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Si tienes un anuncio, aparte de rolear que lo cuelgas aquí, envía un mp a Admin con el contenido de dicho anuncio para que editemos y aparezca aquí. Cuando encuentres lo que andabas buscando, ¡mandanos otro mp o avisanos para que retiremos el anuncio y no se acumulen papeles en el tablon!
Se busca técnico para misión peligrosa. La recompensa será todo aquello que el interesado pueda conseguir.
Preguntar por Rose.
Septiembre 2037
Se buscan mercenarios para diferentes labores, tales como defensa, infiltración, espionaje y realización de nuevos contactos y redes. Se pide discreción. Buen pago, tanto en dinero como en objetos. Se ofrecen también los servicios de un alquimista, desarrollador mágico y con conocimientos que fusionan el uso de la magia y la tecnología. Trabajo para cualquier bando que lo solicite. Los honorarios han de ser de acuerdo al trabajo realizado.
Interesados, para cualquiera de las dos propuestas, contactar aquí con T.G.S© HARDROCK
"Se buscan mercenarios/cazarrecompensas para mision de búsqueda y captura. Pagamos bien. Basta con que no te caigan bien los soldados del ejército."
Preguntad por Rybar Dvorak© HARDROCK
Oscura taberna que tuvo renombre en el pasado por ser un local al más puro estilo rockero. A día de hoy se ha transformado hasta convertirse en una taberna en la que se tratan asuntos turbios. Trapicheos, encargos, mercado negro, recompensas por búsqueda y captura. Los mercenarios suelen acudir aquí en busca de encargos y misiones, el sitio de encuentro para aquellos que se venden al mejor postor y para aquellos que desean encontrarlos. Se valora la discreción, ya que éste es un lugar perfecto para hacer una redada.
Para conocer las misiones y búsquedas de personal existe un tablón de madera colgado al fondo de la taberna, para aquellos que quieran dejar un encargo o cogerlo.
Para conocer las misiones y búsquedas de personal existe un tablón de madera colgado al fondo de la taberna, para aquellos que quieran dejar un encargo o cogerlo.
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ANUNCIOS COLGADOS EN EL TABLÓN
Septiembre 2037
Se busca técnico para misión peligrosa. La recompensa será todo aquello que el interesado pueda conseguir.
Preguntar por Rose.
Septiembre 2037
Se buscan mercenarios para diferentes labores, tales como defensa, infiltración, espionaje y realización de nuevos contactos y redes. Se pide discreción. Buen pago, tanto en dinero como en objetos. Se ofrecen también los servicios de un alquimista, desarrollador mágico y con conocimientos que fusionan el uso de la magia y la tecnología. Trabajo para cualquier bando que lo solicite. Los honorarios han de ser de acuerdo al trabajo realizado.
Interesados, para cualquiera de las dos propuestas, contactar aquí con T.G.S
Septiembre 2037
"Se buscan mercenarios/cazarrecompensas para mision de búsqueda y captura. Pagamos bien. Basta con que no te caigan bien los soldados del ejército."
Preguntad por Rybar Dvorak
Una vez afuera, seguí pegando caladas a ese cigarro, mientras el ritmo cardíaco y la respiración volvían al estado de reposo. No asi tanto mi cabeza....
Cerré los ojos un momento al oír a Bucky. Pero no parecía tener ganas de más. Bien. Su mejor pelea de bar? Miré hacia abajo y me taponé con el pulgar un lado de la nariz, expulsando aire con fuerza para tirar un coagulo de sangre que se me habia quedado ahi y me estaba molestando.
- Hm. Yo las he tenido mejores. - contesté con cierto tono sarcástico. Desvié la mirada por fin a él, mirando que siguiera de una pieza....mas o menos. Quizá, por lo menos, nos habia servido para liberar las tensiones de la base militar, ese asuntillo de las pullas que no habiamos podido resolver a hostia limpia alli en la enfermeria porque....habria estado mal visto. - Es lo bueno de este sitio. Vía libre.
Me encogí de hombros y volví a fumar, acordándome del momento en el que casi saco la pistola. A él le habria pasado lo mismo con la idea de partirme el cuello, fijo.
- Ahora ya sé hasta donde puedes llegar y donde te pones el límite.
Ian salió con....cara de estar más centrado. Apaleado, eso si. Y reafirmandose en sus palabras. Me dejé el cigarrillo en la boca, sabiendo que tenía razón.
- ¿Qué sabes tú de los Pendragon? Y sobre todo...qué sabes de mi hijo?
Cerré los ojos un momento al oír a Bucky. Pero no parecía tener ganas de más. Bien. Su mejor pelea de bar? Miré hacia abajo y me taponé con el pulgar un lado de la nariz, expulsando aire con fuerza para tirar un coagulo de sangre que se me habia quedado ahi y me estaba molestando.
- Hm. Yo las he tenido mejores. - contesté con cierto tono sarcástico. Desvié la mirada por fin a él, mirando que siguiera de una pieza....mas o menos. Quizá, por lo menos, nos habia servido para liberar las tensiones de la base militar, ese asuntillo de las pullas que no habiamos podido resolver a hostia limpia alli en la enfermeria porque....habria estado mal visto. - Es lo bueno de este sitio. Vía libre.
Me encogí de hombros y volví a fumar, acordándome del momento en el que casi saco la pistola. A él le habria pasado lo mismo con la idea de partirme el cuello, fijo.
- Ahora ya sé hasta donde puedes llegar y donde te pones el límite.
Ian salió con....cara de estar más centrado. Apaleado, eso si. Y reafirmandose en sus palabras. Me dejé el cigarrillo en la boca, sabiendo que tenía razón.
- ¿Qué sabes tú de los Pendragon? Y sobre todo...qué sabes de mi hijo?
Rena se despidió de mi cuando salimos del local, y le ofrecí mi ayuda para cualquier cosa en el futuro. Mientras se marchaba, suspiré y miré fijamente a Thalos cuando me contestó al comentario sobre la pelea. Al parecer, el era todo un experto en tenerlas, por lo que le dediqué una sonrisa torcida.
-Suelo pasar bastante desapercibido, esta noche ha sido una excepción. Bueno, y lo que pasó hace unos días. Dos errores que no volveré a cometer.
Cuando me dijo que ahora ya sabía hasta donde sería capaz de llevar, le miré muy serio, cruzándome de brazos. Me dolía todo, pero intenté no reflejarlo en mi rostro.
-Sé que los Mercenarios tenemos muy mala fama, pero no soy de los que va por ahí matando alegremente por una pelea de bar. He adoptado su forma de vida, pero no soy tan capullo, te sorprenderías, de hecho.
Aunque había dejado atrás a James Buchanan Barnes, soldado leal a la antigua Alianza humana, Bucky Barnes, el Mercenario de adopción, conservaba ciertos baremos morales y ciertos límites, como bien había señalado Thalos. Y, dependiendo de para lo que quisiera contratarme, si finalmente lo hacía, me lo pensaría muy bien.
Entonces Ian salió fuera, dirigiéndose a Thalos, sobre todo. Sus aparentes locuras dichas a voz en grito ahí dentro, no lo eran, según él, y yo le creía, por lo poco que sabíamos. Y como Thalos se lanzó de nuevo a por él, verbalmente, por ahora, me dediqué a quedarme en silencio y dejarles discutir. Quizá acabase recogiendo mas información valiosa sin tener que conseguirla de mala manera. Imaginé que Thalos se refería al bebé con el que le vi aquel día en la enfermería.
Neo Londres ► Periferia de Neo Londres►Bucky ►Con Thalos e Ian-Suelo pasar bastante desapercibido, esta noche ha sido una excepción. Bueno, y lo que pasó hace unos días. Dos errores que no volveré a cometer.
Cuando me dijo que ahora ya sabía hasta donde sería capaz de llevar, le miré muy serio, cruzándome de brazos. Me dolía todo, pero intenté no reflejarlo en mi rostro.
-Sé que los Mercenarios tenemos muy mala fama, pero no soy de los que va por ahí matando alegremente por una pelea de bar. He adoptado su forma de vida, pero no soy tan capullo, te sorprenderías, de hecho.
Aunque había dejado atrás a James Buchanan Barnes, soldado leal a la antigua Alianza humana, Bucky Barnes, el Mercenario de adopción, conservaba ciertos baremos morales y ciertos límites, como bien había señalado Thalos. Y, dependiendo de para lo que quisiera contratarme, si finalmente lo hacía, me lo pensaría muy bien.
Entonces Ian salió fuera, dirigiéndose a Thalos, sobre todo. Sus aparentes locuras dichas a voz en grito ahí dentro, no lo eran, según él, y yo le creía, por lo poco que sabíamos. Y como Thalos se lanzó de nuevo a por él, verbalmente, por ahora, me dediqué a quedarme en silencio y dejarles discutir. Quizá acabase recogiendo mas información valiosa sin tener que conseguirla de mala manera. Imaginé que Thalos se refería al bebé con el que le vi aquel día en la enfermería.
Eché una mirada de reojo a ambos, teniendo la sensación de haber interrumpido algo. Ninguno parecía ya tan hostil con el otro, así que puede que darse unos cuantos golpes les hubiese apaciguado un poco. En cualquier caso había sido un despropósito de noche, y ya debían ser más de las dos o las tres. Hasta la androide peliblanca se había marchado ya. Antes de empezar hablar me senté en un barril medio roto que estaba tirado de lado en el suelo, resoplando con cara de estar muy harto de todo.
- Ojalá no supiese nada en absoluto de los Pendragon...- mascullé por lo bajo con frustración, aunque intentando centrarme en lo que quería saber Thalos de su hijo. Tal vez sirviese de ayuda contarle lo que me había dicho Azahar, eliminando del relato la parte de que Reed y ella se habían liado. Eso eran asuntos privados. - Tu hijo estaba herido y ella fue a ayudarlo. Al parecer él tiene un maestro que los convocó, y se los llevó por un portal. Acabaron en una guarida con críos extraños...creo que dijo un leprechaun, un tauren, una kelpie, una tipa demonio....y Reed. Dijo que el viejo decrépito les cortaba el rollo, pero que cuando estaban solos parecían una familia rarita. Me dijo que el sitio no paraba de temblar, que había un ojo de dragon enorme y que ese bicho también debía serlo. - me detuve un momento para tomar aire, haciendo una mueca de molestia porque ahora sí que se notaban más las hostias que me había llevado por la espalda. Bajé un poco más la voz, por si acaso había alguien cerca escuchando. Ya había tenido suficiente con todo lo que había dicho antes en la taberna.
