Cementerio

"¿qué?"

Mi mente se bloqueó momentaneamente cuando vi que, aunque cumplió mi orden, la pistola no se disparó.... no me lo habia esperado. Entonces me apuntó y me disparó de nuevo de aquella manera, y volvio a ocurrir lo mismo. Aunque me transformé en sombras, estas fueron despedazadas por aquel rayo, y al retornar yo, lo hice de rodillas en el suelo, sangrando por el cuello y el pecho incluidos, y gruñendo como un gato. Y tenia la desfachatez de llamarme monstruo....?

Me incorporé, y miré de lado a Juliet. Su sangre..... me moría de sed. Pero entonces miré a Reiv. No, no podía. Negué con la cabeza y rugí, frustrado. Cualquiera diría que me costaba encontrar la concentracion necesaria para articular palabra.

Eché a correr hacia Jed a gran velocidad. Convertí mi cuerpo en sombras de nuevo, para volar rapidamente y reaparecer frente a Jed. Lo agarré por el cuello con fuerza y lo estampé contra una tumba, clavando mis colmillos en su cuello y  bebiendo. Siento entonces los impactos de balas de los soldados y me aparté del ejecutor, tambaleante. Las heridas de antes se habian abierto mas y mas, y los soldados habian apuntado bien (para variar!). Empujé una vez mas a Jed, con mis colmillos llenos de su sangre.

-Esta noche....no ganáis....

Mi cuerpo volvió a ser de sombras. Sabía que ya no podía derrotarlos, sus armas y su superioridad numerica....era algo que no habia esperado para nada. Envolví a Juliet y a Reiv con aquellas sombras, y cuando estas desaparecieron, ellos ya no estaban allí


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at fisico
20 dado+10 hab + 5 bonus + 20 base= 55 ps a Jed, te joes


def magica
10 dado+10 hab+5bonus+10 base=35

daños totales
72 jed+35+45 soldados=  152
152-35= 117 daño total
106-117+10 PS por chupasangres= -1 PS
FUUUUUUUCK

El miembro 'Sirius Black' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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#1 'Ataque Físico' :


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#2 'Defensa Mágica' :

defensa fisica
10+0= 10
55-10=45

111-45-5 SF= 61 PS
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Y todo ocurrio jodidamente rapido entonces. Si, le dimos a base de bien a ese sucio vampiro, los soldados andaron finos en su punteria. Creia que lo teniamos, ni me preocupó verlo lanzarse sobre mi.... esta vez no pude contraatacar, el capullo me clavó los dientes en el cuello abriendome una herida y aprovechandose de mi sangre.

Pero le dispararon y por eso se apartó de mi. Quedé mareado me sujeté la herida del cuello que aun sangraba.

-Que ...que no escapen!!!

Pero tarde. Huyó, y se desvaneció en sombras llevandose a nuestras capturas de la noche. Miré mi inhibidor del teletransporte pero...pensando en esas sombras, supuse que habia usado un metodo diferente el cual no se veia afectado por aquella tecnologia.

-Maldita sea!!

"joder, eran nuestros!"

Mi enfado era mas que visible.

- Volved a la base militar e informad de lo que ha ocurrido. Yo me encargo de Morgana.

Ambos estabamos heridos y mi mareo iba en aumento. Los soldados se marcharon encabronados por el mismo motivo que yo, los habiamos tenido tan cerca...pero...algo me decia, dado que nuestras bajas hoy habian sido realmetne nulas, que les estabamos comenzando a sacar ventaja.... con estos pensamientos conduje llevandome a Morgana.

El miembro 'Jed' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Defensa Física' :

Aparecieron en el cementerio. Los preparativos ya habían sido hechos. El video tendría algún rato en la red y con el foco tan grande en el tema, era más que seguro que ya estaría en boca de todos. El mensaje daba pie a la diplomacia, pero no era el único camino que tomarían. Tenía la intención de devolver al hermano del ministro, pero no sin antes tomar lo que quería de la base militar.

