Sala de reuniones generales {25.07.15 16:17}

Sala de reuniones generales {25.07.15 16:17}

Recuerdo del primer mensaje :

Sala de reuniones generales - Página 6 Sala_r10

Cuando Los Descendientes deben dar un comunicado a la sociedad mágica de la isla reúnen a todos en este salón.

Re: Sala de reuniones generales {17.02.19 2:40}

La miro con cariño al escucharla decir eso en tono vergonzoso, dándole un pequeño meneo con el hombro. - ¡Claro que eres reivindicativa!. A tu manera siempre lo has sido. Poca gente se hubiese jugado el trabajo e incluso la vida por ayudar a la Resistencia, curándoles y dándoles medicinas. Por eso te acabaron pillando y acabaste siendo una de los nuestros. - rememoro con orgullo y admiración por no haberse apartado, por no haber tomado el camino fácil. También es cierto que venirse con nosotros le acabó trayendo muchos problemas. Se me pasa por la cabeza que casi todos los problemas en nuestro matrimonio han venido por eso, porque siempre acabábamos discutiendo por lo mismo. Me quedo algo serio mientras miro la copa vacía en la mano, guardándome la pregunta que quisiera hacer.

El tema del alquimista me da la oportunidad de obviar la pregunta por el momento, asintiendo a lo de estar agradecido. - Mentiría si dijese que no le debes la vida. No sé si mi solución habría llegado a tiempo. - no se lo dije en su día, y tampoco después. No sabe lo que vio Lyran aquella noche. - Pero Tobías me dejó muy claro que lo hacía para que le debiese un favor. Sólo lo hizo por ego propio, y por eso, para que estuviese en deuda con él y no le atacásemos. - sus fechorías siguieron después de eso, y puede que hubiésemos evitado lo de los satélites si le hubiésemos parado a tiempo. Todo está conectado de algún modo. Ahora ni siquiera sabemos dónde para, tras el ataque al castillo Le Fay.

La insoportable Adele viene hasta donde estamos para empezar a molestar sin sentido alguno, aludiendo a lo que pasó hace años en aquel baile de máscaras. - ¿No te cansas de repetir siempre lo mismo? es imposible que podamos trabajar con vosotros, ni ahora ni nunca. No sólo no pedís perdón por lo que hicisteis en el pasado, sino que seguís con las mismas ideas arcaicas que no van a ningún lado. Por eso acabó cayendo el Ministerio...ya no daba más de sí. - gruño cabreado cuando hace lo de la copa, me da igual que se caiga al suelo y se rompa, pero no soporto los aires que se da. Ya había propuesto antes a Josephine que fuese a hablar con Juliet, pero ahora lo hace con más motivo, al ver que Adele se ha ido a molestarlos a ellos. Sigo a Josephine por si la situación se descontrola, que en las fiestas ya me espero lo peor, aunque por ahora no parece que la cosa vaya a más. Le dejo su espacio mientras que habla con la pelirroja, yendo yo también a por bebida junto a Reiv, empezando a escuchar a Jack y su propuesta para nuevo linaje.

Re: Sala de reuniones generales {17.02.19 17:31}

La ceguera de Sean me toma por sorpresa, con lo que es justo decir que yo tampoco los visito muy a menudo.Agradezco a Lucio la información.- Yo hablando de que no me visitan y mira, no soy capaz de corresponder la intención.- Mencioné tomando a Sean de las manos, acercándome un tanto. Quizás lo que me había delatado era el aroma, así al menos le serviría para desarrollar su catálogo.- Justo le hablaba a Lucio de mi última investigación. Ya verás que todo irá bien. Saldremos de esta.- Tras lo último, le suelto y vuelvo a tomar el brazo de Lucio, visiblemente afligida por las últimas noticias y por lo que la guerra hace a los amigos. Dejé que hablaran de linajes y discutieran sus posibilidades. Había mucho que considerar, después de todo, sería una noche de fortalecer el consejo o de debilitarlo.

La atención se divide entre la llegada de Sarah, bien recibida por el grupo, y el inicio de la ceremonia con Jack parándose en lo alto de las escaleras. Le añadía el toque dramático eso de esperar en silencio a que todos se callasen. Suelto a Lucio por un momento cuando Jack comienza a hablar, dando un vistazo a todo el rededor del salón, pues hacen falta caras. Caras importantes. Y porque me suena que para los habitantes más terrestres, esta ceremonia sea solo una estupidez.

Mientras el caliz hace lo suyo, yo me guardo mi decisión para más adelante. Quizás sería bueno contar con una carta bajo la manga, en caso de que alguna mejor idea de linaje surgiera entre las propuestas. Si cada quien propusiera a alguien nuevo, el concenso nunca se lograría, por lo que me quedo callada escuchando al resto de los camaradas.

Re: Sala de reuniones generales {17.02.19 20:23}

No me esperaba una buena reacción por parte de las personas a las que he ido incordiando, así que tampoco me espanto de las cosas que me sueltan unos y otros. El Black mayor me restriega por la cara eso de que el Ministerio cayó, como si aquello hubiese sido culpa nuestra. La culpa fue de sus constantes ataques, que nos debilitaron frente a la Alianza, y de los daños que nos causó aquel maldito vampiro. Al final también les perjudicó a vosotros...la Alianza se hizo más fuerte. Ni me molesto en responderle, pues ya me había alejado como para volver a contestar. La reacción de la otra pareja, Reiv y Juliet, es un poco más exagerada. Sonrío maliciosamente al darme cuenta de que les escuece el comentario, especialmente a ella. - No te hagas una idea equivocada, querida. Nadie le obligó. De hecho...casi no hizo falta ni convencerle. No hay que defender lo indefendible sólo por ser una tonta enamorada. - suspiro con tono condescendiente, echando después una mirada fulminante a Jo cuando me llama señora mayor.

- Pues tú tampoco eres una jovenzuela, precisamente. Ah, y educa un poco mejor a tu criatura, no hace más que molestar a todos los invitados. - Sabía quién era la niña pequeña que venía con ellos, había tenido tiempo de enterarme mientras estaba refugiada en el castillo Le Fay. - Yo no traería los míos a una fiesta, qué desfachatez. - me giro de manera indignada, siguiendo mi camino mientras dejo atrás a ambas mujeres. Tomo otra copa de la bandeja de un camarero, cruzando un brazo sobre la cintura mientras escucho hablar al viejales que está en lo alto de la escalera.

"blablabla. Al grano, viejo"

Dibujo una sonrisa de satisfacción en el rostro cuando menciona eso de que se puede proponer gente para expulsar, y que se puede autoproponer gente. Supongo que habrá que esperar a que vote el resto, pero ya tengo un motivo por el cual permanecer en la fiesta. El idiota de Rasputín es muy sobrante, se pasó todo el cataclismo mágico medio muerto. En realidad hay muchos que me parecen inútiles. Decido acercarme a la de los pájaros, la que lloriqueaba tanto porque murió el tío de los dragones. - Debes estar un tanto asustada, ¿no? si yo fuese tú lo estaría. Es bastante inútil alguien como tú en el Consejo. Ser animago no es algo tan sorprendente hoy día, y hablar con las ratas pues...mejor para las pelis de Disney.

Re: Sala de reuniones generales {17.02.19 21:12}

Un mes atrás...:

Bellatrix permaneció un tanto ausente tras el baile de apertura de ceremonia con Jack. Se había apartado a un rincón de la sala, con gesto aparentemente reflexivo mientras escrutaba y analizaba todo lo que sucedía en el salón. Normalmente se habría acercado a algún grupo, o habría sido más comunicativa, con sus espíritus o con los vivos. No era ese día. Bebía de vez en cuando de su copa de vino, que menguaba escasamente por los leves sorbos que ella daba. No le interesaban las triviales conversaciones que sucedían aquí y allá, aunque de vez en cuando cruzaba alguna que otra palabra de cortesía. Su gélida mirada se fijó en el miembro más longevo del Consejo, justo cuando éste comenzó a hablar. Ella ya conocía el protocolo, y sabía cuándo y cómo actuar. La propuesta de Jack no le interesó demasiado, así que no aplaudió cuando el anciano terminó su discurso. Prefirió observar detenidamente a sus compañeros, hasta que dio con algo que le llamó la atención. Hizo una mueca de desprecio al ver la mano del descendiente de Merlín entrelazada con la mano del descendiente de Galeno, una aberración que no debería ser permitida. Comprendió entonces las constantes visitas del médico a Sean, y algún que otro detalle que ya había observado previamente.

