Calles de Bastion Hollow

Quedo completamente paralizado y prácticamente sin respiración durante segundos que se me hacen eternos, escuchando algo lejanos los gritos de Ellyos diciendo mi nombre. Él es quien se encarga de sacarme el filo que el centinela me clavado por la espalda, liberándome del maldito ensartamiento a traición. Por  fin consigo emitir algún sonido, dejando escapar un grito ahogado mientras caigo de rodillas al suelo. Apoyo una mano en el suelo para no caerme hacia un lado, mientras me llevo la otra mano al pecho para presionar la herida que ha aparecido por la parte delantera, intentando bloquear la hemorragia. Cierro los ojos, maldiciendo por lo bajo con los dientes apretados por el dolor. Si hubiese ido al otro lado del pecho, al corazón, probablemente estaría muerto.

Todo ha pasado tan deprisa que parece como si una maldita película estuviese pasando delante de mis ojos, como un mero espectador que no puede intervenir en ella. La furia de Ellyos y sus poderes descontrolados forman parte de la película, al igual que los gritos de Victorya pidiéndole que se controle.  Si seguimos así la misión fracasará, y toda la huida y la pelea habrán sido para nada. Intento ponerme en pie y  decirles eso, pero no consigo llegar a tiempo. Lo único que logro es echar el cuerpo a tierra y cubrirme la cabeza para evitar recibir todos los disparos que vienen de la metralleta del brazo del robot. Conjuro también una débil barrera mágica que no es suficiente para evitar acabar herido por la metralla en diversas partes del cuerpo. Quedo tendido en el suelo boca abajo, sin apenas poder moverme y a punto de perder el conocimiento, aunque sí llego a tiempo a escuchar la fatídica frase del centinela. Yo ya sé lo que pasa cuando dicen eso, pues lo he visto otras veces. Es lo que dicen algunos antes de autodestruirse, así que trato de avisar a mis compañeros para que sepan lo que viene y podamos alejarnos antes de que suceda.

- Corred...va a explotar...-alzo la voz todo lo que puedo, pero por desgracia el mecanismo de detonación es más rápido de lo que creía. El sonido de la explosión y salir por los aires es lo último que consigo recordar antes de caer  inconsciente por algún lado de la ruinosa calle en la que nos encontramos.

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def. física

dado 20 + 8 stat defensa mágica=28

daño: 55 + 40= 95; 95-28=67

PS: 110 -67= 43- 5 (sangrado)= 38

El miembro 'Johan Black' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Defensa Mágica' :

Vuelo durante algo más de una hora hasta que consigo alcanzar zona segura, lejos de las salvajes pretensiones de la Alianza. Transporto en mis fauces al dragón negro (en su forma humana) que he conseguido rescatar antes de que ese ejecutor humano acabase con su vida, aunque éste sigue inconsciente a consecuencia de las múltiples heridas sufridas. Durante el trayecto sigo rumiando eso que dijo el humano sobre el dragón acerca de que había matado a su familia. Si es cierto me niego a creer que fuese por voluntad propia. Quién sabe qué perversiones pueden haberle llegado a hacer para que sucediese algo así, si es que realmente sucedió. Cuando despierte y se recupere tendremos mucho de lo que hablar. Y si consigo reunir a los dispersos dragones podremos volver a formar la manada que un día fuimos, suficientemente fuertes para despertar el terror tanto en humanos como en magos.

Comienzo a descender al acercarme al abandonado pueblo de Bastion Hollow, volando en círculos mientras busco lugar para aterrizar. El sonido de una explosión llega a mis oídos, aunque a esta distancia no llega a afectarme. Voy acercándome al fuego proveniente de un montón de chatarra, aterrizando muy cerca del lugar en el que acaba de explotar el monstruo metálico. Deposito a Erebo en el suelo, localizando a posibles enemigos en la zona antes de moverme del sitio. Distingo el aroma de uno de mi especie, y otro de los magos que hay por ahí herido también me resulta familiar,  y especialmente non grato. Rujo furiosamente porque no me agrada su presencia aquí, demasiado tiempo como enemigos en este lugar, sobre todo porque los suyos siempre molestaron a mi grupo de dragones, a mi familia.