Se sentó con rapidez sobre una de las tumbas, que parecía segura, sin muertos vivientes ni nada por el estilo. Con rapidez se quitó los zapatos y colocó un pantalón por debajo del vestido. Hubiera preferido ir con Daniel que con Thranduil. El moreno no la miraba tan lascivamente como el elfo. Estuvo mucho tiempo queriendo aprender a leer mentes, pero aquel era un momento donde agradecía no poder hacerlo.- Será cuestión de esperar a la brigada y a los dragones.- Murmuró poniéndose un par de botas para luego deshacerse del vestido. Debajo de él traía puesta una blusa blanca, todo muy bien pensado para no tener que estar semi-desnuda frente al elfo.

- Espero que tu cueva sea lo suficientemente segura, no podemos permitirnos perder esa carta.- Murmuró justo antes de recibir aquella contestación favorable. Habían tomado todas las precauciones con él. Incluso sellar las entradas a la cueva. Sin más que hacer por el momento, metió todo a la bolsa infinita y se alejó de la tumba, llegando a la sombra de un gran olmo, según comentaba el elfo.

Acudo a la reunión esa después de mi pequeña travesura en la puerta de la Alianza, que no ha servido de nada pero al menos me ha ayudado a calmar la impaciencia por quemar y destrozar cosas. Al llegar me encuentro con que he sido el más puntual de los míos, cosa que me sorprende porque siempre suelo ser de los últimos. - ¿Estaré madurando? - me autopregunto a mi mismo con una sonrisa de alucine, dirigiéndome hacia donde está la chica morena, Victorya. El elfo pelo Pantene también andaba por allí, pero yo le hablo a ella que parece la que dirige el cotarro. - Ey, jefa. Vengo de chamuscar unas cuantas cosas en la puerta de la Alianza, para que se entretengan apagando fuegos. - me encojo de hombros quitando importancia al asunto, mirando después alrededor con un escalofrío. - brr...vaya sitio para quedar. Espero que Lykaios y los demás no tarden. ¿Hay novedades? ¿tenemos ya plan de ataque a la base? - espero un rotundo sí, o un plan elaborado de esos que yo acabo olvidando a la mitad.

- No veo por aquí al capitán para el intercambio. ¿No va a ser aquí? ¿haremos la entrega cuando veamos que los traen? ¿y si no los traen? ¿vamos a ir directamente a la base? - hago mil y una preguntas para entender el asunto, deseando tener una pizza delante en este momento para que todo sea más fácil y feliz. Tengo demasiada hambre para pensar. Por suerte en el olmo hay unos líquenes con una pinta apetitosa, así que me pongo a pasar la lengua por encima de ellos para chupetearlos y sacarles sustancia. También me como de paso alguna que otra hormiga, que dicen que son muy nutritivas. - Me abuuurro... - mientras espero me voy a molestar al elfo, pasando una mano por su suavoso pelo. - ¿Cómo lo haces? ¿karité? ¿aceite de argán? nunca tendré un pelazo como el tuyo. Qué putada. - después vuelvo hacia Victorya, todo hiperactivo y pesado como yo solo. - Oye, que si no vienen podemos ir tirando nosotros para allá. - le levanto la cejas varias veces con cara de pedir por favor que lo haga, en una variante de mi cara de ligar.

Aparecí alli con el resto de miembros de la Brigada (incluiros aqui quienes queráis, brigadosos mios xD) tras haber descansado de la batalla del ministerio en nuestro pequeño cuartel general. No me habia enterado del movimiento de Victorya porque no me habia dedicado a meterme a cotillear a ningun sitio, no era algo que yo soliese hacer la verdad.

Pero si que habia leido aquel mensaje general, desde la monde de Johan, y luego de eso, silencio.
Encontré a unos cuantos alli ya reunidos. El elfo, el dragon, la morena, Ben.... el vampiro estaba por ahi cerca, podia olerlo.

- Que carajos dices Red? Te pensabas largar sin nosotros? - le solté una palmada/hostia de proporciones biblicas en la espalda al pelirrojo. Luego miré a los otros presentes. - Supongo que el plan sigue siendo el mismo. Atacar y rescatar por la fuerza.... no nos pueden hacer un tres por 1? Joder que racanos.

