Cuevas encantadas de Ávalon

El comentario de Wthyr hizo que mantuviera la mirada sobre él. “¿Me estás preguntando si te echaría una maldición para evitar que fueras el títere de ese monstruo y que te volvieras contra nosotros de nuevo?”, levantó la barbilla. “Sí, te condenaría a dormir 100 y mil años más para evitar eso. Qué fácil es caer en la tentación de juzgarme y creer que quiero matar a tus hermanas. Podría haberlo hecho con Lake… Pero no lo hice", soltó un tsk. "¿Siquiera oíste mi maldición? Nos protegí y la protegí a ella de las consecuencias que le acarrearía psicológicamente el daño a su propia sangre”, le miró con irritación pero también dolida. “Imbécil”, cortó la conexión mental inmediatamente y se giró al frente escuchando lo de los sellos. Vale, trabajo para la noche.

-Teniente, no sé qué pretendéis ganar con ese comentario. Y si nadie lo va a decir, yo sí. ¿Veis ese anillo que tiene Sofía en la mano? ¿Que tienen gran parte de los presentes? Nos hace miembros del Consejo de los 20 y el Pendragon este- Dijo señalando a Wthyr con el pulgar pero sin mirarlo -También lo tiene. Así que si es su problema, es el nuestro. Él pelea por Ávalon y por Ouroboros, por nuestra familia, tal como lo hago yo. Vamos a jugar a que estamos todos en el mismo equipo - Inspiró profundo para luego oír el “No” de Sofía, pero decidió no mirarla tampoco.

La mención de Rosse hizo que frunciera el ceño y mandó un mensaje mental a ella. “Rosse, dónde estás?”

Se concentró en Rhaegar y su maldita provocación. Catherine se cruzó de brazos y apartó la mirada hacia el pasillo, escuchando simplemente -Puede ser, habrá que verlo- Mencioné a lo del cementerio mientras escuchaba todas las teorías y análisis. Volvió la vista a Wthyr brevemente cuando preguntó por el mausoleo de los Le Fay -En la zona prohibida- Le respondió para luego girarse hacia Rhaegar. Puso los ojos en blanco cuando empezaron a hablar de Morgana y volvió los ojos a su hermano.

“Una parte de Morgana está en mi hija, Aelin. Intentó poseerla… Por otro lado, no la perdimos. Después de intentar matarme me dijo “pronto”. Se quedó un poco sorprendida de lo que había sucedido con Ávalon. Yo…creo que está haciendo cosas. Pero la verdad es que no confío ciegamente en ella. Quiere revivir como sea y ese “como sea” es poseyéndome”

Giró la cara hacia Matvey cuando dijo lo del sello, le parecía buena idea. En el caso de la tinta… -Pues puede ser… - No recordaba haberla sacado y la preparación de la mañana fue más meter cosas en la bolsa que sacarlas -Ahora lo miro, pero creo que sí- Respondió a Gio con una leve sonrisa para luego centrarse en Rhaegar -Ni te preocupes en hablar de tamaños, si fueran los legendarios no te van a creer igualmente. Been there, done that- Soltó con rintintin.

Miró a Wthyr por encima del hombro cuando habló de Desmond y luego le retiró la mirada con desprecio. Como le gustaba ordenar. Luego miró a Matvey -Siempre podemos pedir apoyo a la Brigada y a la Resistencia- Recomendó mientras se alejaba del grupo sin despedirse ni nada, yendo tras Giordano -Shyvanna tiene fuego valyrio…Ahora vengo- Le dijo al italiano antes de ir a su habitación. Al llegar allí soltó un suspiro lento, caminó hacia su bolsa mientras que los sentimientos parecían volver a agitarse en su interior. Estúpido Wthyr, Sofía desubicada, Vishous descarado…Todos eran unos malditos impertinentes. Soltó un gruñido por lo bajo mientras cogía la tinta, dos botes por suerte. Tras eso salió de la habitación dando un portazo sin querer. Le importó tres pepinos. Se dirigió a la cocina con Gio y le mostró los frascos mientras la ira pasaba un poco. Curioseó hasta la despensa y cogió algo más de pan para mordisquear antes de volver con Gio -¿Tienes una pluma o un lápiz? Tengo que dibujar mi sello. - Ojeó el vino que estaba bebiendo y... recordó la última vez que habían compartido una botella. Menudo cambio. Suspiró y cogió la botella para beber un largo trago.


¿Trajo tinta en la bolsa?

El miembro 'Catherine Le Fay' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Probabilidad' :

El comentario suyo no cayó bien, pero a V poco le importaba. Miró a Wthyr ladeando suavemente la cabeza para luego sonreírle de forma un poco cabrona -Nos hablaron tanto de las fuerzas del imperio que no les solicitamos ayuda. Pero corregiremos el error de confiar en vosotros- Añadió antes de mirar hacia la Descendiente Le Fay, los ojos de V se dirigieron hacia el mencionado anillo y su ceño se frunció con incomodidad. No quería servir a un Pendragon y menos a ese. Miró hacia la Descendiente Le Fay sin decir ni sí ni no. Total, ella era la primera que había caído en las garras del enemigo.

-La guardia está en sobreaviso, pero es fuerza, no del todo sanación y necesitamos ese tipo de aliados. Convocar a Arleen, a Anteia y Azahar Malfoy…A los Souls- Sugirió V pero no se quedó allí nada más, Le Fay dio dos puntos válidos -Convocar a Johan Black y a los Draven- Aunque no sabía si los Draven podrían usar su maquinaria allí. -Convocar a los lobos y a la Brigada. Si todos aquí estamos peleando por nuestras familias, ellos también tienen el derecho y la Resistencia tiene cuentas que saldar con Charles Pendragon- Expresó enumerando, enumerando y enumerando -La amenaza es mucho más grande de lo que planificamos al principio y tenemos que ajustarnos-

Los próximos pasos estaban todos establecidos. Con la tinta ya resuelta debían enfocarse en el ritual de mañana, vigiló que Sofía comiera y luego siguió comiendo él mientras pensaba en los demás. - El fuego valyrio es incontrolable y peligroso. No sólo plan B, necesitamos el C…- Se calló un momento y pensó -¿Podemos neutralizarlo? ¿Sellarlo en algo? Es decir…- Se incorporó del taburete en el que había estado sentado -Si Charles llega a tener cuerpo y lo derrotamos, entiendo que el Sanguis Ligno perdería todo su poder y el velo caería ¿No? ¿Es lo que buscamos? Porque neutralizar a una persona… Podemos enviarlo a otro plano donde tengamos nosotros el control. Podemos… - Miró a Sofía momentáneamente -Podría enviarlo a otra galaxia - Dijo abriendo un pequeño portal con un movimiento de su mano -Si me quitáis esto- Se señaló el rostro.

