Guarida Tepes

El vino... Le quemaba un poco, porque en su vida jamás había tomado alcohol, era algo muy nuevo para ella, pero a la vez ayudaba mucho que fuera bastante dulce y con muy buen cuerpo, cosa que era lógica, al fin y al cabo se trataba de algo de la casa de un descendiente.

Ella se bebió la copa por entero rápido, tiene la tendencia de comer y beber bastante rápido, sobre todo debido a que es una persona bastante ansiosa, aunque eso no es una gran idea, y terminaría por aturdirse un poco a sí misma, esto aunado a que su resistencia al alcohol ronda los números negativos.

Oh... Bueno... Mientras no se considere una falta de respeto...

Porque al final eso es lo que más pendiente le da, a los descendientes se les trata con mucha reverencia, y ella no iba a ser la excepción...

Sí, se nota que es muy dedicado... Y tiene un maestro estricto, así que las cosas deben ser complicadas para él...

Porque Oscurus parecía ser alguien que sin dudas no va falto de carácter, y además con muy mal genio, pero supone que sus razones tendrá.

Oh, bueno yo...

Momento... ¿Es que el alcohol ya está jugando con su mente o el descendiente acaba de elogiar su aspecto?, no es que le moleste, por el contrario, es algo que le sonroja bastante, y hace que no sepa que debería decir, por lo tanto dice lo primero que piensa.

U-Usted... ¡Tú!... También... Mucho en realidad...

Que para más inri, se le ha mezclado con eso de tener que acostumbrarse a no ser formal con un descendiente y se le ha desconfigurado el cerebro, y lo siguiente con lo que remata, solo lo empeora, pues ahora se avergüenza.

Oh... Yo... bueno... Estoy... Mejor... Sí... Mejor... ... ¿Y usted?

Ahora mismo está qué se le ha perdido el piso, han sido muchas cosas de golpe, no está lista, no ha estudiado, y hablando de estudiar...

Oh... Um... Es sobre un libro que el maestro Rasputin me concedió el derecho de estudiar... Aunque en realidad no tiene que ver con eso... Son sobre todo métodos de seguridad...

No todo lo que hay en la nigromacia va de levantar a los muertos... La magia negra tiene muchas cosas de por medio.

Pero bueno, aprovechando que el descendiente se fue, Lemóni aprovecha para servirse otra copa de vino, y rápidamente volver a tragarsela ansiosamente, con la intensión de ver si con eso se calma, y luego de eso, por lo que escucha parece que ha venido Justin, al menos los tres planeados ya estaban.

Oh... Hola...~

Lemóni le sonrió desde su sitio, tranquilo ta y sosegada, al menos de momento porque se está alcoholizando demasiado rápido para alguien que no ha bebido en la vida, y eso es algo que nunca puede terminar bien, definitivamente no.

Cuando la puerta se abrió, giré hice la vuelta bruscamente para observar al interlocutor. Iba a saludar, de una forma muy patética y nerviosa, pero como Khan fue quién empezó el diálogo le dejó hacer u ... ¿Estaban hablando de mí? Empecé a sonrojarme intentando mascullar algún comentario jocoso... Con poco éxito la verdad. Sólo añadí un "¿Ah, sí?". Por Merlín, qué estúpido debía parecer en ese momento hasta que.... -Espera, ¿estábamos?- Pero ya no hubo opción a réplica ni nada, porque me empujaron al interior de la guarida. Estaba especialmente decorada ... Pues para una fiesta, ¿Qué me había pensado? La verdad es que me sentí estúpidamente estúpido -Hay poca gente- Por no decir nadie, pero no añadí aquello a la observación. En la primera reunión social que organizaba Khan y tampoco quería hundirle.

-Yo... Yo creo que sí eres popular, pero con lo de la reunión y eso...- Pues igual no era un buen momento para fiestas. Llámame loco.

¿Otra vez ella? -¿Qué tal estás? ¿Todo mejor?- Pregunté a Lemoni después de saludarle con la mano. ¿Cómo era posible que estuviera en todas partes? -He traído ensaladilla rusa...- Expliqué a Khan cuando me quitó la comida y me sirvió vino, no estando muy seguro de si debía beber o no.

-¿a quién más has invitado?-

Después de meses de tratamiento y ejercicio con Arleen y los demás especialistas del hospital, Iroh ya podía caminar. Sabía que su cuadro había sido crítico así que les agradecía profundamente a ellos pero también sabía que su determinación por no dejar que su vida estuviese marcada por SAM después de recuperar a sus padres había sido clave, así como los ánimos de Nicho.

Los había pasado a buscar a los dos y había comprado mogollón de alcohol, porque él si es mayor de edad (XD), y también muchos nachos. Sus hermanos no habían querido venir pese a haberlos invitado porque tenían otras reuniones así que él se encargó de las compras y de preparar su batería, su guitarra y una pequeña sorpresa. Lo bueno de ir a casa de un Descendiente es que nadie les iba a decir que bajasen el volumen.

The best part of this plan? Nobody can stop us!

-¿Hace mucho conocéis a Khan?- Les preguntó a los demás -¿Estará Justin? Fue muy majo conmigo durante todo el tiempo que estuve internado- Les comentó antes de pararse en la puerta y tocar para anunciar la llegada del trío. Miró a Belle un instante y le sonrió -Te he traído una pandereta-

- Tranquila, no es una falta de respeto. - zanjó el tema para que la chica dejase de dirigirse a él de ese modo, esperado que se relajase un poco y no estuviese toda la noche como rindiéndole pleitesía. Aunque se entendía, si tenía como referente a Matvey. Era una persona seria, pero que había ganado muchos puntos a ojos de Khan por el modo en el que le trató en la misión, confiando en él. Oscurus era otro referente bastante serio, y que tampoco trataba demasiado bien a Justin.

