo y rápido o moriríamos todos en aquella ratonera. Alguien gritó que la siguiente sal era segura y en ese momento sentí como me arrastraban hacia ese lugar.

Al llegar a la sala era cierto que había menos presión peo el gas empezó a inundarnos en seguida, me agaché preocupado por la tos de Arleen, había inhalado y ahora le costaba respirar, vi la luz de su magia y al menos sentí algo de alivio... pero tener que preocuparme por ella era totalmente contraproducente, por eso no quería que bajara -voy a por los demás, descansa un momento- le dije antes de volver a la sala anterior para asegurarme de que nadie se quedaba atrás, incluidos los del siguiente grupo que ya nos habían alcanzado.

Lyosha había cerrado lo suficiente los conductos del gas como para darnos un respiro y después Juliet se encargó de sellar la puerta, hice recuento de unidades y por suerte estábamos todos. Amaya se acercó para informar de la situación, por desgracia dos de nuestros guardias habían caído en combate, la general había pedido un portal a Bellatrix pero negué con la cabeza -Espera a la llegada del siguiente grupo, los enviaremos por ese portal, hay que ahorrar fuerzas y no exponer tanto nuestras vías de escape- no pasó mucho hasta que el siguiente portal se abrió dejando pasar al nigromante -Perdona Khaled, tengo que pedirte un favor- le expliqué la situación y entonces los cuerpos de los guardias fueron devueltos -¡Pelotón! ¡firmes! Morimos al ocaso pero renacemos al amanecer en un ciclo infinito, en un eterno retorno, en ouroboros no decimos adiós a los caídos, decimos hasta pronto- el homenaje debía ser corto y había que hacerse a la idea de que no todos podrían volver a encontrar el descanso en la isla, uno de los guardias hizo levitar el cuerpo para llevarlos de vuelta mientras el grupo dos seguía llegando.

Dejé que todos descansaran unos minutos mientras explicaba la situación al grupo que acababa de llegar -Hemos atravesado pasillos y estancias llenas de trampas, tened mucho cuidado, lo mejor es que alguien que controle metal abra la puerta, los que tienen sentidos más agudos suelen acertar detectando las trampas y finalmente el tecnomago las desactiva, Sigrid os será de mucha ayuda a sí que protegedla a toda costa y por favor, evitad precipitaros...- suspiré porque precisamente eso era lo que habían hecho muchos en mi grupo y así habíamos acabado. Después de dar el informe movilicé a los míos ayudando a Giordano y Arleen a levantarse, Altair ya había decidido el camino a tomar -Iremos por este lado, os mantendremos informados- dije antes de adentrarnos en el pasillo por el que se había marchado el licantropo

El día de la misión había llegado antes de lo que parecía, y no podía negar que estaba algo asustada por lo que podríamos encontrar allí abajo. Ian y Catherine iban, pero mi padre decidió bajar en el último momento. Tras la despedida en la plaza atravesamos el portal de Khaled, llegando directamente al lugar en el que se habían concentrado la mayoría. Algunos ya empezaban a tomar decisiones de ir por un pasillo o por otro, entendí que para cubrir más parte de terreno. Me acerqué a una de las guardias para que me diese informe rápido de situación para curar heridos, siendo esa persona una de las primeras que sané para eliminar los efectos del gas que les había estado afectando. Tardé algunos segundos en conseguir la neutralización del veneno, pero quedé satisfecha con el remanente de magia sanadora que quedó en su cuerpo para terminar de recuperar. Luegi eso acerqué a mi compañera sanadora, haciéndole un gesto de si me daba permiso para empezar continuar con la sanación. Con el Vilya y la esmeralda logré que la canalización fuese más efectiva, aunque no terminase de dejarla completa.

Por último me acerqué a Catherine e Ian, que estaban juntos mientras ella se encontraba sentada en el suelo de espaldas. Les sonreí a ambos con cara de 'pronto empezáis". Me agaché al lado de Catherine, haciendo que el aura de sanación la envolviese poco a poco para comenzar a neutralizar el veneno de su cuerpo. Tardé como un par de minutos, pero también quedó bastante decente la curación. - ¿Listos para seguir? el grupo que viene ahora es tan grande que seguro que os acabaremos pillando en algún momento. - señalé hacia atrás antes de levantarme, echando un vistazo a nuestro equipo. Que fuesen Khaled y mi padre me daba seguridad, y también que fuese el teniente Royden. Si hubiese tiempo para cotilleos le sacaría algo de su beso a Sofía en la plaza, que eso sacaba mi vena de marujeo.