Apareció en el pasillo central cercano a la sala del trono y pudo escuchar voces distintivas, algunas las reconocía a otras no.

"Ya estoy"

Le envió el mensaje a Rhaegar pensando que tampoco podía alargar mucho más la situación. Tenía que ver a Catherine, contarle un poco lo que sabía o había averiguado y...Enfrentar sus demonios.

Escuchó su voz cerca, más cerca de aquellas en la sala del trono y su estómago se revolvió. Tenía sentimientos encontrados al respecto. Por un lado odiaba haber sido débil y dejar que Charles estuviera en su cuerpo maquinando planes, tampoco le gustó haber usado a Aedan contra Catherine pero... Ojalá su hermana se hubiese dado cuenta a tiempo de su extraño comportamiento. Estar poseído era una sensación horrible. Pero...¿Tenía ella la culpa? Su mente votaba que no, pero su corazón aún se cuestionaba cómo hubiese sido su vida si la Matriarca de los Le Fay se hubiese dado cuenta.

"No puedo cambiar el pasado. Esta es..otra oportunidad"

Se acercó a la puerta, viendola desparratada en una silla bebiendo de una botella de vino. Frunció levemente el ceño. ¿Por qué se veía tan mayor y tan... cambiada? Había esperado una camiseta negra, unos shorts y botas. Algunas pulseras y el pelo desarreglado. Uñas mal pintadas. Pero no, por el contrario, parecía...parecía una Descendiente. ¿Qué le había pasado? Rhaegar le había contado un par de cosas pero... necesitaba oírlo de ella -Cath...quizás también querrías pergaminos para eso- Dijo acercándose a ella con una leve sonrisa, preguntándose si le dejaría abrazarla. -Descendiente DaVinci- Saludó luego volviendo la cabeza hacia Gio y haciendo un gesto en reverencia antes de volver su vista a Catherine

- Al Pendragon que parecen haberle metido algo por el culo y no para de dar ordenes en todas las reuniones, cuñado. - le dije a Wthyr con aire aburrido. -Colabora con los descendientes en...eso que dice Da Vinci. Evacuaciones y planes. Su nombre? No me acuerdo.

"O si, pero supondria hacer un esfuerzo en una pregunta poco importante"

Se pusieron a planear, y yo me dediqué a mirar a Cath mientras tanto. Si traian refuerzos, podríamos vengarnos por Desmond.

- Arrancar la semilla del interior y destruirla. Plan F. - despues me quedé callado, disfrutando...por decirlo de alguna manera, de las tonterías que se mandaban el teniente ego gordo con todos los demás, que los Pendragon de ego tampoco quedaban cortos. Eran igual de insoportables a ratos. Miré a Catherine, DESEANDO que pudiera leer mis agónicos pensamientos sobre sus compañeros.

"No te fies de ella, no. Un hermano poseido por Charles fue suficiente. Espero que hayas dejado hueco en tu piel para mas tatuajes...esos sellos pueden ser interesantes"

- Pues cometen un error al no creernos. - respondí a lo de los dragones, porque es verdad, parecían escépticos.  Cath se fue con Da Vinci, y me dejó alli solo con..con todos esos. Miré al viejo Matvey, luego a la Pendragon morena y por ultimo al de las galaxias.

"Un Pendragon astral...lo que me faltaba por..."

/Ya estoy/

"Ya era hora, me estan volviendo loco, Des"

Miré en dirección al pasillo donde se encontraban las cocinas y la habitacion de Morgana. Estaban alli.

- Iré con vosotros a visitar nuestras tumbas mañana. - dije con tono contrariado, como si lo ultimo que me apeteciera fuera una excursión grupal. Pero tenía la intencion de ayudar a esta gente hasta terminar con Charles. Aunque...

Me puse en pie, y fui hacia Matvey. Le lancé una mirada fria, dura y no carente de desdén. Me agaché a su lado para susurrarle algo al oido, un par de frases largas, a juzgar por lo que tardé. Le di unas palmaditas en el hombro al incorporarme y me di la vuelta, para con andares elegantes, llegar a la cocina donde estaba mi hermana y mi mellizo. Odiaba reconocerlo, pero verlos...me reconfortaba, de modo extraño.

"esta noche se me antoja demasiado corta"

Puse cara de asco por mis pensamientos. Qué asco daba.

- Compartes o piensas acaparar ese vino solo para ti? Rancios.

Supuso que la respuesta que tenía para Gwen no iba a gustarle, sobre todo porque se parecía bastante a lo que ella pedía si llegaban a poseerla. - Lake no dijo nada que nos sirviese de pista mientras no estaba poseída. Sólo...me pidió que la matara. Me dijo que le negaba la misericordia. - respondió con pesar a su hermana menor, teniendo después esa especie de discusión mental con una Catherine bastante irritada por preguntarle si también lo maldeciría a él. ¿De verdad no había entendido a qué se refería él?

"Me condenarías a dormir, tú lo has dicho, pero no harías que me matase. Tampoco te he acusado de querer matarlas. Y sí, claro que escuche lo de Lake, y entendí que era lo mejor en ese momento aunque no me gustase"

Le echó una mirada de mosqueo cuando le llamó imbécil y cortó el canal, volviendo la vista al frente para disimular que habían estado discutiendo de ese modo. Estaría enfadada, pero al menos le "defendió" incluyéndolo en el grupo de los que eran dignos de estar ahí por el sello de Ouroboros y porque luchaban por el mismo problema. Sin embargo volvió con el tonito indignado por lo de no creerse que sabían de los dragones legendarios. Soltó un "hum" por lo bajo y volvió a centrarse en la conversación del grupo, aunque se había quedado algo disperso. Algo de un ritual al día siguiente para que entrasen los refuerzos, a ver si así Royden dejaba de quejarse y decir que no podían confiar en ellos. Esta vez pasó de responderle, sólo lo miró con hastío. Ya vería a su ejército. En cuanto lo de invocar a Morgana estuvo de acuerdo en que eran más posibilidades de problemas que otra cosa.

