Página 1 de 4. • 1, 2, 3, 4
Este edificio tiene diferentes funciones, entre las cuales se encuentran la de albergar la televisión pública del país (actualmente controlada por la Alianza Humana). También alberga las principales empresas de telefonía y telecomunicaciones, así como un sistema de vigilancia que controla la mayoría de las llamadas realizadas por la población y la vigilancia de los sitios web. El sistema de cámaras que se extiende por toda la ciudad es controlado desde aquí, transmitiendo información a la base militar de la Alianza y a sus altos mandos. La cantidad de información que maneja sirve además para la actualización de los archivos de criminales. La Alianza tiene una fuerte influencia aquí, aunque los ricos empresarios son quienes manejan el negocio. Hay guardias de seguridad en las entradas principales. En la parte superior hay un helipuerto.
- Imágenes del lugar:
Se cernía la noche estrellada cuando salimos de la capital y entramos a la periferia londinense a toda velocidad. En el trayecto busqué en mis recuerdos todos los datos que pudieran ser relevantes para el éxito en esta misión; guardias de seguridad en las entradas principales, un extenso sistema de cámaras y muchas pero que muuuchas pantallas. Me di cuenta, angustiada que no había absorbido mucha más información que la relevante para mi tarea de aquel entonces, vigilancia y seguridad. Por fortuna la tarea de vigilancia no decía nada acerca de no escuchar conversaciones de los técnicos y operarios, era parte de la vigilancia, así que lo de interrumpir la programación sabía cómo hacerlo, la cuestión era entrar y salir vivos, preferentemente.
Estacioné el coche a una cuadra de la entrada trasera del imponente edificio, detrás de un gigantesco camión aparcado que nos cubría de las cámaras “Bien, y... ¿ahora que?” Se suponía que Johan se encontraría con nosotros. Tenía un soldado noqueado en el baúl y ni siquiera sabía que hacer con él, quizás podría ponerme su uniforme, obligarlo a que cante todo lo que sabía acerca de aquel lugar y entrar haciéndome pasar por él para abrirle camino al grupo de renegados.
Me tomé un momento para recostarme en el asiento, soltar el volante que estaba agarrando tan fuerte que tenía blancos los nudillos y relajar mi mente revolucionada. Repasé lo ocurrido en el parque y me dí cuenta que Thalos me había preguntado algo a cerca de mis consejos.
-Si quieren les explico lo de hackear, pero esa aclaración era para secundar lo que había mencionado Justin a cerca de piratear la señal, lo cual se puede hacer desde lejos ¿Vieron cuando un celular emite wifi? Bueno, la idea sería robar wifi. Digamos que el "protocolo" es lo más importante, en este caso sería la clave, pero, como podrán imaginar, está oculto, la idea sería que habría que "dejar a la vista" el protocolo, o sea publicar la clave para que todos podamos saberla, así cualquiera podría tener acceso total al sistema. Dejar a la vista el protocolo es otra historia, pero de todos modos dudo que sigamos adelante con eso. Colarse en la torre e interrumpir la programación directamente desde ahí va a resultar mucho más fácil y mucho más riesgoso.- dije a mis pasajeros y solté un suspiro más relajada.
-¿Ustedes saben quiénes eran los que se aparecieron allí, en el parque?¿El Aquaman y aquella rubia con colmillos?- Fuí consciente que se me escapó una ligera sonrisa al recordar lo de "gatita", definitivamente esperaba volver a encontrármela para mostrarle cómo ronroneaba.
Estacioné el coche a una cuadra de la entrada trasera del imponente edificio, detrás de un gigantesco camión aparcado que nos cubría de las cámaras “Bien, y... ¿ahora que?” Se suponía que Johan se encontraría con nosotros. Tenía un soldado noqueado en el baúl y ni siquiera sabía que hacer con él, quizás podría ponerme su uniforme, obligarlo a que cante todo lo que sabía acerca de aquel lugar y entrar haciéndome pasar por él para abrirle camino al grupo de renegados.
Me tomé un momento para recostarme en el asiento, soltar el volante que estaba agarrando tan fuerte que tenía blancos los nudillos y relajar mi mente revolucionada. Repasé lo ocurrido en el parque y me dí cuenta que Thalos me había preguntado algo a cerca de mis consejos.
-Si quieren les explico lo de hackear, pero esa aclaración era para secundar lo que había mencionado Justin a cerca de piratear la señal, lo cual se puede hacer desde lejos ¿Vieron cuando un celular emite wifi? Bueno, la idea sería robar wifi. Digamos que el "protocolo" es lo más importante, en este caso sería la clave, pero, como podrán imaginar, está oculto, la idea sería que habría que "dejar a la vista" el protocolo, o sea publicar la clave para que todos podamos saberla, así cualquiera podría tener acceso total al sistema. Dejar a la vista el protocolo es otra historia, pero de todos modos dudo que sigamos adelante con eso. Colarse en la torre e interrumpir la programación directamente desde ahí va a resultar mucho más fácil y mucho más riesgoso.- dije a mis pasajeros y solté un suspiro más relajada.
-¿Ustedes saben quiénes eran los que se aparecieron allí, en el parque?¿El Aquaman y aquella rubia con colmillos?- Fuí consciente que se me escapó una ligera sonrisa al recordar lo de "gatita", definitivamente esperaba volver a encontrármela para mostrarle cómo ronroneaba.
Acudo al punto de encuentro acordado tras dejar a mi ahijado a salvo en el castillo Black, aunque me da algo de cosa dejarlo así después de lo que ha visto esta noche. Estoy seguro de que hasta ahora no había tenido que enfrentarse a una situación de batalla real, y puede haber quedado bastante impactado. Dejo de utilizar el sistema de vuelo de la moto en cuando me acerco a una zona en la que me puedan detectar, aterrizando para seguir el trayecto por carretera. Pocos minutos después alcanzo a ver la gigantesca torre de comunicaciones, el centro neurálgico de información a la población. Aminoro la marcha al ver un coche detenido a varios metros del edificio, lo justo para que no sea todavía sospechoso para las cámaras de seguridad que pueda haber y para los guardias de la puerta. Además, al acercarme con prudencia puedo comprobar si los que hay allí esperando son de los míos o si es simplemente un coche cualquiera. Finalmente identifico a los que hay dentro del vehículo, así que detengo la moto junto al coche para asomarme por la ventanilla.
- ¿Os ha seguido alguien hasta aquí? ¿saben algo los del parque? ya sabéis, el Blood Keeper y la otra vampira. - no nos ha venido mal su ayuda en ese sitio, pero sigo siendo reticente a trabajar con ellos. No me gusta lo que representan, ni lo que hicieron en el pasado. Además, el tal Benjamin se ha cargado al soldado con el que podríamos haber hablado. Incluso podría haber servido para lo que queremos hacer ahora. - ¿Cogisteis como rehén al soldado que quedaba? - indago al no verlo en los asientos, aunque tal vez lo hayan metido en el maletero para que no les de problemas. - Por cierto, al pasar por mi refugio he aprovechado para curarme un poco y de paso traeros algunas cosas que pueden servir para vuestras heridas. - no sé hasta qué punto han acabado maltrechos, pero creo que la rubia se llevó algún disparo, y Thalos lo vi salir volando por culpa de una de las granadas. Victorya creo que salió ilesa, pero nunca se sabe. - No podemos empezar la misión hechos mierda, dentro no sabemos lo que habrá que aguantar. - saco un par de pociones de la bolsa bandolera que llevo, explicando que una es la que sirve para reponer sangre perdida y la otra para hacer que las heridas dejen de sangrar y cierren un poco. Dejo que se tomen el tiempo que quieran en curarse, mientras repaso la idea de la misión.
- Podemos entrar neutralizando a los guardias, pero las cámaras de seguridad serán un problema. La otra opción es entrar por arriba...podemos hacer dos viajes y subir volando con la moto. Una vez dentro habría que desactivar las cámaras. Y no dudo que tengan detectores de individuos con magia. Deberíamos ser capaces de lanzar un mensaje que llame a luchar contra la Alianza, dejar claro que tienen alternativa más que válida. También es posible que consigamos más datos o información una vez dentro. Tengo entendido que las cámaras que hay por las calles no son únicamente de la Alianza. Es decir...todo el mundo tiene acceso en la red a los archivos de criminales, es algo público. - falta corroborar los datos, y ver qué más descubrimos una vez dentro. Lo ideal sería no tardar más de media hora en hacerlo todo, lo justo para contar con el factor sorpresa y evitar vernos rodeados si mandan refuerzos.
- ¿Os ha seguido alguien hasta aquí? ¿saben algo los del parque? ya sabéis, el Blood Keeper y la otra vampira. - no nos ha venido mal su ayuda en ese sitio, pero sigo siendo reticente a trabajar con ellos. No me gusta lo que representan, ni lo que hicieron en el pasado. Además, el tal Benjamin se ha cargado al soldado con el que podríamos haber hablado. Incluso podría haber servido para lo que queremos hacer ahora. - ¿Cogisteis como rehén al soldado que quedaba? - indago al no verlo en los asientos, aunque tal vez lo hayan metido en el maletero para que no les de problemas. - Por cierto, al pasar por mi refugio he aprovechado para curarme un poco y de paso traeros algunas cosas que pueden servir para vuestras heridas. - no sé hasta qué punto han acabado maltrechos, pero creo que la rubia se llevó algún disparo, y Thalos lo vi salir volando por culpa de una de las granadas. Victorya creo que salió ilesa, pero nunca se sabe. - No podemos empezar la misión hechos mierda, dentro no sabemos lo que habrá que aguantar. - saco un par de pociones de la bolsa bandolera que llevo, explicando que una es la que sirve para reponer sangre perdida y la otra para hacer que las heridas dejen de sangrar y cierren un poco. Dejo que se tomen el tiempo que quieran en curarse, mientras repaso la idea de la misión.
- Podemos entrar neutralizando a los guardias, pero las cámaras de seguridad serán un problema. La otra opción es entrar por arriba...podemos hacer dos viajes y subir volando con la moto. Una vez dentro habría que desactivar las cámaras. Y no dudo que tengan detectores de individuos con magia. Deberíamos ser capaces de lanzar un mensaje que llame a luchar contra la Alianza, dejar claro que tienen alternativa más que válida. También es posible que consigamos más datos o información una vez dentro. Tengo entendido que las cámaras que hay por las calles no son únicamente de la Alianza. Es decir...todo el mundo tiene acceso en la red a los archivos de criminales, es algo público. - falta corroborar los datos, y ver qué más descubrimos una vez dentro. Lo ideal sería no tardar más de media hora en hacerlo todo, lo justo para contar con el factor sorpresa y evitar vernos rodeados si mandan refuerzos.
De algun modo, habia acabado en un coche robado por Leila, sentado (o mas bien medio tirado) en los asientos traseros, sin apenas enterarme de nada, aun aturdido por culpa de la explosion de aquella granada que me habia comido asi by the face. Mientras volvian mis sentidos en si, y mi cabeza se despejaba, me fui dando cuenta de cual era el percal alli. Me espabilé con un poco de sobresalto, y lo primero que hice fue mirar a la morena y luego a la conductora chalada, akka Leila.
- Joder...que me he perdido?
Me llevé una mano a la nuca y luego comprobé que mi pistola y mis cosas mas importantes estuviesen en su sitio. Estábamos aparcando y reconocí el lugar al mirar por la ventanilla. Leila comenzó a hablar...al menos ya no me pitaban los oidos.
- Vale, o sea que nos dejamos de mierdas de hacker y lo hacemos a lo V de Vendetta...y luego explotamos algo... - gruñi un poco al terminar mi frase, estaba terminando de recomponerme, pero ahora entendia el plan un tanto mejor...o al menos se me hacia mas sencillo. La palabra "riesgo" me espabiló bastante mas
- La vampira ni puta idea. El otro un blood keeper gilipollas, como todos los blood keeper que he conocido alguna vez. Que si, que nos han venido muy bien....pero no pienso trabajar con un blood keeper en mi puta vida.
"Ha ahogado al inutil del soldado ese....sin escuchar..."
Despejado del todo, por fin. Eso de odiar le da a uno claridad de miras. Aparece Johan entonces asomado a la ventanilla ofreciendonos drogas medicinales cual camello.
- Nah...lo mio son moratones y algun corte, nada serio...guardalo para luego.
Me puse a pensar en el plan de Johan, sobre lo de detectores de magia y desactivar cámaras, pensando en algo rapido.
- Sí. Lo suyo es que no nos detecten de verdad hasta el momento de dar el golpe. A mi no me van a detectar los escaneres de magia y si me disimulo el jeto no hay problema. Y a Johan tampoco deberian detectarlo. Podemos hacer una primera incursion rapida, ir a por sus generadores principales y apagarlos. Hasta que salten los de emergencias pasaran unos instantes. Entonces es cuando Leila y Vyctoria deberian entrar....aunque sigue sin quedarme claro que detectarian los escaneres en el caso de Leila
Era cierto, la habia visto usar armas de fuego y nada de magia, pero nunca se sabia. Y sí, habia estado en el ejército....pero no era la primera vez que veia a alguien conseguir magia....o...perderla?
- La moto deberias guardarla en una capsula y llevarla contigo para usarla en cualquier momento para poder huir. O atropellar peña, tu verás. - saqué mi capsula y se la puse al Black en la mano, obligandole en cierto modo a que la agarrase.
