Áreas verdes, de recreación y huertos

Recuerdo del primer mensaje :


Tras la reforma de los antiguos campos de concentración han trabajado en hacer crecer la vegetación, por ende, hay grandes áreas verdes para pasear. También hay una zona especifica de huertos y agricultura.

Tras salir de aquel edificio con el “aprobado” del chamán donde nos invitaba a la celebración, seguí el tumulto y el ruido de los tambores hasta alcanzar la mesa en forma de cruz. Algo más adelante, y entre el gentío, reconoció a los chicos que habían salido de aquella sala especial, los que iban de blanco. Los coronaron con flores y el segurata daba paso a los niños, ¿dónde se había metido el tipo de la pistola? Lo buscó con la mirada a su alrededor, mientras los extasiados le empujaban por ambos lados cegados por … su felicidad. Otro se le acercó para darle la bienvenida, dándole un abrazo y como vino, se fue. Le seguí con cara de estupefacción e incredulidad. Dudando si esa gente se había tomado algo raro o si eran humanos que les habían reiniciado el chip cervical con algún tipo de programa de comuna hippie.

Alguien se acercó, ni siquiera le presté la suficiente atención para fijarme en sus facciones, pero me indicó mi posición en aquella mesa en forma de cruz. Al extremo. Abracé el petate contra mi pecho y me senté en la silla con muchísima desconfianza. En el centro de la cruz: la pareja con las flores y un mozo de pelos largos y morenos. El menú del día: lo que parecía un apetitoso pastel de carne que examiné con cuidado con el tenedor. Parecía apetitoso y el hambre apretaba demasiado. La razón decía que no, el estómago decía lo contrario. Jugué en silencio con la carne mientras buscaba a mi antiguo compañero de pelotón que disfrutaba del plato en compañía con otros. Suspiré y… comí, aunque cada vez se me estaban pasando más las ganas de seguir por allí. Era todo demasiado… sospechoso


Percepción: Busca a su alrededor a Azra y trata de observar en sus compañeros cercanos las marcas de las cicatrices de las pilas cervicales en los cuellos o cualquier otro rastro que pudiera indicar que SAM podría seguir de alguna manera por allí.

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'Dado (10)' :

Le dio un codazo a Jarkko cuando silbó así pero asintió ante la reprimenda, aún así no iba a pedir una disculpa. Por lo que sabía sobre los militares seguro estaba asqueadito de los magos. En fin, que fue avanzando con Jarkko escuchando aquello de su “seres perseguidos” y tensando los labios para luego mirar hacia la pareja. A ella no le parecían más perseguidos que los magos o al revés. Todos contra todos, eso era.

Se hizo la súper cariñosa con Jarkko cuando se acercaban a los jardines y le cogió del brazo, enganchándolo como buenos amigos y apoyó la cabeza en su hombro para luego hablarle al oído con una sonrisa fingida -Los dos llevaban… pila. Uno es lobo- Tras eso fingió de nuevo, o no tanto, ¿Qué queréis que os diga? Y le dejó un besito en la mejilla antes de alejarse. Bien podría parecer que se trataba de darle la bienvenida al culto.

Vio cómo los niños le entregaban las coronas de flores y entrecerró los ojos. Las mesas estaban dispuestas en forma rara.  No había visto qué tipo de celebraciones eran aquí pero… -¿Esto es una boda?- Preguntó para Jarkko también en tono bajo pero luego se alejó de él para interceptar a los niños que habían entregado las coronas con una sonrisa de oreja a oreja -¡Qué coronas más bonitas! ¿Jarkko y yo podemos tener una? Es mi novio- Mintió con descaro, y con un poquito de ganas de verle la cara al moreno.


Dado de carisma Se acerca a los niños que han llevado las coronas y les pregunta porqué y qué están celebrando.

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'Dado (10)' :

La tabernera no se había equivocado en la proyección del mapa. El lugar donde me aparecí era una casa destartalada que abría un camino que atravesaba una colina donde el barro de las lluvias dejaba entrever los primeros brotes de flora que germinaba después de la guerra y el invierno. La colina dejaba ver, en la otra loma, el espacio que habían tomado aquellos hippies para vivir. Se le escapó un guau mudo mientras recorría con la mirada todo el esplendor de aquella comuna. Había árboles de colores, pequeñas edificaciones, una con forma de flor, un lago... todo aquello no salía en la visión del Palantir. Bueno, los campos de cultivo sí. Ardiendo. Tragó saliva y se fue acercando sigilosamente.