- Interesante propuesta, Jack. - alzó la voz lo suficiente para que todos pudiesen escucharla, prosiguiendo con la intervención mientras avanzaba hacia la escalinata. - Aunque...tal vez deberíamos dejar antes algunos puestos vacantes más. - dirigió una mirada acusadora hacia Lucio, ya que Sean no podía verla. - Si no me equivoco...Sean Eire y Lucio Galenus no cumplirán con sus funciones de continuar con el linaje, así que sería un buen momento para elegir a otros candidatos, además de los mencionados puestos vacantes. - comenzó a subir las escaleras de manera elegante hasta llegar arriba, apoyando la palma de la mano sobre la balaustrada mientras alzaba el mentón para mirar a los que se congregaban abajo. - Incluso deberían ampliarse los puestos del Consejo, no siempre fueron 20...- su voz sonó dura, guardando silencio después mientras preparaba su voto con el pergamino que había junto al cáliz mágico. Su mano empezó a escribir con pulso tembloroso, pareciendo que iba a escribir un nombre diferente al que escribió finalmente. Arrojó el pergamino al fuego, mientras las llamas azuladas centelleaban en sus ojos. - Pendragon. - el fuego se agitó en espiral sin ser capaz de mostrar un rostro tan definido como el de antes. - Sobran los motivos. - se separó del cáliz, mirando a Jack de reojo como esperando cualquier objeción. No volvió a bajar las escaleras, sino que se hizo a un lado.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 0:02}

Si, yo tampoco lo habría creído.- Aún le parecía extraña la idea de que Reiv estuviera con los renegados. Como si significara una nueva manera de exponerse aún más peligrosa que todas las que ya tenía. Al menos logró aparentar una sonrisa cuando la atrajo hacia él, y parecer entendida cuando Reiv decidió no volver nunca más a su casa. Había ahí algo extraño. Lo sabía porque él no parecía querer hablar de ello, y él no solía ocultar las cosas de manera deliberada. Decidió dejar sin contestación el cómo sabía que Johan bebía, pues había ciertas cosas que no quería restregarle a Reiv en la cara, sobre todo cuando se puso tenso al escuchar lo del burdel, frunciendo el ceño. El tema parecía ser más sensible unos días que otros, pues en antaño había bromeado de eso sin reparo.

Aún con todo por delante, el momento se rompió cuando la rubia llegó a echar todo por la borda. No le golpeó, su voz era suave, pero su rostro tenía la amenaza implícita. La contestación de la mujer le hizo ir hacia el frente de nuevo, había más cosas que decir mientras la sangre le hervía, pero la mano de Josephine en el hombro y Reiv alejándola del lugar le obligaron a salir del área donde la rubia se pavoneaba como si fuera la reina del circo.

¿Qué demonios hacías con una tía cien años más grande que tu, Reiv? ¿Por qué te ve a menos, Reiv, por qué cree que le debes favores, Reiv? Sexuales, favores sexuales, ¿por qué demonios le permites que siga saliendo con las suyas, Reiv? - Le hubiera gustado preguntar directamente a Reiv, sin embargo le dejó que se fuera antes de mostrar su molestia. Despotricó en voz alta una vez se alejaron del centro de la sala, donde la gente estaba arremolinada, hacia los laterales del salón, mucho más despejados y libres. Se aseguró de sacar su ira a un volumen moderado y que no llegara a oidos del moreno mientras se iba por bebidas, como había dicho que haría. No necesitaba una bebida, sino algo ardiendo para arrojárselo en la cara.- Estoy bien.- Murmuró finalmente, apoyando la espalda contra la pared, aún con el ceño fruncido y con la mirada en la multitud, obligándose a relajar los músculos que se habían tensado tras el altercado.- ¿Quién es ella? ¿Qué se cree? ¡¿Qué le pasa?! A ustedes también les dijo algo, vi eso, pero nunca pensé que...- Aspiró profundamente, teniendo que empezar de nuevo el proceso de relajación.- Nadie en su sano juicio es tan descarada como para ir armando esa clase de líos en público, sin querer nada a cambio. Trató de humillarlo. Ella se siente con derechos sobre él, cree que...- Una vez más, se detuvo a media frase pues su voz comenzó a sonar enojada de nueva cuenta.

Después del incidente, su mente decidió que era momento de verter su atención a un sencillo detalle, al rostro de la chica. Esa a la que siempre asociaba con la niñita que corría por todos lados gritando cosas, y solo pudo encogerse, apartar la mirada al instante y hablar en susurros.- Ya puedes irte, me quedaré aquí un rato, estoy más tranquila ahora. Gracias.- Murmuró, girando el rostro hacia el lado contrario, procurando no parecer ruda al respecto. Solo era que estar junto a ella le recordaba épocas malas.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 2:14}

Al parecer la sofía no sabía lo de mis ojos, no podía culparla por ello pues era cierto que tampoco había visto a todos los miembros del consejo -No te preocupes sofía, muchas gracias por tu apoyo- le digo mientras ella toma mi mano, Sarah también había hecho lo mismo con anterioridad y ahora, todos prestábamos atención a Jack mientras daba inicio a la ceremonia para elegir a nuevos descendientes.

yo no podía saber hacia dónde mirar exactamente, tampoco sabía si todos prestaban atención pero una nueva voz pareció unirse al grupo, solo la había escuchado un par de veces pero la recordaba muy bien, era la mujer peligrosa de los blood keepers, se trataba de Adele que se encontraba diciendo cosas de bastante mal gusto, iba a contestarle pero el agarre de Lucio me distrajo, primero en mi hombro y después al tomar mi mano, transmitiendome esa seguridad que solo él podía darme -Gracias Lucio...- ojalá hubiéramos podido escabullirnos , pasar de todo ese barullo y tantas formalidades para poder pasar un rato juntos pero en el momento que Bellatrix sube al estrado todo cambia y solo puedo sujetar con fuerza la mano de Lucio pues no sabía si me hervía la sangre de rabia o por los nervios.

Ante tal declaración por parte de la rubia la sala se llena de murmullos ante lo cual tomo mi báculo que ahora no era más que un objeto decorativo en la solapa de mi traje -Engordio- digo para que este tome su tamaño normal, suelto la mano de lucio y con ayuda del Fénix a mi lado y el vínculo entre los dos me dirijo hacia aquel cáliz en el que se encontraban todos, los murmullos y cuchicheos se hacen más altos y es en ese momento que el ave en mi hombro transmite lo que quiero decir, graznando con un sonido agudo que retumba en toda la sala dando paso al silencio, estaba molesto.

-Me gustaría saber que pruebas tiene la señora Alighieri para profesar tal acusación en contra de dos miembros del consejo, dos miembros que si me permite decirlo han trabajado arduamente para que el día de hoy podamos estar reunidos y celebrando de ésta forma- levanto la cabeza de forma que todos puedan ver mi rostro y las marcas en él además de mis pupilas de color blanquecino debido a la ceguera -y no solo yo he contribuido, todos los presentes han puesto de su parte para que esto sea posible, sean descendientes o no, con hijos o sin ellos pues un apellido no nos da derecho a medir la valía de las personas sino sus actos- ahora me giro al resto de la sala para hablar cara a todos los invitados -Ya basta de glorificar al consejo de los 20, no somos dioses, no somos quienes mandan sobre el resto, la función principal del consejo era educar, ampliar y preservar el conocimiento de la magia y no podemos conseguir eso con las normas restrictivas que nos ponen en un maldito pedestal, mostrándonos inalcanzables frente a aquellos a quienes se supone debemos enseñar y guiar para que el uso de la magia sea propagado y no caigan nuestras enseñanzas en el olvido,ya hemos aprendido que mantenernos al margen de todos los problemas no funciona, ni siquiera estaríamos aquí de no haber llegado a una mayoría de votos cuando se propuso unirnos al resto de organizaciones que nos han apoyado-

ahora me giro hacia bellatrix -si la mayoría del consejo pensara como tu probablemente estaríamos todos muertos- se lo digo claramente recordándole que su voto fue negativo en aquella ocasión -Las normas arcaicas y las tradiciones obsoletas deben cambiar, ni siquiera tu las cumples Bellatrix pues la tradición y las normas dicen que debes dar tus razones para tu voto, no obviarlas.- con un movimiento de mi mano un trozo de pergamino sale de mi bolsillo además de una pluma encantada que escribe el voto por mi -Aquí está mi voto para el nuevo miembro del consejo, Khaled Svenson, no como nigromante, sino como soul reaper , debemos quitarnos la venda de los ojos, son magos, pueden usar la magia y me apuesto cualquier cosa a que a pesar de tener solo un elemento o habilidad pueden poner en aprietos a cualquiera del consejo de los 20, además, han demostrado su valía durante la crisis que hemos atravesado y sin su ayuda no habríamos podido solucionar nada, han hecho mucho más que algún miembro del consejo- el fénix toma el papel que estaba suspendido en el aire y lo arroja al cáliz, mezclando sus llamas rojas con las azules y poco después las de color rosáceo dando todo un espectáculo de luces que yo simplemente pude percibir en colorines difuminados.