Salí del coche y miré con precaucion, nos habian aparcado estratégicamente donde no llegaban las camaras, pero no podiamos perder tiempo, acabarian detectandonos.
-El unico problema son los primeros guardias de la entrada...eso esta videovigilado. Como timarlos o quitarselos de en medio sin ser vistos?
- Joder...que me he perdido?
Me llevé una mano a la nuca y luego comprobé que mi pistola y mis cosas mas importantes estuviesen en su sitio. Estábamos aparcando y reconocí el lugar al mirar por la ventanilla. Leila comenzó a hablar...al menos ya no me pitaban los oidos.
- Vale, o sea que nos dejamos de mierdas de hacker y lo hacemos a lo V de Vendetta...y luego explotamos algo... - gruñi un poco al terminar mi frase, estaba terminando de recomponerme, pero ahora entendia el plan un tanto mejor...o al menos se me hacia mas sencillo. La palabra "riesgo" me espabiló bastante mas
- La vampira ni puta idea. El otro un blood keeper gilipollas, como todos los blood keeper que he conocido alguna vez. Que si, que nos han venido muy bien....pero no pienso trabajar con un blood keeper en mi puta vida.
"Ha ahogado al inutil del soldado ese....sin escuchar..."
Despejado del todo, por fin. Eso de odiar le da a uno claridad de miras. Aparece Johan entonces asomado a la ventanilla ofreciendonos drogas medicinales cual camello.
- Nah...lo mio son moratones y algun corte, nada serio...guardalo para luego.
Me puse a pensar en el plan de Johan, sobre lo de detectores de magia y desactivar cámaras, pensando en algo rapido.
- Sí. Lo suyo es que no nos detecten de verdad hasta el momento de dar el golpe. A mi no me van a detectar los escaneres de magia y si me disimulo el jeto no hay problema. Y a Johan tampoco deberian detectarlo. Podemos hacer una primera incursion rapida, ir a por sus generadores principales y apagarlos. Hasta que salten los de emergencias pasaran unos instantes. Entonces es cuando Leila y Vyctoria deberian entrar....aunque sigue sin quedarme claro que detectarian los escaneres en el caso de Leila
Era cierto, la habia visto usar armas de fuego y nada de magia, pero nunca se sabia. Y sí, habia estado en el ejército....pero no era la primera vez que veia a alguien conseguir magia....o...perderla?
- La moto deberias guardarla en una capsula y llevarla contigo para usarla en cualquier momento para poder huir. O atropellar peña, tu verás. - saqué mi capsula y se la puse al Black en la mano, obligandole en cierto modo a que la agarrase.
Salí del coche y miré con precaucion, nos habian aparcado estratégicamente donde no llegaban las camaras, pero no podiamos perder tiempo, acabarian detectandonos.
-El unico problema son los primeros guardias de la entrada...eso esta videovigilado. Como timarlos o quitarselos de en medio sin ser vistos?
Por más que pensaba no lograba entender como era que había aceptado dejar manejar a la recién conocida. Había tomado asiento detrás del auto con Thalos desmayado en su regazo mientras su mirada escrutiñaba la ciudad por la que pasaban. No tardaron mucho en llegar a destino, ni Thalos en recomponerse, la cosa es que estaban a punto ya de entrar y Johan no se aparecía.
Prestó atención a lo que decía la chica, aunque su rostro no parecía impresionarse. La realidad era que de cualquier modo sentía que se estaban apresurando, pero quizás porque ella era más pasiva para hacer las cosas. Cruzó piernas y apoyó el mentón en el puño contra la ventana de modo elegante en su lugar, observando el espacio donde debería estar la torre afuera en la ventana. Fue hasta que Johan llegó que se interesó en el trabajo de equipo. Al ver que Thalos desaprovechó lo de las pociones, esperó a que abriera la boca lo suficiente para hablar y le metió un par de cada una en la boca, levantándole el mentón bruscamente para que tragara. Si bien la fuerza no era su fuerte, la sorpresa sí- Mejor prevenir que lamentar.- Dijo, pues considerando el estado de salud de todos, tenía la sensación de que si a alguien le tocaría cargar con los cadáveres sería a ella.
Mientras escuchaba las opciones, ninguna le convencía del todo. Eran demasiado peligrosas y usar la violencia que sería grabada en cámara justo antes de hacer un anuncio en televisión nacional probablemente les dejaría mal parados. Y si ella iba primero, las alarmas contra magia saltarían en menos de dos segundos. Estarían rodeados en menos de lo que canta un gallo. Tenían que ser ellos, y tenía que ser sin violencia y sin ser reconocidos.- Lo bueno es que les gusta disfrazarse, ¿o no, Thalos? - Preguntó viendo aún la chaqueta de Coca-Cola que llevaba puesta. Aquella con que había perpetrado el ataque. Tomó su bolsa infinita y sacó un abrigo de pieles elegante que preferentemente le cubriría a alguno las botas. Lo dejó sobre el regazo de Thalos sin mucho cuidado.- Yo me encargo de las cámaras. Traten de no hacer alboroto o al menos de inhabilitar el dispositivo que detecta la magia. Si se puede, sin apagar los generadores, pues entonces la luz tardará un rato en aparecer por lo grande que es el edificio y para entonces estaremos rodeados. Envíenmen un mensaje si lo logran, entraremos nosotras hasta el piso de transmisión, seguro que es el último... con el afán de joder la misión... y nos alcanzan ahí. Si tardan demasiado, entro yo al aire y suavizo las cosas para el discurso de Thalos. Que espero no sea muy amenazador. Leila que se encargue de iniciar las transmisiones, que tiene cara de saber de eso. O nos envíamos mensajes por moneda o lo hacemos a la antigua. Diez minutos para entrar sin ser reconocidos, seis para el mensaje y uno para salir a como se pueda. No más, no menos.- Murmuró, extendiéndole a Thalos el número del celular viejo que había robado y que traía consigo. Eso se vería más normal que ir texteando con moneda.-Los refuerzos llegarán en más o menos doce minutos... por lo lejano del lugar. Puntualidad inglesa, chicos.
Prestó atención a lo que decía la chica, aunque su rostro no parecía impresionarse. La realidad era que de cualquier modo sentía que se estaban apresurando, pero quizás porque ella era más pasiva para hacer las cosas. Cruzó piernas y apoyó el mentón en el puño contra la ventana de modo elegante en su lugar, observando el espacio donde debería estar la torre afuera en la ventana. Fue hasta que Johan llegó que se interesó en el trabajo de equipo. Al ver que Thalos desaprovechó lo de las pociones, esperó a que abriera la boca lo suficiente para hablar y le metió un par de cada una en la boca, levantándole el mentón bruscamente para que tragara. Si bien la fuerza no era su fuerte, la sorpresa sí- Mejor prevenir que lamentar.- Dijo, pues considerando el estado de salud de todos, tenía la sensación de que si a alguien le tocaría cargar con los cadáveres sería a ella.
Mientras escuchaba las opciones, ninguna le convencía del todo. Eran demasiado peligrosas y usar la violencia que sería grabada en cámara justo antes de hacer un anuncio en televisión nacional probablemente les dejaría mal parados. Y si ella iba primero, las alarmas contra magia saltarían en menos de dos segundos. Estarían rodeados en menos de lo que canta un gallo. Tenían que ser ellos, y tenía que ser sin violencia y sin ser reconocidos.- Lo bueno es que les gusta disfrazarse, ¿o no, Thalos? - Preguntó viendo aún la chaqueta de Coca-Cola que llevaba puesta. Aquella con que había perpetrado el ataque. Tomó su bolsa infinita y sacó un abrigo de pieles elegante que preferentemente le cubriría a alguno las botas. Lo dejó sobre el regazo de Thalos sin mucho cuidado.- Yo me encargo de las cámaras. Traten de no hacer alboroto o al menos de inhabilitar el dispositivo que detecta la magia. Si se puede, sin apagar los generadores, pues entonces la luz tardará un rato en aparecer por lo grande que es el edificio y para entonces estaremos rodeados. Envíenmen un mensaje si lo logran, entraremos nosotras hasta el piso de transmisión, seguro que es el último... con el afán de joder la misión... y nos alcanzan ahí. Si tardan demasiado, entro yo al aire y suavizo las cosas para el discurso de Thalos. Que espero no sea muy amenazador. Leila que se encargue de iniciar las transmisiones, que tiene cara de saber de eso. O nos envíamos mensajes por moneda o lo hacemos a la antigua. Diez minutos para entrar sin ser reconocidos, seis para el mensaje y uno para salir a como se pueda. No más, no menos.- Murmuró, extendiéndole a Thalos el número del celular viejo que había robado y que traía consigo. Eso se vería más normal que ir texteando con moneda.-Los refuerzos llegarán en más o menos doce minutos... por lo lejano del lugar. Puntualidad inglesa, chicos.
Aún dentro del coche hice una mueca de duda ante el comentario de Thalos de dejar de lado lo de hackear, su afán por querer explotar cosas era notorio. Lo ví por el espejo retrovisor recomponerse y a Victorya sentarse como una lechuguin. Debo admitir que me decepcionó un poco que no supieran quién era la vampiro, pero al parecer era una Blood Keeper y Thalos no se lo veía nada dispuesto a trabajar con esa gente.
-Apuesto que no, aunque no tardarán en darse cuenta que nadie se teletransportó al Ministerio de la paz y ampliar el rango de búsqueda- Respondí a la pregunta de si alguien nos había seguido con una sonrisa de suficiencia, no cualquiera maneja como yo a sus 18 años. Por suerte, cuando Johan apareció ya estaba más relajada y centrada, si no ya le habría arañado toda la cara del susto. -Les dije que se quedaran a ordenar un poco, no pareceríamos la alternativa más lógica si ven lo que hicimos en el parque.- Respondí con respecto a los Blood Keepers. -Siii- contesté a cerca del soldado un tanto harta de las preguntas -Está en el baúl ¿Lo desea comer aquí o es para llevar?- dije como si fuera empleada de una cadena de comida rápida. No me pasó desapercibido que la actitud de Victorya cambió bruscamente con la llegada del mago así que lo observé con una sonrisa calculadora analizando cómo reaccionaba él ante ella.
Cuando ví a la morena meterle a Thalos la medicina de prepo hice un intento lamentable de contener la risa, no era el momento de comentarios agudos. “Ya tendre tiempo para contar la anécdota en otra ocasión” pensé para serenarme mientras me sacaba la chaqueta estropeada y abría la puerta pero sin levantarme del asiento del conductor tomando los menjunjes mágicos que Johan sacó de la bolsa. Me aplique la esencia de díctamo primero en el hombro con una confianza que se evaporó rápidamente al sentir como ardía ese antídoto del demonio, luego con más miedo que confianza la puse en mi costado sangrante, acto seguido me incorporé viendo cómo emanaba un humo verdoso que se elevaba hacia arriba, efectivamente la sangre de la herida dejaba de manar, pero faltaba la herida más incómoda, así que aplique, lo más disimuladamente que pude, el ungüento en la nalga. Definitivamente necesitaba ropa, de ninguna manera estaba dispuesta a andar con el culo al aire. Las heridas no cerraron del todo, pero era mejor que nada. “Pobre el dueño de este auto, se lo dejamos todo manchado de sangre” Pensé, luego bebí un sorbo de la poción reabastecedora y le devolví las medicinas a Johan mientras comentaba:
-Pues sí, encontraremos conversaciones interesantes. Desde aquí se vigilan las principales empresas de telefonía y telecomunicaciones, así que si saben el nombre del dueño de la línea podremos encontrar sus conversaciones ya sea por telefono o por computadora o por celular- dije ante la esperanza de Johan de conseguir más información una vez dentro.
Miré hacia dentro del auto, a Thalos cuando me nombró y quiso saber qué detectarían los escáneres en mi caso, yo me limité a sonreírle de lado como respuesta, en Hyde Park ya se me había escapado un rugido, no había tiempo de dibujarselos. En mi época en el ejército había hecho malabares para que nadie me descubriera, ahora no es como si tuviera que seguir ocultandolo pero podría hacer un par de malabares más. El comentario de las cápsulas de Thalos me recordó que yo tenía dentro del auto mis cosas, así que metí la mitad de mi cuerpo en el coche para agarrarlas para volver a salir enseguida con mi armamento y completamente colorada cuando recordé el agujerote en mis leggins. Rápidamente até la chaqueta a mi cintura para ocultarlo. En ese momento ví a Victorya sacar de su bolsa un abrigo de pieles elegante, dárselo a Thalos y tomar el control de la situación -Mary Poppins debe estar buscando su Bolso Victorya- dije señalando el contenedor, no pude resistir la tentación. “Concentración” me dije a mi misma, yo no era la mejor siguiendo órdenes pero se oían sensatas, así que preste atención.
-Si que se puede inhabilitar el dispositivo que detecta la magia.- Acote -Hay que cortar el cable verde... ¿o era el azul?... no, no, estoy 75% segura de que era el verde- “Creo, espero” pensé, por dentro estaban volviendo los nervios, pero por fuera intenté mantener la expresión de seguridad
Ante el comentario de que entraríamos nosotras hasta el piso de transmisión me dirigí al portaequipajes y lo abrí, ayudada por mi daga, lentamente por si el soldado se le daba por saltarme encima con alguna sorpresa, le tomé el pulso para saber como estaba y miré su nuca por si tenía alguna herida abierta. Poco a poco le fuí sacando el uniforme con movimientos lentos y pausados, tampoco quería despertarlo, hasta dejarlo cubierto unicamente por una remera y el calzoncillo que traía debajo, por fortuna también me había traído el casco del soldado. Me alejé un poco para vestirme, dejando que el resto del grupo viera al noqueado si querían y cerraran el baúl. -Luego lo acercaré a un hospital- Las mangas me quedaban un poco largas, pero las ajuste con la parte angosta de los guantes. Quizás Victorya podía hacer eso de desaparecer y reaparecer en otro lugar pero ella no conocía el edificio, quizá aparecíamos en el comedor rodeadas por operarios y guardias de seguridad, mejor prevenir que lamentar.
