Plaza central

Que Amaya le quitara el brazo al llegar a la reunión le hirió por dentro, pero tampoco quiso añadir nada a aquello. Supuso que no quería que la gente nos viera agarradas, pero tampoco entendía qué había de malo, eran amigas y qué había de malo en aquello. Suspiró tratando de no dar mucha importancia a aquello porque supondría que sería algo de protocolos y de imagen, pero, a pesar de entenderlo, le había escocido fuertemente. Se habían encontrado con Belle y, desde ese momento, sabía que la misión saldría bien, aunque su único objetivo fuese protegerla de nuevo. Le gustó ver trabajar a la chiquilla, aunque su campo se diferenciase diametralmente de la magia de Sarah. En la reunión también estaban Sayid que se aproximó a nosotras en cuanto llegamos al que devolví el saludo con una leve reverencia. Y por ahí andaba Adael conversando con una mujer que era demasiado para él. Le saludé con la mano a la distancia y luego le señalé con los ojos a la muchacha de pelo morado, alzando las cejas. Era el momento, tigre.

Según iban hablando se conocía que iban a ir sin magia a la misión. Aquello le resultó incómodo, pues muchas de sus habilidades eran dependientes de ella. A pesar de ello, tenía buena destreza con el arco, pero esperaba no tener que enfrentarse en luchas cuerpo a cuerpo si no podía transformarse en oso. Capté la mirada de Amaya cuando consultó lo de la magia y yo la desvié a Sayid dado que él es el que parecía tener más información sobre el tema. -Como dice Catherine, dentro de la zona antimagia no nos vamos a poder desaparecer, usar portales o artefactos mágicos como ciertas piedras. La animagia no funcionará y los licántropos que controlen su transformación tampoco podrán hacerlo. Sobre los dragones… creo que quedarían en la forma con la que entren en la zona sin magia, creo. Así pasó al menos cuando lanzaron los satélites antimagia, quizás en esta ocasión haya alguna diferencia. Tampoco podremos comunicarnos, no tendremos ni espejos ni monedas ni patronus… Si usamos tecnología la infectará SAM…- Expuse ante los compañeros cuando empezaron a comentar los problemas de la no magia. Observé al rubio Pendragon que se nos unía y se quedaba al lado de otra maldita pelirroja con cara de pocos amigos, dirigiéndoles precisamente a ellos el tema de los dragones. Lo de las comunicaciones lo dije mirando a Amaya, sin saber muy bien cómo podríamos comunicarnos en ese caso

Permanecí de brazos cruzados mientras escuchaba la asamblea mezclado entre el resto de la gente, atendiendo a lo que decían unos y otros. En resumen, estábamos jodidos porque eran puntos sin magia. A mí eso me daba igual porque no tenía, pero perdíamos mucha potencia de ataque y capacidad de defensa. Tocaba confiar en la tecnología, y en la fuerza física, a no ser que encontrasen la manera de poder usar magia en esas zonas. Que lo descubriesen los que sabían del tema, yo podía aportar en lo mío. En mitad de aquello llegó un patronus con la voz de Gen, que se situó frente a mí retransmitiendo su mensaje.

Mensaje Gen escribió:Que si sucede algo? Vas a flipar Imram!A Cleo, Ben y Lykaios les han encerrado por protestar!y..y...joder!(ruido raro de golpe y señora quejándose) Mire por dónde va señora ! Lo siento, es que estoy buscando a Mérida que no está bien. No va Kyllian y le suelta que no quiere que estemos cerca de su hijo!¿Tú te crees?en fin, que me lío, que te tienes que encargar tú de la reunión, el General ha dicho que ayudaremos aunque... atención: resulta que ahora la Brigada es una organización ilegal en la isla!luego te lo explico bien pero estoy bastante harta! iré a la reunión en cuanto encuentre a Mer!

Aluciné desde el momento en que me dijo que el resto estaban encerrados por protestar, comprendiendo por fin por qué no venían. Mérida me preocupaba también, sobre todo porque cuando me despedí de ella parecía estar mejor. Para colmo aquello de que éramos ilegales. Bufé indignado en cuanto la voz se apagó, cualquiera presente en la reunión la habría oído.

- ¿¿Qué estupidez es eso de que la Brigada ha sido declarada organización ilegal?? ¿Por qué? - pregunté en tono de protesta adelantando un paso o dos en el círculo de la asamblea, cerrando los puños cabreado. Aquella pregunta iba para los Descendientes presentes, quería respuestas inmediatas. - ¡Deberían estar en esta reunión y no en un calabozo! Hemos hecho mucho por la isla como para recibir este trato, y ahora mismo no es el momento de despreciar a vuestros aliados. -

Todavía seguía rumiando el desafortunado encuentro con Da Vinci, la rubia Pendragon y el oscuro desconocido, pensando en que había sido una oportunidad perdida para conseguir armas para la misión. No se me ocurría mejor cosa que hacer que sacar a Erin a pasear en brazos para soportar la desesperante espera en la isla, llevándola conmigo a la zona de la plaza. Así me enteré de que esos asquerosos estaban haciendo una reunión para la misión sin haberme avisado. No sabía si lo habían hecho con Andreas, Sigrid, Blair o Gelion, pero el caso es que yo no sabía nada. Y parecía que ellos tampoco, no estaban ahí.

Me acerqué al círculo con curiosidad y mosqueo a partes iguales, pillando algunas partes. Así que necesitaban tecnología...vaya sorpresa. Al parecer llegaba en mal momento, un cegato estaba hablando de no sé qué cosa de ilegalización de la Brigada. Decidí seguir el dicho ese de "a río revuelto ganancia de pescadores", aprovechando para meter baza.

-  Una vez más habéis decidido que podéis ignorarnos en todo esto. Sin magia no sois gran cosa. Necesitáis gente que sepa manejar bien la tecnología, y aquí apenas tenéis ese perfil. Ya se lo dije a Giordano en su taller cuando fui a verle, aunque parecía muy entretenido con el negrata callado y la rubia de los dragones. Sé pilotar, pero necesitaré un avión. No tengo ninguna segunda intención, únicamente ayudar.