- Las tierras nubladas, o Ávalon, es el lugar donde se suponía que estaba Arturo enterrado, antes de que supiésemos que puede que esté dividido en dos partes. Lo que sabíamos es que estaba enterrado en las cuevas, posiblemente en unas dependencias secretas custodiadas por un monolito del linaje innombrable. Las hadas...-
hasta ahí era lo que sabían, así que deberían probar allí también, aunque dividir demasiado el grupo tampoco le gustaba. - Deberíamos hacer la expedición a las tierras de los Le Fay antes, partir incluso en unas horas. Cedric debería quedarse aquí para recibirlos y darles la información. - empezó a darle mala espina todo ese asunto de los huesos por los comentarios que hicieron Giordano y Rhaegar, que para su sorpresa ya le llamaba cuñado. El tal "Pendragon" ese sin nombre que colaboraba con ellos y que creía que podía ser un espía.

- Pues qué bien. - comentó de manera sarcástica, recogiendo el libro de seres acuáticos que había dejado en la mesa antes de comer. - Suena como si fueran a tendernos una emboscada al ir a la zona del cementerio Le Fay. - y además lo había sugerido Da Vinci, que ese era un tipo inteligente. Tenía que darle una vuelta al tema de las expediciones y quién iba a cada una, pero también lo que hacer para destruir a Charles una vez llegasen al núcleo. Sus huesos y la semilla debían estar juntos, en el corazón.

- El fuego valyrio lo destruye todo en el plano normal, pero ni siquiera en ese plano pudo destruir el Sanguis. Si fuese así de fácil no habríamos venido hasta aquí para destruirlo...lo habríamos hecho desde fuera. Aún así lo tomamos como opción. - la espada de Arturo que mencionó Sofía podía tener sentido, y era algo que no habían probado fuera. El problema era... - La tiene Lake. Habría que arrebatársela si la volvemos a encontrar. Ahora responde ante ella. - lo que dijo Rhaegar le gustó porque era como arrancar el mal de las entrañas, arrancar la semilla original. - El fuego de dragón es lo único que puede destruir muchos objetos mágicos, podemos tenerlo en cuenta también.- negó con la cabeza por lo de mandarlo a otro plano, aunque tampoco tenía mucho contexto con lo de la marca del rostro de Vishous. - Algo que se destierra a otro plano siempre regresa. Debemos pulverizarlo.

[Aric?]

No hubo respuesta a mi primer intento de comunicación. Apreté los labios sospechando que podía ser…que se la hubiese quitado. Que tuviese problemas. O que ahora no pudiera hablar. O a lo mejor estaba tan lejos del salon vikingo que no habia modo.

“Las escuderas no sospecharán de él, verdad?”

Llegó Catherine con la tinta y me deshice del carbón, cogiendo sus frasquitos y examinandolos. Perfecto.

- Siempre. - saqué un lapiz de punta de plata de los tirantes de cuero que salian del cinturon. Sería por trastos…Le di la punta de plata y me rellené el vaso. Otra cosa no pero alli de eso no faltaba.

Entonces llegó el otro hermano de Cath, Desmond. Claro, si Rhaegar estaba aqui….él tambien. La diferencia radicaba en que el día de su muerte lo tenía mucho más presente porque basicamente, habia sido poseido por el espiritu de Charles Pendragon, y en esa reunion todo se fue a la puta muy, pero que muy rapido. Era como….el día que habia comenzado todo. Cuando aun ni si quiera habiamos logrado derrotar a SAM, ya se estaba fraguando esto que estabamos viviendo aqui ahora.

Sonreí levemente por su formalismo al dirigirse a mi. Qué Gwen de su parte.
- Giordano está bien.

“Debería…”

“Si, dejarlos solos”

- Estoy seguro de que tenéis un monton de cosas de las que poneros al dia vosotros tres…asi que os dejo en la mejor compañía que podriais necesitar para eso. Un buen vino. - ahora fui yo quien les dedicó una reverencia. - Cath, voy arriba, me ubicaré en alguna habitacion y empiezo a preparar lo necesario para los tatuajes. Ven a verme con Gwen cuando estés lista y tengas tu sello diseñado. Lo haremos directamente en mi cuarto.

Me despedí de los hermanos , un tanto incomodo por el contexto social y sin querer estorbar más tiempo y me marché de alli, cruzando nuevamente por la sala del trono.

“Tener que despedirse dos veces…pero al menos ahora podrán hacerlo bien”

Al pasar nuevamente por alli vi que quedaba la misma gente que seguian hablando y yo interrumpi brevemente.
- Tengo la tinta, le he dicho a Cath que cuando termine subais para los sellos. Ciao. - ya me iba, pero… - Ah! Sofia? Te sobran reabastecedoras de sangre? Necesito recargar a los autómatas médicos. Ciao! - ya me iba otra vez pero vi a Lucio pegando cabezadas, con el vino en la mano y…me dio pena. Lo anime a tragar un trozo de grifo y luego me le tendí la mano para que se levantara de ahi.

Ahora si. Terminé de cruzar y fui escaleras arriba con Lucio que iba diciendo muchas cosas de todo lo que habia escuchado. Subí hasta la sala circulas de vidriera en el suelo, encontrandome a Cedric que estaba de puerta en puerta chusmeando.

- Ehh…esperas a alguien? No? Ah, Shyvanna. - le respondí al ver sus letras responderme. - No se cual es su habitacion, yo voy a buscarme una vacia y a preparar lo de tu otra hermana…y a ver si el vikingo contestara…buena suerte! - me despedí de él mientras lo veia cotillear tras otra puerta y yo mismo busqué en la de al lado. - Mira Lucio , esta está vacía. Para ti. - lo empujé dentro de la habitacion y cerré la puerta. Yo miré en la de al lado, que tambien estaba vacía, y entré, pero no cerré la puerta porque me interesaba que el par de dos supieran donde estaba.

“A ver…”

Rapidamente me quité el cinturón, los brazaletes, dejé el bastón y me quité las cinchas. Dejé los botes de tinta sobre una mesa, las piedras encontradas y la sal que me habia llevado de la cocina.