Me quedé allí en medio, la sangre me hervía de una forma que llevaba mucho tiempo conteniendo pues ya hacía tiempo que las normas del consejo me tocaban las narices y no poder ver a nadie me ayudaba bastante a no ponerme nervioso, quedando allí, frente al cáliz y en medio de la gran sala esperando por el apoyo de mis compañeros o por el reproche de otros.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 12:34}

Respondo al meneillo de Johan con una sonrisilla aún vergonzosa. Vergonzosa esta vez por haber perdido esa clase de momentos entre nosotros. Sin embargo no hice aquellas cosas por reivindicar nada. En aquel tiempo ,como ahora si se diese el caso, proveía y curaba a todo aquel que se cruzase en mi camino y necesitase de ello. Era más bien cuestión de principios.
Me extraña bastante cuando habla de su soliución. ¿Que solución? Cuando iba a preguntarle por ello sucedió todo el momento de Adele y el tema se quedó en el aire. Escuché a Johan contestarle. No me extrañó que el le siguiese el rollo. No podía quedarse callado nunca aunque supiese de sobra que era lo que buscaba ella.
Mientras voy llevándome a Juliet, la rubia suelta algún comentario sobre Nya. La miré de reojo con cara de pocos amigos. No me salía bien esa cara, no era común en mí. No voy a negar que me sentí tentada de contestar pero simplemente sonreí apartando la vista de ella.
Reiv y Johan se marcharon por otro lado mientras Juliet mascullaba preguntas al pequeño de los Black. Alcé ambas cejas mientras seguíamos andando y ella parecía estar en bucle. Por lo que soltaba pude deducir que Reiv había tenido más que palabras con Adele.
"Vaya... "
Simplemente seguí en silencio hasta que nos apartamos del todo y se apoyó en la pared. La observé ladeando la cabeza sin creerme mucho ese "estoy bien". Suspiré desviando la vista hacia la rubia que seguía atentamente la ceremonia que ya había empezado.
-No hagas caso... extraña los viejos tiempos en los que la gente le hacía caso o algo así.
Encogí mis hombros mientras Juliet seguía divagando sobre Adele. Parecía realmente afectada.
-No te preocupes, ha ido a por vosotros como podía haberla tomado con cualquiera. No creo que tenga ninguna intención de acercarse a Reiv ni a pedirle nada.
Sonreí levemente tratando de calmarla hasta que me miró. Noté como apartaba su mirada de mía y después me dió a entender que me largase. Mi cara reflejó una mayor preocupación. Tal vez fuese mejor que me largase a otra parte.
-Va...vale... bueno si...si me necesitas...
Comenté algo cortada mientras daba a entender que me iba.
"Ey... no!"
Negé varias veces cambiando de opinión. No creo que dejarla sola fuese la mejor de las ideas, además...caí en la cuenta de que ni nos habíamos presentado formalmente. Volví a su lado con una copa que tomé de algún camarero para ella y otra para mí.
-Creo que nunca nos han presentado. Soy Josephine pero todos me llaman Jo.
Extendí la copa hacia ella con una sonrisa amable. Para ese momento la ceremonia haía llegado a un punto extraño. La gente empezó a rumorear a nuestro alrededor y observé como subía un chico al escenario que parecía algo enfadado pero que mantenía la compostura.
"Sigo sin entender este tipo de actos"
Oí el nombre del Soul Reaper y arrugué la nariz un poco contrariada y sorprendida. Negué de nuevo mientras me ponía al lado de Juliet apoyando mi espalda en la pared también.
-Vaya fiestecita...

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 13:08}

Me parece francamente interesante de lo cambiar ciertas tradiciones al consejo y, aunque muchos cambios ha habido ya a lo largo de estos años, la mayoría de ellos han sido potenciados por Catherine. Es curioso, que los linajes más antiguos de la isla, ahora sean los más transgresores. Habría que hacer un estudio concienzudo del reglamento interno, pero los más veteranos no habíamos sido capaces de hacerlo hasta ahora. -Sí, habría que cambiar unas cuentas cosas. Pero... sinceramente no creo que este sea el foro para ello. Por cierto, Sean, había pensado en hacer un aviario, quizás puedas venirte con Rubí. Me encantaría conocer su opinión-
Escucho sus propuestas con sumo interés -Yo dejaré la mía para el final. He tenido que rebanarme los sesos. Todas mis apuestas iban para uno de los concursantes del torneo, el que podía comunicarse con la naturaleza. Me hubiese podido conocer más de su magia. Pero el pobre no está en sus cabales... Y he tenido que salir por la tangente, veremos qué tal- Giro la cabeza señalando con la vista cuando hablo de la estabilidad mental de ciertos individuos, dirigiéndola a Markus que estaba jugando con las cucharas haciendo torres, y a Bellatrix que estaba por otro lado, y que no parecía muy comunicativa consigo misma, para variar. Las ideas de Flamel, Avicena e Hipócrates eran interesantes. Quizás mi propuesta se solapase con algunos de los conocimientos de los que ya estábamos en el consejo pero creo que sumaría a los que ya se ejercen... o ejercían.

Jack espera unos segundos para que la sala se silencie. El pequeño grupo se recoloca para escuchar las explicaciones que el veterano da a todos los presentes. Me quedo maravillada por el cáliz de fuego, como objeto me parece fastuoso y aterrador a la vez. Su decisión es importante para el grupo, es un objeto milenario. Tanto como para rescatarlo de la primera (y esperemos que única caída de la isla). La propuesta de Rosalind Franklin me parece muy interesante, como magizoóloga conocía sus investigaciones, al igual que las de Lynn Margulis o Jane Goodall, a la cual conocía bien por haber trabajado con unos de mis hermanos mayores en África. El comentario de Jack me parece un poco puñalada por la espalda, aunque no entiendo muy bien qué tiene que ver que Rosse sea metamorfomaga y yo animaga. La magia sobre genética de la descendiente de Franklin puede ser interesante para saber a dónde vamos y de dónde venimos, trabajando en sinergia y no en antagonismo. El comentario de la rubia me hace fruncir el ceño, pero no la respondo directamente, me quedo observando la subida de Bellatrix. -Gracias por tu consideración, la tomaré en cuenta. Te encantaría saber lo que el descendiente de Disney es capaz de hacer, seguro que mucho más de lo que tú haces por la comunidad mágica que tanto proclamas como supremacista.- Le respondo bebiendo de la copa. Reconozco que estaba dolida, pero no lo iba a mostrar delante de esa mala harpía que lleva metiendo cizaña toda la velada. Lo que por supuesto nadie esperaba era el dardo venenoso tan directo que se iba a lanzar de una forma tan pública entre los propios compañeros del consejo. -Creo que no estamos aquí para debatir si los linajes van a seguir o no- Bellatrix tampoco era muy apropiada para decir nada al respecto, porque como otros tantos, no había tenido descendencia aún. Su comentario me pareció hiriente e insolente, muy poco apropiado a como se comportaba frecuentemente. Aplaudo las palabras de Sean cuando se defiende ante Bellatrix. Y ya van tres propuestas, la última mucho más trasgresora que la anterior. Ya hubo discusiones cuando el nieto del nigromante propuesto en la actualidad entró en el torneo, pero es verdad que era un competidor justo. Una pena que muriera años después, según teníamos entendido.

