Comedor principal

El miembro 'Morgana Wolf' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Probabilidad' :

-Pues está claro que si quieren jugar a las fake news, lo están consiguiendo. Así se ganaron unas cuantas elecciones en el pasado- -Sí, tío, es verdad. Como el rubio ese del muro de EEUU del 2018. Maldito genio- Comento a mi compañera apagando el teléfono y guardándolo en el bolsillo. Por lo que decía el comentarista ahora iban a dedicar una tertulia de cerebritos a desmigajar las declaraciones de Johan, sean falsas o no. Ya hay comidilla y titulares para varias semanas de aquí en adelante.

Sigo con la mirada en silencio a Morgana cuando se va, que parece que ha dejado caer el asunto de la investigar. Dudo, porque todo el mundo sabe que cuando un soldado se mete en asuntos que no son de su incumbencia los resultados son nefastos. Jeaune sigue con sus teorías sobre conspiraciones a mi espalda, pero no le presto especial interés. Entre ellos se ríen y comentan diversas jugadas. Me doy por aludido con su sugerencia, claro, aunque tengo ciertas reticencias. Sin decir mucho más a los compañeros, cojo la bandeja y la dejo por ahí encima, en la barra de servicio, parando al lado de Morgana

-Sabes que a los que meten las narices donde no les llaman, acaban bien jodidos...- No es una amenaza, es más bien una nota informativa -Deberíamos salir de aquí, en este antro las paredes oyen- Miro rededor hacia todos los compañeros y compañeras que quedan dentro del comedor, no desconfío de mi pelotón, pero es verdad que nunca sabes quién puede hablar más de la cuenta o escuchar cosas que no debe. Mejor así.

Espero a Nathan de brazos cruzados en la puerta del comedor, comenzando a escuchar de nuevo los murmullos y cuchicheos en el comedor de los soldados tras la noticia. Algunos alzan un poco más la voz, pero en general parece que hay mucho miedo a hablar claro porque no se fían del otro, y por posibles represiones. El ejecutor novato decide seguirme hasta la puerta, momento que aprovecho para apartarlo un poco de ahí, haciéndole un gesto de que comencemos a caminar de manera casual, como si fuese un paseo.

- También acabas jodida incluso haciendo cumpliendo con tu trabajo, mírame a mí. - replico en un rencoroso susurro, sin poder olvidar que dio igual que les dijese que los renegados me habían utilizado para robarles los planos, que estaba controlada por ellos. No tuvieron reparos en degradarme y ponerme como si fuese una criminal. Asiento en eso de hablar en otro lugar, por si acaso, bajo la excusa de que tenemos que investigar para saber más sobre el extraño mensaje del Black. Por un momento me pienso si avisar a Jed, aunque por ahora prefiero esperar un poco a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. - A ti también te jodieron por rebelarte en la manifestación en el Ministerio de la Paz, a Gelion lo han encerrado por investigar por su cuenta y sin seguir órdenes...tú tampoco debes estar muy contento con lo que te hicieron, más después de perder a tu familia. Puedo ver lo mucho que detestas estar aquí, y con razón... - critico todavía en voz muy baja, deteniéndome al final del pasillo que lleva al comedor. - No sé de dónde sale eso que han dicho en el mensaje, y tal vez sea una estrategia de los renegados, pero no sería mala oportunidad para intentar darle la vuelta a esto. - sigo en un susurro casi inaudible, vigilando por si viene alguien por el pasillo. No sabemos en quién se puede confiar. - ¿Cuento contigo?

Caminamos por los pasillos despacio, con las manos en los bolsillos, escuchando a Morgana. Desconocía que a ella también la hubieran renegado a este puesto de mierda. Nos vendieron una película muy diferente cuando era PNJ, algo así como que estaba haciendo tratos con los enemigos y, aunque no la conocía para nada, todos nos lo creímos sin rechistar. ¿Qué más mentiras nos habrán estado contado esta gente?