- Se supone que el maestro de tu hijo es un mago oscuro...y un tal Gideon dijo que había ido a visitarlos un mago de sangre para curar a los casos perdidos. Ahí hablaron del apellido Pendragon, así que creo que están relacionados. Puede que ese maestro esté al servicio de los Pendragon. Eso es todo lo que sé. - recordé entonces que Bucky quería que también le contase algo más del árbol, que también estaba relacionado con los Pendragon. - Pues esos tarados han puesto un árbol parásito en...bueno, un sitio que no conoces, una isla secreta. Esa cosa tiene voluntad propia y pide sangre. - y lo peor es que Catherine estaba involucrada en todo eso, aunque no quisiera. Negué con la cabeza para mí mismo, poniéndome en pie porque ya era hora de largarme de allí. Al menos ya les había dado algo de información de la que tenía. - Yo me voy ya, me queda un buen camino hasta casa y no me encuentro muy bien. Así que si no queréis saber nada más ni tenéis una maldita idea de cómo vencer a esos gilipollas...-
---------------------
7/8
- Ojalá no supiese nada en absoluto de los Pendragon...- mascullé por lo bajo con frustración, aunque intentando centrarme en lo que quería saber Thalos de su hijo. Tal vez sirviese de ayuda contarle lo que me había dicho Azahar, eliminando del relato la parte de que Reed y ella se habían liado. Eso eran asuntos privados. - Tu hijo estaba herido y ella fue a ayudarlo. Al parecer él tiene un maestro que los convocó, y se los llevó por un portal. Acabaron en una guarida con críos extraños...creo que dijo un leprechaun, un tauren, una kelpie, una tipa demonio....y Reed. Dijo que el viejo decrépito les cortaba el rollo, pero que cuando estaban solos parecían una familia rarita. Me dijo que el sitio no paraba de temblar, que había un ojo de dragon enorme y que ese bicho también debía serlo. - me detuve un momento para tomar aire, haciendo una mueca de molestia porque ahora sí que se notaban más las hostias que me había llevado por la espalda. Bajé un poco más la voz, por si acaso había alguien cerca escuchando. Ya había tenido suficiente con todo lo que había dicho antes en la taberna.
- Se supone que el maestro de tu hijo es un mago oscuro...y un tal Gideon dijo que había ido a visitarlos un mago de sangre para curar a los casos perdidos. Ahí hablaron del apellido Pendragon, así que creo que están relacionados. Puede que ese maestro esté al servicio de los Pendragon. Eso es todo lo que sé. - recordé entonces que Bucky quería que también le contase algo más del árbol, que también estaba relacionado con los Pendragon. - Pues esos tarados han puesto un árbol parásito en...bueno, un sitio que no conoces, una isla secreta. Esa cosa tiene voluntad propia y pide sangre. - y lo peor es que Catherine estaba involucrada en todo eso, aunque no quisiera. Negué con la cabeza para mí mismo, poniéndome en pie porque ya era hora de largarme de allí. Al menos ya les había dado algo de información de la que tenía. - Yo me voy ya, me queda un buen camino hasta casa y no me encuentro muy bien. Así que si no queréis saber nada más ni tenéis una maldita idea de cómo vencer a esos gilipollas...-
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7/8
Cuando me acabé el cigarro lo tiré al suelo y lo pisé con la bota, emitiendo un sonido de comprensión o de , al menos, estar escuchando a Bucky cuando me dijo lo de los dos errores en poco tiempo. No me creía eso de que soliera pasar desapercibido....no con esas pintas, ese brazo y esos andares, que se notaba a la legua que habia sido militar.
- No lo sé. - le respondí a lo de sorprenderme. - No me gustan los mentirosos. Lo eres? - lo miré de reojo. - Dejé la Alianza por sus mentiras. O me echaron por descubrirlas, qué se yo.
"como si me quisiera acordar..."
Pateé la colilla lejos de nosotros y guardé las manos en los bolsillos de la chaqueta, buscando algo en realidad.
- Me da igual que seas un capullo, mientras no seas un mentiroso. - encontré lo que buscaba en mi bolsillo, no era dificil tampoco.... y luego desvié la vista a Ian prestandole atencion.
"parece que se va a caer de un momento a otro"
Mi rostro se ensombreció cuando mencionó a ese mago oscuro, el maestro de Reed....al servicio de los Pendragon.... toda aquella movida, todo eso, el asunto de esos magos, de sus intrigas, me quedaba grande....me quedaba enorme....yo no podía. Me pasé una mano por la cara antes de volver a guardarla en su bolsillo y dejarla quieta, resoplé y miré hacia arriba, murmurando para mi mismo.
- Debí haberle separado la cabeza del cuello. - de eso ya no habia vuelta atrás, verdad?
Dejé de divagar, volviendo a prestar atencion cuando habló de la isla.
- Por eso tuvimos que evacuar, verdad? Joder....desde que se llevaron a Erika sabía que esa isla no era segura. Entran y salen como quieren. - negué con la cabeza, no tenia ni zorra de como vencerles, encontrarlos, enfrentarme a ellos. Era demasiado y yo solo quería a uno: al maestro.
- Vete a casa. - le hice un gesto a Ian con la cabeza, y saqué la capsula, desplegando la harley de Johan, pues yo tambien me iba a largar ya. Antes me giré a Bucky, y le entregué lo que habia estado buscando en el bolsillo. Un busca de la Alianza, tecnologia sencilla, sin mucha historia. - Si te interesa la misión de infiltración en los Reales, no lo pierdas. Te contactaré a través de eso y veremos los detalles.
Se lo puse en la mano y me fui a la moto, arrancándola. El olor a combustible y el ruido del motor siempre me hacían espabilar un poco. Le metí puño tras embragar, y me alejé de alli a toda velocidad.
- No lo sé. - le respondí a lo de sorprenderme. - No me gustan los mentirosos. Lo eres? - lo miré de reojo. - Dejé la Alianza por sus mentiras. O me echaron por descubrirlas, qué se yo.
"como si me quisiera acordar..."
Pateé la colilla lejos de nosotros y guardé las manos en los bolsillos de la chaqueta, buscando algo en realidad.
- Me da igual que seas un capullo, mientras no seas un mentiroso. - encontré lo que buscaba en mi bolsillo, no era dificil tampoco.... y luego desvié la vista a Ian prestandole atencion.
"parece que se va a caer de un momento a otro"
Mi rostro se ensombreció cuando mencionó a ese mago oscuro, el maestro de Reed....al servicio de los Pendragon.... toda aquella movida, todo eso, el asunto de esos magos, de sus intrigas, me quedaba grande....me quedaba enorme....yo no podía. Me pasé una mano por la cara antes de volver a guardarla en su bolsillo y dejarla quieta, resoplé y miré hacia arriba, murmurando para mi mismo.
- Debí haberle separado la cabeza del cuello. - de eso ya no habia vuelta atrás, verdad?
Dejé de divagar, volviendo a prestar atencion cuando habló de la isla.
- Por eso tuvimos que evacuar, verdad? Joder....desde que se llevaron a Erika sabía que esa isla no era segura. Entran y salen como quieren. - negué con la cabeza, no tenia ni zorra de como vencerles, encontrarlos, enfrentarme a ellos. Era demasiado y yo solo quería a uno: al maestro.
- Vete a casa. - le hice un gesto a Ian con la cabeza, y saqué la capsula, desplegando la harley de Johan, pues yo tambien me iba a largar ya. Antes me giré a Bucky, y le entregué lo que habia estado buscando en el bolsillo. Un busca de la Alianza, tecnologia sencilla, sin mucha historia. - Si te interesa la misión de infiltración en los Reales, no lo pierdas. Te contactaré a través de eso y veremos los detalles.
Se lo puse en la mano y me fui a la moto, arrancándola. El olor a combustible y el ruido del motor siempre me hacían espabilar un poco. Le metí puño tras embragar, y me alejé de alli a toda velocidad.
Thalos y yo no habíamos empezado con mal pie, pero la pelea parecía haber puesto las cosas en su sitio, más o menos, porque acto seguido, me salió con otra preguntita. Que si era un mentiroso. ¿Y qué podía responder a eso? Nadie decía siempre la verdad, algunas eran mentiras inofensivas, o para conseguir algo puntual. Pero sabia perfectamente a que mentiras se refería. A las que podían joderle la vida a los demás.
-Mentirle a la cara a la gente es parte de lo que soy, cuando es necesario, por supuesto. Pero no, no soy un mentiroso.
Lo dije bastante orgulloso, la verdad. Como cualquier humano, mentía, claro está, pero las mentiras más cabronas, intentaba usarlas solo cuando era estrictamente necesario. Thalos estuvo peleándose con el interior de sus bolsillos unos instantes mientras Ian terminaba por explicarnos lo que Thalos y yo le habíamos pedido. Lo del árbol pintaba peor de lo que nos imaginábamos, pero, aunque parecía algo muy lejano para los humanos normales y corrientes, estaba claro que los todo poderosos magos que supuestamente, deberían estar controlándolo, estaban teniéndolo difícil. Pero por ahora, me guardé mi opinión.
Thalos se despidió de nosotros a su manera, montando en su preciosa Harley, que me habría encantado alabar, era preciosa. Pero aún era pronto para ser tan “amiguitos” Me entregó un busca y me indicó que contactaría conmigo en breve. Asentí con la cabeza y lo guardé, viéndole marchar con ese inconfundible olor a gasolina y el impresionante ruido de esas adorables motos.
Me giré hacía Ian entonces, ofreciéndole mi mano para ayudarle a erguirse. Ambos estábamos a punto de caer redondos, por lo que volví a ofrecerme para llevarle, si quería.
-Tengo mi moto aquí mismo, puedo dejarte donde quieras.
Me dirigí hasta el callejón adyacente, donde a había dejado aparcada. Me aseguré que estuviera incólume y monté, arrancándola mientras Ian se decidía a subir.
Neo Londres ► Periferia de Neo Londres►Bucky ►Con Thalos e Ian-Mentirle a la cara a la gente es parte de lo que soy, cuando es necesario, por supuesto. Pero no, no soy un mentiroso.
Lo dije bastante orgulloso, la verdad. Como cualquier humano, mentía, claro está, pero las mentiras más cabronas, intentaba usarlas solo cuando era estrictamente necesario. Thalos estuvo peleándose con el interior de sus bolsillos unos instantes mientras Ian terminaba por explicarnos lo que Thalos y yo le habíamos pedido. Lo del árbol pintaba peor de lo que nos imaginábamos, pero, aunque parecía algo muy lejano para los humanos normales y corrientes, estaba claro que los todo poderosos magos que supuestamente, deberían estar controlándolo, estaban teniéndolo difícil. Pero por ahora, me guardé mi opinión.
Thalos se despidió de nosotros a su manera, montando en su preciosa Harley, que me habría encantado alabar, era preciosa. Pero aún era pronto para ser tan “amiguitos” Me entregó un busca y me indicó que contactaría conmigo en breve. Asentí con la cabeza y lo guardé, viéndole marchar con ese inconfundible olor a gasolina y el impresionante ruido de esas adorables motos.
Me giré hacía Ian entonces, ofreciéndole mi mano para ayudarle a erguirse. Ambos estábamos a punto de caer redondos, por lo que volví a ofrecerme para llevarle, si quería.