Me crucé de brazos e hice una mueca. - A mi no se me da bien ser rápido ni rescatar, teniendo en cuenta que no podremos usar desaparicion. Yo me encargaré de la parte defensiva y ofensiva. Es decir armar jaleo, atacar, defenderos, guiaros, todo lo que haga falta. Pero la evacuacion....no. Y debemos pensar que si vamos ahi sin garantias de nada pueden hacer daño a nuestros compañeros en venganza por no haberles hecho caso con el trato. Deberiamos hacer algo con Michael.

Nos aparecimos en el cementerio tras una noche de sexo dormir plácidamente para recuperarme de la resaca y nos juntamos con el resto. Yo llevaba una bolsa en mis manos, en las que había un montón de churros recién hechos y un vaso tapado con chocolate fundido. -Yo trayéndote el desayuna y tú te quieres ir sin mi. - Le dije a Ben con una fingida cara triste y con mi acento alemán que siempre he tenido y no sabía.

-Yo creo que esa baza no les funcionará si yo voy, Lykaios. He probado con varios de sus aparatos electrónicos y puedo desactivarlos con mi magia - Me agaché para coger una de las flores del suelo, raíz incluida, y utilicé mi magia para hacer que lentamente se convirtiese en una semilla, a modo de prueba para que viesen como funcionaba. -En todo caso si algo sale mal puedo cargar con alguien y salir volando en mi forma alada. Así que supongo que estaré en el grupo de ataque y salvación. También os puedo asistir si los presos necesitan curación de primeros auxilios, aunque espero que no sea el caso -

Sentí un escalofrío al examinar el lugar. Era el sitio donde se escondía la cripta, lugar donde encontré un antiguo libro en idioma alado que me había roto los sesos por traducir, pero no podía. El lugar seguía siendo igual de tétrico que por la noche y la sensación de que te podía salir alguien de cualquier parte era horrible.

Aparecí de la nada, de las sombras del propio cementerio, desde la propia oscuridad y silencioso como una rapaz nocturna que se cierne sobre un ratoncillo en mitad del velo de la noche. Mis ojos habian estado rondando las sombras del lugar de mi muerte, aquel cementerio que tan bien me conocía, y habia presenciado como iban llegando todos ellos. Aquel grupo con el que se supone tendria que contar para salvar la vida de Johan.

Si estarian o no a la altura era algo que quedaba fuera de cuestion. Era gente que al parecer se preocupaban por la vida de mi hijo y eso ya los convertia en potenciales aliados mios. Tendría que controlar la sed que la sangre de muchos de ellos me provocaba, o las ganas de lanzarme a destrozar al licántropo por puro instinto irracional, porque sabia que eran aliados. Era algo que me costaba, puesto que me habia pasado en aislamiento la mayor parte del tiempo desde que morí y... no acostumbraba a estar rodeado de tanta gente. Viva.

- Mientras hayan sombras habrá un pasaje de salida. - susurré. Las sombras a mi alrededor se movian, como una especie de capa que me protegía. - Pero los ejecutores tienen unas armas especiales que seleccionan ellas mismas los objetivos que son válidos o no. Ahi no valen los juegos mentales.

Me mantuve lo mas alejado que podía del licántropo, y crucé mis brazos, paseando de un sitio a otro hasta pararme frente a Victorya. Algo en ella me resultaba afín a mi. Era un sexto sentido.

Ben llegó más o menos al tiempo en que los dragones también llegaron. El chico era divertido, hasta le sacó media sonrisa cuando la llamó jefa, aunque no sabía muy bien que decir a eso de chamuscar cosas.- No, aún no hay plan, pero seguro que ya vienen.- Sus preguntas solamente le recordaban todos los cabos sueltos que tenían, pero la única manera de arreglarlos a favor propio era entrando a la base y recuperándolos a todos. Afortunadamente, Lykaios llegó en el momento oportuno para darle aquella palmada con la intención de calmarle. Asintió a lo de Lykaios. Entonces, todo aquello debería de ser el ataque sorpresa más sorpresivo de la historia.- Necesitamos un factor sorpresa.- Susurró, pensando en que sería genial si pudieran dejarlos a todos los dragones justo en el campo de batalla. Sería un ataque inesperado.