-Así es, es uno de los últimos- aporté ante la conjetura de la chica. Asentí ante mi nueva asignación de iniciar las transmisiones con el casco bajo el brazo, el rifle a juego y más cómoda ahora que estaba más vestida. -Por cierto los generadores están en el sótano. Podrías hacerte pasar por un niño mimado- dije mirando a Thalos -Al cual se le corto la luz mientras se estaba haciendo la manicura y... ya sabes hacer un berrinche, en plan *Hablaré con su supervisor o, mejor... ¡Escribiré una nota!* y exigir comprobar los generadores- dije con voz aguda y dramática. -¡Mucha Merd chicos! Así se desea suerte en el mundo del espectáculo.-
-Apuesto que no, aunque no tardarán en darse cuenta que nadie se teletransportó al Ministerio de la paz y ampliar el rango de búsqueda- Respondí a la pregunta de si alguien nos había seguido con una sonrisa de suficiencia, no cualquiera maneja como yo a sus 18 años. Por suerte, cuando Johan apareció ya estaba más relajada y centrada, si no ya le habría arañado toda la cara del susto. -Les dije que se quedaran a ordenar un poco, no pareceríamos la alternativa más lógica si ven lo que hicimos en el parque.- Respondí con respecto a los Blood Keepers. -Siii- contesté a cerca del soldado un tanto harta de las preguntas -Está en el baúl ¿Lo desea comer aquí o es para llevar?- dije como si fuera empleada de una cadena de comida rápida. No me pasó desapercibido que la actitud de Victorya cambió bruscamente con la llegada del mago así que lo observé con una sonrisa calculadora analizando cómo reaccionaba él ante ella.
Cuando ví a la morena meterle a Thalos la medicina de prepo hice un intento lamentable de contener la risa, no era el momento de comentarios agudos. “Ya tendre tiempo para contar la anécdota en otra ocasión” pensé para serenarme mientras me sacaba la chaqueta estropeada y abría la puerta pero sin levantarme del asiento del conductor tomando los menjunjes mágicos que Johan sacó de la bolsa. Me aplique la esencia de díctamo primero en el hombro con una confianza que se evaporó rápidamente al sentir como ardía ese antídoto del demonio, luego con más miedo que confianza la puse en mi costado sangrante, acto seguido me incorporé viendo cómo emanaba un humo verdoso que se elevaba hacia arriba, efectivamente la sangre de la herida dejaba de manar, pero faltaba la herida más incómoda, así que aplique, lo más disimuladamente que pude, el ungüento en la nalga. Definitivamente necesitaba ropa, de ninguna manera estaba dispuesta a andar con el culo al aire. Las heridas no cerraron del todo, pero era mejor que nada. “Pobre el dueño de este auto, se lo dejamos todo manchado de sangre” Pensé, luego bebí un sorbo de la poción reabastecedora y le devolví las medicinas a Johan mientras comentaba:
-Pues sí, encontraremos conversaciones interesantes. Desde aquí se vigilan las principales empresas de telefonía y telecomunicaciones, así que si saben el nombre del dueño de la línea podremos encontrar sus conversaciones ya sea por telefono o por computadora o por celular- dije ante la esperanza de Johan de conseguir más información una vez dentro.
Miré hacia dentro del auto, a Thalos cuando me nombró y quiso saber qué detectarían los escáneres en mi caso, yo me limité a sonreírle de lado como respuesta, en Hyde Park ya se me había escapado un rugido, no había tiempo de dibujarselos. En mi época en el ejército había hecho malabares para que nadie me descubriera, ahora no es como si tuviera que seguir ocultandolo pero podría hacer un par de malabares más. El comentario de las cápsulas de Thalos me recordó que yo tenía dentro del auto mis cosas, así que metí la mitad de mi cuerpo en el coche para agarrarlas para volver a salir enseguida con mi armamento y completamente colorada cuando recordé el agujerote en mis leggins. Rápidamente até la chaqueta a mi cintura para ocultarlo. En ese momento ví a Victorya sacar de su bolsa un abrigo de pieles elegante, dárselo a Thalos y tomar el control de la situación -Mary Poppins debe estar buscando su Bolso Victorya- dije señalando el contenedor, no pude resistir la tentación. “Concentración” me dije a mi misma, yo no era la mejor siguiendo órdenes pero se oían sensatas, así que preste atención.
-Si que se puede inhabilitar el dispositivo que detecta la magia.- Acote -Hay que cortar el cable verde... ¿o era el azul?... no, no, estoy 75% segura de que era el verde- “Creo, espero” pensé, por dentro estaban volviendo los nervios, pero por fuera intenté mantener la expresión de seguridad
Ante el comentario de que entraríamos nosotras hasta el piso de transmisión me dirigí al portaequipajes y lo abrí, ayudada por mi daga, lentamente por si el soldado se le daba por saltarme encima con alguna sorpresa, le tomé el pulso para saber como estaba y miré su nuca por si tenía alguna herida abierta. Poco a poco le fuí sacando el uniforme con movimientos lentos y pausados, tampoco quería despertarlo, hasta dejarlo cubierto unicamente por una remera y el calzoncillo que traía debajo, por fortuna también me había traído el casco del soldado. Me alejé un poco para vestirme, dejando que el resto del grupo viera al noqueado si querían y cerraran el baúl. -Luego lo acercaré a un hospital- Las mangas me quedaban un poco largas, pero las ajuste con la parte angosta de los guantes. Quizás Victorya podía hacer eso de desaparecer y reaparecer en otro lugar pero ella no conocía el edificio, quizá aparecíamos en el comedor rodeadas por operarios y guardias de seguridad, mejor prevenir que lamentar.
-Así es, es uno de los últimos- aporté ante la conjetura de la chica. Asentí ante mi nueva asignación de iniciar las transmisiones con el casco bajo el brazo, el rifle a juego y más cómoda ahora que estaba más vestida. -Por cierto los generadores están en el sótano. Podrías hacerte pasar por un niño mimado- dije mirando a Thalos -Al cual se le corto la luz mientras se estaba haciendo la manicura y... ya sabes hacer un berrinche, en plan *Hablaré con su supervisor o, mejor... ¡Escribiré una nota!* y exigir comprobar los generadores- dije con voz aguda y dramática. -¡Mucha Merd chicos! Así se desea suerte en el mundo del espectáculo.-
Bajo de la moto mientras mis compañeros terminan de curarse, dando el visto bueno a eso de que "obliguen" a Thalos a curar las heridas que pueda tener, aunque seguro que le va a gruñir a Victorya. Cuando terminan recojo los frascos que quedan, uno de ellos prácticamente acabado. Muestro a Thalos la cápsula para guardar la moto que llevo conmigo, haciendo un gesto de que puede guardar la suya. - Sí, la guardaré por ahora. Me diste una cápsula hace tiempo, ¿recuerdas? - la arrojo contra la moto para volver a guardarla, al menos por el momento. Si las cosas se ponen feas siempre podemos sacarla y saltar por cualquiera de las ventanas. Termino de escuchar el plan de Thalos y las deliberaciones de Victorya y Leila, tratando de encajar las piezas para hacer que esto funcione de la mejor manera posible. Repito las partes principales para asegurarme de que nos hemos enterado, como lo de las cámaras, los tiempos que tardaremos, cómo nos coordinaremos...también nos encargamos del tema de las vestimentas, después de haber visto al soldado noqueado que tiene en el maletero. - No sé si será muy útil, pero por ahora la ropa servirá. Y posible rehén en caso de necesitarlo. - dudo que se preocupen mucho por él, puesto que no se han preocupado mucho por otros de rango superior que hemos atacado y retenido.
- Aquí nos separamos, por ahora. Iremos al sótano a por los generadores a apagar lo que usen para los sensores de seres mágicos y el tema de cámaras, pero necesitaremos la luz más tarde, para hacer las transmisiones, así que intentaré no apagarlo todo. Victorya puede tapar algunas de las cámaras con sus sombras...os dejo el resto, nos vemos arriba. ¡Suerte!- espero un momento a que Thalos coja el abrigo si es que al final decide ponerse eso, poniéndonos después en marcha y alejándonos de las chicas. Todavía no tenemos muy claro si los sensores saltarían con Leila, pero está claro que con Victorya sí. Tampoco sé si detectaría algo en mí, puesto que mis habilidades mágicas están totalmente mermadas en este momento. Por el momento no salta ningún escáner, a pesar de que nos estamos acercando a una de las puertas que tiene el edificio en su base. Tratamos de evitar la puerta principal, buscando alguna que pueda estar destinada a la entrada de vehículos, como unidades móviles de televisión, materiales de grabación, decorados y otros elementos que no suelan meterse por la puerta principal. Ese sitio también debe tener cámaras de vigilancia y al menos un par de guardias, así que antes de acercarnos más nos detenemos a observar la situación. Las cosas suelen acabar en caos siempre que nos juntamos Thalos y yo en una misión, así que posiblemente pase lo mismo hoy.
- Podemos hacer dos cosas. Uno de los dos se acerca y trata de distraer y alejar un poco a esos guardias mientras el otro se encarga de tapar o inutilizar esa cámara en concreto. La otra opción es arrojar algo a esa cámara o dispararle para estropearla y así poder atacar a ese par sin ser vistos. La primera opción es la más sensata, cuanto más bajo mantengamos el perfil será lo mejor. ¿Vas a ponerte eso...?
- Aquí nos separamos, por ahora. Iremos al sótano a por los generadores a apagar lo que usen para los sensores de seres mágicos y el tema de cámaras, pero necesitaremos la luz más tarde, para hacer las transmisiones, así que intentaré no apagarlo todo. Victorya puede tapar algunas de las cámaras con sus sombras...os dejo el resto, nos vemos arriba. ¡Suerte!- espero un momento a que Thalos coja el abrigo si es que al final decide ponerse eso, poniéndonos después en marcha y alejándonos de las chicas. Todavía no tenemos muy claro si los sensores saltarían con Leila, pero está claro que con Victorya sí. Tampoco sé si detectaría algo en mí, puesto que mis habilidades mágicas están totalmente mermadas en este momento. Por el momento no salta ningún escáner, a pesar de que nos estamos acercando a una de las puertas que tiene el edificio en su base. Tratamos de evitar la puerta principal, buscando alguna que pueda estar destinada a la entrada de vehículos, como unidades móviles de televisión, materiales de grabación, decorados y otros elementos que no suelan meterse por la puerta principal. Ese sitio también debe tener cámaras de vigilancia y al menos un par de guardias, así que antes de acercarnos más nos detenemos a observar la situación. Las cosas suelen acabar en caos siempre que nos juntamos Thalos y yo en una misión, así que posiblemente pase lo mismo hoy.
- Podemos hacer dos cosas. Uno de los dos se acerca y trata de distraer y alejar un poco a esos guardias mientras el otro se encarga de tapar o inutilizar esa cámara en concreto. La otra opción es arrojar algo a esa cámara o dispararle para estropearla y así poder atacar a ese par sin ser vistos. La primera opción es la más sensata, cuanto más bajo mantengamos el perfil será lo mejor. ¿Vas a ponerte eso...?
- off:
- por el momento nos separamos en los turnos, Johan/Thalos y Victorya/Leila. Por libre, ya no tendríais que esperar al post de Thalos a partir de ahora)
Cuando ví a los chicos alejarse sentí aumentar mi pulso y la adrenalina fluir por mis venas olvidando el frío de la noche, de hecho empezaba a sentirme un poco acalorada dentro del uniforme del soldado.
-No parecen muy correspondidos los sentimientos que tengas por Johan- Dije girandome para mirarla directamente como desafiandola a que muestre algún sentimiento y analizar la reacción de la chica, aunque no me hubiera extrañado que permaneciera impasible, parecía ser muy reservada y que no me tenía confianza.
-A mi tampoco me inspiras mucha tranquilidad, al menos hasta que hagas el test Voight-Kampff- Dije refiriéndome a su falta de expresividad. -Pero hasta entonces, tenemos que trabajar juntas, yo conozco este edificio y no te culpo por no confiar en mí, yo tampoco lo haría, pero puedes confiar en que quiero proteger las esperanzas de gente como Black.- Luego de una pausa esperando su respuesta, continue. -Podemos hacer lo siguiente; tu hazte pasar por una nueva conductora de televisión y yo seré tu guardia, es habitual la vigilancia de los periodistas. No te preocupes, yo hablaré ¿Podrás tapar las cámaras con un poco de tu Bibidi babidi bu?- Dije y me puse el casco cuidando de poner todos los seguros de la armadura para que nada se saliera de su lugar. Nosotras nos encontrábamos a una cuadra de la entrada trasera, donde había estacionado el coche por lo que supuse que deberíamos avanzar para que la chica pueda hacer su magia con precisión, así que caminé hasta la esquina desde donde se podía ver claramente el edificio esperando a que la chica hiciera lo suyo desde ahí. Cuando ya estaba todo asegurado le pregunté a Victorya -¿Ya está? Vamos.- Y comencé a caminar hacia la entrada principal cruzando la calle y doblando la esquina, sosteniendo el rifle con las dos manos, posición reglamentaria para los soldados, esperando que la brujita me siguiera y rogando que, cuando lleguemos, los sensores de seres mágicos estuvieran desconectados y que nadie se diera cuenta.