-Tengo mi moto aquí mismo, puedo dejarte donde quieras.
Me dirigí hasta el callejón adyacente, donde a había dejado aparcada. Me aseguré que estuviera incólume y monté, arrancándola mientras Ian se decidía a subir.
Hice muy poco caso a Thalos en el resto de cosas que dijo antes de marcharse, ni me despedí de él ni nada. No por enfado, sino porque ya había dicho todo lo que tenía que decir y no me apetecía nada hablar. Lo único que quería era tirarme en algún lado a morir, a ser posible tapándome con algo.
No rechacé la ayuda de Bucky para empezar a moverme, pero sí que dudé un momento sobre lo de la moto. Por un lado la experiencia me decía que no era buena idea confiar en desconocidos, pero la intuición lobuna me decía también que no parecía un mal tipo. Además, estaba seguro de que no podría llegar solo a pie a casa, y tampoco podía usar magia para desaparecerme de allí. Al final acepté, siguiéndolo hasta la moto con paso un tanto inestable.
- Vale...mi casa está a unos 10 kilómetros de aquí. Además...allí hay una sanadora que puede ayudarte. Te vendrá bien. - probablemente Anteia, porque Chloe no sabía dónde se metía. Sólo esperaba que en casa no me diesen sermones por llegar de ese modo. Me subí a la moto, indicándole la carretera por la que teníamos que ir. Cuando tuvo claro el destino arrancamos, abandonando el lugar.
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post 8/8
No rechacé la ayuda de Bucky para empezar a moverme, pero sí que dudé un momento sobre lo de la moto. Por un lado la experiencia me decía que no era buena idea confiar en desconocidos, pero la intuición lobuna me decía también que no parecía un mal tipo. Además, estaba seguro de que no podría llegar solo a pie a casa, y tampoco podía usar magia para desaparecerme de allí. Al final acepté, siguiéndolo hasta la moto con paso un tanto inestable.
- Vale...mi casa está a unos 10 kilómetros de aquí. Además...allí hay una sanadora que puede ayudarte. Te vendrá bien. - probablemente Anteia, porque Chloe no sabía dónde se metía. Sólo esperaba que en casa no me diesen sermones por llegar de ese modo. Me subí a la moto, indicándole la carretera por la que teníamos que ir. Cuando tuvo claro el destino arrancamos, abandonando el lugar.
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post 8/8
Aparecí cerca de aquella famosa Posada, antes de lo previsto a decir verdad porque....no me había esperado a que Gwen me mandase una respuesta afirmativa a mi ofrecimiento. Me había adelantado y habia venido aqui antes de tiempo. Pensé que, si no venía, al menos me airearía un poco y podría conocer gente diferente, beber cosas diferentes, emborracharme o algo asi...
Resoplé mirando al lugar y eché a andar hacia la puerta. Por qué me engañaba? No me apetecía para nada conocer a gente. Analicé el lugar con ojo crítico, tenía un no se qué qué se yo. Alargué la mano para abrir la puerta y entrar, pero en ese momento me asaltó un estupido pensamiento referente a la ultima vez que se me ocurrió tomar una decisión quizá poco pensada y salir del refugio...solo. Habia sido en Turín, y había acabado muy mal.
Me quedé paralizado un par de segundos mirando el pomo de la puerta, diciendome a mi mismo que no fuera cagueta. Al final, abrí y entré. Me arrepentí casi al instante, porque alli habia mucha gente (en verdad no tanta) pero quedarse en la puerta o darse la vuelta ahora seria como ...en serio? Oh dios, ademas la musica era pesima.
- estan matando gatitos con ese acordeón? Cómo odio el acordeón. - era cutre, y triste pero no triste hermoso, triste de patearle el estómago. Con cara de asco, intenté no arrimarme mucho a la gente, pedir algo de beber y...sentarme a revisar los cálculos que le habia dejado a Tesla, en unas servilletas, y a odiar la musica y criticarla en voz baja.
Resoplé mirando al lugar y eché a andar hacia la puerta. Por qué me engañaba? No me apetecía para nada conocer a gente. Analicé el lugar con ojo crítico, tenía un no se qué qué se yo. Alargué la mano para abrir la puerta y entrar, pero en ese momento me asaltó un estupido pensamiento referente a la ultima vez que se me ocurrió tomar una decisión quizá poco pensada y salir del refugio...solo. Habia sido en Turín, y había acabado muy mal.
Me quedé paralizado un par de segundos mirando el pomo de la puerta, diciendome a mi mismo que no fuera cagueta. Al final, abrí y entré. Me arrepentí casi al instante, porque alli habia mucha gente (en verdad no tanta) pero quedarse en la puerta o darse la vuelta ahora seria como ...en serio? Oh dios, ademas la musica era pesima.
- estan matando gatitos con ese acordeón? Cómo odio el acordeón. - era cutre, y triste pero no triste hermoso, triste de patearle el estómago. Con cara de asco, intenté no arrimarme mucho a la gente, pedir algo de beber y...sentarme a revisar los cálculos que le habia dejado a Tesla, en unas servilletas, y a odiar la musica y criticarla en voz baja.
Gwen Pendragón
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
Debería haberlo pensado mejor.
Apenas había pisado Londres en mi vida así que aparecí en uno de los pocos lugares que conocía y definitivamente me costó dar con la dirección de la posada. Muchos de los transeúntes que me encontré se mostraron reacios a hablar conmigo, otros directamente tomaban la dirección contraria según me veían e incluso alguno me disparó a varios metros de distancia. ¿Así era Londres?
Tal vez debía haber traído a Alud al menos aunque no sabía si era mejor que aquella reunión no constase para nadie más. Por suerte en algún momento di con un pelotón de soldados que amablemente me indicaron como llegar al lugar. Y ahí estaba frente a su puerta, observando la fachada y el cartel roído en el que apenas se podía leer ya "Posada de los muertos". "Encantador" Pensé mientras pasaba al interior.
Hubo un pequeño instante en el que la música paró según cerré la puerta a mi espalda. Muchos de los presentes me observaron por un momento y acto seguido todo volvió a la normalidad. Una normalidad bastante decepcionante a decir verdad.
Había estado en el salón de los vikingos y podía igualarse en roña en el suelo, olor a alcohol y sudor y personajes peculiares pero esto...esto era bastante más deprimente y la música era horrible.
Tomé aire profundamente buscando con la mirada hasta dar con DaVinci dirigiéndome a la mesa donde se encontraba sentado.-Descendiente-Saludé formalmente antes de tomar asiento.-Me alegra verle en buen estado.-En ese momento alguien, el mesonero supongo, plantó una jarra enorme de cerveza frente a mi. Alcé la mirada al hombre. Yo no había pedido nada ¿Por qué me servía? Fruncí el ceño y el hombre habló en un inglés bastante cerrado que no entendí. Se marchó sin más y volví a posar la vista en Giordano apretando mis labios mientras colocaba algún mechón de mi pelo tras mi oreja.-Gracias por atender mi mensaje.
Apenas había pisado Londres en mi vida así que aparecí en uno de los pocos lugares que conocía y definitivamente me costó dar con la dirección de la posada. Muchos de los transeúntes que me encontré se mostraron reacios a hablar conmigo, otros directamente tomaban la dirección contraria según me veían e incluso alguno me disparó a varios metros de distancia. ¿Así era Londres?
Tal vez debía haber traído a Alud al menos aunque no sabía si era mejor que aquella reunión no constase para nadie más. Por suerte en algún momento di con un pelotón de soldados que amablemente me indicaron como llegar al lugar. Y ahí estaba frente a su puerta, observando la fachada y el cartel roído en el que apenas se podía leer ya "Posada de los muertos". "Encantador" Pensé mientras pasaba al interior.
Hubo un pequeño instante en el que la música paró según cerré la puerta a mi espalda. Muchos de los presentes me observaron por un momento y acto seguido todo volvió a la normalidad. Una normalidad bastante decepcionante a decir verdad.
Había estado en el salón de los vikingos y podía igualarse en roña en el suelo, olor a alcohol y sudor y personajes peculiares pero esto...esto era bastante más deprimente y la música era horrible.
Tomé aire profundamente buscando con la mirada hasta dar con DaVinci dirigiéndome a la mesa donde se encontraba sentado.-Descendiente-Saludé formalmente antes de tomar asiento.-Me alegra verle en buen estado.-En ese momento alguien, el mesonero supongo, plantó una jarra enorme de cerveza frente a mi. Alcé la mirada al hombre. Yo no había pedido nada ¿Por qué me servía? Fruncí el ceño y el hombre habló en un inglés bastante cerrado que no entendí. Se marchó sin más y volví a posar la vista en Giordano apretando mis labios mientras colocaba algún mechón de mi pelo tras mi oreja.-Gracias por atender mi mensaje.
"definitivamente algo va mal"
Le daba vueltas por decima vez al asunto repasando los cálculos, mientras me terminaba la primera cerveza de sabor extraño pero pasable. Hubo un momento en el cual la musica cesó y di gracias a dios o a quien quisiera escucharme, pero volvió enseguida. Quise comprobar qué lo había causado y al levantar la cabeza vi a Gwen caminando hacia donde yo estaba. Así que al final no me pasaría toda la jornada solo, había decidido venir.
Había vuelto a los modales de llamarme "descendiente"?
- Gwen. - le dije esbozando una breve pero traviesa sonrisa que duró poco. - Igualmente, estás.... - con mucho mejor aspecto, debía de decir. Analicé bien su cara, varias veces. Ya la había visto desaparecer en Tintagel, pero ahora.... - Ni rastro de la marca? - quise asegurarme.
Cuando el mesero se fue, le hice una pequeña confidencia, haciendole un gesto para que se acercara y bajando la voz.
- Yo tampoco he entendido una mierda de lo que me ha dicho cuando le he pedido esto. - dije señalando con la mirada a mi jarra. Volví a echarme hacia atrás en mi asiento, remangándome por pura costumbre. - en fin! No hay de qué. Había pensado en contactarte de todos modos. Cómo estás? Cómo está Shyvanna? te ha costado encontrar el lugar? Ya, tampoco es lo que yo esperaba....
Le daba vueltas por decima vez al asunto repasando los cálculos, mientras me terminaba la primera cerveza de sabor extraño pero pasable. Hubo un momento en el cual la musica cesó y di gracias a dios o a quien quisiera escucharme, pero volvió enseguida. Quise comprobar qué lo había causado y al levantar la cabeza vi a Gwen caminando hacia donde yo estaba. Así que al final no me pasaría toda la jornada solo, había decidido venir.
Había vuelto a los modales de llamarme "descendiente"?
- Gwen. - le dije esbozando una breve pero traviesa sonrisa que duró poco. - Igualmente, estás.... - con mucho mejor aspecto, debía de decir. Analicé bien su cara, varias veces. Ya la había visto desaparecer en Tintagel, pero ahora.... - Ni rastro de la marca? - quise asegurarme.