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PS: 123 -5 (sangrado)= 118 + 10 piedra regeneradora= 128

5 dados + 17 base + 25 dragon = 47 Defensa (anula el daño)
0 dados + 10 habilidad = 10 Curación para Johan
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Johan está muy débil y dolido, intenta defenderse de una ráfaga de disparos que le da el Centinela antes de morir mientras estoy golpeándolo. De repente suelta una extraña frase y Johan grita de que va a explotar, me separo un poco de él y me preparo para lo peor, endureciendo mis escamas, por suerte, a pesar de la onda expansiva de la explosión y toda la metralla metálica que desprende al explotar, mis duras escamas aguantan y no me pasa nada. Pero Johan había caido lejos y estaba inconsciente, llorando y llamándolo por su nombre, lo recogí con cuidado entre mis garras, con cuidado acaricié sus cabellos, apartando algunos de su cara, mientras el viento furioso a mi alrededor movía mi larga melena negra. El viento poco a poco se fue calmando y la temperatura fue recobrando su estado normal, hasta convertirse todo en una suave brisa a mi alrededor, como si fuera capaz de entender mis sentimientos y se acompasara a ellos.

Empecé a reunir viento entre mis garras e hice que Johan levitara entre ellas y lo rodeé con una esfera de vientos curativos, mientras cerraba los ojos, de los cuales alguna pequeña lágrima caía mientras recitaba unas oraciones en el idioma de los dragones, rezando internamente para que se pusiera bien y mi curación le ayudase. Llevaba un buen rato así que ni me di de cuenta de que había aparecido un dragón en las cercanías hasta que gritó enfadado, me asusté, después de todo su voz sonaba a la de un dragón adulto y si gritaba enfadado nada bueno podía traer. Intenté contestar, un poco por marcar terreno, aunque no creo que mi grito sonase muy... territorial o bravo, sino más bien de un dragón intentando defender lo suyo pero con miedo.

El miembro 'Ellyos Kakumei' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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#1 'Defensa Física' :


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#2 'Curación' :

Invocó un escudo lo más rápido que pudo cuando escuchó a Johan gritar sobre la presunta explosión del centinela, pero no alcanzó del todo a quitarse el ataque. Una ligera quemadura alcanzó su mano, que no tardó mucho en quedar chamuscada con las cenizas que caían del cielo tras la explosión. Lo que sí fue que sus oídos quedaron ligeramente sordos, y cuando trató de levantarse cayó un par de veces por culpa del mareo que se había formado por el pitido agudo en ambos de sus oídos.

La calma no dudaría mucho. Después de todo, el centinela había llamado por refuerzos. No esperaría a que otro más apareciera, pues entonces no se podrían desaparecer y el asunto estaría perdido.- ¡Ellyos, vámonos! - Le gritó mientras corría a Johan. Pero no tardó en entornar los ojos cuando vio lo que ocurría. En vez de irse de ahí, el dragón se estaba poniendo a curarlo ahí mismo, y peor aún, estaban demasiado altos como para alcanzarlos y llevárselos a la mala. Su punto máximo de estrés llegó cuando un dragón más, uno negro, llegó a la escena. Y todo mundo sabe que los dragones negros no se llevan con nadie.

¡Carajo, Ellyos, vámonos de aqui! - Dijo sentándose en una roca por ahí. Después de todo, se sentía bastante inútil contra un par de dragones gigantescos que iban a destruir el mundo a su paso. Se mantuvo alerta para largarse sola en el instante en que otro centinela hiciera acto de presencia. Cogió su bolsa y sacó de ella una bufanda, que haría las veces de venda para su herida. Y cuando la quiso poner, se arrepintió por si esta se pegaba a la piel y después era más difícil quitarla.