Al final se bebió el vino de la copa casi de un trago porque no sabía muy bien qué decir ni dónde meterse en el momento incómodo en el que ella pareció azorarse con el cumplido, aunque se lo devolvió en medio de un caos mental en el que no paraba de llamarle tú y usted. Se le subieron los calores por el alcohol, pero acertó a asentir rápidamente a eso de que él también estaba mejor. - Sí, sí...he estado descansando algunos días después de salir del hospital. He tenido suerte, en comparación con Mei o Jack...- añadió con pesar, pensando en los compañeros que seguían graves. El ataque mental que habían sufrido ellos parecía más fuerte aún, y no quería ni imaginarse cómo había sido porque a él ya le había dolido mucho el que le hicieron.

Decidió que ya le preguntaría más a Lémoni sobre sus estudios después de abrir la puerta y traerse con él a Justin, que parecía extrañado por ese "estábamos esperando". - Pues claro, Lémoni y yo. ¿Te acuerdas cuando dijimos en el hospital que nos juntaríamos para una fiesta o algo así? pues aquí la tienes. - le pareció muy amable de parte de su amigo que intentase justificar la falta de gente en la fiesta con lo de que había una reunión, pero no tenía nada que ver. - Soy poco conocido, debo admitirlo. He mandado varios memorándums con invitaciones a jóvenes de Ouroboros, pero...si no viene nadie más nos tendremos que comer y beber nosotros todo. - se rellenó su propia copa, y de paso la de Lémoni y la de Justin. Se separó de ellos al escuchar de nuevo la puerta, refunfuñando un poco porque eso lo solía hacer el mayordomo. De paso activó los altavoces mágicos flotantes para que empezasen a reproducir la música. Abrió al llegar a la puerta, encontrándose con gente que conocía pero no mucho. Al que más al amigo de Justin, y se alegró de que trajese más gente aunque fuesen más mayores.

- ¡Bienvenidos! justo ahora íbamos a empezar. - le enseñó la segunda copa que acababa de echarse, aunque era tan novato que ya se notaba un poco la primera. Les hizo un gesto para que le siguieran al salón, de vuelta con los otros.

Música fiestera:

Lemóni se encontraba terriblemente avergonzada tanto que se le acaloraban las mejillas, aunque no tenía la menor idea de sí esto era culpa del alcohol o de la vergüenza... Quizás del primero, al menos cada vez más, porque pasado el tiempo, este empezaba a adormecerle un poco los sentidos, aunque en cualquier caso iba a sonreírle a Justin cuando lo viera porque le cae bien, solo que quizás lo está haciendo de forma menos tímida ahora que el alcohol empieza a pegarle.

Hola.~

Luego ladeó su cabecita.

Oh sí... Estoy muuuucho mejor, suerte qué la voz de ese árbol no era un sonido real o pudo haberme roto los tímpanos.~

Y de no ser por tí pudo ser peor aún... Muchas gracias.~

Aún recordaba la migraña qué le dió ese coro de gritos infernales, pero afortunadamente y gracias a Justin, realmente no le hicieron ningún daño.

Luego de eso, por supuesto, se dedicaría a atender al estimado anfitrión, Khan, a quien todavía no sabía si era del todo correcto tratar con tantas confianzas... Pero el vino estaba haciendo lo suyo y cada vez se lo estaba preguntando menos.

Mm... Debió ser terrible... Pero al menos siguen con nosotros y eso me hace muy feliz.~

Respondió de manera honesta, pero afectada por el alcohol, es el tipo de persona que intenta verle el lado amable a todas las cosas para no volverse loca, solo que normalmente no lo exterioriza.

Luego de eso observó a Kahn hablando con Justin, y les sonrió a los dos, ya un poco mareada, y con ese hecho ayudándole a relajarse un poco, junto con el ambiente y también emitió una risilla al recordar lo dicho.

La verdad me sorprende haber podido venir, con eso de que tenía examen, pero parece que ya no...~

Y luego de eso... Vino más gente, gente a la que saludó con su manita, de una forma más airada de la qué la había hecho antes, incluso, como demostración de que de a poco simplemente se le iba terminando la timidez.

Ho~la, creo que no los conozco... Pero hola.~

Y procedió a tomarse de un trago de nuevo la siguiente copa qué Khan le ha proporcionado... Cosa que quizás no debería de hacer por varias razones, pero que va a hacer lo mismo porque ya no hay vuelta atrás.

-¡Ah, claro, esa fiesta!- Que había olvidado completamente. Y yo que esperaba cualquier otra fiesta, al menos no he sido lo suficientemente patético como para pensar que aquello era una cita… ¡Ah, si hubiera traído flores! -Perdona que con tantos ingresos, con Jack, Mei… al final lo olvidé-

Como al final terminamos en el grupo no quise mentar la tercera causa de haber estado hasta arriba en el hospital y es que, si el árbol hacía cualquier cosa rara, todo el personal debía estar preparado para una evacuación masiva. El árbol… y sus ramas… pero aquello no lo dije, solo me quedé callado, no quería preocupar más a Lemoni que parecía que el árbol le afectaba más que a los demás. -Yo no hice nada. Solo era mi trabajo- Me excusé y me sonrojé ligeramente -Al menos conseguí que Oscurus nos dejara una habitación para los tres y poder descansar unos días- Seguí con la mirada a Lemoni por un segundo y aquella forma de hablar, no la conocía pero… ¿me hace muy feliz? ¿estaba coqueteando, EEEEEN SERIO? Arrugué la nariz con cierta desconfianza y volví a Khan que decía no sé qué de la popularidad.