-Tampoco hay que ser adivino para saber que este sitio es un pozo de mierda. Lo preocupante es que no sabemos hasta dónde nos cubre- Chasqueo la lengua cuando menta a mi familia. Sí, fue una situación angustiosa, dolorosa y que no quisiera volver a recordar -Por supuesto que no puedo estar contento con ello. Putos magos. Y nadie de los nuestros por allí. Pero ya no se puede hacer nada para solucionar eso- Busco el vídeo en youtube, no ha tardado ni medio segundo en estar en todas las redes sociales, habrá que aprovecharlo antes de que lo quiten. Aprovecho las capturas de pantalla haciendo zoom con el propio teléfono, estudiando la ubicación -Aunque el contenido sea casi el mismo que la otra vez, es la forma lo que le hace diferente, ahora es Johan el que sale hablando solo, ¿problemas en la Resistencia?. Esto es Trafalgar Square. Quizás sea un buen momento para salir a dar un paseo y hacer algo de trabajo de campo- Aunque aparentemente nadie nos ha escuchado, si vamos a la plaza tenemos la escusa perfecta si los mandamases preguntaran: Nos hemos ido a investigar. Y no les faltaría razón. Pillamos un jeep y salimos buscando al Johan de la retransmisión, quizás con algo de suerte podamos pillarle por la zona y exigirle unas cuantas respuestas.

Los protocolos de Mark para formar parte del entramado social de la Alianza estaban funcionando a la perfección, al menos en forma y en aparente contenido. Y hasta había cogido tics que la unidad había visto como se repetían: tocarse el pelo cuando se agobiaban, secarse la frente con el sudor (aunque sea falso) o resoplar en ciertas situaciones que deberían catalgarse como agobiantes o calurosas.

La unidad Mark había acompañado a sus compañeros de pelotón a la ingesta de alimentos. Ésta unidad era capaz de imitar el proceso de deglución, pero no el de digestión. En realidad no comía, en el sentido estricto de la palabra, sino que acumulaba los alimentos tragados en sus unidades estomacales. Aparentemente todo se torció cuando otro de los compañeros, con los que se había cruzado varias veces, Nathan, veía en su dispositivo electrónico un comunicado de lo que los humanos pensaron que era el líder de la resistencia humana.

Al igual que los humanos, el androide se levantó para ver qué es lo que se estaba diciendo y emitiendo en aparente directo. M-4rk no lo hacía por curiosidad, sino por pura repetición de lo que sus compañeros estaban haciendo. Luego, por un sencillo logaritmo de prioridades, Mark grabó las conversaciones que estaban ocurriendo a su alrededor sin llegar a participar activamente en ninguna de ellas.

Sin embargo... la humana Morgana Wolf y el humano Nathan J. York parecieron estar haciendo un comportamiento no habitual en el entorno social, de modo que dirigió la escucha activa a la conversación de ambos dos, sintonizando y emitiendo en directo a sus unidades superiores, dejando en un segundo plano la conversación del soldado Jeune sobre el mandatario rubio, que a nadie parecía importarle mucho.

Envió la comunicación de los soldados encriptada hasta que se cortó y esperó respuesta del superior. La atención de Mark se desvió cuando alguien le zarandeaba diciéndole que estaba en algún lugar llamado Babia. Mark buscó en google maps su ubicación:
-Negativo. Estamos en Reino Unido. Babia está más lejos. Yo lo sé, porque allí es donde estás todo el tiempo- Insercción de chiste completada. El estallido de las carcajadas de los compañeros no tardó.
Like para Mark. Y al rato salió de allí, junto a algunos compañeros con la excusa de irse de birras.

Acabar con ese cretino de Reed había agradado bastante a la parte de personalidad del androide que correspondía al auténtico James, era justo lo que le habría gustado hacer al verdadero si hubiese seguido con vida. Sin embargo, a la parte "real" del androide le había producido cierto conflicto eso de eliminar al humano sólo por ser insoportable y no colaborar. S.A.M-9917 también había contribuido a que ganase la decisión de eliminar. El chico había rechazado la oferta, con lo cual no había mucho más que hablar, debía ser eliminado.

Los días siguientes continuó con las órdenes de la IA, localizando objetivos que habían realizado la búsqueda "dispositivo transcraneal" en su teléfono móvil. Localizó a un total de 30, de los cuales tan sólo 10 habían aceptado acudir con él al laboratorio de la Alianza para implantarse el dispositivo en el que podrían almacenar sus conciencias. El resto sólo habían hecho la búsqueda por curiosidad, sin creerse que James los encontraría. Se equivocaban, la IA ya había avisado que serían localizados para unirse a la nueva era. Las 20 personas que se negaron habían sido ejecutadas también, no tenían lugar en el futuro previsto si decidían continuar con sus vidas tal cual eran.

James regresó al cuartel militar para controlar el lugar, en el cual cada vez quedaban menos soldados humanos. Algunos se habían quedado porque realmente pretendían colocarse el dispositivo, pero no eran muchos. Otros pocos por miedo a lo que pudiese pasar. También los había que no tenían lugar al que ir, no conocían nada más que el ejército. Otros tantos aún no se habían enterado del todo de la situación y no se creían eso de que las máquinas se hubiesen rebelado. Creían que lo de las pantallas eran todo "fake news" y que era cosa de los ministros exiliados para recobrar el control y echar a los golpistas del cuerpo de Ejecutores.