Resopló molesta de que estuviera un dragón gigante a punto de matarlos y comérselos a todos y de que más centinelas pudieran estar en camino. Sobre todo después de ver que era difícil poderlos coger intactos para revisar los planos con ellos. Y más aún, le molestaba que ahora la misión de sacar información de la Alianza se estuviera convirtiendo en un concurso de dragones al que no tenía muchas ganas de asistir por si se chalaban y les daba por quemarlo todo a su paso.

Def: 15 dado + 14 def mag + 5 canalizador = 34
Daño 40
Daño = 150 - 40 + 34 = 144ps

El miembro 'Victorya Blanc' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Defensa Mágica' :

No soy consciente de que Ellyos en su forma de dragón se ha acercado para ayudarme hasta que los efectos de su sanación consiguen reanimarme un poco, deteniendo al menos el sangrado de mis heridas. Al abrir los ojos distingo a duras penas la figura de un dragón, pero poco más. Tampoco escucho demasiado bien, me pitan los oídos por culpa de las explosión y todo el sonido está distorsionado. Trato de ubicarme y de darme cuenta de lo que ha pasado, recordando lo sucedido hace apenas unos minutos. El destrozado centinela se autodestruyó y saltó por los aires, después sólo hubo silencio. - Ellyos...Victorya...¿estáis bien? - a él lo escucho responder a una especie de rugido mucho mayor que el suyo, a Victorya pedirle desesperadamente que nos larguemos de aquí. Al enfocar mejor la vista consigo dar con el ser que emitía ese sonido de bestia enorme, creyendo reconocer al causante. Smaug, el dragón que durante años me hizo pensar que los dragones eran seres peligrosos y soberbios, codiciosos hasta decir basta. El mismo que me enseñó que para ellos no éramos más que seres inferiores a devorar o abatir. Había hecho mucho daño a mi concepción sobre los dragones.

- No, Ellyos, no. - trato de espabilarme un poco más, haciendo un esfuerzo por incorporarme y ponerme en pie, apoyándome con la palma de la mano en su costado. - Es mejor que no lo enfrentes...es muy agresivo. Victorya tiene razón, tenemos que irnos a casa. Allí estaremos a salvo y podremos recuperarnos. Ya tenemos lo que queríamos. - me llama la atención que parece estar devorando a alguien, alguien que tiene a los pies. Tampoco podemos largarnos y dejarlo ahí, pero dudo que Smaug quiera darnos a su presa por las buenas. - ¡Smaug! no buscamos pelea...y tú no deberías buscarla con alguien de tu especie. Suelta a ese hombre y deja que nos lo llevemos para curarlo. Ellyos puede sanar, deja que se acerque y lo reviva un poco. Después cada uno seguiremos nuestro camino. - el esfuerzo de hablar en voz alta hace que cada vez me note más ahogado por culpa de la herida del pecho, que sigue sin sanar del todo aunque Ellyos haya hecho los primeros auxilios. Le hago un gesto a mi amigo para que haga el amago de acercarse a curar al otro, al menos de hacerle recobrar el conocimiento. También le hago un gesto a Victorya para que se acerque a mí, pues es preferible que estemos todos juntos en caso de que sea necesaria una desaparición de emergencia. - ¿Lo tienes todavía, verdad? necesitamos esos planos por los que nos la hemos jugado...- pregunto esperando que no se hayan perdido en la explosión, y que no se hayan estropeado.



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PS: 38 + 10 curación de Ellyos =48

Suelto un rugido mucho más fuerte que el anterior para marcar mi territorio y superioridad frente al joven dragón que se atreve a desafiarme. También avanzo peligrosamente hacia el grupo, dejando atrás a Erebo por unos momentos. - Dragón ingenuo...¿crees que puedes enfrentarte a mi? enfrentarte a uno de tu especie por proteger a uno de esos magos asesinos. - sí, necesito que sepa lo que han hecho este grupo, los renegados. Dirijo una salvaje y furiosa mirada hacia Johan y después hacia Victorya, a la cual no recuerdo, pero seguro que también pertenece a este maldito grupo. - Los renegados atacaron los nidos de las crías de dragón en Bastion Hollow. Mataron y saquearon nidos. Piénsatelo dos veces antes de defenderlos. - me niego a escuchar a Johan en cuanto se pone a hablarme, menos todavía si decide darme órdenes como entregarle al dragón que llevo conmigo. No me hace falta que me ayuden, puedo curarlo yo. Expulso humo por la nariz en señal de enfado, alzando la pata delantera para descargar un zarpazo contra el mago insolente.