Los grupos anteriores fueron dispersándose para marcharse, y entre ellos vi a Juliet y a Reiv saliendo para uno de los pasillos. Fruncí el ceño porque Aldaron me comentó que él se había escapado del hospital antes de tiempo, así que era un poco irresponsable. - Nadie valora el trabajo de los sanadores. - murmuré por lo bajo, esperando que decidiesen el pasillo los que sabían del tema.

--------------------

sanación: 20 dado (elimina veneno) + 10 hab + 40 Vilya + 10 assur + 15 stat= 95 (repartido)
43 para Catherine (y restaura a 142)
1 para Ian (restaura a 195)
5 para Arleen (restaura a 145)
37 a Matvey (restaura a 150)
(os sumáis +5 PS en cada post hasta rellenar por completo PS)

mejora sanación:

El miembro 'Chloe Hacksaw' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

---

'Curación' :

120ps -10 veneno -20 sangrado= 90ps
-------------
No me había dado tiempo de saludar en condiciones a mis amigos, el veneno ese me afectaba más que a los demás y en un ataque de hombría y estupidez extrema intenté abrir la siguiente puerta, algo que no funcionó y probablemente le diera tiricia a más de uno. Me quedé tendido en el suelo un rato hasta que alguien me levantó sintiendo como algo caliente salía de mi garganta al toser, estaba vomitando sangre por las heridas internas de aquel gas pero pude abrir los ojos para ver a la elfa del torneo, la maldita cucaracha dorada.

La curación empezó a hacer su efecto y poco a poco pude volver a respirar viendo como Reiv y Juliet se acercaban, el maldito empezó a cachondearse y le levanté un dedo mientras sonreía para decirle que se fuera a la mierda -Estamos en paz rubia...- le dije a lasaña mientras me iba incorporando poco a poco y entonces.. ¡TETAS! fue todo lo que pude ver, pechotes blanditos y suaves en mi cara, de normal lo habría gozado pero teniendo en cuenta que hace poco me costaba respirar tuve que subir la cabeza y darle palmaditas a la mujer que me estaba estrujando para que me soltara -En otro momento de mi vida te diría que es una estupenda forma de morir, pero me gustaría ver nacer a mi hijo-

La rubia me puso en pie de un tirón y casi me caigo pero me dio el toquecillo en la nariz diciéndome lo del baile -Cuando quieras y te den permiso- porque la última vez nos había interrumpido el tío ese estirado. Me fui hasta Reiv y le di un codazo para después pasarle un brazo por encima del hombro -Por fin llegas cabronazo, tío, esto es la casita de los horrores, mira dónde pisas o vas a acab... ¡mierda! ¡me he llenado la armadura de sangre! joder, Mérida me había ayudado a limpiarla...arrrg- Amaya se acercó a ver como estaba y le dije que me encontraba bien, claro eso antes de saber que los pochos se quedaban atrás para irse con el otro grupo -Mierda...  bueno, me voy, no la palmeis antes de volver que quiero regalos de navidad... y esto pa ti- dije al moreno dándole un lametón en la mejilla antes de separarme de él riéndome para despedirme después de Juliet y seguir a Amaya por el pasillo.

-------------
90 curación de lasaña +5 regeneración= Kyllian a full!

En la plaza se había ocupado de organizar a su pelotón y agradecer a Benjamin por devolverle su casco. Luego hablaría con Kyllian para informarse sobre su aventura con éste. El muchacho había sido introducido a la guardia bajo su orden pero había partido con el pelotón de Amaya, ya le informaría su prima de la eficiencia del feral.  No le gustó ver a Arleen allí pero sabía que no había persona en el mundo que la disuadiera cuando quería algo.

