Castillo Le Fay (en ruinas)

Aquel día fue uno de los más duros de mi vida, y no fue por ver la isla derrumbarse o los muchos viajes al castillo trasladando gente, la muerte de Snagov fue un gran golpe. Él amaba a los dragones y luchó por nuestros derechos, no nos veía como simples caballos voladores o ingredientes para pociones. También me inculcó la pasión por la lectura, en concreto por la legislación hacia los derechos de los dragones.

Cuando llegó Sarah yo me encontraba descansando en uno de los jardines del castillo. No fue de extrañar que Altair no se encontrase con ellos, siempre intentaba evitar a la mayoría del consejo. La falta de magia tampoco nos afectó mucho a los dragones que nos habíamos quedado en nuestra reptiliana forma, dado que todavía podíamos utilizar nuestros diferentes alientos.

Entendí la situación que me explicó Sarah, lo más seguro es que Altair se encontrase en algún bosque debido a la transformación, y no sería complicado seguirle el rastro que conocía desde que salí del huevo.

Actualmente para mi los humanos eran una plaga, unas ratas que se comen nuestra comida, en este caso la magia, y si fuera por mí todos estaríamos en armonía, pero para ellos la magia les daba como indigestión. Yo lo de la guerra física lo veía como último recurso dada la falta de magia, veía mejor emplear medidas económicas, aumentando los aranceles y expropiarles terrenos de cultivo. Así, ante el descenso de la economía y del ámbito de vida les llevaría a una guerra entre ellos por la supervivencia, por lo que se matarían entre ellos.

No era momento de explicarle mis elucubraciones a Sara, dado que tampoco tenía un alto nivel de la lengua arcana ni yo podía adoptar mi otra forma. Fui hasta el resto de descendientes y me incliné de forma que se pudiesen subir los que quisieran, despegando de camino a los bosques.

No me impresiona la visión de la sangre porque es algo que forma parte de mi trabajo diario. Lo que si me preocupa es el mal estado de la sangre que tiene en el cuerpo, por la falta de correcta circulación. Además será necesaria una transfusión urgente. Rápidamente pongo unas casas sobre la incisión para detener un poco el sangrado, mirando a Sean de reojo como para evaluarle.

- Te encuentras bien? Si te mareas, avísame. No quiero que te caigas al suelo aquí mismo. - ambos hemos acabado cubiertos de sangre en mayor o menos medida, y todavía queda extraer la piedra.  -Vyctoria.- llamo a la muchacha cuando entra en el momento crítico, agradeciendo su oferta de ayuda con el aparato que trae a continuación. No sé mucho sobre la morena, quitando que la atendí cuando llegaron heridos por lo de la bomba. No sabía que fuese otra estudiosa de la tecnologia médica. - Puede servir hasta que hagamos un modelo más definitivo usando el libro que ha traído Sean. Podemos usar el aparato que has traído hasta que construyamos otro. De lo contrario ella no aguantará más de media hora, incluso menos. -

Vuelvo a destapar la incisión, procediendo ahora a usar unas pinzas metálicas para hurgar en la herida, buscando la piedra a extraer.  - Sean lleva razón, la transfusión es urgente. No solo por la falta de sangre, sino lo que dice Vyctoria. La suya está intoxicada. Además, su sangre le servirá. Le he atendido alguna vez y por eso sé que es donante universal. -  por fin consigo cazar la piedra con las pinzas, comenzando a tirar para sacarla.

- Atentos. Cuando saque la piedra hay que conectarla de inmediato al otro aparato. Daos prisa.- consigo sacar la piedra tras varios segundos más de tensión , depositando una piedra del tamaño de un puño sobre la mesilla metálica de operaciones. Se supone que debería brillar, pero entre la falta de magia y la sangre negra no se ve más que un pedrusco oscuro. - ¡Rápido, conectadla! - yo salgo del cuarto para ir a por Johan, que estaba esperando en la puerta. Me lo encuentro de los nervios, obviamente, pues ha estado viendo cómo entrábamos y salíamos sin muchas explicaciones. Sólo habrá escuchado el jaleo de dentro. Cojo su muñeca con mi mano ensangrentada, haciéndolo pasar a la estancia. Johan se queda sin poder decir nada, como en shock y bastante pálido. Hago que se siente en una silla mientras le explico que necesitamos la transfusión, preparando el instrumental necesario. - Vyctoria, Sean, encargaos alguno de sacarle sangre mientras yo termino las conexiones del aparato de Josephine.

Me había despedido de Newton hacía un rato, tras haber estado trabajando en unos planos y recibiendo su ayuda con algunas cosas sobre presiones, y, claro como no, fuerzas.

- En Newton, claro está.

Me rei yo solo conmigo mismo porque para mi tenia gracia, mientras iba por el pasillo hacia la sala donde me habian dicho que tenian a la chica sin corazon. Seguro que iba a ser algo interesante de ver....

Cuando llegué a la altura vi a Lucio, todo sucio, saliendo por una puerta y secuestrando a un muchacho de cabello negro al interior de la "sala médica".

"que siniestro"

Me rasqué la barbilla y procedo a entrar tras ellos, sin ser invitado. Necesito hacer unas comprobaciones. Al entrar veo a Lucio claro está, parece que va a preparar una transfusión. Encuentro tambien a Sean, a una mujer morena, y a la paciente.

No digo nada y me cuelo entre ellos, soltando "uhmmms" de vez en cuando. Por qué están tan sucios? Eso es sangre?  Por dios si se podría pintar cuadros con aquella sustancia....  me abro hueco para poder ver a la chica, herida abierta aun en el pecho.
- Scusa....

Entrecierro un solo un ojo, mirando ese agujero que le han dejado en el pecho antes que le pongan aquella maquinita a la cual miro con una ceja levantada. Luego mido altura y peso de la joven, así, a ojo.  Hago el signo de "ok" con mi mano derecha y me aparto de Jo, miro a Victorya. Deberia saludar? No, no nos conocemos, ni nos han presentado. A Sean si. Le hago pat pat en la mejilla y aprovecho para restregar en mi guante un poco de la sangre que tiene él en su cara, que luego la quiero chismear.