“Uhm…”

Desplegué los cuatro autómatas, y saqué mi caja de herramientas básicas. Tenía que fabricar una maquina de tatuar y lo mismo encontraba algo en esa sala que me sirviera. Me puse a buscara, a inspeccionar el cuarto tambien, y de paso, volví a hacer otro intento de contactar al vikingo.

[Si no es seguro hablar para ti, gruñe a lo vikingo]
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Lucio - madre
Gio- tierra

Dado de inspeccionar- busco cosas interesantes en la habitacion

El miembro 'Giordano Da Vinci' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado (20)' :

- Entonces nos vemos mañana. Me guias tú a la zona que dices, aun no he estado alli.

Le dije a Sofia, con ello parecia zanjado lo de mañana.  Solo esperaba que los mensajeros llegaran a tiempo porque….entre un plano y otro, desconocia si habian desfases temporales. Podía ser cualquier cosa….Wthyr expresó bastante bien lo que pensaba yo sobre el fuego valyrio.

- Lo intentaremos, aunque como dice él, en el exterior no funcionó.

Lo de contar contraidores entre nuestras filas no me extrañó. Afirmé despacio, como para mi mismo, interiorizando la posibilidad de que no solo Gwenivere en un momento dado, por la posesion, se volviera contra nosotros si no que….hubieran otros que por propia voluntad, asi lo hicieran.

- Arrebatadle la espada a Lake. Seguro que volveis a encontrarosla.

No eran planes buenos, y para que hablar del supuesto en que tuvieramos exito? Si todo salia bien, lo mas seguro era que como decia V, se retirase el velo. Catherine se marchó, a las cocinas, bastante…ofuscada desde lo de V, Sofia y su marido.

- No pienso convocar a gente como Anteia Malfoy, Vishous. Antes has hablado de eslabones débiles y me pides que meta a uno entre nuestras filas. - la realidad era que no quería meterla en este infierno. Bueno, tambien habia algo de verdad en lo que habia dicho. Al menos desde mi perspectiva… Ni a Arleen tampoco. Sabía que entraba en pánico con los demonios. - A tu hermana tambien, Royden? Estas seguro??

Ya habia expresado mi opinion sobre lo de usar fuego valyrio. Consideré lo de sellarlo, o las palabras de V sobre lo que acontecería.

- Lo peor es que solo podemos conjeturar. Si Charles tiene cuerpo fisico y lo destruimos, sera suficiente? Caera el velo? Quiero creer que si. Pero no lo sabremos hasta hacerlo. Quizá esto fue siempre solo una misión de ida. - miré el portalito y la marca de V. Una decisión aprobada por el Consejo, llevada a cabo por Eire. - Si encuentars algun desdenciente de Merlin aqui que te diga como librarte de esa marca, estupendo, V. Quiza esta sea una oportunidad perfecta para ti. Pero no quiero lidiar con un poder desbocado ademas de contra todos estos cultistas de Charles. Yo mismo he pensado desterrar su corazon al infierno pero algo me dice que incluso de ahi seria capaz de volver.

“Pulverizar suena bien”

Pero no iba a decirle eso a Wthyr.  Fue entonces cuadno Rhaegar se levantó, con una mirada de lo mas…cargada de …desprecio? ´El siempre solía mirar asi. Me susurró unas cuantas cosas, y la primera me hizo cerrar brevemente los ojos con cierto pesar y negar con la cabeza.

Debí hacerte caso, Matvey.

“En todo caso….yo debí estar más atento a vosotros. Tanto a ti como a Desmond”

Lo siguiente me dejó pensativo. Mentiria si dijera que no lo habia planteado en mi cabeza. Había algun modo? Como les habia dicho a Wthyr y V, lo que ocurriera despues, era…impredecible. Conservar su cuerpo. Su alma estaba aqui. Qué saber podría utilizar para…?

“Debo pensarlo, y hablarlo con Catherine y ellos directamente”


Me puse en pie, tras la marcha de Rhaegar, me tocaba a mi tambien ponerme con mi cometido.
- Voy a mandar a los emisarios. Esperemos que funcione. Si me necestais… - desapareci de alli, retornando a mi habtacion directamente. Ya habia decidido a quienes iba invocar, el ritual sería sencillo y no deberia consumir mucha de mi energia. Habia hecho bien en cenar como lo habia hecho. Hasta guardé algo para Palas y Cesto.  Realicé la invocación del par de Quasits, pequeñas criaturas diabolicas con inteligencia suficiente para el recado…

Palas y Cesto aparecieron frente a mi,.a traves de una grieta infernal. Mire hacia abajo y...
- tengo trabajo para vosotros. Y una buena recompensa - les enseñé las patas de carne que habia subido conmigo, jugosas y deliciosas. - tendreis que llevar estos mensajes a las siguientes personas. Os daré ubicaciones aproximadas pero quiza debais buscar. Tan rapido como podais. SIN secuestrar gallinas. SIN secuestrar bebés. SIN liberar una plaga de ratas.

Les di algo de esa carne como cebo, escribi unas cuantas notas, incluí los participantes y más destacados ganadores de nuestros torneos, que... Para algo servirían también esos torneos, y envié a mis esbirros. A través del infierno primero, les dije. Y luego allí. No directos. Quizá esas criaturas pudieran. Nada era seguro pero...

“Las hadas…¿Dónde están? ¿Se han aliado con Charles? ¿Son las de rojo?”

Aquello hizo que se le hiciera un nudo en el estómago. Tendría que haber una forma de traerlas si…si habían renovado el pacto. Lo de la emboscada no le gustó nada y se le erizó la piel de pies a cabeza. Pero se quedó con sus pensamientos, podría hablarlo luego con Gwen que era la más enterada de esos asuntos.

Sonrió a Gio cuando sacó el lápiz -Confía en DaVinci que siempre estará preparado- Le guiñó el ojo, un poco… feliz de la normalidad de aquello. Era un momento de paz, lejos de tanta gente. Le recordaba cuando dibujó los sellos con Matvey. Silencio, cada uno a lo suyo. Solos, pero no solitarios.

Catherine se irguió cuando escuchó la voz de Desmond y se giró hacia él mirando su cara con un gesto de … de demasiadas cosas. Como si no pudiera creer que lo estuviera viendo otra vez. No podía moverse aunque quisiera. ¿La odiaría? ¿La culparía? Sabía que Gio le estaba hablando pero ella simplemente no podía dejar de ver a su hermano. El nudo en la garganta empezó a formarse, por un momento Catherine pensó que se asfixiaría bajo el peso de la culpa.