- ¡Cállate! yo me encargaré de ayudar a este dragón. Lo perseguía la Alianza, ¿qué habéis hecho vosotros por defenderlo? Sólo os preocupáis por vosotros mismos...egoístas, como siempre. - el siguiente ataque será para Victorya, en caso de que no se larguen. La cruel mirada que le lanzo lo dice todo. No toleraré más salidas de tono. Regreso junto con Erebo, agachándome para que mi pecho quede bastante cerca de él. La luz de la joya incrustrada en mi pecho lo envuelve por completo, adoptando tonalidades violáceas mientras inicia el proceso de sanación. Necesito que despierte antes de que sea demasiado tarde, me importa bien poco que los estorbos que me he encontrado en las calles quieran impedirlo. No les cederé al dragón para que lo corrompan. Es más... - Joven dragón. -  me dirijo obviamente a Ellyos, me da igual si se ha enfadado por el ataque a su amigo o si pretende atacarme. -Los de nuestra especie debemos estar unidos. Ven con nosotros. Puede ser de forma voluntaria...o de forma obligada. - ordeno con voz potente y grave, de manera imperativa. No sabe lo que quiere, por eso necesita que yo se lo descubra. - Si vienes con nosotros, dejaré este lugar y a tus amigos. Si te niegas demostrarás ser un traidor a nuestra ancestral raza, serán un enemigo más, y no os dejaré marcharos de aquí tan fácilmente.

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Curación a Erebo

20 dado + 10 hab. ficha= 30

Ataque físico a Johan

15 dado + 10 hab. de ficha (veneno)+ 15 stat ataque físico + 25 forma dragón=  65

PS: 128 + 10 regeneración piedra= 138

El miembro 'Smaug' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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#1 'Curación' :


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#2 'Ataque Físico' :

30 dados + 17 base + 25 dragon = 72 de defensa para Johan, anula el daño
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Johan me dice que tenemos que escapar, que el otro dragón es demasiado peligroso, aunque cuando vio que traía a alguien herido, intento hacer el amago, pero enseguida soy increpado por el otro dragón que incluso me intenta hacer dudar de la bondad de Johan diciendome que los suyos han asesinado a dragones y a crias y saquearon nidos. No me lo puedo creer, Johan es bueno... eso algún desobediente lo tuvo que hacer. Veo como Smaug se prepara para darle un zarpazo a Johan porque no quiere oirlo, rápidamente protejo a Johan con mi cuerpo, endureciendo las escamas e impidiendo que le haga daño.

- Johan es bueno, Johan ayudará a todos, no tienes derecho a llamarte la voz de los dragones porque representas todo lo que odiamos de las demás razas... Los dragones deben defender a los débiles, el Universo es sabio, él nos ayudará, pero si le desobedecemos, todo el daño que hagamos nos lo devolverá por duplicado. Smaug tu alma esta manchada, tu ya no eres un dragón, eres un maldito, el poder existe para servir, no para dominar sobre los demas, malditos y corruptos son los que lo usan contra sus hermanos, estarán manchados y nunca tendrán paz ni en esta vida ni en la siguiente...

Es cierto, tengo miedo, pero no puedo dejar que alguien a sus anchas haga daño sin más en una encrucijada gobernada por la vanidad. Durante la historia, muchas veces los humanos hicieron barbaridades y estupideces en nombre de un dios que ni siquiera quería eso, nunca seremos mejores que aquellos si seguimos repitiendo lo mismo, seremos iguales o peores. El viento a mi alrededor se arremolina, como empujandome mientras empiezo a levantar el vuelo, recogo a Johan y a Victorya en mis garras.

