Desguace de androides y máquinas

61/150 PS
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Iba por ahi esquivando cosas de vuelta a la tuberia aquella, me pareció escuchar algunos gritos llamandome de vuelta, pero la decision estaba hecha.

Al principio no me afectó, estabamos demasiado lejos. Pero ella echó a correr tambien, acortando distancias, y entonces tuve que pararme. Me entró un no se qué cuando me tocó por el brazo usando sus poderes de atracción, si de normal ya me atraía así era casi insoportable.  Me frené un poco, bufé y me giré bruscamente para decirle que volviese, pero puso sus labios contra los mios y me dio casi un infarto. Hasta dejó de dolerme el cuerpo.  Ya no pensaba en alejarme.

La sujeté por los brazos cuando se separó, quiso echarme la bronca pero se desvaneció alli mismo.  La sujeté y la tomé en brazos, mirando hacia arriba, hacia donde se estaban reuniendo todos para irse, algo lejos de donde habiamos ido a parar nosotros.

- Gen terca, siempre tienes que ganarme -Le quité un poco el pelo de la cara y negué con la cabeza, luego  invoqué de nuevo a mi elemental, aquel lobo, usándolo para que nos llevase mucho más rapido a donde estaban todos reunidos. Lo desconvoqué al llegar allí, encontrandome con Ben que al menos seguía de una pieza. - Ben, encárgate de Imram y de Mérida.

Yo me encargué de Gen, después vi a mi primo medio en pánico que gritaba por Ian y me acerqué a ellos. Envié a mi elemental lobuno acuático contra el centinela que quedaba y me agaché a recoger al muchacho, intentando curar un poco sus heridas con una sanacion que al menos detuviese la sangre.   Me di cuenta de que a su lado habia otra muchacha, que no me sonaba de mucho, pero parecia que seguia viva, asi que me la quedé tambien. Ian y Sigrid. Llamé a mi elemental de nuevo, cargándolos a ambos sobre el lobo. Después comprobé que Ben estuviese con Imram y Mérida, y llamé a Emily para que se aproximase. - EM, estamos listos!!  - Lyran y Anteia estaban listos tambien, y Johan y los suyos mas de lo mismo.

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5 dado + 10 hab + 40 anillo= 55 para Ian

El miembro 'Lykaios Knox' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Curación' :

La proyección mental había terminado apenas unos segundos antes de que Khaled nos sacase de allí por el portal aquel, pero yo había quedado exhausto tras aquello y tardé en reaccionar unos cuantos minutos. Para cuando volví a recobrar la consciencia ya estábamos otra vez en el desguace, todos en medio del caos para variar. Victorya había cumplido con su palabra y me había cubierto las espaldas mientras yo no podía defenderme. Puse una mano en su brazo para que supiese que ya había despertado, asintiendo como dándole las gracias. - Lo he visto...he llegado hasta el centro de la puta CIudadela, del núcleo, de todo...tenéis que verlo. - comencé a decir cosas inconexas, sin explicarme demasiado bien. Lástima que todo esto no hubiese servido para una mierda, y que todos hubiésemos acabado. Intenté lanzar un ataque mágico a uno de los Centinelas que quedaban, o a uno de los androides, pero el exceso de uso de magia anterior me había dejado seco.

Después de todo parecía que íbamos a salir de aquí gracias a esa especie de brecha frente a la que se erguía el nigromante Khaled, pero no sabía si estábamos aquí todos los que habíamos entrado. Me sorprendió ver a Reiv por allí, y también a algunos de los Descendientes. Después de todo parecía que ellos había decidido acudir a nuestra llamada, aunque todo hubiese salido mal. - ¿Quiénes faltan? - seguí mirando alrededor, localizando a varios pero no a todos. - ¿han vuelto todos? -

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PS: 107

Había quedado a punto de emocionarme cuando Sean me dio eso en la prisión de que no había hecho el suicida por mí, si no por él, porque me necesitaba para vivir. En ese momento le habría estrujado, pero el tema de la supervivencia y demás no me dejó corresponderle como se debía. Corrimos al desguace para intentar salir de ese infierno, defendiéndonos como podíamos. - ¿Pero cómo que vamos a ir por la brecha del nigromante ese? - pregunté asustado porque los asuntos demoníacos no me gustaban nada, intentando no separarme de Sean. - No, no me iré con los heridos, cruzamos juntos el portal. No seas terco. - protesté a Sean, cogiéndolo de la mano para que no se me perdiese. En ese momento llegó Altair increpando, diciendo que le habíamos dejado encerrado. - ¿Qué te has creído llamándole ciego de mierda? - me mosqueé por sus formas, poniéndome delante de Sean como defendiéndole.

