Página 1 de 2. • 1, 2
- ubicación:
Antaño era piedra ahora las murallas son de metal. El castillo, en piedra, ha sido fortificado con modernos materiales, cuenta con torres de vigilancia y todas las defensas tecnologicamente avanzadas de un puesto de mando.
Empezó a reconstruirse asi sobre sus ruinas, para hacer las veces de Cuartel General para las Fuerzas de Seguridad Androides. Ahora, los magos extremistas se aprovechan de su esqueleto para organizar, vigilar y desplegar desde aquí a sus fuerzas militares mágicas (para aclararnos, es como un cuartel general de aurores)
Los estandartes rojos de la Loba Capitolina tambien cuelgan de estas murallas.
Aparecí en Saint Angelo acompañado por los dos guardias. En la puerta. Nada mas hacerlo, me puse a mirar todo el lugar. Analicé sorprendido cómo habia cambiado esa parte de Roma…
“se ve mucho mas reconstruida que Turín. Modernizada….tecnologica...clásica….”
En silencio crucé las puertas, los estandartes rojos y negros eran feos, no me gustaban. Cuando abrieron las puertas concentré mi magia y la canalicé hacia los sistemas, tenia curiosidad por saber si eran solo magia o la tecnologia también corría por esas puertas de seguridad, como en el nucleo de la Ciudadela Alpha. Y...sonreí de lado, al notar como me devolvía cierta similitud.
-Tecnología de S.A.M?
Los guardias me miraron algo confusos. Sam?
-La i.A culpable de todo el caos? - incultos!
Se encogieron de hombros y me pasaron al interior. Credenciales, identificaciones...datos…
“está muy adulterada…”
“tanto mejor, no? Habrán androides?”
Divagué un poco sobre aquello. No lo parecía. Miré a mi alrededor y entonces me di cuenta de que ya estabamos frente a la puerta de un despacho. Cuantos giros de pasillo habiamos hecho?
“se ve mucho mas reconstruida que Turín. Modernizada….tecnologica...clásica….”
En silencio crucé las puertas, los estandartes rojos y negros eran feos, no me gustaban. Cuando abrieron las puertas concentré mi magia y la canalicé hacia los sistemas, tenia curiosidad por saber si eran solo magia o la tecnologia también corría por esas puertas de seguridad, como en el nucleo de la Ciudadela Alpha. Y...sonreí de lado, al notar como me devolvía cierta similitud.
-Tecnología de S.A.M?
Los guardias me miraron algo confusos. Sam?
-La i.A culpable de todo el caos? - incultos!
Se encogieron de hombros y me pasaron al interior. Credenciales, identificaciones...datos…
“está muy adulterada…”
“tanto mejor, no? Habrán androides?”
Divagué un poco sobre aquello. No lo parecía. Miré a mi alrededor y entonces me di cuenta de que ya estabamos frente a la puerta de un despacho. Cuantos giros de pasillo habiamos hecho?
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
La puerta del despacho se abrió bruscamente y salieron tres guardias arrastrando a un elfo oscuro, o algo asi, porque llevaba la capucha echada encima y no se le veia mucho de la cara. Pero iba con manos esposadas atrás y prácticamente inconsciente. Pasaron de largo de Giordano y los guardias, dejando la puerta abierta.Se perdieron por el pasillo.
Al fondo del oscuro despacho que olía de manera desagradable, se oyo una voz, tan desagradable como ese olor, entre amable, dulce, suave...con ese toque siniestro.
-El siguiente! - los guardias le indicaron a Giordano que pasara y lo escoltaron a su interior. El despacho era oscuro, estaba cargado de estantes con libros, pociones, muñecas de porcelana raras, cruces, rosarios, cofrecitos pequeños dorados…. y rosas secas por aqui y por alla que intentaban enmascarar sin exito alguno ese olor rancio anteriormente descrito. De hecho lo hacian aun peor al mezclarse.
El mago sentado tras el escritorio examinó al recien llegado con ojos de pescado muerto, indicandole que se sentase en la silla frente a él.
-Tenemos que hacerle preguntas y tiene que responderlas con total sinceridad. - abrió una carpeta en la que ponía “Turin” una hora y una fecha exacta, y comenzó a leer. - Viajaba usted en el barco que ha aparecido en Turin?
Lo miró por encima de las gafas, esperando. Y luego sonrió mostrnado los dientes, hablándole a Giordano como si le recordase a un niño pequeño y travieso las normas de comportamiento basicas.
-sinceridaaad….
Interrogador Oficial
La puerta del despacho se abrió bruscamente y salieron tres guardias arrastrando a un elfo oscuro, o algo asi, porque llevaba la capucha echada encima y no se le veia mucho de la cara. Pero iba con manos esposadas atrás y prácticamente inconsciente. Pasaron de largo de Giordano y los guardias, dejando la puerta abierta.Se perdieron por el pasillo.
Al fondo del oscuro despacho que olía de manera desagradable, se oyo una voz, tan desagradable como ese olor, entre amable, dulce, suave...con ese toque siniestro.
-El siguiente! - los guardias le indicaron a Giordano que pasara y lo escoltaron a su interior. El despacho era oscuro, estaba cargado de estantes con libros, pociones, muñecas de porcelana raras, cruces, rosarios, cofrecitos pequeños dorados…. y rosas secas por aqui y por alla que intentaban enmascarar sin exito alguno ese olor rancio anteriormente descrito. De hecho lo hacian aun peor al mezclarse.
El mago sentado tras el escritorio examinó al recien llegado con ojos de pescado muerto, indicandole que se sentase en la silla frente a él.
-Tenemos que hacerle preguntas y tiene que responderlas con total sinceridad. - abrió una carpeta en la que ponía “Turin” una hora y una fecha exacta, y comenzó a leer. - Viajaba usted en el barco que ha aparecido en Turin?
Lo miró por encima de las gafas, esperando. Y luego sonrió mostrnado los dientes, hablándole a Giordano como si le recordase a un niño pequeño y travieso las normas de comportamiento basicas.
-sinceridaaad….
Reaccioné de modo rapido cuando la puerta se abrió, y me hice a un lado para dejar paso. Me quedé mirando la estampa de tres, con las cejas alzadas. No estaba seguro pero, ese no era el drow liante de la Brigada? No se dejaba ver mucho en el barco, pero….era él, verdad? La ropa era la misma, al menos.
Lo fuera o no, lancé una mirada un tanto indignada a los guardias...asi trataban a la gente?
“ya no me gusta esta gente. Y ahi huele raro, yo no quiero entrar”
Pero esbocé mi mas falsa y atractiva sonrisa y entré cuando fui llamado. No disimulé una mueca de asco por el olor, de hecho tuve que carraspear. La puerta se cerró y los guardias me flanquearon a distancia normal pero incomoda para mi. Tomé asiento tras evaluar el oscuro lugar.
“le vendría bien alguna lampara que otra….”
Me fijé también en su...aspecto tan beato. Llevaba mucho tiempo sin ver algo asi.
-Si, sinceridad, verá, he venido porque sus amables empleados me han dicho que aqui pueden expedir el sello ese mágico para moverme libremente por Roma, Turin, Italia en general….que es lo que quiero. - esperaba que me pidiera el nombre pero no, fue por el otro lado. Levanté una ceja por la pregunta.
-Evidentemente, señor Cura. Y no solo viajaba en el barco, si no que YO he fabricado ese barco. Es obra mia.
Pensé que no iba a poder ser tan sincero con las siguientes frases.
-Pero un grupo de borrachos ruidosos me lo robó. Me oculté en las bodegas esperando el momento de poder volver a hacerme con él, y al darlo por imposible, me escapé.