Me aparto y voy a mirar la piedra que habia dejado Lucio, la que le han extraido. Me ha comentado Newton que la mujer tenia una piedra filosofal por corazón asi que el corazon artificial que se le haga tendrá que ser completo, no una simple asistencia.  Sin magia, va a ser un poco mas complicado hacerlo totalmente perfecto, pero seguro que queda bien. Qué no me queda bien a mi?

Ayuda a Lucio en todo lo que le es humanamente posible, cuando le pregunta si se encontraba bien, mueve la cabeza de arriba a abajo a modo de afirmación, todo mentira, a duras penas si podía contener las nauseas que sentía en aquel momento pero logra aguantar, el tiempo pasaba muy lentamente para él aunque era consciente de que eso no podía ser posible pues Josephine tenía cada vez menos. En cuanto Lucio se separa de la rubia y da la orden, toma el aparato de Vyktoria, no sin antes preguntarle como se conecta, así pues, con su ayuda e instrucción lo hace como buenamente puede  hasta que Lucio regresa con Johan de la mano y justo detrás de él, Da vinci.

Al escuchar la orden de Lucio, se levanta rápidamente y es en éste momento cuando la tensión le pasa factura se marea y alguna arcada sale a flote, al notar la mano de Da vinci en su mejilla lo mira y aparta su mano - Si ya has tomado los datos que necesitabas, por favor, ve a crear ese corazón, no le queda mucho tiempo...- .

va hasta la mesa en la que se encuentran los guantes, quitándose los suyos, poniéndose unos nuevos y tomando un par de vías y bolsas para la transfusión, va hasta la silla en la que Johan se encuentra, el pobre está totalmente pálido mirando a la nada, le da un par de palmaditas en la mejilla y lo obliga a mirarlo a los ojos - Johan. mírame, estamos haciendo todo lo posible por salvarla, pero ahora no puedes rendirte, ella te necesita, debes ser fuerte- Dicho esto toma el brazo del chico, con una goma elástica hace presión en el antebrazo y acto seguido busca su vena para poder pincharle y empezar la extracción. -Todo va a salir bien Johan, Da vinci ya ha empezado a trabajar, todo va a salir bien.. Dice intentando tranquilizarle, pues es lo único que puede hacer por él en ese momento.

Consigue sacarle un par de litros de sangre a Johan, necesitarían más pero extraerlos en ese momento pondría en peligro su vida, ya debería estar mareado solo por esos dos litros y si a eso se suma que probablemente no haya comido nada en los últimos días, no le extrañaría que se desmayara, un chico con suerte, al menos descansaría y estaba en una silla. Lleva la sangre a lucio y la conecta a la máquina que ha creado Vyktoria para que esta empiece a bombearla por el cuerpo de Josephine. -Es todo lo que podemos hacer por el momento, el resto depende de ella y de Da vinci-.

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'Probabilidad' :

La espera fuera de la habitación se hace eterna, no puedo estarme quieto y dejar de ir de un lado a otro del pasillo con el corazón en un puño. Las entradas y salidas de Sean primero y luego de Vyctoria no hacen sino acrecentar mi estado de nervios, más porque no sé lo que está pasando dentro, y además él ha salido manchado de sangre.  - ¿Qué está pasando? decidme algo... - suplico a ambos alguna de las veces que salen del cuarto. Decido entrar por mi cuenta porque no aguanto más la espera, pero en ese momento aparece Lucio para agarrarme por la muñeca y meterme dentro del cuarto. Su mano ensangrentada mancha la mía, pero lo que realmente me impacta es ver las manchas de sangre negra por todos lados, además de la que tiene Jo sobre el pecho. Quedo tan impactado por lo que estoy viendo que no consigo reaccionar, no quiero creerme lo que estoy viendo, ni darme cuenta de que todo parece perdido. Me dejo llevar por Lucio hasta una silla, mirando hacia el frente con la mirada perdida mientras los escucho sólo a medias, como si fuesen voces lejanas que nada tienen que ver conmigo.

Sólo vuelvo a reaccionar cuando noto las palmadas en la mejilla que me da Sean, desviando por fin la mirada hacia sus violáceos ojos. Su rostro también ha acabado salpicado con la sangre oscura de Josephine, y él mismo también parece estar a punto de desmayarse. Todos están trabajando al máximo para sacarla adelante, y yo lo único que puedo hacer es hacer mi parte dando la necesaria sangre.  - Sí...es sólo que...joder...la veo así y no puedo hacer nada y... tengo miedo de que no podamos salvarla. - termino en voz muy baja con el nudo en la garganta más apretado que nunca, conteniendo todo lo posible las ganas de ponerme a llorar ahí mismo.  Inspiro profundamente  tratando de calmarme para no tensar el brazo mientras me sacan sangre. - Quiero ayudar en todo lo que sea posible, saca toda la que sea necesaria.- añado en voz algo más alta, asintiendo con determinación. Espero con el brazo quieto hasta que termina, murmurando un gracias cuando se separa para ir a llevarle la sangre a Josephine. Intento levantarme al instante para acercarme hasta donde tienen a Josephine y ver si con la máquina y la sangre mejora, pero al tercer paso que doy empiezo a marearme. La tensión, los días sin comer ni descansar y lo de los dos litros de sangre me pasan factura, así que acabo desmayándome y cayendo al suelo.

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off: dado éxito/fallo para ver si llega a la camilla o se desmaya antes xD

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'Probabilidad' :

Al parecer el artilugio fue bien recibido, aunque duraba de la capacidad que tenía de diseñar algo que pudiera mantener a la chica con vida. Agradeció a Sean por las lindas palabras de aliento y agradecimiento recibidas, aunque siguió por la puerta, dudando entre si debía irse (que era lo que más deseaba) o si debía quedarse a decirles el cómo se conectaba.