Según se fue acercando el sonido de los tambores se le hacía ensordecedor a la par que molesto, estaban tan perfectamente sincronizados que retumbaban en los oídos. Arrugó el ceño y se coló por entre el maizal, haciendo oídos sordos. Empezó a escuchar voces y llegó a las cocinas, el olor las delataban. Al otro lado del recorrido de aquel hormiguero que no dejaba de traer comida de un lado a otro una mesa, en cruz, con una multitud sentada a punto de festejar algo. ¿Pero qué celebraba en marzo? ¿San David? ¿San Patricio? Gruñó en silencio mientras se volvía a esconder entre el maíz y buscaba con la mirada la cabellera morada de Monica. Al final la localizó, junto a Sete, pero al otro lado de la mesa en forma de aspa. Maldijo en silencio y trató de pensar un plan… esconderse entre las plantas hasta que cayera la noche se le antojó como lo más lógico.

Dado de percepción: ¿Hay alguna cosa rara en el maíz?

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'Dado (10)' :

Quiero entrar a las cocinas
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Miré hacia Savannah cuando se puso tan proxima conmigo, al menos habia tenido la deferencia de enganchárseme por el brazo que aun era brazo y no al otro, que eran puras sombras y metales. Traté de controlarme los nervios pero olía demasiado bien y....

- Que son qué?

"ah, pila"

- Mucha gente la lleva hoy dia... - no lo veía como algo determinante. Pero lo tendría en cuenta. - Crees que es una boda? Eh...pudiera ser.

Cuando se apartó de mi para ir a charlar con los niños por fin pude soltar aire. En que puñetas estaba pensando? Que diablos me pasaba con la chamana? Es que no habia tenido ya suficiente? Me hice un facepalm gimotenado alguna maldicion por lo bajo por ser tan imbecil...

Ademas soltó eso de que eran novios, tan a la ligera, y me puse colorado del todo. Por suerte tenia una mano tapandome media cara.

-Si....novios....yo voy a.... a sentarme por ahi.... - a cualquier lugar donde no pasara tanta vergüenza. Me despedí de Savannah agitando un poco la mano y eché a andar, alejandome un poco de la multitud. El olor a comida me guió a las cocinas. Pensé en entrar alli, echar un ojo y quizá echar una mano...aprovechar para cotillear ahora que la gente estaba atareada.

Esquivé a dos que iban con bandejas llenas de limonadas y al llegar a la puerta, me detuve, preguntando si me podían dejar entrar a echar un cable, diciendoles que era muy buen cocinero.

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'Probabilidad' :

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'Probabilidad' :

Comí de aquel pastel que me estaba sabiendo a gloria a carrillos llenos, siguiendo con la mirada a la figura del chico mago de brazo raro hasta el edificio desde el que sacaban la comida, que supuso ser la cocina. Alguien le llamó la atención y tuvo que volverse a ella, evitando así seguir la conversación que la mujer de pelo blanco debía tener con los que estaban en el centro. Alzó la ceja, descendiendo con delicadeza el tenedor y notando las miradas clavadas a su alrededor, sintiéndose terriblemente incómodo tragó la bola de comida, de una forma muy pesada. -Disculpe. Novato al que no le han explicado las costumbres. ¿Qué celebramos hoy?- Trató de excusarse con una sonrisa molesta. Bajó el petate y lo colocó entre sus piernas, mientras colocaba el tenedor en la posición de inicio de la comida. Gracias a que se había convertido en el centro de atención pudo estudiar con más cuidado a sus convecinos de comida, no se le escapó el detalle de los cuellos con la cicatriz reciente y eso le espinó, pues pensaba que, con la desaparición de SAM, ya no tendría sentido seguir con aquella tecnología o… ¿habrían aprendido a quitarlas? ¿Y … los androides? ¿Qué pintaban en todo aquello?