Mientras pensaba, el extraño poder de Emily atrajo como un imán, acercándose para ver aquella flor transformarse en semilla en cuestión de instantes. Era un fascinante uso de sus poderes. Sacó entonces de su bolsa la libreta donde tenía sus apuntes, encontrando las páginas donde había analizado aquella bola gigante y extraña. Se la mostró a Emily para que la recordara, exactamente donde había hecho aquel dibujo, no completo pero preciso.- Si encuentras algo similar, sería una buena idea que la deshicieras. Es enorme... Y esperemos que no tengan refacciones... O a los centinelas...- Susurró con vo profunda, regresando a su lugar justo después, mientras escuchaba también el susurro de Cleo para ver la ubicación de Justin. El lugar no era más seguro que el castillo, pero tendría que valerse por sí mismo un par de días mientras todo se arreglaba. Sus pensamientos cabildeaban la idea de Cleo, justo cuando Sirius se detuvo frente a ella. Sus sombras dejaron de responder ante ella, como si aquel ser estuviera absorbiéndolas por completo. Enderezó la posición y miró a los ojos del vampiro, reclamando sus sombras de manera imperceptible con su cambio de actitud. - Hay sombras en el cielo y el infierno. Habrá.- Susurró ante la afirmación del vampiro, que le hacía pensar que él ya había dominado aquella parte de sus sombras y por eso respondían las propias ante él. Egoísta y egocéntrica al pensar que alguna vez aquellas sombras le habían pertenecido.- No negociarán, Cleo, lo intenté ya poniendo Bastion Hollow de por medio. La única opción es rescatarlos antes de que dejen de serles útiles y les asesinen.

- Los ejecutores deben estar mal por ahora. Estaban bastante heridos, pero nada nos asegura que no estén mejor. Tendremos que cuidarnos de ellas... Nos convendría tapar las cámaras, por si acaso quieren usar el ataque con fines mediáticos.- Susurró, esperando un poco más por si alguien más llegaba.

Al final, envió un mensaje a la moneda de cada renegado confiable que hacía falta en el lugar con la ayuda de Thranduil y los renegados que estaban ya, sin agregar a los que ya estaban presos de la Alianza.

Victorya escribió:Quien venga a Nimrod le esperaremos en el cementerio. Estaremos solo unos minutos, después empieza el rescate. De Leila, Johan y Thalos.

Escribió, refiriéndose al rescate de rehenes de Nimrod para hacer todo más en clave.- Tratemos de llegar juntos en dos flancos. Unos por tierra, otros por aire... que no sepan qué atacar. Lykaios, necesitamos un buen rastreador para encontrarlos una vez dentro de la base. Un grupo entra y el otro queda fuera resistiendo para que no nos encierren. Saldremos por donde se consideren mejor. No queremos más bajas, cuidémonos entre nosotros.

Cuando llegó Ben, le dejé tocarme el cabello, compartiendo mi secreto con él en cuanto lo pidió, que era el mejor secreto del mundo.- Aguacate y sávila antes de dormir y luego lo lavas con agua de rio. Fría, nada de tibia ni calientita, el cabello necesita frío, hijo.- Aseguré a lo que había comprobado con todos mis años de experiencia elfil.

Llega entonces aquella chica buenorra que también llegó ayer y estaba borracha. Joder, qué pintas trae, si se ve que sobria está mucho mejor de ebria, y eso es mucho decir... Casi me pasa desapercibido el resto cuando la vi, pues ya me había dado cuenta que algunas presentes eran más innacesibles que esa linda alada.

La llegada del vampiro me devuelve a la realidad, que ostia, se me puso enfrente, casi me asusta, que careto...- Bueno, también podemos hacer un túnel. Yo podría hacerlo, pero quizás me tendría que quedar fuera de la misión. Es complicado, dependiendo el tipo de terreno.- Dije con la suficiente integridad que me permitía el tener a Emily de frente.