-Si, la idea es que sea temporal. Es demasiado rústico para dejarlo en el cuerpo indefinidamente.- Murmuró, cruzándose de brazos debajo del pecho mientras veía la escena. Un escalofrío le llegaba desde el inicio de la columna hasta la cabeza, haciéndola temblar al ver la sangre. De repente, el médico y su compañero la incluyeron al equipo de operación sin darle siquiera tiempo a decir que no. Titubeó largo y tendido cuando Sean pidió su ayuda al conectar, incapaz de moverse de su lugar, pues los pies no le respondían de solo pensar en acercarse a aquella camilla y mancharse las manos de sangre. No solo era que no estaba capacitada, sino también que se trataba de un ser humano, no de los androides y los robots que siempre había tratado. El grito de Lucio le obligó a entrar en acción a pesar de que todo el cuerpo protestaba temblando.

Tuvo que meterle las manos al pecho a la chica para sostener una vena y cosas del tipo, que al menos Sean sabía cual era la vena y cual la arteria, por lo que lograron conectar con rapidez a pesar del temblor de las manos de la morena. Si normalmente su piel era muy blanca, en aquel momento había perdido el color por completo, quedando pálida tras el trabajo. Una vez que Lucio volvió para hacerse cargo de las suturas y demás cuidados, se alejó un paso de la camilla, viendo todo como si estuviera fuera de su propio cuerpo.- Lucio...- Murmuró cuando pudo articular palabra, aunque la voz le salía algo temblorosa. Tardó algo de tiempo en articular una frase decente, pues sentía que no podía dejar de mirar la abertura y pensar al mismo tiempo.- No... Yo no... Noooooo.... No esterilicé el equipo apropiadamente... quizás.... sería... Podríamos darle antibióticos, buscar algunos para prevenir una infección...

Mis improvisados compañeros de operación no parecen encontrarse demasiado bien con todo lo que tienen que enfrentar. Sean tiene pinta de ir a vomitar de un momento a otro, y Vyctoria está más blanca que el papel. Yo mismo también estoy bastante nervioso, sobre todo si pienso en la operación que le hice a Matvey y en cómo acabó después de eso. Lo salvé, pero no despierta. Espero que no pase lo mismo con ella, si es que conseguimos sacarla adelante. - Lo estáis haciendo bien. Vamos, pronto podréis descansar. - dejo que Sean sea el que se encargue de sacarle sangre a Johan con la mayor celeridad posible, aunque no sea lo más recomendable. En medio de todo el caos ha entrado Da Vinci para echar una mano, o al menos para hacer su observación para tomar datos. Él es de pocas palabras, pero seguro que su mente ya está maquinando algo.

- Giordano, puedes ayudarte del modelo que ha encontrado Sean en su libro. El mayor problema serán los materiales, no pudimos sacar del hospital tantas cosas como quisimos, no dio tiempo. - señalo con la mano libre el libro, y después el aparato hecho por Victorya. - De momento le estamos conectando esto para mantenerla con vida hasta tener el modelo definitivo. Son dos operaciones complejas, pero no queda otro remedio. - entre los tres vamos terminando de hacer las conexiones pertinentes entre aparato y arterias coronarias, con la máquina en funcionamiento para que empiece ya a bombear. El proceso se alarga durante minutos que parecen interminables, incluyendo el inicio de la transfusión cuando Sean vuelve con la sangre que le ha sacado a Johan. Éste se levanta demasiado rápido y se va al suelo, a lo que suspiro cansado.  - Terminemos primero con Josephine. Él de ahí no pasa. Se recuperará. - vuelvo a lo mío, asegurándome de que la sangre de Josephine ya circula y de que le está entrando la sangre nueva de Johan para que vaya expulsando por los drenajes la sangre estancada que tenía. Después suturo por donde la hemos abierto, aplicando desinfectante sobre los puntos cuando termino. La herida no puede cerrarse por completo debido a que los tubos deben conectar con el aparato que queda en el exterior, del cual tendremos que estar muy pendientes para comprobar que siga funcionando. Compruebo que la respiración de la paciente se mantenga, a pesar de que sea muy débil todavía.

- Exacto...ahora ya depende de ella. Le hemos conseguido unos días más, si sobrevive a este proceso tan invasivo. - por suerte Johan ya no puede escucharme decir eso, es una suerte que esté desmayado. Me quito los guantes para tirarlos al suelo, de todas maneras había que limpiar. Entorno un poco los ojos para mirar hacia los tubos cuando Vyctoria dice eso de que no están esterilizados, lo que me hace fruncir el ceño. No quiero reñirle, pero es de primero de medicina.  - Tenemos algunos antibióticos del material que pudimos sacar de la isla, pero no van a ser suficientes ni por asomo teniendo en cuenta que los necesitará durante tiempo y que hay más heridos. Necesitamos conseguir más medicinas, habrá que hacer una misión para conseguirlos. - cojo un trapo de la mesa para limpiarme la cara de la sangre salpicada, notando de repente todo el cansancio acumulado. De todos modos no puedo marcharme todavía, he de quedarme a ver cómo sigue la paciente.

 - Buen trabajo, muchachos. Habéis demostrado de lo que sois capaces y habéis hecho lo posible para ayudarla. Tenedlo en cuenta pase lo que pase. - por desgracia yo ya sé que a veces no es suficiente con intentarlo todo. El lado malo de esta profesión es que en ocasiones no podemos hacer nada para salvar la vida de alguien. - Os recomiendo que vayáis a descansar un rato y a limpiaros, poco más podemos hacer aquí. Ya hablaremos de planes y de cónclaves cuando estemos más calmados. Tú también, Da Vinci. Empezad cuanto antes con el modelo definitivo. Creo que te entenderás bien con Sean y Vyctoria, o al menos ellos intentarán entenderse contigo- añado teniendo en cuenta que Gio es poco hábil relacionándose.  
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dado probabbilidad
¿Se libra Jo de la infección?

