Sala de personal

Tras lo que Markus pudo ver en el estudio de Gionardo, se desapareció de él y reapareció en el hospital. Una tal Doris informó a Markus que había una persona que podía resolverme las dudas en la planta de personal, pero que decía que no tenía acceso por no ser trabajador del hospital, por lo que Markus sencillamente se desapareció del hall y reapareció en la entrada de la sala del personal, que para eso tenía el color azul de administador y tenía poderes especiales, como editar las fichas de combate.

Ni tocó la puerta ni llamó ni espero, Markus sencillamente abrió la puerta de golpe y porrazo, pillando a todo el mundo dentro hablando de cosas -Markus necesita saber si se puede tener sexo mientras se desaparece y en ese caso si habría que lanzar dados de embarazo!- Gritó mientras entraba con su sonora y chirriante silla a la sala. -Aunque hay un chat de discord para las dudas, quizás Markus debería preguntar ahí... Dadme un segundo... Ya-

Estaba yo en casa aburrido como el que más, castigado por mi tía por querer haber ido a la clase de Adael con el canijo de mi primo cuando llegó a mi poder un folleto sobre educación sexual. La verdad es que no tenía ni idea del tema, pero era como algo que todo el mundo debería de saber, ¿no? Quizá se diera en clase de pociones en Hogwarts, a saber. La cosa es que le pareció el tema lo suficiente interesante como para poder ir a cotillear al hospital.

Me desaparecí de casa y reaparecí en la recepción del hospital, donde pregunté muy amablemente por un experto en el tema. La  mujer, de nombre Doris, comentó algo así como que andábamos todos con las hormonas revolucionadas y que se debía de tratar de la luna llena. En cualquier caso, me informó que fuera a la sala de personal, ya que se encontraba Aldaron allí y que podría resolverme algunos problemillas con este asunto. De modo que obedeció, llegó a la mencionada puerta, tocó y abrió la puerta -Hola, busco al doctor Aldaron, por un tema de... ¿sexo?-

-uy! siii! es una cosa que se usaba antes, tu subías tu foto a una app con un perfil esa cosa te decía quien había cerca y podías ver sus fotos, hablabas con alguien que te interesara y quedabas para... ya sabes, intentar de forma fallida aumentar la población mundial...ah... que bonito era todo antes- dije mientras apoyaba los codos en la mesa y la barbilla en mis manos.

-Si, si, no te preocupes, pero es eso, necesita mucho reposo y que lo vigilemos un poco más por si acaso, es poco probable que haya complicaciones pero mejor prevenir, no crees?- que bonito era el amor juvenil, a veces hasta me daban ganas de tener pareja pero no, yo era un alma libre, eso y que había poca mercancía en la isla. Cuando el tema pasó a ser sexo y el tamaño del pene de Reiv chasqué la lengua, la chica había dado en el punto y no parecía que fuera a soltar la lengua -Vale, tu ganas, tengo un par de paquetitos en la taquilla, espera aquí- me levanté y fui a buscar aquello entre mis bartulos cuando Anteia entró por la puerta con eso de las clases de educación sexual -uuuuh! siii! me interesa! vamos a hacerlo, hay mucho baby boom en la isla, a ver si Lucio me financia los condones y los puedo poner más baratos!-

Empecé a hablar con Anteia de aquello, no había donut con jamón solo había donut y no sabía de quien era pero yo se lo di que tenía que alimentarse bien -Nena! tienes que contarme que pasó con la rubia loca! que vi el informe aquel, ya sabes, por el caso de hace unos días..- miré a Juliet, sabía que conocía al feral y eran amigos así que no tenía mucho que esconder de ella, después le expliqué a Anteia -Mira, te presento a Juliet, es la novia de Reiv Black, el hermano de Johan.. a ese lo conoces, no? el lides de los renegados, el marido de Jo, el caso, que son amigos del chico Feral, vino un par de veces a ver a Reiv después de loq ue pasó y chica, que lástima, parecía un alma en pena, animalico... él estaba el día que Leila dio a luz, Lucio y yo la asistimos en el parto, me han llamado a declarar y todo pero me han dicho que se pospone, no?-