Rodeado de la gente de Ouroboros con aquella romántica idea de despedir a sus héroes Vishous no se sintió nada bien. Se acercó a Fred para asegurarse de que entendía la misión que le había encomendado, después de eso reconoció a la pelirroja entre la multitud porque básicamente la reconocería a leguas de distancia y se atrevió a cometer una locura. Él prometió volver… pero si no lo hacía, quería que lo recordara. Se acercó a ella para cogerla de la cintura y besarla con la misma pasión, intensidad y profundidad que sentía en ese momento. La estrechó contra él perdiendo una mano en su pelo y cuando se separó adoró sus mejillas. Una sonrisa se vislumbró en sus labios antes de que se pusiera el casco, pues era el momento de partir.

No dijo nada porque las órdenes a su pelotón fueron mentales, rodeando a la morenaza. Nunca pensó que se vería protegiendo a una humana pero era una ocasión especial y una humana atractiva. Le sonrió debajo del casco y se puso frente a ella – Señorita Sigrid, es un honor escoltarla a salvar el mundo- Le mencionó, antes de darle la espalda y con una orden mental avanzar por el portal entre los 10 guardias. Al ingresar se encontró con un olor muy raro y un armazón de metal que los envolvía. No le gustó nada, pero oye, él vivía dentro de un armazón de metal llamado armadura ¿no?. Curioso.

Observó a Sayid hablar y sintió oír la baja de los guardias.  Abrió espacio y se ocupó de mantenerse al lado de Sigrid, como una sombra, aunque hizo el homenaje con los ojos cerrados escuchando dentro del casco las palabras repetidas de cada uno de los miembros de su pelotón. Después de eso escuchó claramente todo lo que decía Sayid asintiendo -¿Arleen?- Preguntó pero ella le sonrió de lejos alzando la mano…ensagrentada. Vishous gruñó -¿Qué le ha pasado? – Inquirió pero no recibió respuesta porque dijo que se iba a ese pasillo. Vishous alzó las cejas en plan “¿Perdona?”

Frunció el ceño, si él iba por ese pasillo, ellos por el otro. Vishous hizo un gesto y el pelotón se formó de nuevo alrededor de Sigrid, colocando una pared de escudos por prevención.


Off: me como los mocos porque Sean no entra aún

Aquel día nos habíamos reunido todos en la plaza, la tradición de los habitantes para despedir a los que marchaban me trajo amargos recuerdos, hace mucho no se hacía y no todos volvían. Saludé a Sean con un gran abrazo y un beso en la frente antes de llevar mis manos a sus mejillas y mirarlo, esta vez no me quedaría atrás mientras él arriesgaba la vida... también me invadieron sentimientos de nostalgia porque ya era más alto que yo y casi me entra la llorera, llevaba unos días un tanto sensible de más...demasiado para mi gusto.

Me separé de él y esperé junto a los demás girándome para ver el revuelo que se había montado con el beso de Vishous a Sofía, ese tipo de exhibiciones no eran para un teniente... rodé los ojos y entonces mi mirada se encontró con la de Khaled a quien sonreí ¿acaso quería seguir el ejemplo? no, no era de esos pero por gastarle una broma articulé un par de palabras -Ni lo pienses- dije apenas con mis labios esperando que lo entendiera.

Cuando por fin llegó nuestro turno el nigromante pasó el primero seguido de V y la chica humana que iba escoltada por el pelotón, detuve a Sean antes de que entrara para asegurarme que el camino era seguro y despejarlo de ser necesario pero al cruzar la escena no dejaba muchas esperanzas -Sayid... - no dije nada más y entonces el descendiente empezó a dar su informe sobre lo ocurrido, asentí comprendiendo la situación además de tener en cuenta sus consejos.

La despedida a los caídos fue breve pero como tuviéramos que hacer eso cada vez que teníamos una baja no acabaríamos nunca, esperé a que todos pasaran por el portal y cuando Khaled dejó a su familia me acerqué -¿tienes algo que pueda atravesar esas puertas y ver lo que hay al otro lado sin tener que abrir la puerta?-

Aquello habia sido demencial y habian muerto dos personas.


Me quedé parada a un lado, un poco margi, mirando con pena el procedimiento. Algunos parecian tener sintomas del gas, incluso despues de curados, aunque yo me encontraba bien tras mi curacion...probablemente fuesen los efectos toxicos del mismo.