- No es culpa de nadie que hayas sido un lento saliendo. Ahora no es momento de empezar una pelea, ¿quieres ponerle el trabajo fácil a las máquinas matándonos entre nosotros? ¡Pues no será hoy! - me entró tal cabreo que aproveché para descargar un porrazo con un palo de metal a un Centinela que ya estaba medio destrozado por todos los ataques, con tanta suerte que conseguí darle el golpe de gracia. Abrí la boca sorprendido, sin esperarme algo así.

- ¡He matado mi primer Centinela! ¿¡habéis visto!? - me giré a Sean repentinamente, dándome cuenta de que él no. - Ah...lo siento, tú ya te lo imaginas...- me disculpé con él, volviendo a cogerlo por el brazo para dirigirnos al portal. - ¡Vámonos de una vez, por favor!


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at. físico
dado 20 + 5 stat + 10 habilidad ficha= 35 a CENTINELA BLANCO (y putomuere porque con el de Lyran y este ataque superamos su defensa+vida)

El miembro 'Lucio Galenus' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Ataque Físico' :

Mantener una brecha así abierta no era tan sencillo, más cuando era mas casi un portal que una simple brecha. Por suerte, tuvieron la suficiente inteligencia como para protegerme de los ataques de las máquinas, levantando diferentes barreras mágicas, de modo que no tuve ni que distraerme.

"los vas a hacer viajar a todos por alli, Khaled? Son magos, humanos normales, hasta una alada... y auras moribundas, varias de ellas...es como echarles de comer a los peces... ah, Khaled......esto va a ser entretenido..."

Notaba que Belialt se divertía con aquello. En el plano infernal, los demonios no tenían nada que ver a cómo eran en este plano. Eran infinitamente más fuertes. Un nigromante podría mantenerlos a raya el tiempo necesario para salir vivo, como era obvio. Pero llevar a tantos pasajeros...


"solo lo hiciste una vez"

Ignoré bastante los ruegos y preguntas de los demás. Solo hice caso a Lyosha, la miré apretando levemente los labios, estaba cada vez más debil. Tendría que reforzar el nexo al volver a la Torre.

Se fueron acercando y agrupando. Unos humanos decidieron adelantarse, y cruzar el portal en un pequeño grupo. Una de mis cejas se alzó.  Querían suicidarse tan rápido? Me estaban comenzando a poner de mal humor, con sus tardanzas, sus ganas de morirse tan pronto...

- Caronte empieza a impacientarse... - advertí al grupo. Decidí que no se lo iba a poner fácil. Quizá hasta acabase dandole trabajo a Matvey. Trabajo de verdad. No dedicarse a invocar a demonios para divertimento de un coliseo lleno de magos... aquella idea mejoró mi humor un poco. Volví a centrar mis ojos en el vórtice que era el portal, y estos se me iluminaron de un rojo intenso hasta que las pupilas desaparecieron.  - Una cosa más... no hagáis casos de las voces que oigais en vuestras cabezas. Cualquier cosa que os prometan, es mentira. - si no hubiese sido por mi expresion, cualquiera habría dicho por mi tono de voz que aquello me entretenía a mi tambien.

Mi forma comenzó a cambiar en ese momento, dando lugar al demonio que era, mientras ingresaba dentro del portal abriendo la comitiva. Cuando hubo cruzado el ultimo ser vivo, el portal se cerró, sin dejar ni rastro.

Llegué a la zona del desguace tras caminar tranquilamente desde la fábrica, casi sin cruzarme a ninguno de los otros por el camino porque ellos se desviaron antes a otro lado. Por primera vez en mucho tiempo podía seguir a esa "conciencia" interna que no era la réplica de James ni era S.A.M., gracias a lo que había hecho Sigrid con el código. Desconocía si aquello sería permanente, o si sería reversible, pero ahora tenía la oportunidad de moverme libremente y sin seguir dichas órdenes.

Mi intención era buscar a la humana para seguirla y obtener más información, pero los pillé justo en el momento en que se marchaban de allí usando esa extraña brecha interdimensional. Aquello era totalmente desconocido para mí, sólo pude ver que desaparecían todos por allí. Los observé desde la salida de una de las grandes tuberías, viendo también cómo se dispersaban los pocos androides que todavía los seguían. Me había quedado completamente solo, y no tenía intención de relacionarme con los androides clones, aunque yo también fuese uno. Ellos tendrían que seguir cumpliendo órdenes, al igual que Alice. La unidad Arbalest había sido de gran ayuda cuando descubrí mi verdadera identidad, y por tanto sería lógico el ayudarla también. Súbitamente me propuse una nueva misión: buscar el modo de liberar a cada androide para que tuviese libre albedrío, si es que aquello existía. Me alejé del desguace rápidamente y de modo sigiloso, abandonando así la Ciudadela Alpha.