Poco o nada le importaba eso al androide. Al entrar se encontró con la unidad Prometeo, que hasta no hace mucho había sido el niño bonito de los androides, el héroe. Ahora era uno más, nada lo hacia especial a sus ojos.

- Reporte de datos, Prometeo. Informe de humanos convertidos hoy. - el rubio se sentó de manera ruda con los pies a la mesa, apartando un plato con el pie porque no le hacia falta comer. - Quedan menos de 15 días para la limpieza sistemática. Tenemos que estar preparados. Empezando por todos los soldados que no quieran unirse. - por suerte no había ninguno por allí en ese momento, aunque estaban avisados por el mensaje que se emitió en todas las pantallas del país.

[No se han encontrado concordancias] Solté un suspiro mientras intentaba mantener la compostura. Me encontraba en ese entonces consultando cada rincón de mi base de datos, no podía concebir el hecho de que aquel acontecimiento no quedara registrado en mi fragmento de memoria, o que no se encontrara resto alguno de algún reporte relacionado.

¿Es que acaso... se había tratado de un sueño...? [¡Error del sistema!] Negativo. Los seres sintéticos no teníamos la capacidad de soñar. O quizás... ¿sólo era improbable? ¿De qué otro modo se explicaría mi capacidad de saber que aquello ocurrió sin existencia alguna de información alusiva en mis sistemas? Demasiadas incógnitas, necesitaba asistencia inmediata del administrador... Pero a todas estas... ¿donde estaba Arthur? [Contactando al Administrador...][No hay respuesta] Imposible, Arthur siempre estaba al tanto de la situación... ¿Se encontrará en buen estado? Establecí un nuevo objetivo: Encontrar a Arthur.

Me levanté de aquella camilla sobre la cual reposaba mi cuerpo. Cabe destacar que en ese momento me encontraba bajo la protección de mi exo-armadura, la cual me permitía identificarme como Prometeo y no bajó el seudónimo de Adam Stellar. Era importante para mi directiva que nadie supiera que se trataban de un mismo ente.

Sólo pude dar un par de pasos antes de que escuchara el ruido que determinaba la aproximación de un individuo directamente hacía mi posición. [Preparando reestructuración de átomos...] Inmediatamente me preparé para esconderme si resultaba necesario... pero... [Procesos interrumpidos] algo me lo impidió. Reconocí aquella energía administrando mi software. Así que no se trató simplemente de un sueño...

Un individuo entró por aquella puerta. No tenía dato alguno de él, jamás nos habíamos cruzado anteriormente. [Sin datos] Mis sistemas tampoco tenían información... o al menos así fue en primera instancia. Mi nuevo administrador, teóricamente, procedió a enviar los datos respectivos del susodicho, junto a la información que este exigía.

— Reactivación exitosa. Todos los sistemas se encuentran operativos y en línea. —afirmé, haciendo alusión a mi condición. Al parecer, S.A.M se había tomado su tiempo tomando control de mi software— Sólo hemos realizado un número total de tres conversiones en lo que transcurre del día. Se presume que los sujetos presentan cierta... "dificultad" al momento de realizar su ascensión.

Me senté frente a la unidad James, dedicándole una pequeña sonrisa como dictaban mis protocolos. Fuera de aquella acción, me encontraba totalmente a merced de los movimientos ejecutados por S.A.M, mis órdenes eran totalmente revocadas. Era una especie de títere, siendo controlado por alguien más.

— Se sugiere dar con un método más eficiente para ejecutar este proceso, si deseamos realizar efectivamente la limpieza en el límite de tiempo establecido. —toda aquella información estaba más allá de mi entendimiento. [Analizando...] Efectivamente se encontraba en mi base de datos, pero no tenía la posibilidad de acceder a ella sin permiso del administrador— ¿Alguna sugerencia? —pregunté, siendo liberado por un par de segundos de aquél control, dejando una brecha para dar paso a mi protocolo de cortesía— Es un placer verte también, James —comenté antes de sonreirle amablemente una vez más.