-¿Un memorándum? Eso es demasiado formal hasta para mí, podríamos haber puesto un post en el Instagram o un cartel. Chloe seguro que le hubiera gustado venir- Y me rellenó el vaso… a pesar de no haber bebido anterior. Al final lo descarté aprovechando que se había ido a abrir la puerta y lo cambié por zumo. -¿Y de qué es el examen?- Me interesé por Lemoni, mientras Khan recibía a Iroh y a los Simon

-¿Anda? ¡Qué os trae a todos por aquí? ¡Qué gusto poder veros a todos! ¡Nicho! ¡Belle, ya estás mejor!- Ay sí, me alegré tanto de verla que ya no estaba con sus cosas del fin del mundo. E Iroh, sí también le iba a abrazar, luego ya no y se quedó en palmadita en el hombro -¿Ya estáis todos recuperados? ¡Qué guay!- Ay, sí, después de tantas malas noticias, aquello era bonito. Me emocionaría si no fuera porque iba a dar la nota y eso no.

¡Fiesta! Por supuesto que me acoplé al plan en cuanto Iroh lo dijo. Vamos, ¿cómo iba yo a perdérmela? Ni de coña. Lo único que echaría en falta es que no estuviera Mérida, porque en una de las últimas lo pasamos en grande en el bar. Iba a aprovechar para invitar a Lemoni, porque le debía un baile después de la clase de Adael, pero cuando fui a buscarla, no la encontré por ninguna parte y supuse que estaría estudiando. Guitarra a la espalda, seguí a Iroh, reconociendo al instante la guarida de Khan. No sabía que daba una fiesta…

-Pues por mi parte no mucho la verdad. Vine con una amiga a darle un recado de parte de Matvey. Esto fue antes de la misión a Roma, el tema del árbol… ¿me he dejado algo más? Se supone que la isla es segura, pues no mucho más que Hogwarts- Ironicé, colocando las palmas de las manos detrás de la cabeza. No pude contestar a lo de Justin, porque desde que empezó con sus clases nos habíamos distanciado un montón y ya no nos contábamos tantas cosas como antes. Se conoce que ahora tiene nuevos “amiguitos”. Me encogí de hombros sin poder decir nada más y me coloqué por detrás de Belle para añadir un “y yo una armónica” al comentario de la pandereta. Tras lo cual se abrió la puerta y nos recibió Khan. “Uh, qué mala cara…” -¡Genial! Ha llegado el equipo de la música- Me presenté sin mucho descaro, apretando la mano del descendiente, topándome enseguida con Justin -Hemos oído que había una fiesta… y nos hemos apuntado- Alcé las cejas, divertido, pero en verdad estaba un poco mosca porque no nos había dicho nada. Conociéndole seguro que era para que no se molestara Khan, o a saber. Pero, espera, estaba Lemoni allí, abrí los ojos como platos y me adelanté. -¡A ti te estaba buscando!- Me adentré en la guarida y dejé a los otros atrás, haciendo movimientos estúpidos con los hombros mientras avanzaba a la compañera de pelo verde -Teníamos un baile pendiente, ¿te acuerdas?-

He terminado mi reciente instancia en el hospital, lo sucedido en el Vaticano llego y se fue de manera repentina a mi ver. Por lo cual me he vuelto a enfocar en el entrenamiento personal, que todavía me falta para volver al ruedo o siquiera intentar ir a mi cacería.

Pero parece que el destino quiere que haga algo más que simplemente entrenar y luego casi morir en una misión posterior. Me ha llegado una especie de carta en el lugar donde resido. Es una clase de invitación para una fiesta de convivio por parte del Descendiente Tepes, ¿Linaje del Vlad Tepes, el empalador?, ¿esta versión también fundó El Drăculeşti?. Supongo que es una señal de que debo hacer otra cosa por esta ocasión. Pero no menciona destinatario, ¿se habrán equivocado de invitado?, supongo que iré a devolver la carta para que pueda ser enviado a la persona correcta. si que me pongo mi gabardina de trabajo, pues al final de cuentas, solo ha sido un error, así que al menos cambiaré la rutina por un momento.

Entonces siguiendo la dirección escrita en la carta y algunas instrucciones particulares, doy con el sitio, el cual resulta tener una arquitectura subterránea. Muy curiosa, tiene sentido como parte de la Orden del Dragón.

Ejemplo que encontré:

"Knock, knock", se escucha al tocar lo que parece la entrada principal. Saco la carta de invitación para devolverla--ehh, disculpen, creo que he recibido esto por error--debería haber venido más temprano, pero me percaté de la invitación tardíamente y hasta ahora llego. Me imagino que esto ha sido en vano.

Matvey, Adael y Markus me habían dejado bastantes tareas pendientes para trabajar con el árbol. Avanzaba poco a poco y, el tema del censo tuve que dejarlo de nuevo aparcado durante esa semana en la que tocaba volver a estudiar el amplificador que Markus había preparado para luchar contra los satélites antimagia de SAM. Estaba concienzudamente centrada en ello cuando tocaron a la puerta y me sacaron de casa casi a rastras. La excusa de que la isla estaba en peligro no parecía haber funcionado mucho de modo, que a mitad de camino, cedí. Una tiene que hacerse la interesante durante un rato, si no, qué gracia tendría.

El primero que respondió fue Nichollas, que llevaba un tiempo rarísimo. ¿Desde cuándo había aprendido a usar la ironía? Suspiré y bajé la mirada al hablar de la seguridad de la isla, que, la verdad, dejaba mucho que desear. Aunque en verdad, tampoco había mucha diferencia del tiempo que pasamos en la base resistente. Al acabar mi hermano, seguí yo -La verdad es que yo no le conozco. Creo que es de los pocos. Era muy amigo de Justin, ¿verdad Nicho? Ya sabes, por lo de sus padres y eso…- Le expliqué a Iroh para ponerle en contexto, cargando en brazos una de esas bolsas llenas de alcohol. -Se está volviendo un chico muy atento. Creo que ha elegido muy bien la carrera, le auguro un buen futuro. ¿Y tú? ¿Volverás a estudiar?- Le pregunté ya casi en la puerta de Khan mientras esperábamos a que nos abriera.

