Hospital Mágico [Ruinas]

Tras un par de horas despierto en la camilla del hospital, con las heridas ya suturadas y vendadas. Al abrir los ojos todavía noto la cabeza algo ida, aunque ya han debido reponerme algo de sangre perdida mediante transfusión. Me incorporo lentamente en la camilla hasta sentarme, tratando de hacer memoria de lo sucedido. No sé quién me ha entrado hasta dentro del hospital, pero ha debido de ser Rosse. El otro no parece muy de fiar, sólo me "fío" de los demonios de mi familia. Un médico se acerca en cuanto me ve despierto, preguntando cómo me encuentro mientras me revisa. Después me da el alta con la condición de que descanse y tenga cuidado, así que bajo de la camilla para salir de la enfermería, cojeando un poco todavía.

En la sala de espera me encuentro a la chica contra la que luché, junto al tipo que nos trajo por el portal aquel. Miro a ambos un tanto extrañado mientras me acerco, pensando que ya se habrían ido de allí o que por lo menos no estarían juntos. - ¿Qué hacéis aquí los dos? ... no sé qué te habrá dicho para convencerte, pero es peligroso- advierto a Rosse, dándome cuenta de que no sé su nombre porque ni siquiera llegamos a presentarnos durante la batalla. Tengo una conversación pendiente con ella, y no creo que pueda tenerla con él delante. Me siento en la silla junto a la que está sentada Rosse, lanzando miradas de reojo a Alpha. Creo estar seguro de lo que vi, a no ser que mi mente me jugase una mala pasada. Es sospechoso que un demonio apareciese justo donde yo estaba, a no ser que...

- ¿ Te ha mandado Khaled a buscarme? ¿es eso? - pregunto entre intrigado o preocupado, aunque luego me doy cuenta de que el abuelo habría enviado un demonio sin envoltura corporal de apariencia humana, sólo una aparición temporal para comunicarme algo.

"o algún enviado del demonio que acabó con mi hermano..."


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PS: 80+ 40 (2 día en hospi)= 120

Mientras acababa de revisar los periodicos, la chica regreso de afuera y se sento cerca, en silencio sepulcral, mirando a todas partes en un intento de mantenerse entretenida. Al poco rato volvio el chico, algo cojo, pero con mejor pinta, doble los periodicos y los deje en uno de los asientos mientras observaba como Adramelech se sentaba al lado de la chica y me observaba con miedo, era logico y normal, le advierte que soy peligroso, que no confie en mi.
"Acostumbrate, todos los humanos son asi e incluso los magos, nunca agradeceran nada y siempre trataran de echarte de su lado, recuerda que estas solo, yo soy el unico que estara siempre a tu lado".
La voz de Diablo retumbaba en mi cabeza, en parte tenia razon, pero era por el miedo general que habia ahcia los demonios, a no ser que te topases con un nigromante o un admirador de ellos, que entonces te consideran alguien que ha subido un nivel en la escala con respecto al resto, me iba costar llegar a conseguir la confianza de nadie, y si no lo conseguia, toda mi mision se iba a la mierda.
"Solo por si acaso, hazte a la idea de que fracasara, si es el resultado final, al menos ya lo sabias, si la cosa va a mejor, oye... sorpresa!".

- No se quien es la persona de la que me hablas... Mi nombre es Alpha, Alpha Kakumei y por muy increible que parezca, vengo del futuro, de un futuro no muy lejano donde la Alianza se ha vuelto tan poderosa que los magos estan casi aniquilados, muy poca resistencia queda y puede que en poco tiempo todo eso acabe... he venido para ayudar a cambiar eso, tengo... tenemos la capacidad de ver en el tapiz del tiempo y si consigo ayudar a alguno de los grupos que lucha contra la Alianza para recuperar el equilibrio y la paz podremos cambiar el futuro...

Tuvimos que esperar un largo rato en el que me quede mirando hacia todos lados, hasta llegue a examinar me prótesis para ver si necesitaba algún arreglo o un poco de aceite. Levante la mirada al escuchar pasos para ver a Adra y me quede mirándolo un poco extrañada al escuchar su advertencia.

-En realidad no me dijo nada...Yo tenia que hablar contigo y él...Creo que también tiene que hacerlo.

Dije sin mucha importancia ya que si hubiera querido hacernos daño a algunos de los dos ya lo habría hecho, ademas de que me había dado una mano para traerlo evitando que muriera desangrado afuera por lo que no compartía para nada la opinión del tipo con el que había peleado. Pase mi mirada del pelirrojo al moreno cuando se sentó a mi lado en la silla de junto, mirándolo algo confundida al escuchar la pregunta que le había hecho al pelirrojo.

Quede con la mirada fija en el pelirrojo al escuchar que venia del futuro y que la Alianza había logrado tomar el poder, eso no era posible al escucharlo terminar de hablar me quede algo perdida con eso del tapiz del tiempo, pero al menos sabia que había venido a luchar contra la Alianza humana para que se pueda crear la paz y que el futuro cambie. Me levante para pararme frente a ambos hombres.

-Él ya respondió a todo, asique deja los miedos y lo prejuicios de lado, lo que dice, al menos para mi, tiene sentido... Si hubiera querido matarnos y fuera tan peligroso como tu dices ¿No crees que ya nos habría matado? Gracias a él ahora estas vivo, el te trajo aquí y me ayudo a entrarte para que te atendieran -Le hable seriamente al moreno con el que había luchado para luego mirar al pelirrojo- ¿Que hayas venido al pasado no crea un bucle de tiempo que hace que el futuro sea el mismo y tu repitas eso siempre? O también podría crear diferentes lineas de tiempo, un bucle, una linea en la que la alianza gana, otra en la que ganan los mágicos y otra en la que llegan a un acuerdo mutuo...De todos modos tenemos que intentar seguir por los caminos que nos mantengan vivos, tu sabes mas que nosotros asique dinos lo que sucedió y a partir de eso podemos crear un plan que nos saque de aquel embrollo. -Digo divagando un poco al principio, aunque todo en este mundo se estaba volviendo muy raro por lo que no se me hacían raras mis teorías sobre el tiempo y el espacio, aunque tal vez solo eran palabras estúpidas para los dos presentes, aunque uno viniera del futuro... O tal vez solo sea un drogata mas que se cree viajero del tiempo...

Es cierto que Rosse tenía que hablar conmigo, pero creí que se aburriría de esperar a que saliera y se marcharía. Es un punto a su favor el haberse quedado. Lo que no me cuadra es el hecho de que el desconocido quiera hablar conmigo, no tengo ni idea de lo que puede querer, más allá de ser un mensajero de Khaled. Apoyo los codos en las rodillas a la par que me inclino hacia delante en la silla para ver mejor a Alpha y escuchar qué tiene que decirme, aunque sigo reticente a escuchar. Su historia me sorprende desde el primer instante, pues me cuesta asimilar la magnitud de lo que cuenta, desde los viajes en el tiempo hasta el futuro oscuro del que viene. Necesito tomarme unos segundos para procesar tanta información, por lo que me quedo un momento con la mirada perdida en el frente, pensando en lo que acaba de decir. Diría que es un loco de no ser porque vivo en un mundo en el que sé que eso es posible, eso y cosas más extrañas. Respiro hondo antes de volver a mirarlo, yendo a responder justo en el momento en el que Rosse se pone delante de nosotros para empezar a hablar. Frunzo el ceño al escuchar lo que me reprocha, aunque no la interrumpo y la dejo terminar.