El miembro 'Lucio Galenus' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Probabilidad' :

- Non es tan facile... - le respondí a Sean arrugando mi nariz cuando me dijo que me fuese a crear el corazon. Así, como si yo cagase corazones artificiales. Menos mal que eso lo pensé pero no lo dije.

Dejé la piedrecita que otrora fuera una piedra filosofal, acordandome de Paracelso. Entonces me di cuenta de que Johan se desplomaba cerca de mi. Di un pasito para atrás para dejarlo caer al suelo tranquilo, no quería interrumpir su desmayo. Luego pasé por encima de él porque me molestaba ahi donde se habia quedado tirado, en mitad de todo el camino, y me senté en la silla en la que él habia estado antes, pero me senté del revés con la cabeza hacia abajo y las piernas hacia arriba. Me ayudaba a pensar. Y mientras, los observaba trabajar.

- Obsoleto. - le respondí a Lucio cuando me insinuó que usase el modelo del libro de Sean. - Un artefacto puente alimentado por unas baterías externas. Cual es su fuente de energia, signora?  el material, no se sobrecalentará provocando daños en los tejidos de alrededor?- pregunté a la morena con algo menos de aburrimiento en la voz y un tanto a modo de pesquisa.

"yo solía alimentar mis aparatos con magia, que fastidio"

"los modelos del libro de Lucio Sean deben ser de Abiocor o incluso los Jarvik"

- No me mandes a dormir ahora. - le dije a Lucio negando con la cabeza y luego me toqué la sien- el corazón ya está diseñado. Son los materiales lo que me faltan. - y entonces fue como si se hubiese abierto al compuerta de una presa de agua y empecé a darle a la sinhueso con mi fuerte acento italiano, gesticulando a saco con las manos aun sentado en esa extraña posicion. - La  prótesis presenta una composición en cuanto a materiales que trata de reducir riesgos de incompatibilidad y rechazos. Estos materiales son titanio y tejidos de origen biológico. Partes en contacto con la sangre tendrían unas características hidrofóbicas de manera que evitamos adherencia de células sanguíneas. Esta constitución de la prótesis trata de mejorar la hematocompatibilidad evitando el rechazo ocurrido con prótesis fabricadas con materiales artificiales capaces de generar coágulos sanguíneos, lo que multiplica riesgos de accidentes cardiovasculares. Estará dotado de sensores electrónicos y de un complejo sistema electromecánico que detectará si la paciente está de pie, sentada o tumbada, y su presión venosa y arterial ligada a su actividad, lo que le permitorá adaptar la frecuencia cardiaca ante las condiciones fisiológicas. En el 2015 los corazones que fabricaban así pesaban tres veces mas que un corazón humano y tenian una independencia de 5 años, 230 millones de latidos. Hoy dia puedo mejorar esas cifras en mitades y en dobles.Y más si lo hago yo.

Miré a Sean y a Vyctoria tras las palabras de Lucio, que daban a entender que ellos serían mi ¿equipo? Bueno, al menos era Sean y no la loca de Bellatrix. Y la mujer se llamaba Vyctoria. Sonreí a ambos jugueteando con mis dedos, los cuales hacia girar unos sobre otros con mis manos entrelazadas a la altura del regazo. Aunque fue una sonrisa incómoda.
- ¿Dónde conseguiremos esos materiales?

Por fin se había acabado, Lucio se encontraba terminando de cerrar las heridas y desinfectando la zona, Vyktoria parecía muy pálida pero lo había hecho muy bien a pesar del error de desinfectar el equipo, alguna vez él mismo había recibido esa mirada de lucio en alguna ocasión, se aparto de la cama para dejar trabajar al médico, mientras escuchaba parlotear al italiano "ya estamos otra vez" pensó, suspiró profundamente y fue en ese momento que volvió a notar el olor pútrido y dulzón que inundaba la habitación, una arcada salió a relucir en ese momento y esta vez no pudo contenerla, rápidamente se dirigió a la ventana, la abrió de un solo golpe y echó lo poco y nada que tenía en el estómago sin tener cuidado de quien podría estar abajo, era eso o hacerlo en la habitación que tampoco estaba para echar cohetes.

una vez terminó con la ventana y Da vinci con su explicación, se sentó en el suelo apoyado en la pared, mirando al hombre que estaba sentado hacia abajo. -Quizás deberíamos ir  a hospitales que se encuentren en ciudades pequeñas, las grandes estarán vigiladas y no podemos permitirnos perder a nadie más.... Altair es quien más experiencia tiene en combate cuerpo a cuerpo, quizás deberíamos esperar a que regrese, ya ha partido su dragón a buscarle, estará aquí en poco tiempo, espero.- se quita el monóculo y se masajea el entrecejo, el cansancio ya empieza a pasarle factura y lo nota -Si puedo ayudarte en algo, Da vinci, no dudes en pedirmelo, en este momento debemos apoyarnos unos a otros... aunque ahora mismo si me lo permitís voy a levantar a Johan e irme a descansar, creo que todos lo necesitamos- Dicho esto se levanta con un poco de dificultad apoyandose en la pared.

Cuando finalmente lo logra se acerca al pobre Johan y lo levanta con gran dificultad llevándolo a la puerta, la cual abre un estudiante cuando lo pide, el chico le ayuda a cargar a Johan hasta la habitación contigua en la que habían unas cuantas camas, dejan a Johan en una, le quitan los zapatos y cualquier otra pieza de ropa que le resultara incómoda. "necesitará hidratarse... le pondre algo de suero" piensa mientras pone una bolsa del liquido en la misma vía que había utilizado para sacarle sangre, hecho esto le deja allí, volviendo a salir para dar instrucciones a los novatos, algunos de los cuales eran sus propios estudiantes -Quiero que dejéis esta habitación libre para que lucio y los otros de la habitación de al lado puedan descansar cuando lo necesiten, además quiero que por favor limpiéis la habitación, hay sangre por todas partes y no puede quedarse así, Gracias por todo chicos, en cuanto acabeis podreis descansar.- .