Cuando el mesero se fue, le hice una pequeña confidencia, haciendole un gesto para que se acercara y bajando la voz.
- Yo tampoco he entendido una mierda de lo que me ha dicho cuando le he pedido esto. - dije señalando con la mirada a mi jarra. Volví a echarme hacia atrás en mi asiento, remangándome por pura costumbre. - en fin! No hay de qué. Había pensado en contactarte de todos modos. Cómo estás? Cómo está Shyvanna? te ha costado encontrar el lugar? Ya, tampoco es lo que yo esperaba....
Gwen Pendragón
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Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
Solté aire por la nariz en una especie de suspiro al escuchar mi nombre o mas bien al ver aquella sonrisa que no había sido muy común en nuestras interacciones, decidiendo entonces estirar la tela de mi vestido casualmente dándome una escusa para desviar la mirada.
Poco duró porque la alcé cuando no terminó aquella frase, curvando también mis cejas interrogativamente hasta que habló de la marca.-Oh..-Alcé la mano que había estado completamente teñida por la marca enseñándola junto al brazo e incluso aparté un poco la tela del pecho para mostrar la ausencia de maldición y asentí.-Tendremos que festejar la llegada al mundo del príncipe Zephyr y la princesa Aelín.-Sonreí sincera pero escuetamente, posando los antebrazos sobre la pegajosa mesa, cosa que hizo que mirase la superficie con cierto disgusto apartándolos de nuevo.-Estoy segura de que Catherine agradecería una visita.
Me incliné un poco para escuchar aquella confesión y solté aire nuevamente en una especie de risa silenciosa a la par que sonreía.-¿Hablan aquí algún tipo de idioma o jerga nueva?-Pregunté con sinceridad, cabía la posibilidad de que hubiesen desarrollado algún tipo de lenguaje durante aquellos años que habíamos pasado en la isla. Lo desconocía.
Volví a una posición más formal ante su repentino cambio de conversación. Parecía más animado o al menos tenía un tono más acorde a lo que solía esperar del descendiente. -oh.. ¿sí?-Dudé frunciendo levemente mi ceño, ¿Por qué debería contactarme?. Iba a responder pero continuó con las preguntas. Shyvanna, entiendo. Negué restando importancia al lugar.-Me han dado indicaciones unos soldados, después de encontrarme con gente aterrorizada...y que me disparasen.-Solté con tranquilidad.-¿Suele ser así? digamos que no frecuento Londres demasiado.-A decir verdad ninguna ciudad muggle en particular...o más bien ninguna ciudad en general, salvo contadas ocasiones.
-Shyvanna está recuperándose en las cuevas de Avalon, está bien.-Informé para que quedase tranquilo y desvié la mirada cuando un par de personas empezaron a reírse escandalosamente.-Todos estamos bien.-Murmuré generalizando su pregunta sobre mi estado, sin creérmelo demasiado. Volví a mirar al descendiente.-¿Los Descendientes han sufrido algún daño?-Pregunté por puro protocolo, también porque la información era interesante.
El acordeón chirrió sonoramente y fruncí el ceño molesta por ello. Seguro que había alguien que supiese tocar ese instrumento mejor que...aquella aberración. Apreté mis labios.-Respecto a Tintagel...sé que el Sanguis hizo acto de presencia y sé que tenía intenciones de llevarme con él. Pero...-Negué con la mirada algo perdida recordando los nubarrones en mi memoria.-Me soltó por alguna razón. ¿Tenéis idea de por qué?¿Estabas cerca cuando ocurrió?
Poco duró porque la alcé cuando no terminó aquella frase, curvando también mis cejas interrogativamente hasta que habló de la marca.-Oh..-Alcé la mano que había estado completamente teñida por la marca enseñándola junto al brazo e incluso aparté un poco la tela del pecho para mostrar la ausencia de maldición y asentí.-Tendremos que festejar la llegada al mundo del príncipe Zephyr y la princesa Aelín.-Sonreí sincera pero escuetamente, posando los antebrazos sobre la pegajosa mesa, cosa que hizo que mirase la superficie con cierto disgusto apartándolos de nuevo.-Estoy segura de que Catherine agradecería una visita.
Me incliné un poco para escuchar aquella confesión y solté aire nuevamente en una especie de risa silenciosa a la par que sonreía.-¿Hablan aquí algún tipo de idioma o jerga nueva?-Pregunté con sinceridad, cabía la posibilidad de que hubiesen desarrollado algún tipo de lenguaje durante aquellos años que habíamos pasado en la isla. Lo desconocía.
Volví a una posición más formal ante su repentino cambio de conversación. Parecía más animado o al menos tenía un tono más acorde a lo que solía esperar del descendiente. -oh.. ¿sí?-Dudé frunciendo levemente mi ceño, ¿Por qué debería contactarme?. Iba a responder pero continuó con las preguntas. Shyvanna, entiendo. Negué restando importancia al lugar.-Me han dado indicaciones unos soldados, después de encontrarme con gente aterrorizada...y que me disparasen.-Solté con tranquilidad.-¿Suele ser así? digamos que no frecuento Londres demasiado.-A decir verdad ninguna ciudad muggle en particular...o más bien ninguna ciudad en general, salvo contadas ocasiones.
-Shyvanna está recuperándose en las cuevas de Avalon, está bien.-Informé para que quedase tranquilo y desvié la mirada cuando un par de personas empezaron a reírse escandalosamente.-Todos estamos bien.-Murmuré generalizando su pregunta sobre mi estado, sin creérmelo demasiado. Volví a mirar al descendiente.-¿Los Descendientes han sufrido algún daño?-Pregunté por puro protocolo, también porque la información era interesante.
El acordeón chirrió sonoramente y fruncí el ceño molesta por ello. Seguro que había alguien que supiese tocar ese instrumento mejor que...aquella aberración. Apreté mis labios.-Respecto a Tintagel...sé que el Sanguis hizo acto de presencia y sé que tenía intenciones de llevarme con él. Pero...-Negué con la mirada algo perdida recordando los nubarrones en mi memoria.-Me soltó por alguna razón. ¿Tenéis idea de por qué?¿Estabas cerca cuando ocurrió?
- Una fiesta... - me quedé pensativo pòrque al principio me parecio buena idea, tratando de recordar las ultimas fiestas que....no, la de la boda de Sofia no contaba, la hice a distancia y luego me la cargué en cuanto me pillaron en el Vaticano en plena conexion directa. La ultima, la de la inauguración del barco de la brigada....tampoco, acabé flotando por culpa del veneno de los billywig....las anteriores...no, la boda de Cath en la que terminé enrollándome con Gwen por no sé que ritual hizo que me entraran los calores y me atraganté bebiendo cerveza, asi que pasé a la siguiente fiesta que....la de Sayid y Arleen? Me emborraché y acabé cabreado con medio mundo.
Tras varios segundos de intensa introspeccion mental, chasqueé la lengua y negué con la cabeza. - Espero que lo paséis muy bien en esa fiesta. Seguro que sí. Le mandaré mis regalos a Cath.
"porque yo no pienso ir"
Dejé la jarra despacio y la giré para que quedara en la posicion que me gustaba.
- Pff, no lo se. Le he pedido mil y una veces unas aceitunas y no hacia mas que mirarme raro. - dije haciendo un gesto con la mano en direccion a la barra, en plan cabreo. Yo tambien tenia un acento bastante fuerte, pero evidentemente no me daba cuenta de eso.
- Claro. Antes de Tintagel te había visto en Avalon. Como no volví a verte en Roma, me dio que pensar... que no estabas del todo bien. Y luego va el arbol e intenta comerte. - hice un gesto mirando al aire, como queriendo decir que ese arbol era un desvergonzado. Luego, respecto a si Londres solía ser asi... - Ni idea, eso parece. Supongo que si. Fuera de enclaves como Ouroboros y Avalon es así. Yo fui a Turín a por limoncello y mira cómo acabé.
Me quedé un poco pensativo, ya no solo por los recuerdos, si no por la idea. Habia cambiado algo despues de todo lo que habiamos hecho, o todo lo que habia pasado? Seguramente siguieran asaltando a la gente por la calle. Siempre habría gente dispuesta a aprovecharse de los demás. Era ciertamente deprimente.
"tendré ocasión de echar un vistazo cuando vuelva con mi abuela"
Entonces estaban todos bien. Empecé a doblar la servilleta en la que habia estado escribiendo antes, construyendo algo con papiroflexia improvisada, de modo distraido mientras le respondía.
- A parte de...Cath.. Oscurus.... y Matvey dices... ? No...A Sofía se le ha debido acelerar el parto o algo, pero los demás estamos bien. - salvo Adael que tenía serrín en el cerebro. Mei y Newton seguían jodidos, pero eso...no venía al caso. Me detuve cuando dijo que era consciente de lo del Sanguis y la miré más serio. - Lo sé, te estaba arrastrando junto a los vikingos. Vaya fiesta.
"Tintagel..."
El papelito empezaba a tomar forma de árbol en mis manos. La miré con muchas preguntas a la vez en la cabeza. Por qué me preguntaba a mi y no a....no sé, los dragones que estaban por ahi cerca? Ellos también debían de haber visto algo aunque estuvieran lejos. Tienen buena vista. Ian le habia hecho algo. Se acabaría enterando.
- Sí, te iba a llevar, y me indignó mucho. Lo de los vikingos no lo discuto tanto, estaban atacando, pero tú? - asentí, estaba cerca en ese momento. - Te pegué un bofetón pero no funcionó. Le dije al arbol que parase pero creo que eso le dio igual. Qué le dais, sangre con fitoesteroides? - negué con la cabeza, no tenia que molestarse en responderme a eso. - Pasó algo... raro. Te lo contaré si tú me ayudas con algo también. - habia terminado el árbol de papel, lo dejé en la mesa y lo empujé con el índice hacia ella.
Tras varios segundos de intensa introspeccion mental, chasqueé la lengua y negué con la cabeza. - Espero que lo paséis muy bien en esa fiesta. Seguro que sí. Le mandaré mis regalos a Cath.
"porque yo no pienso ir"
Dejé la jarra despacio y la giré para que quedara en la posicion que me gustaba.
- Pff, no lo se. Le he pedido mil y una veces unas aceitunas y no hacia mas que mirarme raro. - dije haciendo un gesto con la mano en direccion a la barra, en plan cabreo. Yo tambien tenia un acento bastante fuerte, pero evidentemente no me daba cuenta de eso.
- Claro. Antes de Tintagel te había visto en Avalon. Como no volví a verte en Roma, me dio que pensar... que no estabas del todo bien. Y luego va el arbol e intenta comerte. - hice un gesto mirando al aire, como queriendo decir que ese arbol era un desvergonzado. Luego, respecto a si Londres solía ser asi... - Ni idea, eso parece. Supongo que si. Fuera de enclaves como Ouroboros y Avalon es así. Yo fui a Turín a por limoncello y mira cómo acabé.