Al ver a Rhaegar entrar no le sorprendió que les hablara con total tranquilidad. Era el mejor de los tres en controlar sus emociones. Pero Catherine no. Catherine era y siempre había sido un desastre. -Siento haber sido una hermana y una matriarca de mierda- Las lágrimas que habían inundado sus ojos empezaron a caer con rapidez, como si se hubiese roto la presa que había llevado sosteniendo durante mucho tiempo -Debí haberme dado cuenta antes… Lo siento, Desmond- Dijo levantándose y estrechándolo contra ella con fuerza, para luego alargar un brazo hacia Rhaegar y atraerlo hacia ella -Debí haberme escapado de Jean antes. No sabía cómo funcionaba el tiempo allí… Debimos practicar más juntos. Debí oírte más- Le dijo a Rhaegar y luego a Desmond.

Los dos eran más altos que Catherine, pero a la morena poco le importaba y los estrechó un momento más juntos mientras la certeza de que aquella sería, realmente, la última vez que los vería se asentaba en su cuerpo. Lloró nuevamente la pérdida, lloró por todo lo que pudo haber sido y no fue. Por lo que los mellizos se merecían y ella no pudo ofrecerles por tener su puta cabeza metida en sus asuntos. Apretó los dedos en su ropa con demasiada fuerza -Os extraño- Confesó y se detuvo ahí aunque tenía demasiadas cosas que decirles, quería escucharlos a ellos.

Se separó, limpiándose las lágrimas con las manos y apartando la mirada al vino. Sabía que Desmond no diría nada pero estaba esperando el ácido comentario de Rhaegar, volvió la mirada de uno a otro -Vamos, dilo…- Puso los ojos en blanco con una leve sonrisa para luego pasarle el vino.

" Y quizás, de ahora en adelante, mantengamos el puente mental en vez de hablar en voz alta de las cosas importantes", dijo mirando hacia la puerta abierta antes de coger el papel que le daba Desmond.

-De acuerdo, Descendiente- Dijo moviendo la cabeza asintiendo aunque probablemente cayera en las nuevas costumbres sin querer. Era algo que llevaba bien bien metido en la piel. Educado por su madre.  

Se rió un poco por el comentario de Rhaegar, algo muy típico de él. “¿Qué tal el cuñado y los Pendragon?”. No quería preguntar aún por los del Consejo. Seguía un poco inestable sobre su opinión de lo que había pasado.

Pudo notar que Catherine había desconectado totalmente cuando no paraba de mirarle con algo que parecía desasosiego -Me encargaré de que lo haga, no os preocupéis…Giordano- Le dijo al descendiente de DaVinci cuando Catherine no le respondió. Era muy normal en ellos así que fue como caer en una antigua rutina.

El gesto de Desmond se aflojó un poco cuando Catherine le pidió disculpas, dándose cuenta de que lo había considerado desasosiego era culpa -Cath…- Quiso decirle que… No, pero es que en el fondo sí…Ojalá se hubiese dado cuenta antes. Cerró los ojos y la estrechó con fuerza también porque más allá de eso y de sus incontables diferencias y peleas -No eres una hermana de mierda. Esa ya la tenemos ubicada- Tendría que soltarle con calma la perla de Layla porque sabía perfectamente que su relación no era la mejor. Aunque su hermana, sin su madre a su lado, parecía diferente.

“Eso es nuevo”

Catherine sin duda había cambiado mucho en aquel año y algo que no se habían visto. Vociferar que él tenía la razón, reconocer su sentimientos en voz alta… Miró hacia Rhaegar cuando Catherine lo instó a soltar un poco de veneno y una sonrisa pequeña iluminó el rostro de Desmond porque…Es que se conocían demasiado para dejarlo pasar.

Interceptó el vino y negó con un “tsk” -No tenéis modales- Murmuró moviéndose para ir a coger tres copas y servir un poco en cada una -¿Desde cuándo tomas vino?… En realidad pareces muy cambiada…¿Compartes detalles?- Inquirió apoyándose en la barra y recibiendo su mensaje mental con el ceño fruncido.

“Se supone que todos aquí deberían ser tus aliados. ¿O crees que también hay espías?”

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¿Se ha encontrado a Elise?
¿A Layla?
¿A Altair?

El miembro 'Desmond Le Fay' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Probabilidad' :

Lo tenía claro. Clarísimo con el agua. Quizás era la habitación, no lo sabía. Se fue hasta el armario encontrando algunas túnicas y vestidos y se cogió el primero que vio. Era mono. Pero no Pendragon.

Daba igual. Como pudo metió sus tetas en el escote que parecía que en cualquier momento iba a romperse. Pero que le daba igual todo. Tenía una pregunta y había una sola persona que podía responderla.

Salió de la habitación encontrándose de frente con Cedric. Más allá Matvey entraba en su habitación y Gio en la propia. Miró a su hermano a la cara intentando aparentar que no la había pillado en nada serio.

-¿Qué te parece?- Forzó una sonrisa para luego mirar de nuevo a las habitaciones. Tenía que ser inteligente y mostrarse preocupada. Tenía que montar toda una escena si quería sacarse a Cedric de encima pero sabía que tenía las posibilidades en contra, porque su hermano era demasiado astuto para su propio bien. Y aunque Gwen le había dicho que se cuidara y su piel estaba particularmente sensible, tiró de lo único lógico.

-Voy a darle un poco de ánimo a las tropas. ¿Sabes dónde está Neftis?- Inquirió volviendo su mirada hacia él - Y Hammurabi claro… y los demás- Tenía que sacárselo de encima. Avanzó un poco empujándolo con suavidad por el pecho mientras cerraba la puerta -¿dónde vas a dormir?

Giordano me pilló buscando puertas y tuve que justificarme. Asentí a sus ultimas palabras y, cuando se metió a una habitación, Shyvanna salio de la suya.

"Menos mal"

La miré y asentí, sí, iba despampanante y se lo tuve que hacer saber con un gesto de mis manos.

[Vas a causarle un infarto a alguno o alguna]

Pero no, no iba a lograr engañarme asi como asi. Sujeté su mano con la mía cuando me empujó suavemente por el pecho, y negué. Solte su mano para signarle.