-No parecen muy correspondidos los sentimientos que tengas por Johan- Dije girandome para mirarla directamente como desafiandola a que muestre algún sentimiento y analizar la reacción de la chica, aunque no me hubiera extrañado que permaneciera impasible, parecía ser muy reservada y que no me tenía confianza.
-A mi tampoco me inspiras mucha tranquilidad, al menos hasta que hagas el test Voight-Kampff- Dije refiriéndome a su falta de expresividad. -Pero hasta entonces, tenemos que trabajar juntas, yo conozco este edificio y no te culpo por no confiar en mí, yo tampoco lo haría, pero puedes confiar en que quiero proteger las esperanzas de gente como Black.- Luego de una pausa esperando su respuesta, continue. -Podemos hacer lo siguiente; tu hazte pasar por una nueva conductora de televisión y yo seré tu guardia, es habitual la vigilancia de los periodistas. No te preocupes, yo hablaré ¿Podrás tapar las cámaras con un poco de tu Bibidi babidi bu?- Dije y me puse el casco cuidando de poner todos los seguros de la armadura para que nada se saliera de su lugar. Nosotras nos encontrábamos a una cuadra de la entrada trasera, donde había estacionado el coche por lo que supuse que deberíamos avanzar para que la chica pueda hacer su magia con precisión, así que caminé hasta la esquina desde donde se podía ver claramente el edificio esperando a que la chica hiciera lo suyo desde ahí. Cuando ya estaba todo asegurado le pregunté a Victorya -¿Ya está? Vamos.- Y comencé a caminar hacia la entrada principal cruzando la calle y doblando la esquina, sosteniendo el rifle con las dos manos, posición reglamentaria para los soldados, esperando que la brujita me siguiera y rogando que, cuando lleguemos, los sensores de seres mágicos estuvieran desconectados y que nadie se diera cuenta.
- OFF:
Cuando el plan estuvo resuelto, se cruzó tranquilamente de brazos y esperó a que el par se fuera. Les observó alejarse por algunos segundos hasta escuchar de la voz peculiar de la chica.- Eres muy graciosa.- fue la única respuesta que obtuvo además de media sonrisa ladina cuando se dignó a verle a la cara aún con el intento de desafío al ponérsele enfrente, solo para luego volver la mirada a donde se habían ido los chicos. Había dejado estar por la paz lo de Mary Poppins, pero al menos un comentario se llevaría si intentaba tratarla igual que a Thalos.
Que bueno que mi trabajo no es inspirarte tranquilidad, sería pésima.- Susurró, esta vez con una sonrisa más divertida que la anterior. No pudo evitar sacar de su bolsa un par de lentes oscuros y morder una de las patillas mientras la escuchaba hablar tan interesantemente de los deberes y lo que se debía o no debía hacer. Aquel pequeño discurso traía muchas cosas a su cabeza, pensamientos tanto buenos como malos. No tenía nada en su contra, pero algunas de sus sombras ya comenzaban a hacer sugerencias pues habían estado ociosas por demasiado tiempo. Las envió a seguir a Thalos y Johan, que aunque bien ella no veía lo que hacían, si podía sentir que estaban en la posición correcta, cubriendo con una especie de espesa niebla negra las cámaras que podían captar a quienes recién llegaban a la entrada de la torre. El Bibidi babidi bu derramó un poco de las gotas de un vaso ya bastante lleno. Se colocó los lentes con rapidez, ya llevaba un par de leggins negros y una camiseta blanca larga, así que no era como que iba desalineada. Sacó de la bolsa un abrigo de piel blanca y afelpada, extravagante, que al menos cubría mucho de su figura y otro tanto de su cara. Sería fácil pasar con él sin ser identificada por los reconocimientos faciales y corporales.- Empezaremos a tu modo. Después... ya veremos.- Se encogió de hombros y comenzó a caminar en la dirección en la que se habían ido el par hacía unos minutos.- No te expongas aún. Espera un poco a que entren...- Murmuró sacando un cigarrillo y encendiéndolo. No le agradaba, pero pretender fumar era una buena excusa para ganar algunos minutos afuera, por eso de las regulaciones... No lo probó, solo lo sostuvo entre sus dedos un rato.- ¿Tú quién eres?
Que bueno que mi trabajo no es inspirarte tranquilidad, sería pésima.- Susurró, esta vez con una sonrisa más divertida que la anterior. No pudo evitar sacar de su bolsa un par de lentes oscuros y morder una de las patillas mientras la escuchaba hablar tan interesantemente de los deberes y lo que se debía o no debía hacer. Aquel pequeño discurso traía muchas cosas a su cabeza, pensamientos tanto buenos como malos. No tenía nada en su contra, pero algunas de sus sombras ya comenzaban a hacer sugerencias pues habían estado ociosas por demasiado tiempo. Las envió a seguir a Thalos y Johan, que aunque bien ella no veía lo que hacían, si podía sentir que estaban en la posición correcta, cubriendo con una especie de espesa niebla negra las cámaras que podían captar a quienes recién llegaban a la entrada de la torre. El Bibidi babidi bu derramó un poco de las gotas de un vaso ya bastante lleno. Se colocó los lentes con rapidez, ya llevaba un par de leggins negros y una camiseta blanca larga, así que no era como que iba desalineada. Sacó de la bolsa un abrigo de piel blanca y afelpada, extravagante, que al menos cubría mucho de su figura y otro tanto de su cara. Sería fácil pasar con él sin ser identificada por los reconocimientos faciales y corporales.- Empezaremos a tu modo. Después... ya veremos.- Se encogió de hombros y comenzó a caminar en la dirección en la que se habían ido el par hacía unos minutos.- No te expongas aún. Espera un poco a que entren...- Murmuró sacando un cigarrillo y encendiéndolo. No le agradaba, pero pretender fumar era una buena excusa para ganar algunos minutos afuera, por eso de las regulaciones... No lo probó, solo lo sostuvo entre sus dedos un rato.- ¿Tú quién eres?
Aunque había llegado hacía rato a los alrededores de la torre de telecomunicaciones, no había hecho acto de presencia, dado que me presencia no era del todo confortable para algunos de los presentes. Preferí, por ello, desaparecerme a una de las alturas para vigilar desde allí el movimiento de los resistentes. Johan no tardó en llegar con la moto, esta vez sin el crío de pelo blanco. Mejor. Dialogaron algo y se separaron.
Quedo sentado allí, en la oscuridad, sin moverme. Todavía estoy pensando en si debería ayudar o no a los resistentes. Pero bueno, tenemos una tregua de no agresión y si ellos han decidido atacar a los humanos y no pienso oponer resistencia alguna. Pero creo que van a necesitar ayuda para pasar por los controles tanto físicos como por cámaras. Por los primeros puodo puedo hacer, pero los segundos pueden ser más fáciles.
Victorya tenía la capacidad de hacer niebla, pero los otros dos cenutrios habían ido sin siquiera camuflarse. Les sigo de azotea en azotea, hasta que llegan a la entrada, aunque los controles mágicos no saltan al pasar Johan (cosa que me parece raro), tampoco lo hacen conmigo al mantenerme a una distancia prudencial.
Conjuro un aguamenti de los de la vieja escuela que elevo por encima de todas nuestras cabezas y la hago estallar en mil gotitas. Desde mi posición puedo controlar algunas gotas para que caigan casualmente en las lentes de las cámaras, que quedan ocultas por el chaparrón que debería está cayendo. Repito el proceso varias veces para simular el efecto de la lluvia. Eso debería hacer que tanto los guardas como los resistentes se tengan que cubrir más de la cuenta, dificultando aún más, la identificación.
Me da mucho por culo tener que ayudar a los resistentes, como había dicho antes, a pesar de tener el mismo enemigo común, pero tampoco me apetece que se qeuden con toda la gloria ni quiero que todo el mundo mágico piense que ellos han sido los salvadores. Y una mierda.
Quedo sentado allí, en la oscuridad, sin moverme. Todavía estoy pensando en si debería ayudar o no a los resistentes. Pero bueno, tenemos una tregua de no agresión y si ellos han decidido atacar a los humanos y no pienso oponer resistencia alguna. Pero creo que van a necesitar ayuda para pasar por los controles tanto físicos como por cámaras. Por los primeros puodo puedo hacer, pero los segundos pueden ser más fáciles.
Victorya tenía la capacidad de hacer niebla, pero los otros dos cenutrios habían ido sin siquiera camuflarse. Les sigo de azotea en azotea, hasta que llegan a la entrada, aunque los controles mágicos no saltan al pasar Johan (cosa que me parece raro), tampoco lo hacen conmigo al mantenerme a una distancia prudencial.
Conjuro un aguamenti de los de la vieja escuela que elevo por encima de todas nuestras cabezas y la hago estallar en mil gotitas. Desde mi posición puedo controlar algunas gotas para que caigan casualmente en las lentes de las cámaras, que quedan ocultas por el chaparrón que debería está cayendo. Repito el proceso varias veces para simular el efecto de la lluvia. Eso debería hacer que tanto los guardas como los resistentes se tengan que cubrir más de la cuenta, dificultando aún más, la identificación.
Me da mucho por culo tener que ayudar a los resistentes, como había dicho antes, a pesar de tener el mismo enemigo común, pero tampoco me apetece que se qeuden con toda la gloria ni quiero que todo el mundo mágico piense que ellos han sido los salvadores. Y una mierda.
Cuando Victorya me obligó a tragar las pociones en un despiste mio, estuve a punto de pegarle un puñetazo a mala folla, porque eso de que invadiesen mi espacio personal y me obligasen a hacer algo no me hacia digamos....ninguna gracia. Estuve incluso a punto de soltarle un comentario obsceno a cuenta de meter cosas en la boca, pero me callé, porque me di cuenta de que quizá, no era la mejor idea soltar aquello. La cosa se quedó en una mala mirada y en mí apartandome de ella.
Lo cierto era que estaba un poco arisco de más desde lo ocurrido en el parque y que....odiaba trabajar en equipo. Es decir, o conocia muy bien a mi equipo, o preferia hacerlo solo. Y de los presentes, solo conocia muy bien a Johan....
- Voy de humano. No voy disfrazado. - le espeté a Victorya de modo muy seco, por su comentario sobre la ropa que llevaba. Ultimamente me llegaba la sensacion de que a la gente se le habia olvidado lo que era vivir en el mundo no magico.... y no me gustaba aquella sensacion. Aunque conociendome, igual me estaba comiendo la cabeza de más. Igual eran mis paranoias y me lo estaba imaginando.
"Discurso? Yo? Amenazador?"
Resoplé. Eso sería complicado. Tome el numero de telefono que la morena me dio y lo apunté. Mentalmente anoté los tiempos tambien para cada tarea y asenti con la cabeza, pues estaba de acuerdo.
- En menos si traen Centinelas. Estamos a las afueras... no les importará usarlos.
La sonrisita de Laila como toda respuesta a mi directa pregunta me tocó las narices. De mal humor, yo? Náh. Levanté mi ceja y lo dejé correr. Pasaba de jugar a las adivinanzas esta noche.... Me vengué mirándole el culo cuando metio medio cuerpo adentro del coche para sacar sus cosas, aunque se tapó rapido. Agarré el abrigo peludo ese que me dio (off rol: foto del abrigo pls que quiero reirme xD) solo porque las autoridades estaban advertidas, probablemente, de mi aspecto previo.
- Verde o azul. Lo echaré a suertes si no estás segura.
Mostró que tendría deferencias para con el soldado, lo cual me parecio bien. Asi que en principio habia que ir a los sotanos sin liarla ante las camaras en pocos minutos y cortar un cable de algun color para inutilizar un rato los sensores antimagia....bien.
Nos despedimos de ellas y echamos a andar hacia la puerta principal (?) o lo otro que ha dicho Johan....que seguro hay menos gente..... Resulta que el abrigo me viene genial para ocultar mejor mis armas
- Ya me lo he puesto. Estoy fabuloso, verdad? Primera opcion. - en mi voz se notaba cierta mala folla contenida. Seguir la primera opcion iba a ser dificil pero era lo mas sensato por ahora. - Yo les distraigo. Igual hasta consigo que nos dejen entrar....
Habian alli dos guardias con sus correspondientes armas, muy bien a la vista. Se puso a llover justo en ese momento.... aunque era una llovizna muy debil. Pensaba la mejor manera de distraer a los guardias esos, de a ver por qué dos tios iban juntos a la torre de telecomunicaciones pasado el toque de queda....en las afueras de londres...y uno ataviado con un abrigo de pieles.... nos iban a pedir las identificaciones seguro.
Pensaba, e intantaba pensar rapido. Hacerse la victima desfallecida no iba a colar con mi estatura, mis hombros y con un tio como Johan al lado. Sin embargo saqué mis rayban (robadas) en medio de aquella noche y me las puse. Quizá si pudiesemos picar su curiosidad lo suficiente.... nos dejarian al menos entrar.
-Se me ha ocurrido algo. Prepárate por si todo sale muy jodidamente mal.