- No sabes los motivos por los que puedo tener miedos o prejuicios ante alguien como él, pero tal vez lo comprendas si sabes que por culpa de un demonio como el que tiene él - señalo a Alpha con el índice sin dejar de mirar a Rosse. Me siga costando decirlo en voz alta, es hacerlo más real - mi hermano está muerto. No pudo controlarlo y el demonio acabó con su vida. Así que entiende que desconfíe si un demonio que no conozco de nada viene hacia mi. Que no nos haya matado ahora no quiere decir que no pueda hacerlo luego, si quiere algo antes de matarnos necesitaría ganarse nuestra confianza primero.- expongo un caso hipotético, que no tiene por qué ser el del pelirrojo. En algo lleva razón, que el portal que hizo el demonio nos trajo hasta aquí, no parece enviado por Khaled ni lo conoce. Si viene del futuro y no sabe quién es Khaled...puede que él esté muerto. - Pues gracias en ese caso, Alpha. - si hay que dar las gracias se dan, la acción ha sido buena, por mucho trauma que tenga con los demonios. - Espero no tener que arrepentirme de dejar de lado mis prejuicios, al menos por ahora. - esto parece importante, tendré que echarle valor y ver qué puedo hacer.

- Creo en tu historia porque sé que son posibles ese tipo de viajes, mediante cierto portal especial o algún objeto...y sé que es una posibilidad muy factible en el futuro, al paso que vamos. Has ido a dar con el bando de los Soul Reaper, no sé qué es de nosotros en un futuro, pero algo debes de conocer por la historia. - las divagaciones de Rosse sobre los viajes en el tiempo hacen que yo también me deje llevar por la tentación de hacer teorías sobre algo que no conozco a ciencia cierta, deseando haber estudiado física para comprender mejor estos asuntos.

- Eso que dice ella, ¿no es posible que hayas creado una paradoja temporal viajando al pasado y alterando así el futuro? O hacer que en el futuo suceda suceda justo lo que pretendes evitar. No tengo muy claro qué sucede si se viaja en el tiempo...lo de crear diferentes líneas alternativas o lo de crear una nueva línea que sustituya a la anterior. Es decir, si conseguimos cambiar algo aquí...¿tu futuro cambiaría cuando volvieses o seguiría siendo el mismo futuro, sólo que creando una nueva línea de tiempo para nuestro presente actual, una paralela? - casi me empieza a echar humo la cabeza de tanto pensar, ojalá supiese un poco más sobre la llamada "cuarta dimensión", el tiempo. Espero a que Alpha sepa esclarecer esto un poco, pensando que debería comunicar esto a los míos, pues está curiosamente conectado con lo que andan investigando en la actualidad.

Siento que Adramelech tiene un gran resentimiento hacia los demonios por problemas con ellos en el pasado, me pongo en su lugar y entiendo su posicion y su temor, no son para nada infundados. El problema es que me va a causar muchos problemas para que confie en mi.
"Solo alguien lo suficientemente estupido juega con un poder que no conoce y muere por el"
"No seas asi, ciertamente quiza utilizaron un poder que no debian, pero tampoco debes andar a reprocharselo asi"
Me levante de mi asiento y me puse enfrente de ellos apoyado contra la pared para explicarles un poco y aclarar sus multiples dudas, la verdad que esto de los viajes espaciales puede generar un torrente de preguntas a cualquiera que no este acostumbrado a calcular un monton de variables y resultados en el infinito tablero de eventos que es el universo. Me quede pensando un momento de brazos cruzados una explicacion sencilla para resolver sus dudas y explicar mis intenciones.

- Siento lo que le ha pasado a tu hermano... yo y Diablo, es una historia bastante larga y ni siquiera fui consciente de lo que paso hasta mas tarde, pero no le interesa nada de los mortales excepto yo, asi que creo que evitara el daros problemas... Ojala tuvierais razon vosotros dos e hiciera una paradoja y se creara una nueva linea de futuro, pero me temo que no es asi. Mientras estabas curandote y ella descansando, he revisado la linea temporal y por ahora sigue completamente igual. Y sobre lo que pase con mi futuro, es algo que ni yo mismo se, espero que cambie con lo que hagamos aqui, si no cambia y se vuelve una realidad alternativa, bueno, al menos os habre ayudado a no caer en nuestro error.

Me quedo un poco pensativo al escuchar que son los Soul Reaper. Empiezo a divagar pensando en todo aquello que habia ido escuchando a la gente en nuestro pequeño grupo. La verdad no pense que fuera a tener un acierto bastante grande, habia tenido un golpe de bastante buena suerte, quiza con su ayuda pueda llegar a hacer algo, pero en primer lugar tendria que ayudar a que el grupo se fortalezca de nuevo.

- La verdad es que solo hay un pequeño grupo de resistencia, que ni nombre tiene. Todos los grupos que pueden haber ahora mismo, son leyendas de donde yo vengo, cosas que escuchas a la gente que recuerda haber escuchado a sus abuelos. Puede que no comparta al 100% vuestra vision, pero si creo igualmente que si la gente pudiera conocer la magia, no la temerian y eso ayudaria bastante, puedo ayudar bastante a vuestro grupo si me dejais, despues de todo soy como un oraculo, si necesitais que os guie en cualquier cosa, no dudeis en preguntarme.

-Bien, eso es un buen motivo para tenerles miedo y lamento lo que te sucedió, pero si fuera por eso todos tendríamos que temerle a todo. Por culpa de los humanos perdí a mi familia y por culpa de los mágicos casi muero... Debes aprender a enfrentar tus miedos, dejar de ser débil frente a ellos. -Le hable seriamente a Adramelech frunciendo un poco el ceño.- A mi puede matarme cuando quiera... Mi confianza ya la tiene -Aunque en parte era mentira, el siempre hecho de saber que tenia a junto alguien que podría matarme me interesaba. Tal vez podría lograr hacer algo de lo que yo no fui capaz en su momento...En todos los momentos que lo intente.

Me quede escuchando atentamente a Alpha al hablar sobre las extrañas cosas del viaje en el tiempo, tal vez el bucle no se había formado o él no lo notaba. Y me sorprendí un poco al escuchar lo que podía ver su futuro, era gracioso ya que me lo imaginaba con turbantes y una gran bola de cristal como las supuestas brujas de tarot que el realidad son puras mentiras.