Estaba yo en mi salseo cuando de repente se aparece el loco de la paloma, con ese descendiente no había tenido mucho trato, solo lo que me contaba Arleen como que había robado una silla del hospital. Aquel hombre había llegado preguntando cosas extrañas, miré a las dos mujeres de refilón como si necesitara que alguien me explicara que estaba pasando y después volví a mirar a aquel hombre -em... yo diría que no, la desaparición es algo que requiere una concentración el el lugar de destino, si se hiciera mal podría provocar escisiones en el cuerpo y dado que al realizar practicas sexuales la concentración se ve enfocada en el acto en si... pues te diría que es posible pero estarías en gran peligro de perder un miembro o dos- con lo del dado no sabía a qué se refería pero si era una probabilidad de embarazo... -siempre que haya penetración o un acercamiento de los genitales sin protección hay riesgo de embarazo... ¿a que viene todo esto?-

No había acabado con Markus cuando ZAS! entra otra persona a la sala, un chico preguntando por la clase -Bueno Anteia, tenemos trabajo ¿podemos pedir un aumento? quiero despacho nuevo!-

La emoción de Aldaron le hizo sonreír -Sabía que serías mi compinche. Es que … Creo que necesitamos todo un departamento. Acabo de oír a uno pedir matrimonio porque cree que se va a quedar impotente. ¿Qué te parece?- Preguntó abriendo la nevera para buscar algo que comer después de sonreírle a Juliet como saludo pero se incorporó nada más mencionar a Leila.

-Pues qué te parece que han aplazado el juicio y me he ido directo a poner una queja en la guardia por mal hacer o como se diga. He hablado con la General y finalmente recibí un patronus de Sayid diciendo que la iban a poner en custodia. No me siento segura con esa muchacha por ahí dando vueltas...Y ni qué decir que me ha jodido a MI Brigada desde dentro. Agh…¡No me vuelvas a sacar el tema! - Le dijo cerrando la puerta de la nevera con el ceño fruncido, caminó hasta sentarse en una silla con una cara de obstinación clara. Entonces escuchó toda la presentación y su mirada azul se aclaró de nuevo. ¿Esta era la amiga de Kyllian que no era amiga de Mérida? Mira por donde, qué casualidad -Hola Juliet, yo soy Anteia Malfoy, esposa de Lyran Knox. Soy renegada también, encantada de conocerte- Dijo alargando una mano y cogiendo la contraria con un suave gesto, pero algo le decia que no era muy de relaciones asi que apartó la mano con suavidad.

De pronto, Anteia confirmó que su departamento era necesario cuando Markus en silla de ruedas y luego otro chico se acercó para pedir ayuda sexual. Aldaron explicó muy bien pero Anteia ya se había relacionado con Markus en algún momento asi que se incorporó y se acercó a él -No es posible. Mientras te desapareces puedes perder tu miembro y pueden herirse profundamente. Y tal como dice mi compañero, cualquier coito o incluso roce entre órganos sexuales sin protección puede tener probabilidad de embarazo. - Punto, con eso debía ser suficiente y ante la exaltación del elfo Anteia lo miró con los ojos entrecerrados -Mi idea, mi despacho. Serás Auxiliar primero- Le soltó antes de mirar hacia el pelirrojo -Yo ...Bueno, te busca a ti- Le dijo cuando miró a Nicho, sonriendo de lado -Yo tengo que retirarme, voy a armar toda una carpetita para Lucio y así agilizamos- Se despidió de todos para irse a hacer sus informes y desapareció por los pasillos del hospital.

¿App? - Las explicaciones parecían no acabar. Le iban diciendo una cosa y ya tenía dudas de otra. Pero a lo que sonaba era a que se veían sus fotos y luego se enviaban mensajes, como con la moneda de los renegados, para chuscar. Asintió lentamente, con una suave sonrisa, porque no sabía que otra cara poner. Ante lo de Reiv, solo soltó un suspiro y asintió profundamente. Era necesario que se quedara y sí, lo mejor era prevenir.