Me quedo con todos los trucos del elfo para tener un pelo Pantene, que usaré luego en el mío para tenerlo bello y sedoso. Dejo de chupar líquenes del árbol porque como que no termina de quitarme en hambre, pero me estoy impacientando y empezando a mear por tanta espera. Enseguida empieza a llegar el resto, pero nadie me quita haber sido el primero y poder restregarles mi puntualidad por la cara. - Tardoooooones. - eso de que el vampiro también haya venido me da un poco de cosa, pero supongo que no queda otro remedio. Lo que me dice Emily me hace inmensamente feliz, me trae la felicidad en forma de churros y chocolate. Obviamente la asalto, cogiendo los churros y el chocolate como si fuera un animalillo depredando. - Joder, te quiero. - la agarro para soltarle un beso en la mejilla, comenzando después a comer llenando los mofletes como un hámster, escuchando a todos.

- Noo, no me iba a largar, bro. Bueno, me largué pero luego volví. He lanzado fuegazos por encima del muro de la base de la Alianza, para molestarlos un rato. Y luego he echado a correr como un cabrón y me he largado. Ahora viene la invasión buena, ¿no? la de entrar de verdad. Podéis usarme de escudo humano, puedo cubrir la piel con una especie de capa rocosa. Y he aprendido hace poco a manejar la electricidad. - informo para que lo tengan en cuenta a la hora de hacer sus planes. - Y traer al maldito Michael eseee, que también puede servir de escudo humano si se ponen tontos. Ya no lo queréis para nada. - entre unos y otros se apañan para buscar salidas, que sin con sombras, con vuelitos, momias, haciendo el topo...muy bonico el despliegue. Lo que dice Cleo también me gusta, hacer el intercambio alejados, aunque para eso habría que conseguir que saliesen de ahí. - Ahí le has dado, jefa. Si nos cubrimos las espaldas entre todos no podrán con nosotros. Somos bastantes. Bueno, ¿cuándo nos vamos?

Vino Emily, ¡con churros! y mi estomago rugió, aunque hubiese preferido que fuesen chuletillas de cordero manchego poco hechas....o que el chocolate llevase un chorrillo whiskazo....dio igual Benji se avalanzó cual animal hambriento que era.

- Ok Emily, pues tu en la punta de lanza conmigo. Y Sirius igual. Si no te gusta mi olor te tapas la nariz, majete, que a mi me tocará hacer lo mismo

La verdad es que los instintos se me ponian a flor de piel con el Conde Dracula a mi vera. Que si, que era el padre de Johan, un Black de derecho....

- Con el vampiro y conmigo tendreis rastreadores mas que de sobra, Victorya. Los encontraremos y los sacaremos de alli. Y de una pieza. Todos. Entendido?

Hablaba convencido, sin dudas o miedo, no habia lugar para eso ahora.

- La Brigada está informada. Es posible que recibamos refuerzos a mitad de operacion. Vamos a ello, cabrones!!!

Subí el tono de voz y congregué a los mios alrededor, desapareciendonos de alli rumbo a nuestro objetivo.





off: vamos que salgo, y que los brigadistas que querais podeis daros por sacados conmigo

Aparecimos en el cementerio, tras dejar Ouroboros, en el lugar donde había una gran cantidad de Asfódelos extrañamente organizada, ya que había una exacta longitud entre unos y otros, como si alguien los hubiera puesto así por alguna razón en concreto.

Antes de que pudiese decir nada se oyó unas palabras sueltas de alguien a la lejanía como “rastreadores” y a alguien decir “La Brigada está informada. Es posible que recibamos refuerzos a mitad de operacion. Vamos a ello, cabrones!!!” a unos 30 metros, lo que me puso en guardia y me dirigí donde había oído el grito de guerra y un asqueroso hedor a vampiro que me hacía arrugar la nariz.

Al llegar vi a Lykaios Knox, finalista pero no ganador del torneo de Ouroboros, apareciéndose a otro sitio con el típico CHACK que se hace al aparecerse. Me acerqué con los que no se habían ido con él.