Puse las manos entrelazadas sobre la mesa manteniendole la mirada de modo incomodo e intenso a ese cura extraño. O lo que fuera.
Lo fuera o no, lancé una mirada un tanto indignada a los guardias...asi trataban a la gente?
“ya no me gusta esta gente. Y ahi huele raro, yo no quiero entrar”
Pero esbocé mi mas falsa y atractiva sonrisa y entré cuando fui llamado. No disimulé una mueca de asco por el olor, de hecho tuve que carraspear. La puerta se cerró y los guardias me flanquearon a distancia normal pero incomoda para mi. Tomé asiento tras evaluar el oscuro lugar.
“le vendría bien alguna lampara que otra….”
Me fijé también en su...aspecto tan beato. Llevaba mucho tiempo sin ver algo asi.
-Si, sinceridad, verá, he venido porque sus amables empleados me han dicho que aqui pueden expedir el sello ese mágico para moverme libremente por Roma, Turin, Italia en general….que es lo que quiero. - esperaba que me pidiera el nombre pero no, fue por el otro lado. Levanté una ceja por la pregunta.
-Evidentemente, señor Cura. Y no solo viajaba en el barco, si no que YO he fabricado ese barco. Es obra mia.
Pensé que no iba a poder ser tan sincero con las siguientes frases.
-Pero un grupo de borrachos ruidosos me lo robó. Me oculté en las bodegas esperando el momento de poder volver a hacerme con él, y al darlo por imposible, me escapé.
Puse las manos entrelazadas sobre la mesa manteniendole la mirada de modo incomodo e intenso a ese cura extraño. O lo que fuera.
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
Ignoró su primera petición, soltando un suave “uhumm” como de que lo habia oido, y nada mas.
-Y su nombre es? De donde viene? Pertenece a algun grupo?
Alzó la mirada cuando le escuchó decir que el barco lo habia hecho él. Intercambió una mirada con los guardias, que hicieron gestos como de no tener ni idea de si decía la verdad o no.
-Pues eso habrá que comprobarlo. El ego y la mentira son pecados muy feos….pero el robo...también es un feo pecado….- tamborileo sus dedos sobre el informe. - Habra que comprobarlo.Veritas vincit omnia.
Alargó sus manos rapidamente y agarró las del mago, que habia dejado sobre el escritorio. Con fuerza brusca se las separó y plantó los pulgares en las venas de las muñecas, por la cara interna de la misma.
-Repita lo que ha dicho antes respondiendo a las preguntas de antes...otra vez. - del inciensario comenzó a salir mas humo, y aquel empalagoso olor a podredumbre se volvió mas intenso.
Interrogador Oficial
Ignoró su primera petición, soltando un suave “uhumm” como de que lo habia oido, y nada mas.
-Y su nombre es? De donde viene? Pertenece a algun grupo?
Alzó la mirada cuando le escuchó decir que el barco lo habia hecho él. Intercambió una mirada con los guardias, que hicieron gestos como de no tener ni idea de si decía la verdad o no.
-Pues eso habrá que comprobarlo. El ego y la mentira son pecados muy feos….pero el robo...también es un feo pecado….- tamborileo sus dedos sobre el informe. - Habra que comprobarlo.Veritas vincit omnia.
Alargó sus manos rapidamente y agarró las del mago, que habia dejado sobre el escritorio. Con fuerza brusca se las separó y plantó los pulgares en las venas de las muñecas, por la cara interna de la misma.
-Repita lo que ha dicho antes respondiendo a las preguntas de antes...otra vez. - del inciensario comenzó a salir mas humo, y aquel empalagoso olor a podredumbre se volvió mas intenso.
tira 1d10 para comprobar nivel de afectacion, siendo 1 bajo. (Tirada en rol de dados porque soy vaga y estoy roleandome esto en DOCS) tira tb exito fallo para ver si logra mentir
Tirada: 5, fallo. Afectación media.
___
-Giordano Da Vinci, hijo de Paulo Da Vinci. Original de Florencia. Vengo de las islas Británicas. - respondí levantando un poco la barbilla, aparentando cierta superioridad y con elegancia. - A ningun grupo en particular.
No quería meter al Consejo ni a Ouroboros en todo esto. No de momento, hasta asegurarme que esta especie de gobierno era...algo que pudieramos querer como aliados. Aunque el modo de tratar a los recien llegados no me hacia mucha gracia. Claro que el drow….también estaba en busqueda y captura en la Isla. A saber la que habia liado en Turin.
“deberia avisarles…”
-Yo no peco de ego, señor. No se trata de ego cuando la realidad supera a lo que se cuenta de uno. - si, vale, la modestia nunca habia sido lo mio. Gwen se habría reido al oirme decir esto.
Noté un leve mareo y mi vista se nubló un poco. Era el calor? La oscuridad de la sala? Moví un poco la cabeza y cuando me agarró así retiré mis manos bruscamente de su contacto, no porque me hubiese asustado…. si no porque no toleraba semejante cercanía con tal desconocido.
-Le agradecería que no me tocase asi de nuevo. Creo que hemos terminado. - me levanté, porque me habia dado cuenta de que ahi no podía desaparecerme. Debian tener sistemas antidesaparicion, como en cualquier cuartel que se preciase. Sentí un leve mareo al hacerlo. Tampoco pude dar muchos pasos, me empujaron por los hombros hacia la silla nuevamente. - Oof... - solté algo agobiado, desinflando mis pulmones. Parecia que me habia bebido la mitad de la bodega de Arleen…. y entonces me percaté de que habia un humillo extraño saliendo del incensario. Quizá no era el calor….
Me guardé las manos en el regazo. Hasta que con un gesto del tio antipatico de las gafas cada uno de los guardias me agarró un antebrazo para darle de nuevo mis muñecas a las sudorosas y templadas manos del sujeto aquel.
Repetí con un rictus en la cara y una mirada de advertencia con los ojos clavados en el interrogador.
-Giordano Da Vinci, hijo de Paulo Da Vinci. Original de Florencia. Vengo de las islas Británicas. Tecnomago, pertenezco al departamento de Investigación. - no mentí, pero seguí sin mencionar Ouroboros. - Hui de Italia cuando los humanos arrestaron a mi padre y se lo llevaron a morir al Coliseo. - otra verdad que quizá inclinase la balanza a mi favor.
Miré de pronto hacia abajo, frunciendo el ceño hacia abajo, dándome cuenta de ...alguna vez le habia dicho eso a alguien en voz alta? Parecía que habian pasado siglos desde entonces.
___
-Giordano Da Vinci, hijo de Paulo Da Vinci. Original de Florencia. Vengo de las islas Británicas. - respondí levantando un poco la barbilla, aparentando cierta superioridad y con elegancia. - A ningun grupo en particular.
No quería meter al Consejo ni a Ouroboros en todo esto. No de momento, hasta asegurarme que esta especie de gobierno era...algo que pudieramos querer como aliados. Aunque el modo de tratar a los recien llegados no me hacia mucha gracia. Claro que el drow….también estaba en busqueda y captura en la Isla. A saber la que habia liado en Turin.
“deberia avisarles…”
-Yo no peco de ego, señor. No se trata de ego cuando la realidad supera a lo que se cuenta de uno. - si, vale, la modestia nunca habia sido lo mio. Gwen se habría reido al oirme decir esto.
Noté un leve mareo y mi vista se nubló un poco. Era el calor? La oscuridad de la sala? Moví un poco la cabeza y cuando me agarró así retiré mis manos bruscamente de su contacto, no porque me hubiese asustado…. si no porque no toleraba semejante cercanía con tal desconocido.