Me quedé un poco pensativo, ya no solo por los recuerdos, si no por la idea. Habia cambiado algo despues de todo lo que habiamos hecho, o todo lo que habia pasado? Seguramente siguieran asaltando a la gente por la calle. Siempre habría gente dispuesta a aprovecharse de los demás. Era ciertamente deprimente.
"tendré ocasión de echar un vistazo cuando vuelva con mi abuela"
Entonces estaban todos bien. Empecé a doblar la servilleta en la que habia estado escribiendo antes, construyendo algo con papiroflexia improvisada, de modo distraido mientras le respondía.
- A parte de...Cath.. Oscurus.... y Matvey dices... ? No...A Sofía se le ha debido acelerar el parto o algo, pero los demás estamos bien. - salvo Adael que tenía serrín en el cerebro. Mei y Newton seguían jodidos, pero eso...no venía al caso. Me detuve cuando dijo que era consciente de lo del Sanguis y la miré más serio. - Lo sé, te estaba arrastrando junto a los vikingos. Vaya fiesta.
"Tintagel..."
El papelito empezaba a tomar forma de árbol en mis manos. La miré con muchas preguntas a la vez en la cabeza. Por qué me preguntaba a mi y no a....no sé, los dragones que estaban por ahi cerca? Ellos también debían de haber visto algo aunque estuvieran lejos. Tienen buena vista. Ian le habia hecho algo. Se acabaría enterando.
- Sí, te iba a llevar, y me indignó mucho. Lo de los vikingos no lo discuto tanto, estaban atacando, pero tú? - asentí, estaba cerca en ese momento. - Te pegué un bofetón pero no funcionó. Le dije al arbol que parase pero creo que eso le dio igual. Qué le dais, sangre con fitoesteroides? - negué con la cabeza, no tenia que molestarse en responderme a eso. - Pasó algo... raro. Te lo contaré si tú me ayudas con algo también. - habia terminado el árbol de papel, lo dejé en la mesa y lo empujé con el índice hacia ella.
Gwen Pendragón
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Asentí a lo de la fiesta frunciendo por un segundo el ceño cuando aparentemente la mente del italiano se fue a alguna parte que no era aquí ni ahora. Casi pude ver el momento en el que llegó a alguna conclusión antes de volver a hablar.
-Oh..gracias, no...no estaba...-Esto era incómodo. Hice un gesto con la mano como volviendo a mi conversación anterior y negué con una sonrisa incómoda.-No era una invitación a la fiesta. No me corresponde invitarte a Avalon a una...celebración.-Sí, había sido incómodo. Inspiré fijándome en la mesa pasando un dedo por la madera por hacer algo.-Me refería a una visita informal en algún momento. Se supone que sois amigos.
Miré de nuevo al tabernero, ahora estaba de risotadas con unos en la barra. Sonreí en una pequeña mueca porque con ellos si parecía entenderse.-Sí, tal vez nosotros seamos el problema.-Preguntaría a Cedric a ver si sabía de algún tipo de lenguaje londinense en particular.
Aclaró entonces por qué iba a contactar conmigo y mientras lo hacía mi rostro mostró cierta confusión porque...sinceramente no había pensado en que se interesase por mi estado. -Ah claro, no..no pude ir a Roma porque el papa maldijo mi sangre y casi no la cuento.-Informé claramente perturbada por ello aunque finalmente esbocé una sonrisa incómoda de medio lado mientras rascaba mi brazo al recordar aquella sensación de quemazón y dolor.
Asentí algo ida a su confirmación de que así eran las ciudades observando aquello que hacía con la servilleta. Asentí de nuevo conforme con el estado de los Descendientes.-Los vikingos atacaron por...mi primo se casó con la hija del jefe y aparentemente alguien no sé si mago o humano arrancó a su hijo de su vientre y luego ella...la mataron.-O eso había oído, tampoco sabía la historia completa.- Supongo que el padre quería venganza...hacia nosotros. ¡Cómo no...!-Murmuré molesta porque al parecer siempre teníamos la culpa.
Así que sí había visto como el Sanguis me arrastraba. Apreté mis labios con gesto incómodo por su pregunta. Era obvio que no entendía por qué me llevaría a mi.-Fuiste tu el del bofetón.-Reafirmé comprendiendo algo, supuse que trataba de despertarme. Después sonreí un poco por su pequeña broma y negué encogiendo un hombro.-Buscaba una forma de proteger al resto.-Expliqué sin entrar en detalles.
Ladeé la cabeza entrecerrando mis ojos cuando soltó aquello de algo raro. Estaba a punto de preguntar pero soltó lo siguiente. Le miré con cierta sospecha a él y al árbol de servilleta. Decidí entonces ignorar mi postura formal y apoyé el codo en la pegajosa mesa, aplastando mi rostro sobre la palma de mi mano tomando apoyo ahí.-¿Con qué podría necesitar la ayuda de una sacerdotisa ritual el Descendiente de DaVinci?
-Oh..gracias, no...no estaba...-Esto era incómodo. Hice un gesto con la mano como volviendo a mi conversación anterior y negué con una sonrisa incómoda.-No era una invitación a la fiesta. No me corresponde invitarte a Avalon a una...celebración.-Sí, había sido incómodo. Inspiré fijándome en la mesa pasando un dedo por la madera por hacer algo.-Me refería a una visita informal en algún momento. Se supone que sois amigos.
Miré de nuevo al tabernero, ahora estaba de risotadas con unos en la barra. Sonreí en una pequeña mueca porque con ellos si parecía entenderse.-Sí, tal vez nosotros seamos el problema.-Preguntaría a Cedric a ver si sabía de algún tipo de lenguaje londinense en particular.
Aclaró entonces por qué iba a contactar conmigo y mientras lo hacía mi rostro mostró cierta confusión porque...sinceramente no había pensado en que se interesase por mi estado. -Ah claro, no..no pude ir a Roma porque el papa maldijo mi sangre y casi no la cuento.-Informé claramente perturbada por ello aunque finalmente esbocé una sonrisa incómoda de medio lado mientras rascaba mi brazo al recordar aquella sensación de quemazón y dolor.
Asentí algo ida a su confirmación de que así eran las ciudades observando aquello que hacía con la servilleta. Asentí de nuevo conforme con el estado de los Descendientes.-Los vikingos atacaron por...mi primo se casó con la hija del jefe y aparentemente alguien no sé si mago o humano arrancó a su hijo de su vientre y luego ella...la mataron.-O eso había oído, tampoco sabía la historia completa.- Supongo que el padre quería venganza...hacia nosotros. ¡Cómo no...!-Murmuré molesta porque al parecer siempre teníamos la culpa.
Así que sí había visto como el Sanguis me arrastraba. Apreté mis labios con gesto incómodo por su pregunta. Era obvio que no entendía por qué me llevaría a mi.-Fuiste tu el del bofetón.-Reafirmé comprendiendo algo, supuse que trataba de despertarme. Después sonreí un poco por su pequeña broma y negué encogiendo un hombro.-Buscaba una forma de proteger al resto.-Expliqué sin entrar en detalles.
Ladeé la cabeza entrecerrando mis ojos cuando soltó aquello de algo raro. Estaba a punto de preguntar pero soltó lo siguiente. Le miré con cierta sospecha a él y al árbol de servilleta. Decidí entonces ignorar mi postura formal y apoyé el codo en la pegajosa mesa, aplastando mi rostro sobre la palma de mi mano tomando apoyo ahí.-¿Con qué podría necesitar la ayuda de una sacerdotisa ritual el Descendiente de DaVinci?
Entorné la mirada observándola, estaba incómoda? Ahora yo estaba incómodo.
- Yo no...yo no he dicho que quiera ir a la fiesta. Solo que os lo paséis bien.
"en todo caso he pensado que no quiero ir"
Visitas informales...si...eso esperaba que si pudiera hacerse. Se supone que sois amigos, habia dicho. Me pasé la lengua por los dientes.
"no se supone, lo somos"
Bebi un poco más de cerveza que ya estaba algo calentuja, mirando a la morena, chasqueando los dedos cuando dijo que habia maldito su sangre. La había oido gritar al tiempo que yo mismo estaba roto de dolor y con mas ganas de morirme que otra cosa.
"tuvo que ser a la vez"
- Lo sabía... que te estaba afectando a ti también. - como me había subido las mangas de la camisa, desvié la mirada al antebrazo donde aun llevaba puesto el gram, y se veian las cicatrices de las quemaduras. Un buen recordatorio, para la proxima. Encogí mis hombros y volvi a la conversacion.
- Qué trágico, lo de tu primo. Eligieron el peor momento para su venganza, en pleno...intento de tratado. Parecemos condenados a no entendernos, por una cosa o por otra.... Si te sirve de consuelo...ninguno de los compañeros con los que he hablado cree que el ataque fuera cosa vuestra.
"o eso creo, ya no estoy seguro"
- Culpable. Quería que espabilaras, y me ayudaras un poco a evitar que te arrastraran las...raices asesinas.... - miré su mejilla. Estaba estupenda. No le había dejado moratón. De la mejilla pasé a la nariz y luego un poco más abajo, antes de volver a sus ojos. - Qué has dicho?
"me he despistado"
Me habia perdido eso de que buscaba una forma de proteger al resto. Pareció abierta a ayudarme a cambio de que terminara de detallarle lo que habia ocurrido...asi que aproveché. Chasqueé los dedos y el arbol de papel se desplegó volviendo a mostrar la servilleta llena de anotaciones y diagramas. Probablemente no entendería de que iba la cosa...
- Me he percatado de que...Ouroboros se ha desviado del rumbo que tenía establecido...como si algo... - hice un gesto para que me entendiera lo que queria decirle, como si algo tirase de la isla. - Aun lo estoy revisando, y...no me preocuparía mucho si no fuera porque el rumbo que está tomando parece acercarnos a la comarca por la que se encuentra Tintagel. - chasqueé los dedos y el papel con las notas volvió a plegarse hasta ser el arbol que habia hecho antes. - Ilumíname. Es eso posible? Ya sabes a qué me refiero. Nuestro dispositivo de navegación está bien. Lo he revisado yo mismo. Es algo más fuerte que eso.
- Yo no...yo no he dicho que quiera ir a la fiesta. Solo que os lo paséis bien.
"en todo caso he pensado que no quiero ir"
Visitas informales...si...eso esperaba que si pudiera hacerse. Se supone que sois amigos, habia dicho. Me pasé la lengua por los dientes.
"no se supone, lo somos"
Bebi un poco más de cerveza que ya estaba algo calentuja, mirando a la morena, chasqueando los dedos cuando dijo que habia maldito su sangre. La había oido gritar al tiempo que yo mismo estaba roto de dolor y con mas ganas de morirme que otra cosa.
"tuvo que ser a la vez"
- Lo sabía... que te estaba afectando a ti también. - como me había subido las mangas de la camisa, desvié la mirada al antebrazo donde aun llevaba puesto el gram, y se veian las cicatrices de las quemaduras. Un buen recordatorio, para la proxima. Encogí mis hombros y volvi a la conversacion.