-¿Es posible cambiar algo aquí y que en el presente no existas o en realidad esta ya predeterminado que nacerás? Teniendo en cuenta que aun no haces nada muy importante tiene sentido que nada en tu futuro haya cambiado. Tal vez comience a cambiar cuando compartas con personas importantes lo que sucederá en el futuro... ¿Solo puedes ver tu futuro, osea solo lo que te sucederá a ti? -Aunque eso no importaba mucho ya que por lo que había contado los pocos magos que quedaban eran solo pobres tontos buscando sobrevivir... No muy distinto a como es ahora, solo que mas crudo. Me estire un poco y gruñendo al recordar que mi motocicleta había quedado en Londres. Arme un nuevo cigarrillo bufando al saber todo lo que tendría que caminar.

-Bien... Supongo que no se quedaran aquí, a los Soul les interesara bastante su historia... Debo volver a La zona residencial de Londres por mi motocicleta ¿Hay algún lugar cerca en donde podamos volver a juntarnos? -Me interesaba seguir hablando con Adramelech sobre su grupo y con Alpha sobre el futuro y me quedaría haciéndolo pero mi motocicleta estaba frente a todo, era como mi hija y no la dejaría sola mucho tiempo más... Aunque tarde horas en poder tenerla nuevamente en mis manos.

El pelirrojo muestra buenos modales al decir eso de que siente lo de mi hermano, pareciendo comprender un poco mi reacción anterior con él y mi desconfianza. Al parecer lo suyo con el demonio no es tan peligroso como fue lo de mi hermano con ese que le poseyó. Entre ellos no hubo ningún acuerdo, sólo se aprovechó de su cuerpo. Estos dos parecen diferentes, es como si el demonio que vi antes no dañase intencionadamente a Alpha, ni intentase apoderarse de él por completo. Suspiro con pesar mientras lo escucho hablar de su demonio y del interés que tiene en él, poniendo después toda mi atención para intentar comprender lo que explica sobre el tiempo y sus posibles modificaciones.

- Entonces no tenemos claro qué pasará...no sabemos si podrás salvar tu futuro o si simplemente has venido para salvar el nuestro, en caso de que lo consigas y se cree una nueva línea temporal. - comprender la dimensión del tiempo resulta terriblemente complejo, pues no sólo está siempre en movimiento, sino que no tenemos certezas de cuál de las dos hipótesis es la cierta. Tampoco sabemos si hay más posibilidades además de las dos mencionadas. Me pongo en pie tras haber descansado un poco, sintiéndome algo más repuesto de fuerzas. - Es un tanto desalentador actuar sin certezas, pero hay que mantener la esperanza. - tanto él como nosotros, todos estamos en la cuerda floja en este momento.

El futuro desolador que pinta no está muy lejos del que tenemos, es muy factible lo que dice que ha sucedido, pues a veces creo que vamos por el camino de la victoria para la Alianza y su afán de destrucción, malogrando todo su avance en tecnología para emplearlo fines oscuros. Palidezco un poco al escuchar que en el futuro no se sabe nada de nosotros, como si hubiésemos sido borrados de la faz de la tierra. Apenas un pequeño y triste grupo de Resistencia, pero nosotros y toda nuestra lucha y nuestras ideas han sido en vano. - Joder...tantos años de historia para acabar desapareciendo de ese modo. No podemos permitirlo. - y eso pasa por hacernos más fuertes para tener peso en esta guerra, a cualquier precio. Más tarde le preguntaré qué es eso de nuestros ideales que no comparte, por tener una visión desde fuera del grupo, pero por ahora creo que me ha convencido para colaborar con él.

Rosse parece convencida desde hace un rato, incluso me echa una pequeña "bronca" sobre afrontar mis miedos para no ser débil. Cierro los ojos un momento, pasando una mano por mi cara de arriba a abajo mientras respiro hondo. Después la miro directamente a los ojos, tratando de adivinar en éstos el dolor por las pérdidas que menciona. Ha debido sufrir bastante. - Eso estoy intentando. Si no estuviese poniendo de mi parte no estaría escuchándolo, ni decidido a colaborar con él para tratar de impedir que suceda lo que ha dicho del futuro. - la miro un tanto extrañado al escuchar que puede matarla cuando quiera, no me parece el tipo de persona que se deja matar por otra así como así. Más bien parece una luchadora nata. Ella sigue interesada en seguir en contacto con nosotros cuando recoja su moto, incluso puede que decida unirse a la hermandad finalmente.

- Podemos volver a vernos en...el London Eye, por ejemplo. Dentro de un par de semanas. Así nos ponemos al día con lo que hemos descubierto. Mientras puedes ir pensándote si deseas unirte a nuestro grupo. Pase lo que pase seguiremos en contacto, pues tú también pareces interesada en ayudar con lo que nos ha contado él. - miro de soslayo al joven venido del futuro, pensando que debo contarle al abuelo lo sucedido, cuanto antes mejor. - Puedo hacerte de guía por aquí, supongo que querrás conocer un poco el terreno en el que te mueves. Y podemos ir pensando planes de actuación. Tengo alguno en mente...



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PS: 150, recuperado tras varios días

Era extraño tener la aceptacion y comprension de Rosse, pues no hace poco se hubiera pegado de tortas con Diablo a muerte... y Diablo tambien. Internamente suspire porque era el escenario mas posible ya que Diablo no hubiera cerrado su bocaza con lengua de trapo que todo lo suelta. La verdad que todo esto del viaje en el tiempo generaba mucahs dudas, y yo tampoco sabia muy bien como resolver las nuevas que se formaban cuando trataba de resolver las anteriores, despues de todo, viajar en el tiempo es un gran tabu y sus consecuencias son imprevisibles, pero antes de salir, fue un riesgo, una clausula que muy convencido firme.

- Es bastante complicado de explicar, ni siquiera yo tengo tantas respuestas, viajar en si en el tiempo es un gran tabu con consecuencias imprevisibles, necesitaria un poco de tiempo para poder llegar a ver que es lo que va a suceder. Como Kakumei, mis creencias son que el Universo es un gigantesco mecanismo viviente y sabio, que obra segun ve mas convenientemente para cada uno. No os preocupeis, segun vayamos haciendo, yo sabria en todo momento que pasara y podre guiaros, yo, pase lo que pase ya he aceptado las consecuencias, sea que mi futuro no exista y por tanto deba desaparecer, como quedar atrapado en esta o como si al final todo se arregla y puedo volver.

Rosse y Adramelech empiezan a elucubrar planes apra vovlernos a ver, ya que ella tiene que volver a la capital a por su motocicleta y piensan que seria bueno encontrarse dentro de una semana, compartir descubrimientos y ponerse al dia. El London Eye... me pregunto como estara en esta epoca, despues de todo, lo poco que se podia ver era en postales mohosas y viejas, ya ni chatarra quedaba de el. Me iba tocar quedarme a solas con Adra, pero creo que iba a ser un poco extraño, ya que en el fondo, los demonios no son su plato fuerte.

- Mujer... si quieres te abro un portal para que puedas ir a por ella... me da cosa que vayas andando, lo que tardaras y a saber si encuentras problemas por el camino... no me supone ninguna molestia - mire para Adramelech - Estaria bien que me contases tus planes y si... aunque sea Londres, sigo siendo alguien nuevo por aqui al no estar en mi epoca... Agradeceria tu ayuda en ese aspecto.