Me adelanté un poco a Johan y me acerqué hasta los guardias de seguridad, que me dieron el alto rapido, aunque no llegaron a apuntarme.... solo a pedirme la acreditacion para entrar.
"al menos estan mas confiados con eso de que no hayan saltado las alarmas antimagia"
Me detuve en cuanto me dieron el alto, no quise parecer amenazante. Pero cuando me pidieron acreditacion...
- No tengo. - entonces me pidieron que me identificase con mi numero de ciudadano y nombre. - Tampoco puedo hacer eso, amigo... - momento en el cual me apuntaron y me apresuré a poner mis manos en alto. - Soy un informador anónimo, vengo a vender una exclusiva a los medios de comunicacion. Hay que respetar la identidad del reportero anonimo... solo me identificare con vuestro jefe. Tengo informacion concerniente a la desaparicion de James Stwardson.
Levanté una ceja rapido y me di infulas de grandeza al no obtener respuesta rapida, hablandoles como si fuesen un poco ingenuos porque no les sonase la bombilla rapidamente
- Por favor, no lo conoceis? Si fue uno de los mejores soldados de toda la Alianza humana...! por no decir un gran piloto. El sobrino de Raymond Stwardson, anterior capitan del ejercito....? el unico que valia un poco la pena antes de que llegaran todos estos...en fin... mejor me ahorro mi opinion. Avisad a vuestro jefe por favor, decidle que vengo a venderle informacion muy jugosa, pero que por seguridad no he concertado cita telefonica antes ni puedo daros mi nombre. Y dejadnos pasar a mi socio y a mi, que nos estamos empapando, por dios.
Obviamente los nombres de ambos juntos les hicieron caer en algo, porque se empezaron a comunicar por sus dispositivos, intercambiando varias frases que no llegué a oir y lanzandonos miradas de soslayo constantes. Al menos, en cierto momento, dejaron de apuntarnos. Sonreí de lado. Que supiese bastante de Jimmy y de lo que hablaba me habia dado un plus de credibilidad, supuse. Vi que asentian y nos dejaron acercarnos para resguardarnos bajo la lluvia, aunque nos dijeron que tendriamos que esperar un rato hasta que pudieran atendernos, y que nos llevarian al hall para ello.
Lo cierto era que estaba un poco arisco de más desde lo ocurrido en el parque y que....odiaba trabajar en equipo. Es decir, o conocia muy bien a mi equipo, o preferia hacerlo solo. Y de los presentes, solo conocia muy bien a Johan....
- Voy de humano. No voy disfrazado. - le espeté a Victorya de modo muy seco, por su comentario sobre la ropa que llevaba. Ultimamente me llegaba la sensacion de que a la gente se le habia olvidado lo que era vivir en el mundo no magico.... y no me gustaba aquella sensacion. Aunque conociendome, igual me estaba comiendo la cabeza de más. Igual eran mis paranoias y me lo estaba imaginando.
"Discurso? Yo? Amenazador?"
Resoplé. Eso sería complicado. Tome el numero de telefono que la morena me dio y lo apunté. Mentalmente anoté los tiempos tambien para cada tarea y asenti con la cabeza, pues estaba de acuerdo.
- En menos si traen Centinelas. Estamos a las afueras... no les importará usarlos.
La sonrisita de Laila como toda respuesta a mi directa pregunta me tocó las narices. De mal humor, yo? Náh. Levanté mi ceja y lo dejé correr. Pasaba de jugar a las adivinanzas esta noche.... Me vengué mirándole el culo cuando metio medio cuerpo adentro del coche para sacar sus cosas, aunque se tapó rapido. Agarré el abrigo peludo ese que me dio (off rol: foto del abrigo pls que quiero reirme xD) solo porque las autoridades estaban advertidas, probablemente, de mi aspecto previo.
- Verde o azul. Lo echaré a suertes si no estás segura.
Mostró que tendría deferencias para con el soldado, lo cual me parecio bien. Asi que en principio habia que ir a los sotanos sin liarla ante las camaras en pocos minutos y cortar un cable de algun color para inutilizar un rato los sensores antimagia....bien.
Nos despedimos de ellas y echamos a andar hacia la puerta principal (?) o lo otro que ha dicho Johan....que seguro hay menos gente..... Resulta que el abrigo me viene genial para ocultar mejor mis armas
- Ya me lo he puesto. Estoy fabuloso, verdad? Primera opcion. - en mi voz se notaba cierta mala folla contenida. Seguir la primera opcion iba a ser dificil pero era lo mas sensato por ahora. - Yo les distraigo. Igual hasta consigo que nos dejen entrar....
Habian alli dos guardias con sus correspondientes armas, muy bien a la vista. Se puso a llover justo en ese momento.... aunque era una llovizna muy debil. Pensaba la mejor manera de distraer a los guardias esos, de a ver por qué dos tios iban juntos a la torre de telecomunicaciones pasado el toque de queda....en las afueras de londres...y uno ataviado con un abrigo de pieles.... nos iban a pedir las identificaciones seguro.
Pensaba, e intantaba pensar rapido. Hacerse la victima desfallecida no iba a colar con mi estatura, mis hombros y con un tio como Johan al lado. Sin embargo saqué mis rayban (robadas) en medio de aquella noche y me las puse. Quizá si pudiesemos picar su curiosidad lo suficiente.... nos dejarian al menos entrar.
-Se me ha ocurrido algo. Prepárate por si todo sale muy jodidamente mal.
Me adelanté un poco a Johan y me acerqué hasta los guardias de seguridad, que me dieron el alto rapido, aunque no llegaron a apuntarme.... solo a pedirme la acreditacion para entrar.
"al menos estan mas confiados con eso de que no hayan saltado las alarmas antimagia"
Me detuve en cuanto me dieron el alto, no quise parecer amenazante. Pero cuando me pidieron acreditacion...
- No tengo. - entonces me pidieron que me identificase con mi numero de ciudadano y nombre. - Tampoco puedo hacer eso, amigo... - momento en el cual me apuntaron y me apresuré a poner mis manos en alto. - Soy un informador anónimo, vengo a vender una exclusiva a los medios de comunicacion. Hay que respetar la identidad del reportero anonimo... solo me identificare con vuestro jefe. Tengo informacion concerniente a la desaparicion de James Stwardson.
Levanté una ceja rapido y me di infulas de grandeza al no obtener respuesta rapida, hablandoles como si fuesen un poco ingenuos porque no les sonase la bombilla rapidamente
- Por favor, no lo conoceis? Si fue uno de los mejores soldados de toda la Alianza humana...! por no decir un gran piloto. El sobrino de Raymond Stwardson, anterior capitan del ejercito....? el unico que valia un poco la pena antes de que llegaran todos estos...en fin... mejor me ahorro mi opinion. Avisad a vuestro jefe por favor, decidle que vengo a venderle informacion muy jugosa, pero que por seguridad no he concertado cita telefonica antes ni puedo daros mi nombre. Y dejadnos pasar a mi socio y a mi, que nos estamos empapando, por dios.
Obviamente los nombres de ambos juntos les hicieron caer en algo, porque se empezaron a comunicar por sus dispositivos, intercambiando varias frases que no llegué a oir y lanzandonos miradas de soslayo constantes. Al menos, en cierto momento, dejaron de apuntarnos. Sonreí de lado. Que supiese bastante de Jimmy y de lo que hablaba me habia dado un plus de credibilidad, supuse. Vi que asentian y nos dejaron acercarnos para resguardarnos bajo la lluvia, aunque nos dijeron que tendriamos que esperar un rato hasta que pudieran atendernos, y que nos llevarian al hall para ello.
Bufé de manera disimulada y me reí por lo bajo con Thalos en modo gruñón a cada cosa que le decían las chicas antes de separarnos. Al final, de un modo u otro, Thalos acepta ponerse el abrigo aunque sea quejándose. Está bastante ridículo, y no voy a perder la ocasión de decírselo. - Pareces una señora pija...seguro que hasta tu hijo se reiría al verte.- aunque tampoco es muy difícil hacer reír a un niño pequeño. Asiento a lo que dice de la primera opción, distraerlos mientras se hace algo para tapar las cámaras. - Tengo un mal presentimiento con esto.- respondo a eso de que me prepare por si todo sale mal, frunciendo el ceño mientras lo dejo marchar a hacer su parte del plan. Me mantengo un tanto alejado mientras él se acerca, pero permaneciendo atento en todo momento al desarrollo de la jugada. Enseguida veo que alza las manos cuando le apuntan, aunque parece que se ponen a hablar de algo. No pierdo más el tiempo y me dedico a localizar las cámaras de seguridad que hay que inutilizar.
Al parecer Victorya nos ha echado una mano con eso de tapar las cámaras tal y como comentamos, utilizando las sombras. Así no podrán identificarnos los de la sala de control, al menos por ahora. Me acerco a Thalos en cuanto comprendo que ha colado lo que quiera que les haya contado, llegando hasta donde están mientras intento poner la cara de 'no soy sospechoso' más creíble que tengo. Evito también mirar hacia las cámaras de seguridad, para que los guardias no se fijen en que están tapadas. No sé qué mierdas les ha contado Thalos, pero tampoco parecen convencidos al 100%. Me sacudo un poco el agua de lluvia de la ropa, haciendo un comentario random sobre el tiempo, eso que empieza una gran cantidad de conversaciones entre los ingleses. - Buff...menuda noche para trabajar, ¿eh? el tiempo está como loco - sonrío para intentar aliviar la tensión del momento mientras que los tipos esos terminan de usar los comunicadores. Finalmente deciden dejarnos pasar, aunque parece ser que tienen órdenes de escoltarnos todo el rato. Así no se puede hacer nada, nos vigilarán constantemente. Por el momento aceptamos que nos escolten al interior del edificio porque no nos queda otra, pero de camino a los ascensores le lanzo una mirada de reojo a Thalos como queriendo decirle que tenemos que hacer algo para librarnos de ellos cuanto antes. Él sabrá lo que quiero decirle.
Entramos los cuatro en el ascensor, los guardias sin quitarnos el ojo de encima y vigilando cada movimiento. Pulsan uno de los botones de los pisos más elevados, aunque nosotros queremos ir al sótano para poder desconectar lo relacionado con los sensores de seres mágicos. Uno de los guardias le da un críptico codazo al otro, señalándonos a ambos con la cabeza. El otro asiento, explicando lo que va a hacer a continuación. Según él tienen que cachearnos antes de que lleguemos al piso en el que nos reuniremos con un responsable de comunicación de la torre. El momento de hacer algo es ahora o nunca, así que dejo que se acerque a mí lo suficiente como para poder cachearme, alzando las manos un momento como si tuviese la intención de dejar que busquen si llevo armas. No llega a hacerlo. Bajo una de las manos rápidamente para coger al guardia por el cuello, empujándole contra la otra pared del ascensor para estamparle a la par que le pego un puñetazo en la mandíbula y otro seguido en la nariz. Tampoco le dejo tiempo de reacción para que use el comunicador, dejándole inconsciente al golpear su cabeza fuertemente con la culata de mi pistola. Dejo que Thalos se encargue del suyo, dándole mientras tanto al botón de detener el ascensor. Me agacho junto al soldado que he noqueado para coger su comunicador, que me hará falta por si acaso vuelven a establecer comunicación con ellos.
Al parecer Victorya nos ha echado una mano con eso de tapar las cámaras tal y como comentamos, utilizando las sombras. Así no podrán identificarnos los de la sala de control, al menos por ahora. Me acerco a Thalos en cuanto comprendo que ha colado lo que quiera que les haya contado, llegando hasta donde están mientras intento poner la cara de 'no soy sospechoso' más creíble que tengo. Evito también mirar hacia las cámaras de seguridad, para que los guardias no se fijen en que están tapadas. No sé qué mierdas les ha contado Thalos, pero tampoco parecen convencidos al 100%. Me sacudo un poco el agua de lluvia de la ropa, haciendo un comentario random sobre el tiempo, eso que empieza una gran cantidad de conversaciones entre los ingleses. - Buff...menuda noche para trabajar, ¿eh? el tiempo está como loco - sonrío para intentar aliviar la tensión del momento mientras que los tipos esos terminan de usar los comunicadores. Finalmente deciden dejarnos pasar, aunque parece ser que tienen órdenes de escoltarnos todo el rato. Así no se puede hacer nada, nos vigilarán constantemente. Por el momento aceptamos que nos escolten al interior del edificio porque no nos queda otra, pero de camino a los ascensores le lanzo una mirada de reojo a Thalos como queriendo decirle que tenemos que hacer algo para librarnos de ellos cuanto antes. Él sabrá lo que quiero decirle.
Entramos los cuatro en el ascensor, los guardias sin quitarnos el ojo de encima y vigilando cada movimiento. Pulsan uno de los botones de los pisos más elevados, aunque nosotros queremos ir al sótano para poder desconectar lo relacionado con los sensores de seres mágicos. Uno de los guardias le da un críptico codazo al otro, señalándonos a ambos con la cabeza. El otro asiento, explicando lo que va a hacer a continuación. Según él tienen que cachearnos antes de que lleguemos al piso en el que nos reuniremos con un responsable de comunicación de la torre. El momento de hacer algo es ahora o nunca, así que dejo que se acerque a mí lo suficiente como para poder cachearme, alzando las manos un momento como si tuviese la intención de dejar que busquen si llevo armas. No llega a hacerlo. Bajo una de las manos rápidamente para coger al guardia por el cuello, empujándole contra la otra pared del ascensor para estamparle a la par que le pego un puñetazo en la mandíbula y otro seguido en la nariz. Tampoco le dejo tiempo de reacción para que use el comunicador, dejándole inconsciente al golpear su cabeza fuertemente con la culata de mi pistola. Dejo que Thalos se encargue del suyo, dándole mientras tanto al botón de detener el ascensor. Me agacho junto al soldado que he noqueado para coger su comunicador, que me hará falta por si acaso vuelven a establecer comunicación con ellos.