Shy, podemos hablar? En tu habitación o en la mía que creo que será la de atrás, la única que queda libre.

Anciana. Me había tocado anciana, la última. Bueno... Si era anciana, tenía que ser sabia. Seguro que era interesante.

[Oíste a al descendiente de DaVinci? Iba a intentar conectar con Aric. Contactar. O es por Gwen?]

Sonrió un poco más, de forma genuina, a su halago. Por supuesto que tenía vena materialista. Y si, sumado a eso, su educación siempre había sido la de mantener una buena imagen… Estaba claro que los piropos eran una forma mínima de aprobación.

Se detuvo cuando Cedric le cogió la mano. Había una cosa que detestaba de Cedric. Su fuerza. No toda era física. Alzó la vista hacia él para luego mirar sus manos cuando le signó.

“No hay manera”

Asintió mientras abría la puerta del cuarto. Sus planes tendrían que esperar a que todos estuvieran dormidos y poder avanzar. Quizás tendría que llevarse a Neftis a escondidas. Alguna excusa. ¿Hacer gua…

-¿Qué?- Su mirada se disparó directamente hacia la habitación de Giordano y la máscara que había mantenido Shyvanna poco a poco fue cayéndose. El corazón empezó a latirle con fuerza y arrastró la mirada hacia Cedric con pesar -Necesito saber si me odia- Le dijo con total sinceridad y se apoyó en el marco. Bajó la mirada un momento, pensativa

-Gio…- Si es que siempre acababa buscando ayuda en él. Por una u otra razón. Tiró de su hermano para ir a la habitación de Gio, viendolo trabajar y queriendo tocar cosas… todo parecía divertido pero complicado. No obstante, verlo trabajando avivó recuerdos específicos que le recorrieron de arriba a abajo y le recordaron la conversación con Matvey.

“Pero te tengo muy visto, Gio”. Carraspeó -Si Aric te responde… ¿Puedo hablar con él? ¿Cómo lo estás haciendo?- Quería saberlo… y quería también que se lo dijera mientras besaba su cuello y acariciaba su piel. Parpadeó un momento, confundida y presionó los dedos con los de Cedric como si aquello le ayudara a centrarse. Que lo hacía, mucho mejor que tener a Darren allí.

"Darren...", la lujuria se abrió paso y Shyvanna se removió un poco, presionando los muslos juntos para controlar la sensación.

NEFTIS Y ADAEL

La habitación, impregnada con la esencia del solsticio de verano, les ofrecía una sensación de libertad y despreocupación que no habían sentido en mucho tiempo. Neftis pudo presenciar algo extraño mientras se dirigía a Adael : La complexión del descendiente se tornó más suave, las líneas de su rostro se desvanecieron, y su cuerpo comenzó a encogerse lentamente. Su ropa se hizo más holgada, adaptándose a su nueva forma infantil.
Neftis, a su lado, experimentó una metamorfosis similar. Sus músculos se afinaron, su cabello creció en densidad y brillo, y su tamaño se redujo hasta quedar ambos transformados en niños de diez años.

LUCIO

Obtiene un poder:

Resurrección Vital: Resurrección Vital es un poder arcano que permite al usuario devolver la vida a un ser que ha fallecido.Este poder se basa en una conexión profunda con las energías de la vida y la muerte, y requiere una combinación de concentración, energía mágica y, a menudo, un componente emocional fuerte. 1 vez por batalla. Necesita 5 post para que sea efectivo.
Descripción: La resurrección no solo devuelve la vida física, sino también las memorias y emociones del fallecido. Sin embargo, ambos, el resucitado y el resucitador, pueden experimentar un breve período de intercambio emocional y de recuerdos.
Efecto Secundario Posible:
Visiones del Más Allá: Ambos, el usuario y el resucitado, pueden experimentar breves visiones o recuerdos del más allá, ofreciendo una comprensión fugaz de lo que hay después de la muerte.

FREYJA

Obtiene un poder :

ntercambio de Dones
1Intercambio de Habilidades:

Descripción: Dos personajes pueden intercambiar una habilidad específica (poder mágico, habilidad de combate, conocimiento especial) por un período limitado.
Efecto: Cada personaje puede usar la habilidad del otro como si fuera propia.
Duración: 3 turnos.
2Equilibrio Energético:

Descripción: Permite a dos personajes compartir su energía mágica o puntos de vida para equilibrar sus estados.
Efecto: Transferencia de puntos de vida o puntos de magia entre los personajes (hasta 50% del total del personaje donante).
Duración: Instantáneo.
Requisitos: Ritual Breve: Un pequeño ritual o acto simbólico que refleja la generosidad de Mabon (por ejemplo, compartir un brindis o intercambiar un objeto personal, gesto amistoso).
1 vez por batalla

MATVEY

Efectos de la Habitación:

Conexión con los Muertos:

Descripción: Al entrar y permanecer en esta habitación, Matvey siente una conexión intensificada con el reino de los muertos. Los espíritus se manifiestan con mayor claridad, permitiendo a Matvey ver, oír y sentir su presencia de manera más vívida.
Visiones y Susurros: Los espíritus pueden comunicarse más directamente, proporcionando visiones y susurros que ofrecen conocimientos, advertencias y recuerdos del más allá.
Sensaciones Corporales:

Descripción: La cercanía con los muertos se traduce en sensaciones físicas para Matvey. A menudo siente un frío helado, como si las almas tocaran su piel, y una sensación de pesadez, como si cargara con las historias y emociones de los fallecidos.
Aumento de Poderes Nigrománticos: Los rituales realizados en esta habitación son más potentes y efectivos, permitiendo a Matvey invocar y controlar a los muertos con mayor facilidad.
Efecto Secundario Posible:

Sobrecarga Emocional: La intensa conexión con los muertos puede ser emocionalmente agotadora. Matvey puede experimentar un torrente de emociones ajenas, recuerdos dolorosos y un sentido abrumador de melancolía y pérdida.