Al menos ganó un round al no tener que contarle nada sobre Reiv. Su rostro se iluminó al saberse ganadora y evitándose un momento muy incómodo. Escuchó entonces a Anteia, con su idea del departamento de educación y aunque realmente era algo que le serviría, porque dudas tenía un montón, no creía que fuera a hacer uso de sus servicios muy a menudo. Y como parecía que iban en confianza, la verdad estaba a punto de preguntar algo, pero entonces sacaron el tema de Leila y la cara le cambió tras pensar en Kyllian. Dejó la taza de café a trompicones cuando Anteia le tendió la mano, haciendo lo propio y sonriendo suavemente mientras Aldaron le daba todo el rollo para explicarle quien era.- Encantada.- Repitió, dándose cuenta de que su mano era tan suave y delicada como lo pensó en un inicio. No sabía como asimilar las noticias sobre Leila, así que decidió ignorar el tema de fondo. No tenía caso y Anteia también parecía sin ganas para seguir en ello.

Entre la llegada de Markus y del chico pelirrojo, se dio cuenta muy rápido de que el departamento sí hacía mucha falta entre la comunidad. Decidió entonces hacer un movimiento antes de que alguien más la pillara con Aldaron, antes de que alguien la conociera. Tomó de su bolsillo un poco de dinero, doblando los billetes bajo la mesa con cuidado. Los colocó debajo del plato de la tarta, y poco a poco fue empujando este al elfo. Arriba le quedaba un buen trozo aún sin probar, quizás le gustaría, a modo de ofrenda. Le sonrió a Anteia cuando se levantó para salir de la habitación y volvió a tomar su taza entre las manos.- Es muy bonita, ¿no?

De modo que se necesita concentración para tener tema y si eso te podrías escindir. Interesante teoría, pensó Markus. La señora rubia (a esa la había visto en alguna boda) y el elfo rubio también (debe de haber plaga de rubios) se le añaden dos pelirrojos (debe haber otra plaga de pelirrojos) explican que esto sería prácticamente imposible, mas Markus estaba seguro de lo que había querido ver visto -Se equivoca señor elfo. Markus ha visto cómo el señor hijo lejano de Merlín se metió en el baño, con Gionardo, y luego salió de otra habitación todo despeluchado. Habían chuscado y se habían desaparecido. Markus lo sabe, que sabe leer entre líneas de posts. Y si se han penetrado, le puedo asegurar que no han tirado dados de embarazo, que Markus lo ha visto con sus poderes de administrador ¿Y si te desapareces mientras eyaculas? Interesante teoría- Markus sacó un post-it y lo apuntó. Alguien debería revisar todas estas cosas para hacer tratados y rescribir el Kamasutra Markus version: Markusutra.

Markus invadió la mesa donde estaban tomando el té, había tarta y demás cosas, pero Markus necesitaba espacio para poder escribir en post-its, quizás uno de esos textos de colorines se quedara pegado a cierto dinero que cierta persona había ofrecido y que ahora podría pertenecer a cierto mago por puro despiste -Markus tiene más preguntas, si el descendiente de Mendel… bueno uno de ellos, decidiera cruzar palomas con magos, saldrían alados? O los alados solo salen cuando fornican fuerte una paloma con una avestruz… sí, claramente, puede que esta información sea importante para tramas globales posteriores…. Claro claro. Debemos evitarlo- Markus golpea con el puño en la mesa -¿Cómo podemos hacer que los pollos no tengan más huevos?- Preguntó Markus, y tras hacer un vistazo por la sala, clavó su mirada gris en la pelirroja, seguro que ella sabría las respuestas. -¿Tú tienes sexo con pájaros o eres más de hacerlo con cánidos?-

Me despedí muy educadamente de la mujer rubia cuando se retiró, quedando allí el elfo, una chica pelirroja y el chiflado de la silla de ruedas. Me sentí un poco incómodo porque nadie me decía qué hacer o no hacer, ni me habían invitado ni nada, ¿y si me había equivocado de día? Bueno, total, ya estaba allí, por lo que robé una silla y me senté. Intenté seguir las líneas de pensamiento del hombre del bigote sin entender la razón de su pregunta, de modo que me giré hacia Juliet y me encogí de hombros. -¿Acaso he llegado con la clase empezada?-