La escueta respuesta y la sonrisa de lado me dejaron sumamente insatisfecha, quizás no había nada entre ellos... o lo estaban dejando para otro momento. De todas formas, los mantendría vigilados, pero por el momento me quedé con mi expresión de frustración oculta por el casco, la cual aumentó al escuchar el susurro de la bruja.
El “Ya veremos” hizo que la vena de mi frente comenzara a palpitar y que agarrara con furia el rifle “La brujita se está ganando una bala con su nombre” -¿Sabes? Hubiera sido útil que me dijeras que tenías un bolso sin fondo cuando noquee al soldado, así no debería haberlo traído en el baúl del coche, o mejor; podría haber traído más uniformes.- Dije a través del casco, lo que hacía que mi voz sonara más metálica, mientras veía cómo la chica se ponía otro extravagante abrigo sacado de su bolso mágico al tiempo que yo ponía todos los seguros a la armadura que llevaba puesta, se sentía raro volver a ponerse el uniforme.
Cuando oí la recomendación de no exponernos aún, de esperar, me paré en seco; sentía la vena de mi frente palpitar con furia y mi parpado temblar pero tomé una respiración profunda y volví sobre mis pasos pasando al lado de la chica viendo que sacaba un cigarrillo y lo encendía. Caminé hasta llegar al auto, saqué al soldado del baúl, lo puse debajo del camión aparcado que nos cubría de las cámaras, esperaba que nadie moviera el camión, luego saqué del bolsillo que tenía el cinturón una cápsula y la arrojé en dirección al auto para que quedara guardado, en ese momento escuché la pregunta que la brujita me hizo, hubo un momento de silencio mientras avanzaba para agarrar la cápsula que ahora contenía el coche y guardarla en el cinturón.
-¿Quién soy?- Dije rompiendo el silencio de la noche mientras me volteaba para mirarla y cruzaba los brazos. -Si yo te hiciera esa misma pregunta ¿tu la responderías?... No. Te recomiendo no hacer preguntas que no piensas responder.- Su interlocutora no podía verlo, pero debajo del casco estaba sonriendo. -Tampoco creo que de verdad te interese, creo que lo preguntas por educación, curiosidad o para llenar el silencio. Ahora, dime... Eres de las pasivas agresivas ¿Verdad?- En ese momento ví cómo, gotas de lluvia, llenaban el visor de mi casco y automáticamente aparecía una especie de mini limpiaparabrisas por fuera del casco, por lo que supuse que Victorya podría verlo.
-¡Vaya! Esta gente piensa en todo- Dije para amenizar el ambiente.
El “Ya veremos” hizo que la vena de mi frente comenzara a palpitar y que agarrara con furia el rifle “La brujita se está ganando una bala con su nombre” -¿Sabes? Hubiera sido útil que me dijeras que tenías un bolso sin fondo cuando noquee al soldado, así no debería haberlo traído en el baúl del coche, o mejor; podría haber traído más uniformes.- Dije a través del casco, lo que hacía que mi voz sonara más metálica, mientras veía cómo la chica se ponía otro extravagante abrigo sacado de su bolso mágico al tiempo que yo ponía todos los seguros a la armadura que llevaba puesta, se sentía raro volver a ponerse el uniforme.
Cuando oí la recomendación de no exponernos aún, de esperar, me paré en seco; sentía la vena de mi frente palpitar con furia y mi parpado temblar pero tomé una respiración profunda y volví sobre mis pasos pasando al lado de la chica viendo que sacaba un cigarrillo y lo encendía. Caminé hasta llegar al auto, saqué al soldado del baúl, lo puse debajo del camión aparcado que nos cubría de las cámaras, esperaba que nadie moviera el camión, luego saqué del bolsillo que tenía el cinturón una cápsula y la arrojé en dirección al auto para que quedara guardado, en ese momento escuché la pregunta que la brujita me hizo, hubo un momento de silencio mientras avanzaba para agarrar la cápsula que ahora contenía el coche y guardarla en el cinturón.
-¿Quién soy?- Dije rompiendo el silencio de la noche mientras me volteaba para mirarla y cruzaba los brazos. -Si yo te hiciera esa misma pregunta ¿tu la responderías?... No. Te recomiendo no hacer preguntas que no piensas responder.- Su interlocutora no podía verlo, pero debajo del casco estaba sonriendo. -Tampoco creo que de verdad te interese, creo que lo preguntas por educación, curiosidad o para llenar el silencio. Ahora, dime... Eres de las pasivas agresivas ¿Verdad?- En ese momento ví cómo, gotas de lluvia, llenaban el visor de mi casco y automáticamente aparecía una especie de mini limpiaparabrisas por fuera del casco, por lo que supuse que Victorya podría verlo.
-¡Vaya! Esta gente piensa en todo- Dije para amenizar el ambiente.
Johan y yo seguimos a aquellos guardias. El momento ascensor y sus intenciones de chequearnos fue el momento clave. Crucé miradas con johan, capté su mensaje y asentí. Como si nos hubiéramos puesto de acuerdo verbalmente, el fue a por uno y yo a por otro.
Agarré al segundo por el cuello haciendo una llave que lo dejo de espaldas contra mi, haciéndole la llave mata león para dejarlo sin aire poco a poco y que se quedase inconsciente. Además no pudo avisar a nadie. Fue todo rápido y en seguida estaban tirados en el suelo.
-esto para nosotros
Me quité el abrigo aquel e hice el cambio rápido. Robe sus armas, tarjeta de identificación, tarjetas de acceso a puertas, comunicador....y como me gustó su chaqueta de guardia de seguridad se la robe también e hice que johan hiciera lo mismo. Asi daríamos menos el cante..
-lo bueno es que aquí no hay cámaras
De hecho, use la tarjeta del guardia para volver a poner en marcha el ascensor y que nos guiase a la planta más baja. Pulse el botón y comenzamos a bajar de nuevo.
- me pregunto si el ascensor llegará al sótano o nos tocará usar las escaleras... Como vamos de tiempo?
Agarré al segundo por el cuello haciendo una llave que lo dejo de espaldas contra mi, haciéndole la llave mata león para dejarlo sin aire poco a poco y que se quedase inconsciente. Además no pudo avisar a nadie. Fue todo rápido y en seguida estaban tirados en el suelo.
-esto para nosotros
Me quité el abrigo aquel e hice el cambio rápido. Robe sus armas, tarjeta de identificación, tarjetas de acceso a puertas, comunicador....y como me gustó su chaqueta de guardia de seguridad se la robe también e hice que johan hiciera lo mismo. Asi daríamos menos el cante..
-lo bueno es que aquí no hay cámaras
De hecho, use la tarjeta del guardia para volver a poner en marcha el ascensor y que nos guiase a la planta más baja. Pulse el botón y comenzamos a bajar de nuevo.
- me pregunto si el ascensor llegará al sótano o nos tocará usar las escaleras... Como vamos de tiempo?
Termino de requisarle armas y demás útiles al tipo que acabo de noquear, a la par que Thalos hace lo suyo tras haberse lucido con una de sus llaves de profesional. Mi golpe ha sido más básico, más instintivo y sucio. - ¿De tus tiempos al servicio de Stwardson? - inquiero alzando levemente una ceja mientras me visto también de guardia de seguridad, tomando sus cosas como mías. Evidentemente he visto a Thalos pelear muchas veces, pero ahora con esto de suplantar identidades en el ascensor se me ha venido a la cabeza la vez que lo suplanté yo a él. - Y pensar que un día fui yo el que me hice pasar por ti...- aún podría hacerlo, si es que terminan de regresarme los malditos poderes algún día. Alzo la mirada hacia el techo del ascensor cuando dice lo de las cámaras, me entra la paranoia con eso de que puede que alguien nos esté viendo.
- No hay nada, a simple vista al menos. El ascensor ya casi está en el sótano, por ahora llevamos unos seis minutos en total. La conversación de la puerta nos hizo perder tiempo. ¿Cuánto dijo Victorya?- ella había establecido el número de minutos a emplear, aunque ahora mismo no tengo claro los que eran. - Espero que ella y la chica de la Brigada no tengan problemas para entrar cuando desactivemos los sensores. Tienen actitud, son bastante reclutables las dos. - El ascensor se detiene por fin en el sótano, un lugar húmedo y un tanto oscuro, escasamente iluminado por unos cuantos tubos fluorescentes que parpadean como si se fuesen a apagar de un momento a otro. El ambiente es el propio de una peli de zombies, verdoso y desagradable. Nos adentramos un poco más, dejando atrás la zona del ascensor para recorrer un pasillo no muy ancho con varias puertas metálicas a los lados. En la mayoría de ellas se escuchan ruidos propios de maquinaria, aunque perdemos unos preciados minutos más en encontrar la adecuada. La sala de generadores es más grande de lo que pensábamos, y se encuentra dividida en secciones para las diferentes funciones de la torre, como la fuente de electricidad de iluminación de todo el edificio, la de emergencia, la de los sistemas de seguridad...
Esa última es la que atrae nuestra atención, porque en teoría debe influir en los escáneres de magia y otras cosas, como alarmas o cámaras de seguridad. Dejo que sea Thalos el que se encargue de cortar los cables que mencionó Leila, pues a él se le dan mejor este tipo de cosas. - Esto es cosa del de las bombas. Apaga ese y también el de emergencia, que no se ponga en funcionamiento cuando caiga el otro. Después de eso nos largamos hacia arriba cuanto antes. Vete pensando tu parte en el mensaje, creo que todos tenemos algo importante que decir en todo esto. - espero a que su misión esté hecha, observando con impaciencia y tensión el momento de desactivar el chisme, deseando que no se ponga a pitar nada ni salte ninguna alarma. Por suerte no es así, al menos por ahora va todo bien, lo que no quiere decir que no se tuerza al final...
- Listo, ya pueden entrar. Nos vamos. - saco la moneda comunicadora para enviar un mensaje a Victorya, comunicándole que hemos desactivado la fuente de alimentación de los sistemas de seguridad.
- No hay nada, a simple vista al menos. El ascensor ya casi está en el sótano, por ahora llevamos unos seis minutos en total. La conversación de la puerta nos hizo perder tiempo. ¿Cuánto dijo Victorya?- ella había establecido el número de minutos a emplear, aunque ahora mismo no tengo claro los que eran. - Espero que ella y la chica de la Brigada no tengan problemas para entrar cuando desactivemos los sensores. Tienen actitud, son bastante reclutables las dos. - El ascensor se detiene por fin en el sótano, un lugar húmedo y un tanto oscuro, escasamente iluminado por unos cuantos tubos fluorescentes que parpadean como si se fuesen a apagar de un momento a otro. El ambiente es el propio de una peli de zombies, verdoso y desagradable. Nos adentramos un poco más, dejando atrás la zona del ascensor para recorrer un pasillo no muy ancho con varias puertas metálicas a los lados. En la mayoría de ellas se escuchan ruidos propios de maquinaria, aunque perdemos unos preciados minutos más en encontrar la adecuada. La sala de generadores es más grande de lo que pensábamos, y se encuentra dividida en secciones para las diferentes funciones de la torre, como la fuente de electricidad de iluminación de todo el edificio, la de emergencia, la de los sistemas de seguridad...
Esa última es la que atrae nuestra atención, porque en teoría debe influir en los escáneres de magia y otras cosas, como alarmas o cámaras de seguridad. Dejo que sea Thalos el que se encargue de cortar los cables que mencionó Leila, pues a él se le dan mejor este tipo de cosas. - Esto es cosa del de las bombas. Apaga ese y también el de emergencia, que no se ponga en funcionamiento cuando caiga el otro. Después de eso nos largamos hacia arriba cuanto antes. Vete pensando tu parte en el mensaje, creo que todos tenemos algo importante que decir en todo esto. - espero a que su misión esté hecha, observando con impaciencia y tensión el momento de desactivar el chisme, deseando que no se ponga a pitar nada ni salte ninguna alarma. Por suerte no es así, al menos por ahora va todo bien, lo que no quiere decir que no se tuerza al final...
- Listo, ya pueden entrar. Nos vamos. - saco la moneda comunicadora para enviar un mensaje a Victorya, comunicándole que hemos desactivado la fuente de alimentación de los sistemas de seguridad.
Era difícil mantenerse en el momento presente y a la vez obligar a sus sombras a seguir al par que se había adelantado a tanta distancia. Hubo un punto en el que sintió que los habían perdido en el sótano, pero la cosa era que ya estaba oscuro y se fundían con más facilidad, tanta que su presencia estaba más difuminada entre todas las sombras de las que disponía.
El silencio le mostró con claridad que la chica no había quedado agusto con la respuesta que le proporcionó sobre lo que había o no entre Johan y ella. Estuvo a punto de sonreir por la satisfacción, pero su rostro se mantuvo sereno, tranquilo, como siempre...