Entre varios sanadores lograron restablecer a varios y los equipos comenzaron a dividirse, ademas llegó el nuevo team. Miré a Adramelech con cierta sorpresa cuando se interesó por mi, y le respondí con una amable sonrisa.
- Seh, tranquilo. Ha sido un poco agobiante pero ya está. - asentí a su recomendacion yendo a ver quien necesitaba ayuda pero con la llegada de Chloe me quedé casi sin trabajo.

- Mira a quien tenemos aqui! - dije con una sonrisa abrazandome a la Hacksaw. - eres una crack. Voy a ir adelantandome, creo que el italiano se me ha escapado a medio gas....lleva mucho cuidado. Aunque vas muy bien acompañada. - dije mirando a los hombretones del equipo con el que Chloe venia, joder, a cada cual mas alto.

Con Cath e Ian mas repuestos, salimos por el mismo pasillo por el que marcharon Amaya y compañía.

Estaba en casa cuidado de los críos cuando Nichollas me dejó tirada totalmente porque decía que estaba agobiado. Ya había asumido que mis tíos harían lo que les placiera respecto a la misión, y los muy irresponsables hicieron precisamente alarde de eso… de dejar a los 3 niños con sus sobrinos y con su hermano medio lobo medio loco. Estaba en casa revisando el Palantir sirviendo la cena, sobrecogida con los tormentos a los que la IA estaba haciendo sufrir a mis amigos. Pude ver a Arleen que gritaba mi nombre y se me estremeció el alma por dentro.

Dudé. Mucho. Tenía miedo…. Mejor dicho, estaba totalmente aterrada. Una idea rondó por mi cabeza de una forma muy rápida y fugaz. La deseché, ¿qué podría hacer yo? No, yo allí solo puedo molestar, no serviría para nada más que para molestar. Entonces pude ver lo del gas. A cada paso que daban había trampas y trampas. Por Merlín, se los iban a cargar.

Me mordí la uña, confusa y mirando a mi alrededor.

Cinco minutos después, estaba corriendo a la plaza donde estaban todos congregados. Un tipo con pelo largo estaba abriendo el portal para entrar. Las imágenes pasaron por su cabeza como flases. Se vio a sí misma cogiendo el ordenador. Mandado el patronus a su hermano. A sus sobrinos cenando. El palantir con las imágenes. Gionardo. Arleen. ¿Collins? Entre el pelotón encontró a su tía y a Setelah, pero los pudo ir esquivando escondiéndose entre la multitud. El corazón le latía tan fuerte que retumbaba en sus tímpanos. ¿De verdad iba a hacerlo? Sentía terribles ganas de llorar. Sacaron los cuerpos de los soldados muertos y ese fue el momento que aprovechó para esconderse entre ellos y arrastrarse hasta dentro del portal.

La sala era lo suficientemente angosta como para sentirse encerrada y esa sensación no le gustaba nada. Miró rededor, pero sabía que no le sobraba mucho tiempo. ¡Por Merlín, qué había hecho! Escuchó entre las voces de los presentes, intentando localizar la de Arleen. No la veía, pero la escuchó en uno de los pasillos. Con Sayid. Suspiró, aterrada y se adentró en él.

Estaba bastante pocho en el momento de salir de la camara de gas aquella, pero iba arrastrando los pies sin quejarme.

Lo de Bellatrix...lo de Bellatrix y sus portales a las espaldas de los guardias me habia hecho percatarme de que su traición estaba próxima, ese espiritu no podia jugárnosla ahora.

"Amaya. Tú has visto lo que ha hecho con los guardias. Si vuelve a pasar algo parecido, prescindiremos de ella... del método que consideréis mas efectivo. A la vuelta, usaremos mis portales, no los suyos. Traigo conmigo la piedra"

"Me iré con los otros, teniente. Así veo a los Pendragon en accion....y te mantengo informada. Suerte"

Observé como se llevaban a los dos primeros muertos de la misión. Pronto, muy pronto habian caido. Mientras Altair se inflaba a pollo y arroz, yo me quité el casco un momento, dejando al aire mi hermosa cabellera cobriza y rizada, y saqué mi petaquita para darle un trago, aunque eso no era un batido de proteinas.

- Gracias. - indiqué a Chloe cuando terminó con la sanación, ahora me encontraba mucho mejor. Hice tronar mi cuello, preparada...preparado para la accion.

"Cath...me voy para el otro pasillo, estamos conectados, vale?"