Las palabras de la dragona indican lo grave de la situación con respecto a esa IA. Un todo o nada—comprendo—asiento a lo que me acaba de decir. Por lo demás, parece que empieza a desarrollar una opinión propia y particular, pero no se pronuncia salvo esclarecerme el linaje de Giordano—vaya, un secreto por fin revelado—hay mucha especulación de su vida privada, incluyendo su sexualidad, siendo varios estudiosos que insinúan la homosexualidad como parte del famoso Renacentista—¿quién es cuerdo?—cuestiono jocosamente—todos somos excéntricos a nuestra manera. Ya preguntaré también por esa reunión, han de ser informados de este detalle—no sé hasta qué punto será útil será esta información para su incursión, pero como mínimo merecen saber de este asunto, incluso puede que uno sepa como ayudarme aparte de Giordano.

“Depende de si le interesa o no guardar el secreto” – cuanta confianza me da ese comentario, ¿a que si?, ¿a ustedes no?, igual a mí, pero tampoco es que tenga opciones más allá de ser ejecutado en la superficie.

Termino saliendo del salón de té y me dirijo a la Guardia para preguntar donde se ubica esas instalaciones de investigación donde debería estar Giordano Descendiente de Da Vinci. Resulta estar literalmente al otro lado de la isla, por lo que me embarqué tomando un croquis por si las moscas.

Una vez llegado, no parece estar ese Descendiente, ni nadie está al tanto de su estancia en ese momento, por lo que decido lanzar un patronus, aunque no sé si va a funcionar, desconozco los limites de este particular hechizo, ¿servirá aun si no he conocido a ese Descendiente?, en fin, lo termino enviando y me quedo en el lobby para esperar un rato antes de decidir hacer otra cosa.

Pasan los segundos, luego los minutos y al final da casi una hora la espera de algún tipo de respuesta, por lo que concluyo que tengo volver a una búsqueda más tradicional o ir a esa reunión donde se hablará del asunto de esa IA. Así que decido volver a la Guardia, está vez me teletransporto al conocer su locación. Una vez devuelta pregunto si hay alguna reunión sobre una misión en la superficie, pero nadie parece estar enterado de nada. Hasta que alguien hace mención de avistamientos de un par de Descendientes en la Plaza Central y me voy en dirección al sitio. Puede que ahí ande Giordano o de lo contrario, me veré obligado a revelar mi secreto en ese momento, lo cual no me augura buenas probabilidades.

Ya en la plaza, no me resulta difícil saber a quienes dirigirme, había un par de dragones y un círculo de una variopinta variedad de personas enfrascadas en un debate, de los cuales reconozco a los pocos Descendientes que he conocido, a Adael, Sarah y la Descendiente de Le Fay. Me acerco al primero tocándole el hombro para llamar su atención—¡Ey!, nos vemos de nuevo, ¿está es la reunión para la nueva misión contra Evil SAM?, aunque esperaba hablar con Giordano en primer lugar, llevo un rato buscándolo—comento mientras reviso al resto de presente—¿está aquí?, que no le conozco y ni idea de cómo luce—entonces una pregunta más sensata me surge—¿lleva mucho rato la reunión?—espero no tener que recibir mucha información de golpe, si es que decidían compartírmela.

Por suerte los presentes tenían ganas de participar, no había nada que me gustase menos que un grupo de gente callado que no aporta ideas cuando se les pregunta. Amaya planteó una cuestión muy lógica, a lo que respondí rápidamente.
- No más gente que pueda ser controlada y que abra portales. No puede repetirse lo de la vez anterior. Tenemos que confiar en otro medio de desplazarnos rápido.  - eché un vistazo al resto de Descendientes, aceptando la propuesta de Adael de mandar aviso a androides y Pendragon. Con los de la Alianza tenía parte de razón...eran un arma de doble filo. Podíamos usarlos para lo que queríamos, pero también podían escaparse.  - Es valorar beneficio-riesgo. Todos tenemos cuentas pendientes con ellos por lo que hicieron, así que no sé quién decide aquí quién baja y quién no. Al menos Sigrid es esencial.- además, estábamos escasos de gente que pudiese luchar, cualquier ayuda era necesaria. Presté atención a Sayid cuando nos recordó lo de la convergencia, los puntos de magia y de antimagia. En ese momento yo estaba retenido en la Ciudadela Alpha sin poder usar la magia, y pude escapar de ahí gracias a la explosión de magia de esa convergencia. El resto de detalles me los contaron luego, como lo del dispositivo que imitaba a los satélites de S.A.M.  

- En resumen, estamos jodidos sin magia y no podemos contar con un artefacto como el que usasteis en el castillo Le Fay. Aunque diese tiempo a crearlo en los escasos días que nos quedan, no estamos seguros de si será suficiente en esos lugares.  - coincidí con Thalos en eso de que necesitábamos tecnología más básica, algo que no fuese fácilmente pirateable por la IA. - Volver a la comunicación por radio. ¿Alguna mierda de botas propulsoras? ¿algo para volar rápido? Da Vinci y Tesla podrían hacer algún chisme así. No parece tan difícil como crear otra imitación del satélite. - recordaba aquellos planos que habíamos robado, parecían muy difíciles de replicar. Reparé en Juliet en cuanto participó, extrañándome un poco de verla hablar en público. Al que no localicé fue a Reiv, pero mejor. Él no debía bajar en esta ocasión.  - Los portales no  funcionan, Juliet. Para activar las piedras tenemos que canalizar magia...y no seremos capaces. No es tan sencillo eso de "trasladar magia".  De todos modos que digan los que estuvieron en el castillo Le Fay esa vez, por si acaso hubiese alguna esperanza con lo de nuestros poderes. - sonaba mal lo de cargarse un Centinela a palos, pero era eso y armamento, a no ser que alguien tuviese una solución mejor para que pudiésemos usar nuestros poderes.