- Qué trágico, lo de tu primo. Eligieron el peor momento para su venganza, en pleno...intento de tratado. Parecemos condenados a no entendernos, por una cosa o por otra.... Si te sirve de consuelo...ninguno de los compañeros con los que he hablado cree que el ataque fuera cosa vuestra.
"o eso creo, ya no estoy seguro"
- Culpable. Quería que espabilaras, y me ayudaras un poco a evitar que te arrastraran las...raices asesinas.... - miré su mejilla. Estaba estupenda. No le había dejado moratón. De la mejilla pasé a la nariz y luego un poco más abajo, antes de volver a sus ojos. - Qué has dicho?
"me he despistado"
Me habia perdido eso de que buscaba una forma de proteger al resto. Pareció abierta a ayudarme a cambio de que terminara de detallarle lo que habia ocurrido...asi que aproveché. Chasqueé los dedos y el arbol de papel se desplegó volviendo a mostrar la servilleta llena de anotaciones y diagramas. Probablemente no entendería de que iba la cosa...
- Me he percatado de que...Ouroboros se ha desviado del rumbo que tenía establecido...como si algo... - hice un gesto para que me entendiera lo que queria decirle, como si algo tirase de la isla. - Aun lo estoy revisando, y...no me preocuparía mucho si no fuera porque el rumbo que está tomando parece acercarnos a la comarca por la que se encuentra Tintagel. - chasqueé los dedos y el papel con las notas volvió a plegarse hasta ser el arbol que habia hecho antes. - Ilumíname. Es eso posible? Ya sabes a qué me refiero. Nuestro dispositivo de navegación está bien. Lo he revisado yo mismo. Es algo más fuerte que eso.
Gwen Pendragón
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-oh...- Dije sin más desviando la mirada incómoda mordiendo mi labio porque al parecer era yo la que había confundido la conversación.-Gracias.-Repetí nuevamente jugueteando con la jarra que me habían puesto y de la cual no había bebido aún con cara de circunstancias. Ahora parecería que yo quería que viniese a alguna fiesta o algo parecido. Golpeé un par de veces el cristal con una de mis uñas.
Su chasquido hizo que diese un pequeño casi imperceptible respingo pues en ese momento estaba algo ida. -¿A mi también?-Fruncí el ceño confusa hasta que seguí su mirada. Su brazo claramente mostraba las marcas que yo misma había tenido y que gracias al Árbol Sagrado había curado por completo. Volví a mirarle preguntándome cómo había ocurrido a la vez.
Él estaba hablando sobre la tragedia de la mujer de mi primo y algo de los descendientes pero yo fruncía el ceño observando aquel amuleto.-Las marcas deberían haber desaparecido. ¿Quién ha hecho eso?-Mi mano se extendió dispuesta a tomar su brazo pero paré, resoplando un poco al recordar su fobia al ser tocado y simplemente señalé.-¿Con qué?
Pero mi atención se desvió cuando dijo que trataba de evitar que el Sanguis cumpliese su cometido mirándole con cierto pavor disimulado.-No te hubiese ayudado.-Apreté mis labios seria antes de que preguntase nuevamente.-Nada-Suspiré molesta por aquello negando. Tampoco tenía que explicarle la situación ni mi cometido en la familia. No lo entenderían.
Alcé ambas cejas mirando el papel desplegándose lleno de anotaciones y desvié la mirada hasta él mientras se explicaba. Asentí varias veces, entendía su preocupación y sospechaba que se trataba del árbol de Ouroboros buscando enraizar cerca del Sanguis Ligno.-Entiendo... -Apreté mis labios pensando en si debía decir algo o no. Primero observé el arbolito de papel y luego a él para acercarme un poco tras eso y susurrar.-Se supone que necesitamos una reunión formal y un tratado para hablar de estos temas mi señor Descendiente.-Alcé ambas cejas observándole directamente. No podía revelar información que directamente tuviese que ver con nuestras cartas para conseguir los templos que tanto ansiaba mi hermano.
Su chasquido hizo que diese un pequeño casi imperceptible respingo pues en ese momento estaba algo ida. -¿A mi también?-Fruncí el ceño confusa hasta que seguí su mirada. Su brazo claramente mostraba las marcas que yo misma había tenido y que gracias al Árbol Sagrado había curado por completo. Volví a mirarle preguntándome cómo había ocurrido a la vez.
Él estaba hablando sobre la tragedia de la mujer de mi primo y algo de los descendientes pero yo fruncía el ceño observando aquel amuleto.-Las marcas deberían haber desaparecido. ¿Quién ha hecho eso?-Mi mano se extendió dispuesta a tomar su brazo pero paré, resoplando un poco al recordar su fobia al ser tocado y simplemente señalé.-¿Con qué?
Pero mi atención se desvió cuando dijo que trataba de evitar que el Sanguis cumpliese su cometido mirándole con cierto pavor disimulado.-No te hubiese ayudado.-Apreté mis labios seria antes de que preguntase nuevamente.-Nada-Suspiré molesta por aquello negando. Tampoco tenía que explicarle la situación ni mi cometido en la familia. No lo entenderían.
Alcé ambas cejas mirando el papel desplegándose lleno de anotaciones y desvié la mirada hasta él mientras se explicaba. Asentí varias veces, entendía su preocupación y sospechaba que se trataba del árbol de Ouroboros buscando enraizar cerca del Sanguis Ligno.-Entiendo... -Apreté mis labios pensando en si debía decir algo o no. Primero observé el arbolito de papel y luego a él para acercarme un poco tras eso y susurrar.-Se supone que necesitamos una reunión formal y un tratado para hablar de estos temas mi señor Descendiente.-Alcé ambas cejas observándole directamente. No podía revelar información que directamente tuviese que ver con nuestras cartas para conseguir los templos que tanto ansiaba mi hermano.
- Tú y yo nos dejamos bastante sangre en aquella plaza antes de escapar. - le expliqué a Gwen alzando las cejas cuando pareció sorprenderle que la maldición aquella de la sangre nos hubiera afectado a los dos. Seguramente, ni se molestó en separar.... Me di cuenta que se habia fijado en el gram, y no tuve problema en enseñarselo un poco mejor. - Oro y sangre mía. Ademas de las runas. - señale la ampolla de cristal del centro del brazalete. - Obra del joven Tepes. Me salvó el culo. Protege contra la felonía.
La miré con cara de "porque eres asi" cuando dijo que de haber estado consciente, no me habria ayudado. Luego le sonreí un par de segundos y entrelacé mis dedos sobre la mesa, para decirle seriamente:
- Me da igual.
"lo habría hecho de todos modos, por mas que quieras que el arbol te sacrifique"
- mesero! otra , per favore! - le avise sacudiendo un poco la mano para llamar su atencion antes de volver a Gwen y confesarle. - Ya me voy adaptando
Volviendo al asunto del arbolito y la informacion que no quería darme, se inclinó un poco hacia delante para hablar en voz mas baja. La imité, acercándome también mas a ella, tratando de escuchar por encima del chirriante acordeon.
"no me responde directamente"
- Oh, tengo que rellenar...tengo que cumplimentar un anexo para hablar con usted? Enviar una solicitud formal con sello de Ouroboros, que sea aprobada por Avalon y el Consejo en pleno? - hice como que tomaba notas en un cuaderno invisible, imitandola ahora en su trato en tercera persona. - Por supuesto, deme solo cinco eones más y lo tendré listo, en cuanto haya rellenado mi solicitud y haya sido tramitada podré terminar de explicarlee lo que ocurrió en Tintagel, porque yo tenía asientos en primera fila asi que... - me eché hacia atrás con una media sonrisa, entreteniendome en darle vueltas al anillo de mi indice. El sello de Ouroboros, para ser mas exactos. - Vamos Gwen. Ya has visto como acaban nuestras reuniones formales.
"puedo suponer que son como dos imanes gigantes de polos opuestos que se atraen el uno hacia el otro...su magia posee la resonancia adecuada para crear campos magneticos y encontrarse el uno al otro"
La miré con cara de "porque eres asi" cuando dijo que de haber estado consciente, no me habria ayudado. Luego le sonreí un par de segundos y entrelacé mis dedos sobre la mesa, para decirle seriamente:
- Me da igual.
"lo habría hecho de todos modos, por mas que quieras que el arbol te sacrifique"
- mesero! otra , per favore! - le avise sacudiendo un poco la mano para llamar su atencion antes de volver a Gwen y confesarle. - Ya me voy adaptando
Volviendo al asunto del arbolito y la informacion que no quería darme, se inclinó un poco hacia delante para hablar en voz mas baja. La imité, acercándome también mas a ella, tratando de escuchar por encima del chirriante acordeon.
"no me responde directamente"
- Oh, tengo que rellenar...tengo que cumplimentar un anexo para hablar con usted? Enviar una solicitud formal con sello de Ouroboros, que sea aprobada por Avalon y el Consejo en pleno? - hice como que tomaba notas en un cuaderno invisible, imitandola ahora en su trato en tercera persona. - Por supuesto, deme solo cinco eones más y lo tendré listo, en cuanto haya rellenado mi solicitud y haya sido tramitada podré terminar de explicarlee lo que ocurrió en Tintagel, porque yo tenía asientos en primera fila asi que... - me eché hacia atrás con una media sonrisa, entreteniendome en darle vueltas al anillo de mi indice. El sello de Ouroboros, para ser mas exactos. - Vamos Gwen. Ya has visto como acaban nuestras reuniones formales.
"puedo suponer que son como dos imanes gigantes de polos opuestos que se atraen el uno hacia el otro...su magia posee la resonancia adecuada para crear campos magneticos y encontrarse el uno al otro"
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Fruncí el ceño por su explicación.-Más gente perdió sangre en esa plaza.-Expliqué gesticulando con mi mano. Estaban mis hermanos, mi primo...y muchos otros. Miré con curiosidad el amuleto mientras me explicaba qué era.
Apreté mis labios algo disgustada, porque eso reducía nuestras posibilidades de ataque si todos obtenían uno pero sobre todo porque no parecía haber sido del todo efectivo a juzgar por las marcas aún presentes.-Tepes...mmh..parece un buen diseño pero...-Arrugué nuevamente el rostro sin estar del todo convencida.-Creo que le falta algo es como sí...-Extendí de nuevo la mano tentada de tocarlo pero parando nuevamente para señalar las marcas.-Lo ha pausado pero no parece haber rechazado del todo el hechizo de sangre.
No se me escapó esa mirada suya. Obviamente no lo comprendía ni sería posible que lo hiciese aunque se lo explicase. Su siguiente sonrisa, gesto y afirmación hizo que sonriese con molestia por mi parte.-Por suerte dará igual que te de igual porque no estarás presente cuando suceda.-Contesté con suficiencia en mi tono sabiendo que ese intento del Sanguis había sido a la desesperada y lo normal era una ceremonia en Avalon.