Tras ese breve intercambio, volví a ponerme el casco, saliendo tras el otro grupo.

- Esperad! me uno a vosotros!


__

off: mat fuera
Veneno fuera y PS restaurados por Chloe 150/150

Las dos semanas antes de la misión pasaron de una forma muy extraña, me daba la sensación de que el tiempo no avanzaba y a la vez que iba muy rápido. Durante la preparación de la misión hice varios trasladores con las modificaciones pertinentes en el encantamiento, al igual que en Londres debían ser activados con magia además de las palabras correspondientes que cada responsable debía memorizar pues si lo apuntaban en algún lugar y caía en manos del enemigo sería terrible.

El día de la misión Lucio y yo llegamos a la plaza que estaba repleta de las gentes de Ouroboros que venían a despedirse, era una sensación extraña pero no quise tomármelo como algo malo, quería pensar que lo que hacían era pedir por nuestro regreso. -Lucio, tengo algo para ti...- dije metiendo la mano en mi bolsa para sacar un saquito de terciopelo azul y entregárselo, dentro estaba la piedra lunar que le había comprado y que ahora estaba engarzada y acompañada de una cadena de plata, le enseñé la mía pues había hecho lo mismo con ella -Quedaba raro ir con nuestros jerséis navideños a juego así que he pensado que esto sería una mejor idea- y protegía mucho más que un jersey de reno.

Estaba distraido con mi prometido cuando Zaphira se acercó a nosotros, me dio un beso y no pude más que sonreír para después abrazarla cuando vi que parecía a punto de llorar -Estaremos bien Zaph, ya lo verás- pronto se armó un revuelo y al girar la cabeza pudimos ver como el teniente le daba un espectacular beso a Sofía frente a la atenta mirada de todos, le di un codazo a Lucio porque ya se me estaba pegando lo de ser cotilla -parece que Sayid y Sofía van a ser familia política- aquello iba en tono de broma pero al ver la expresión de enfado de Zaphira preferí no decir nada más.

Esperamos hasta que el primer grupo se fue por el portal que abrió Bellatrix y en ese momentola rubia de los Pendragón vino a saludarme de una forma muy efusiva, me pilló tan desprevenido que pudo meter mi cabeza entre sus pechos por desgracia mía porque en seguida recibí miradas y un mensaje de Catherine. Me separé de la rubia para devolverle el mensaje a mi amiga pero ya se había marchado -Te daré más cuando las necesites Shyvanna...- dije por el comentario de las velas y tal y como vino se fue -Aún no hemos pasado al otro lado y ya estoy agotado- dije para mis acompañantes antes de agachar la cabeza por la mirada de total enfado y desaprobación de Zaphira.

En cuanto nos dieron paso por el portal, la dragona fue una de las primeras en pasar, esperamos también por los guardias y entonces vimos a todos los que habían abierto el camino para nosotros, me llevé las manos a la boca mientras intentaba localizar a Catherine y a Giordano que iban en el primer equipo, al italiano lo vi enseguida, no tenía muy buena cara pero al menos parecía estar bien y Catherine un poco más de lo mismo, quise acercarme a ellos pero en seguida siguieron su camino -¡Gio, Cath! ¡tened cuidado!- les grité mientras se marchaban volviendo mi mirada de preocupación hacia Lucio -¿crees que deberíamos ir a echarles una mano? no tenían muy buena cara... ¿podemos ir y volver?-

Los nervios hicieron acto de presencia el día de la partida, mucho más porque ya sabíamos a lo que íbamos. No quería que Sean se diese cuenta, así que intenté aparentar tranquilidad. Fue complicado, pues el ambiente de la plaza no ayudaba, y cuando me hizo el regalo del colgante con la cadena de plata me emocioné más de la cuenta. Incluso se me aguaron los ojos.  Cogí la cadena para colgarme al cuello su regalo, sabiendo que era una piedra lunar para la creación de escudos mágicos, algo muy útil. Se lo agradecí con un beso poco antes de cruzar aquel portal, pensando que ojalá fuésemos con nuestras ropas navideñas para darle a aquello un toque menos serio. Quise responderle a lo del cotilleo sobre lo que habíamos visto de Royden y Sofía, pero era largo de contar para el momento.  - No sé, tengo mis dudas al respecto. Ya te contaré.  - pensé en Aldaron, en lo que había hablado con él en la sala de personal. Todo aquello pareció quedar muy lejos cuando por fin estuvimos en aquella jaula de metal, agobiante y peligrosa.