Los estudiantes asintieron e inmediatamente se pusieron con las tareas que se les habían asignado, en cuanto marcharon, Sean se metió en el baño, se quitó la ropa y la dejó en el suelo metiéndose raudo en la ducha, no necesitaba el agua caliente, otros seguramente la necesitaban mucho más, pero aún así agradeció el agua fría recorriendo su cansado cuerpo, lavó su cabello y sobretodo su cara y brazos pues estos estaban totalmente manchados por la sangre de Josephine, su cabeza no paraba de pensar, ¿Que harían ahora? ¿Porqué los humanos los odiaban tanto? ¿podrían haber evitado aquello si hubieran actuado antes? ¿era una buena idea unirse con las otras especies mágicas? muchas preguntas y ninguna respuesta, cosa que hacía que le doliera la cabeza aún más. Cerro el grifo de la ducha y salió de esta, se secó con una toalla y buscó algo de ropa limpia, lo que había en los armarios era lo más horrible que podía imaginar, pantalones de cuadros, camisas de cuello alto, calcetines largos de rombos... ugh... pero era mejor que nada, se puso lo que era menos horrible y examino el gotero de Johan antes de acostarse en la cama contigua y cerrar por fin los ojos.

No alcanzó a tener la conciencia necesaria para preocuparse por Johan, que yacía inconsciente en el suelo, ni tampoco por Sean, que había quedado tan mal hasta el punto de vomitar por la ventana. Simplemente asintió ante la mirada de Lucio, así como sus palabras, formándose a la idea de que una incursión haría falta para conseguir los antibióticos que serían necesarios para darle a Josephine unos días más de vida. En otro momento habría ideado un plan en segundos, pero ver la sangre, aún cubriendo a Josephine, el suelo y sus propias manos le daban para abarrotar su cabeza de pensamientos lúgubres.

Quiso excusarse diciéndole a Lucio y a Da Vinci que no era médica y que tampoco era ingeniera de aparatos médicos como para recordar en todo momento esterilizarlos, pero no pudo ni hablar. Escuchó entonces a Da Vinci, cuestionándole cosas que no quería responder. El aparato que tenía en el pecho le hacía tanto mal al tenerlo como bien podía hacerle. Al menos había logrado convencerles de dejarlo fuera, y no terminaría con cirrosis.- Es una batería de móvil que modifiqué. Con el cargador podrá seguir varios días, si no se estropea... El sobrecalentamiento será un daño colateral, no lo sé.- Murmuró, alejándose un poco de Josephine y de todo el asunto. De haber podido no quedar embaucada en una misión para construirle un corazón artificial, se habría ido de la habitación enseguida. En su lugar, se dio la vuelta hasta donde encontró un lavamanos, comenzando a tallar fuertemente mientras trataba de deshacer sus traumas y escuchar a Da Vinci al mismo tiempo. No sabía qué era peor: si la sangre en sus manos o el agua que se ennegrecía a medida que se mezclaba.

Si bien la máquina de Da Vinci era buena idea, no podía negar que era difícil de llevar a cabo.- Te tendrías que meter a los laboratorios de la Alianza. A donde hacen los androides. Si lograramos capturar a uno tendríamos titanio, pero el resto sería difícil de conseguir. De un centinela, quizás. Tienen muchas partes que podrían usarse para ese tipo de cosas.- Murmuró, pero casi sintió que mejor no decía nada, pues de haber estado Johan despierto se habría ido corriendo en búsqueda de un centinela. Una vez las manos estuvieron limpias, se quitó la blusa, otrora blanca, aprovechando para lavarla. así como su cara y el torso, que se había manchado tambien con sangre.- Lo mejor sería hacerle algo que dure menos, quizás. Bajar un poco la expectativa. Sería más fácil encontrar los materiales.

El excéntrico Descendiente tacha de obsoleto el modelo del libro de Sean, sin tener en cuenta que la idea general puede usarse. No tiene mucho tacto con el muchacho, que se ha esforzado en encontrar algo útil, y tampoco con el que hace al suelo, al cual le pasa por encima sin mucha consideración. Así es Giordano, habrá que quererle igual.  - Si ya está diseñado, ¿cuánto tardarías en construirlo? - Espero pacientemente a que explique su plan para el nuevo corazón, casi sintiéndome como cuando asistía a congresos de medicina en los que explicaban los avances más novedosos. Mucho se ha avanzado desde entonces, no debería ser problema conseguirle un corazón artificial y funcional a la chica. Lo de Matvey es otra historia...es su propio corazón el que le reimplanté, pero la operación sigue siendo igual de compleja. Me distraigo de mis elucubraciones cuando escucho al pobre Sean vomitando por la ventana, al final no ha podido resistirlo, lo normal para una primera operación tan extrema. En cuanto se recompone un poco vuelve junto a nosotros para seguir proponiendo ideas, lo cual dice bastante de él porque seguro que lo que más le apetece en este momento es olvidar todo un rato e irse a acostar.

- Podemos hacer lo que dices, Sean, aunque no deja de ser una expedición arriesgada. La otra opción es buscar lo que queda de la isla. Según dijo Yaroslav pudieron salvar parte de ella, espero que el hospital sea una de esas partes. Nos dejó indicaciones de dónde cayó, así que podemos ir allí a ver. Lo malo es que la Alianza ya debe haber localizado algo tan grande cayendo del cielo, más si los centinelas dieron datos de ubicación. No hay que descartar que puedan haber ido a investigar a las ruinas de la isla.  - sólo con decir la palabra ruinas ya me da pena imaginar cómo ha quedado lo que era nuestro hogar.  - Sí, habla con Altair. Es de los mejores en cuanto a lucha directa se refiere. - un poco temerario a veces, así que me preocupa que pueda estar en líos ahora mismo. Miro de reojo el aparato de Victorya cuando dice lo de la batería, pensando en que es ingenioso pero poco factible a la larga.  - Es cierto. No podemos meternos en la boca del lobo para buscar piezas de androides o centinelas. En todo caso ir a algún lugar en el que recordemos que ha explotado alguno, y a veces ni eso, porque suelen recoger las piezas para que no los estudiemos ni usemos. Creo que entre los planos que robaron también había uno de un centinela, pero ningún material. Una opción algo "suicida" sería atraer un centinela para pelear contra él entre varios, y tratar de aprovechar las piezas rotas al derrotarlo, antes de que se llevasen los restos. - me paso una mano por la cara, con gesto de agotamiento - Pero no me hagáis mucho, estoy cansado y digo tonterías. - me encojo de hombros, dándole después las gracias a Sean por encargarse de Johan y por participar en la operación.