Las cosas se tornaron muy raras cuando decidió preguntar por el sexo entre los pájaros. Del tema entre humanos, bueno había escuchado cosas y había investigado otras tantas, pero la ornitofilia  ya era algo que me despistaba -Perdonen, pero yo pensaba que era una clase de sexo… humano, y no que fuéramos a hablar de zoofilia- Algo horrible le pareció a Nichollas y que había esperado que los magos no practicaran nunca -Yo he leído que antes se maquillaban orangutanes y se les prostituía. Algo horrible, yo estoy en contra del maltrato animal! De modo que no se debe hacer cosas raras con los pájaros, señor del bigote!-

- Con tal de educar a esta gente y que no piensen que se les cae el pito por no casarse... ¿quién te ha dicho eso? parece un chiste de esos de jóvenes cristianos- Me quedé muerto cuando dijo que a Leila la habían encerrado, y si, también saludó a juliet, pero me quedé muerto con lo de la otra -siempre hay una primera vez para todo, si es que... ¿ a quién se le ocurre subir a un crío a...- nada, Anteia no quería hablar más del tema y me quedé calladito, seguramente Lucio tuviera más detalles que si ser el director del hospital no te daba salseo ¿pa qué servía el puesto?

En mitad de nuestra conversación se aparecieron dos personitas nuevas, el descendiente con algún tipo de desorden psicológico y un crío de la edad de Justin, probablemente. Anteia me respaldó en lo de hacer sexo y desaparecerse mientras Juliet me daba su trozo de tarta, sonreí de oreja a oreja y le di un buen bocado... que acabé escupiendo cuando el pirado aquel dijo que Sean había tenido relaciones con Gioerdano -¡No puede ser! no te creo... ¿lo ha metido a la mazmorra esa sexual que ti... no, no, no, pero si se van a casar!- Anteia se fue dejándome con todo ese marronazo y a mi ahora me tocaba procesar la información.

-Vamos a ver, primero, después de años de experiencia en sexo homosexual te puedo asegurar que un embarazo entre personas del mismo sexo es imposible! deja de decir lo del dado!- miré a Juliet -Si, es maravillosa, pero no comparte la maldita!- dije refiriéndome a Anteia, después de eso miré al chico y le tendí la mano -Encantado, soy el doctor Failon, mi primer consejo para ti es que no escuches a Tesla, por tu propio bien- ahora me tocaba volver con el susodicho -No, no puedes tener sexo con una paloma! primero, no estáis ninguno de los dos preparados fisiológicamente para eso a menos que quieras un... abrigo de plumas para tu mini tu, segundo, las criaturas no humanoides no pueden procrear con magos o humanos, así que no puedes hacer un alado....- una vez más, volví al chico -Somos Animal friendly, lo prometo, no lo escuches!-

Tuvo que sonreír ante la pobre alma que creía que se quedaría impotente si no se casaba, sobre todo porque los chistes eran muy buenos. Poco sabía que se trataba de Kyllian, sino, habría salido de ahí de inmediato a buscarle para reírse en su cara y contarle a Reiv.

Cuando le pasó el trozo de tarta al elfo, le miró con los ojos entrecerrados ante la incredulidad. Si se le veía un trocito del billete y todo, maldito elfo. ¿Mazmorra sexual? Creía que esas cosas no pasaban ahí. ¿Los mágicos también eran unos pervertidos como los humanos? Eso sí que le sorprendió. No quería quedarse hasta el final de la clase para poder comprar la mercancía. Estaba a punto de irse con las manos vacías, pero si no lo hacía a la primera, la siguiente vez sería más difícil. Supuso que la tercera sería la vencida. Le quitó el plato al elfo, sacó discretamente el billetito que con tanto amor se había encontrado en el suelo hacía días, y se lo pasó al elfo por debajo de la mesa, modo abuela, pinchándole un muslo para que ahora sí lo viera.

¿Homosexual? No supo por qué se sorprendió, si el elfo siempre decía cosas de los chicos guapos, pero no le había hecho clic el cerebro hasta ese momento. Tuvo que reír ante lo de no compartir, pero no tenía ni idea de por qué lo decía. La cosa se estaba poniendo difícil de comprender. Sexo en mazmorras homosexuales y con palomas y orangutanes... su mirada no podía estar más perdida.- Con... ammm... ¿magos?- Su rostro se sonrojó mientras veía a Markus. Que difícil pregunta, pero supuso que con pájaros no era. Pero luego Aldaron dijo humanoide y tuvo que entrar a la conversación.- Pero entonces los ferales... son bastante humanoides, ¿no crees? - Y no eran magos, por lo que ella sabía. ¿Eso no contaba?