Avanzo por la sala. Yo también quiero hablar. Subo hasta llegar al lado del cáliz. -Nuestros compañeros son valiosos y han perdido mucho en el transcurso de la caída de Ouroboros, no creo que este sea el momento apropiado para discutir una expulsión tan poco fundamentada, Bellatrix. Igual hay unas cuantas cosas que cambiar de aquí en adelante, tal y como señala Sean. - Cojo aire mientras saco el trocito de papel donde había escrito mi propuesta, bueno, las tres o cuatro, pero finalmente dicto sentencia: -Mi voto es para el, o la, descendiente de Miguel Servet: para empezar porque su juicio y muerte de Miguel Servet se han considerado como punto de arranque de la discusión que condujo al reconocimiento de la libertad de pensamiento y de expresión de las ideas- En el texto que tenía apuntado 10 motivos por los que le había propuesto, justo ese no estaba en él, pero me parecía que venía ahora mismo, que ni pintado, al haberme venido a la cabeza cuando estaba estudiando su trabajo. -Mi propuesta viene por sus estudios sobre la circulación sanguínea humana, y necesitamos expertos en magia de sangre- Arranco el cacho del papel donde tenía apuntado a Miguel y lo echo con toda la decisión que puedo al cáliz. Tengo un poco de pavor por si el linaje del científico quedó perdido cuando le quemaron en la hoguera de la Inquisición, pero finalmente se dibuja a la fijura que corresponde a la descendencia actual del linaje, sintiéndome profundamente aliviada. Quedo allí hasta que se desdibuja la cara de la persona. Nuevamente cojo aire -Propongo expulsar a Adele Gaultier. Sus ideas supremacistas no ayudan a mejorar al consejo, ni a la estabilidad de la isla, ni a la paz de Ouroboros, como diría Markus. A ella, todas sus decisiones y todos sus linajes predecesores y provenientes- Le guiño un ojo mientras vuelvo a mi posición, que es precisamente a su lado, recogiendo la copa de vino que había dejado cerca cuando subí al estrado.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 14:03}

Adramelech me había tenido que explicar como unas cien veces qué mierda significaba eso de los trasladores. Pero el día que lo activamos aparecimos súbitamente en la sala de ceremonias de esos pomposos de los descendientes. Al parecer la carta del tan Newton lo era, solo que se activaría más tarde.
Aunque no me molaba mucho el asunto de ir a la isla, por rencillas pasadas, el tema fiesta me motivaba mogollón. Justo al contrario que a Adramelech que para él la invitación era algo positivo pero que para nada quería ir a la fiesta. Y menos vestirse guaposo.
De modo que, como siempre, le engañé.
Me reí como la psicópata que el foro tiene como gif, le medio secuestré y le puse un traje que le sentaba como un guante. Porque una sabe de moda y tiene las tallas cogidas. Por supuesto yo choriceé un traje súper escotado y que marcaba mi estilizada y estupenda figura. Creo que es la primera vez que vestía de Dior, pero viendo lo bien que me queda el trapito, reharé el traje como Marge cuando consigue aquel de channel.

Aparecemos [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] y yo en la isla, recorriendo los pasillos, recordando, como si fuera ayer, el día que asaltamos la boda buscando poderes. Qué tiempos de tanta acción. Ahora la cosa estaba muy muerta y ya no tenía paredes con las que entrenar las dotes de partir caras, porque todos mis punching balls ya me los había cargado. Entramos a la sala cuando se nota que hay follón.
-Ya está todo el mundo borracho y hemos llegado tarde. Y ni te atrevas a insinuar que ha sido mi culpa porque tenía que arreglarme el moño... ya lo tenía todo listo hasta que me lo destrozaste cuando tuve que vestirte-
True story.

Justo llegamos cuando empieza todo el show business del cáliz, escuchando las tres propuestas: Rosalin Franklin, Miguel Servat y ...... Khaled Svensson???!??!
Necesito alcohol.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 18:25}

Genievre Rousseau:

Estaba un poco mohína desde que me topé con Adele, y la muy cerda parecía que había decidido joderle la fiesta a todo el que pudiera. Ahogo un grito cuando alguien me coge por detrás, casi pensando que se trataba de un ataque de mal gusto, vil y traiciero. Sin embargo la voz la reconozco enseguida y le arrechucho devolviéndole el abrazo. Estaba guapísima, bueno es que ella es guapísima. Y yo había cogido cualquier harapo que había encontrado por ahó porque no me había dado tiempo a buscar o hacerme algo decente. Qué mal. Pero eso no cambiaba el hecho de que Gen estaba aquí, las dos juntas. Faltaba Emily y podríamos haber sido perfectamente el trío calavera de la Brigada. -Estás guapísima. Menos mal que has venido porque esto roza el muermo absoluto. Te presento a Andreus, es estudiante de Ling. Luego charlamos un rato- Me despido del griego de cuerpo escultural con un abrazo y luego cojo a Gen de un brazo para ir a buscar alcohol... mucho alcohol que beber. -Tengo la extraña sensación de que esta fiesta no va a empezar nunca. Esto es todo un espectáculo pomposo para nombrar a los nuevos miembros del consejo. Pero esta gente no deja de hablar y ... no sé, ya podrían haber puesto algo un poco más animado, supongo que porque esto permitirá un poco más el debate o yo qué sé. Es una fiesta, no se debate, se festeja- Ruedo los ojos, pensado que alguien había pensado mal cuando organizó todo esto. Los deberes de hacer los nombramientos los tendrían que haber hecho en su minicírculo de gente bien, y no aquí. Aquí podríamos celebrar el que hayamos recuperado la magia, la isla, el nombramiento... ahora ya habrá alguien que esté jodido porque ni siquiera la van a valorar para formar parte del consejo.

-Os he echado tanto de menos. Con todos los líos del año pasado, faltaban manos en las enfermerías. ¿Cómo estás? ¿Cómo están los chicos? Cuenta, quiero saberlo todo- No estamos en el centro del jaleo de los nombramientos porque a nosotros no n os afecta mucho, pero por ahí anda Adele jodiendo la existencia al personal. Newton saca el cáliz y nombra su primera propuesta, en mi caso busco con la mirada a Sarah y a Rosse, para ver sus reacciones -Tengo la extraña sensación de que aquí va a haber palos...- Había conseguido hacerme con una cerveza alemana fabricada de forma artesanal. Las votaciones siguen, y con ellas los líos. Casi me atraganto cuando Bellatrix suelta aquello, haciéndome toser. Sean se defiende con mucho arte y opino como él, aunque no sé por dónde van los tiros. Sigue Sarah, con su minidiscurso y su propuesta -En el fondo me da pena que se tengan que decir esas cosas. Tendrían que apoyarse más los unos con los otros. Deberían salir más de estos cuatro paredes para conocer el mundo de allá fuera. Oye, Gen, ¿te quedarás con nosotros? Con la Brigada, digo...-

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 19:00}

Markus sigue a su bola, pululando alrededor de la mesa de los canapés sin prestar mucha más atención de lo que ocurre a su alrededor. Rebusca la vajilla de plata de la buena de vez en cuando, por si se diera la casualidad de que el retoño de Helena Paracelso le hubiese dado por trasmutar plata. Maldito granuja, pensó Markus, pues algo le decía en su bigote que el adolescente tenía algo que ver en todo eso.

Cuando empezó el asunto de las votaciones Markus estaba comiendo un trozo de algo que había obtenido de aglutinar cachitos de otros canapés, como cuando los niños chicos hacen guarradas en las bodas. Pues en esa línea. Markus recuerda que no había hecho los deberes de elegir a la gente para ese día, de modo que tenía que pensar rápido. Todo el mundo le había dicho que eligiera a algún descendiente de Edison, pero Markus no lo haría ni por encima de su cadáver. Otra apuesta fuerte era elegir a alguien relacionado con la genealogía de Einstein, y Markus estaba casi seguro de que se trataba de la apuesta fuerte del resto de los habitantes de la isla.
La siguiente opción que le gustó a Markus era la de apuntar como opción a la artista Blacksanz, que se iba dedicando a hacer avatares y dibujos muy buenos de los personajes del foro. Es más, justo Cleopatra, que acaba de postear tenía una firma con un dibujo de esta artista. Y había dibujado la novela gráfica del Noveno Círculo, por tanto, Markus estaba casi seguro que tendría poderes de los mundos alternativos. Como su antiguo clon malvado: Marcus. En el fondo de su arrugado corazón, Markus le echaba de menos.

Y cuando escribió el nombre de la artista se dio cuenta de que no podía tratarse de esa persona, pues cualquier parecido con la realidad en este foro era escaso. Pardiez, pensó Markus, y tachó su propuesta. Tocaba volver a pensar. Por lo que iba escuchando de fondo, Bellatrix estaba intentando sacar del grupo a Lucio o a Sean. Esa actitud no es buena en los juguetes de Markus, y por tanto entendió que su juguete Sean se enfadara con la mujer de pelo platino. Juguetes. Ya tenía a quién proponer. Después de que hablara Sarah, Entropía voló desde la esquina donde estaba Markus y dejó caer el papel con la propuesta.
En el interior del cáliz de fuego se dibuja la cara de un tipo, bien conocido por muchos, con una ondeante melena blanca y cara de pocos amigos (Markus sabe que eso es una fachada)

-Markus propone a Yaroslav Tolstoi. Yaroslav es un gran amigo de Markus y le ha ayudado a descifrar mecanismos y aparatos muggles que Markus no entendía. Además de ayudar a Markus el día de la caída de la isla. Además Markus debe recordar que el linaje Tolstoi es antiguo y poderoso, tal y como Anyanka y otros han demostrado-
"A Markus le gustan sus juguetes y no quiere a gente nueva en la isla. Souls rondando por aquí, a Markus se le ponen los pelos del bigote como escarpias" En realidad a Markus le hubiera gustado votar a Anyanka, pero no estaba seguro de si sería bien recibida... incluso no estaba seguro de si seguía con vida, y la siguiente en la línea de descendencia era Anastasia Novgorod, que fue un poco chasco en el torneo. Markus se preguntó cómo le iría en el limbo junto a Galahad.