Guardó las manos por debajo de la mesa, apoyadas en las rodillas, mirando con tristeza el trozo de pastel. Y luego fue mirando la disposición de aquella mesa tan curiosa hasta el centro de la mesa, con el moreno, los festejados y aquel tapiz extraño a la par que conocido. Entonces, le llamó la atención a la misma mujer pelirroja de acento francés -Disculpe. No he podido evitar pensar en el parecido que hay entre ellos…- Miró a la mujer como esperando que le explicara algo que no estaba entiendo, o que se le estaba pasando por alto. Trató de atar cabos: SAM, Klaus, los androides, las pilas, la comida… ¿aquello era una secta? ¿Aquel hombre era su líder? Empezó a dudar de la humanidad del que parecía el líder. Pero todo eran pesquisas... ¿tendría que avisar a los magos? Y, si, sencillamente, ¿se dejaba llevar? ¿Tan malo sería?

Dado de percepción para obtener respuestas.

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'Dado (10)' :

Le guiñó un ojo a Anja cuando se rió de Jarkko porque le daba una deliciosa sensación de éxito hacerlo sonrojarse con tan poco. Si se pusiera bien a la marcha… Se pondría morado fijo, pero decidió no pensar más en eso - ¿Qué día exactamente? ¿El de su cumpleaños? - Preguntó inmediatamente hacia el niño que parecía más abiertito a hablar, pero entonces oyó lo del cambio de flores y miró hacia las coronas que tenían aquellas personas con curiosidad así que eran especiales porque hoy era su día. El día de qué.

EL DÍA DE QUÉ.

Perdió de vista a los niños cuando los llamaron hacia otra zona.  Se cruzó de brazos mientras caminaba lentamente hacia las cocinas, por donde había ido a ver a Jarkko con una ligera mueca en la cara. Parecía que había muchísima gente allí, Savannah miró a Klaus sentarse en el centro y todos parecían empezar a hacer algo… No sabía cuál era su puesto. ¿Iban a quedarse a comer? Intentó hacer un gesto a Jarkko para llamar su atención. El silencio fue algo raro y después que todos se levantaran juntitos, menuda coordinación. Los cánticos no sabía de qué iban y la verdad es que le estaba apeteciendo volver a la casa de Ian y jugar con Aedan. Si la cocina estaba sola podrían meter algunas cosas en la mochila así que fue hasta donde Jarkko -Pues se celebra su día, pero no sé de qué-

Todos comían, todo parecía normal -En fin, quizás soy una paranoica y ya…Me apetece comer. ¿Quedó algo en la cocina? Deberíamos coger algo para llevarle a Ian- Le preguntó al moreno haciendo un gesto con la barbilla para que se apartara y así entrar a ver, si total, todo el mundo estaba comiendo.

El ambiente de celebración era aparentemente normal, así que no supe qué decirle a Setelah cuando me preguntó que me parecía todo. Lo de la mesa en X sí que me pareció raro. - Pero...¿el punto de qué? deberían estar en forma de U... - comenté por lo bajo sobre el asunto de las mesas, mirando después hacia el mural. Asentí discretamente y algo disgustada a lo de considerar a S.A.M una deidad, eran unos ingenuos. Si me gustaban era porque parecía un lugar pacífico y seguro con comida. - Ya. Supongo que fueron trascendidos y que no se enteraron de todo lo sucedido. - seguí con el tono confidencial, suspirando por lo bajo por lo de sacar de allí a los niños. Él tenía razón, a la larga podía haber problemas con gente con esas creencias, por muy amables que pareciesen.

- De acuerdo. Puedes marcharte tú con ellos en la alfombra. De todos modos son nuestros hijos, podemos sacarlos de aquí cuando queramos. Seamos discretos sólo para que no se pongan pesados. - volví a localizar a los niños, poniéndome tensa al ver que los llamaban para ir a comer a otro lado. No, perderlos de vista no. Aquello de que se alejasen me ponía nerviosa, más si estábamos inquietos. Le di un codazo a Setelah para que fuésemos a por ellos, aunque en ese momento se acercó Maya con los pasteles de carne y el vegetariano. - Gracias. - respondí de manera distraída sin dejar de mirar a otro lado, aunque pudiese parecer un poco maleducada. Esperé a que pasase el momento de canciones con los protagonistas de la fiesta, cogiendo a Setelah de la mano para levantarnos. - Vamos un momentito a ver a los niños, guárdanos el pastel de carne. - le dije algo más sonriente a Maya para que colase, tirando después de Setelah para ir hacia donde habían ido todos los críos. Avancé hacia ellos a paso rápido, haciéndole un gesto al mayor para que cogiese a los mellizos de la mano.