Mire atentamente a Alpha aunque esta vez no entendí ni media de lo que dijo, toda la inteligencia de hacia minutos había caído y desaparecido con esa explicación. Aunque lo que si entendí es que él ya tenia aceptado su destino, sea malo o sea bueno. Solo le interesaba salvar a la raza mágica, hacer que el mundo llegue a ser mejor que el mundo de el que él viene. Mire a Adra y asentí ante la idea de vernos en algunas semanas en el ojo de Londres, conocía el lugar y sabia que no pasaba mucha gente por ahí, espero que aun siga siendo así.

-Yo ya tome mi decisión, cariño... Solo falta que tu termines todo tu papeleo rutinario de contarme su historia y bla bla bla...Claro que estoy interesada, no todos los días puedes ayudar a un viajero del tiempo a salvar al mundo... Podrían hacerme una gran estatua en un futuro por eso -Dije sonriendo divertida, ya que claramente era una broma, aunque si me interesaba ayudar en todo lo que mi manco ser pudiera. Mire al pelirrojo sonriendo por la ayuda que él quería darme- No te preocupes, no me hará mal caminar o encontrar algún que otro problema por ahí, puede ser divertido, se cuidarme sola, niño -Sonreí de lado ya que la situación me divertía bastante y le revolví un poco el cabello a Alpha, como si de un niño pequeño se tratara para luego acercarme a Adra y tomarlo del mentón para darle un suave beso en los labios, se me hacia bastante divertido hacerlo, ademas de que se me había como un beso de la suerte o una tontería de ese estilo- Y tu... Aun me debes la revancha y mi recompensa -Sonreí de lado mirando al moreno a esos lindos ojos grises, le guiñe un ojo y me aleje de ellos caminando tranquilamente hacia la puerta del hospital.

-Nos vemos en una semana en el London Eye -Dije lo suficientemente alto levantando una mano en forma de saludo. Antes de salir vi la silla de recepción vacía y un abrigo en esta. Mire hacia todos lados para tomar el abrigo para colocármelo y abandonar el tétrico lugar en lo que arremangaba la manga de mi prótesis riendo un poco huyendo de la escena del crimen.

Las respuestas de Alpha no terminan de tranquilizarme del todo, me da la sensación de que el más mínimo fallo puede hacer que todo acabe peor de lo que ya está. Ni siquiera él puede saber con certeza lo que sucederá si cambiamos algo en el presente, si realmente servirá de algo. Desde la perspectiva de alguien del futuro puede parecer imposible, puesto que para ellos el presente, lo que está sucediendo ahora, ya ha pasado. Lo que pasó, pasó, y el tiempo es el que es. Algo así he escuché una vez, divagando en un taberna sobre asuntos como "qué hubiese pasado si..." Puede parecer un ejercicio insano porque nunca sacaremos nada de esas conjeturas, pero es difícil no hacerlo. Por mi parte lo he pensado muchas veces, ya no sólo con el tema de mi hermano y su pérdida, sino con la propia historia de nuestro grupo. ¿Qué hubiese pasado si no hubiésemos sufrido aquella pérdida de poder en 2012?. Ahora se me vuelven a remover todas esas cosas, pensando lo que podría hacer si consiguiese viajar al pasado, como ha hecho Alpha.

Vuelvo a la realidad tras unos segundos un tanto pensativo, regresando al rostro del pelirrojo cuando asegura que él actuará de guía porque sabrá qué sucede con cada cambio. Él parece estar listo para aceptar pase lo que pase, esperando que sea siempre a mejor. - Intentaremos encontrar el mejor futuro para todos. Tal vez no sea casualidad que nos hayamos encontrado...- que un demonio haya ido a dar conmigo es irónico. O tal vez sea otra irónica casualidad que haya ido a dar con uno de los bandos que más tocados están en este momento. Rosse parece decidida a marcharse, a pesar del ofrecimiento de Alpha de acompañarla. Confío en volver a verla, pues sigue interesada en conocernos a pesar de que no haya podido hacerle una buena demostración en la pelea. - Cuando conozcas mejor nuestra historia te darás cuenta de que podemos ser la clave para arrojar una solución definitiva a todo esto. Y eso repercutirá en el futuro.- afirmo con una serie que se va al carajo cuando se acerca a mi y me toma por el mentón para darme un beso en los labios. Mi sonrojo debe ser evidente, y casi creo que disfruta provocándolo. Ella se separa antes de que reaccione para responderle al beso, aunque esta vez soy capaz de sostenerle la mirada cuando se separa.

- Mejoraré para darte una revancha en condiciones. Y la recompensa...- mi timidez hace que me cueste bastante dar un paso así con una desconocida, pero no tiene por qué intimidarme. Se lo he prometido y la chica es bastante atractiva, así que lo único que tengo que hacer es dejarme llevar. Y tal vez beber un poco para deshinibirme. - ...Cuando quieras, estoy dispuesto. - a solas y en cualquier lugar, lo mejor será no planearlo. No sé qué diría mi madre de captar gente así, pero poco importa, puesto que todo lo que hago le parece mal. Me despido de Rosse, repitiendo el lugar de quedada y el día para memorizarlo, deseándole después suerte en lo de recuperar la moto. Al quedarme a solas con Alpha retomo la conversación que teníamos, y así de paso evito hablar de lo de Rosse, que me da corte. - Mis planes, sí, eso iba a decirte. Te lo contaré todo mientras damos una vuelta por las zonas más importantes - no sé hasta que punto es prudente lo de contarle mis planes a alguien que lleva un demonio dentro, pero ya he decidido seguir adelante con todas las consecuencias, y espero no equivocarme, que yo soy mucho de eso. Echo a andar con él hacia la puerta del hospital, comenzando a explicarle un poco.

- ¿Y si tal como están las cosas no pudiésemos cambiar nada? ¿y si tuviésemos que recurrir también al pasado para salvar este presente que será tu pasado? Los Soul Reaper necesitan ser fuertes de nuevo... ser una verdadera alternativa. Quiero ayudarte a acabar con esto, pero sólo lo conseguiremos con la fuerza de muchos. Y creo que deberías conocer a otro que es como tú, a otro...demonio. Está en Irlanda, y podría decirse que es el líder de los Soul Reaper. No sé cómo habrás viajado en el tiempo hasta aquí, pero allí, en la Torre de la Alta Hechicería, hay una sala de portales variados, y creemos que uno de ellos sirve para eso. Todavía están investigando, es algo demasiado complejo. - para cuando termino de hablar ya estamos en la puerta del hospital, dispuestos para marcharnos y seguir hablando por el camino. Mientras no aparezca el demonio todo irá bien, o eso espero. Tomo las riendas del rumbo a seguir, comenzando a caminar en dirección a la gran ciudad, lo cual nos tomará más de una jornada de viaje.