-Vaya que sí ha sido. Markus lo ha visto con sus propios ojos- Y Markus dejó ahí la frase, sin saber que el elfo con el que hablaba le encantan los dobles sentidos y que podría tacharle de voyeur. Eso no le importaba a Markus, un apelativo más para la lista que ya tenían para tratarle. -Que sí, que sí, que sí- Asentía el científico con cada negativa del elfo, a la par. Lo de la boda no lo sabía, sería otra maravillosa ocasión para robar cubertería de la wena bonita para sus experimentos de metales preciosos.

-A Markus no le da la gana el no rendir pleitesía al señor dios de los Dados. Como no le tengas en agrado jurará vengarse y sacareá ceros en las tiradas de ataque, positivo en los embarazos y fallos en las probabilidades. Y si no, ya me encargaré, yo, como administrador de que así sea. ¡Markus ha dicho! Maldita sea, dios de los dados, que está leyendo a Markus, él te defenderá a ultranza. No hagas caso a este elfo necio que no sabe lo que dice- Por otro lado siguen hablando del tema de los embarazos, reflexionando muy mucho sobre el tema -¿Y si un hombre genéticamente hablando tiene sexo con una mujer transgénero? ¿En ese caso se tiran dados? Oh, oh. Una persona homosexual transgénico con un heterosexual curioso de género cis, demisexual a la inversa, con pi a la 5ª potencia, entonces, ¿hay dado o no hay dado? - Preguntó Markus en clave de terrible curiosidad, aunque posiblemente solo él antendiera a qué tipo de relación se refiriera -¿Y un hermafrodita? ¿Tira dado? Seguro que los hay sueltos por ahí, haciendo sospechar al dios de los dados, fastidiando las tablas de administración. Enarbolando sus penes. Como las planarias- Markus giró a la pareja de jóvenes de nuevo, ceja alzada y les preguntó -¿Vosotros sois planarias?-

Markus se recolocó en su asiento después de la respuesta de la muchacha que parecía hacer hijos con magos. Interesante respuesta. Pero todo esto seguía teniendo muchos cabos sueltos -¡Ahá! ¿Y los dragones? Markus no haría nunca daño a Entropía, es su ornitoamiga, Markus es animalfriendly, no como vosotros, ¡lujuriosos! Solo pensando en romper las normas de la naturaleza haciendo cosas sexuales con ferales ¡Seguro! Markus leerá vuestros históricos de mensajes. Las manzanas con las manzanas, las peras con las peras, las bananas con las bananas, y todos juntos son una macedonia…. Con piña. Macedonia de pizza con piña- Genial idea, Markus la apuntó en un post-it

No me había quedado demasiado tiempo en casa de Josephine, dejé a Yaroslav allí para que se recuperase en condiciones, y para que se pusiese al día con su amiga. Yo me fui por ahí a vagar por la isla sin mucho que hacer, refunfuñando cosas por lo bajo porque me aburría estar ahí sin hacer nada y sentirme poco útil.

Acabé sentándome bajo un árbol junto a mi tortuga pequeña, murmurando su nombre con drama. Empecé a dar buena cuenta dea botella de vodka que cogí de casa de Jo, pensando en cómo había llegado a la situación actual. En Rusia podía haber sido feliz, tenía una vida. Me dio por pensar en Irina, en que probablemente no hubiese sobrevivido a SAM y en que tal vez estuvo esperando por saber qué pasaba con nosotros.

- Puta mierrrda todo. El karrma.

Tras acabarme la botella seguí caminando hasta que llegué al hospital bastante borracho. Tenía q devolver la silla que habíamos robado, pero al llegar me di cuenta de que me la había dejado en la casa. Fui buscando al elfo para disculparme, hasta que al fin di con él en la sala de personal. Estaba rodeado de gente, pero me dio igual. A algunos los conocía, como a la pelirroja. Hablaban de sexo, o eso me pareció entender.