Re: Sala de reuniones generales {18.02.19 23:38}

La conversación con Sofía, Sarah y Sean estaba siendo distendida, haciendo incluso planes para el futuro como el aviario de aves mágicas. Todo parecía ir bien, pero era mucho suponer que tendríamos una fiesta tranquila y sin ningún sobresalto. Primero la maleducada de Adele metiéndose con varios invitados, además de con Sarah. Echo una mirada de pocos amigos a la mujer, decidido a echarla de allí, pero la Darwin sabe defenderse bien y se encarga de responderle como se debe. Intento no distraerme y mantenerme atento a la intervención de Jack, que es el primero en comenzar a hablar. El tema de expulsar a gente me incomoda, no debería estar en el reglamento más que en casos de traición o de algún delito grave. Sólo asiento a la parte en la que menciona su voto para Franklin, pues me parece interesante.

Durante todo momento permanezco con Sean de la mano, sin ser consciente de cierta mirada indiscreta y malintencionada. Sólo me doy cuenta de ello cuando Bellatrix sube las escaleras para soltar aquello de que Sean y yo deberíamos ser expulsados porque no dejaríamos descendencia. Aprieto la mano de Sean con fuerza mientras noto un intenso calor que me sube por la cara, abriendo mucho los ojos como si no pudiese creerme lo que nuestra compañera acababa de decir. No la creía capaz de algo así, lo cual me provoca una inmensa rabia. Su acusación hace que los murmullos crezcan a nuestro alrededor. Ella se ha dado cuenta de que entre nosotros hay algo, y nos ha dejado completamente expuestos, algo que odio. - Ha sido mi culpa...- murmuro agobiado a Sean antes de que se aleje para ir hacia las escaleras, dándome cuenta de que no debería haber hecho eso de cogerle la mano aquí, en una fiesta con tanta gente.

"Si tanto me había contenido era por algo, por los problemas que tendríamos...esto no debería ser así."

Por un momento no sé ni dónde meterme para que no me miren ni murmuren, pero Sean es más resuelto que yo y se encarga de subir ahí arriba, hablando bien claro. Su modo de decir las cosas me hace levantar la mirada del suelo para mirarlo con admiración, por no acobardarse. Ha cambiado mucho en los últimos meses, antes no habría sido capaz de dar un discurso así de significativo ante tanta gente. Su acto me da el valor suficiente para avanzar hacia las escaleras, no iba a dejarlo solo. Su voto para Khaled Svensson rompería con la tradición de que sólo puede haber magos de linajes importantes, pero precisamente de eso hablamos, de romper las tradiciones. Además por el momento nadie parece apoyar a Bellatrix, ya que Sarah deja bien claro en su votación que no es momento de echar a nadie. Espero también a que Markus vote, aplaudiendo su propuesta de Tolstoi. Subo las escaleras con paso decidido, mirando con decepción a Bellatrix. Después me sitúo al lado de Sean, poniendo una mano en su hombro para que supiese que ya estaba allí.

- Lo que se decide hoy aquí no es únicamente sobre linajes. Es sobre el futuro, sobre el rumbo que tomaremos a partir de ahora. Sé que en el pasado erramos por no querer tomar partido en la guerra, sólo de modo indirecto instruyendo a las nuevas generaciones. Todo eso ha cambiado. De la unión con el resto de grupos ha surgido la fuerza suficiente para poder afrontar la situación en la que estábamos. La mayoría nos hemos dejado la piel en el intento, prácticamente todos los que están aquí han sufrido de un modo u otro. Por eso es injusto que se nos quiera expulsar por un motivo tan arcaico con el que propones, Bellatrix. Eso debe cambiar hoy mismo. Al igual que las reglas de con quién pueden estar los miembros del Consejo. Sólo debería contar nuestra valía, lo que hemos hecho, y los aprendices que dejemos a nuestro paso. Si nuestro linaje se extingue, que busquen otro, hay mucho talento oculto todavía. - miro con respeto a los asistentes a la velada, que han demostrado ser dignos por su desempeño y sus habilidades. Que no tengan un apellido de renombre no significa nada. - Por eso quiero apoyar la propuesta de Sean, incluyendo a Khaled en el Consejo. Vientos de cambio y renovación es lo que necesitamos. Nuevas ideas y leyes para el Consejo. Si permanecemos estáticos...acabaremos desapareciendo.- sentencio echando una última mirada a la mujer de cabello plateado, escribiendo después el nombre en el pergamino para echarlo al fuego. Tras eso me hago a un lado, llevando a Sean conmigo. Me he quitado parte de tensión de encima, pero todavía sigo alterado. - No es así como me lo imaginé, pero...tarde o temprano teníamos que hacerlo. - susurro para que lo escuche sólo él, mientras esperamos que vote el siguiente. - ¿Qué crees que va a pasar ahora con nosotros?

Re: Sala de reuniones generales {19.02.19 1:00}

Vanessa:

Habíamos aprovechado bien el tiempo transcurrido desde que recuperamos la magia hasta el momento, retomando la Torre de la Alta Hechicería en Irlanda, e incorporando nuevos miembros a las nuevas hermandades, creadas a partir de las nuevas calaveras. Todavía no éramos muchos, pero seguíamos reclutando a todos aquellos que habían nacido sin magia y querían acceder al don. El tema de la fiesta me pareció extraño, no entendía para qué hacían una fiesta para eso. En general, yo no entendía para qué eran las fiestas. Me habían contado que estaban bien y que la gente se divertía, y Vanessa se había puesto muy pesada con que viniéramos. Al final accedí, poniéndome un ridículo traje con el que no se podría saltar ni combatir. Al llegar a Ourboros recordé la vez que nos irrumpimos y jodimos la boda de Ian Hacksaw, tomando las identidades de los médicos del hospital de Lucio, cómo habíamos timado al médico y cómo habíamos robado los poderes a Sofía y a los que estaban heridos en el hospital. Aquellos fueron días tensos y hostiles, pero nuestra colaboración y pacto con los Descendientes habían solucionado todo aquello.

- Si me lo dicen, no me lo creo. Nosotros, los Soul Reapers, siendo invitados a una fiesta de magos. Después de tooodo lo que ha pasado, por los siglos de los siglos. ¿Qué crees que pensarían nuestros antepasados? ¿Lo aprobarían?- sigo alucinando y hablando a ratos más para ella que para mí mismo, sin poder creerme lo mucho que cambian las cosas. Vale, que no había sido fácil, y que había sido un proceso muy largo de negociaciones, de tira y afloja, de estar a punto de tirarlo todo por la borda y volver a la confrontación...al final nos habían respetado y devuelto lo que era nuestro. Nos habían reconocido como iguales. Al entrar al gran salón me entra toda la timidez del mundo, así que hablo por lo bajo a Vanessa. - Mejor si llegamos tarde y están borrachos, así no se dan cuenta. Esto me da vergüenza, vayámonos a casa. - murmuro sin saber hacia dónde ir, mirando al moño de Vanessa. - Tampoco es que antes fuese gran cosa. Estás más guapa sin moño. -
me defiendo de su acusación, echando un vistazo después a la gente de la sala. Ni rastro de Erika, que me había dejado sin noticias a la propuesta de capitanear la hermandad de fuego. Al resto también los conocía ya, el tiempo pasado en el castillo Le Fay nos había hecho ampliar el círculo de conocidos. Era un cambio agradable no tenerlos de rivales, aunque todavía hubiese algunos que nos mirasen regular.

Desvío la mirada hacia la escalinata para escuchar las votaciones. Una de ellas me deja atónito, era lo que menos esperaba escuchar. - ¿Mi abuelo? ¿Sean Eire votando a mi abuelo? - El descendiente de Merlín, la estirpe que había mandado ajusticiar a los primeros Soul Reapers, estaba votando a uno de ellos. Me quedé boquiabierto unos segundos, aunque acabé aplaudiendo la decisión. No sé si Khaled aceptará, conociéndolo lo más probable es que no, pero el paso dado por Sean era muy importante. No sé si puedo intervenir o no, pero por la parte que me toca decido alzar la voz para responder a Eire. - En nombre de los Soul Reapers, y como familiar de Khaled Svensson, agradecemos que se nos tenga en cuenta para esta nueva era. Lo que decís es cierto, hay que avanzar, no quedarse estancado en el pasado y manteniendo las mismas situaciones. Nuestro pacto es la mejor prueba de ello. - vuelvo a guardar silencio, haciendo un gesto a mi compañera por si quiere hablar, o por si prefiere que nos retiremos a hacer lo que quiera que la gente haga en las fiestas.