Una vez con los lentes puestos y todo en orden, solo esperando la confirmación de que podían entrar, el reclamo de la chica le hizo levantar una ceja.- No preguntaste si teníamos manera. Solo decidiste conducir.- Dijo sencillamente, acercándose un par de pasos a ella. Quizás eran sus actitudes, la rectitud de su espalda, lo quieta que estaba o el casco que le impedía leer su rostro, pero algo estaba haciéndole tener un ligero y repentino interés en ella. Observó sus movimientos; sobre todo el tejemaneje que hizo con el soldado, el camión y el auto. Tenía en aquella cápsula la misma habilidad que ella en la bolsa, así que le resultaba curioso que le reclamara.
Su negativa a responderle solo emocionó un poco más el juego que había iniciado con ella.- Tienes el derecho de preguntar. La que decide si responde o no, soy yo. No puedes saber si la respondería. Aunque... estoy muy segura de que nadie dijo mi nombre en el parque. Y sin embargo, lo sabes.- Susurró lo último, curiosa de sus maneras, aún cuando sabía que no diría nada sobre sus fuentes. Tristemente, su habilidad deductiva no era lo que esperaba, pues no era ninguna de las tres opciones.- Soy lo que soy, ni más ni menos.- Sintió la lluvia caer justo antes de recibir el mensaje de la moneda y ver lo que la chica señalaba. Le pareció innecesario, pero igual no era ella a quien debía funcionarle el traje. Se puso en marcha y le hizo un gesto en el rostro a Leila para que la siguiera. Tiró el cigarrillo y giró la esquina, solo para ver agradecida que no había guardias en la entrada principal. Envió a sus sombras a cubrir las cámaras, aunque estar en dos espacios a la vez lo hacía todo más complicado y le era más difícil pensar. Solo esperaba que todo pasara rápido.
Una vez cerca de la puerta, la abrió y se mantuvo alerta, comenzando a parlotear por el celular con el más puro tono de una adinerada de los suburbios.- Te lo dije, es horrible. Esto es más difícil cada día, es taaaaaan difícil obtener una buena noticia donde no estén a punto de matarme y mi cabello salga bien... ¡Lo sé, eso le dije! - Había un par de guardias en la entrada tras el mostrador. La cosa no iba acorde a lo planeado, pues Thalos había quedado muy formalmente de 'eliminarlos' de una bonita manera. Se mordió un poco la lengua, pensando en que si las alarmas no habían sonado y ya se había metido a la boca del lobo con un guardia ficticio bien podía colar lo de que ella era reportera.- Espera, tengo que sacar mi identificación...- Le dijo a su ficticia amiga en el teléfono, comenzando a buscar entre su bolsa infinita una identificación que jamás encontraría. Aprovechó la distracción para que su poder de Atracción comenzara a hacer efecto en los presentes.
- Chicoooooooos...- Hizo un puchero largo mientras parecía exasperada por no encontrar lo que buscaba.- ¡Roberto, no traigo la identificación! - Dijo a su supuesto guardia, solo para posar luego su mirada ingenua y tímida en el guardia que le pedía la tarjeta. Tocó con la punta de los dedos el brazo del más cercano, viendo claramente el momento en que la actitud cambió hacia ella. Lastimosamente, el otro guardia no se veía tan convencido como el primero de dejarles pasar sin ningún tipo de identificación.- ¡Anden! Él me cuidará bien. Prometo tener mi mejor comportamiento.- Ladeó la cabeza hacia Leila para que vieran que se trataba claramente de uno de los suyos. Ahora solo faltaba convencer a un guardia y estarían a un paso del elevador.
El silencio le mostró con claridad que la chica no había quedado agusto con la respuesta que le proporcionó sobre lo que había o no entre Johan y ella. Estuvo a punto de sonreir por la satisfacción, pero su rostro se mantuvo sereno, tranquilo, como siempre...
Una vez con los lentes puestos y todo en orden, solo esperando la confirmación de que podían entrar, el reclamo de la chica le hizo levantar una ceja.- No preguntaste si teníamos manera. Solo decidiste conducir.- Dijo sencillamente, acercándose un par de pasos a ella. Quizás eran sus actitudes, la rectitud de su espalda, lo quieta que estaba o el casco que le impedía leer su rostro, pero algo estaba haciéndole tener un ligero y repentino interés en ella. Observó sus movimientos; sobre todo el tejemaneje que hizo con el soldado, el camión y el auto. Tenía en aquella cápsula la misma habilidad que ella en la bolsa, así que le resultaba curioso que le reclamara.
Su negativa a responderle solo emocionó un poco más el juego que había iniciado con ella.- Tienes el derecho de preguntar. La que decide si responde o no, soy yo. No puedes saber si la respondería. Aunque... estoy muy segura de que nadie dijo mi nombre en el parque. Y sin embargo, lo sabes.- Susurró lo último, curiosa de sus maneras, aún cuando sabía que no diría nada sobre sus fuentes. Tristemente, su habilidad deductiva no era lo que esperaba, pues no era ninguna de las tres opciones.- Soy lo que soy, ni más ni menos.- Sintió la lluvia caer justo antes de recibir el mensaje de la moneda y ver lo que la chica señalaba. Le pareció innecesario, pero igual no era ella a quien debía funcionarle el traje. Se puso en marcha y le hizo un gesto en el rostro a Leila para que la siguiera. Tiró el cigarrillo y giró la esquina, solo para ver agradecida que no había guardias en la entrada principal. Envió a sus sombras a cubrir las cámaras, aunque estar en dos espacios a la vez lo hacía todo más complicado y le era más difícil pensar. Solo esperaba que todo pasara rápido.
Una vez cerca de la puerta, la abrió y se mantuvo alerta, comenzando a parlotear por el celular con el más puro tono de una adinerada de los suburbios.- Te lo dije, es horrible. Esto es más difícil cada día, es taaaaaan difícil obtener una buena noticia donde no estén a punto de matarme y mi cabello salga bien... ¡Lo sé, eso le dije! - Había un par de guardias en la entrada tras el mostrador. La cosa no iba acorde a lo planeado, pues Thalos había quedado muy formalmente de 'eliminarlos' de una bonita manera. Se mordió un poco la lengua, pensando en que si las alarmas no habían sonado y ya se había metido a la boca del lobo con un guardia ficticio bien podía colar lo de que ella era reportera.- Espera, tengo que sacar mi identificación...- Le dijo a su ficticia amiga en el teléfono, comenzando a buscar entre su bolsa infinita una identificación que jamás encontraría. Aprovechó la distracción para que su poder de Atracción comenzara a hacer efecto en los presentes.
- Chicoooooooos...- Hizo un puchero largo mientras parecía exasperada por no encontrar lo que buscaba.- ¡Roberto, no traigo la identificación! - Dijo a su supuesto guardia, solo para posar luego su mirada ingenua y tímida en el guardia que le pedía la tarjeta. Tocó con la punta de los dedos el brazo del más cercano, viendo claramente el momento en que la actitud cambió hacia ella. Lastimosamente, el otro guardia no se veía tan convencido como el primero de dejarles pasar sin ningún tipo de identificación.- ¡Anden! Él me cuidará bien. Prometo tener mi mejor comportamiento.- Ladeó la cabeza hacia Leila para que vieran que se trataba claramente de uno de los suyos. Ahora solo faltaba convencer a un guardia y estarían a un paso del elevador.
- Para Thalos:
-No estés tan segura; recuerdo bien que cuando Johan se presentó ante Thalos frente al estanque en Hyde Park mencionó tu nombre y el de Justin, su ahijado.- Dije haciendo memoria, manteniendo cruzados los brazos y disfrutando de la pequeña victoria con i, dudo mucho que alguna vez, disfrute algo de la Victorya con y. Revolee los ojos ante la amplia respuesta de la bruja acerca de qué es lo que era.
El gesto de Victorya en mi rostro me sacó del hipnótico movimiento del mini limpiaparabrisas, descruzé los brazos y la seguí pisándole los talones. Cuando noté un extraño movimiento de sombras me detuve y apunté el rifle a donde creía que se encontraba la fuente de esa amorfa silueta pero allí no había nada, luego caí en la cuenta que era la bruja la que controlaba aquellas tinieblas, eso me dio algo de chucho. En el momento que volví a ponerme en marcha para escoltar a la supuesta periodista ví que esta ya se encontraba abriendo la puerta principal, recordaba que los guardias permanecían detras del mostrador, así que apreté el paso para alcanzarla cuando comenzó a hablarle al celular a cerca de noticias y pelos. Ví a los guardias levantar la mirada extrañados, normal; casos particulares eran los que entraban a trabajar en mitad de la noche, la buena noticia era que las alarmas no habían sonado, pero algo cambió en el ambiente cuando la bruja comenzó a buscar en su bolsa, una sensación como si dejara de querer meterle una bala entre ceja y ceja, como si quisiera que me prestara más atención. Sin embargo aquella emoción se esfumó rapidamente cuando me llamó “Roberto” y la reemplazó el palpitar de la vena de mi frente. Hice un esfuerzo en recordar el nombre que decía en la tarjeta de identificación para no mirarla cuando la saqué para mostrarsela al guardia que no se veía tan convencido por el hechizo de la bruja.
-Mi nombre es Oliver...- dije por lo bajo con la voz más varonil que me salió, como para que solo ese guardia me escuchara, para luego decir más alto: -Traigo a la conductora que cubrirá el evento de Reyes Magos.- Dije con un fingido dejo de aburrimiento -De verdad necesito sacarmela de encima.- dije susurrandole al guardia que desconfiaba con algo de complicidad. -Durante todo el trayecto hasta aquí no dejó de sorberse los mocos, no lo sé con seguridad por el casco, pero creo que se hizo encima...- Y no me dejó decir nada más, simplemente hizo un gesto con la mano para que avancemos mientras me lanzaba la tarjeta de identificación y una tarjeta auxiliar de guardia manteniendo su distancia, a lo que le hice un gesto de agradecimiento con la cabeza mientras nos acercabamos al ascensor. Se vé que él había tenido una mala experiencia como escolta, quizás se sintió identificado. Esperé a que Victorya metiera su odioso trasero al elevador para insertar la tarjeta auxiliar de guardia y apretar el botón del piso de transmisión desde donde se emitían unos cuantos programas de televisión y de radio. Cuando las puertas se cerraron y el ascensor comenzó a moverse dejé el rifle en el suelo a un lado, lejos de la bruja, la empujé contra la pared y la retuve ahí con el antebrazo. Ya no me importaba si estaba ante la mismísima reina de las tinieblas, estaba encolerizada y había gastado todo mi autocontrol.
-Mira bruja, intenté entablar una conversación contigo, intente razonar contigo, pero eres imposible. Dime ¿qué parte de yo hablaré es la que no se entendió?-
El gesto de Victorya en mi rostro me sacó del hipnótico movimiento del mini limpiaparabrisas, descruzé los brazos y la seguí pisándole los talones. Cuando noté un extraño movimiento de sombras me detuve y apunté el rifle a donde creía que se encontraba la fuente de esa amorfa silueta pero allí no había nada, luego caí en la cuenta que era la bruja la que controlaba aquellas tinieblas, eso me dio algo de chucho. En el momento que volví a ponerme en marcha para escoltar a la supuesta periodista ví que esta ya se encontraba abriendo la puerta principal, recordaba que los guardias permanecían detras del mostrador, así que apreté el paso para alcanzarla cuando comenzó a hablarle al celular a cerca de noticias y pelos. Ví a los guardias levantar la mirada extrañados, normal; casos particulares eran los que entraban a trabajar en mitad de la noche, la buena noticia era que las alarmas no habían sonado, pero algo cambió en el ambiente cuando la bruja comenzó a buscar en su bolsa, una sensación como si dejara de querer meterle una bala entre ceja y ceja, como si quisiera que me prestara más atención. Sin embargo aquella emoción se esfumó rapidamente cuando me llamó “Roberto” y la reemplazó el palpitar de la vena de mi frente. Hice un esfuerzo en recordar el nombre que decía en la tarjeta de identificación para no mirarla cuando la saqué para mostrarsela al guardia que no se veía tan convencido por el hechizo de la bruja.
-Mi nombre es Oliver...- dije por lo bajo con la voz más varonil que me salió, como para que solo ese guardia me escuchara, para luego decir más alto: -Traigo a la conductora que cubrirá el evento de Reyes Magos.- Dije con un fingido dejo de aburrimiento -De verdad necesito sacarmela de encima.- dije susurrandole al guardia que desconfiaba con algo de complicidad. -Durante todo el trayecto hasta aquí no dejó de sorberse los mocos, no lo sé con seguridad por el casco, pero creo que se hizo encima...- Y no me dejó decir nada más, simplemente hizo un gesto con la mano para que avancemos mientras me lanzaba la tarjeta de identificación y una tarjeta auxiliar de guardia manteniendo su distancia, a lo que le hice un gesto de agradecimiento con la cabeza mientras nos acercabamos al ascensor. Se vé que él había tenido una mala experiencia como escolta, quizás se sintió identificado. Esperé a que Victorya metiera su odioso trasero al elevador para insertar la tarjeta auxiliar de guardia y apretar el botón del piso de transmisión desde donde se emitían unos cuantos programas de televisión y de radio. Cuando las puertas se cerraron y el ascensor comenzó a moverse dejé el rifle en el suelo a un lado, lejos de la bruja, la empujé contra la pared y la retuve ahí con el antebrazo. Ya no me importaba si estaba ante la mismísima reina de las tinieblas, estaba encolerizada y había gastado todo mi autocontrol.