- Qué tonterrias. Aprrended por vuestrra cuenta.

Me fui hasta el elfo, agarrándole por la pechera de la camisa como si le fuese a pegar. No podía escaparse.

- Venía a devolverte silla robada, perro he olvidado en casa. No es un buen comunismo. Mis disculpas. - tiré de él violentamente para soltarle un beso de disculpas soviéticas en los morros, dejándole libre después de la intensidad sorpresiva. Luego me aparté para alejarme en dirección a la puerta, aunque antes empujé a Markus hacia un lado solo porque no me gustaba su bigote.

No me había quedado demasiado tiempo en casa de Josephine, dejé a Yaroslav allí para que se recuperase en condiciones, y para que se pusiese al día con su amiga. Yo me fui por ahí a vagar por la isla sin mucho que hacer, refunfuñando cosas por lo bajo porque me aburría estar ahí sin hacer nada y sentirme poco útil.

Acabé sentándome bajo un árbol junto a mi tortuga pequeña, murmurando su nombre con drama. Empecé a dar buena cuenta dea botella de vodka que cogí de casa de Jo, pensando en cómo había llegado a la situación actual. En Rusia podía haber sido feliz, tenía una vida. Me dio por pensar en Irina, en que probablemente no hubiese sobrevivido a SAM y en que tal vez estuvo esperando por saber qué pasaba con nosotros.

- Puta mierrrda todo. El karrma.

Tras acabarme la botella seguí caminando hasta que llegué al hospital bastante borracho. Tenía q devolver la silla que habíamos robado, pero al llegar me di cuenta de que me la había dejado en la casa. Fui buscando al elfo para disculparme, hasta que al fin di con él en la sala de personal. Estaba rodeado de gente, pero me dio igual. A algunos los conocía, como a la pelirroja. Hablaban de sexo, o eso me pareció entender.

- Qué tonterrias. Aprrended por vuestrra cuenta.

Me fui hasta el elfo, agarrándole por la pechera de la camisa como si le fuese a pegar. No podía escaparse.

- Venía a devolverte silla robada, perro he olvidado en casa. No es un buen comunismo. Mis disculpas. - tiré de él violentamente para soltarle un beso de disculpas soviéticas en los morros, dejándole libre después de la intensidad sorpresiva. Luego me aparté para alejarme en dirección a la puerta, aunque antes empujé a Markus hacia un lado solo porque no me gustaba su bigote.

-Nichollas- Me presenté ante el elfo cuando él lo hizo. Por lo demás intentaba poder seguir la conversación entre el tipo del bigote y el médico experto en estos temas. -Vaaaaale….- Respondí con la ceja un poco arqueada cuando me dijo que no escuchara al tipo del bigote, al que estudié por si decía la verdad sobre lo de chuscar con palomas. Seguro que es de los que lo harían con cabras….. Debería denunciarlo a la Guardia.

La conversación fue degenerando muchísimo, y no pareció mejorar con la presencia del fornido varón de pelo blanco. Perfecto Adonis. Seguí un rato más sin entender absolutamente nada, y sin saber si debía recordar para mi futuro si un tal pi elevado a la 5ª potencia debía o no tirar dados cuando se tirase a un feral. -¿Quién es Pi?- Pregunté, lo mismo con esa información podría ubicarme, yo qué sé. Claro que la pelirroja parecía tan perdida como yo, menos mal.

lo estaba flipando con lo de Sean... es que no podía ser cierto, no me lo podía creer... pero siguiendo mi filosofía de "las más calladitas son las que más delito tienen" pues podía ser, ¡pero lo de desaparecerse era ridículo! además, a Gio le interesaba Arleen, en eso me había quedado aunque ya no podía acercarse a ella ¿ se habría pasado a la otra acera? ¿y si siempre estuvo en medio? pues tocaba atropellarlo porque no me iba a joder la primera boda gay de Ouroboros, menos aún la de Lucio... ¿pero ¿y Sean? ¿de verdad había sido capaz de engañar a Lucio?¿sería su última canita al aire? no, no, no, tenía que hablar con ellos.