- Y por qué tengo que irme yo? Vete tú con ellos. - le dije a Monica, porque no me hacia gracia ninguna tener que dejarla alli sola. Fingí una sonrisa amable cuando Maya me trajo la comida a parte. Qué considerados, la verdad.

-Gracias. - le dije antes del codazo de Monica, que yo tambein me habia dado cuenta cuando se habian llevado a los niños a la zona niños para que no dieran por saco. O algo asi.

Luego cánticos, gente levantandose al unisono....sí, pero nadie habia dicho aun por qué celebraban a ese par de dos.
- Un cumpleaños no parece.

Seguí a Mónica, si nuestra actitud un poco "fuera de linea" sacaba reacciones raras, era algo que no me importaba.

- Alguien debería decirles cuatro cosas sobre su "mesías", Mónica. Te has fijado en los murales de los dormitorios? Adoran a Sam. Saben de que va el percal? Claro que lo saben. Los que controlan esto lo saben. - señalé con un gesto de mi barbilla la entrada a la puerta principal, bien custodiada por aque tipo de aspecto ominoso, Azra.

No le hice más caso al guardian de la puerta, nos acercamos a los niños que estaban con sus monitoras.
- Iberio...Sophie, Joram. Nos vamos para casa. Si, los loros tienen muchas ganas de veros. Y ni hablar de Belle. Ah no, yo me quedaré un ratito más aqui de fiesta. Se siente, se siente.

Subí a los críos en la alfombra y le tiramos un besito al aire a Mónica antes de salir de alli volando, rumbo a Ouroboros, donde sin duda, me quedaría mucho mas tranquilo de dejar a los niños.

Se acurrucó entre el maizal mientras arqueaba levemente las cejas, entre la sorpresa y la incertidumbre. ¿A qué demonios estaban cantando aquella gente? No parecían tan peligrosos como todo el mundo les pintaba, pero… todavía estaba la idea de la pila y del fuego rodando su cabeza… claro que… quizás lo de la pila no era allí, ¿no? Me acomodé tranquilamente, mientras comprobaba los movimientos de los paisanos que rondaban a Sete y a Monica, como la chica de pelo rizado llevando aquella tarta desde las cocinas, las coronas de flores y aquellos que se llevaron a los niños. Ahogó un gruñido cuando separaron a los menores, no gustándole aquello y se conoce que a Sete mucho menos, porque los cogió y se los llevó en la alfombra. Alcé la mirada boquiabierto siguiendo el mueble volador perderse entre las nubes y dejando a Mónica sola. Me moví entonces entre el maíz, tratando de ser lo más sigiloso posible, hasta quedar lo más cercano a los niños. -Chist, chist. Tía Monica- Traté de llamarle la atención, no alzando la voz por encima de los cánticos y las voces de los niños -¡Tía! Soy yo, Nichollas. Hemos venido a rescataros de esta especie de… ¿fiesta?- Seguía sin entender muy bien qué era todo aquello… pero bueno, lo único que quería era salir de allí y cuanto antes, mejor.

Busqué con la mirada cualquier sitio que pudiera servirnos de escondite mientras hablábamos. Vi a dos jóvenes, con aspecto tan perdido que daba la impresión de que llevaban poco por allí. Entraron en un espacio del que no dejaban de sacar platos por doquier -Vamos a las cocinas… tenemos que salir de esta jaula de grillos…- Le indiqué con la cabeza la dirección, volviendo a encogerme para volver a surcar el espacio que me separaba en relación al edificio que parecía la cocina tratando de acceder por la ventana de atrás o, como mínimo, esconderme por detrás de la pared para que el tipo con pistola no me descubriera…. Desde allí observé al grupo y sus canciones y sus cosas, ¿aquello era SAM? Uhm, parecía SAM.

-jaja, ti his pisti quiliridi - iba haciendole burla a la criatura que me habia dicho eso cuando hablaron de bodas y mierdas varias, en mi camino a la cocina, mientras la peña hacia eso de levantarse, cantar, comer....etc, con su decoración rara de adoradores de SAM.

Una señora amable me dijo que no hacia falta que les ayudara, y pude tener un atisbo de su vida pasada en cuanto me tocó el brazo. Una historia triste....como la de muchos a mi alrededor, pensé. Poca gente habría que no tuviese tristeza en su pasado, y pérdidas.