Llegado al tema del árbol de Ourorobos se puso irónico, sonreí de medio lado mientras parloteaba incluso imitándome por lo que alcé una ceja brevemente haciéndole saber que había captado aquello. Apoyada en mi mano como estaba oculté mi boca evitando así que se me escapase una risa por aquella tontería. Suspiré cuando terminó avanzando la mano hacia el árbol de papel, dándole un par de toquecitos con mi dedo distraídamente. Apreté mis labios en una mueca y le miré de nuevo.-Tendré que buscar otros testigos entonces.-Cogí aire suspirando, empujando el árbol de papel hacia él.-Gracias de todos modos. Giordano.-Acabé por decir abandonando las formalidades.
Apreté mis labios algo disgustada, porque eso reducía nuestras posibilidades de ataque si todos obtenían uno pero sobre todo porque no parecía haber sido del todo efectivo a juzgar por las marcas aún presentes.-Tepes...mmh..parece un buen diseño pero...-Arrugué nuevamente el rostro sin estar del todo convencida.-Creo que le falta algo es como sí...-Extendí de nuevo la mano tentada de tocarlo pero parando nuevamente para señalar las marcas.-Lo ha pausado pero no parece haber rechazado del todo el hechizo de sangre.
No se me escapó esa mirada suya. Obviamente no lo comprendía ni sería posible que lo hiciese aunque se lo explicase. Su siguiente sonrisa, gesto y afirmación hizo que sonriese con molestia por mi parte.-Por suerte dará igual que te de igual porque no estarás presente cuando suceda.-Contesté con suficiencia en mi tono sabiendo que ese intento del Sanguis había sido a la desesperada y lo normal era una ceremonia en Avalon.
Llegado al tema del árbol de Ourorobos se puso irónico, sonreí de medio lado mientras parloteaba incluso imitándome por lo que alcé una ceja brevemente haciéndole saber que había captado aquello. Apoyada en mi mano como estaba oculté mi boca evitando así que se me escapase una risa por aquella tontería. Suspiré cuando terminó avanzando la mano hacia el árbol de papel, dándole un par de toquecitos con mi dedo distraídamente. Apreté mis labios en una mueca y le miré de nuevo.-Tendré que buscar otros testigos entonces.-Cogí aire suspirando, empujando el árbol de papel hacia él.-Gracias de todos modos. Giordano.-Acabé por decir abandonando las formalidades.
- Sí, pero probablemente, no mezclada. - puntualicé, y el porqué no se habian dedicado a recolectar el resto...ni idea, solo podia hipotetizar. Pareció que mi amuleto no le gustaba demasiado, era porque le parecía deficiente, o porque no le hacia gracia que tuvieramos un método para defendernos de la felonía? De cualquier modo, la idea me hizo gracia. Sobre todo porque parecía tener un tic entre querer tocarlo y no.
- Lo hicieron rápido. - giré la muñeca, observando las cicatrices que habia dejado, ya no solo las de las quemaduras al borde del brazalete si no un tanto más el de las venas, esas cicatrices se mostraban en forma de piel algo más oscurecida siguiendo el surco de los vasos sanguíneos. - Ya...siguió doliendo también con esto puesto. Pero se volvió tolerable.
"supongo que era una magia demasiado fuerte para tan solo un pequeño amuleto mágico"
Me quedé mas serio al ver que a ella le daba igual aquello y me aseguró que no estaría presente cuando ocurriese. Preferiría que no ocurriese. Parecía tan convencida a no hacer nada...Por algun motivo que hablara de entregarse tan facilmente al Sanguis me ponía incómodo, muy incómodo. Asi que cuando el mesero trajo otra jarra, y una mas para Gwen aunque ella no la habia pedido, pegué un largo trago.
- No... - chasqueé la lengua, quería encontrar las palabras para decirle que no se rindiera. - A ver, lo que quiero decirte es que.... - santa madonna, por qué era tan complicado? - Que ...
"si le digo que busque otro modo volverá a decirme que Ouroboros era la solución pero que lo hemos estropeado"
"Preferiría que no lo hicieras. Punto. Que pensarán tus hermanos si dejas que te coma el arbol? Te echarán de menos."
"esa versión tambien apesta, usa otra"
- No es que me de igual igual, capici? Es que me da igual que te de igual que yo intente ayudarte porque aunque te de igual me dará igual y seguiría intentando evitarlo. No que me de igual que un dia hagas...puf! y adiós. - ahora creía haberlo explicado estupendamente, sin mentirijillas de por medio ni excusas. Solté un suspiro de cansancio por el esfuerzo realizado.
No dio su brazo a torcer, y ni desmintió, ni confirmó mis miedos. Agarré el arbol y lo escachuflé con gesto de derrota cuando lo empujó hacia mi. La miré y luego solté una sonrisa mezclada con una pedorreta de burla por como se había tapado la boca para disimular.
- Al menos te has reído. - tiré el papel arbol arrugado hacia atrás y levanté mi jarra hacia ella, en un brindis. - En fin, brindemos entonces por...nuestras muy férreas lealtadas a nuestras respectivas casas... y por nuestra charla clandestina en este dia de hoy...en el que por fin has aprendido a pronunciar "Giordano". - no como yo que nunca sería capaz de decir su nombre completo. Pero sí, era ironía porque por fin se habia dejado la formalidad de descendiente de Da Vinci. Bebí, a su salud, y despues negué con la cabeza, antes de señalarla, pensando algo
- no te preguntas...como habria sido todo si no tuvieramos los apellidos que tenemos? O si nuestros antepasados no la hubiesen cagado. No se. Un "what if"
- Lo hicieron rápido. - giré la muñeca, observando las cicatrices que habia dejado, ya no solo las de las quemaduras al borde del brazalete si no un tanto más el de las venas, esas cicatrices se mostraban en forma de piel algo más oscurecida siguiendo el surco de los vasos sanguíneos. - Ya...siguió doliendo también con esto puesto. Pero se volvió tolerable.
"supongo que era una magia demasiado fuerte para tan solo un pequeño amuleto mágico"
Me quedé mas serio al ver que a ella le daba igual aquello y me aseguró que no estaría presente cuando ocurriese. Preferiría que no ocurriese. Parecía tan convencida a no hacer nada...Por algun motivo que hablara de entregarse tan facilmente al Sanguis me ponía incómodo, muy incómodo. Asi que cuando el mesero trajo otra jarra, y una mas para Gwen aunque ella no la habia pedido, pegué un largo trago.
- No... - chasqueé la lengua, quería encontrar las palabras para decirle que no se rindiera. - A ver, lo que quiero decirte es que.... - santa madonna, por qué era tan complicado? - Que ...
"si le digo que busque otro modo volverá a decirme que Ouroboros era la solución pero que lo hemos estropeado"
"Preferiría que no lo hicieras. Punto. Que pensarán tus hermanos si dejas que te coma el arbol? Te echarán de menos."
"esa versión tambien apesta, usa otra"
- No es que me de igual igual, capici? Es que me da igual que te de igual que yo intente ayudarte porque aunque te de igual me dará igual y seguiría intentando evitarlo. No que me de igual que un dia hagas...puf! y adiós. - ahora creía haberlo explicado estupendamente, sin mentirijillas de por medio ni excusas. Solté un suspiro de cansancio por el esfuerzo realizado.
No dio su brazo a torcer, y ni desmintió, ni confirmó mis miedos. Agarré el arbol y lo escachuflé con gesto de derrota cuando lo empujó hacia mi. La miré y luego solté una sonrisa mezclada con una pedorreta de burla por como se había tapado la boca para disimular.
- Al menos te has reído. - tiré el papel arbol arrugado hacia atrás y levanté mi jarra hacia ella, en un brindis. - En fin, brindemos entonces por...nuestras muy férreas lealtadas a nuestras respectivas casas... y por nuestra charla clandestina en este dia de hoy...en el que por fin has aprendido a pronunciar "Giordano". - no como yo que nunca sería capaz de decir su nombre completo. Pero sí, era ironía porque por fin se habia dejado la formalidad de descendiente de Da Vinci. Bebí, a su salud, y despues negué con la cabeza, antes de señalarla, pensando algo
- no te preguntas...como habria sido todo si no tuvieramos los apellidos que tenemos? O si nuestros antepasados no la hubiesen cagado. No se. Un "what if"
Gwen Pendragón
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
-Mezclada...-Murmuré por lo bajo asintiendo aún mirando aquel artefacto. Apreté mis labios por su siguiente comentario mientras en mi cabeza me preguntaba las razones de que no hubiese sido completamente efectivo, lo cual él mismo confirmó.
-¿Tolerable?-Pregunté molesta e indignada volviendo fijar la vista en él. No podía imaginar aquel dolor como tolerable por muy minimizado o controlado que estuviese. Algo había fallado.
El mesero llegó, plantó las jarras en la mesa y refunfuñó algo antes de marcharse. Eso me despistó por un momento pero volví a la conversación rápido aunque DaVinci tenía ciertos problemas para expresar sus ideas. Parpadeé y alcé mis cejas expectante.-¿mmh?-¿Qué era tan difícil de decir para tardar en encontrar la forma de hacerlo? Aquello finalmente explotó en un trabalenguas.
Apreté mis labios molesta.-Sí, te había entendido.-Tamborileé con los dedos en la mesa algo pensativa, finalmente alcé la vista sonriendo brevemente.-Lamento que no te de igual mi futura marcha.-Expresé muy cordialmente antes de apartar la mirada tratando de dar el tema por zanjado.
Cuando rechacé el intercambio de ideas y aplastó el árbol mi rostro expresó algo de desaprobación. Esta vez apreté los labios en una sonrisa cuando obviamente me había pillado riéndome.-Era una buena imitación.-Propuso un brindis y volví a reír con los labios pegados.-No quiere decir que deje de usar los términos apropiados para nombrar al Descendiente de DaVinci.-Agarré una de las jarras, era de mala educación no acompañar un brindis.
Tomé un trago pero mi garganta decidió que aguantarlo en mi boca por unos segundos era mejor. Llevé la mano a la misma con cierta rapidez mientras mi cara reflejaba lo asqueroso que me parecía aquello, finalmente tragué pero el gesto continuó siendo similar.-Es...peor que la cerveza vikinga caliente. Incluso me recorrió un escalofrío y fue apreciable, apartando la jarra con un delicado empujón de mi mano.
Intentaba que el sabor se pasase cuando preguntó aquello y simplemente fruncí todo mi rostro negando.-¿Para qué fantasear con algo que no va a suceder nunca? Sería una especie de tortura. ¿No crees?-Mi vista se fijó en el grim defectuoso y cogí aire suspirando.
Estiré la mano con la palma boca arriba sobre la mesa.-Deja que eche un vistazo, puede que tenga una idea para arreglarlo.-Moví la mano como insistiendo y sonreí de medio lado.-O tal vez te maldiga del todo y tus compañeros tengan razón en algo.