-Le agradecería que no me tocase asi de nuevo. Creo que hemos terminado. - me levanté, porque me habia dado cuenta de que ahi no podía desaparecerme. Debian tener sistemas antidesaparicion, como en cualquier cuartel que se preciase. Sentí un leve mareo al hacerlo. Tampoco pude dar muchos pasos, me empujaron por los hombros hacia la silla nuevamente. - Oof... - solté algo agobiado, desinflando mis pulmones. Parecia que me habia bebido la mitad de la bodega de Arleen…. y entonces me percaté de que habia un humillo extraño saliendo del incensario. Quizá no era el calor….
Me guardé las manos en el regazo. Hasta que con un gesto del tio antipatico de las gafas cada uno de los guardias me agarró un antebrazo para darle de nuevo mis muñecas a las sudorosas y templadas manos del sujeto aquel.
Repetí con un rictus en la cara y una mirada de advertencia con los ojos clavados en el interrogador.
-Giordano Da Vinci, hijo de Paulo Da Vinci. Original de Florencia. Vengo de las islas Británicas. Tecnomago, pertenezco al departamento de Investigación. - no mentí, pero seguí sin mencionar Ouroboros. - Hui de Italia cuando los humanos arrestaron a mi padre y se lo llevaron a morir al Coliseo. - otra verdad que quizá inclinase la balanza a mi favor.
Miré de pronto hacia abajo, frunciendo el ceño hacia abajo, dándome cuenta de ...alguna vez le habia dicho eso a alguien en voz alta? Parecía que habian pasado siglos desde entonces.
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
Éste estaba siendo mucho mas colaborador y pacifico que el elfo oscuro que le habian traido antes, que no solo habia herido al guardia que lo trajo, si no que siguió dando guerra y tuvieron que venir otros tres más a reducirlo. Con Giordano, le bastaría con la tactohipnosis y el incienso, no sería necesario recurrir a semejantes metodos de violencia como con su anterior sujeto. El otro ni si quiera habia dejado que lo tocasen...y desmayado, aquello no funcionaba, tenian que poder hablar. De todos modos, era un elfo oscuro, poca utilidad le iban a dar a su traicionera raza. Habian pocas dudas sobre a donde enviarlo. Este Da Vinci sin embargo era harina de otro costal….
Aunque pudo atar cabos, porque sí, coincidian en que ambos venian de Gran Bretaña. Algo le habían sonsacado al orejas picudas de antes.
Lo miró con una amable y dulce sonrisa. Estaba mintiendo acaso sobre lo de que aquellos le habian robado el barco? No eran amigos ni aliados? No le creía del todo. No, para nada.
-Por qué me mientes? Es malo para ti...no me mientas. No me voy a enfadar porque fueses viajando con los del barco por voluntad propia. Todos cometemos errores. Pero también podemos tener la voluntad de enmedarlos….verdad? Si...claro que si.
Anotó los datos en una ficha del informe, a vuelapluma, y lanzó una mirada turbia lejos de la amabilidad de antes cuando se escapó de su tacto. Los guardias hicieron rapido y bien su trabajo, al igual que el incienso….
-Sé dócil, hijo mio….es una gran virtud. Al igual que servir. Asi es. Muy bien. - sonrió de modo perturbador, claramente disfrutaba con la incomodidad de su interlocutor a su contacto. Apretó la cara interna de las muñecas, aunque aquellos raros brazaletes le molestaban un tanto en su tarea…. Deberian quitarselos.
-Tecnomago? Eso es interesante… aunque un tanto aberrante. Mmm...dices la verdad. Ya veo. Muy bien. Los muggles dices? Creo que te gustará la reforma que le hemos hecho al Coliseo...quizá puedan llevarte a ver uno de los pases que se van a hacer proximamente. Los odias, a los muggles? Por qué has vuelto entonces?
Interrogador Oficial
Éste estaba siendo mucho mas colaborador y pacifico que el elfo oscuro que le habian traido antes, que no solo habia herido al guardia que lo trajo, si no que siguió dando guerra y tuvieron que venir otros tres más a reducirlo. Con Giordano, le bastaría con la tactohipnosis y el incienso, no sería necesario recurrir a semejantes metodos de violencia como con su anterior sujeto. El otro ni si quiera habia dejado que lo tocasen...y desmayado, aquello no funcionaba, tenian que poder hablar. De todos modos, era un elfo oscuro, poca utilidad le iban a dar a su traicionera raza. Habian pocas dudas sobre a donde enviarlo. Este Da Vinci sin embargo era harina de otro costal….
Aunque pudo atar cabos, porque sí, coincidian en que ambos venian de Gran Bretaña. Algo le habían sonsacado al orejas picudas de antes.
Lo miró con una amable y dulce sonrisa. Estaba mintiendo acaso sobre lo de que aquellos le habian robado el barco? No eran amigos ni aliados? No le creía del todo. No, para nada.
-Por qué me mientes? Es malo para ti...no me mientas. No me voy a enfadar porque fueses viajando con los del barco por voluntad propia. Todos cometemos errores. Pero también podemos tener la voluntad de enmedarlos….verdad? Si...claro que si.
Anotó los datos en una ficha del informe, a vuelapluma, y lanzó una mirada turbia lejos de la amabilidad de antes cuando se escapó de su tacto. Los guardias hicieron rapido y bien su trabajo, al igual que el incienso….
-Sé dócil, hijo mio….es una gran virtud. Al igual que servir. Asi es. Muy bien. - sonrió de modo perturbador, claramente disfrutaba con la incomodidad de su interlocutor a su contacto. Apretó la cara interna de las muñecas, aunque aquellos raros brazaletes le molestaban un tanto en su tarea…. Deberian quitarselos.
-Tecnomago? Eso es interesante… aunque un tanto aberrante. Mmm...dices la verdad. Ya veo. Muy bien. Los muggles dices? Creo que te gustará la reforma que le hemos hecho al Coliseo...quizá puedan llevarte a ver uno de los pases que se van a hacer proximamente. Los odias, a los muggles? Por qué has vuelto entonces?
Su sonrisa era una máscara repelente, me estaba dando cuenta conforme mas analizaba los musculos de su cara. Levanté las cejas cuando me dijo que por qué le mentía….a que se refería? Lo de antes era cierto. A lo del barco, quizá?
-Le digo que lo hice yo, pazguato. -porque que me llamaran mentiroso, vale, pero falso? Farsante, ladron o plagiador? - Si tenéis magia de nuevo y os habéis librado de la i.A ha sido gracias al Departamento de Investigación de las Islas Británicas, deberíais ser mas amables y considerados…. o creeis que los satélites de Antimagia se cayeron solos? Que S.A.M dijo hasta la vista baby porque se aburrió?
Me dio bastante asquito y cerré los dedos de las manos en un puño, pensando en soltarle una descarga eléctrica. Pero con suerte, acabaría en un calabozo, y de ahi no podría descubrir mucho mas. No es que me preocupase no poder escapar….
-Si, no, de aberrante nada. Aberrantes son los planos tomados muy desde abajo.
Vaya preguntas...reformas al Coliseo? Pero seguia existiendo? Que conservador había sido SAM.Pregunta rara...pero la respuesta era obvia hasta para mi. Pensé en concreto en aquellos que habian jodido a mi padre. No era dificil...
-Si, los odio. - notaba los parpados pesados y a pesar de estar tenso, el cuerpo estaba cada vez mas relajado. Tampoco era complicado, en los ultimos cuatro dias habria dormido cuatro horas…. - He vuelto para...hacer...turismo….