Mientras yo lo flipaba y hacía mis cálculos sentí como alguien me daba toquecitos en la pierna, miré a Juliet y me había pillado el plato de tarta para darme dinero, me di un golpe en la frente recordando a lo que la muchacha había venido -Perdona bonita, si es que me he quedado loco con lo que dice Markus, toma, dos por uno por ser un empanado de la vida- le di los dos condones a Juliet mientras Tesla empezaba otro monólogo loco sobre dados que no entendía en absoluto.

El chico inocente que había entrado al final se presentó y le di un apretón de manos pero no estaba seguro si quería que se quedara porque las cosas que me decía markus eran... un lío, en serio, menuda jaula de grillos - pero vamos a ver....- respiré profundo y me levanté otra vez, le eché una foto a todo lo que había en la pizarra de la sala y después lo mandé todo a la mierda -Para que puedas concebir la orientación sexual o la identidad de genero no tienen nada que ver, lo que tienes que tener claro son dos cosas, necesitas un gameto masculino, uno femenino y un útero para alojar el zigoto barra feto y después bebé ¡y por supuesto necesitas gametos compatibles! ¡no puedes cruzar el de una paloma con el de una persona!...- miré la pizarra y empecé a pensar... -aunque si inhibes los receptores y consigues insertar unos compatibles para ambos además de una CRISPR...- me quedé parado un segundo, miré a los presentes y volví a la pizarra -Aún no se puede cruzar palomas con personas! las razas con formas humanas si pueden, Dragones, Alados, Ferales, Drow... pero solo mientras las dos formas humanas coincidan, a ver ¿cómo te vas a tirar a un dragón en toda su inmensidad? sus cagadas son más grandes que tu! los ferales y hombres lobo a menos que controlen te la pueden cortar en trocitos en luna llena...-

Estaba super on fire explicando todo aquello que se me iba de las manos si entraba en temas de genética experimental cuando escuché una sensual voz rusa, entorné los ojos al ver aThoren y pillé la taza, la rompí (que solo me quedó el asa porque esa mierda solo se rompe por el asa) y lo amenacé como si de una pelea de bar se tratase -¡TÚ! ¡Ruso traidor me has robado un paciente y una silla de ruedas! y yo todo feliz porque me habías regalado vod...- se acercó a mi y me pilló de la ropa, ¡otro! ¡QUÉ MANÍA CON PILLARME DE LA ROPA! ya estaba sacando la cerbatana cuando empezó a disculparse y entonces me plantó un beso en los morros... se me olvidó hasta el nombre, el mío, ese macho que se iba era mi futuro marido.

Me quedé en el sitio como una estatua, se me cayó el asa de la mano y me quedé mirándolo mientras empujaba a Markus y se iba hacia la puerta, cuando pude volver a respirar me fui corriendo tras él y lo pillé de la camisa -¡Espera! si quieres que te perdone entonces te invito a comer, mi tunro acaba en un rato,¡ y no acepto un no!- supuse que le gustó eso de no pagar, pero sería algo barato que tampoco tenía mucho, lo acompañé hasta la puerta del hospital y entonces volví corriendo a la sala del personal pasando por la recepción, le grité a Doris como un loco cosas que ni pudo entender y cuando volví a la sala con los "alumnos" volví a gritar -¡ESE HOMBRE TIENE QUE SER MÍO! AAAAAAAAAAAAAAAH!! ¡EL CRUSH ME HA BESADO! SEGUIMOS LA CLASE OTRO DÍA! ¡ME VOY!- fui a por mis cosas, a lo loco, ni me cambié de ropa, solo pillé todo de la taquilla y me fui corriendo para llevarme a Thoren de allí y poder pasar un rato juntos fuera del hospital o sobando huevos.

No tenía la máaaas mínima idea de por qué esperaba que el elfo fuera el ente discreto y angelical que parecía a primera vista. Si hasta se dio el golpe en la frente y todo cuando se dio cuenta del dinero. Sentía que se le subían los colores al rostro mientras pensaba que a ese elfo la abuela nunca le había pasado dinero de contrabando. Incluso lo había dicho con palabras. Ay cómo iba a sufrir aquel día. Se echó la mercancía al bolsillo con toda la dignidad y discreción de la que fue capaz y se levantó de la mesa a lavar su taza mientras escuchaba con demasiada atención la lección, aunque trataba de hacerse la cool. Entendió bastantes cosas con lo de las formas humanas. Por eso había logrado embarazarse a pesar de las razas, que de otra forma habría sido bastante incompatible.