Abrí mucho la boca, con gesto de molestia fingida cuando me soltó lo de la pandereta, dándole al moreno un golpe con mi hombro al suyo, dado que tenía las manos ocupadas -¡No voy a tocar la pandereta! Eso es renegarme a ser el árbol de la función de teatro del colegio- Bromeé, haciéndome la molestada. Al final la puerta se abrió y nos recibió el joven descendiente, al que saludé con una leve reverencia. Nichollas se lanzó hacia dentro -Muchas gracias por la invitación- Si es que nos había invitado, que la verdad no lo sabía. Si no, pues nos colamos -Hemos traído algo de beber- Indiqué alzando levemente la bolsa. Justin ya andaba por allí y que se lanzó a preguntarme por mi estado -Sí. La verdad me ha costado. Tengo que darle las gracias a Iroh y a Adael por ayudarme a salir del paso. Por cierto, he visto un sitio precioso en la isla. Podrías llevarte a Nichollas, a ver si deja de comportarse de esa forma tan … rara- Bajé el tono para compartir aquella confidencia con los más cercanos, aprovechando que Nichollas andaba con Lemoni, a la cual saludé desde la distancia. -¿Dónde puedo dejar esto?- Pregunté a Khan justo cuando tocaron la puerta y apareció al otro lado del umbral otro chico con pelo blanco. ¿Desde cuándo Justin tenía hermanos? -No te preocupes, nosotros justo acababamos de llegar- Le comenté al recién llegado, para incluirle en la conversación.

-No lo sé… lo cierto es que iba a pedirle al Descendiente de Rasputín que fuese mi tutor, pero mi motivación ha cambiado. Ya he encontrado a mis padres… pensé más en el descendiente Sayid pero… ya no tengo razón para aprender o mejorar mis habilidades de combate. No sé… no sé muy bien qué hacer ahora… - Le dijo a Belle con un gesto bastante perdido. Pero aquellas eran conversaciones para un día de… -¿Quieres ir a comer mañana?- Preguntó directamente, sin un ápice de vergüenza ni de tapujos mientras la miraba. Podría haberle dicho de cenar… pero le parecía un poco violento. Aún así… -Solos- Agregó para que fuera consciente de lo que le estaba pidiendo.

Luego el tema de seguridad hizo que alzará los hombros -Ningún lugar es seguro durante mucho tiempo. Esa utopía se vende muy buen y luego la gente quiere tomarla así que…Era de esperarse. Aparte esos dragones están detrás de la isla desde hace rato- pero tampoco quería molestarse en hablar de más sobre ese asunto porque la idea era desconectar, bailar…cantar y disfrutar durante toda la noche así que le vino bien su reacción sobre la pandereta, así que soltó una risa -Bueno… te puedo prestar mi bajo, si lo sabes tocar. La guitarra es el puesto indiscutible de Nicho así que… o es eso, o te tocará ser la cantante principal - Le dio las opciones antes de que abrieran la puerta.

-Hola! Soy Iroh… Nicho, Belle- los presento así de forma rápida antes de ir pasando mientras Nicho mencionaba su función -Hola Justin!- le saludó dándole una palmada en la espalda antes de ver a Nicho ir hacia Lemóni, a quien el no conocía -Hola! Soy Iroh, encantado- Le saludó con un movimiento de mano antes de llamar la atención de Nicho y señalar un sitio, luego se fue allí para empezar a instalarlo todo. Alzó la mirada cuando otro se unió a la fiesta y le saludó, desde la distancia, con la mano alzada antes de seguir instalando la batería.

Le hizo gracia el despiste de su amigo al no saber que venía a una fiesta, aunque tal vez era que todo empezaba a hacerle gracia con la segunda o tercera copa ya terminada. Hasta la tímida Lémoni parecía estar soltándose un poco, incluso riéndose. - Muucho mejor, ya no parece que estés asustada todo el rato. Te ríes muy bien, Lémoni. - le doy un par de palmaditas en el hombro antes de ir a rellenarse la copa otra vez, pero en esta ocasión dejó el vino para probar con algo más fuerte, el vodka.

- Que le den al examen de Rasputín, dile que estabas bebiendo vodka. - le rellenó la copa a ella antes de ponerse más él, haciendo una mueca al beber porque a eso tampoco estaba acostumbrado. Luego le echó el brazo por encima del hombro a Justin, mirándolo con cara rara por no sé qué cosa que dijo de gramos instantáneos. Lo miró muy serio durante un instante. - No, tío, drogas no. - aunque enseguida le entró la risa. Una cosa era beber, y otra que quisiera que le pasase droga. Sí que estaba de acuerdo en lo del cartel, pero tampoco lo había pensado. - ¿Chloe? ¿esa es la chica de tu trabajo de la que me has hablado alguna vez? - bueno, le había hablado de mucha gente, pero él le ponía atención y se acordaba de casi todo. También sabía los nombres de sus amigos, como Nicho y su hermana, así que le pareció bien que se uniesen a la fiesta. Se separó de Justin para ir a presentarse en condiciones al resto, repitiéndoles su nombre.

- ¡Músicos! ¿Sois una banda? ¿tenéis nombre? - preguntó emocionado de más con la idea, indicando a Belle que dejase en la mesa lo que había traído. Dio otro trago al vodka al ver que Nicho le pedía un baile a Lémoni, preguntándose de qué se conocían. - Ese quiere ligar. - le susurró a Justin en lo que él creía que era voz baja, porque aquello acababa de comenzar y ya podía decirse que empezaba a estar borracho. Miró extrañado al hombre peliblanco que se acercó también a la fiesta, aunque enseguida le pareció recordarlo de la batalla en la plaza del Vaticano. Era un guardia de Ouroboros, o eso creía.

- ¡Anda, si no te moriste allí! Pues pasa, pasa...bienvenido..¿Cómo te llamabas? ¡Estamos bebiendo vodka en honor a Rasputín!

Rápidamente, Lemóni empezaba a tener esa sensación de que su sentido de la vergüenza de repente había decidido qué se iba a tomar una siesta y la iba a dejar en piloto automático, pues aunque se le viera ruborizada, era cosa del alcohol y no de que estuviera nerviosa como siempre.