-Le digo que lo hice yo, pazguato. -porque que me llamaran mentiroso, vale, pero falso? Farsante, ladron o plagiador? - Si tenéis magia de nuevo y os habéis librado de la i.A ha sido gracias al Departamento de Investigación de las Islas Británicas, deberíais ser mas amables y considerados…. o creeis que los satélites de Antimagia se cayeron solos? Que S.A.M dijo hasta la vista baby porque se aburrió?
Me dio bastante asquito y cerré los dedos de las manos en un puño, pensando en soltarle una descarga eléctrica. Pero con suerte, acabaría en un calabozo, y de ahi no podría descubrir mucho mas. No es que me preocupase no poder escapar….
-Si, no, de aberrante nada. Aberrantes son los planos tomados muy desde abajo.
Vaya preguntas...reformas al Coliseo? Pero seguia existiendo? Que conservador había sido SAM.Pregunta rara...pero la respuesta era obvia hasta para mi. Pensé en concreto en aquellos que habian jodido a mi padre. No era dificil...
-Si, los odio. - notaba los parpados pesados y a pesar de estar tenso, el cuerpo estaba cada vez mas relajado. Tampoco era complicado, en los ultimos cuatro dias habria dormido cuatro horas…. - He vuelto para...hacer...turismo….
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
Cuando Giordano lo llamó "pazguato" uno de los guardias levantó la mano para cruzarle la cara al insolente, pero el interrogador lo detuvo con un "tsk tsk tsk" y un hechizo no verbal.
- No....asi no...hay que poner la otra mejilla, recuerdas? - le sonrió al guardia, que automaticamente agachó la cabeza y retrocedió un paso.
Pero esa paciencia y ese tono meloso parecieron retorcerse en cuando mencionó que ellos habian sido los responsables de la caida de la Máquina. Apretó mas sus muñecas clavando un poco sus sucias y cuarteadas uñas.
- Blasfemo....! Como te atreves a decir eso....fue nuestro Santo Padre! Nuestro Dios y Cristo Redentor....dudas de su divinidad? Arrepiéntete...solo asi alcanzarás la salvación...
Poco pareció importarle la respuesta sobre los muggles, o sobre sus intenciones alli. Turismo? Si claro....igual que su relacion con aquel barco.
El hombre se tranquilizó....volviendo a exhibir su expresión de infinita paciencia. Y repitió....
- Arrepiéntete de tus palabras. Y dime tu relación con la gente del barco de Turin. - insistió. El humo era ya una niebla que llenaba toda la habitación. - Como mago que eres, como servirás al Papa en Roma? Si quieres tener el sello de ciudadano romano hay que saber dar...para antes recibir. - soltó una risita floja con algun gorgorito de fondo, en un tono extrañamente infantil.
Interrogador Oficial
Cuando Giordano lo llamó "pazguato" uno de los guardias levantó la mano para cruzarle la cara al insolente, pero el interrogador lo detuvo con un "tsk tsk tsk" y un hechizo no verbal.
- No....asi no...hay que poner la otra mejilla, recuerdas? - le sonrió al guardia, que automaticamente agachó la cabeza y retrocedió un paso.
Pero esa paciencia y ese tono meloso parecieron retorcerse en cuando mencionó que ellos habian sido los responsables de la caida de la Máquina. Apretó mas sus muñecas clavando un poco sus sucias y cuarteadas uñas.
- Blasfemo....! Como te atreves a decir eso....fue nuestro Santo Padre! Nuestro Dios y Cristo Redentor....dudas de su divinidad? Arrepiéntete...solo asi alcanzarás la salvación...
Poco pareció importarle la respuesta sobre los muggles, o sobre sus intenciones alli. Turismo? Si claro....igual que su relacion con aquel barco.
El hombre se tranquilizó....volviendo a exhibir su expresión de infinita paciencia. Y repitió....
- Arrepiéntete de tus palabras. Y dime tu relación con la gente del barco de Turin. - insistió. El humo era ya una niebla que llenaba toda la habitación. - Como mago que eres, como servirás al Papa en Roma? Si quieres tener el sello de ciudadano romano hay que saber dar...para antes recibir. - soltó una risita floja con algun gorgorito de fondo, en un tono extrañamente infantil.
__
exito bien fallo no tan bien
DM: repite tirada ad10 exito/fallo
Dados
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
El miembro 'PNJ' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados
'Probabilidad' :
'Probabilidad' :
Aunque el tufillo del incensario era cada vez mas intenso y llenaba más la sala, cualquiera que fuera el efecto que me causaba (sospechaba que se trataba de un poderoso relajante, a juzgar por cómo me sentía) no me hacía mas efecto del que ya tenía. Sueño, pesadez, mente algo lenta....y ojos algo llorosos. Solté una tosecita algo sobreactuada.
- Podéis bajarle al humo? Parece esto una rave....
Me encogí un poquito cuando creía que me iban a zurrar, la verdad no me lo había esperado, cómo se ponian por llamar a su jefe pazguato.... si es que no se hacia de respetar, que quería que hicieran? Bufé, rodando los ojos.
"No estás en la isla, mide tus palabras"
"Es como pedirle a un río que circule del revés!"
Me quedé de piedra con su reaccion, llamándome blasfemo por decir la verdad. Wow, este estaba en la epoca de la inquisicion. Me reí rapido y breve, una sola carcajada de incredulidad y sarcasmo, mirándolo con los ojos muy abiertos, y brillantes por las lagrimillas que me causaba el humo.
- Vale, no me arrepiento. - mierda, habia querido decir que me arrepentía, pero la verdad se me escapó de los labios sola. Me mordí el labio inferior. Estaba extremadamente incómodo en ese momento.... ademas sus manos estaban empezando a resudarme las muñecas.... - Antes he dicho la verdad, asi que no me arrepiento.
"La Brigada...que son...?"
- Mi relacion con ellos...laboral...son mis contratistas....no me han robado.... - confesé, y no podía entender por qué ahora me desdecía de lo de antes. - Me encargaron el barco, les enseño a usarlo-podemos parar ya?!
Me estaba poniendo nervioso, eran sus manos o era el humo?
- Ya les he dicho quien soy, un Da Vinci, y siendo quien soy, hago encargos. Queréis uno? Cobro muy caro! - oh por dios, era el perfecto lunático con esa risita.
"Tengo que avisar a los borrachos esos de que tienen aqui al colega negro"
- Podéis bajarle al humo? Parece esto una rave....
Me encogí un poquito cuando creía que me iban a zurrar, la verdad no me lo había esperado, cómo se ponian por llamar a su jefe pazguato.... si es que no se hacia de respetar, que quería que hicieran? Bufé, rodando los ojos.
"No estás en la isla, mide tus palabras"
"Es como pedirle a un río que circule del revés!"
Me quedé de piedra con su reaccion, llamándome blasfemo por decir la verdad. Wow, este estaba en la epoca de la inquisicion. Me reí rapido y breve, una sola carcajada de incredulidad y sarcasmo, mirándolo con los ojos muy abiertos, y brillantes por las lagrimillas que me causaba el humo.
- Vale, no me arrepiento. - mierda, habia querido decir que me arrepentía, pero la verdad se me escapó de los labios sola. Me mordí el labio inferior. Estaba extremadamente incómodo en ese momento.... ademas sus manos estaban empezando a resudarme las muñecas.... - Antes he dicho la verdad, asi que no me arrepiento.
"La Brigada...que son...?"
- Mi relacion con ellos...laboral...son mis contratistas....no me han robado.... - confesé, y no podía entender por qué ahora me desdecía de lo de antes. - Me encargaron el barco, les enseño a usarlo-podemos parar ya?!