Catherine aportó lo de llegar hasta el límite de la zona con los portales o trasladores. - Tal vez usar de nuevo los trasladores con clave de Sean, o incluso alfombras voladoras cerca de la zona. Creo que deberíamos usar una combinación de todo, medios mágicos para la zona límite y tecnológicos para alejarnos hacia esa zona. Eso es el futuro, no cerrarnos sólo en lo nuestro. - miré brevemente a Josephine porque era lo que me había comentado antes, lo de permanecer en la retaguardia para curar. Ella sabía usar medios clásicos sin magia, era capaz. Belle también aportaba lo suyo junto a Sigrid, aunque ni idea de quién era Collins. Luego habló la descendiente de Darwin, sonándome algo pesimista aunque debía reconocer que la realidad de lo que teníamos era muy complicada.  - Los dragones conservarán su forma si entran así, y el fuego de ellos es intrínseco a su forma. Deberían mantener esa forma...siempre y cuando no sea otra vez un puto subterráneo. ¿Dónde se mete el S.A.M hackeado cuando necesitamos que nos diga lo que hay ahí?  - suponía que esas cosas no podían mentir, así que, en teoría, debería decirnos cómo era el lugar al que nos enfrentábamos.


Algo cambió  el curso de la reunión, interrumpiendo el intercambio de ideas. Un patronus para Imram soltó de golpe y porrazo que la Brigada había sido ilegalizada. No entendí una mierda de aquello, pero me parecía una locura. Ellos no tenían derecho a opinar sobre ese grupo. Habían sido amigos y aliados nuestros durante muchos años, así que no dudé en dar la cara por ellos.  - ¿Quién ha tenido esa idea justo en este momento? Dudo mucho que hayan cometido algún crimen como para estar encerrados o ser ilegalizados. Que no podemos perder el tiempo peleando entre nosotros, joder. Soltadlos y ya se discutirá luego lo que quiera que haya sido. - luego apareció el que faltaba, el insufrible Éamon dándoselas de piloto. Puede que fuese verdad, pero odiaba ver su jeto por allí. Casi se carga a mi hermano y por su culpa estábamos como estábamos.

- ¿Igual que ayudaste en la Ciudadela Alpha? fuiste bastante inútil, todo el rato por ahí perdidos. - además, se pensaba que le iban a hacer in avión en tan poco tiempo. Si bajaba que fuese como el resto, en igualdad de condiciones. Al poco apareció un peliblando que parecía un poco perdido, preguntando por Da Vinci y el tiempo que llevaba la reunión. -  Da Vinci no ha llegado aún. Y acabamos de empezar la reunión.

Caminabamos Benjamin, Cleo y yo direccion a la plaza central, despues de recuperar nuestras cosas y nuestra "fuga" de los calabozos. El unico problema era que seguiamos con las cadenas aquellas que evitaban la desaparicion y iban drenandonos magia poco a poco. El caso es que Gen habia hecho un intento para convencer a Lucio, estaba casi seguro. Pero no tenia claro si había sido ella o lo habia hecho por otros motivos, tal como nos dijo con mucha lucidez, habia puesto cara de mucha molestia al verse atrapado por aquella esfera magica.

Iba caminando a largas zancadas, con paso decidido, pensando en lo ocurrido y en qué no sabía como iban a desarrollarse las cosas con este caso de "desobediencia" que estabamos haciendo.
-Recordad que no interrumpimos nada. Protestamos cuando fue dada la sentencia, terminado el acto.  - les dije a ambos conforme nos acercabamos, no quería que se les ocurriera pensar que de verdad eramos culpables por aquello. Y ni mucho menos que mereciamos pasar ahi 24 horas.

Quizá era el modo vehemente en el que caminabamos los tres, o quizá era el tintineo de las cadenas de nuestras muñecas, el caso es que no nos hizo falta pedirle a la gente que se apartase...pues nos abrieron camino solos hasta que pudimos llegar a donde estaban Black y los demás, ya hablando de cosas referentes a la mision. El lugar en el que Johan habia convocado la reunion creó la expectativa de bastantes civiles a decir verdad.

Pasé mis ojos por los presentes con ojos serios... Y me dieron ganas de reirme, porque lo del calabozo ahora me parecía absurdo.
- Quienes cojones os habéis creido que somos? Pasarnos 24 horas de brazos cruzados en una celda cuando hay que decidir como  ir a salvar culos alli abajo? - escupí al suelo demostrando lo estupido que me parecia aquello y mi protesta, y luego levanté los puños a la altura de mi pecho, cerrados. - Cuando hayamos hecho el trabajo si queréis pagamos por nuestras protestas, 24 horas, o 48, o las que sean. Pero joder, ahora...ahora no - bajé las manos, con un gesto mas relajado. Evidentemente podían encadenarnos las manos, pero no nuestra voluntad por luchar. Hasta sonreí de lado, miré a Johan  y luego a  los otros descendientes que habian alli - Así que caballeras y caballeros,  vamos a dejarnos de pamplinas y vamos a preparar esto como los aliados que somos. El mundo aguarda, eh?

Alcé una ceja mirando a Amaya y algun armadureado mas que pudiese haber por alli. Porque....oh, o...podian no dejarse de pamplinas y elegir volver a meternos de donde nos habiamos escapado.

S.A.M-41020 se había dedicado a explorar la isla tras su transformación y hackeo en el I+D el día de la incursión. La mayor parte del tiempo iba acompañado por Sigrid y por James, además de algunos guardias que se aseguraban que se mantuviese tan pacífico como el primer día. Aquella libertad relativa le había permitido estudiar en más profundidad la isla de Ouroboros, recopilando información sobre el lugar y las costumbres de sus habitantes. Una de esas costumbres tenía que ver con las fiestas que estaban celebrando, entregándose paquetes de regalos. La IA tomó la decisión de imitar aquella conducta, paseándose por el mercado con un gorro de Santa Claus y un saco con el que repartía pequeños paquetes. Dentro había macetas con cactus de Navidad, una planta que había visto en los invernaderos de Dioscórides y había hecho crecer con mayor velocidad usando su nanotecnología. La cara de los lugareños había sido un poema, en su mayoría. Registró 230 caras de miedo, 100 de desprecio, 20 de sorpresa y sólo 5 de alegría sincera. El miedo era, sin duda, la sensación predominante todavía.

El patronus recibido hizo que la IA acudiese a la reunión, utilizando su forma de nube de drones para desplazarse rápidamente y recomponerse en la plaza. El tema a tratar era la misión para la que ya había avisado que tenían 15 días. Estaban al límite. - Vuestra demora con los preparativos rebaja vuestras probabilidades de éxito un 45%. El plan de debe quedar preparado en menos de una hora si deseáis tener el tiempo suficiente para organizaros. Las copias del núcleo se encuentran en tres nuevas torres de alta seguridad, ubicadas en lugares en los que se escanearon detectó nulos niveles de energía mágica. Zonas en las que los magos con el chip no podían utilizar sus poderes.