GIORDANO

obtiene un poder:

Tres Llamas de Imbolc
1. Llama de la Sabiduría
Descripción: Otorga claridad mental y percepción mejorada.
Efecto: ventaja en tiradas de inteligencia y sabiduría, habilidades asociadas (conocimiento, percepción, investigación), y recibir una visión o consejo útil del Narrador. Doble dado
2. Llama de la Transformación
Descripción: Permite alterar la forma de uno mismo y/o objetos.
Efecto: Cambiar apariencia o transformar objetos de tamaño similar; alternativamente.
3. Fuego del Hogar
Descripción: Proporciona protección y confort.
Efecto: Bono de resistencia (+10 DM) contra miedo y encantamiento, genera calor y luz. A todo el grupo
Duración: 3 turnos.
Cada efecto una vez por día

SHYVANNA

Efectos de la Habitación:

Intensificación de los Sentidos:

Descripción: Al entrar en esta habitación, todos los sentidos de Shyvanna se agudizan. Los colores se vuelven más vibrantes, los aromas más intensos, y el tacto se vuelve exquisitamente sensible.
Aumento del Deseo: Los deseos y pasiones internas se ven amplificados, fomentando una sensación de lujuria y necesidad de conexión física.
Atracción y Magnetismo:

Descripción: La energía de Beltane imbuye a Shyvanna con un aura de magnetismo personal, haciendo que quienes se encuentren cerca de ella se sientan irresistiblemente atraídos.
Encanto Irresistible: Las palabras y acciones de Shyvanna adquieren un atractivo especial, aumentando su capacidad para influir y seducir a los demás.
Renovación y Vitalidad:

Descripción: La energía vital de la habitación renueva y revitaliza a Shyvanna, llenándola de vigor y fuerza.
Sanación Acelerada: Heridas menores y fatiga se curan más rápidamente mientras Shyvanna permanece en esta habitación, gracias a la atmósfera de renovación constante.

efectos Secundarios Posibles:

Sobrecarga Emocional: La intensa amplificación de los sentidos y deseos puede ser abrumadora, llevándola a estados de sobreestimulación emocional y física.
Pérdida Temporal de Control: La energía de la lujuria puede hacer que Shyvanna se vuelva impulsiva, actuando por deseos inmediatos en lugar de pensar racionalmente.

"Creo que no le están llegando mis comunicaciones"

Directamente podria ser que el gecko se hubiera quedado sin bateria...o que estuvieramos demasiado lejos... Probaría más adelante. En teoría deberia durarle la batería. Intentaría observar a través.

Pero ahora estaba moliendo las piedras de cuarzo, en un mortero que habia conseguido, sentado en la mesa. Añadí la proporcion necesaria a la tinta y después hice lo mismo con la sal.

Podríamos hacer los tatuajes a la antigua usanza, con una aguja o un hueso, pero...tardariamos horas. Mejor fabricar una maquina. El motor, energía...yo mismo. Chasqueé los dedos provocando una chispa y asentí para mi mismo. Solo tenía que pensar en hacer girar la biela, moviera el transmisor y el martillo, y de ahi la aguja. Busqué entre mis cosas metales, ademas del cuhillo que me habia robado de las cocinas, que me serviria, pero para darle forma...

"fundir, remoldear..."

¿Iba a dar tiempo? Ellas lo necesitaban...debia darlo. No habia cerrado la puerta asi que aun estaba ordenando los materiales cuando entró Shy seguida de Cedric.

- Claro. - por supuesto, Aric. Se me vino a la cabeza la imagen de ella ensangrentada en mi taller el dia de su boda. - Tecnomagia. Dejé con Aric un gecko tecnomágico a modo de walki talki. Si hay algo que quieres que le diga...Va por impulsos nerviosos. Puedo darle tu mensaje, pero de momento no estoy teniendo suerte con las contestaciones. - me di cuenta entonces que Shyvanna ya no iba vestida con una sabana si no que llevaba un hermoso vestido que me hizo ver que cumplia perfectamente las proporciones del numero aureo en todas sus curvas.

"eeehm"

- Debo hacer lo mas rapido que pueda una buena maquina de tatuajes para ayudar a tu hermana con lo de las raices. - dije volviendo a la mesa de trabajo la atención. Saqué un pequeño soplete de mi caja de herramientas de viaje para fundir el metal pero entonces, tres llamas aparecieron frene a mi (llamas de fuego, no de animales eh). Me quedé mirando a las inofensivas llamas danzarinas que habian aparecido frente a mi, con el ceño fruncido. No, no habia sido mi soplete. Las llamas...de tanto mirarlas...parecieron decirme, en mi cabeza, qué eran y que hacia cada una.

- Imbolc?

"tú...la segunda...."

Alargué mi mano hacia ella y la "acuné". Las otras se desvanecieron. La llevé cerca de mi cara, pensando...imaginando. Tenia el material. Con su magia, podría transformarlo. Liberé mi mano y la llama se elevó un poco, flotando sobre mi. Coloqué las dos manos abiertas a modo de parentesis con los metales dentro, y pensé en qué debia convertirse cada parte del mismo, el volumen, la forma y las medidas que debian tener, exactamente...para pasar de un cuchillo, una pulsera y un anillo comun y corriente, a un transmisor, un motor sencillo, biela, martillos, y tornillos de fijacion. El muelle, el bastidor, y la aguja. Ante mis ojos, la creación tomó forma, tal como había sido en mi cabeza.

"ya está...ha sido...fácil"

Miré a los autómatas, pensando que...reparar las piezas rotas iba a ser bastante sencillo también, si lo planteaba del mismo modo que acababa de realizar la máquina.

- Voy a intentarlo otra vez, Shyvanna.

[Shyvanna quiere decirte algo, mas te vale estar escuchando}
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2. Llama de la Transformación
Descripción: Permite alterar la forma de uno mismo y/o objetos.
Efecto: Cambiar apariencia o transformar objetos de tamaño similar; alternativamente.

"lo sabia"

Pensé cuando toda su fachada se deshizo ante la mención de Aric. Lo sabía... pobre Shyvanna. Hasta que punto le habia afectado lo de Aric? Por supuesto mucho mas de lo que nos hizo creer.

[No te va a odiar, Shy. Odiará a Charles, al Sanguis...no a ti]

Estaba convencido de ello...o...casi. Los vikingos a veces me resultaban bárbaros de más en ciertas cosas. Pero era imposible odiar a Shy. Fui con ella hasta la habitacion del inventor, que se habia dejado la puerta abierta, y observé hacia adentro. Sobre todo con especial curiosidad las llamas que aparecieron y lo que dijo el.