- Nunca podrás ayudar a los dragones si eres igual o peor que los que pretendes vencer. Para vencer a un monstruo no debes convertirte en uno. Y nunca jamás como dragón sanado alzaré mi mano contra nadie, yo debo de proteger la vida, no segarla, jamás seguiré a nadie, sólo el viento marca mi camino y su voz me guiará...

Empiezo a batir fuertemente las alas y levanto el vuelo para alejarme de allí y dejar en lugar seguro a Johan y Victorya en el castillo y así poderme centrar en curar las heridas de Johan.

El miembro 'Ellyos Kakumei' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Defensa Física' :

0 + 30 = 30 PS
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No había sido consciente de cuando Smaug me recogió entre sus fauces y me llevó fuera del lugar al que había escapado, ni siquiera de cuando me había depositado en el suelo y todo el revuelo que causó en las calles de Bastión Hollow. Pronto mi cuerpo sintió la calidez de la vida de nuevo cuando me empezó a curar. Al principio mi cuerpo se empezó a mover un poco y yo a respirar torpemente, por no decir gimoteando del dolor que tenía encima. Empiezo a toser, al principio me siento un poco ahogado y acabo tirado en el suelo boca arriba, empiezo a abrir los ojos y veo una borrosa figura negra con una joya brillante incrustada en el pecho, cuando consigo recuperar gran parte de la visión, observo que es el dragón que apareció cuando Jed me estaba apresando.

- Tsk... tu otra vez... - me siento decepcionado conmigo mismo por que otro dragón tuviera que salvarme - Gracias, supongo...

Me incorporo un poco y me quedo sentado en el suelo tratando de recuperar fuerzas y la memoria de lo sucedido. Tengo pequeños flashes de la pelea contra Jed y su estúpida pistola de mierda... En otras condiciones hubiera violado su agujero de putona estrecha con mi poder, puto cobarde de mierda... ¡Dios! Me enciendo de ira de solo pensarlo, la próxima vez que lo vea le haré saber lo que es un dragón enfadado, además de rescatar a Bram.

- ¡Puto Jed! En cuanto me libre de este estúpido chip, te haré saber lo que es un dragón enfadado, como si tengo que hacer que la tierra se trague todas las ciudades hasta encontrarte...

El joven e ingenuo dragón me suelta un discurso digno de uno de esos paladines del pasado de los que he devorado por decenas, resultándome repulsivalemente bondadoso y blando. Está muy engañado, y lo peor de todo es que se ha atrevido a desafiarme, evitando que el mago resulte herido y marchándose de allí con ellos para ponerlos a salvo. - ¡ Has elegido mal tu bando y te has puesto en contra de tu raza! ¡Ellos nos atacaron sin piedad! - vocifero mientras huye volando de manera cobarde, gruñendo después al dragón negro recién despertado. Va a necesitar muchas más curaciones y me va a llevar tiempo hacerlo, así que tendremos que quedarnos aquí por lo menos media hora más. Al menos esta vez es agradecido conmigo por haberle salvado, aunque sea a regañadientes.

- Espero que no seas como el otro dragón, blando, pusilánime y traidor a su raza. Se ha ido con los que no debía. Permanece conmigo y te ayudaré a vengarte de la Alianza, a encontrar tu lugar entre los tuyos. - al decir que tiene un chip comprendo que trabajaba para los sucios humanos, que obligan a los seres mágicos a ser sus esclavos y bestias de carga. Yo no puedo ayudarle a quitárselo o le arrancaré el cuello de un mordisco, y mientras lo tenga le perseguirán. El lugar en el que está el chip es de dominio público, pues salió publicado en un periódico de la Alianza, como solución para erradicar la magia de manera "voluntaria".

- Puedo sanarte un poco más, lo suficiente para que puedas moverte. Pero no puedo ayudarte con lo que tienes metido, si no quieres que te destroce. Hay un mago que no es de esos malditos renegados, uno con el que hice un pacto para localizar y ayudar a los dragones. Su nombre es Setelah Barrett. Búscalo, él tal vez pueda ayudarte con eso. No confíes en los renegados, matan a los nuestros y roban a las crías de sus nidos. - cuando se recupere un poco más le preguntaré por aquello que dijo el humano de las calles, algo que de ser cierto sería una gran traición de sangre por parte del dragón rescatado. No comprendo cómo uno puede matar a su propia familia, o qué clase de ser haría eso y por qué.