Me estaba poniendo nervioso, eran sus manos o era el humo?
- Ya les he dicho quien soy, un Da Vinci, y siendo quien soy, hago encargos. Queréis uno? Cobro muy caro! - oh por dios, era el perfecto lunático con esa risita.
"Tengo que avisar a los borrachos esos de que tienen aqui al colega negro"
Dados
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
El miembro 'Giordano Da Vinci' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados
#1 'Probabilidad' :
--------------------------------
#2 'Dado (10)' :
#1 'Probabilidad' :
--------------------------------
#2 'Dado (10)' :
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
No le gustaba nada lo insolente que era aquel joven. Y aunque su hipnosis hacia su trabajo sacándole la verdad, no parecía seguir afectandose por el humo.
Uno resistente, eh? Aunque la sinceridad le resultaba desagradable cuando no le gustaban las respuestas. Mostró sus amarillos dientes en una supuesta sonrisa.
- Haremos que quieras arrepentirte, lo harás de corazón. - aseguró con una convicción amable. - Eso ya me gusta más, muy bien muchacho. - le dio una palmadita en el antebrazo, cando comenzó a decir su auténtica relación con la Brigada.
Afuera, empezaba a oirse jaleo. Gritos, pasos acelerados, maldiciones....expresiones de incredulidad. El interrogador miró un momento hacia la puerta, que era todo ese jaleo?
- Shhh, no, tranquilo. Aun no podemos parar, pero ya casi. Casi has terminado, lo estas haciendo muy bien. - hizo un gesto a uno de los guardias y fue a por uno de los frascos de las muchas pociones que guardaban los estantes, empezando a preparar una dosis. - Si, claro....creo que La Santa Sede puede tener un par de encargos para tí. - confesó el hombre, si era verdad lo que decía del barco, que sabía que lo era, podria resultarles util... - Eso si, antes tendrás que arrepentirte de pecar de pensamiento y palabra. La compasión hijo...la compasión es una virtud.... - y suspiró de modo flacido, soltando por fin las muñecas de Giordano.
Lo siguiente le iba a gustar menos asi que el guardia le inyectó en el cuello sin previo aviso una dosis de aquella poción, mientras el otro guardia lo sujetaba para evitar que se resistiera o tratara de atacar en venganza. Por suerte el inciensario servía para ralentizar sus reflejos, aunque solo fuera a la mitad.
- De verdad, asi no se puede trabajar. - se quejó el interrogador. Poco sabía del caos que habia fuera de su siniestro despacho....
La noticia de que Gabriella Fiori habia muerto se habia extendido como la polvora en Saint Angelo tan pronto como había llegado.
El hombrecillo se levantó y abrió uno de sus cofres, cogiendo un anillo de aspecto normal, similar al que llevaban los soldados salvo por el color y la piedra. Si, cada una era diferente e identificaba de modo diferente. Lo dejó sobre la mesa, lanzandole unos cuantos hechizos susurrando palabras en latín, y luego sacó una aguja, mostrandosela a Giordano, sujetando la aguja en una mano y el anillo en otra.
- Necesitamos tu huella dactilar para terminar de tramitar tu sello. Si eres tan amable...déjame tu mano nuevamente.
Un guardia entró a la estancia sin llamar, lo cual se llevó una peligrosa mirada del interrogador. Sin permiso?
- Señor, necesito que mis compañeros se unan a mi en la batalla....en el Monte Aventino....la torre que apareció...la contienda no va bien, han matado a Gabriella! Ha desaparecido!
- Y necesitas a estos dos soldados precisamente? Márchate, hijo, pronto se unirán a ti.
Lo despachó con supuesta calma. Odiaba ser interrumpido.
El soldado, agobiado, se marchó. No tardarían en partir mas guardias en dirección al Aventino.....
Interrogador Oficial
No le gustaba nada lo insolente que era aquel joven. Y aunque su hipnosis hacia su trabajo sacándole la verdad, no parecía seguir afectandose por el humo.
Uno resistente, eh? Aunque la sinceridad le resultaba desagradable cuando no le gustaban las respuestas. Mostró sus amarillos dientes en una supuesta sonrisa.
- Haremos que quieras arrepentirte, lo harás de corazón. - aseguró con una convicción amable. - Eso ya me gusta más, muy bien muchacho. - le dio una palmadita en el antebrazo, cando comenzó a decir su auténtica relación con la Brigada.
Afuera, empezaba a oirse jaleo. Gritos, pasos acelerados, maldiciones....expresiones de incredulidad. El interrogador miró un momento hacia la puerta, que era todo ese jaleo?
- Shhh, no, tranquilo. Aun no podemos parar, pero ya casi. Casi has terminado, lo estas haciendo muy bien. - hizo un gesto a uno de los guardias y fue a por uno de los frascos de las muchas pociones que guardaban los estantes, empezando a preparar una dosis. - Si, claro....creo que La Santa Sede puede tener un par de encargos para tí. - confesó el hombre, si era verdad lo que decía del barco, que sabía que lo era, podria resultarles util... - Eso si, antes tendrás que arrepentirte de pecar de pensamiento y palabra. La compasión hijo...la compasión es una virtud.... - y suspiró de modo flacido, soltando por fin las muñecas de Giordano.
Lo siguiente le iba a gustar menos asi que el guardia le inyectó en el cuello sin previo aviso una dosis de aquella poción, mientras el otro guardia lo sujetaba para evitar que se resistiera o tratara de atacar en venganza. Por suerte el inciensario servía para ralentizar sus reflejos, aunque solo fuera a la mitad.
- De verdad, asi no se puede trabajar. - se quejó el interrogador. Poco sabía del caos que habia fuera de su siniestro despacho....
La noticia de que Gabriella Fiori habia muerto se habia extendido como la polvora en Saint Angelo tan pronto como había llegado.
El hombrecillo se levantó y abrió uno de sus cofres, cogiendo un anillo de aspecto normal, similar al que llevaban los soldados salvo por el color y la piedra. Si, cada una era diferente e identificaba de modo diferente. Lo dejó sobre la mesa, lanzandole unos cuantos hechizos susurrando palabras en latín, y luego sacó una aguja, mostrandosela a Giordano, sujetando la aguja en una mano y el anillo en otra.
- Necesitamos tu huella dactilar para terminar de tramitar tu sello. Si eres tan amable...déjame tu mano nuevamente.
Un guardia entró a la estancia sin llamar, lo cual se llevó una peligrosa mirada del interrogador. Sin permiso?
- Señor, necesito que mis compañeros se unan a mi en la batalla....en el Monte Aventino....la torre que apareció...la contienda no va bien, han matado a Gabriella! Ha desaparecido!
- Y necesitas a estos dos soldados precisamente? Márchate, hijo, pronto se unirán a ti.
Lo despachó con supuesta calma. Odiaba ser interrumpido.
El soldado, agobiado, se marchó. No tardarían en partir mas guardias en dirección al Aventino.....
Usado en Giordano
Me quedé mirando su dentadura con una poco discreta mueca de asco...modo...deja de sonreir. Era lo mas antiestético que habia visto en mucho tiempo. Solté una socarrona sonrisa por sus convicciones.
- Si tú lo dices. - le seguiría la corriente. Ya me había sacado la verdad respecto a la Brigada, y mi cabeza embotada comenzaba a pensar que ahi había mas magia implicada de la que queria dejarse notar.
"al menos estoy descubriendo cosas interesantes....me falta ser capaz de recordarlo todo mañana por la mañana"
- Ah, genial. - dije incómodo con una sonrisa nerviosa cuando me dijo que lo hacía muy bien y que quedaba poco. Disimulé (muy mal) un gesto de alivio en cuanto me soltó por fin.