- Claro, Sean, nos vemos luego.Coge alguna poción de raíz de jengibre de las que tenemos en el dispensario médico, te vendrá bien para asentar el cuerpo después de lo de hoy.  Buen trabajo todos.

Vuelvo a revisar a Josephine para comprobar que la sangre nueva siga fluyendo gracias al aparato, observando que su respiración parece más estable que antes, aunque sigue siendo débil. - Ahora iré a ducharme y a descansar un rato antes de volver a pasar para echarle un vistazo. Enviaré a alguno de mis compañeros del hospital de Ouroboros para que me sustituyan mientras. Y descansad también un poco. - ordeno a Gio y a Vyctoria, que la última me ha ignorado un poco cuando se lo dije, ha preferido empezar a limpiarse en la habitación. Esta juventud es muy testarurda. Tras esto salgo de la habitación, organizando lo de los turnos de guardia con un compañero del hospital para que los heridos no queden desatendidos en ningún momento. Luego me pierdo por alguno de los pasillos en busca de un baño con ducha y alguna habitación en la que echarme un rato.  

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off: Lucio limbeado para paso de tiempo

Sean vomitó mientras yo explicaba y Vyctoria se puso a quitarse la sangre de encima, solo Lucio parecia escucharme mas atentamente. Malditos, era por la espinilla que me habia salido en la barbilla hacia dos dias? Era culpa del maldito estrés, no mia! Emití un sonidillo de incomodidad pero luego pasé a pensamientos menos vanales. Mmmmmmmm. Si. Llevar al hombre lobo con nosotros a la expedicion podría estar bien. Era como cuando salias a pasear por barrios peligrosos, mejor con un mastín a tu lado.

- Buona notte, Merlín. - le dije a Sean cuando se despidió tras su vomitera. - Hablaremos mañana

Me coloqué bien por fin cuando él se fue y me puse a echar cuentas con los dedos para responder a Lucio. - Momento en que tenga los materiales, un día. - un día sin dormir, encerrado en la tranquilidad de un taller.

Vyka me respondió a las preguntas que habia formulado. Ladeé un poco mi cabeza hacia la izquierda en toda respuesta.

"pues tenemos poco tiempo entonces"

- Entrar a los laboratorios de la Alianza no seria un problema. El problema estaría en salir, verdad? - aunque con el tiempo y el plan adecuado, una mision de infiltracion podia realizarse. El quid de la cuestión era ese, el tiempo. No lo teniamos. - Puedo escatimar en los sensores electronicos y los sistemas electromecánicos, incluso en la durabilidad o comodidad de las baterias, pero no en materia prima. No usar los materiales adecuados podría causarle complicaciones que la matarían a los dos días.

Presté atencion a Lucio aunque no lo parecía, pues estaba rascando una manchita de sangre del sillon en el cual me habia instalado, observando como venian los estudiantes a limpiar un poco el cuarto. Parte de Ouroboros habia sobrevivido. Con suerte, el hospital. Ahi podria desarrollar los tejidos de origen biologico si los materiales del labo no se habian dañado mucho. Y a Snagov lo habia matado un centinela, por lo que habia escuchado. Quizá encontrariamos alli restos de la maquina.

"quizá encontremos tambien soldados"

- Iré a las ruinas. - aun si aquella locación estaba comprometida sería mas rapido que infiltrarse en los laboratorios de la propia alianza, que por cierto, sonaba harto tentador....me ensoñé un momento con aquella idea. Ah, si tuviese mas tiempo.... Me puse en pie, tenía cosas que preparar. - Mañana. - chasqueé los dedos y me despedí de Vyka, pues los demás se habian marchado ya, haciendo yo lo propio.

- Mira al cielo, Sean...hay nuevas estrellas.

Una voz, en la oscuridad. Niebla y sombras alrededor, nada más. Puntos empiezan a aparecer en la negrura. En las alturas. A los lados, bajo tus pies, en todo el vacío que te rodea.  Al principio parpadean, se encienden poco a poco, nacen. El universo se dibuja en la oscuridad de modo progresivo.

- Son pozos de magia.

La luz de vuelve cegadora y el blancor lo envuelve todo, pero dura poco.


Tras el flash, estás a los pies de un lago de aguas tranquilas y oscuras. El mismísimo Merlín se haya dentro del lago, con el agua a la altura de las espinillas y la túnica arremangada, parece que busca algo en la superficie del agua.

-Ah, ahí estás, Sean.  - la misma voz que escuchaste antes se manifiesta ahora saliendo del mago, de largas barbas blancas. - ¡Qué vergüenza! Estás tan perdido, mi muchacho.  

De la nada, hay alguien mas allí. Es otro mago, se parece a Merlín, algo más joven....uno de sus descendientes.
- ¿No es obvio? Ya no saben ganar guerras. ¿Dónde está el dragón? los reyes a quienes debíais aconsejar?


- Escondidos como conejos en madrigueras, ¡digo yo! - dice un tercer personaje, esta vez, una bruja de ojos lilas y aspecto poderoso.

- A este paso nuestro apellido va a caer en desgracia. ¡Vergüenza sobre tu vaca!

-Oh Thommas... por favor, déjalo, no quiero tener que recordarte que fuiste tú quien perdió a Excalibur en aquel parque....