-¿Qué cojones hacen los de la Brigada colaborando con un chupasangre?¿Se os ha ido la puta cabeza? -

Mis ojos apuntaban a Sirius con una mirada envenenada, pero estaba más tranquilo al ver que no era una amenaza potencial. Acababa de descubrir quién era el que vagaba de vez en cuando por este cementerio, dejando su pestazo por las tumbas, y observé de forma breve en una visión a una pelimorada siendo mordida por él. Fue muy creepy verlo en primera persona, como si hubiese sido yo el que hubiese salido del letargo para pegarle el bocado. Volví en mí y esperé a que Sofía y Chloe llegasen, dado que había salido corriendo sin avisar.

-Chloe, ¿conoces a alguno de estos? Sé que eres de la resistencia pero como soléis juntaros con la Brigada...-

Metí la mano en el bolsillo para sacar el paquete de tabaco con el mechero y empezar a fumar, algo me decía que la excursión de campo para recoger florecitas se posponía para otro día.

La excursión de estudios se pone en marcha en cuanto llegamos al cementerio con la profe de Herbología y con el otro profe que no sé de qué es pero que está muy bueno. El sitio al que hemos venido no me gusta, pero reconozco que es interesante eso de la cantidad de asfódelos y su distribución. Me agacho para observar mejor las flores, cortando una para guardarla y poder examinarla más tarde. La guardo en la mochila entre papeles para que no se estropee, con mucho cuidado. Alzo la vista de nuevo para darme cuenta de que en ese lapso de tiempo pierdo de vista a Altair, que ha salido corriendo hacia otro lado del cementerio como si de repente hubiese encontrado algo. La vena cotilla me puede, así que salgo también detrás de él, alcanzándolo tras una breve carrera. Avanzo ahora más lentamente, mirando un tanto extrañada la reunión que tiene lugar en estos momentos. No he llegado a ver a los de la Brigada yéndose porque se han desaparecido antes de que me los encontrase, pero han quedado algunas personas más.

- Sí, conozco a todos los de la Brigada. Y a Sirius también. - señalo al vampiro con un gesto de la cabeza, pensando si debo decir que es o era el padre de Johan, en pasado . - Es un Black. Es aliado,
luchaba con los renegados.

"creo...era un buen hombre"

Los demás no estoy segura de conocerlos, aunque me suena haber visto al elfo y la morena por el hospital de Ouroboros mientras hacia las prácticas con Lucio. - No son enemigos ninguno de ellos. ¿Por qué os reunís aquí? ¿hay algo que deba saber?

"dadme cotilleos, dadme"

Tras los preparativos finales, ayudé a Victorya a lanzar el último mensaje, aquel donde nos veíamos a las puertas de la Alianza.

Aún quedábamos algunos en aquel cementerio, los últimos en ir juntos. La brigada se había marchado y parecía que todo iría lo mejor posible, al menos para ser cuestión de rescatar gente. Justo cuando nos íbamos, apareció gente misteriosa, una pelirroja de fuego con aquellas curvas que madre mía, si no me moría yo, me mataría ella. Pero por más que deseaba hablar con ella, que es que no era el momento.

- Nos vamos ya, chica.- Que me suena de haber visto a la chiquilla de algún lado, y si conoce al que es padre de Johan, pues seguro que es aliada. Mis picudas orejas no fallan.- Hay cosas que hacer. Revisa tu moneda.- Le dije con un susurro, algo así como acá entre nos. Lástima que la pelirroja no se acercó en ningún instante. Me veía a lo lejos con cierto aire de suficiencia.

Tomé un respiro, y al final me acerqué de nuevo al grupo, que era hora de marcharse.- No hay mucho tiempo que perder, chica. Ya habrá tiempo de charlar después.- Murmuré, justo para acercarme al resto, esperando por si alguno quería decir algo a que Victorya nos desapareciera.

- Eres un mocoso, Knox. - le solté a Lykaios con cara de mal genio. Ademas de perro, contestón. Le miré con una expresion muy de suficiencia, muy a lo Black. A veces me salia solo.

Se organizaron, mas o menos. No habia mucho mas que se pudiera hacer, cualquier cosa valdria mas a la improvisacion, por asi decirlo, era imposible saber que situacion iban a encontrarse. A encontrarnos.