-Mira bruja, intenté entablar una conversación contigo, intente razonar contigo, pero eres imposible. Dime ¿qué parte de yo hablaré es la que no se entendió?-
Dejó que la chica tuviera su pequeña victoria si quería considerarla como tal. Eso, por supuesto, no le hacía confiar más en ella. Y estaba segura de que el sentimiento era mutuo. Al menos pudo reírse un poco de ella al notar que se ponía alerta por el movimiento de sus sombras, claro que aquella felicidad no era notable en su rostro.
El pequeño sketch de la entrada le dejó dos cosas en claro: a) la chica había caído en Atracción. Lo sintió al instante en que la ira asesina se desvaneció por un segundo, justo antes de su desagradable e infantil intervención. Y b) definitivamente sus poderes funcionaban con chicas. Ellas eran un poco más perspicaces, así que esperaba el reclamo en cualquier segundo. Seguro que se ponía histérica. Sin embargo, era algo bastante notable que no había intentado con anterioridad. Fue este hallazgo lo que impidió que le tirara algún comentario mordaz...
Pudo volver tranquilamente a su postura normal una vez entraron al elevador, enviando un mensaje a Johan a la moneda para avisar que ya iban en camino arriba. Tenía la impresión de que ese par tardaría algo más de tiempo. El ataque de la chica llegó en un momento inconveniente, pero no por eso era inesperado. Tenía la sensación de que ella era un poco predecible, sobre todo con tanta ira acumulada. Curiosamente, no había dejado de usar su habilidad de atracción, y era el contacto físico lo que aumentaba la reacción exponencialmente. Se deshizo en humo blanco antes de que el profundo odio se convirtiera en un deseo enfermizo, pues si todo iba a como con los hombres, aquello podía salirse de control. Apareció justo detrás de ella.- Creo que nuestras conversaciones van en círculos.- Susurró detrás de su oído, viendo después que al menos ya iban unos cuantos pisos más cerca del objetivo.- Hay un dicho que dice que lo que más odias de los demás es lo que menos soportas de tí mismo... Tu nivel de confianza en mí es totalmente recíproco.- Dijo, volviendo a pararse recta con el rostro mirando tranquilamente la entrada del elevador. Eso de que ella era una persona imposible le parecía un tanto exagerado.- Ahora que entramos concentrémonos en enviar el mensaje y salir de aquí con vida... No creo que haya muchas personas en el piso al que vamos. Es media noche después de todo, todo está ya programado.- Dijo justo antes de que el elevador se detuviera en uno de los pisos superiores del edificio. Envió el piso a los chicos para que tuvieran una ubicación más certera de dónde estaban y dio un paso al frente, saliendo del elevador y observando alrededor un gigantesco piso lleno de sets de televisión, cámaras abandonadas y una que otra cabina cerrada, que parecía como para grabación de audio... Hasta donde alcanzaba a ver, no había personas alrededor, así que una interrupción de la señal sería muy notada. Al menos los guardias de abajo no tenían tele...
El pequeño sketch de la entrada le dejó dos cosas en claro: a) la chica había caído en Atracción. Lo sintió al instante en que la ira asesina se desvaneció por un segundo, justo antes de su desagradable e infantil intervención. Y b) definitivamente sus poderes funcionaban con chicas. Ellas eran un poco más perspicaces, así que esperaba el reclamo en cualquier segundo. Seguro que se ponía histérica. Sin embargo, era algo bastante notable que no había intentado con anterioridad. Fue este hallazgo lo que impidió que le tirara algún comentario mordaz...
Pudo volver tranquilamente a su postura normal una vez entraron al elevador, enviando un mensaje a Johan a la moneda para avisar que ya iban en camino arriba. Tenía la impresión de que ese par tardaría algo más de tiempo. El ataque de la chica llegó en un momento inconveniente, pero no por eso era inesperado. Tenía la sensación de que ella era un poco predecible, sobre todo con tanta ira acumulada. Curiosamente, no había dejado de usar su habilidad de atracción, y era el contacto físico lo que aumentaba la reacción exponencialmente. Se deshizo en humo blanco antes de que el profundo odio se convirtiera en un deseo enfermizo, pues si todo iba a como con los hombres, aquello podía salirse de control. Apareció justo detrás de ella.- Creo que nuestras conversaciones van en círculos.- Susurró detrás de su oído, viendo después que al menos ya iban unos cuantos pisos más cerca del objetivo.- Hay un dicho que dice que lo que más odias de los demás es lo que menos soportas de tí mismo... Tu nivel de confianza en mí es totalmente recíproco.- Dijo, volviendo a pararse recta con el rostro mirando tranquilamente la entrada del elevador. Eso de que ella era una persona imposible le parecía un tanto exagerado.- Ahora que entramos concentrémonos en enviar el mensaje y salir de aquí con vida... No creo que haya muchas personas en el piso al que vamos. Es media noche después de todo, todo está ya programado.- Dijo justo antes de que el elevador se detuviera en uno de los pisos superiores del edificio. Envió el piso a los chicos para que tuvieran una ubicación más certera de dónde estaban y dio un paso al frente, saliendo del elevador y observando alrededor un gigantesco piso lleno de sets de televisión, cámaras abandonadas y una que otra cabina cerrada, que parecía como para grabación de audio... Hasta donde alcanzaba a ver, no había personas alrededor, así que una interrupción de la señal sería muy notada. Al menos los guardias de abajo no tenían tele...
Shinobu Oshino
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
Corría velozmente entre las sombras, sabía dónde estaba el edificio pese no haber ido nunca y decidí ir saltando de edificio a edificio hasta llegar al lugar. Observé la entrada y vi a la mujer de pelo negro que estaba en el parque y a la gatita al lado disfrazada, fácilmente reconocible por sus latidos, más rápidos que los del resto. No me dió tiempo a bajar y a acompañarlas, cosa que agradecí dadas mis pocas artes de actriz.
Cogí impulso y salté hacia el lateral de la Torre, hacia donde había un conducto de ventilación y transformé la punta de mi katana en un destornillador, que utilicé para abrir dicho conducto y evitar hacer ruido. Volví a transformar mi katana en un arma y entre por el conducto, agradeciendo haber elegido mi cuerpo de niña para venir, y volví a cerrar sin tornillos el conducto.
Empecé a gatear sin esfuerzo, guiándome por la cercanía del corazón que tenía de referencia, el de Leila, tan fuerte y rápido que podría oírlo a varios kilómetros. Debía estar por la parte de arriba, por lo que aproveché la primera desviación hacia arriba de la torre para ir hacia ellas dando saltos en las paredes del conducto. Busqué la primera salida que había, tenía rejas y podía ver a través de ella, donde estaban las dos chicas. Metí mis pequeños dedos entre las rejas y empujándolas hacia los lados para crear una abertura por la que pasar, dado que había disminuido mi tamaño, no mi fuerza.
-Pss, soy la vampira de Hyde Park, aunque no lo diga mi aspecto- Dije mientras salía del conducto de ventilación y caía al suelo, sin hacer el más mínimo ruido. -Veo que por ahora vuestro plan marcha bien, sea el que sea. ¿Dónde están los otros?-
Empecé a observar la sala. Me encontrada un tanto perdida rodeada de tanta tecnología y no llegaba a entender qué hacían aquí si no era matar el máximo número de humanos posible.
Cogí impulso y salté hacia el lateral de la Torre, hacia donde había un conducto de ventilación y transformé la punta de mi katana en un destornillador, que utilicé para abrir dicho conducto y evitar hacer ruido. Volví a transformar mi katana en un arma y entre por el conducto, agradeciendo haber elegido mi cuerpo de niña para venir, y volví a cerrar sin tornillos el conducto.
Empecé a gatear sin esfuerzo, guiándome por la cercanía del corazón que tenía de referencia, el de Leila, tan fuerte y rápido que podría oírlo a varios kilómetros. Debía estar por la parte de arriba, por lo que aproveché la primera desviación hacia arriba de la torre para ir hacia ellas dando saltos en las paredes del conducto. Busqué la primera salida que había, tenía rejas y podía ver a través de ella, donde estaban las dos chicas. Metí mis pequeños dedos entre las rejas y empujándolas hacia los lados para crear una abertura por la que pasar, dado que había disminuido mi tamaño, no mi fuerza.
-Pss, soy la vampira de Hyde Park, aunque no lo diga mi aspecto- Dije mientras salía del conducto de ventilación y caía al suelo, sin hacer el más mínimo ruido. -Veo que por ahora vuestro plan marcha bien, sea el que sea. ¿Dónde están los otros?-
Empecé a observar la sala. Me encontrada un tanto perdida rodeada de tanta tecnología y no llegaba a entender qué hacían aquí si no era matar el máximo número de humanos posible.
- Seh, igual deberias aprender tu alguna, que no sabes cuanto te va a durar el gatillazo magico
respondi asi respecto a su primera pregunta y luego, a otra cosa mariposa. El ascensor iba bajando y johan, con razon , andaba preocupado por el tiempo.
-Vamos bien. - dije mirando el reloj. - Reclutables? Solo piensas en eso, eh?
Llegamos por fin al sotano, donde nos apeamos de aquel trasto, yo ya despojado de aquel hermoso abrigo de pieles (LOL) y ataviado como segurata. Fui con Johan al lugar donde estaban los generadores y me encargué de la parte tecnica de cortar cables. No resultó muy complicado, a decir verdad, pude identificarlos facilmente, no tenian ningun sistema de cableado o proteccion fuera de lo comun. Saqué mi cuchillo tactico y me centré en el de emergencia y sistemas de seguridad, cortando los cables necesarios.
-Ya está. Pero deprisa, no tardarán en darse cuenta de que algo va mal. A lo sumo unos minutos
"el tiempo para llegar a la sala"
- Te fias de mi? - yo delante de una camara. Menos mal que no era horario infanti. Intenté pensar. Eran tantas cosas y ninguna...que mi cerebro se sentia en stand by
Volvimos por donde habiamos venido, el ascensor seguia ahi con aquellos guardias inconscientes, a los que saqué y dejé maniatados en el sotano. Empezamos a subir, y me llegó al movil un mensaje indicando la planta en la cual se encontraban las chicas. El tiempo iba marcha atras....
- Han entrado, eso es que los sensores siguen desactivados. Pero queda poco tiempo. Habra que hacer barricadas en la sala de emision....
Un poco despues, llegamos a la planta indicada, la puerta se abrio y yo estaba con el arma en la mano, por el posible recibimiento...pero nada. Sali rapido con el arma bien dispuesta, mire a todos lados y vi un ascensor abierto a nuestro lado. Recorrí la planta con Johan hasta dar con las dos chicas...y...una...niña...rubia.... similar en cabellos a la vampira de Hyde Park.
- Que coño hace ella aqui? - fue lo primero que farfullé mirando a la supuesta niña, cuyo aspecto no me habia engañado. - No colaboramos con esta gente. Que mierda de mensaje damos entonces? Si lo que quieres es divertirte a nuestra costa, elige cualquier otro puto dia, cualquier otro puto momento, joder.
respondi asi respecto a su primera pregunta y luego, a otra cosa mariposa. El ascensor iba bajando y johan, con razon , andaba preocupado por el tiempo.
-Vamos bien. - dije mirando el reloj. - Reclutables? Solo piensas en eso, eh?
Llegamos por fin al sotano, donde nos apeamos de aquel trasto, yo ya despojado de aquel hermoso abrigo de pieles (LOL) y ataviado como segurata. Fui con Johan al lugar donde estaban los generadores y me encargué de la parte tecnica de cortar cables. No resultó muy complicado, a decir verdad, pude identificarlos facilmente, no tenian ningun sistema de cableado o proteccion fuera de lo comun. Saqué mi cuchillo tactico y me centré en el de emergencia y sistemas de seguridad, cortando los cables necesarios.
-Ya está. Pero deprisa, no tardarán en darse cuenta de que algo va mal. A lo sumo unos minutos
"el tiempo para llegar a la sala"
- Te fias de mi? - yo delante de una camara. Menos mal que no era horario infanti. Intenté pensar. Eran tantas cosas y ninguna...que mi cerebro se sentia en stand by
Volvimos por donde habiamos venido, el ascensor seguia ahi con aquellos guardias inconscientes, a los que saqué y dejé maniatados en el sotano. Empezamos a subir, y me llegó al movil un mensaje indicando la planta en la cual se encontraban las chicas. El tiempo iba marcha atras....
- Han entrado, eso es que los sensores siguen desactivados. Pero queda poco tiempo. Habra que hacer barricadas en la sala de emision....
Un poco despues, llegamos a la planta indicada, la puerta se abrio y yo estaba con el arma en la mano, por el posible recibimiento...pero nada. Sali rapido con el arma bien dispuesta, mire a todos lados y vi un ascensor abierto a nuestro lado. Recorrí la planta con Johan hasta dar con las dos chicas...y...una...niña...rubia.... similar en cabellos a la vampira de Hyde Park.
- Que coño hace ella aqui? - fue lo primero que farfullé mirando a la supuesta niña, cuyo aspecto no me habia engañado. - No colaboramos con esta gente. Que mierda de mensaje damos entonces? Si lo que quieres es divertirte a nuestra costa, elige cualquier otro puto dia, cualquier otro puto momento, joder.
Contenido patrocinado
Raza
mensajes
puntos
Alineamiento
Ocupación
Bando
Apodo
Edad
Nacionalidad
Página 1 de 4. • 1, 2, 3, 4
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.