El primero con quien hablaba era Justin, que aunque acaba de conocerlo es su salvador, así que lo aprecia mucho... Y además es un chico tierno, eso le gusta mucho, incluso aunque lo vea fruncir el ceño no deja de ser de su agrado.

Oh vaaaaamos no seas tan modesto, eres muy amable y todo un héroe, además te ves bien hoy.~

Sí, le está coqueteando sin apenas darse cuenta ella misma de que lo hace, y estaba un poco distraída con eso, hasta que finalmente escucha una voz familiar y voltea para encontrarse con alguien que no esperaba.

Nichooooo.~

Se le hizo gracioso como iba hacia ella así que sin dudarlo correteó en su dirección procediendo a invadir su espacio personal para saludarlo con un abrazo, con su copa de vino vacía en una mano, y luego volteó hacia arriba, porque la diferencia de alturas no deja de ser bastante.

¿Cómo podría olvidarlo?, bailemos, que quien sabe cuando vaya a haber música otra vez.~

Le dió una miradita dulce y una sonrisa quizás un poquito más pícara de lo que toca, pero ya habiendose puesto ebria es lo que tiene.

También mientras está ocupada con el querido Nichollas, puede ver a gente saludandola, primero que nada una chica que le parece que está diciendo algo, pero entre la música y lo borracha qué está ni idea de que será lo que dice, a quien saluda de regreso.

Y también a alguien que se le presentó de forma más directa y también le hizo saber que la chica que vino con ellos se llamaba Belle, y claro, también ha vuelto a presentarle a Nicho, cosa ante la cual ella rió.

Oh, ya nos conocemos con Nicho... Y hola Iroh, es todo un gusto, ¿Qué tal?~

Y sí, no ha soltado a Nicho ni por un segundo mientras decía esto, tal cual fuera una garrapata, y por último pero no menos importante, tuvo comentarios de parte de Khan, el estimado y bien ponderado anfitrión de la fiesta.

Ay gracias, y tú te ves excelente, aunque a diferencia de mi caso, no es cosa del alcohol.~

Sí, tiene el alcohol tan arriba qué está haciendo chistes sobre lo borracha qué está, así se nota hasta que punto ha llegado, y claro, luego se ríe fuerte de lo que dice Khan.

Hay cielos... Creo que me matará y luego me resucitará por eso, pero valdrá la pena.~

Alzó la copa para que le diera vodka, y luego se lo ha tirado de golpe, para terminar soltando un caliente suspiro, eso fue intenso, ya puede apostar qué no se acordará de nada cuando despierte con resaca mañana.

Oye Nicho, ¿No quieres un poco? El alcohol es más divertido de lo que creí.~

Y sí, está tan ocupada tirándole los tejos a Nicho qué ni cuenta se ha dado de que los que vinieron son una banda.

La reacción del muchacho me sobresaltó, tampoco me esperaba que fuera el mismo que vi en la batalla del Vaticano--espera--soy arrastrado socialmente--Arturo--respondo sobre el nombre--pero ¿y el error de la invitación?--una respuesta a esa duda llega más adentro por medio de una chica que asegura que no hay problema, mientras alguien en el fondo me saluda y respondo con el mismo gesto más tímidamente--¿en serio?--pregunto con incredulidad, además, no conozco a nadie a la vista y salvo al chico del Vaticano.

Por el momento sigo la corriente, con cierta incomodidad. Y no es que no haya estado en este tipo de fiestas, he aprendido a desenvolverme en esta clase de eventos, sean de la categoría que sean. El detalle, suelen ser parte de alguna misión, rara vez lo hacía por placer--dices que la fiesta es por Rasputín, supongo que está bien--¿acaso hizo una gesta que mereciera esta fiesta?, aunque solo veo a chicos que rondan mi edad, más o menos--¿y cual es tu nombre?, que no tuve oportunidad de preguntarte la ocasión anterior--tengo que decir algo más para variar.

Caigo en la cuenta de que hay una especie de banda que se está preparando--¿Qué clase de música tocarán?--y me percato también de una chica empieza a sobresalir entre el grupo por su risa y evidente estado de embriaguez--espero que esto no pase a mayores.

¿Te ríes muy bien? ¿Es que acaso hay gente que se ría mal? A ver, hay risas un poco feas, pero… -Bueno, no sé si debería pasar del examen de Rasputín…- Observó a su amigo, que parecía estar un poco tocado con lo que fuera que estaba bebiendo sin entender bien qué es lo que estaba haciendo, o diciendo. -¿Drogas? No, es la...- Entonces se rio y me quedé con cara de idiota, hasta que reaccioné a los segundos y traté de dibujar una sonrisa incómoda. -Sí… esa- Respondí sin añadir muchos más detalles porque no quería que Lemoni se enterara de mucho, pero el rubor de las mejillas era claramente un delator muy potente. Tras lo cual nos dejó a la chica y a mí solos. -Gracias. Tu vestido también es muy bonito- ¿Cuánto habían bebido? Si acababan de empezar. Iba a preguntar cuando llegó la gente y me acerqué a saludar.

-Iroh. Belle. Nichollas, él es Khan. Presentación oficial- Y ya está. Con esa respuesta tan… fría, avanzó Nichollas al interior de la guarida dejándome con la palabra en la boca. Le seguí con la mirada sin moverme del sitio, observando con incredulidad lo que el pelirrojo estaba haciendo. Con la nariz arrugada (y el labio también) miré a Belle para que me explicara pero… Khan había dado la explicación que nadie quería escuchar. O bueno, yo al menos no quería -Me alegro que estéis mejor. Sí, Iroh es muy chico muy agradable… Voy a …- No tenía muchas ganas de seguir con aquella conversación. Hice un gesto con la mano y me separé de la puerta, ignorando la entrada de Arturo. Él no tenía ni idea de quién era yo por la cara que estaba poniendo de desconcierto, pero nos conocimos en la farmacia del hospital, y al hospital lo han llevado en muchas ocasiones tras las misiones. Qué rara estaba últimamente la gente (mejor dicho, cierta gente) con una desconocida que había aparecido de la noche a la mañana con su pelo verde. Quién podía asegurar que no era una enviada de los Pendragon… Nah. Suspiré frustrado porque esos pensamientos que estaba teniendo eran horribles, aprovechando que estaba solo en aquel momento, pues me había separado de todo el grupo para servirme algo de ensaladilla rusa que había probado con la receta de Yaroslav.