Las vacaciones le habían sentado estupendamente. Si Catherine en algún momento se había visto mejor nadie lo recordaba. Estaba muy bien descansada, también alimentada aunque ni Ian ni ella tuviesen idea de lo que hacían en la cocina. Aparte, era feliz. Se sentía bien consigo misma, sentía que estaba haciendo lo correcto olvidándose de sus responsabilidades para vivir su vida. Hasta donde sabía Jean y Adael solían salir de viajes por su trabajo, bueno, ella también se lo merecía aunque la excusa fuese ella misma. Cuando volvió a la casa Hacksaw y abrió su comunicador recibió un mensaje de Lucio y...De nadie más, lo que le había parecido extraño después del mensaje de Mei pero decidió no indagar. Haría lo que Lucio necesitaba y luego buscaría a su pupilo que, a estas alturas, bien podría querer cambiar de tutor. Tal vez prefiriera a Matvey, esa sería una buena idea. Seguía sin sentirse preparada.

Ian se había quedado porque tenía que salir a hacer algo que Cath no recordaba así que fue sola hasta el hospital, quedando frente a la escalofriante fachada sin apenas sentir cosquillas. Había visto cosas mucho peores, las había experimentado así que simplemente ingresó. Empezó a recorrer el hospital para buscar a Lucio pero cuando preguntó en recepción le dijeron que estaba en consulta. Tamborileó los dedos contra la mesa de manera pensativa y sonrió de lado -¿Me anotas? ¿Cuántas personas tengo delante?- Cuestionó con algo de humor. ¡HUMOR! ¡CATHERINE LE FAY TENÍA HUMOR! Sí, sí. Las bromas eran de su estilo cuando estaba...Feliz  y relajada.

Tenía sólo la paciente que estaba atendiendo Lucio así que asintió e ignoró las palabras que le indicaban que se sentara en la sala de espera. Empezó a recorrer aquella planta. Lo más importante de esconder un lugar era que no hubiesen fisuras, no hubiese nada que no correspondiera arquitectónicamente; por eso era importante que conociera el lugar. Cuando estuvo afuera había dado un breve recorrido alrededor para ver cuánto espacio ocupaba y ahora adentro necesitaba ver lo demás. Tenía planeado usar el anillo con el que había escondido la casa Hacksaw pero también establecer una ilusión para que los humanos simplemente ignoraran la presencia del edificio y acrecentaría la sensación escalofriante. Eso debería ser suficiente.

-¿Catherine?- La muchacha volvió su cabeza al escuchar su nombre y sonrió al ver a Lucio -Esa soy yo- Dijo alzando la mano y caminó hasta ingresar a la consulta. En cuanto pasó el portal y percibió el olor a medimago y pociones se descompuso. Simplemente su estómago dijo “Hey, esto no me gusta” y sintió un ataque de arcadas fuertes -Mierda..- Se agarró de la camilla y frunció el ceño mientras empezaba a sentarse. No iba a vomitar, menos delante de Lucio así que le ordenó a su cuerpo que se recompusiera. También ejerció una ilusión en el que aquel consultorio olía a fresas y chocolate, pero no lograba sacarse la sensación de que iba a devolver su frugal desayuno.

Paso casi toodo el día en mi consulta del hospital que montamos en el bosque de Sherwood, ocupando las horas en ver pacientes y pacientes. Se ha corrido la voz de que hay un nuevo hospital disponible, así que decenas de magos y otros seres mágicos se han acercado hasta aquí para ser tratados. El hospital ya funciona a pleno rendimiento, lo que me hace estar orgulloso del proyecto desarrollado. De lo que no estoy tan orgulloso es del poco caso que me han hecho en la isla cuando he planteado que la reabran de nuevo a la gente nueva, pues no me gustó nada que le dijesen a Sophia que tenía que marcharse.

La verdad es que tengo ganas de verla, y no la he visto trabajando por el hospital en los últimos días. Entendería que estuviese enfadada después de haberse hecho ilusiones con ver la isla y luego nada. Suspiro por enésima vez en el día, aprovechando que no hay nadie. Saco el espejo comunicador cuando tengo un pequeño rato libre, mirando a través de él para dejarle algo así como un mensaje. Hasta ahora sólo los he probado en comunicación directa, pero creo que también se puede dejar aviso para hablar, porque si no ya tiene que ser mucha coincidencia que los dos estén mirando el espejo a la vez. - Sophia, ¿cómo estás? me preocupa no verte por el hospital, no sé si te ha pasado algo, si estás enfadada o ...bueno, lo que sea, avísame. - dejo el espejo por ahora para seguir atendiendo a pacientes, hasta que llega el turno de una jovencita que conozco bastante bien.

- ¿Catherine?- la invito a pasar a la consulta, dejándole paso para que entre. Después cierro la puerta para tener privacidad. - ¿Qué te trae por aquí? No te esperaba, de hecho...hay mucha gente que se preguntaba dónde te metías ¿Hay problemas en la isla o tiene que ver contigo? - casi tengo claro que tiene que ver con ella al verla sentarse en la camilla con esa cara de ir a echarlo todo. - Ya veo...no te encuentras bien. Recuéstate y cuéntame, ¿qué síntomas tienes? - voy un momento a la mesa para coger una especie de estetoscopio, aunque es algo más que eso. Es un aparatejo que me han ayudado a hacer entre Giordano Da Vinci y Jean de Molay, especialistas en chismes que mezclan magia con algo de ciencia, lo cual ayuda en los diagnósticos.

Lucio tiene un efecto tranquilizante. Es su rostro, siempre tiene una sonrisa dulce pero aparte tiene una cara de gente confiable, naturalmente buena, centrada y neutral. Catherine tenía un poco de confianza con él debido a que era su médico de cabecera. Todas las especialidades médicas habidas  y por haber ejecutaba Lucio para la descendiente de Morgana, excepto la ginecología. Había tenido que ir con él cuando pasó la pubertad pero no había tenido las agallas de que él fuese quien la atendiera, así que la había derivado con una ginecomaga.

-No, no- Se rascó la cabeza de forma nerviosa. -No es la isla. O sí. Ya no sé cómo verlo, Lucio- Le dijo con una mueca pequeña. Alguna que otra vez le había servido de psicólogo sólo que a Catherine le costaba realmente hablar -Es que no sé discernir cuando tengo que pensar en mí y cuando tengo que pensar en el Consejo ¿Me explico? - Cuestionó empezando a sentarse en la camilla. -Sé que suena egoísta, he estado con muchas cosas y este mes me lo tomé para mí. Necesitaba desintoxicarme después de años así...pendiente del consejo- alzó suavemente los hombros, estaba intentando practicar eso de ser más abierta ya que le había funcionado con el licántropo, a ver qué tal iba con los demás. Antes de darse cuenta ya estaba echada en la camilla y Lucio estaba sacando sus aparatejos. Puso las manos al frente negando -No, qué va, no estoy enferma. Es el olor del lugar lo que...- Movió las manos con suavidad como queriendo englobar todo para después hacer un gesto con el rostro de mucho asco. Lo cierto es que era la primera vez que el olor a medimago le producía eso, pero serían tonteras.