El grupo que acababa de entrar era numeroso, y los que habían llegado antes parecían enteros, así que todavía éramos suficientes efectivos. La reacción de la Pendragon rubia me dejó bastante sorprendido, esa efusividad con sus pechos y Sean no me la esperaba.  - ¿Sabe que no te gustan las chicas, no? - comenté con una risa por lo bajo, pensando que si era una técnica de acercamiento al Consejo no le iba a servir. A mi no me importó, mejor que se llevase bien con los nuevos. Zaphira sí que le miró mal, pude suponer por qué. Menuda papeleta...

Me quedé con la cosa de querer acercarme a Gio y Catherine, coincidiendo con Sean en eso de que no tenían muy buena cara.  - Pues sí...buena idea. Además, creo que Chloe se queda en este grupo. Vamos a ver por si podemos ayudar y ...tal vez luego volvemos atrás con el resto.  - Indiqué al resto de los presentes que íbamos a ir por el pasillo que había ido Amaya y el resto. Tras eso cogí la mano de Sean, echando a andar con él para salir hacia la nueva zona.

Sabía por Setelah que había misión, porque él siempre se enteraba de todo de algún modo. Era el cotilla mayor del reino, y me había puesto al tanto de algunas de las novedades, como el asunto de los Pendragon y esa especie de "negocio" con ellos. Ambos llevábamos tiempo alejados de las misiones en grupo, pero en esta ocasión coincidimos en que haría falta toda la gente posible que supiese luchar. Nos tocó dejar a los niños con Belle y Nicho, confiaba en ellos para encargarse mientras estuviésemos fuera. Me costó bastante despedirme de los pequeños, y no quise que fuesen a la plaza porque si no no sería capaz de irme. Por eso los dejé en casa, entretenidos en el jardín jugando con sus loros y demás fauna adoptada.

Atravesar el portal aquel fue interesante, aunque al llegar al sitio tuve la sensación de que parecía todo demasiado tranquilo para ser el núcleo de aquella cosa. Observé atentamente los movimientos de unos y otros, haciendo un gesto a Setelah para indicar uno de los pasillos. Por ahí parecía que se había ido menos gente, y lo suyo era separarse.

- Es difícil elegir grupo, creo que tienes ex-enemigos en todos. ¿Cómo va la lista? ¿has hecho las paces con alguno ya? - me reí por lo bajo antes de cogerle del brazo, tirando de él hacia el pasillo que seguía de frente. De ese modo dejamos atrás el punto de entrada, avanzando hacia lo desconocido.

---------------------


off: Mónica y Setelah van (por indicación) hacia zona de pasillo 7

No habría bajado a la misión de no ser porque mis hijos se empeñaron. Ya eran mayores y no podía impedirlo, pero no me daba la gana que fuesen solos. Habíamos tenido que dejar a Aedan con los Knox, que eran más sensatos y no bajaban. Bueno, quitando Azahar. Les habría dicho a todos los presentes que la misión era absurda, y que probablemente esa máquina nos había sacado ya la delantera mucho tiempo atrás. Lo único que podíamos hacer ahora era crear más malditas islas flotantes y lugares sólo para nosotros.

Volví a preguntarme una vez más qué hacía aquí cuando Khaled nos hizo pasar por aquel portal. Era todo bastante surrealista, desde la gente que nos habíamos unido hasta la misión en sí. Vigilé a Chloe cuando fue a atender a los heridos, Catherine entre ellos. La pareja salió andando en cuanto la curaron, tomando uno de los pasillos. Poco a poco fueron marchándose prácticamente todos, por lo que había que seguir alguno de los dos caminos. Finalmente le indiqué a Chloe que siguiésemos hacia el pasillo 6, por donde se habían ido la mayoría de Descendientes. Abandonamos ambos el lugar tras hacer un gesto a los rezagados para que nos siguiesen o se fuesen por otro maldito sitio.

------------------------------

off: sacados Chloe  y Adam (y si alguno más quiere darse por sacado con esta frase..."Poco a poco fueron marchándose prácticamente todos")