Me quedé mirando hacia las estanterias mientras él decia chorradas sobre el arrepentimiento y blabla y demás que no me interesaban lo mas minimo.
- Pues ya podéis pagar bien... - le dije cuando comentó que la Santa Sede podría tenerme algun encargo.No pensaba currarles de gratis, por antipáticos.
Casi sin previo aviso uno de los guardias me sujetó y el otro me metió algo en el cuello. El pinchazo dolió más de que debería, sobre todo al meter el liquido, y terminaron de tocarme la moral. Aparté de un golpe a uno de ellos y advertí al otro mientras canalizaba, ahora si, la energía eléctrica a traves de mis brazos para golpearlo.
- No voy a hacer la tipica pregunta de "qué me has inyectado" pero espero que mi pasivo agresividad te sirva para...! - conforme salían las chispas, porque fueron eso, solo breves chispas, hacia el mago; gruñí de dolor atravesado por una especie de inexplicable especie de maldicion cruciatus. No paró hasta que no cesé el intento de usar magia, y para entonces me había tenido que apoyar sobre la mesa, o me habian obligado a apoyarme, no lo tenía claro....el caso es que ahora mi mejilla estaba pegada contra la fea mesa del interrogador.
- Esto...esto es abuso de poder... - protesté, no los habíamos liberado para que hicieran mierdas de estas. Oi otra voz, me dolia demasiado la vida como para enterarme mucho. Algo de que alguien habia muerto.
Qué novedad, a decir verdad.
- Si tú lo dices. - le seguiría la corriente. Ya me había sacado la verdad respecto a la Brigada, y mi cabeza embotada comenzaba a pensar que ahi había mas magia implicada de la que queria dejarse notar.
"al menos estoy descubriendo cosas interesantes....me falta ser capaz de recordarlo todo mañana por la mañana"
- Ah, genial. - dije incómodo con una sonrisa nerviosa cuando me dijo que lo hacía muy bien y que quedaba poco. Disimulé (muy mal) un gesto de alivio en cuanto me soltó por fin.
Me quedé mirando hacia las estanterias mientras él decia chorradas sobre el arrepentimiento y blabla y demás que no me interesaban lo mas minimo.
- Pues ya podéis pagar bien... - le dije cuando comentó que la Santa Sede podría tenerme algun encargo.No pensaba currarles de gratis, por antipáticos.
Casi sin previo aviso uno de los guardias me sujetó y el otro me metió algo en el cuello. El pinchazo dolió más de que debería, sobre todo al meter el liquido, y terminaron de tocarme la moral. Aparté de un golpe a uno de ellos y advertí al otro mientras canalizaba, ahora si, la energía eléctrica a traves de mis brazos para golpearlo.
- No voy a hacer la tipica pregunta de "qué me has inyectado" pero espero que mi pasivo agresividad te sirva para...! - conforme salían las chispas, porque fueron eso, solo breves chispas, hacia el mago; gruñí de dolor atravesado por una especie de inexplicable especie de maldicion cruciatus. No paró hasta que no cesé el intento de usar magia, y para entonces me había tenido que apoyar sobre la mesa, o me habian obligado a apoyarme, no lo tenía claro....el caso es que ahora mi mejilla estaba pegada contra la fea mesa del interrogador.
- Esto...esto es abuso de poder... - protesté, no los habíamos liberado para que hicieran mierdas de estas. Oi otra voz, me dolia demasiado la vida como para enterarme mucho. Algo de que alguien habia muerto.
Qué novedad, a decir verdad.
PNJ
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
032042
¿¿¿???
Interrogador Oficial
Su incredulidad le resultaba molesta pero al mismo tiempo, hacía que tuviese mas ganas de doblegarlo. Al interrogador le emocionaban, por asi decirlo, los espiritus más dificiles de plegarse a él. Aunque lo disimulaba perfectamente bajo una máscara de paternalista desaprobación, mezclada con una compasión extraña.
- Tratadlo con cuidado. - dijo a los guardias cuando este se revolvió y la poción de horror mágico surtió el efecto deseado, dejándolo temporalmente fuera de juego, mas grogui que consciente. - Toleras bien el dolor, hijo mio? Se pasará pronto. No debiste elegir el camino de la violencia....ves? Te he hecho poner la otra mejilla. -le dio unas cachetadas a Giordano en la mejilla, suaves, ahora que los guardias lo habían inclinado de cara contra su escritorio y lo tenían sujeto por la cabeza y por las manos. Soltó un suave "mmm" de aprobación-evaluación antes de terminar de palmearle la cara, aunque terminó siendo más una caricia que otra cosa.
Eso pareció gustarle aun menos al insolente mago, porque volvió a, practicamente, gimotear de dolor en otro intento de usar su magia, ya que de cuerpo estaba inmovilizado. El interrogador sonrió complacido, de modo compasivo y dulce... El resto del proceso fue sencillo de hacer, completar la identificación del sello pinchando con la aguja uno de sus dedos para impregnar la gema con una gotita de su sangre, que el anillo se bebió y con el que dibujó el escudo de la loba capitolina. Luego se lo puso a Giordano en el dedo indice, quitándole el de Ouroboros para quedarselo para su colección.
- Vamos a hacerle un tour por el lugar a nuestro nuevo ciudadano, antes de que le podáis enseñar el resto de la ciudad...como el Coliseo y el Vaticano, verdad? Si...si, yo le acompaño, no quiero que se vaya de Saint Angelo sin ver la comodidad de sus dependencias antes....ayudadme con él de momento... - los cuatro salieron,escoltando al forastero hacia afuera de la sala, perdiendose por uno de los muchos pasillos de la fortaleza.
Largos minutos mas tarde, los dos guardias que habian escoltado a Giordano y al interrogador, retornaban por esos pasillos, ellos dos solos y algo cabizbajos...a tiempo para incorporarse al escuadrón que partiría en breves hacia el Monte Aventino.
Interrogador Oficial
Su incredulidad le resultaba molesta pero al mismo tiempo, hacía que tuviese mas ganas de doblegarlo. Al interrogador le emocionaban, por asi decirlo, los espiritus más dificiles de plegarse a él. Aunque lo disimulaba perfectamente bajo una máscara de paternalista desaprobación, mezclada con una compasión extraña.
- Tratadlo con cuidado. - dijo a los guardias cuando este se revolvió y la poción de horror mágico surtió el efecto deseado, dejándolo temporalmente fuera de juego, mas grogui que consciente. - Toleras bien el dolor, hijo mio? Se pasará pronto. No debiste elegir el camino de la violencia....ves? Te he hecho poner la otra mejilla. -le dio unas cachetadas a Giordano en la mejilla, suaves, ahora que los guardias lo habían inclinado de cara contra su escritorio y lo tenían sujeto por la cabeza y por las manos. Soltó un suave "mmm" de aprobación-evaluación antes de terminar de palmearle la cara, aunque terminó siendo más una caricia que otra cosa.
Eso pareció gustarle aun menos al insolente mago, porque volvió a, practicamente, gimotear de dolor en otro intento de usar su magia, ya que de cuerpo estaba inmovilizado. El interrogador sonrió complacido, de modo compasivo y dulce... El resto del proceso fue sencillo de hacer, completar la identificación del sello pinchando con la aguja uno de sus dedos para impregnar la gema con una gotita de su sangre, que el anillo se bebió y con el que dibujó el escudo de la loba capitolina. Luego se lo puso a Giordano en el dedo indice, quitándole el de Ouroboros para quedarselo para su colección.