Re: Sala de reuniones generales {19.02.19 1:31}

Al parecer había un fiestorro con los pijos de los descendientes en su castillo super chachi y tenía que ir de etiqueta por que claro, como iban a dejar al gato mugroso que capturó al puto Éamon entrar con su ropa cómoda y zarrapastrosa? que horror. Reiv tampoco parecía muy contento con eso de ponerse traje pero al final fuimos todos al lugar del evento.

Tal y como sospechaba todo el mundo iba como un pincel y a mi hasta me había tocado peinarme, un par de lengüetazos en las manos y pelo hacia atrás, rápido y efectivo. Poco me importaban las formalidades de esa gente, puede que ahora lo estuvieran haciendo bien pero aún tenía mi espinita clavada en el costado, mi función principal era comer, beber y robar carteras que no hay pasta para comer y los pañales son muy chungos de conseguir, que Lila es una fábrica de cacas ¿como puede alguien hacer caca si solo bebe leche!? .

El Tiempo pasó, la gente bailaba, yo metía mano por ahí cual escarbato buscando cosas brillantes, jiji, jaja, me fui con los rusos a beber Vodka, algo de Ron con los de la brigada, alguien andaba con cerveza, dos monedas de oro, un anillo y un largo Etcetera, hasta a una tía rubia que la miraban como si fuera la peste conseguí sacarle algo del bolsillo, ya vería que era, el caso es que cuando al viejo pide silencio iba más borracho que una cuba -callaos coño que le va a dar los 100 puntos a Gryffindor!- digo mientras me bebo una copa de lo que fuera, ni sabía que era, la había pillado de la mesa en la que estaba el tío con el pájaro chachi que me miraba como si quisiera pelea.

La cosa avanzaba y después la tipa de cabello blanco o rubio... ya ni lo distinguía, empezó a hablar y entre el barullo pude escuchar una voz en mi cabeza... el hermano de Reiv? ese quién era? ah, si, el capullo que me dejó grogui en los campos de concentración, intento localizarlo con la mirada y cuando lo hago me pongo los dedos en la sien como sheldon cuando intenta hacer que a alguien le vuele la cabeza, pero nada, al final le grito desde el otro lado -QUE SÍ! LUEGO TE ENTREGO A POTTER EN EL BOSQUE PROHIBIDO! ESPERA QUE ACABE EL SALSEO!- en ese momento el tío del fénix sale hecho una furia y el pajarraco casi me deja sordo pero todo el mundo hizo silencio, el caso es que estaba borracho pero cuando termina su discurso empiezo a aplaudir como un loco, ¿era el único de la sala? tal vez, la cosa estaba tensa ¿me importaba? pfff... no.

Poco a poco los descendientes fueron saliendo aunque los tres que yo conocí en los campos no aparecían, la tal Darwin molaba y dijo de echar a la tía rancia, seguro que no le sentó muy bien. Cuando llegó el turno del médico guaperas de turno y terminó su discurso no me pude aguantar y salté al ruedo al ritmo de Raffaella Carrá -Fiesta! que fantástica esta fiesta! esta fiesta con amigos y sin ti- cuando digo lo de sin tí señalo a la rancia porque parece que no la quieren, en fin que cuando estoy en medio hago una reverencia pomposa y torpe porque no podía sumar dos más dos -Ebrios patanes del jurado! me presento, yo maté a sirius black! ah no, yo traje a Éamon! y gracias a eso tenéis al tío del turbante otra vez aquí así que permitanme decir unas palabras como una persona que ha vivido fuera de su maravillosa burbuja- digo señalando toda la sala tan bien decorada y llena de comida y bebida -mientras estamos aquí comiendo y bebiendo hay otros de los nuestros muriendo de hambre en los campos de concentración, a ver, cuantos de los presentes hemos estado en esos campos? gue levanten la mano- miro a mi alrededor y veo alguna que otra mano levantada señalándolos y después mirando a la del pelo de color indefinido y al viejo -Mientras estuve en los campos me encontré con dos de los vuestros, la chica bocazas y el chino que no sé dónde están pero joder yo me lo estoy pasando de puta madre aquí, que bien se vive en un castillo en las nubes, pero eso es exactamente lo que hacéis siempre! pero decidme una cosa, si esos dos no hubieran sido encerrados habríais movido el culo para rescatar al resto que estaban allí? dejadme que conteste ¡NOPE!- digo mientras me giro de forma dramática a lo Ace ventura.

Prosigo mientras saco algo de mi bolsillo, un pendiente que me estaba pinchando, lo miro modo jack sparrow y lo tiro por ahí -estáis aquí metidos y os importa poco lo que pase fuera- miro a los que parecen alumnos y los señalo a todos -y no os penséis que por ser alumnos os salváis, mis dos padres eran alumnos de Ouroboros, se graduaron y fueron a vivir pacíficamente a un pueblo y de repente los humanos dijeron "son magos a por ellos!" y los quemaron vivos en su propia casa ¿Dónde estaban los descendientes? con el culo pegado a su silla diciendo "miradme miradme, soy un Dios, mimimimomomo" así que si los simples plebeyos tenemos voz y voto en lo que se supone nos afecta a todos, porque hasta dónde yo entiendo el mundo mágico es todo el puto mundo, no estas cuatro paredes- Miro a Sean y a los que están a su lado -Tío, yo te votaba a ti y al barbas, a lo mejor también al chino si aparece para pegarme, ahora me voy a mear en una de vuestras macetas- hago algo así como un saludo militar y me voy tambaleándome como buen borracho hasta Johan que es el que me ha pedido audiencia.

Re: Sala de reuniones generales {19.02.19 5:54}

Si bien, la propuesta de Jack parecía acertada, una nueva voz pronto tomó la palabra. A Bellatrix siempre le había estimado, aunque realmente mis encuentros con ella se limitaban a las reuniones del consejo, donde no puedo decir que haya prestado demasiada atención en el pasado. Al escuchar los nombres de mis compañeros, dirigí mi mirada a estos, encontrándome con la razón por la cual Bellatrix parecía creer que lo mejor era acabar con un par de linajes más.

La noticia me tomó de sorpresa, tanto por los motivos como por los resultados. Decidió que, entonces, su mejor carta era seguir esperando a medida que los aludidos defendían su caso. Sean había sido el primer valiente. Las participaciones de Sarah, Markus, Lucio, e incluso el tal Svensson, aludido por Sean y Lucio. La cosa parecía salirse de control. Mi mano se fue directo a la cien en un gracioso gesto, pues era demasiado que procesar. Las plantas del jardín y las decorativas de la sala comenzaron a emanar su tranquilizador perfume, con tal de calmar los ánimos y volver el ambiente festivo a la celebración.

- Compañeros, compañeras.- Murmuré mientras me acercaba al caliz con paso danzante y una hoja previamente escrita en la mano.- En este momento hay decisiones importantes que tomar. Pero debemos tener en cuenta que el objetivo de esas decisiones es siempre el fortalecer las capacidades que el Consejo tiene.- Con una suave mirada a Bellatrix, traté de zanjar un asunto escabroso.- Si bien las tradiciones son importantes, nada nos asegura que estaremos aquí mañana para cumplir con nuestra parte al continuar el linaje, por lo que veo innecesario el traicionar a personas que han sido de gran ayuda en los últimos tiempos. Los nuevos tiempos que vivimos, tan recónditos y llenos de oscuridad.- "Y si alguien en el consejo está a favor de destituir a tan queridas presencias, que haga el favor de privarnos también de la suya." Oh, debí haber dicho lo que pensaba, pero no. Me devolví a la multitud, hablando, tal vez un poco para todos, pero centrándome en cada uno de mis compañeros del consejo.- Volvamos la atención a las intenciones que aquí nos traen. Pido ignorar las acusaciones y permanecer con la compañía de Sean y Lucio, sea cual sea la naturaleza de su alma, así como mi voto va para el legado Curie, por las enormes aportaciones a la física y la química, que juntas a la magia develarán los secretos de lo que realmente mueve al mundo y la energía que recorre a todos los presentes. Develar los secretos de la magia, o al menos intentar aproximarnos a ellos debe parecer una locura al ser lo único que los humanos no conocen. Sin embargo, a ellos también les afecta que la magia exista o no, y más ahora que nunca debemos trabajar en conjunto. ¡Salud! - Si bien no levanté la copa, sí deje caer la hoja de ficus sobre el caliz, que en esta ocasión dio un brillo azul con toques verdes, que llenó mi corazón de alegría mientras volvía con ligero caminar al lugar que me pertenecía, dejando libre el centro de la sala.