Cuando las mujeres salieron, me quedé en el marco de la puerta apoyado, observando. Savannah se acercó diciendo que lo mismo eran paranoias suyas y ya.
- La verdad es que esta gente parece normal....y son muy amables. Lo unico raro es su apego por los androides y el hecho de que no parecen considerar a Sam como un enemigo. Pero en fin, hasta donde yo se, tener creencias estúpidas no es ningun crimen.... - dije alzando mis hombros, con los brazos cruzados. Me aparté para que Savannah entrase a saquear la cocina. Me parecía buena idea.
- Deberíamos intentar colarnos en la sala aquella de las que vimos salir al par de dos a los que les estan celebrando el día. Había seguridad asi que supongo que es algo que no quieren que vea cualquiera. Si esconden trapos sucios, es alli. Además, fíjate en el tio de la puerta. Está ahi modo segurata. Ese no está de celebración...para nada. Puedo intentar distraerlo, y tú mientras te cuelas. Sal de aqui como si nada, ya me encargo yo de la distracción

Dije mientras me acercaba a uno de los fogones de la cocina, encendiendolo y poniendo gesto de piromaniaco. Un fuegecito de nada, que podrían controlar....facilmente. No? Le hice un gesto a Savannah para que se largara de ahi cuanto antes, y cuando lo hizo, metí un paño de cocina dentro de los fogones, haciendo que comenzara a arder por las esquinas.

Mucho humo, poco fuego. Asi que le eché aceite encima para un efecto más dramatico.

- Vale, bastante dramático. - el humo pronto sería mas llamativo y yo saldría de la cocina modo dramático, avisando a Azra de que había tenido un accidente en la cocina mientras intentaba hacer un huevo frito y que le habia prendido fuego a las cortinas. Y que necesitaba ayuda, evidentemente...

Asintió un poco ante al respuesta de Jarkko y luego alzó levemente los hombros con respecto al tema de las razas -Ya has visto como me han callado la boca con el militar- Supuso que intentaban ser tolerantes.  Cogió varias cosas que metió en su mochila y buscó algo que no fuera perecedero para tener más seguridad a la hora de comer, aunque ella quería semillas. Tendría que irse a otro sitio o cogerlas de los vegetales así que se preocupó por meter tomates y pimientos.

-¿Qué?- Alzó las cejas para oír aquello de colarse, le sorprendía que él... sugiriera eso tan fuera de...lugar... Tan temerario. Sinceramente, no le parecía muy buena idea pero era divertido verlo fuera de su zona de confort así que lo haría -Ya…- Lo de la seguridad era cierto y encima con el tema de olor a sangre -Es Azra- Le dijo a Jarkko para que se acordara el nombre y luego oyó aquello de que ELLA se colara, sonrió un poco incómoda. Ellos habían sido muy amables con ella...y... -Ajam…eh…- Se colgó la mochila preguntándose y si entraba allí…¿Qué carajo iba a buscar? Empezó a sentir el corazón latiendo con fuerza pero avanzó intentando ignorar el tema del posible incendio mientras se dirigía hacia el edificio. No le pasó desapercibido que Maya se incorporó pero no iba a por ellos. ¿Era a por la pelimorada?

Iba para allá, sí, pero no dejaba de parecerle raro que los niños hubiesen dicho “nacimiento”. ¿Cómo iban a nacer si eran adultos? Pero que muy adultos… Se mordió la mejilla por dentro con algo de fuerza mientras retorcía las manos en las asas de a mochila. Miró hacia el edificio y entonces se percató de que había un tapiz que se asemejaba mucho a la situación que estaban viviendo en ese momento. Ella no conoció a SAM en persona pero había sabido un poco de ellos al vivir en el culto  sólo que ese robot se parecía…Bueno, tenía mucho parecido a Klaus.  Empezó a dirigirse hacia allí, olvidándose por un momento de que su misión era otra.

No obstante, su oído lobuno se percató de Jarkko y la conversación que estaban teniendo con Azra y Maya. Miró hacia el edificio cuando escuchó algo y frunció el ceño, ignorando la amenaza hasta que escuchó la palabra ejecución. Empezó a acercarse hacia donde estaba Jarkko -¿Qué?- Arqueó las cejas y miró a Maya un instante como sin comprender -¿Qué hemos hecho?- Trato de ignorar el hecho de que tenía un par de latas y vegetales en la mochila pero de allí a…a ejecutarlos.

El miembro 'Savannah' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado (10)' :