- Vamos a hacerle un tour por el lugar a nuestro nuevo ciudadano, antes de que le podáis enseñar el resto de la ciudad...como el Coliseo y el Vaticano, verdad? Si...si, yo le acompaño, no quiero que se vaya de Saint Angelo sin ver la comodidad de sus dependencias antes....ayudadme con él de momento... - los cuatro salieron,escoltando al forastero hacia afuera de la sala, perdiendose por uno de los muchos pasillos de la fortaleza.
Largos minutos mas tarde, los dos guardias que habian escoltado a Giordano y al interrogador, retornaban por esos pasillos, ellos dos solos y algo cabizbajos...a tiempo para incorporarse al escuadrón que partiría en breves hacia el Monte Aventino.
Había desaparecido de la torre de los Soul para aparecer cerca del Vaticano, pues era una zona que conocía. Pero me habia alejado a pie de alli, porque la presencia de los espiritus de muchos de los caidos alli...seguia presente, y no quería escuchar sus susurros ahora mismo.
Asi que caminé bajo el sol de justicia que hacia en Roma en aquella epoca, pasando más calor del que habia pasado en...mucho tiempo. Rusia era una cosa. Las islas británicas eran tolerables. Pero esto? Me sobraba la ropa que me habia traido, pantalon y camisa, que habia arremangado hasta los codos, que se vieran las cicatrices de las runas ya me daba hasta igual. Pero al negro... al negro de la ropa se le pegaba demasiado el sol...bastante que ademas, llevaba la cota debajo.
Al llegar a la fortaleza observé como habian quebrado los estandartes del Papa y su emblema ya no ondeaba alto en Saint Angelo. Una pequeña patrulla de Soul vigilaban el cuartel ahora.
Caminé hacia el puente, dejando algo atrás la fortaleza. Miré hacia abajo, al lecho del río. Desaparecí de la parte alta del puente para aparecer abajo, a una zona menos transitada, y a la sombra, sobre todo....
"si no me mata Valqar en una de esas pesadillas, lo hará este calor."
Me abrí algunos botones de la camisa, y me dispuse a abrir un portal hacia donde Ian me habia indicado que lo abriera. Un circulo pequeño que se amplío hasta tener un diametro de dos metros.
Asi que caminé bajo el sol de justicia que hacia en Roma en aquella epoca, pasando más calor del que habia pasado en...mucho tiempo. Rusia era una cosa. Las islas británicas eran tolerables. Pero esto? Me sobraba la ropa que me habia traido, pantalon y camisa, que habia arremangado hasta los codos, que se vieran las cicatrices de las runas ya me daba hasta igual. Pero al negro... al negro de la ropa se le pegaba demasiado el sol...bastante que ademas, llevaba la cota debajo.
Al llegar a la fortaleza observé como habian quebrado los estandartes del Papa y su emblema ya no ondeaba alto en Saint Angelo. Una pequeña patrulla de Soul vigilaban el cuartel ahora.
Caminé hacia el puente, dejando algo atrás la fortaleza. Miré hacia abajo, al lecho del río. Desaparecí de la parte alta del puente para aparecer abajo, a una zona menos transitada, y a la sombra, sobre todo....
"si no me mata Valqar en una de esas pesadillas, lo hará este calor."
Me abrí algunos botones de la camisa, y me dispuse a abrir un portal hacia donde Ian me habia indicado que lo abriera. Un circulo pequeño que se amplío hasta tener un diametro de dos metros.
A la hora acordada el portal de Matvey se abrió en el jardín de la casa Hacksaw para dar paso al castillo de San Angelo en Roma. Había aprovechado que Catherine quedó con Gio para que así no se enterase de su reunión con el nigromante. Dejó a lo niños con el abuelo y fue a su encuentro. Nada más llegar le recibió una bofetada de calor exagerada, lo que justificaba la vestimenta inusual de Matvey. Él no tardaría en quedarse en bolas.
- Por qué me has citado aqui? Tu casa estaba hecha un desastre, entró alguien y echaron la puerta abajo.
Luego echó a andar hacia él, mirando alrededor con cautela. - Mi plan podría haber funcionado. Dime dónde tienes mi anillo. Necesito recuperarlo. Catherine no puede saber nada de esto. Ha dejado al Pendragon hace poco y hemos vuelto. No quiero preocuparla.
- Por qué me has citado aqui? Tu casa estaba hecha un desastre, entró alguien y echaron la puerta abajo.
Luego echó a andar hacia él, mirando alrededor con cautela. - Mi plan podría haber funcionado. Dime dónde tienes mi anillo. Necesito recuperarlo. Catherine no puede saber nada de esto. Ha dejado al Pendragon hace poco y hemos vuelto. No quiero preocuparla.
Cerré el portal en cuanto Ian lo cruzó, y guardé la piedra en el bolsillo de mi pantalón.
Intuí que el desastre era lo que lyosha y yo habíamos causado, y que la guardia para entrar al registro había tenido que tirar la puerta abajo.
"Espero que no tocaran nada... Cuando me responderá Amaya?"
- un ritual me salió mal, y los Soul Reaper me echaron una mano. Por eso estoy aquí. - le expliqué escuetamente.
- tu plan estaba condenado a salir mal.- que no se confundiera... - No. El anillo es mío. Ya puedes ir buscándote una nueva alianza de bodas porque ese no te lo voy a devolver.
Lo que me dijo a continuación... Me hizo mirarlo con sorpresa. Por un lado me alegraba de esa noticia. Por otro... De verdad creía que podría ocultarle eso eternamente?
- más gente te vio hacerlo, eventualmente se enterará y será peor. Aunque conocido contigo, aún no es momento. Por qué te crees que no se lo he dicho? Le destrozará saberlo.
Fruncí mi ceño hablando con vehemencia.
- como está Aelin? - me preocupaba lo que ese trozo de alma pudiera hacerle...
Intuí que el desastre era lo que lyosha y yo habíamos causado, y que la guardia para entrar al registro había tenido que tirar la puerta abajo.
"Espero que no tocaran nada... Cuando me responderá Amaya?"
- un ritual me salió mal, y los Soul Reaper me echaron una mano. Por eso estoy aquí. - le expliqué escuetamente.
- tu plan estaba condenado a salir mal.- que no se confundiera... - No. El anillo es mío. Ya puedes ir buscándote una nueva alianza de bodas porque ese no te lo voy a devolver.
Lo que me dijo a continuación... Me hizo mirarlo con sorpresa. Por un lado me alegraba de esa noticia. Por otro... De verdad creía que podría ocultarle eso eternamente?
- más gente te vio hacerlo, eventualmente se enterará y será peor. Aunque conocido contigo, aún no es momento. Por qué te crees que no se lo he dicho? Le destrozará saberlo.
Fruncí mi ceño hablando con vehemencia.
- como está Aelin? - me preocupaba lo que ese trozo de alma pudiera hacerle...
- Vaya...entonces hasta a los más experimentados les salen mal los rituales. - comentó con cierta intencionalidad porque suponía que le iba a regañar por el ritual con Morgana. Si le salían mal hasta a un nigromante de su talla...no podía hablar al respecto. Metió las manos en los bolsillos mientras fruncía el ceño en actitud poco receptiva, fastidiado por eso de que su plan estaba condenado a salir mal.
- Se puede hacer. Pero me precipité. No tenía suficiente dominio. No lo había intentado antes con personas. Y no era un mal plan. Quería meterles a Morgana en Ávalon, dentro del cuerpo de uno de los Pendragon. Ella se encargaría de destruirlos. Los odias tanto como yo, Matvey. Dime...¿ por qué no habríamos de utilizar a una enemiga así contra ellos? - sacó las manos de los bolsillos para extender las palmas hacia arriba en gesto interrogativo, avanzando un par de pasos más hacia Rasputín.