Re: Sala de reuniones generales {19.02.19 19:26}

No, no es la petición, no le pide nada. Es su mirada. Lo mira con desdén, como miras a quien no vale nada. Él no merece esa mirada. Es una gran persona.- Murmuró, finalmente desarmada y cansada por el encuentro. Quizás si hubiera sabido de ella antes no habría tenido tanto efecto, pero solo la había visto por aquí y por allá en el castillo Le Fay.

Sentí con alivio la mirada que echó hacia mi cuando le pedí sutilmente que se fuera. Sin embargo, no tardó nada en volver, con alcohol. Era un señuelo tentador, aunque comenzaba a sentir el corazón en un puño, como antes le pasaba. Tomó la copa, escuchando su nombre. Ya lo conocía, había averiguado sobre ella cuando cierto chisme llegó a sus oidos. Quizás ella solo intentaba acercarse, por Reiv... O tal vez él se lo había pedido. Las conspiraciones se hacían nudo en su cabeza mientras pensaba en las posibilidades. Para cuando se dio cuenta, ya tenía un buen rato viendo a la chica, sin decir nada.- M-Mi nombre es... eh... es Juliet.- Se rindió al final, dejando salir su nombre real en un suspiro tras una batalla campal para volver a sus antiguos hábitos y no revelar su identidad a nadie.- No conozco a mucha gente, pero me dicen Juliet. También puedes llamarme así.- Que más daba, lo mejor era dejar ya los secretos, igual Reiv ya estaba más inmiscuido en los renegados y no podría pasar desapercibida más.

Tomó un sorbo de su copa, justo antes de ver el espectáculo de pirotecnia que aquel ave fénix acababa de iniciar.- Vaya, nunca había visto una de esas.- Susurró pensando en el ave, aunque después de aquello siguió la pirotecnia.- ¿Qué se supone que hacen? - Preguntó. Reiv le había explicado, pero ahora parecían confrontarse y ya no entendía nada.

Re: Sala de reuniones generales {20.02.19 22:17}

Me hice a un lado tras mi votación, dejando que continuasen mis compañeros. La primera en salir fue Bellatrix, pero su inicio de discurso fue un tanto hostil, sugiriendo que deberíamos deshacernos de Lucio y Sean. Mis pobladas cejas blancas se alzaron en un gesto de sorpresa, desviando la mirada hacia los mencionados compañeros. No me había percatado antes de ese detalle de las manos, pero aún así la acusación era un tanto infundada. No dije nada por el momento, y permanecí callado a la espera de los siguientes acontecimientos, rumiando lo que había dicho Bellatrix. Debería releer el libro de los fundadores, pues no recordaba eso de que hubiesen sido más de 20 en algún período de nuestra historia. Tampoco comprendí muy bien el motivo de votar a un Pendragon, cuando ya teníamos al linaje de Merlín y al linaje Le Fay.

Volví a prestar atención cuando Sean subió a defenderse y a votar, dando argumentos bastante convincentes sobre por qué debían permanecer en el Consejo. Hice una mueca de disgusto ante la propuesta de Khaled Svensson, no me pareció apropiado. El voto de Sarah iba en la línea de suplir a Snagov, y además aprovechó para proponer expulsar a Adele. Tampoco le vi sentido, al no ser miembro del Consejo. La paloma de Markus dejó el voto correspondiente, que reveló en las llamas el rostro de Yaroslav. No me esperaba ese tipo de votos, toda una novedad en este tipo de rituales. Lucio también apoyó a Sean, tras defenderse y medio confirmar lo que Bellatrix había insinuado. Había visto ese tipo de cosas en mis tiempos de profesor universitario y no me parecía mal, pero que sucediese dentro del Consejo...era otra historia. Tenemos responsabilidades. La irrupción del joven borracho hizo que me diesen ganas de expulsarlo de clase, o de la fiesta, pero decidí escucharlo con el semblante serio. Pedía votar en eso porque les incumbía...muchas cosas están comenzando a cambiar durante esta noche. Sofía también apoyó a Lucio y a Sean, dando la propuesta del linaje Curie, cosa que me agradó.

"Rosalind Franklin, Pendragon, Miguel Servet, Khaled Svensson, Yaroslav Tolstoi, Curie"

Todavía faltan algunos por votar, pero decido intervenir antes por el revuelo que se había formado. - Llamo a la calma a todos los asistentes. No hace falta lanzar acusaciones, ni de un lado ni de otro. - lanzo una mirada de advertencia a Bellatrix, otra a Sarah y otra a Kyllian, porque han sido los más beligerantes. - Vamos por partes. No vamos a expulsar a Lucio y a Sean porque son dos miembros valiosos de nuestra comunidad. Nuestras leyes recogen que los miembros del Consejo no pueden casarse entre ellos ni tener relaciones para no mezclar y perder linajes, deben enriquecerlos buscando otros linajes mágicos válidos. Normalmente era entre ganadores o, en su defecto, participantes del torneo Ouroboros. En todo caso debían ser magos y brujas de valía mágica demostrable y de sangre lo más pura posible. El Consejo no se inmiscuirá en su vida personal siempre y cuando aseguren la continuidad del linaje por los medios que vean convenientes. De no ser así...tendrán que buscar alguien que sustituya a su línea en un futuro, alguien de características similares, aunque sería una pena perder dos linajes tan antiguos. - dejo claro con eso que no estoy contra ellos, pero tampoco los apoyo completamente. Seguro que ya ha sucedido esto antes en algún momento de nuestra historia, pero nada figura en los archivos.

- Respecto a lo otro...Khaled Svensson, a pesar de haber dejado de ser enemigo gracias a los últimos acontecimientos, no es un mago. Es un Soul Reaper. El Consejo se compone de magos, no es una especie de gobierno mixto. Así lo dice la normativa, y sólo puede cambiarse si la mayoría está de acuerdo. Y tampoco pueden votar los externos al Consejo. Sí pueden presentarse externos a elección, pero no votar. - menciono refiriéndome a lo que dijo Kyllian, valorando después lo del linaje Tolstoi. - No me parece que Yaroslav tenga mucho que aportar, ya observé sus poderes durante el torneo. - la situación de confrontación entre unos y otros es ya inminente, supuse que esto sería más un trámite que una especie de acto en el que tomar posiciones y hacer grupos dentro del propio Consejo. - Terminemos primero las votaciones, antes de la deliberación final. - invito a que vayan subiendo los que faltan, manteniendo la vista fija en las llamas azuladas del cáliz.

Re: Sala de reuniones generales {21.02.19 2:02}

Bellatrix arqueó una ceja cuando Sean le preguntó sobre las pruebas que tenía, como si todavía quisiera ocultarlo. Era cierto que buena parte de su acusación se fundaba en sospechas, y la otra parte en algo que acababa de ver. Sarah también defiende al par de dos, diciendo que mi comentario no tiene fundamento. Lucio no lo niega tanto, pero como que evitan un poco el tema. El resto de las propuestas no me interesan demasiado.

- Vuestra reacción es la prueba más evidente de que sabíais que eso, ese gesto, no está permitido. No tiene sentido que intentes disimular, Sean. Los rumores es lo que tienen...en algún momento se acaban confirmando. Aunque la verdad...no sois los únicos que propondría para hacer hueco. Hay otros que parece que viven en permanentes vacaciones. Matvey, Catherine, Altair, Rosse...y podría seguir, la lista es larga. - acusó ahora a los compañeros que llevaban tiempo más ausentes de lo habitual. Seguro que muchos lo pensaban, pero pocos se atreverían a decirlo. Además, parecía que ninguno se atrevía a aprobar las ideas supremacistas sobre la raza mágica, criticando a una de las ganadoras del torneo. - Vosotros mismos trajisteis aquí a Adele Gaultier y Rybar Dvorak, sabiendo que eran Blood Keepers, y las ideas que tenían sobre que la raza mágica es superior y debe prevalecer sobre los no mágicos. La propuesta fue aprobada. No sé por qué nos andamos ahora con remilgos y fingimos ser como los renegados. Somos mejores, es evidente. No creemos en dominar a los humanos y en el exterminio, como los Blood Keepers, pero muchos del Consejo también creemos que no debemos abandonar lo que somos y nuestras tradiciones. - aclaró su posición política dentro del conflicto, algo que llevaba ya tiempo dividiendo a los Descendientes. Participar o no participar, ponerse del lado de unos o de otros. Ahora querían cambiar las reglas y las leyes. Ella, y más gente, no querían ver la isla convertida en un sitio para cualquiera. Tampoco quería ver a los Soul Reapers formando parte del Consejo.