-¿Tolerable?-Pregunté molesta e indignada volviendo fijar la vista en él. No podía imaginar aquel dolor como tolerable por muy minimizado o controlado que estuviese. Algo había fallado.
El mesero llegó, plantó las jarras en la mesa y refunfuñó algo antes de marcharse. Eso me despistó por un momento pero volví a la conversación rápido aunque DaVinci tenía ciertos problemas para expresar sus ideas. Parpadeé y alcé mis cejas expectante.-¿mmh?-¿Qué era tan difícil de decir para tardar en encontrar la forma de hacerlo? Aquello finalmente explotó en un trabalenguas.
Apreté mis labios molesta.-Sí, te había entendido.-Tamborileé con los dedos en la mesa algo pensativa, finalmente alcé la vista sonriendo brevemente.-Lamento que no te de igual mi futura marcha.-Expresé muy cordialmente antes de apartar la mirada tratando de dar el tema por zanjado.
Cuando rechacé el intercambio de ideas y aplastó el árbol mi rostro expresó algo de desaprobación. Esta vez apreté los labios en una sonrisa cuando obviamente me había pillado riéndome.-Era una buena imitación.-Propuso un brindis y volví a reír con los labios pegados.-No quiere decir que deje de usar los términos apropiados para nombrar al Descendiente de DaVinci.-Agarré una de las jarras, era de mala educación no acompañar un brindis.
Tomé un trago pero mi garganta decidió que aguantarlo en mi boca por unos segundos era mejor. Llevé la mano a la misma con cierta rapidez mientras mi cara reflejaba lo asqueroso que me parecía aquello, finalmente tragué pero el gesto continuó siendo similar.-Es...peor que la cerveza vikinga caliente. Incluso me recorrió un escalofrío y fue apreciable, apartando la jarra con un delicado empujón de mi mano.
Intentaba que el sabor se pasase cuando preguntó aquello y simplemente fruncí todo mi rostro negando.-¿Para qué fantasear con algo que no va a suceder nunca? Sería una especie de tortura. ¿No crees?-Mi vista se fijó en el grim defectuoso y cogí aire suspirando.
Estiré la mano con la palma boca arriba sobre la mesa.-Deja que eche un vistazo, puede que tenga una idea para arreglarlo.-Moví la mano como insistiendo y sonreí de medio lado.-O tal vez te maldiga del todo y tus compañeros tengan razón en algo.
- Si, tolerable, eso he dicho. - debía de tener un tapón de cera en los oidos o la musica la estaba dejando sorda porque repetia mucho lo que yo decía y lo mismo no me estaba escuchando bien. O no, porque luego me dijo que me habia entendido. Me hice el despistado bebiendo mas cerveza de aquella que debia ser Cruzcampo de lo mal que sabía.
Hasta yo pude darme cuenta de cómo quiso zanjar el tema aquel y yo no daría mas vueltas porque tampoco sabía qué mas decirle, o cómo decirselo. Me deprimía pensar que eso pudiera llegar a ocurrir. Se habia hecho un huequecito en mi cabeza, al parecer.
El silencio se hizo muy pesado después de eso pero por fortuna habia musica y jaleo de fondo. Sin embargo, me dio por reirme cuando vi la cara de asco que puso por culpa de la cerveza.
- Puzza di pessima birra e scelte ancora peggiori!! - su cara me habia hecho demasiada gracia y me entró la risa floja, traté de contenerla y me dolió la barriga por culpa de eso, lo cual me hizo mas gracia, y me limpié unas lagrimillas consiguiendo controlarme al final. - Ay...lo siento.... bueno en verdad no lo siento....llevaba tiempo sin...
Abrí los ojos de nuevo tratando parecer una persona funcional y seria emocionalmente estable en control de sus reacciones e interacciones sociales, mirándola como con toda mi atencion. Supuestamente.
- Tortura? No, Gwen...para mi no. La tortura es la realidad. - unas palabras demasiado serias dichas con la cara de aun estar controlandose la risa de antes hacian un curioso contraste. - Soy un inventor, vivo a base de los "y si...?" y si puede imaginarse, puede hacerse.- fue mi justificación final.
Miré su mano cuando la estiró algo desubicado porque no sabia que me iba a pedir, porque ademas habia vuelto al tema del gram. Puse cara de "ya, claro" cuando habló de maldecirme, y me quité el gram de la muñeca, poniendolo despacio en su mano.
- El loco confía en la malvada hechicera de Avalon
"sí, cerveza mala y peores decisiones"
- Qué le falla?
Hasta yo pude darme cuenta de cómo quiso zanjar el tema aquel y yo no daría mas vueltas porque tampoco sabía qué mas decirle, o cómo decirselo. Me deprimía pensar que eso pudiera llegar a ocurrir. Se habia hecho un huequecito en mi cabeza, al parecer.
El silencio se hizo muy pesado después de eso pero por fortuna habia musica y jaleo de fondo. Sin embargo, me dio por reirme cuando vi la cara de asco que puso por culpa de la cerveza.
- Puzza di pessima birra e scelte ancora peggiori!! - su cara me habia hecho demasiada gracia y me entró la risa floja, traté de contenerla y me dolió la barriga por culpa de eso, lo cual me hizo mas gracia, y me limpié unas lagrimillas consiguiendo controlarme al final. - Ay...lo siento.... bueno en verdad no lo siento....llevaba tiempo sin...
Abrí los ojos de nuevo tratando parecer una persona funcional y seria emocionalmente estable en control de sus reacciones e interacciones sociales, mirándola como con toda mi atencion. Supuestamente.
- Tortura? No, Gwen...para mi no. La tortura es la realidad. - unas palabras demasiado serias dichas con la cara de aun estar controlandose la risa de antes hacian un curioso contraste. - Soy un inventor, vivo a base de los "y si...?" y si puede imaginarse, puede hacerse.- fue mi justificación final.
Miré su mano cuando la estiró algo desubicado porque no sabia que me iba a pedir, porque ademas habia vuelto al tema del gram. Puse cara de "ya, claro" cuando habló de maldecirme, y me quité el gram de la muñeca, poniendolo despacio en su mano.
- El loco confía en la malvada hechicera de Avalon
"sí, cerveza mala y peores decisiones"
- Qué le falla?
Gwen Pendragón
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Bando
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Edad
Nacionalidad
Su retahíla en italiano hizo que me riese con más soltura, también ayudó su risa floja algo contagiosa aunque yo era mucho más sutil y contenida, cortando de cuando en cuando la risa mientras me llevaba la mano a la boca tratando de no explotar.
Ya había presenciado alguna risa del DaVinci pero no aquella pequeña explosión. Calmé mi risa poco antes de que él lo hiciese pero no podía negar que había sido un buen momento. Negué a esa disculpa y suspiré finalmente aún con una sonrisa asintiendo. Yo también llevaba tiempo sin reír, no de ese modo al menos.
Encogí un hombro cuando discrepó de mi respuesta. Tal vez tuviese razón pero la realidad no era algo de lo que se pudiese escapar. Su justificación hizo que me preguntase cómo era vivir en esa cabeza de inventor tan desconocida para mi y simplemente me removí incómoda ante esa afirmación suya.-Si la vida fuese un invento sería más fácil pero...-Negué sonriendo de medio lado.-No puedes inventártela si ya tienes una y en nuestro caso viene marcada por los apellidos.
Alcé ambas cejas por un segundo cuando puso esa cara. ¿Dudaba? Tomé el gram en mi mano-Tal vez no una maldición pero podemos hacer ciertas cosas con la sangre.-Lo examiné, a pesar de ser un trabajo rápido y algo osco aparentemente estaba bien ejecutado. Apreté mis labios pensativamente.-mmmh...aparentemente nada.-
Concentrada como estaba agarré su brazo dejando el gram a un lado, cerré los ojos y posé un par de dedos sobre las marcas de sus venas tratando de entender aquello, deslizándolos poco a poco por sus venas quemadas.-Tienes un buen lío...-Paré de hablar aún con los ojos cerrados inclinando la cabeza mientras fruncía de cuando en cuando el rostro.-mmhhh.-Murmuré abriendo los ojos nuevamente apartando la mano.
Moví el anillo de mi pulgar adelantándolo, tenía una superficie puntiaguda que clavé en mi índice contrario.-Las sangres estaban mezcladas, yo...-Me señalé y luego a él.-Tenía tu sangre, la había utilizado para localizarte al desaparecerte pero tú..-Hice un gesto hacia el artefacto del cual emergió una gota de su sangre, puse mi pulgar sobre la misma y una gota se unió para volver al su lugar.-No tenías la mía.-Cogí el gram ofreciéndoselo nuevamente.-La maldición era para una sangre mezclada...-Encogí mis hombros.-O eso creo.
Ya había presenciado alguna risa del DaVinci pero no aquella pequeña explosión. Calmé mi risa poco antes de que él lo hiciese pero no podía negar que había sido un buen momento. Negué a esa disculpa y suspiré finalmente aún con una sonrisa asintiendo. Yo también llevaba tiempo sin reír, no de ese modo al menos.
Encogí un hombro cuando discrepó de mi respuesta. Tal vez tuviese razón pero la realidad no era algo de lo que se pudiese escapar. Su justificación hizo que me preguntase cómo era vivir en esa cabeza de inventor tan desconocida para mi y simplemente me removí incómoda ante esa afirmación suya.-Si la vida fuese un invento sería más fácil pero...-Negué sonriendo de medio lado.-No puedes inventártela si ya tienes una y en nuestro caso viene marcada por los apellidos.
Alcé ambas cejas por un segundo cuando puso esa cara. ¿Dudaba? Tomé el gram en mi mano-Tal vez no una maldición pero podemos hacer ciertas cosas con la sangre.-Lo examiné, a pesar de ser un trabajo rápido y algo osco aparentemente estaba bien ejecutado. Apreté mis labios pensativamente.-mmmh...aparentemente nada.-
Concentrada como estaba agarré su brazo dejando el gram a un lado, cerré los ojos y posé un par de dedos sobre las marcas de sus venas tratando de entender aquello, deslizándolos poco a poco por sus venas quemadas.-Tienes un buen lío...-Paré de hablar aún con los ojos cerrados inclinando la cabeza mientras fruncía de cuando en cuando el rostro.-mmhhh.-Murmuré abriendo los ojos nuevamente apartando la mano.
Moví el anillo de mi pulgar adelantándolo, tenía una superficie puntiaguda que clavé en mi índice contrario.-Las sangres estaban mezcladas, yo...-Me señalé y luego a él.-Tenía tu sangre, la había utilizado para localizarte al desaparecerte pero tú..-Hice un gesto hacia el artefacto del cual emergió una gota de su sangre, puse mi pulgar sobre la misma y una gota se unió para volver al su lugar.-No tenías la mía.-Cogí el gram ofreciéndoselo nuevamente.-La maldición era para una sangre mezclada...-Encogí mis hombros.-O eso creo.
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