-El alcohol es más divertido de lo que creí. Espero que no pase a mayores. Teníamos un baile pendiente- Mascullaba de mal humor, después de haberme cerciorado de que estaba solo, sirviéndome la maldita y estúpida ensaladilla rusa en un plato. De plástico, para más inri. Consumiendo recursos y contaminando. Genial. Si lo llego a saber, me quedo en el hospital. Ya podría mandarme un patronus Oscurus en este momento para tener una escusa para largarme.

Tampoco di mucha importancia a la historia de Khan porque, a decir verdad, el tipo me daba un poco igual. Un niño pijo, de una familia pija que hacía una fiesta. Fin. Apenas le había conocido en persona, pero el peliblanco solo hablaba de él y de lo bien que lo pasaba en el hospital cuando estaban juntos y a veces me ponía la cabeza como un bombo. Por eso, directamente, después del correspondiente saludo, pasé del grupo de la entrada y me acerqué a la única cara que reconocía y que en aquel preciso momento me apetecía ver, más allá de pasar un rato divertido con Iroh. Es decir, la de Lemoni a la que recibí con los brazos abiertos después de su divertida carrerilla. -No esperaba menos. Hoy la música la traemos nosotros y tenemos un amplio, amplísimo repertorio- Respondí golpeando la caja de la guitarra -Ven, te presentaré- De modo que cambiamos de posición y dejé que se agarrara a mi brazo y fuimos hacia mi hermana, Iroh, Arturo, que en ese momento se incorporaba, y Khan. Justin se había apartado en ese momento, que se iba con cara de mohíno, ¿qué mosca le había picado? Ladeó la mirada, un segundo para verle irse, y volvió al grupo -Belle mi hermana. E Iroh, el mejor batería del mundo mundial. A él no le conozco, creo- Dije refiriéndome a Arturo.

El pequeño grupo se presentó e Iroh fue a preparar las cosas, enseguida iría con la guitarra, porque se quedó embobado con la risa de Lemoni, dado que la otra vez, no hubo risas, sino más bien cierta vergüenza. Me reí con ella cuando se manchó con el alcohol que se había servido antes -Claro, es una fiesta. Pero para eso nos lo tenemos que beber nosotros y no nuestra ropa- Reí fuerte por mi propia broma, por encima de las preguntas del pobre Arturo que hablaba con Khan, escuchando solo la frase del final. -Pues claro que tiene que pasar a mayores, ¡es una fiesta!- Hice el ademán de brindar con uno de esos vasos encantados que había por la sala, uno que estuviera bien lleno de cualquier cosa que no fuera agua.

-¿Con qué os gustaría que empezásemos? Una para calentar motores- Les dije mientras me acercaba a Iroh después de que terminara de prepararse para la noche. Saqué la guitarra de la funda y pregunté a Iroh con la mirada si estaba listo y en cuanto me respondió conjuré la guitarra española para que sonara a eléctrica y apagué la banda sonora de ambiente, luego habría más -Hagamos que hablen de esta fiesta hasta cuando estén dormidos- Le comenté a Iroh con cierta picardía antes de empezar a hacer sonar los primeros acordes de la canción que, por supuesto, ambos conocíamos más que de sobra.

Escuché atentamente a Iroh comentando qué es lo que pensaba sobre las clases. No añadí nada, hasta pasado unos segundos de ligera meditación No le convenció lo de Sayid, no me parecía el buen tipo que todos creían después de como trató a Arleen, de la cual, por cierto, hace tiempo que no sabía. Todavía tenían que saber cómo quitar los chips del cuello. Debería hacerme un listado de post-its como Markus -Puedes buscar otra motivación. U otra rama de trabajo- Me encogí de hombro cuando comentó lo de ser el alumno de Rasputín. En general, por lo que había visto en mis propias carnes, es que al final los descendientes están a cien cosas y muy poco pendientes de las clases. Ahora, todos han pasado por el hospital y las clases se pararon. De nuevo. Me quedé un poco desubicada con la pregunta de ir a comer, parpadeé un par de veces un tanto confusa y cuando iba a responder me soltó lo de “solos”. Bajé la mirada un poco avergonzada y luego la subí a buscar la mirada de Iroh, dibujando una sonrisa. Aquello no podía ser producto de la máquina, ¿podría serlo? No… no lo era. -Yo pongo hora y lugar, la comida es cosa tuya- Guiñé el ojo, pero luego tampoco seguimos con aquello porque estaba Nichollas rondando y tampoco era plan.

-¿Cantante?- Ni siquiera lo había pensado, de hecho me parecía una cosa que estaba muy fuera de tono, demasiado histriónico, muy del tipo de Nichollas. No rechacé la idea, pero tampoco la acepté pues me daba vergüenza. Lo estudiaría, quizás con una copilla de más. -Bueno, lo intentan- Respondí a Khan ante su pregunta que había quedado en el aire porque Nichollas se había ido directamente con la muchacha de pelo verde. Me gustaba su vestido, yo iba mucho más sencilla, con una camisa de tirantes negra, una sobrecamisa roja a cuadros y vaqueros. No respondí a lo de ligar, solo seguí con la mirada a mi hermano y la reacción de Justin. Vale, no estaba entendiendo nada, solo tenía un par de sospechas infundadas. -Adolescentes- Mascullé poniendo los ojos en blanco mientras dejaba las cosas en el sitio donde me había dicho Khan.