- Sean, presumes mucho de lo que habéis hecho otros, pero yo os di mucha de la información necesaria para volver a poner la isla a flote. - soltó enfatizando el "yo", mientras alzaba la barbilla. El espíritu del escriba de Carlomagno le había dado aquella información, aunque Jack ya tenía parte de ella gracias al libro que le entregó Sean de su biblioteca. No fue el único espíritu que entró en Bellatrix aquel día.

- ¿Quieres tus motivos? El linaje Pendragon era y es poderoso...- la voz de Alighieri se entremezclaba con una que no era la suya, por un momento volvió a ser la del escriba, mientras sus ojos se quedaban fijos en el fuego. - Una vez pertenecieron al Consejo. - apartó de ahí la mirada, ignorando al borracho que había decidido a intervenir. Su tono fue tornándose más grave, más lúgubre, sonando cada vez menos como ella. Se giró hacia Sean, comenzando a caminar hacia él como si fuese su presa. - No os importó expulsarlos con sucias artimañas, robando la espada que les pertenecía por derecho. Tu familia, tu linaje. ¿Y el linaje Le Fay? otros impostores. Los agravios se pagan, al igual que las mentiras. - la mirada de la descendiente desprendía un brillo rojizo ajeno a ella, quedando muy cerca de Sean para susurrarle al oído. - Ouroboros no será lo que vosotros queréis. Nunca fue vuestra. Nunca desaparecimos. Allí estaré para tomar posesión cuanto menos te lo esperes. - por un momento pareció que iba a atacarle, pero eso no llegó a suceder. Tras eso, dio media vuelta, comenzando a bajar la escalinata con presteza y porte digno hasta regresar a la zona donde se encontraban los invitados. Su intención no era quedarse, e impediría a cualquiera que se acercase. Volvió a alzar la voz, como si profiriese una maldición, o tal vez como si lanzase una profecía, no podría saberse.

- Ellos regresarán. Sirrush, Seiryu, Ascalon. Los horrores no han terminado. El mundo perecerá engullido bajo el acero, el fuego, la podredumbre. - la voz resonó por todos los rincones el salón, haciendo que el fuego azulado del cáliz se agitase. Incluso la iluminación general de la estancia pareció menguar. Después se hizo el silencio, los ojos de la mujer volvieron a la normalidad, pero su mirada seguía ausente. Avanzó con rapidez hacia la puerta, abandonando el salón de fiestas para perderse en el exterior.

Re: Sala de reuniones generales {21.02.19 2:54}

Eché un vistazo a Josephine y a Juliet cuando fui a por las bebidas, como asegurándome de que la maldita Adele no se quedase pululando alrededor de ellas para seguir jodiendo. Seguía sin comprender por qué teníamos que soportar aquí a gente como ella, gente que había sido cruel por principios equivocados, gente que había asesinado a sangre fría y que había sido culpable de buena parte del sufrimiento de la Resistencia durante años. Ahora parecía que no iban a pagar sus crímenes, que se iban a aprovechar de los tratados de no agresión temporales. La herida nunca cerraría de ese modo, si hacíamos como que no había pasado nada, sin hacer justicia de algún modo. No podía perdonar y olvidar sin más. Sería un insulto a la memoria de los que cayeron. Me quedé dándole en todo eso mientras intentaba abrir, de manera distraída, una botella que había sobre las mesas de bebida para invitados. Allí me encontré con Reiv, que también parecía haber ido a por bebida tras librarse de Adele. Sonreí al pensar en la situación, él y yo en una fiesta, en el mismo bando, llevándonos bien después de tanto camino recorrido a lo largo de los años, después de haber intentado matarnos (más él que yo) y de haber intentado salvar la vida del otro algún tiempo después. Nuestro padre estaría orgulloso. No habíamos vuelto a saber de él. Me contaron que se había marchado del castillo Le Fay antes de la convergencia. - Ni puto caso. Sólo quiere atención porque ya no es lo que era. No van a estropearnos uno de los pocos de distracción que tenemos. Ahora que estás con nosotros tienes que participar en las misiones, así que a partir de mañana nos ponemos a ello. Por cierto...- miré de reojo hacia Jo y Juliet, interrogando a Reiv. - ¿Todo bien con ella? - ya sabía lo que les había pasado, al menos muy por encima, pues mi hermano era un tanto reacio a decir demasiado.

El momento de las votaciones fue el detonante para situaciones de lo más incómodas, acusaciones por varios lados, propuestas inadmisibles, y otras estupideces varias como meterse con dos personas que, supuestamente, tenían algo. Resoplé, pegando un trago a la copa y pensando ya en todo lo que quería decir, aunque no me tocase hablar. No se me daba bien eso de callarme. Kyllian se me adelanta, aunque no me extraña teniendo en cuenta lo borracho que iba. - Me da que vas a tener que encargarte de tu amigo esta noche. - murmuré a Reiv, sin dejar de mirar a Kyllian. El pobre se había rayado con eso de que le hablase a la mente, tomándome por un idiota sin nariz. El caso es que el cabrón me hizo gracia con eso de los puntos para Gryffindor, aunque desde mi punto de vista de Ravenclaw eran todos unos idiotas. Levanté el puño cuando pidió que se pronunciasen los que habían sido atrapados. Muchas más manos se levantaron. El feral decía más o menos lo mismo que Josephine. Vale, es cierto que ahora habían reaccionado, pero habían pasado muchos años simplemente observando. - Los borrachos siempre dicen la verdad. - levanté la voz por fin, avanzando unos cuantos pasos.

- Vale, que es vuestro Consejo y lo organizáis como os da la gana, igual que cada grupo se organiza como quiere, pero no volvamos a cometer los mismos errores. Si han propuesto a Khaled Svensson y a Yaroslav Tolstoi será por algo. Porque los linajes y los títulos ya no significan nada, vale más las obras que hemos hecho día a día, que llevamos años haciendo. Necesitamos algo que nos represente a todos, cuantas más razas mejor. Cuantos más grupos mejor, quitando a los supremacistas como los Blood Keepers, no se les puede amparar bajo la "libertad de expresión", ni tolerar a gente como ellos. Por eso propongo que se cree algo para representarlos a todos, unos cuantos representantes de cada. Llamadlo como queráis, pero hará falta para que no haya unos por encima de otros. - me retiro tras decir esas palabras, dispuesto a reunirme con Kyllian cuando sucede lo de la tipa de cabello plateado que comienza a hablar con voces raras y a decir cosas incomprensibles que dan mal rollo. No comprendo nada, pero me suena a Maléfica lanzando maldiciones. Me tenso y voy preparando por si fuese necesario hacer algo, atacar o defenderse. Localizo a Jo, Nyara y Justin para tenerlos a la vista por si sucede algo, pero finalmente no pasa nada, la mujer se va de la fiesta después de su momento raruno. Ya verán qué hacen sus compañeros, que deben comprender mejor lo sucedido.

- Tienes potencial para hacer discursos, Kyllian. - comento cuando llego a él, medio en broma medio en serio. - Aunque espero que no entres en batalla estando borracho. - comienzo a preparar el terreno de lo que iba a proponer, pero antes me encargo de otro asunto pendiente. - También quería agradecerte en persona tu ayuda el día de los campos, cuando me llevaste hasta Reiv. Y siento lo del golpe en la cabeza. - señalo el lugar en que le dí, apuntando a mi propia cabeza con gesto de disculpa. - No sé si tienes algún sitio al que regresar u otros planes, pero me gustaría que te unieses a nosotros. Siempre es mejor luchar con alguien que te cubra las espaldas, en vez de andar solo por ahí.

Re: Sala de reuniones generales {21.02.19 22:37}

Entro tardíamente a la fiesta, con las chuchurrías flores que he cogido en el jardín exterior para dárselas a Zaphira. Cuando llego hay como mal rollo en el ambiente, igual es por la Locatrix que ha salido del salón con cara de rancia. Me encojo de hombros porque tampoco me interesa mucho lo que le haya pasado, así que me pongo a echar un vistazo a la gente de la sala a ver a quién localizo por ahí.

"seguro que ni se han dado cuenta de que no estaba, como si fuese un personaje secundario, como si fuese Hawkeye y no saliese en la peli."

Resoplo mosqueado, mirando de nuevo mis cutres flores. Agarro una copa por el camino, haciendo que casi se le caiga la bandeja al camarero. Al menos seguiré aprovechándome del alcohol de los Descendientes, como en la bodega de la Le Fay. Me fijo en que Cleo y Gen están por ahí hablando, pero por ahora decido no acercarme a ellas. A la dragona no la localizo, así que pongo las flores a remojo en la cubitera del champán.