Nos dirigimos al lugar de la reunión todo lo rápido que pudimos, aunque manteniendo los puñeteros grilletes con cadenas en las muñecas. Esta vez  no nos habíamos currado nosotros la fuga, pero daba igual, la adrenalina del momento era la misma. Esperaba que Cleo también estuviese de acuerdo con habernos ido, que por un momento me pareció verla dudar. Lykaios nos recordó que no la habíamos liado sin motivo, y que además apenas habíamos hecho nada.  

- Pues claro, si nos esperamos hasta el final y todo. Que no flipen. - bufé conforme nos aproximábamos a la zona de la plaza en la que estaba el círculo de gente, abriéndonos paso hasta llegar a donde estaba la acción. Muy concurrido, con varios Descendientes en el lugar. A la última que habíamos visto era Catherine, así que alcé la mano engrilletada y la saludé con una sonrisa de "aquí estamos" mientras Lykaios hablaba. Estaba diciendo las cosas claras, era eso, ni más ni menos.

- Y quitadnos esto, que parecemos delincuentes. De los malos. - un poco delincuentes sí que éramos a veces, pero no para tanto. Alcé las manos con los grilletes para que alguien que pudiese nos los quitase. Por allí estaba la guardia metálica, Amaya. Ella también estaba en el juicio y no sabía si era Jackliever o no.

Había terminado de trabajar e iba hacia la casa de Nicho cuando empezó a ver gente reuniéndose en medio de la plaza. Aquello le llamó la atención y empezó a ir hacia allí uniéndose a un grupo de gente que iba con esposas. No los ubicaba demasiado pero tenían pinta de guerreros. Al llegar allí reconoció a la General y también a la morena que había ido a la biblioteca a defenderla. También parecía que había más descendientes. Se quitó los cascos y la funda de la guitarra para apoyarla en su pie mientras miraba. Por su parte se dedicó simplemente a oír y oír...Y oír un poco más porque parecía que los mandamás estaban a tope discutiendo cosas. Pero claro, es que parecían tener todos un objetivo en común pero queriendo hacerlo a su madera. Agotantes, los jefes eran agotantes. Se acomodó bien la capucha de su chaqueta y miró en dirección de todo el mundo, tratando de dilucidar quienes eran por sus pintas.

"Refugiado, refugiado, habitante, descendiente, refugiado, descendiente, refugido, refugiado, niña, niño, alguien raro...Y el robot creepy"

Se quedó mirando a SAM largamente, con curiosidad, y como a él realmente le sabía a mierda los jefes -Yo me apunto a la misión, sé combatir cuerpo a cuerpo - Murmuró alzando la mano con suavidad antes de mirar hacia SAM yendo hacia donde estaba el bicho ese  con un gesto ceñudo, parándose en frente y hablando en un tono de voz bajo -Ummm ¿Guardáis listas de las personas chipeadas?- Preguntó al oír aquello de que tenían "registros" de las zonas donde los magos "chipeados" no podían hacer magia. Eso era, cuanto menos, importante para él.  Y las máquinas siempre tenían registros ¿No? Cookies, maybe.

Los descendientes se encargaron de hablar con las facciones restantes aunque Sayid no parecía muy convencido. De todas formas, ella tenía otros problemas. Ordenó a los guardias sacar al visitante de la recién capturada mujer de pelo blanco.  El tema de la magia resultó un dolor en el estómago pero Amaya no era la única de sus filas que podía enfrentarse físicamente a alguien -De las filas de la Guardia acudirán aquello con mejor desempeño físico que mágico para prestar apoyo- Dijo con un tono neutral respondiéndole a la descendiente Le Fay. Lo cierto es que el resto de las decisiones tendrían que tomarla los descendientes, ella sólo cumplía órdenes y tenía que organizar a su gente.

La mirada de Sarah le hizo saber que se preocupaba por la comunicación de la guardia y simplemente asintió con suavidad, dándole la seguridad de que todo iría bien. Aunque usaban los cascos no era la única manera de comunicarse. De pronto un patronus llegó informando de la situación de la Brigada y uno empezó a hablar en su defensa. Amaya inspiró profundo y miró a Sayid mientras recibía un informe de los guardias de los calabozos. El Descendiente Lucio los había liberado. Aprovechó el revuelo de la llegada del humano y SAM para acercarse a Sayid, se inclinó para susurrrarle al oído-Han sido liberados de los calabozos por el descendiente Galenus ¿Qué hago?- Preguntó a todos por la Brigadista Leila pero estaba aún en su celda.

La llegada de aquellos hombres hizo que tensara los labios. ¿Tan difícil era cumplir UNA sola orden? Aparte ya tenían un representante.  Amaya le devolvió la mirada a Lykaios de una forma bastante neutral y lo mismo hizo con Ben y tras eso se giró hacia Sayid esperando su orden sobre sacarle las esposas o no.  Ni siquiera se ponían de acuerdo, eran agotadores, lo que le recordó toda la tramoya de Matvey cuando se lo contó Sarah. No tenían unión alguna. Aguantó las ganas de soltar un berrido indignado por la forma en la que se pasaban la responsabilidad el uno del otro.

"ughh....mucha gente"

Mi buen humor se desvanecia por momentos, cuanta mas gente llegaba, dragones incluidos, gente con cara de oler a pedo y demas cosas asi. Me acabé el cigarro y lo apagué tirandolo al suelo.

"asi que no pueden revertir el efecto...pues puta mierda para todos"

- Entonces, establecer zona segura fuera del perimetro de la no magia. Para evacuacion y heridos. Ahi deberian quedarse los magos que sois mas poderosos en hechiceria , para proteger el área y no dejar que nos arrebaten la base. La comunicación será clave, y sin embargo, no podremos confiar en magia. Deberiamos usar dispositivos de radio, como haciamos en la Alianza. Un tostón, pero infalibles. Sí, es posible que nos intervengan las comunicaciones, pero si tenemos un código especifico que solo compartamos nosotros le costará mas descifrar de qué puñetas estamos hablando. Si el momento llega en el que nos inhiba las señales de radio, propongo que algun ingeniero esté listo para plantar una antena auxiliar en el area....y en caso de desesperacion el uso de bengalas o uso de humo puede mandar un mensaje corto. Basta con compartir el mismo codigo como ya he dicho. - contesté asi a lo que dijo Sarah Darwin, yluegho añadi algo mas. - Y deberiais llevar matalobos porque si los licantropos que vengan se descontrolan...malo.