-Sí sí, ya sé que hace como un año que no me hago el control pero entre el torneo y todo lo demás. Ya sabes. Pero estoy bien- Indicó incorporándose en la camilla  haciendole un gesto de "pillo, no me vas a revisar. Ya hemos pasado por esto". La Descendiente no le tenía miedo a los médicos ni a las agujas, en lo absoluto, pero el hecho de que su cuerpo respondiera de manera tan drástica al olor del ambiente era raro. Nunca había sufrido de eso. Se rascó la nariz pensativa -He querido jugarte una broma nada más. Sé...que te has comprometido mucho acá abajo y te lo agradezco, quería subirte el ánimo - Confesó con una sonrisa, no fantasmal, sino bastante sincera. ¿Lo que hacía la felicidad, no? -He venido por el mensaje que me dejaste. Necesitamos proteger este lugar...Y mientras más rápido salga de este olor, mejor, quiero irme a echar una siesta - Se río un poco. Últimamente estaba durmiendo muy seguido, Catherine había encontrado una explicación muy simple: Ian era muy cómodo y calientito para invierno y, aparte, hace mucho tiempo que no descansaba correctamente -Así que si me vas mostrando el lugar evitando este tipo de consultorios sería mucho más fácil. Planeo ocultarlo con un objeto y una ilusión permanente para los humanos ¿Qué te parece?- Inquirió, interesandose por la opinión del medimago a su plan.

Por supuesto, el hecho de que los olores la descompusieran, las ganas de dormir a media mañana y la luz que irradiaba la piel de Catherine así como su ánimo no se debía per se a estar con Ian y ser feliz, sino más bien a cierto cambio hormonal del que no estaba enterada.

Me tranquiliza, en parte, que no traiga malas noticias de la isla. Ya me espero cualquier cosa, desde que haya habido otro ataque hasta que hayan acabado discutiendo entre varios miembros del Consejo. Llevo ya tantos días desconectado que no sé qué estará pasando. Necesitaba perderlos un poco de vista, pues me enfadó bastante la actitud de Helena cuando nos descubrió en los jardines. Suspiro asintiendo con la cabeza, cerrando los ojos un instante. - Sí, te explicas mejor de lo que crees. A veces me pasa lo mismo. - no me había pasado tan a menudo hasta ahora, pero tras conocer a Sophia me he empezado a plantear algunas cosas. - Supongo que es complicado encontrar un equilibrio. Y no es egoísta que te tomes un período de descanso. Nuestro puesto no debería suponer una carga ni tener tantas restricciones. Deberían cambiar las cosas...es todo demasiado rígido- pero en una institución tan tradicional cuesta hacer cambios hacia el aperturismo y la flexibilidad.

Alzo una ceja cuando me asegura que no está enferma, que sólo es el olor del lugar. Puede ser, ya que hay gente muy sensible al olor de los hospitales, pero por si acaso no le quitaré ojo de encima. - ¿Seguro? no me cuesta nada hacerte un chequeo ahora mismo, pero si quieres lo dejamos para dentro de un rato. Avísame si sigues sin sentirte bien. - me cuelgo al cuello esa especie de estetoscopio especial, alzando ahora ambas cejas al comprender el motivo de su visita. - ¡Ah, claro! lo recuerdo...te avisé hace algún tiempo, sí. Hay que ocultar este sitio, por si acaso deciden venir a atacarlo. Ahora mismo no hay otro hospital disponible y en condiciones en ningún sitio, al menos uno al que puedan ir los seres mágicos. Tenemos que ocultarlo ya. - pongo una mano en el hombro de Catherine para invitarla a salir fuera de la consulta cuyo olor le molestaba, comenzando a caminar por los pasillos en dirección al hall.

- Creo que lo mejor será hacerlo desde fuera, para que el hechizo de protección abarque todo el lugar. - la miro un tanto extrañado por la siesta que quiere echarse, pues todavía no es ni mediodía. - ¿Estás durmiendo bien últimamente? ¿y comiendo bien? ¿te ha pasado en algún otro momento lo de la consulta? - cosas de la profesión, no puedo dejar de preguntarle los síntomas que tiene. Asiento ante su idea de ocultar el lugar con un objeto y a la vez con una ilusión, lo cual hará de este sitio un lugar muy seguro. - Perfecto. Procede cuando quieras. - aguardo a que empiece una vez que hemos salido del edificio, hacia los terrenos vallados que rodean el hospital.

Por supuesto, la respuesta de Lucio hace que Catherine se quede fría. No esperaba, ni por un minuto, que se empatizara con su situación. Que realmente comprendiera qué era lo que estaba molestandole, que se identificara. La sorpresa se nota a leguas en el rostro de la joven bruja.  -Es...Es lo que he estado hablando con Ian. No pensé que serías de los que...Coincidiera conmigo, pensé que era un tema generacional- Explicó Catherine frunciendo con suavidad el ceño mientras se sacaba el cabello de la cara. -Creo que las cosas se quedaron muy en el siglo XIX y necesitan actualizarse, pero si lo digo yo empezarán nuevamente con que soy la marioneta de alguien y soy manipulada- Expresó con disconformidad mientras bajaba la mirada y se sacudía los pantalones.

-Estoy bien, en serio. No estoy mareada ni nada, de repente es que comí mucho en el desayuno- Dijo, relacionandolo sin dejar caer nada más. Asintió cuando Lucio recordó porqué era que la había convocado -Exactamente- Sonrió un momento antes de hacer una leve mueca -Perdón por no venir antes. Pero creo que con esto será suficiente para que nadie venga a molestarles... ¿Sabes? Deberías decirle a Anteia que te ayude. Digo, si está libre de los mellizos creo que le encantaría ayudar- Añadió pensando otra vez en el anillo que tenía puesto y que había empezado a acariciar sin siquiera percatarse de ello.

-Sí, ya estuve recorriéndolo para saber exactamente la distribución y embargadura de la estructura. Le da más potencia a las ilusiones ser tan parecidas a la realidad como se pueda- Añadió Catherine sorprendiense a sí misma de hablar tan tranquila y conocedoramente del tema.  Tras ello miró a Lucio cuando le hizo aquellas preguntas riéndose -Pueees...He recuperado mi apetito, antes casi no comía porque pase unos meses raros. Y...Sí, estoy descansando bien. Aunque me levanto y a las tres horas quiero volver a la cama- Estuvo a punto de decir que la culpa era de Ian pero prefirió callarse la boca y morderse el labio con una leve sonrisa. -¿Lo del olor?- Inquirió para después ponerse pensativa. Había sucedido hacía unas semanas en la isla -Pues en las vacaciones. Nos sentamos en un prado y había lavanda alrededor. ¿Suele gustarme, sabes? Pero me descompuse en seguida, tuvimos que cambiarnos de lugar- Añadió medio molesta aunque la vista se fijaba más en lo que estaban recorriendo que en lo que decía, estaba muy distraída para darse cuenta que Lucio ejercía de detective médico.