Me acerqué a Arturo, que parecía estar especialmente perdido con aquella gente con una copa en la mano y otra para él. Sonreí ante el comentario de Nichollas y quedé delante del escenario, para ver a Iroh montar la batería y sonreír tontamente -Creo que no nos han presentado. Mi nombre es Belle- Le dije a Arturo mientras le daba la copa. Conjuré una botella de cerveza fresca y me serví un buen trago espumoso -Dejemos que la fiesta fluya. Todos los que estamos aquí nos la merecemos, de una forma u otra. Quizás nos debamos a nosotros mismos un poco de diversión, ¿no?- Le comenté a Arturo antes de que empezaran a tocar, alzando la cerveza como para brindar.

-Sí, por eso estoy un poco perdido- No sabía bien qué rama tomar, ya vería luego. Notó la forma en la que le sorprendió lo de ir solos pero mantuvo su mirada en ella, no iba a permitir que le diera una excusa. Sonrió al verla alzar la vista hacia él -De acuerdo, es una cita- Le guiñó un ojo de lo más feliz.

-Ajam- Le soltó como respuesta a lo de cantante, no sabía si era buena o no pero que por intentar no quedara. La pregunta de Khan hizo que hiciera una mueca de “Wtf no lo había pensado” -Pueeees…no, porque todavía somos más un dueto que una banda. Hay plazas abiertas ¿Tocas algún instrumento?- Preguntó de buena onda mientras caminaba saludando a Lémoni de pasada -¡Encantadooo!...Ahora probaré que lo que dices es cierto- Le dijo a Nicho golpeando su hombro con un puño de forma suave y amistosa.

La batería no tardó mucho en estar lista, por lo que Iroh se sentía sumamente feliz. Era la primera vez que iba a tocar desde que se había recuperado totalmente y…quería hacerlo, lo deseaba totalmente. Levitó un trago para él que dejó luego en el piso mientras se sentaba, haciendo que la baqueta girara entre sus dedos mientras Nicho elegía la canción. Le pareció IDEAL. Antes de empezar levitó la pandereta hacia Belle con una sonrisa pícara, poco después empezó a tocar y a hacerle los coros a Nicho.

En algún punto, Iroh quitó la mirada de Belle para cerrar los ojos y dejarse llevar por la música. Cada golpe le daba la vida, sentía su vibración por todo el cuerpo, dándole la bienvenida después de meses alejado de la música así que el moreno dio todo lo que tenía para seguir el ritmo de la canción hasta que finalmente acabó. Abrió los ojos con una sonrisa magistral y luego soltó un grito eufórico porque…Lo necesitaba. Tras eso, se inclinó y tomó el vaso para beber un largo trago.

-¡Otra!- Dijo golpeando las baquetas una contra otra para luego marcar el ritmo al que sabía que Nicho le seguiría. Aunque esta luego vendría con un solo de bateria que el necesitaba...para descargar

- No hay error de invitación...he mandado muchas, a mucha gente, pero no todos han venido. - le aclaró a Arturo para que dejase de pensar que estaba ahí por error. - Khan Tepes. - se presentó orgulloso de su apellido, entregándole después una botella a Arturo para que bebiese. - Hasta que no salgas a rastras no te vas. - le respondió sonriente a lo de que la fiesta no pasase a mayores. Luego lo dejó hablando con Belle, a la que ya le había presentado antes Justin. ¿O la conocía ya? ni puñetera idea.

Con todas las presentaciones hechas con todos los invitados ya podía sentirse satisfecho. Su primera fiesta en casa no había sido ser un completo fiasco porque al menos ya eran más de tres. Además, hasta los más tímidos se estaban animando. Le pareció que Lémoni estaba particularmente divertida, entre tirarse la copa encima y bromear con lo que haría Rasputín. - O te hará limpiar su casa entera junto a su ghoul, ¿lo has visto? ese sabe coosas...- terminó con borrachil y misterioso tono, apurando su copa una vez más. La velocidad con la que estaba bebiendo ayudaba a que se le subiera más rápido, pero la sensación de euforia le impedía darse cuenta. Además, estaba muy motivado con eso de que una banda hubiese ido a tocar a su casa.

- ¡Pues necesitáis un nombre, y camisetas con vuestros nombres! esta noche no os vais de aquí sin buscar uno. Los...Ouroputienses... - le dio la risa absurda por su burda ocurrencia, pero después frunció el ceño un poco más serio cuando le dijo lo del instrumento. - Sólo sé tocar la toacă...a los dragones les gustaba. - eso le puso algo triste, recordar a los dragones que ya no estaban, y a quien le había enseñado a tocar ese instrumento y muchas cosas más...su padre. Suspiró modo mustio mientras se echaba otra copa de vodka para seguir bebiendo, mirando de reojo la reacción de Justin después de separarse del par de dos que estaban ligoteando. Nadie le había respondido claramente, pero sí, estaban haciéndolo. Canturreó en voz alta y con pésima entonación las canciones del dueto, mientras se movía hacia la zona en la que estaba su amigo con la ensaladilla. Se chocó contra su hombro al alcanzarlo
y perdió un poco el equilibrio, así que se agarró a su brazo momentáneamente. - Eyy ¿Por qué estás aquí apartado? ¿te pasa algo? - después le quitó la ensaladilla para dejarla en la mesa, como si fuese venenosa.

La verdad sea dicha, considerando lo ebria qué estaba para cuando todos llegaron, era fácil creer que tenía un problema con el alcohol, si solo supieran qué todo lo que ocurre era simplemente producto de que su tolerancia hacía este es básicamente nula, y además, también la desinhibe, y por encima de todo, el hecho de que la celebren no ayuda... La insta a pensar que no está nada mal qué esté hasta arriba del alcohol como está ahora mismo.

Tan a gusto estaba, que literalmente no fue capaz de notar el disgusto de Justin, todo estaba muy confuso...