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0 dado + 10 hab.= 10 para Erebo
PS:138 + 10 regeneración piedra= 148

El miembro 'Smaug' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Curación' :

30 + 10 Curación = 40 PS
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El dragón que me rescató parece que ha tenido un mal momento con otro y me vuelve a sanar de nuevo, pocoa poco me voy poniendo en pie, lo más gracioso es el chiste que me suelta sobre unirme a él y buscar mi sitio entre el resto de dragones, en primer lugar no necesito la ayuda de nadie para vengarme del capullo de Jed y en segundo lugar, todos los dragones que he conocido son unos capullos a los que odio, a mi edad no me apetece hacer de niñera.

- Si los dragones necesitan la ayuda de un dragón anciano, que se la ganen, durante más de mil años ningún dragón me ha ayudado y no dudaré en destruir otro dragón que se meta en mi camino, no tengo ni lugar entre los nuestros ni en el de nadie. La única persona que me importa está atrapada por la Alianza, él fue quién me ayudó a escapar.

Me comenta que para librarme del chip busque a un mago llamado Setelah, que no es del bando de los Renegados, parece que tiene una historia con ellos porque les guarda mucho rencor, por mi como si los mataba a todos... Aunque me quite el chip dudo que la Alianza se rinda tan fácilmente en mi búsqueda y captura, además de que necesito buscar la manera de poder salvar a Bram.

- ¿Y cómo es tu mago, además de estar loco por ser amigo tuyo? Dame al menos una descripción física para saber a quién busco o dónde buscarlo. No puedo volar, así que reducir los lugares donde buscar sería una ayuda.

Erebo me da a entender que él es mucho más longevo que yo, cosa que en principio me resulta extraña. Pensaba que los dragones más mayores habían sido asesinados y cazados hace tiempo, cuesta encontrar ejemplares que lleguen a los mil años. La inquina que tiene hacia los dragones también me resulta de lo más extraña. - No sé qué te sucedió en el pasado para tener ese odio hacia tus hermanos de raza, y desde luego sería detestable que realmente hubieses cometido los crímenes de los que te causó el humano. Simplemente no has tenido la suerte de cruzarte con la gente adecuada, pues es muy triste que tu único apoyo se encuentre entre esos asesinos de la Alianza. - el dragón negro que he rescatado parece que también lo es, así que tengo sentimientos encontrados con él. Por un lado quisiera apoyarlo porque pertenece a mi raza, se supone que debemos de protegernos y ayudarnos entre nosotros. Por otro lado me crea bastante rechazo que desprecie de ese modo a los suyos, y que los dañase en el pasado.

No voy a atacarlo porque para algo lo he salvado, pero tampoco voy a prestarle más ayuda porque no quiere ser ayudado. De todos modos utilizo mis poderes de sanación sobre él durante unos minutos más, lo justo para que pueda valerse por sí mismo y pueda andar. También le diré cómo puede encontrar a Setelah, si es que puede, que yo llevo buscándolo meses sin éxito. Gruño cuando le pone el nombre de amigo, no es tal, en mi opinión. - ¡No es un amigo! es un subordinado con el que he tenido más encontronazos de la cuenta y ha conseguido que me digne a enseñarle parte de la sabiduría de los dragones. A cambio él ha prometido hacer todo lo posible por volver a conseguir que nuestro reinado sea próspero. Lleva tiempo desaparecido, tendrás suerte si lo encuentras. Si no lo encuentras tendrás que mendigar ayuda a otro, eso si la Alianza no te caza antes. El mago viste estrafalario, de colores chillones. Su cabello es oscuro y lleva tatuajes en la cara. Suele ir acompañado de loros.