- ¡Vergüenza sobre tu vaca!

Otra bruja de aspecto entrañable se acerca a Sean, tejiendo lo que parece una chaqueta.  - Ponte una rebequita, que por la noche refresca. - le pone la chaqueta sobre los hombros y se aleja, cuchicheando con alguien más sobre cómo vienen las nuevas generaciones.

Voces y figuras habían ido sumándose a la primera, hablando. Al principio podías entenderlas, pero poco a poco dejan de respetar el turno de palabra y aquello parece mas un debate acalorado que otra cosa. Pero miras a Merlín, que sigue caminando metido en la orilla del lago, mirando al lago espejo. Te acercas a él...

- Merlín, ¿qué estás buscando...?

Se detiene. Bajas la mirada hacia donde él la tiene clavada y te fijas que el lago refleja el cielo nocturno.

- Las nuevas estrellas. Los pozos.- Merlín alza la mirada, contemplando las estrellas mientras poco a poco todo se va desvaneciendo en una neblina gris...

Aunque la sangre no tardó en salir de su piel, la sensación que dejaba era difícil de olvidar. La cabeza de todos parecía embotada por el cansancio, así que se acercó a la puerta despacio mientras escuchaba las alternativas. Ninguna era buena, la mayoría tenían que ver con arriesgarse por conseguir un trozo de metal.

¿No sería eso ilógico? ¿Arriesgar el bien común por el de una sola persona? - Murmuró, profundamente preocupada por todo lo que tenían que hacer, más aún, hacerlo sin magia. Cuando levantó el rostro con angustia se encontraba ya sola en la habitación, a excepción de algunos estudiantes que se habían quedado a limpiar, pero que se encontraban lejos de ella, respetando su espacio personal o escogiendo no trapear por donde de todos modos iba a pasar. Terminó por salir de la habitación, preguntando hasta conseguir una muda de ropa fresca y un lugar para dormir en la sala contigua. Si bien no era el mejor lugar, prefería sentirse en el medio de todo que estar sola ahora que ni sus sombras le atormentaban. Para responder a su propia pregunta, entendió en ese momento que para esa gente el bien común solo podía existir si todos seguían existiendo.

Los preparativos para la despedida definitiva de Snagov fueron casi tan duros como el momento de perderle en mis brazos. Varios compañeros del consejo me estuvieron ayudando, y me sirvieron como apoyo moral durante todo el mal trago. Gracias a Gaia que estaban ellos, porque de lo contrario estoy segura que  yo sola no hubiera podido seguir adelante.



Gracias a los cuervos que se mandaron para convocar el cónclave, la mala noticia fue volando (nunca mejor dicho) a todos y cada uno de los descendientes. Por otro lado también pudimos hablar con varios dragones, entre ellos el propio Lasaña, que a pesar de que sabía que era compañero de Altair, estaba muy unido con Snagov. La pérdida del moreno va a ser una gran pérdida para todos, para la comunidad mágica y para mí misma. El nudo en el estómago no se quita, sino que da la sensación de que cada vez se hace más fuerte, como si quisiera decirme algo más profundo que, aunque intento ignorar, está ahí.



Cuando conseguimos averiguar el ritual de la familia de Snagov con los dragones nos ponemos a trabajar en ello. Elaboramos una pira con la mejora madera que pudimos encontrar por los alrededores. Nos hubiese gustado poder utilizar materiales más nobles, de los cuales había en la isla, pero… la isla… eso es otro capítulo que tenemos que superar todos. Dentro Snagov estaba tumbado boca arriba, mirando las estrellas, cubierto con una sábana que hondeaba con la fresca brisa nocturna. A su alrededor, en círculo, se disponían los dragones en su forma de animal, entre ellos, los dragones que se habían quedado en su forma humana ante la crisis de la desaparición de la magia. En la circunferencia más exterior se encontraban todos aquellos que quisieron rendirle un último homenaje a Snagov: amigos, alumnos, descendientes…



Permanecimos en silencio con la cabeza agachada mientras Newton hablaba de la benevolencia del descendiente caído. A mí me instaron a que hablara, pero no tenía fuerzas para hacer o decir mucho más. Al acabar los rugidos de los dragones hicieron añicos el silencio. Era un sonido grueso y profundo, como el lamentar de lo más profundo de la tierra. Después de ello escupieron sus llamaradas para quemar el cuerpo del mago. El espectáculo, si no era que se trataba de una despedida, era algo precioso: los distintos colores de las llamas se entremezclaban entre ellos y ascendía en espiral hacia el cielo, iluminando y calentando a los presentes, las escamas de los dragones gracias al tintineo del fuego, brillaban como si fueran todo tipo de joyas con cientos de colores: rojos, verdes, blancos… a juego con los colores de sus escamas.



La gente permaneció un tiempo indeterminado delante del fuego. Algunos murmuraban, otros lloraban, había gente que lanzaba sus ofrendas al fuego… pero cada uno de los que presentes, sentía su dolor de una forma diferente. Poco a poco el tumulto y los dragones se fueron separando y dispersándose. Los que fuimos más valientes nos quedamos hasta el final, cuando las ascuas de la pira se apagaron totalmente. Piedra me abrazó en todo momento con su ala, refugiándome del frío. Ahora sí que era el adiós definitivo. No estoy segura, pero creo que fui la última en abandonar el lugar, dirigiéndome a las entrañas del castillo para perderme en la oscuridad del mismo, mañana…. Mañana será otro día.

OFF: como veis, no he hecho mención a PJ que ahora hay en activo, por si alguien quiere postear su despedida a parte, o porque esté luchando y quiera incorporarse después de la pelea, como si fuera un acontecimiento que ocurre después de la misma, o no quiera hacerlo porque le de pereza...
OFF2: si queréis podéis poner cómo veis el entierro desde vuestra propia perspectiva. Desde aquí contamos un salto temporal, para estar todos en el mismo momento
Ciao bellos!