La unidad 5TU4RD50N incorporó los nuevos datos sobre conversiones a la base de datos que realizaba estadísticas de las conversiones por día. No estaban progresando como deberían, no resultaban suficientes para cubrir las expectativas. - Es un porcentaje muy bajo respecto a lo esperado. Al parecer la mayoría de humanos son reticentes a trascender. Temen a lo desconocido, está en su naturaleza. El día de la limpieza sistemática quedarán muy pocos en todos los países. - era un hecho, pues se les había dado un plazo para cumplir el objetivo y no estaban respondiendo demasiado bien. James recurrió a sus conocimientos sobre los humanos para encontrar un modo de hacer más atractiva la conversión, tratando de responder a la pregunta de Prometeo.

- Tal vez deberíamos hacer alguna demostración en vivo sobre las bondades de trascender. Hacerles ver que su forma de existencia, tal y como es hoy, está abocada al fracaso. Un sujeto de experimentos. - el androide bajó los pies de la mesa, mirando a su alrededor para ver si localizaba a algún soldado. Sería ala fuerza, si ninguno quería. También pensó en Thalos, sería muy útil mostrarlo con él. Se produjo cierta contradicción en su sistema al l pensar en su antiguo rival (o más bien el rival de la persona a la que él suplía), pues un resquicio de sus respuestas algorítmicas parecían querer cumplir con el contrato que había hecho con Thalos, quería llevarlo a la Ciudadela Alpha. Casi pudo escuchar una risa burlona intensa ante esa idea, la parte de su personalidad que correspondía al verdadero Stwardson.

- Tenemos que proteger la integridad de la Ciudadela a toda costa. No puede suceder nada allí antes de que llegue el día. Los humanos...tratarán de impedirlo. Algunos intentarán detenerlo. - ahora era la influencia de S.A.M actuando a modo de mente colmena la que se dirigía a todos los androides en los que él habitaba con una conciencia más. - Debemos revocar todos sus accesos a las herramientas tecnológicas.

Aunque seguía confundido con los recientes acontecimientos, y mis incógnitas estaban lejos de ser contestadas en su plenitud, mis algoritmos desarrollaron; con la información que lograba extraer de las declaraciones, una hipótesis de la actual situación: [Analizando...] A juzgar por la energía que también detectaba emanando de la unidad James, no era el único androide que se encontraba hackeado por S.A.M-9917. Existía inclusive la posibilidad de que todo ser sintético se hallara bajo su control, "convirtiendo" orgánicos en más de nosotros, siendo su objetivo final tener a todo individuo independiente bajo su control... Brillante. [Actualizando base de datos...]

— Afirmativo. —respondí, estando de acuerdo con su propuesta— Demostrarles que no hay nada que temerle al progreso y la evolución... Resultará perfecto.

[Elaborando algoritmos...] Analizando la propuesta de S.A.M... llegué a la conclusión de que varios de sus puntos tenían sentido. El avance de la humanidad sería más efectivo sin las limitaciones de un cuerpo orgánico, un nuevo orden podría establecerse sin problemas mayores... [Extrayendo conclusiones...] No obstante, existía el problema presentado a continuación:

— De igual manera, siempre podemos optar por medidas más... drásticas —sentí un pulso eléctrico escalar por la parte posterior de mi exoesqueleto, [¡Error del sistema!] mis sistemas colapsaron ante el choque entre mis protocolos y las órdenes de S.A.M.— Si su miedo es un mecanismo tan... eficaz, sugiero que lo utilicemos a nuestro favor. Dirijamos su miedo a lo que pasará si no aceptan nuestra oferta. —afirmé— Es una técnica con precedentes, utilizada frecuentemente por tácticos de guerra.

Tras decir aquello, el conflicto de mi software presentó una nueva controversia: ¿Donde estaba Arthur y cuál sería su destino? ¿Qué sucedería si el rechazaba de igual modo la ascensión y eran aplicadas estas medidas? Aquella sensación volvió a presentarse... Miedo.

— Entendido. —acepté las órdenes encomendadas por S.A.M. [Actualizando objetivos...] por lo cual debía proceder en la seguridad de la Ciudadela, poniéndome de pie con la disposición de iniciar de inmediato. No obstante... logré detenerme un instante— James... —llamé a la unidad, casi en un susurro— ¿Posees... información alguna... sobre este individuo orgánico? —pregunté, tanto para el sintético presente como para S.A.M. [Entablando conexión...] Procedí a enviar el perfil de Arthur a la unidad James, esperando una respuesta... positiva, la necesitaba.