Los miré a todos a ver si me seguian y estaban de acuerdo. Vamos, es que era de logica.
- ¿Podeis proporcionarnos esa cantidad de dispositivos de radio? Y vehículos? Podríamos robar alguno de un desguace, y reacondicionarlos. Por eso del tiempo jugando en nuestra contra que dice ella. - señalé a Catherine LeFay con un gesto de mi cabeza. - Yo puedo prestar buen servicio en cuanto a fuego de ataque se refiere. Solo necesitaré que me dejéis elaborar unos cuantos explosivos en vuestro taller.

Me callé cuando llego un patronus dando a Imram la informacion que antes estaba buscando, sobre su Brigada. Alcé las cejas sorprendido por los hechos. Pff, mal momento habian elegido para enjuiciarlos y meterlos a una celda.

Pero tambien llegó Eamon hablando de pilotar y dandoselas de importante.
- Ya nos va a costar conseguir un vehiculo con un minimo de blindaje para esta mision....de donde piensas sacar un avion? No me malinterpretes, yo tambien podría pilotar. Puestos a pedir...mejor un helicoptero, no crees? Facil aterrizaje, dejar y recoger pasajeros.... - a donde iba a ir el flipao este con un caza? - Con cuantos dragones contariamos para ese supuesto aterrizaje en la zona de ataque? - pregunté al grupo.

Entonces llegó Lykaios con otros dos, quejándose por lo ocurrido. Lo escuché en silencio y me saqué otro cigarrillo, encendiendolo pero dedicándome a estudiar las reacciones de los demás. Se produjo un momento de incomodidad y silencio en el que los guardias no reaccionaron, esperando ordenes superiores.

"menudo percal tienen estos montado.... que espectaculo mas patetico"

AL menos llegó Sam, con sus maravillosas estadisticas.
- Tienes planos detallados de esas torres, y en qué plantas se encuentra lo que buscamos?

Después de una parada por mi taller para cambiar mi ropa y coger mis enseres, ademas de beberme media cafetera, aparecí en la plaza, donde ya habia un monton de gente reunida.

"Quiero quedarme debajo de mi edredón hecho un ovillo durante el proximo trimestre....agfdgf"

Había cierto jaleo, Sam estaba alli, no me quedaba claro por qué habian unos tipos con cadenas (ey mira a ese lo conozco) varios de mis compañeros, Belle mi futura aprendiz a la que tenía que proponerme todavía....Johan...radios...vehiculos....

- Nosotros.... ughh, quita, Teofrasio - dije apartando al panadero, que era tan enorme como su pasión por los dulces que hacía - podemos hacer los dispositivos de comunicacion. Tesla y yo, quiero decir, SI TESLA SE DIGNA A ASOMAR EL HOCICO!- grité al aire, estaba muy indignado aun.

"mierda esa es Lake"

- Espera, Teo, no te vayas. Hazme un resumen. - agarré al panadero, tirando de la manga de su chaqueta para que se agachara un poco para contarme lo que habian dicho, por llegar tarde  no habia pillado ni la mitad de la info. - Aja...aja....hala que dices, que fuerte.... vale, muy bien. Me puedes preparar una caja de pastas? Si, me paso luego por tu tienda.

Me separé del hombreton, al parecer teniamos un problema con la no magia.
- Si es necesario podemos fabricar algunos transportes, pero no va a dar tiempo a hacer nada demasiado maravilloso.

"está el barco que le estabamos haciendo a los ilegales estos....mmm ....espera...si lo divido y le buscamos motores.....uf, no, pero la estructura es muy pesada, sin magia de apoyo no hay modo de que se sustente....  tendria que deshacerlo todo y llevaría demasiado"

Eso me pone en un predicamento.- Mencionó cuando Thalos pidió dragones y mientras pensaba en todo. Para ataques físicos, su mejor forma era la dragón, por la fuerza, pero iba a ser todo totalmente inútil si era en un subterráneo. Podía arriesgarse, pero la verdad había asumido desde el inicio que aquella cosa tendría un subterráneo de nuevo. La cuestión del transporte ella la veía muy clara. Los dragones tendrían que ayudar.- Quizás gastar el poco tiempo que tenemos en un avión de un solo uso sea demasiado. Yo puedo llevar... al menos a cinco.- Dijo, haciendo un cálculo rápido. Cinco no le quitarían rapidez, pero quizás no sería del todo cómodo, pues ella era muy pequeña.- Sin embargo, ser transporte me quitaría la posibilidad de entrar a la torre y la mayoría no estarán acostumbrados; habría que hacer algún tipo de... amarre. Me quitaría movilidad estar cuidando que no se caigan.- Habló por lo bajo y en calma. No sabía si le pondrían atención, pero al menos estaba externando sus preocupaciones.

¿Torres dices? ¿Torres hacia arriba... o hacia abajo?- Preguntó haciéndole segunda a Thalos con lo de los planos. Entonces había una posibilidad de la forma dragón. Cerró los ojos un instante, pensando en lo mucho que tendría que correr sola por una ciudad extraña si acaso tenía que volver al borde de la antimagia para destransformarse. Sería una misión bastante suicida de hacer sola. Hacer de transporte la iba a obligar a quedarse en la base. Quizás a defenderla. Además, ya estaba probado que era una cuestión difícil, pues de haber centinelas se ensañarían con ella.- Más de uno vamos a necesitar lecciones de tiro...- Apuntó de mala gana, pues aunque no se le daba mal el combate cuerpo a cuerpo, sería más difícil conseguir una lanza de repuesto que quitarle algo a un androide. Como fuera, sacó la moneda y comenzó a teclear un mensaje para Reiv que envió de inmediato.