La Brigada fue la primera parte del grupo en marcharse. Siseé, y desvié mi mirada hacia la oscuridad, molesto, al notar la presencia de otro lobo mas en mi cementerio. Que pasaba hoy con todos los licántropos de la region viniendo a mi terreno?

Éste ademas, no tenia el privilegio de tener la cabellera de un color que me resultase familiar. Lo habia visto alguna vez en vida? Lo dudaba. Mi mirada hacia Altair fue fría y desdeñosa en cierta dosis. Notaba como el instinto se revolvia dentro de mi, pero fue la oscuridad la que respondió a ese estado, agitandose mas aun a mi alrededor, volviendose mas densa, como mas espesa.

- Por qué no te vas un rato a aullarle a la puñetera luna, chucho?

Esa maldita luna cuya luz me resultaba molesta en las noches en las que estaba crecida. Un recordatorio del olvidado sol. Un pálido reflejo. Como nuestra no-vida. Miré a la joven. Si no recordaba mal, Chloe Hacksaw....de la Resistencia. Hija de Adam y Victoria. Pero...habia crecido mucho. La recordaba como una niña. Claro. Los mortales siguen su camino

- Chloe, verdad? - la miré de arriba abajo, preguntandome, por un momento, que aspecto tendrían aquellos pequeños que hace tantos años dejé atrás, con su madre. Y si volveria a verlos. Ella me presentó ante los otros dos adultos recién llegados, y añadí. - Sirius Black.

Ladee la cabeza, el elfo y los demas se marcharon. Y yo ya estaba tardando.
- Es la Alianza, han secuestrado a varios de los Renegados. A Johan, entre ellos. No vamos a esperar a que lo maten. Esta noche atacamos el recinto militar. - aquel matiz que la Hacksaw habia hecho..."luchaba" con los renegados ....me hizo entornar los ojos con expresion adusta. Asi era como me veian ahora? Algo del pasado. Pero.... no habian pasado tantos años, verdad? - Lucho con los renegados. - dije dando especial fuerza a la conjugacion en presente.

"segué mas vidas cuando estaba vivo que en todo el tiempo desde el abrazo. Toca equilibrar un poco la balanza"

- Procura no ir marcando territorio, este es territorio de los muertos, chucho. - le dije al lobo, antes de desvanecer mi cuerpo en sombras y desaparecer de alli

Todos los presentes se van marchando o desapareciendo, hasta que sólo quedamos allí los profesores de Ouroboros y los pocos alumnos que hemos venido a la visita. Con todo lo que dicen que ha pasado creo que la clase quedará para otro momento, hay otras cosas más importantes ahora mismo. No me atrevo a decir mucho al respecto, por mi parte no puedo ayudarles en batalla, pero sí me ofrezco a atender en el hospital por si llegan heridos. Les explico que me quedaré en el del bosque de Sherwood, que suele tener menos personal que el de Ouroboros. Me preocupa bastante cómo puedan venir los que salgan de la base, que ya sé cómo se las gastan.

Dejo que los profesores hablen entre ellos por si tienen que decirse algo, y mientras me dedico a mandar algunos mensajes con la moneda a mi padre y a Lyran, por si ellos se han enterado de algo más que yo no sepa. Después nos marchamos de allí los pocos que quedábamos, separando después nuestros caminos pues cada uno irá a un sitio diferente.

Volaba en mi alfombra magica tratando de espantar a los mosquitos nocturnos que se me estampaban contra los ojos.

- Maldito cambio climatico! Que el mosquito tigre no iba a llegar a Londres, decían! Toma tigre para ti, maldito!

Seguia tratando de ubicar la imagen que habia visto en la piedra vidente asi que me fui al extrarradio pero alli....nada de nada. Triste y desoladores cementerios, plagados de tumbas abandonadas, tumbas sin nombre.

Elevé una breve plegaria por la reencarnacion de sus almas. Si Smaug quisiera seguir siendo amigo mio, me habria podido ayudar con esta empresa, pero no...

-Ahora sale con alguien más alto que yo...

Y Nicho no habia encontrado nada de informacion interesante al parecer.

Tras comprobar que este no era el lugar indicado, remonté vuelo, siguiendo con mi inspeccion de Londres.