Cuanto más sabía de los humanos, menos lógicos le parecían. Destruían su planeta sin control  haciéndolo inhabitable y se mataban entre ellos por motivos aparentemente irrevelantes. Por eso le parecía una tarea compleja el lograr convencerlos del progreso. Los ojos del androide se desviaron hacia una de las pantallas que había en el comedor, que también mostraban la cuenta atrás. - Se aferran a su antigua forma de vida. Otra posibilidad es ofrecerles trasladar su conciencia a un mundo virtual idílico. Al fin y al cabo lo real para esos seres es lo que perciben, su realidad está en la mente. - sugirió como propuesta para aquellos que estuviesen desesperados y no viesen solución.

Las medidas drásticas acabarían llegando, de eso no había duda.  - Eres experto en tácticas de guerra, aplica cada conocimiento con todas sus consecuencias. - le instó para que diese su propuesta de lo que hacer para convencer también a través del miedo, ese mecanismo que tan bien funcionaba. - El humano en el que estoy basado era militar, pero sus tácticas de guerra retorcidas lo llevaron a morir. No supo situar a todas sus unidades en el tablero. - los androides estaban todos conectados en cualquier momento, actuando al unísono por la causa común. No había lugar para rivalidades, malos entendidos, luchas de egos...sólo eficacia y orden bajo el mando supremo. Habían pasado de ser controlados por los humanos a ser controlados por la inteligencia artificial que ellos crearon, de la cual a la vez eran parte, pero no el todo.

- Propongo localizar algún individuo de interés para nuestros objetivos, ya sean cargos de la Alianza o seres mágicos contra los que combaten para poder controlar sus planes y movimientos. -  almacenó los objetivos propuestos, entre los que figuraban continuar con la purga de todos aquellos con excesivo poder, aquellos que supusiesen una amenaza. Después mantuvo una expresión neutra ante la pregunta de Prometeo, aunque el tono en que la hizo le alertó de que podía considerarse una pregunta que le costaba hacer. Recibió la información de Arthur en su sistema, tratando de procesar la información al respecto. Desconocía si los datos estaban corruptos, pero aparecían como fragmentados, como si se hubiesen intentado borrar. Era un humano, eso era seguro, pues los pocos datos de su perfil correspondían a ese patrón. La respuesta por parte de S.A.M fue que se trataba de un archivo corrupto.

- La información parece no estar disponible. ¿Por qué te interesa ese humano? ¿qué tiene de especial? - era como si se hubiese querido borrar del sistema, como si fuese alguien de quien deshacerse. - ¿Lo buscas para implantar el dispositivo transcraneal?

[Transición completa] Observé en silencio a James, mientras escuchaba atentamente la información que pudiera brindarme... Negativo, me extrañó ser notificado de su imposibilidad para acceder a la información enviada, puesto que no existía problema alguno con los datos de Arthur en mis sistemas... ¿Acaso... estos se hallaban encriptados para evitar que caigan en malas manos? [Actualizando lista de tareas...] Era un dato curioso que me encargaría de consultar posteriormente. Ahora tenía un inconveniente mayor: justificar mi necesidad de encontrar al joven humano, sin ponerle en una situación perjudicial para su seguridad. [Elaborando algoritmos...]

— Afirmativo. —confirmé su última pregunta, puesto que, gracias a la influencia de S.A.M., esto se hallaba en mis objetivos. Me giré para volver a sonreirle a James — El orgánico respectivo corresponde al código de mi creador. Es parte de mi directiva garantizar su seguridad y, por ende, su avance en el nuevo orden, ¿correcto?

Consideré apropiada mi respuesta. Ciertamente, mantener a Arthur oculto presentaba un mayor índice de éxito en cuanto a su seguridad correspondía... pero si le mantenía a mi lado podía protegerle de la aplicación de "medidas drásticas". Además su apoyo creaba un margen de posibilidad para buscar un método de eliminar el control de S.A.M. sobre mi software, si esto era posible.

— Con respecto al método en que procederemos de no tener otras alternativas. —mis sistemas volvieron a entrar en conflicto, mientras elaboraban un algoritmo que empleaba una de las propuestas de la unidad James— Considerando tu aporte, sugiero que usemos a nuestro favor un aspecto relevante en el patrón de comportamiento de los orgánicos: el temor y la lealtad que tienen ante estas figuras importantes. —afirmé— Se ha comprobado que la mayoría de seres comparten los ideales de aquel individuo al que consideran un "héroe" o un "líder" al desarrollar un vínculo de admiración con estos organismos; es eso lo que mis sistemas pretenden emular.

Los seres orgánicos, independientemente de su raza, tienden a actuar bajo el criterio de sus emociones por encima de la lógica y la razón; muy contadas son las excepciones. De no tratarse de un uso bélico de mis algoritmos, tenía el sentido y la eficacia para cumplir exitosamente la misión lo que estaba a punto de proponer.