"Las tres llamas de Imbolc? Curioso....esta es su habitacion, verdad?"

Miré la puerta para comprobar los simbolos y asentí para mi. Despues hice aparecer unas letras para Giordano y Shy tambien.

Parece ser que la hermana Imbolc ha bendecido su estancia con el don de su fuego de la transformacion. Artesania, arte, herreria, orfebreria, forja del hierro...fabricacion de armas...

Señale con la cabeza lo que acababa de crear y una pequeña sonrisa de curiosidad en mi rostro. Hasta notar a Shy apretarme los dedos...estaba...estaba muy nerviosa, a juzgar por como se retorcía.

COCINAS
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"están perturbados. Hay una rubia sexy, y el cuñado...al menos tiene mas titulos nobiliarios que el chucho otro. Pero no parece del tipo que te hace reir"

Lo abrazó, finalmente. Yo los miré cruzado de brazos hasta que Cath me enganchó y me obligó a unirme a ese abrazo. Ah, a la mierda. Seria la ultima vez que podríamos hacer algo asi. Asi que los abracé...eso si...un tanto...perturbado por tanta demostracion de amor Le Fay.

- Me esta empezando a entrar angustia. Tanta disculpa y lamento. Sí, Jean fue un capullo. Pero yo fui un idiota por meterme con un ritual que no manejaba. Y un ególatra.

Miré a Des y rodeé a Cath por la espalda con un brazo.

"Pobrecita, si parece la pequeña, verdad?"

Se separó por fin y sonreí de lado, con mi habitual toque...perverso.

- Te pones horrenda cuando lloras. Se te han inflado los ojos y tienes la nariz roja como un payaso. - solté la puya que ambos esperaban y me quedé a gusto.

- Oye. -me quejé cuando me quitó la botella pero...fue para usar copas. - Tsk. Muerto y pijo. - pero acepté de buen grado y tomé la copa

"Si, por favor. Comparte detalles...CATTY"

No. Podían "jugar" a que estaban todos en el mismo equipo. Ella misma podía hacerlo, tal y como decía, Catherine, pero Wthyr Pendragón no. No era a V a quien debía reñir, no en ese caso. Mientras bebía, puso la mano sobre el hombro de V en apoyo a su marido. Por ese rato, asintió también a Matvey un par de veces.- De acuerdo, querido. Haz lo posible por descansar para tener una energía... positiva. Por Jack.- Por todos ellos en realidad. Matvey era una persona realista, pero sabía que podía hacerlo.

Asintió después hacia Gio cuando le pidió la reabastecedora.- Traje solo una, admito mi falta en ese aspecto, pero te haré algunas. Te las hago llegar en un momento, no te duermas, salen rápido.- Y antes de que otra sucediera, empezó a crecer las plantas que necesitaba justo enfrente de su mesa, porque era madera y era más fácil así. Lo último que esperaba esa noche era que ese mismo Pendragón le respondiera sobre la espada que había mencionado, sin embargo tenía algunas dudas.- ¿Están seguros de que arrebatársela servirá? - Preguntó. Esas cosas no pasaban lealtad así como así. Podían robar la espada, pero ¿podían robar su magia? Al menos le sugirieron una pista a V sobre sus protecciones.- Incluso podríamos encontrar al Descendiente que te las puso directamente.- Le susurró. Aquello podía ser un poco menos arriesgado; y ella confiaba en él un poco más que Matvey, así que le gustaba que hubiera posibilidades. La reunión comenzó a hacerse de pocos, y al final no quería quedarse a contar chistes con Wthyr, así que comenzó a levantarse.

Tomó sus plantas, algunos ingredientes raros que encontró para la poción y sus dos copas, pasándole el vino de estrellas doradas que estaba más allá en la mesa y lo que le quedaba del de luna plateada a V antes de tomar la mano libre de su marido y dirigirse arriba.- Descansa, Wthyr.- Dijo cortésmente al pasar a su lado y luego salieron de aquel lugar. Cuando subieron por las escaleras, su actitud era tranquila, feliz, refrescante... No había nadie en el centro de las habitaciones, pero había una cierta esencia deliciosa que le estaba gustando oler. Bebió un poco del vino de su copa y sonrió a su esposo mientras escuchaba la chachara que venía de la habitación de Giordano, captando que estaban ahí algunos Pendragón.- Nos podemos unir a la fiesta.- Le sonrió, justo antes de entrar con él a su habitación.

Se alejó por un segundo para dejar lo que llevaba en las manos sobre una mesa primero. No tardó en poner sus plantas a remojar y encantó el caldero donde había hecho las herbos para que comenzaran a machacarse lentamente. Se sacó la capa dejándola colgada, para luego poner en otra mesa cada uno de sus anillos, la tiara que llevaba, y sobre todo el collar de esmeraldas y diamantes, admirándolo un segundo. Se volvió a su marido, con la copa en los labios y una pregunta en la cabeza ahora que estaban solos.

Se acercó por la espalda a V y se abrazó a él, comenzando a dejar algunos besos por el camino de sus hombros y detrás de su nuca. Más que necesidad de estar con él, en realidad... tenía curiosidad. Con la mente tan libre de sus propias limitaciones, tenía muchas ganas de saber qué había en la cabeza del moreno, qué necesidades tenía debajo de la piel.- ¿Qué vas a hacer? Sé que estás en modo guerra, pero debes estar mus excitado por ese beso con Cedric...- Murmuró buscando su mirada con una ceja alzada y media sonrisa. Se sentía celosa, pero de buen modo, y también coqueta. Quería conocer la necesidad que había despertado, a qué sabían los labios del dragón. Sí, aquel beso había sido por motivos más apremiantes, pero ese hombre no dejaba de ser su marido y ella lo conocía bien. Ese beso no tuvo nada de inocente. De seguro estaba dándole vueltas en la cabeza desde ese instante.- ¿Cómo es diferente para tí? ¿Qué es diferente en el deseo que puedes sentir entre un hombre y una mujer?- Ella no había estado nunca con una mujer, así que por lo que entendía, solo podía ser cuestión de... rudeza. De qué tan más brusco podía ser con unos y con otros, pero a su marido ya lo había tenido completamente desatado antes, y había sobrevivido. Mientras el silencio se extendía entre ellos, a excepción del sonido de la poción mezclándose, bebió.