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10 dado + 10 hab.= 20 para Erebo
PS: 148 + 10 piedra regeneradora= 158 , 150, PS completo

El miembro 'Smaug' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Curación' :

40 + 20 curación = 60 PS
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- Que más da, tu nunca me entenderías y ni tampoco te importaría - suspiro cansado - Mi propia familia, mi propio clan me repudió, ¿porqué? Porque no quería seguir sus ancestrales tradiciones, yo era el primogénito y debía continuar la especie, pero yo era feliz con otro dragón. Así que me repudiaron y el día en que mi hermano iba a hacer su ritual de madurez le dijeron que debía matarme para demostrar su valía al clan y asi coronarse. Todos querían verme muerto, incluso el dragón que amaba me traicionó. Así que maté a mi hermano, luego a mi padre por tratar de humillarme y después a mi madre porque prefería no haberme engendrado y humillarme aún más. después me fui de aquella panda de dragones asustados y antes de irme vino mi amante a pedirme perdón, pero no quería que le pasara lo mismo a su familia lo que le paso a la mía de tener que repudiarme, así que lo deje llorando en su estupidez y me largué.

No entiendo que clase de estúpida idea se le ha metido a este dragón en la cabeza que casi se ha proclamado como un paladín de la causa de los dragones, está todo loco, y más si crée que nadie va a ser su sirviente. Cuando me dice quien es su"sirviente" me empiezo a reir por la ironía del asunto.

- Tu "sirviente" casi lo mato mientras estaba poseido por un demonio y atacaba al grito de los renegados, no se si sigue vivo o poseido o con estupidez renegada.

Intensifico un poco más el aura curativa alrededor de Erebo, creyendo que ya es suficiente como para que pueda salir de aquí por su propio pie. Aún le falta un poco para recuperarse, pero no permaneceré aquí mucho más tiempo. Ya he cumplido con salvarlo de una muerte segura contra ese soldado salvaje, al menos he contribuido a que no haya uno menos de mi especie. Me separo de él al cesar la canalización de energía sanadora, volviendo a erguirme en toda mi estatura. Dejo escapar el humo por la nariz al escuchar eso de que yo no lo entendería ni me importa, haciendo un sonido como de indignación. - Para ser un dragón mucho más longevo suenas igual que un adolescente que se queja de que el mundo no lo comprende. Deja de compadecerte y aprovecha las oportunidades que te ofrecen. - replico con mi cavernosa voz, permaneciendo en una pose hierática mientras narra su pasado. Por lo visto fue todo por una cuestión de descendencia, al estar él con un dragón macho y no poder proporcionarla. Lo comparo con mi historia, que perdí a mi familia a manos de los humanos, sin poder evitar recordar todo aquel dolor. Me avergüenza lo que hizo esa familia, unos y otros. Son una deshonra para la especie. Podemos pelear entre nosotros, pero atentar contra la propia familia es detestable.

- Todos cometisteis errores. Ellos los primeros por querer derramar sangre de la familia, tú por hacer lo mismo que ellos querían hacer. Y tu amante cobarde ni siquiera merecía la pena. Hubiese sido más fácil exiliarse. Que todos fuesen estúpidos no es razón para que rechaces a los demás dragones, no hay que rechazar a aliados potenciales. - poco más creo que pueda decirle, dudo que le haga cambiar de opinión, pues está muy cerrado por ahora. Le dejaré seguir su camino, tal vez nos volvamos a encontrar en algún momento. Mis ojos se estrechan como rendijas al escuchar lo de Setelah, comprendiendo ahora por qué no daba señales de vida. Poseído y haciendo estupideces, siempre metido en problemas. - Lo encontraré. Veremos quién lo consigue antes...si tú o yo. Que alguien con manos te arranque esa cosa del cuello cuanto antes, yo no pienso adoptar la forma humana para hacerlo. - muy raras veces lo he hecho y desde luego no pienso hacerlo para esto. Dicho esto me doy media vuelta, alzando la cabeza con aire orgulloso. Bato las alas un par de veces antes de alzar el vuelo, alejándome de Bastion Hollow para seguir con mi búsqueda.


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curación: 20 dado + 10 hab= 30 para Erebo