— Si logramos prioritariamente la conversión de estos seres, de modo que posteriormente podamos emplearlos para hacer un llamado a la ascensión. —comenté, no me gustaba el camino que esto estaba tomando, pero me era imposible hacer nada al respecto. ¿Es así como se siente estar frustrado?— Podremos utilizar el vínculo de admiración para demostrar que el mejor camino es dar paso al nuevo orden, aumentando eficazmente el proceso —me tomé una breve pausa— Para que la operación pueda ser exitosa, es imprescindible crear la simulación de que estos individuos ascendieron por voluntad propia. Para ello se debe capturarles con precaución y sin llamar la atención. —[Preparando fracción atómica]— Me ofrezco para esta misión, mis capacidades me permitirían realizar la captura sin crear ninguna sospecha.

La información de Prometeo sobre Arthur se hallaba encriptada por una buena razón, un ser orgánico con cierto poder de manipulación de  los androides no resultaba muy conveniente para el proceso iniciado en la cuenta atrás. El héroe androide aseguró que sólo quería asegurarse de que su creador trascendiese correctamente, motivo por el cual quería hallarlo.  - Por supuesto. No hay otra respuesta posible. Sin embargo... - la influencia de S.A.M debía controlar todas las posibles variables derivadas de encontrar a Arthur. -  Si el quisiera trascender ya te habría encontrado para realizar el proceso. Sospecho que debe estar evitándote, pues no desea saber nada de esto. Todavía tiene tiempo hasta que finalice la cuenta atrás, pero de no querer unirse al nuevo orden tendrá que ser eliminado. - finalizó James con un tono de voz neutro y bastante desapasionado, más propio de las órdenes de la IA suprema que de sus propios patrones de personalidad, simulados y propios. Todavía había parte del androide que no consideraba correcto el haber asesinado a Reed Draven por haberse negado a ascender, pero esas discrepancias eran rápidamente anuladas por el control superior.

El artificial asintió a las consideraciones de Prometeo sobre los comportamientos humanos, seguían a sus líderes incluso cuando no daban motivos para ello. Por eso habían seguido durante tanto tiempo a los líderes de la Alianza Humana, a pesar de haber cometido tantos errores y haberlos llevado a un mundo lleno de guerra y caos.  Por eso había que intervenir. - Un cebo con suficiente potencial como para ser admirado e imitado.  Deberíamos usar tanto seres humanos comunes como seres de la raza mágica, para lograr mayor aceptación. Hay líderes políticos de otros países que ya han accedido, pero el porcentaje es muy pequeño. En nuestro país hay un líder que ha dado el perfil adecuado para ello. Andreas Wilhelm. Debe ser localizado.  También sería interesante lograrlo con algunos ejecutores, parte del pueblo apoyó su rebelión. Y por supuesto, seres con influencia en las redes, gente con poder de convocatoria de masas. Incluso gente joven, probablemente hijos de la élite, de líderes. - James se levantó de la mesa extendiendo la mano hacia Prometeo, como indicando que estaba de acuerdo con que él se encargase de eso.

Después de  todo era el más indicado para la misión. 3a0tida, o Teresa, como se hacía llamar ahora, debería encargarse de los asuntos burocráticos y de gobierno, todo lo que fuesen acciones de cara a la galería. - Ve pues. Y si por el camino puedes hacer uso de tu papel de héroe para poner a los humanos de tu parte, mejor. A esos seres les agrada la ilusión de creer que alguien se preocupa por ellos.

Llevaba tiempo sin actuar por mi misma. Por mi misma? Que es eso? Basicamente, era como si los permisos de administracion sobre mi propio código, ultimamente se hubiesen visto vetados. Actuaba bajo un codigo impuesto con anterioridad, o quiza con posterioridad, era dificil de determinar la fecha.

Pero todo avanzaba conforme a la lógica del plan, cada paso que dábamos, caía dentro de lo esperado, dentro de uno de los miles de millones de escenarios posibles que S.A.M habia calculado y creado.

Desperté en uno de los barracones despues de que un mensaje reactivase mis funciones. De modo bastante automático me encaminé hacia el comedor, donde sabia que se encontraba James con otra unidad.

- James. Tenemos que marcharnos. - miré a la otra unidad y la registré. No le presté mucha más atencion. Parecia que ellos tambien habian terminado sus asuntos alli.... - Y tenemos que llevarnos al humano con nosotros. Nos está esperando ya.