Se detuvo algo lejos de la entrada y miró hacia los lados. Primero ocultaría el lugar así que recordó lo que le había dicho Max acerca de los puntos cardinales y se ubicó en el este. Cerró los ojos y empezó a canalizar energía lentamente mientras recordaba las palabras que debía decir. Abrió los ojos con suavidad y miró a Lucio con un deje de alegría, adoraba hacer magia. Entonces empezó a susurrar palabras en latín mientras los elementos empezaban a converger a su alrededor formando un pequeño huracán. La naturaleza ayudaría a ocultar ese lugar, entonces cuando terminó de decirlo y abrió las manos tanto los elementos como la bola de energía que estaba en sus manos se disiparon para abarcar toda la infraestructura.

-Bien...A ver la ilusión- Murmuró y miró el lugar con aires pensativos. Necesitaba una ilusión que actuara por si sola y no se repitiera. Que reviviera el terror. Así que mientras sus manos se encontraban formando una cuna para la magia Catherine poco a poco iba agregando pequeños detalles, incluso sombras y espectros que pululaban dándole un aspecto aún más embrujado. Un grito esquizofrénico por aquí, otro por allá. Cuando terminó sonrió con orgullo. Ni siquiera se había dado cuenta de lo cansada que estaba así que caminó hasta Lucio -Chloe también puede ayudarte. Es telépata y curandera- Añadió como si lo que acabara de hacer no fuese nada a excepción de claro, el sueño que estaba empezando a darle y la forma en la que palidecieron sus mejillas. Pero ¡Hey! al menos no sangraba por la nariz.

El miembro 'Catherine Le Fay' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Probabilidad' :

Sonrío de manera afable al ver la sorpresa en el rostro de Catherine, haciéndome gracia su reacción ante mi confesión. Resulta que los dos pensamos más o menos lo mismo respecto a algunos aspectos del consejo. - ¡Eh! que yo sea un viejo no quiere decir que tenga que pensar así, jovencita. - le recrimino bromeando por eso de que los jóvenes siempre se creen que son tan distintos a los adultos, dándome cuenta de que yo también pensaba así hace unos años. - Tranquila, tendrás apoyo al respecto. Ya he estado hablando con Helena sobre ciertos asuntos...discutimos un poco, por todo ese asunto de que no quieren a nadie de fuera en la isla desde que sucedió lo de Kira. - suspiro apenado al nombrar el tema, no puedo creerme que no den todavía con el culpable. Catherine es mentalista, debería poder hacer algo más al respecto, aunque por ahora parece que necesita estar algo alejada del tema. - Ojalá demos pronto con el culpable. - dejo caer el tema a ver si ella dice algo, haciendo un gesto negativo cuando se disculpa por su tardanza en venir a realizar el hechizo de protección del lugar.

- No pasa nada. Hemos estado atentos y hemos puesto vigilancia hasta este momento. Puedes decírselo a Anteia si quieres, aunque por ahora tengo bastante ayuda y ella debe estar agobiada con los niños. He conocido a una  científica de los renegados que va a trabajar aquí, en el hospital. Es bastante buena, en todos los sentidos. Le he pedido que sea mi socia aquí en el hospital. Se llama Sophia. - le explico a Catherine con un deje de orgullo en la voz, pensando que ella entendería que quisiese llevarla a la isla. Después presto suma atención a las contestaciones que me va dando a las preguntas, pasando una mano por mi barbilla con gesto pensativo.

- Hum...- por los datos que me da no parece que sea grave, pero puede ser indicativo de otras cosas, u otra cosa, en concreto. Necesitaré más pruebas y datos para saber si mi sospecha tiene fundamento. No la interrumpo con mis dudas, al menos no por ahora. Espero a que realice la canalización de magia adecuada, haciendo uso del anillo para proteger el lugar. La primera parte del despliegue mágico que realiza corresponde a la ocultación del lugar, mientras que la segunda ya es más de cosecha propia, con el tema de las ilusiones. La verdad es que es bastante poderosa para lo joven que es, si sigue mejorando lo será mucho más. - Buen trabajo, con esto estaremos a salvo.- comento cuando termina para acercase de nuevo hasta mi, meditando unos segundos lo que me dice de Chloe. - Lo sé, la conozco un poco. Debería aprender medimagia conmigo, aunque ya lleva cierta ventaja con tanto curar a los renegados. Respecto a los síntomas que comentaste antes...creo que va a ser necesarias unas pruebas. Sígueme a la consulta de nuevo, por favor. - la invito a entrar dentro de nuevo, de vuelta hacia mi consulta. A pesar de que no quiera es necesario saberlo. Mientras llegamos le voy haciendo alguna pregunta más, las que sean necesarias para saber si mi ojo clínico va bien encaminado. - ¿Has tenido alguna alteración de tu período últimamente?

Termina riéndose un poco por la respuesta de Lucio para luego mirarlo un momento -¿Por qué tengo que ser yo la que esté cuestionando al consejo? Siento que...Es mi trabajo en realidad. Llevarles la contra, es súper pesado Lucio. Incluso cuando tienes apoyo siempre te señalan con el dedo- De alguna manera siempre terminaba siendo el culpable. No había manera de que, en el fondo del corazón, se le fuera la culpa del asesinato de Kira. -Mei dijo que tenía que reunirse conmigo. pero me tomó justo antes de las... vacaciones. Después de esto intentaré ir a hablar con ella- Le dijo a Lucio. Tras ello planeaba hablar con Rybar y luego creo que ya finalizaba con sus tareas. Excepto tal vez el hecho de que faltaba Max.

En cuanto empieza a hablar de Anteia asiente porque sabe que estar con los mellizos puede ser un poco demandante. Si ya de por sí tener uno era súper complicado, imaginarse tener dos de un momento a otro. Aparte sabía que esperaban uno en vez de dos así que la sorpresa había sido magistral. Aún se imaginaba la cara de los dos y le entraba la risa. Trolleo nivel Lucio. Se mordió el labio para no hacerlo y oír la forma en la que pronunciaba el nombre de Sophia, aquello la hizo entrecerrar los ojos y mirarlo de manera sospechosa -Entiendo...Tengo...- Se humedeció los labios pensativa antes de decidir lanzarse. Definitivamente, hablar le iba bien. Había tardado 20 años en darse cuenta -¿Es sangre pura? Es decir... ¿Pensaste en eso? ¿En su sangre? ¿En su poder? ¿Crees que el Consejo la aprobaría?- Inquirió dubitativa y un poco apenada pensando que tal vez estaba pasándose de la raya, pero si ella había pasado por eso, preguntándose...y él se había sentido identificado, tal vez esos pensamientos también habían pasado por su cabeza.

Aquello de buen trabajo la hizo sonreír mientras asentía. Un poco de agradecimiento nunca venía mal -¿Hay alguna otra cosa en la que te pueda ayudar? ¿Necesitas que te baje algo de la isla?- Preguntó, siempre podía hacer algo rápido o ayudarle con algún otro detalle y se sentiría bien. Metió las manos en los bolsillos de su pantalón mientras caminaba al lado de él -Le diré que se pase y hable contigo. Le vendrá bien tener algo de estructura y propósito para sus poderes- Añadió para después quedarse en silencio.