Amaya llegó con Sarah y Belle la cual me devolvió el saludo y no pasó mucho tiempo hasta que dio inicio la reunión. Cuando pidieron llamar a los humanos o Pendragon intercedí por Sigrid y entonces Belle tomó la palabra, estaba pidiendo que el hijo de los ministros formara parte de todo... mal plan, ni tan siquiera me parecía una buena idea que ella volviera a exponerse, de hecho estaba pensando que si ayudaba mejor que lo hiciera desde la isla, que trabajara en un código o algo para que nosotros pudiéramos ejecutarlo fácilmente. Envié el patronus a Sigrid y después Johan empezó a enumerar la información que teníamos dándome cuenta del gran problema, no tendríamos magia para luchar.

Las dudas empezaron a surgir respecto a eso y Thalos recordaba el dispositivo que usamos en el castillo -Ese dispositivo estaba alimentado con un material que no tenemos ahora mismo, habría que ir a buscarlo y desconozco por completo si podríamos tener un dispositivo igual en poco tiempo y portátil- y no había nadie que nos lo pudiera confirmar, ni Tesla, ni Gio ni los que fueron a Turín la primera vez a conseguir el material, un desastre. Lo de los transportes y las comunicaciones no era un mal plan pero dependiendo del lugar al que fuéramos funcionaría o no porque si volvíamos a encontrar un lugar subterráneo las señales de radio se verían afectadas.

Aún seguía llegando gente a la reunión y la verdad... me iba a dar algo por la impuntualidad que no era culpa de ellos sino de Johan por no poner una hora, la primera en aparecer fue una mujer pelirroja  seguida de Catherine que en seguida me informó quien era, la prometida de Markus, o eso pensamos. Los problemas seguían surgiendo -Hay sanadores que pueden curar sin magia, Lucio y Aldaron se encargaron del lefay pero no están preparados para la batalla, serán un blanco fácil, hay un patrón en el ataque de la IA, mi mujer ha resultado herida en dos ocasiones y es que sabe que debe eliminar a los sanadores primero, sin sanadores no hay segundas oportunidades- la idea del perímetro era relativamente complicada -Tal y como dice Thalos tenemos que establecer una base pero no solo eso, también algo para mantener los ojos de SAM lejos de lo que pase tras sus puertas, un señuelo, porque en el momento que sepa que hemos entrado a sus bases puede concentrar sus fuerzas en ellas... la velocidad también es crucial, debemos entrar y localizar las zonas de inmediato, seguir un plan, no ir todos desperdigados y haciendo cada uno lo que le parece mejor- algo que había ocurrido en la misión anterior, habíamos perdido a muchos guardias por eso, se habían sacrificado en vano.

Me llegó el mensaje de Catherine, mi rostro se mantuvo serio pero era consciente de su preocupación "El consejo debe proteger la isla, si volvemos a fallar solo queda Ouroboros para volver a intentarlo... deberías quedarte Catherine, tienes familia, eres una gran hechicera y te van a necesitar, sé que dejo a Arleen en buenas manos si algo llegara a pasarme" la miré y vi como agachaba la cabeza pero yo sonreí y le puse una mano en el hombro. Otro de los Pendragon hizo acto de presencia y Sarah tomó la palabra hablando sobre los dragones, recordaba que no podían transformarse sin magia, Zaphira quedó atrapada en su forma de dragón durante casi todo el apagón de magia al igual que lasaña, eso contestaba a la pregunta que Catherine me había hecho antes y había otras dos cosas claras, ni tecnología ni portales.

Un patronus llegó y casi todos pudimos escucharlo, era de la brigada y enseguida su portavoz saltó al ruedo reclamando por aquello ¿acaso no podían simplemente hacer las cosas bien?¿qué le costaba preguntar en un momento más oportuno? cerré los ojos y me masajeé el entrecejo bastante cansado, demasiados problemas, encima Amaya me decía que Lucio había soltado a los de la brigada, como me hirieran en la siguiente misión y quedara fuera de combate más de una semana la isla se iba a la mierda. Iba a pedir calma para después explicar el problema con la brigada después pero entonces llegó el ministro con información que no me gustó nada, miré a Catherine ignorando su petición de un caza y no sé qué historia más -Espero que el ministro se equivoque- es que no podía ser, después de advertirle y saber el peligro que entrañaba no solo para él sino para el resto del consejo se había ido otra vez con los pendragon.

Estaba empezando a saturarme con tantas cosas y la guinda fue que aparecieron los presos, escupiendo, alzando la voz y exigiendo, fruncí el ceño contestando a la mirada de Amaya-No general, no se les van a retirar las cadenas- y lo dije bien alto para que me escucharan -Cometieron desacato en un juicio oficial y debían pasar un día en los calabozos, se les permite asistir a la reunión, es justo ya que todos bajaremos, pero las reglas de Ouroboros deben cumplirse ¿creéis que se le daría un trato diferente a nuestros propios ciudadanos? no- y ahora me dirigía a todos para que quedara claro -Aquí se tiende la mano a quien lo necesita, a cambio pedimos orden y que se respeten nuestras normas, vivir en la anarquía no sería beneficioso para los que quedamos, sois amigos, aliados, compañeros,  luchamos juntos pero creo que no se escupe en el hogar de quien os da refugio, no se ataca a nuestros guardias que han dado la vida igual que muchos de los vuestros por defendernos y desde luego nosotros no os daremos la espalda pero eso es un tema a debatir en privado, si les parece bien- menudo descaro y encima en la plaza, por esas cosas era mejor hacer las reuniones en privado ¿qué le costaba a Johan preguntar?.