Relaaaajate, si el maestro aún piensa hacer el examen, seguro me hablará, al final es él quien se ha retrasado.~

Ella estuvo lista para recibir el examen en todo momento... Pero al final cuando su maestro volvió, simplemente se volvió a ir, por lo cual solo asume qué quizás no le da la vida al final o algo así.

Aw, gracias.~

Y se fue... Pero supone que está bien, es una fiesta, asume qué quiere interactuar con otra gente, ni siquiera se le pasa por la cabeza la somera posibilidad de que pueda estar mal.

Y en todo caso, ella tenía otra cosa que hacer, concretamente, seguir al lado de Nicho, que aunque todos en la fiesta le gustan en su justa medida, él tiene algo... Que la trae más pillada, quizás es más un capricho de adolescente, es el primer chico lindo con el que a tratado al final.

Ohhhh... ¿Son una bandaaaa?~

Preguntó con curiosidad, porque sí, hasta ese momento no se había dado ni cuenta, porque es así y poco se puede hacer al respecto, pero bueno, cuando la llevó a presentar, se aferró a su brazo, e incluso se recargó ya que se lo permitía.

Hola, hola, yo soy Lemóni.~ aunque creo que ya nos presentamos.~

Pero sí Nicho quería que los conociera de nuevo, no ve ningún motivo para negarse, en fin, más a gusto imposible, se encuentra muy bien, tan bien, que incluso se rió a carcajadas con la broma de este, sin importarle demasiado, tanto así que respondió.

Qué más daaaa, además, prefiero el vino, es más rico.~

Comentó airadamente mientras que se sostenía de él, no recordó servirse más alcohol ella misma, pero igual estaría ebria fácilmente toda la noche.

También por ahí había notado que Iroh le respondió, pero solo de pasada, tenía que hacer cosas de música y bandas, o al menos eso es lo que su mente nublada por el alcohol ha pensado,  así que difícilmente la suya es una perspectiva confiable.

Pero luego Nicho se fue con su banda, a hacer sus cosas musicales, cosa que eso hizo que mire con curiosidad, preguntándose qué tipo de música tocarán, y en eso nora qué Khan le habla, así que ella da vuelta y le contesta.

Supongo que también, aunque normalmente no es tan amable...~

Respondió con toda la naturalidad del mundo.

Sí debe sabeeer, y también esa revenant del otro día, daba miedo.~

Y finalmente... Cuando Khan también se fue, Lemóni procedió a bailar con la música, cosa que se le da sorprendentemente bien, aunque ni siquiera sabe como se bailan las canciones, solo improvisa.

El anfitrión me explica el asunto de las cartas, y creo entender que, aunque ha sido azaroso, la llegada de esa carta no era un error al uso, por lo cual es válido que yo estuviera aquí. Se presenta como Tepes—¿?, ¿él de Transilvania?—la verdad no sé porque me sorprendo, sabiendo que la invitación era de dicho linaje—espero que no sea problema preguntar pero, ¿eres….—vampiro?, apenas llego y ya me van a sacar por preguntar cosas así. Su respuesta a mi comentario de que la fiesta no pase a mayores ya me preocupa—creo que ya sé por qué el destino me trajo aquí—con la misión de evitar un desastre.

Parece que no soy el único incomodo, pues está otro muchacho con un rostro de “quiero irme”. Lo habrán llevado por presión de grupo o algo por el estilo. Pero los demás no parecían percatarse de este detalle, es más, algunos ya mostraban indicios de haberse pasado de copas.

Mientras Khan me explicaba, se acercó el muchacho del fondo, uno pelirrojo, en compañía de una chica de aspecto más delicado (la que había soltado esa particular risa), quien hizo unas presentaciones para la acompañante, siendo la pelimorada la hermana del presentador, y el otro chico el baterista de la banda. A mí no me reconoce obviamente—normal, inmigrante interdimensional involuntario, me sorprendería que alguien me conociera—respondo sin más detalles.

En ello, la muchacha, la hermana del pelirrojo me ofreció una copa, la cual tomé y escuché su presentación—un gusto, yo soy Arturo—parece que soy bien recibido, más de lo que hubiera esperado. La incomodidad se está diluyendo un poco y tomo una decisión—¡Qué demonios, Carpe diem!—respondo ante lo dicho por Belle sobre la auto-mérito y tomo mi propio trago—¡fuaahh!—ay no, espero que no hayan visto ese video.

Tepes platicando con la chica de pelo verde, quien se presentó como Lemóni, que tierno, habla algo que me llama la atención—¿dijiste ghoul?, yo conozco a uno que tiene un puesto de tacos en Londres, y para variar, se llama Dante—agrego intentando aportar, como mínimo, un comentario divertido. El nombre para la banda que sugirió Khan, por simple que haya sido, también me provocó una ligera risa, pues el humor absurdo también me gusta.

El pelirrojo escuchó mi último comentario sobre la dirección de la fiesta—mientras no se convierta en un Projecto X o un ¿Qué paso ayer?, todo estará bien—replico con cierta jocosidad, pero siendo sincero, no quiero imaginarme como podría acabar la fiesta si esta involucra chicos alcoholizados y con poderes mágicos. Él parece responder con la acción de empinarse la bebida de turno que lleva y se va a prepararse para el mini-concierto. Una vez listo, empezaron la canción, el cual desconozco, pero no me desagrada y la disfruto como algo nuevo, sin llegar a mi lista de intereses musicales. Cuando terminan la segunda canción, me permito sugerir—¿de casualidad no tienen a “Boss Of Me” en su repertorio?—¿todavía dan Malcom el del Medio por estas fechas?.

¿Revenant?—la mención de Lemoni, capta mi atención—¿hay revenants en la isla?—pregunto mientras tomo un poco más. Con respecto al alcohol, no es problema para mí, conozco mis límites y tengo cierta disciplina para no cruzarlos, no quiero terminar con un tigre en mi cuarto, aunque en esta versión de la historia seria alguna bestia mágica peligrosa.