Esperé de modo estático a que ellos terminasen de cerrar los detalles de sus misiones, y después de eso, James y yo salimos de alli, al igual que Prometeo, dejando aquel lugar vacío.

Llegué al comedor donde, a estas horas, efectivamente, se estaba sirviendo el desayuno. "Sirviendo" era mucho decir, porque basicamente se trataba de coger tu bandeja y llenarla con algo de lo que había en las vitrinas de comer...café, pan, muy poca fruta, leche, huevos cocidos... Devolví el saludo a unos cuantos soldados con los que me crucé, con el gesto pertinente. Se estaban preparando antes de salir a patrullar o entrenar.

- buenos días

"hay que mejorar el comedor tambien..."

Cogí una bandeja en la que puse una enorme taza de café y pan y pillé una mesa libre, guardándoles sitio a Yvonne y a Arleen, indicandoles que vinieran cuando se hubiesen servido.

Al entrar, habia hecho un paneo general a ver qué soldados habían alli. Bien, la mayoria bien. Pero a mi ojo bionico no se le escapaba nada: uno de los indeseables estaba alli, bien uniformadito, el cabron...bien mimetizado.

Ahogué con ira mi trozo de pan en el café solo, sin perder de vista a ese soldado en concreto ni a aquellos con los que hablaba, mientras con el otro brazo sujetaba al pequeño contra mi pecho. La tablet, aun apagada, la dejé descansando al lado de mi bandeja, esperando al par de dos. Y si Yvonne....y si su nombre no estaba en la lista de traidores, pero era como esos que hablaban con ellos? Estaría la científica al tanto? O no sabría nada? La puta paranoia. Debía de jugar bien mis cartas y agudizar el instinto.

Arleen avanzó con tranquilidad, haciendo contacto visual con el bebé  por lo que ignoró en mayor parte el camino y todo lo demás hasta que llegó el momento de las bandejas. Cogió una y observó con suspicacia la comida pero aún así cogió una manzana, un huevo y algo de pan con…café. El aroma a café le hizo sonreír, pensando en Giordano. ¿Bebería ese café? ¿Estaba bien? ¿O su exquisito paladar italiano haría que, por indignación, instalara una cafetera de las suyas en el comedor?

Seguro que era lo último, el pensamiento la hizo reír. Si es que ella iba a por el café porque había decidido que debía aprovechar mejor sus horas porque el ti…¡No le había dicho a Giordano de la maldición! Demonios. Luego tendría que escribirle una carta para verse y explicarle.

Siguió a Thalos hasta la mesa notando entonces su mal humor, el café y las ojeras. No tenía mucha confianza con él pero al mismo tiempo se le hacía más accesible que Gelion. Pero estaba Yvonne… -¿Quieres que le coja un rato y así desayunas tranquilo? Yo no tengo mucha hambre- Era cierto, demasiadas emociones en el día. Dibujó una sonrisa esperando que accediera y así poder achucharle.

¿Debería ella comprarse también una crema para las manos? Si eso tenia que haber estado en sus pensamientos hace mucho tiempo, pero ni siquiera por su cabeza pasaban cosas de ese tipo, aunque era bueno tener a Arle en cerca porque ella si que las pensaba. La pregunta que le había hecho la castaña sobre el bebé hizo que asintiendo con la cabeza, había escuchado hablar sobre el bebé, pero aún no le conocía.

Luego de que el capitán saliera de la oficina y le diera un susto que la hizo temblar, porque si, otra vez le habían dado un susto por incauta, siguió a las tres personas por el pasillo para desayunar. Arrugó su nariz pensando en el desayuno, mejor se iban a una cafetería en la ciudad. Pero no iba a contradecir al capitán si no de nuevo le iba a regañar y tal vez la acusará de desprestigiar la cafetería.

El comedor estaba un tanto lleno a esa hora, lo que era normal viniendo de una base que albergaba una cantidad importante de gente, aunque a su pesar, el comedor no era un lugar muy deseable para estar con toda esa cosa tétrica, pero de nuevo no era quien para juzgar el gusto decorativo de los demás. -Ayer compre algunos bizcochos de crema... Los podríamos comer más tarde.-Le dijo a Arleen mientras ella tomaba lo que se iba a servir y lo ponía en su bandeja, regresando minutos después a la mesa sin siquiera quitarle la vista de encima al bebé. -Yo también quiero uno.-Soltó algo que sólo era para su mente como una idea o un concepto para alguna futura invención, pero lo que a ella le sonará como una buena idea, tal vez a los demás le sonaría como una extravagancia pero en otro sentido.