Necesitábamos un cónclave antes de bajar, había muchas cosas que discutir y cambiar. SAM llegó para decirnos que no nos quedaba tiempo, se reducían nuestras opciones y con razón. Giordano también hizo acto de presencia y lo miré de forma reprobatoria antes de volver a tomar la palabra -No somos máquinas, hemos necesitado tiempo para recuperarnos después de la última misión, pero es cierto que no podemos perder más tiempo. Si tiene los planos de los diferentes edificios podremos trazar rutas y planes de forma más precisa. Yo iré con la guardia a uno de los puntos, trazaré un plan lo antes posible y  entraré con quien quiera acompañarme a uno de los núcleos- dicho eso no tenía mucho más que añadir, escuché al resto debatir y cuando lo creí oportuno me retiré no sin antes decir algo a Catherine por lo bajo -El consejo debe reunirse antes de bajar, debemos prepararnos para lo peor para que la isla sufra lo menos posible-

Lo de los sanadores estaba empezando a preocuparle, también lo de las pociones. Si Ian volvía allí abajo y perdía el control y … Contuvo la respiración, porque no se trataba sólo de él…Kyllian y Altaïr. Envió un mensaje mental a Sofía y Anteia, informándoles de la situación. Del resto se mantuvo en silencio mientras todos respondían y resumían, al menos, hasta que llegó uno de los Ministros…Hablando de Giordano. La morena sintió que se le encogía el corazón. ¿Por qué era tan difícil pedir ayuda? Le dijo específicamente que no se reuniera a solas con ellos y…Y allí estaba, encima el muggle hablando a vox populi. Escuchó a Sayid y aunque su gesto se mantuvo neutro sus ojos estaban tristes, apartó la mirada con rapidez tratando de que no lo notara. ¿Estaría enamorado? ¿Sería eso? Pero no lo vio así… ¿Qué tenían los Pendragon que no paraban de seducirlo hacia su bando? Se llevó la mano a la túnica sintiendo un desazón horroroso en el corazón pero lo disimuló acomodándose los botones de la misma. -Permiso concedido- Le informó a Thalos cuando dijo lo de usar el laboratorio para sus bombas, a fin de cuentas, era un renegado que había peleado varias veces o al menos de eso tenía conocimiento. Lo había visto en China Town.

“De acuerdo”, respondió y atendió a la información de Sarah asintiendo brevemente aunque aún estaba mareada por todos sus pensamientos anteriores. No pudo perder más tiempo en ello porque un patronus informó de la situación de la Brigada. Catherine  observó al chico quejarse y luego a los demás pero intentó mantener un gesto neutral, estaba agobiándose…Necesitaba salir de ahí y respirar. La morena miró a Lykaios con la misma profunda tristeza que había sentido antes y que sólo se había acrecentado al verlos allí. Amaya procedió pero no hacia ella sino hacia Sayid y entonces él empezó a hablar diciendo que no se le quitarían las cadenas, Catherine miró los grilletes y abrió la boca para decir algo…No eran criminales y… ¿A dónde iban a desaparecerse? Empezarían a sentir ya el drenaje de magia y aquello…Estaba despertando uno de sus terrores más profundos. ¿Cómo podían caminar? ¿Cómo podían dar la cara cuando su magia estaba mermando? Sentía que estaba ahogándose por ellos y se llevó la mano a la garganta clavándose los dedos con un gesto de terror, sin ser consciente de que mucha gente podría estar mirándola.

El susurro de Sayid hizo que volviera a la tierra, de donde se había despegado al recordar aquella época sin magia. Sin duda, debían reunirse porque aún cuando ella tenía el poder de hacer cosas parecía que los demás eran quienes daban las órdenes. ¿No se suponía que eran un Consejo porque tenían que estar de acuerdo todos? Ella siempre había seguido los pasos, siempre había convocado los cónclaves, nunca había cambiado una regla ni tomado una decisión sin tener un mínimo de apoyo…Sin consultar, o eso creía. Iba a contestarle cuando le llegó una lechuza que le dejó una carta en las manos, le pareció extraño pero cuando vio el sello sintió un tirón en el estómago. La abrió con cuidado y al leerlo perdió el color del rostro, apretó el papel en un puño y miró hacia Giordano que finalmente había llegado haciendo gala de su excentricidad -Encárgate tú- Soltó con la voz ahogada, apretada de miedo, antes de desaparecer de la plaza sin dar explicaciones.

El portal se abrió en la plaza con la reunión iniciada, tal y como había indicado Lucio donde estarían. Permanecí lejos de la multitud arrugando el ceño con disgusto, notando un escalofrío por la espalda. Pero ya estaba allí y debía aprovechar el poco tiempo que tenía. Buscó con la mirada a la Brigada, no tardando en localizar al capitán con su compañero de pelo rojo. Eché de menos a Cleopatra, ya que desde allí no podía verla. En general no conocía a muchos de los presentes, y de los magos, a algunos de los descendientes y de lejos. Los recordaba del Torneo, de cuando participé hace bastantes años. Caminé como una sombra hasta situarme detrás de Lykaios con las manos en los bolsillos del abrigo largo negro. Al pasar a su lado le susurré un “tenemos que hablar” de una forma bastante siniestra. Tras aquello esperó sin poder añadir nada más.

La indignación por lo de mi Brigada hizo que dejase de prestar atención al resto, incluso Rhados dejó de jugar con Nyara para venir a ver qué me pasaba. Le tranquilicé diciendo que no sucedía nada, pasándole una mano por la cabeza antes de volver a hablar tras la intervención de Johan. - Es que no han cometido ningún crimen, esto es un abuso de poder. - espeté molesto mientras esperaba explicaciones, aunque enseguida aparecieron Lykaios, Ben y Cleo. Giré la cabeza en cuanto escuché la voz del general y la de Ben, aliviado de saber que estaban allí. Desconocía cómo habían salido, pero teniendo en cuenta su historial de fugas no era de extrañar.

- General...les estaba diciendo que no hay motivo para todo esto. Encima encadenados...- chisté indignado cuando Sayid dijo que no se les iban a quitar las cadenas por desacato en el juicio. Que era como escupirles en la cara o no sé qué. - Están más preocupados de que no les lleven la contraria y de mantener su orden que de ser sensatos. Venga ya. - Después siguió hablando de otras cosas, pero pasé de él deliberadamente. Él y Catherine se marcharon, pero todavía quedaba gente de la guardia y también Adael. Cogí a Rhados de la mano para ir hacia mis amigos, poniéndome entre medias para dejar claro que estaba con ellos en todo eso. Después me aparté un poco para sacar el sable láser que llevaba en el cinturón, activándolo para cortar a continuación el metal de las cadenas de los tres.

- Hoy no. Tenemos que prepararnos. Lo demás es un maldito pulso que tenéis por ver quién puede más. Nos vamos a prepararnos para la misión. - me di media vuelta, haciendo un gesto a mis compañeros esperando que me siguiesen. Si querían detenernos tendrían que atacarnos por la espalda.