Entonces cayó...Catherine se iba a mosquear si veía que la alianza de bodas había desaparecido. Iba a darse cuenta en algún momento. - Mierda. - masculló para sí mismo, asumiendo que tendría que decirle la verdad. - ¿Y qué demonios vas a hacer con el anillo, eh? ¿Por qué no me lo quieres devolver? - bajó la mirada al suelo un poco agobiado cuando el otro coincidió con él en que le destrozaría saberlo. Seguro que no apoyaba su plan, y seguro que sentía su confianza traicionada. - No creo que haya un buen momento para contarlo. Además, necesita tranquilidad después de todo lo que ha pasado. ¿Acaso quieres que en un arrebato decida volverse a Ávalon? Esa maldita gente la ha confundido. - le espetó a Matvey algo cabreado, pensando que no entendía la posición en la que estaban, y lo mucho que necesitaba Cattherine disfrutar de su familia de una vez por todas.
- ¿Aelin...? - le sorprendió el cambio de tercio, pero supuso que alguien le habría contado que estuvo en el hospital. - Ahora mejor. Estuvo ingresada unos días porque tuvo algunos problemas al nacer. ¿La has llegado a conocer en algún momento? No te vi en el hospital...
- Se puede hacer. Pero me precipité. No tenía suficiente dominio. No lo había intentado antes con personas. Y no era un mal plan. Quería meterles a Morgana en Ávalon, dentro del cuerpo de uno de los Pendragon. Ella se encargaría de destruirlos. Los odias tanto como yo, Matvey. Dime...¿ por qué no habríamos de utilizar a una enemiga así contra ellos? - sacó las manos de los bolsillos para extender las palmas hacia arriba en gesto interrogativo, avanzando un par de pasos más hacia Rasputín.
Entonces cayó...Catherine se iba a mosquear si veía que la alianza de bodas había desaparecido. Iba a darse cuenta en algún momento. - Mierda. - masculló para sí mismo, asumiendo que tendría que decirle la verdad. - ¿Y qué demonios vas a hacer con el anillo, eh? ¿Por qué no me lo quieres devolver? - bajó la mirada al suelo un poco agobiado cuando el otro coincidió con él en que le destrozaría saberlo. Seguro que no apoyaba su plan, y seguro que sentía su confianza traicionada. - No creo que haya un buen momento para contarlo. Además, necesita tranquilidad después de todo lo que ha pasado. ¿Acaso quieres que en un arrebato decida volverse a Ávalon? Esa maldita gente la ha confundido. - le espetó a Matvey algo cabreado, pensando que no entendía la posición en la que estaban, y lo mucho que necesitaba Cattherine disfrutar de su familia de una vez por todas.
- ¿Aelin...? - le sorprendió el cambio de tercio, pero supuso que alguien le habría contado que estuvo en el hospital. - Ahora mejor. Estuvo ingresada unos días porque tuvo algunos problemas al nacer. ¿La has llegado a conocer en algún momento? No te vi en el hospital...
Escuché su primer comentario que no era una indirecta alguna, era una directa muy directa. Lo miré con aquel azul hielo desde unos ojos oscurecidos por las ojeras y la pelea constante. Y simplemente, sonreí de lado y no dije nada más. Poco sabía él de lo que habia pasado en realidad, y poco tenía que saber, pues no le interesaba.
- Claro que los odio Ian, pero elegir a Morgana para eso...es como liberar a un leviatán para que te mate a un dragón. No elegiste un buen momento, en pleno tratado de paz? Sabes lo que te podía haber pasado si algun Pendragon te hubiese visto? ..... Además....Morgana? Te traicionaría a la minima! Que poder crees que tienes sobre ella o sus deseos? Ninguno. Le pregunté a Catherine cuando volvi de Roma si el medallon estaba a buen recaudo y me dijo que tú lo habias escondido y seguia a salvo.... pero traicionaste esa confianza. Por eso no te lo voy a devolver. Estará mas seguro conmigo, te ahorrarás tentaciones. Te has precipitado! Y ahora...
"Ahora Aelin lo paga..."
- Está bien, hay veces que yo no he podido controlar a alguna de mis invocaciones...pero al final quien sale herido soy yo, no otro inocente! Me aseguro de eso.
Por desgracia yo estaba igual de dividido que él entre contárselo y no contárselo, pero...es que debería acabar sabiéndolo. Ya me odió cuando lo de su padre....ahora tenía que decirle lo de su hija.... Miré hacia el cielo, quizá imploré algo de modo inconsciente, apretando los labios y negando con la cabeza.
- No te confundas. Nada me alegra más que el hecho de que haya salido de Avalon. - dije bajando la mirada hacia él. - Si, en cuanto todos los vikingos fueron reducidos en Tintagel, Stavron y yo fuimos a Avalon a ver cómo estaban ella y los bebés. - me di cuenta al instante de.... Ian sabía lo de Stavron?
Entrecerré la mirada, observándolo....él no lo había visto entonces...? me acerqué a él, mi expresión mas seria de lo habitual destilaba aquella duda y aquel reproche.
- Tú...no lo has visto, no? - me refería a Morgana, en Aelin. No, no me estaría pidiendo el anillo de ser asi. No estaría tan cargado de razón. - Si no se lo dices tu a Catherine, se lo diré yo. - advertí, mas cerca de él ahora.
- Claro que los odio Ian, pero elegir a Morgana para eso...es como liberar a un leviatán para que te mate a un dragón. No elegiste un buen momento, en pleno tratado de paz? Sabes lo que te podía haber pasado si algun Pendragon te hubiese visto? ..... Además....Morgana? Te traicionaría a la minima! Que poder crees que tienes sobre ella o sus deseos? Ninguno. Le pregunté a Catherine cuando volvi de Roma si el medallon estaba a buen recaudo y me dijo que tú lo habias escondido y seguia a salvo.... pero traicionaste esa confianza. Por eso no te lo voy a devolver. Estará mas seguro conmigo, te ahorrarás tentaciones. Te has precipitado! Y ahora...
"Ahora Aelin lo paga..."
- Está bien, hay veces que yo no he podido controlar a alguna de mis invocaciones...pero al final quien sale herido soy yo, no otro inocente! Me aseguro de eso.
Por desgracia yo estaba igual de dividido que él entre contárselo y no contárselo, pero...es que debería acabar sabiéndolo. Ya me odió cuando lo de su padre....ahora tenía que decirle lo de su hija.... Miré hacia el cielo, quizá imploré algo de modo inconsciente, apretando los labios y negando con la cabeza.
- No te confundas. Nada me alegra más que el hecho de que haya salido de Avalon. - dije bajando la mirada hacia él. - Si, en cuanto todos los vikingos fueron reducidos en Tintagel, Stavron y yo fuimos a Avalon a ver cómo estaban ella y los bebés. - me di cuenta al instante de.... Ian sabía lo de Stavron?
Entrecerré la mirada, observándolo....él no lo había visto entonces...? me acerqué a él, mi expresión mas seria de lo habitual destilaba aquella duda y aquel reproche.
- Tú...no lo has visto, no? - me refería a Morgana, en Aelin. No, no me estaría pidiendo el anillo de ser asi. No estaría tan cargado de razón. - Si no se lo dices tu a Catherine, se lo diré yo. - advertí, mas cerca de él ahora.
Contenido patrocinado
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
Página 1 de 2. • 1, 2
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.