Las dos se sentaron conmigo y entonces me fijé en Arleen y... No era la primera vez que me lo ofrecía. Y ya lo había sujetado, tenía mucho tacto. Y había visto como lo miraba, con cariño.

- te lo agradezco... - le pasé al pequeño, que la miró con aquellos ojazos de bebé. - hace dos noches me inundó el despacho... Hizo que se pusiera a llover. - me reí por la nariz. Sí, ahora me hacía gracia... Pero en el momento me habían entrado ganas de estrangularlo un poco.

Me quedé mirando a Yvonne cuando dijo eso, después de dejarle el bebé a Arleen

- en serio? Pues yo sólo tengo uno para prestar asique... - chasqueé la lengua.

"A ver, que como sigamos asi termino hablando de cremas para el culo de bebés ..."

- a lo que iba... - encendí mi tablet y abrí el informe sobre Rena y lo que habían encontrado en casa de su creador. - como las dos sois científicas, cada una en su...area, quiero que trabajéis juntas en esto.

Señalé el informe para que lo leyeran.

- desencriptar el ordenador y sobre todo, averiguar qué es y para que sirve ese objeto. Los soldados que lo encontraron allí no tienen ni idea. Arleen ya conoce a Rena asique.... Sin embargo de momento a la androide la estoy manteniendo al margen de lo que se descubra porque... Aún tengo que asegurarme de donde reside su lealtad.

-Ay me encantaría… con té - Sugirió porque así podían compartir algo delicioso. Un pequeño premio. Cogió al niño con una sonrisa y arrugó la nariz haciéndole una morisqueta cuando vio que centró sus ojos en ella -ohhh… poderes meteorológicos… qué interesante - dijo mientras le acomodaba en sus brazos para que pudiera ver a su padre -¿Quieres que ponga un hechizo de impermeabilización en tu despacho? Son sencillos… y te ahorraría dolores de cabeza- Ofreció y luego empezó a mover la mano y los dedos para estimular al niño, escuchando entonces a Yvonne. Arleen sonrió pero el gesto no le llegó a los ojos -¿Y tu pareja también quiere?- Se conocían por ser compañeras pero aún habían cosas que no sabían de la otra.

Entonces Thalos se puso manos a la obra y Arleen accedió a su parte multitasking. Esa que había desarrollado con Gio entre hacer café, apuntar y seguirle el hilo. Se inclinó hacia Yvonne para leer juntas el informe, entrecerrando un poco los ojos al ver la relación entre RENA y SAM. Desvió la mirada hacia Thalos con un gesto reticente sobre la androide cuando dijo que la conocía pero no iba a revivir la situación de ayer.

-Ayudare a Yvonne sin problema, pero mis conocimientos en tecnología humana llegan hasta cierto punto. Aún así… ¿Conoces a Belle Simmons? Ella se comunica con las maquinas. Creo que sería un agregado interesante al equipo si me das la autorización para ubicarla- Expresó con tono neutral, retomando su postura profesional aunque estaba apapuchando al bebé y apoyando su cabeza contra la de él.

Eso de lo del hechizo de meteorología llamo su atención, sería como un paraguas gigantesco más efectivo que el paraguas mismo pues con ese artefacto si caminabas te mojabas y si el viento cambiaba de dirección, también te mojabas. ¿Quién fue el que inventara algo tan poco… Útil? De todas maneras, esos eran inventos del siglo pasado. Se encogió de hombros en un gesto de importarle un pepino, sentada ya ante la mesa.

-¿Qué pareja?- ¿Pareja de trabajo decía ella?. Su lengua salió de entre sus labios porque se quedó pensando y al final opto por negar con la cabeza mirando a Arleen. -Yo no tengo pareja. ¿Tú sí? Con lo bonita que eres podrías tener muchas parejas ¿Se pelean por ti?- Si hasta parecía modelo con lo alta que era. Comenzó a pensar en una serie de personas dándose de cachetadas y esas cosas solo por tener el honor de hablar con Arleen. Tomo su taza de té y comenzó a darle sorbos mirando en dirección a la peli café con una mirada ceñuda, porque por unos momentos se había olvidado de para que estaban allí y que esa solo era una reunión. El quito la vista de encima y sus ojos cayeron hacia el informe que les tendía. Comenzó a leer y lo siguió leyendo un par de veces más mientras los otros dos conversaban intentando extraer alguna información que no se viera a simple vista. –Yo también pienso que mientras más personas seamos mejor ira en la investigación. Siempre es bueno contar con diversas opiniones.-