Darren permaneció inmóvil al lado de su hermana pelirroja. La información sobre la misión era bastante escasa, y prácticamente todo lo hablaban eran divagaciones. Nadie acordaba nada. Daba la sensación de que volverían a improvisar otra vez, como hicieran en la ciudadela Alpha, y así acabarían. Aquella misión era tan caótica como la relación que los Descendientes transmitían a todos aquellos que estaban allí. Fue captando retazos de conversaciones y rápidamente descubrieron que una forma rápida de moverse de un punto a otro eran con dragones, siendo la dragona Juliet la que se ofreciera para poder llevar a gente a sus lomos. Dado el interés de su hermano por participar en toda aquella batalla, sabría que ofrecería dragones para moverse también. No dijo nada a aquello, simplemente miró de soslayo a su hermana mientras los demás continuaban hablando. Tecnología, usarían tecnología también.

El resto era de poco interés. Lo que más le llamó la atención fueron las reacciones ante aquellos que llamaban la Brigada. Parecía haber cierta molestia por alguna decisión de encerrarlos. Dirigió la mirada hacia el líder de la resistencia y luego a los Descendientes que estaban allí, a la general de la Guardia para ver sus reacciones ante el ataque, sin embargo, aquellos que se hacían llamar la Brigada no tardaron en aparecer. Reconoció a la mujer egipcia y al tipo de pelo azul que conocieron en el mercado, cuando preparaban la boda de Shyvanna. Ellos fueron los que hablaron, la mujer se separó del trío. Exigieron ser liberados, sin embargo el Usurpador habló rechazando la propuesta de quitarles los grilletes. Bonitas palabras por su parte, pero le parecieron vacías y falsas problemas. Desde luego, allí había más mensajes ocultos y frases entre líneas que aquellas palabras, que seguramente se las llevara el viento. Observó la reacción de la LeFay que no añadió nada más y sencillamente se desapareció de allí a la llegada de una carta. Y la acción del hombre de las gafas con su tecnología láser le hizo arquear la comisura del labio. Volvió a mirar a Lake, esperando que dijera algo más, por su parte ya podrían irse de allí. Aquello había sido una auténtica pérdida de tiempo, al final cada uno haría lo que le pareciera. Volverían a caer como moscas.

Mis dudas son respondidas rápidamente, aunque no por la persona a quien había inquirido, ¿hablé demasiado alto?, como sea, la cosa es que no me he perdido de mucho y al ver a los Descendientes, puede que Giordano no tarde en aparecer—comprendo, gracias—respondo mientras pongo atención al grupo, tanto analizarlos como por lo que dicen para ir comprendiendo el plan que habrían formulado.

De pronto, me percato de un tintineo, y la gente que miraba con curiosidad esta particular reunión empezó a cuchichear sobre gente que llegaba al grupo. Era un trio de personas encadenadas, uno de ellos, pelirrojo empezó a cuestionar una serie de cosas y así como dar una especie de discurso para dejar en claro que van a ayudar si los demás no arman escándalo, o eso creo entender. Veo a la general Amaya hablando con uno de los Descendientes, supongo que para pedir instrucciones. Él responde con un contra-discurso, que indirectamente ayuda a los presentes a darse una idea del porqué de las cadenas del trio que acaba de llegar. Obviamente no digo nada, no tengo razón para ello y solo les miro un poco extrañado por la escena que han montado.

Más participantes iban llegando, pero quien llama más la atención es sin duda uno que rompe por completo la estética de fantasía de la isla. Una nube negruzca que por momentos me asusta por creer que se trataba de algo relacionado con esa cosa del bosque, un asunto que quedará pendiente y espero no arme revuelo. El robot no tarda en dar sus opiniones, instándonos a apresurarnos debido a que el tiempo es oro y cualquier retraso implica un aumento de dificultad en la misión—vaya, un representante de The Rithm—lo digo por su apariencia más que otra cosa. Pero lo que dice a continuación me es relevante, con lo que me hago una idea de cómo podría estar estructurada la misión. 3 torres, áreas sin magia, y la escasa cantidad de personas dispuestas o capaces de ir a una misión suicida, sin contar que tendremos que dividirnos. Un ejercito de robots con capacidades para enfrentamientos contra magos y analíticas de nivel militar, contra un millar de magos y mundanos de diversas habilidades, que además no están debidamente organizados para trabajar juntos por sus respectivos orígenes u ocupaciones, desalentador, ¿no lo creen?

Disculpa, debo ir a hablar con esa…¿cosa?—le hago una seña para que me excuse el Descendiente de Moisés mientras me alejo para ir con la IA, pero un chico se me adelanta, quien declara sus intenciones de acompañar al grupo en su misión suicida. Iba a replicar debido a su aparente joven edad, pero me detengo pues no soy quién para cuestionarle ya que yo mismo me involucré en esta clase de vida en la propia adolescencia, sin contar que puede que me equivoque y en realidad es mayor de lo que aparenta. Parece que le hace una pregunta pero no alcanzo a escucharle, luego de una aparente respuesta yo finalmente me acerco del todo—ehh ¿SAM?—¿querrá ser llamado de otra forma?—necesito preguntarte algo en lo que estoy particularmente involucrado. En los últimos meses, antes de ser separado, ¿has tenido contacto con una entidad colmena que se autodenomina El Zumbido?—es uno de los apodos que han tomado con agrado—soy…su anfitrión. He notado su ausencia y hasta no hace mucho, me acabo de enterar de tu existencia y capacidades para la tecno-absorción de todo lo electrónico. Por lo cual, tengo la sospecha de que habrías capturado algunas de ellas—tengo que prepararme para las posibles preguntas que vayan a lanzar en este momento, así como para la respuesta que vaya a darme.

Otro más se une, pregonando algo de dispositivos de comunicación y Tesla. Con que aquí también tuvo importancia sus ideas en el mundo secreto. Primero quitó de su camino a un pobre civil que pasaba por la zona haciendo sus quehaceres y luego lo detiene en seco para susurrarle cosas…no me digas que es el tipo que anduve buscando. Al final se digna a acercarse por completo anunciando transportes cero deluxe pero funcionales—espero equivocarme pero…¿Giordano Da Vinci?—inquiero su identidad una vez se ha acercado lo suficiente.