Tras mi regreso al castillo con Johan y los demás me habia mantenido silencioso, cualquiera que me conociese bien sabría que triste, y los que no simplemente, callado. Con lo ruidoso que solía ser yo. Habia dado vueltas aca y allá, visitando a Markus que seguia en recuepracion, o chequeando en Johan. Supe de la operacion de emergencia de Josephine, y que estaba mas en el mundo de los muertos que en el de los vivos.... y quizá aquella era una de las cosas que mas habia minado mi animo.

Acudí al entierro de Snagov, claro está. Mantuve los ojos en el suelo durante toda la ceremonia, salvo cuando los dragones escupieron sus llamas y aquello se convirtió en una honorable ceremonia. Sarah, Tesla y yo eramos los unicos que habiamos estado alli para ver al dragon volar por los aires por culpa del abrazo mortal del centinela, en un intento de defender a Snagov con su propio cuerpo. Y Snagov solo nos habia estado dando tiempo a Tesla y a mi.

"Fuimos demasiado lentos."

Pensaba lleno de remordimientos y culpabilidad, porque quizá si hubiesemos sido mas rapidos, Snagov no habria tenido que sacrificarse. Si, probablemente, las cosas habrian sido mejor. Recordaba que aunque nos metió prisa y preguntó cuanto nos quedaba en ningun momento, ni él ni el dragon que montaba, recularon en nuestra defensa. Para cuando me quise dar cuenta la pira se habia consumido y alli quedabamos poca gente...Sarah y yo entre ellos. La miré, parecia tremendamente afectada. Ella no tenia por qué sentirse culpable, lo habia hecho muy bien. Recordé como me salvó la vida en el ultimo momento, ella y su pajaro gigante. Se me escapó un aspero suspiro cuando la vi darse la vuelta....me habia quedado dudando demasiado tiempo y al final no habia podido darle las gracias ni tampoco pedirle perdon.

Abandoné yo tambien el lugar, pasando de nuevo al interior del castillo, para ir a donde Josephine. Me pasaría el tiempo velandola en su habitacion o afuera en el pasillo, hasta que se me requiriese para otra cosa o ella mejorase.

La noche del funeral todo se paralizó, dentro del castillo no quedaba nadie que no fuera necesario para atender a los heridos de gravedad como Josephine, el resto estaba fuera rindiendo homenaje a Sangov y dándole el último adiós pues era una estrella más que se apagaba para el mundo de la magia... estrellas y magia, pozos de magia y nuevas estrellas...  esas palabras seguían rondando su cabeza desde que se despertó unos minutos antes de que empezara el funeral y mientras todos miraban al suelo, él miraba al cielo, escudriñando el firmamento y observando las estrellas, tan absorto estaba en sus pensamientos que el rugir de los dragones por poco le provoca un infarto, se lo merecía pues en ese momento debía apartar todos esos pensamientos de su mente y dedicar su atención al compañero caído. El gran estruendo dio paso a las llamas que iluminaron la penumbra con gran intensidad pero poco a poco la oscuridad volvió a consumirlo todo cuando las llamas pasaron a ser ascuas y de las ascuas a las cenizas, echó un vistazo antes de marcharse pues unos pocos quedaban allí, estudiantes rezagados, algún dragón, yaroslav y por supuesto, Sarah.

Mientras volvía hasta la habitación, tuvo la suerte de encontrarse con Newton, que caminaba unos cuantos pasos frente a él, aceleró para poder alcanzarlo evitando a la muchedumbre y cuando por fin lo hizo de dispuso a hacerle la pregunta. -Espera, Newton! tengo una pregunta... es posible que hayan aparecido nuevas estrellas?-. por la cara del científico estaba claro que había formulado mal la pregunta pues parecía que miraba a algún loco esquizofrénico, por lo que volvió a preguntar. -Perdona, verás, es posible que hayas visto algo nuevo en el firmamento? algo que no debería estar allí? sé que parece una locura pero podrías echar un vistazo con tus telescopios? es realmente importante, no te lo pediría de no ser así... El mayor asintió de forma afirmativa lo que hizo que Sean dibujase inmediatamente una sonrisa en su rostro, agradeciéndole efusivamente mientras estrechaba su mano para después marcharse de allí.

A primera hora de la mañana hizo lo más importante de todo, quitarse la horrible ropa que había tomado del armario de la habitación, por suerte le habían preparado una muda decente y limpia, salió de la habitación y para su sorpresa en la puerta de al lado que era la habitación de Josephine, estaba Yaroslav, le dio los buenos días, parecía que había pasado allí toda la noche. -Deberías descansar, no nos sirves de nada si también caes enfermo... puedes descansar en esa habitación- dijo señalando la contigua de la que él mismo acababa de salir, en ese mismo instante, Newton se acercaba por los pasillos, parecía serio y se dirigía directamente hacia ellos, tampoco parecía haber dormido muy bien. -Sean, tal y como me dijiste he observado las estrellas toda la noche, mira esto, es un mapa de lo que debería verse en ésta época del año en el cielo durante la noche pero hay un cuerpo nuevo, no sé lo que es pero no es una estrella, refleja la luz como si se tratara de la luna, por tanto parece que es un objeto de forma esférica y lo más extraño es que se mueve, no puedo decirte mucho más, tan solo que no debería estar ahí, volveré a echar un vistazo esta noche-.

Las palabras del mayor lo dejaron anonadado, la verdad, pensaba que el sueño no era más que una tontería, sobretodo por sus familiares discutiendo y su abuela poniéndole algo para abrigarse, era de locos!!  pero las palabras de Newton no lo dejaban indiferente, el hombre se marchó sin decir nada más pero él s quedó allí, murmurando cosas de pie mirando a la nada hasta que otra de las palabras de Merlin vino a su mente -ozos... agía... po... ¡POZOS DE MAGÍA! ¡ESO ES! ESA COSA DEBE CONTENER ALGO! Dijo alzando la voz sin darse cuenta.