-¿Pruebas?- Preguntó antes de empezar a fruncir el ceño, empezó a vincular un poco los síntomas mientras le seguía dentro de la consulta -Lucio, no tengo ningún transtorno de alimentación. No soy bulímica- Agregó antes de escuchar con cierta reticencia aquello del período -Pues... A ver...Se supone que si...- La pelinegra empezó a sacar cuenta con los dedos tratando derecordar, era bastante puntual así que hace unas dos semanas tendría qu... Cortó esa línea de pensamiento en el momento en el que supo hacia donde indicaba la pregunta de Lucio. Sus mejillas palidecieron de pronto y esta vez sí se mareó -Ha-hace...Dos...dos semanas- Alzó ambos dedos con el corazón empezando a latirle con fuerza en el pecho y se llevó una mano a los labios, viendo la mirada del medimago y comprendiendola casi al instante -No... Lucio. No... No, no, no...- Parpadeó anonadada mientras empezaba a pensar en una cosa y otra de manera tan seguida que tenía un remolino en la cabeza -No no no...Oh, por Morgana. No, mierda. Mierda. Oh, por favor. Morgana... Joder...- Se agarró a la camilla para poder sentarse mientras se metía la cara en las manos y escondía el rostro -Ni siquiera terminé mi compromiso con Max. Ay, por favor... Joder....Mierda- Durante un rato las malas palabras seguían saliendo de su boca esperando que pronto Lucio saltara con un "hey, no te preocupes, puede ser que hayas sacado mal las cuentas".

Claro que podía ser pesado llevarles la contra a algunos miembros del consejo en algunos asuntos, pero confío en que poco a poco acaben abriéndose al diálogo y entendiendo nuestras posturas, pues todos queremos lo mejor para el futuro de la isla y sobre todo de nuestra labor y desempeño como maestros y guardianes de la magia, que es para lo que ostentamos esos cargos. Eso y para ayudar en el desarrollo de la guerra, aunque esa parte sigue estando un tanto parada por ahora, no terminan de aclararse al respecto. Por mi parte haré lo mío, que es curar a la gente.

- Bien, habla con Mei cuanto antes mejor, sólo estaremos seguros cuando sepamos lo que ha pasado y quién ha sido. - dejo eso a su cargo, que es la que puede arrojar algo de luz al asunto. Intuyo que he hablado de más con el asunto de Sophia, pues la La Le Fay es muy perspicaz y enseguida intuye algo. No me molesto en negarlo, sólo se notaría más. Tampoco sé que va a pasar, sólo sé que me gustó estar con ella y que quisiera estar más tiempo conociéndola mejor. Suspiro cruzándome de brazos, en un gesto negativo ante su primera pregunta.

- No lo es. Ella es humana, no tiene sangre mágica...aunque tiene ciertas habilidades relacionadas con la magia. Algo muy largo de explicar ahora. - no me voy a poner a contarle el asunto del espíritu benigno que la "poseyó", demasiado complejo. - Realmente no pensé en nada, la conocí trabajando. Dudo que el Consejo apruebe una relación con una humana, pero no deberían decidir con quién podemos estar, ¿no crees que ya no tiene sentido tener que guiarnos por criterios como la pureza de sangre? - pregunto pidiendo algo de apoyo, esperando que ella me comprenda. Agradezco su ofrecimiento a traerme algo de la isla, pero no me hace falta nada por ahora, y así se lo hago saber.

No parece que le apetezca lo más mínimo eso de hacerse pruebas, pero lo veo muy necesario. Alzo la mano como queriendo decir que no creo que tenga problemas de alimentación, no va por ahí la cosa. Enseguida parece caer en la cuenta de algo que yo ya había empezado a sospechar ligeramente, pues no le salen las cuentas con el retraso que confiesa tener. Pongo una mano en su hombro mientras se va sentando en la camilla, no vaya a ser que le de un mareo con la impresión y se caiga al suelo. - A ver...no es nada seguro, pero con lo último que me has contado y los otros detalles...hay muchos indicios para pensar que sí, que puede que estés embarazada. - le daría la enhorabuena si no fuese porque no parece hacerle mucha ilusión, más bien le está agobiando. No entiendo muy bien lo que dice de terminar su compromiso con Max, si se refiere a que debe estar casada ya o a qué. - ¿Qué pasa? ¿Max es el padre, no? Es tu prometido...anunciasteis el compromiso en aquella reunión en la que lo presentaste. ¿No es algo buscado? - la pregunta final puede molestarle, pero es necesario saberlo para saber cómo tratarla.

-Lo creo- Observó el rostro de Lucio cuando mencionó que era humana, eso era más complicado de lo que Catherine esperaba y aún así él no se había ahuyentado. Se vio a si misma extendiendo una mano hacia su hombro y apretándolo -Que el poder de nuestra sangre sea suficiente- Respondió de una manera casi solemne. En menos de 20 minutos se había logrado vincular con Lucio de una manera que, definitivamente, no esperaba. Pero encontrándose en situaciones parecidas y después de tanto tiempo siendo almas solitarias que vagaban de un trabajo a otro, los objetivos en común sevrían mucho para crear este tipo de lazos. Y también Catherine pensaba que los Descendientes debían ser suficientemente poderosos para tener estirpe con cualquiera aparte...¿No era el amor la magia más fuerte? Se cuestionó.

La muchacha se terminó acostando en la camilla con las manos en el rostro, aún histérica -No, no lo es- Se volvió a incorporar casi de un respingo -No es que no sea deseado. Es complicado- Murmuró mirando hacia el frente y luego posó su vista en Lucio -Yo no amo a Max, sabes? Es... Pensé que era una buena opción de matrimonio. Es poderoso, es puro...Y siempre me ha ayudado. Siempre está ahí para resolver mis problemas...Y...- Negó con la cabeza volviendo su vista al frente tomando largos respiros como llenándose de agallas -Yo amo a Ian. Es con quien estuve durante las vacaciones. Es con quien quiero estar, sin importarme lo que diga el Consejo, ni mi compromiso, ni Max. Sólo quiero ser feliz- Dijo con el ceño fruncido soltando luego un suspiro largo que le ayudó a contener las lágrimas, sus orbes ya se encontraban cristalinas -¿Qué va a decir mi madre? ¡Mis hermanos!- Se preguntó a sí misma en voz alta. Había faltado a su palabra en el compromiso y sabía que se podía tomar realmente como un engaño, pero no esperaba este tipo de consecuencias...Iba a arreglarlo mañana y de la nada tenía esta noticia tan...Cruda

"¿Ian? Te necesito en el nuevo hospital. Es una emergencia. Estoy en al consulta 3 con Lucio"

Envió el mensaje mental y luego volvió su vista a Lucio tensando los labios antes de alzar los hombros -¿Qué hago? Soy joven, soy torpe, soy tonta ...No quiero que tenga la misma vida que yo tuve- Expresó en un tono profundamente triste antes de empezar a llorar, volvió a perder su rostro en sus manos moqueando -Va a crecer en guerra... Va a ser un hijo de la guerra porque no pude traer la paz que quería a este mundo- Se recostó en la camilla poniendose en posición fetal para llorar desconsoladamente en un ataque hormonal producto del embarazo.