Se estaba comenzando a agobiar con Markus porque no entendía la mitad de las palabras que decía. Desde que empezaba a hablar de un Dios que no conocía, cosas de transgénicos, cosas de plenarias que no supo como contestar y que le daba gracias al supuesto Dios de los Dados de que no tenía que verle a la cara mientras lavaba. Que lavó más de lo que debería haber lavado esa pobre taza. Estaba más limpia que el quirófano de tanto restregarla.

La locura se apoderó de la sala cuando el peliblanco entró como alma descarriada y ¡Le plantó un beso a Aldaron! Se habría hasta sentido ofendida por su leve flechazo con él durante la época sin magia, pero la reacción de Aldaron cuando volvió a la sala la libró de toda mala hostia como si de un exorcismo se tratara; pues tuvo que hacer malabares para que la taza no se le cayera cuando el grito la hizo saltar cual venadillo asustado. Aquello ya era de locos, pero sin el elfo rubio para llamar la atención, las preguntas se iban a dirigir a ella y al adolescente que estaba en la mesa aún. Cruzó la mirada con él, y dijo "corre" sin soltar palabra mientras comenzaba a caminar hacia la puerta.- Ah, que cosas, ¿oyen eso? La alarma silenciosa e invisible de urgencias. Parece que hay trabajo. ¡Que tengan buen día! - Murmuró, volviendo a hacerle caras al muchacho y saliendo del lugar corriendo. Después de marcar salida, dejar sus cosas en la taquilla y revisar que Reiv siguiera descansando, salió del hospital.

La cosa empezó a ponerse interesante cuando el elfo sapiencil hizo hueco en el tablón, lo cuál implicaba una clase magistral y, por tanto, había que tomar notas y apuntes. Markus esperaba que no se mezclaran sus post-its sobre gametos con los post-its de las islas de espejismos, que lo mismo hacían un streptease ball bar, y en lugar de llamar la atención de las máquinas conseguían que solo fueran los salidorros de la isla. -Pero y si esa persona se ha operado y ya no tiene aparato reproductor, ¿eh? ¿Así cómo lo hacen? ¿Con el poder de la mente?- A Markus le pareció terriblemente interesante lo de la CRISPR, entendiendo que, gracias a los crispis podría hacer mezclas raras entre seres aparentemente incompatibles -Pues Markus cuando desayuna con crispis no tiene hijos con cereales… a nos ser que los que se vayan por el váter sean hijos de Markus. Oh, vaya. Markus ha abortado muchas veces en su vida- Y Markus no pudo evitar sentirse culpable por ello.

A Markus le pareció terriblemente descortés el tipo de pelo blanco que acababa de entrar, ya que estaba inmiscuyéndose en una conversación que no le interesaba y Markus estaba hablando con un experto en la materia, aunque no estaban concluyendo nada en concreto. Los dos jóvenes huyeron después de que lo hiciera el elfo con el hombretón, dejando a Markus terriblemente confuso con el tema. Revisó el tablón, se rascó la coronilla -¿Pero al final un mago puede tener descendencia con una planaria o no? Y con ese planteamiento, que no obtuvo respuesta, salió de la sala de personal, desechando los post-its donde había descubierto la forma en la que un humano podría regenerarse gracias al poder de las planarias.

El turno estaba siendo muy tranquilo pero yo estaba agotado por culpa de mi compañero de piso, tenía que poner reglar... e insonorizar su habitación, hasta la tortuga se portaba mejor que él porque hablando se entiende la gente pero Thoren costaba más -no me había salido tan caro un posible polvo en mi vida- dije tirándome en una silla de la sala de personal.

Miré el reloj en la sala de personal y supuse que no faltaría mucho para que Lucio llegara así que me levanté para preparar café, café cargadito para que me llegara al cerebro rápido y no dormirme aunque falta me hacía.

Llegué a la sala de personal para tomarme mi café de la mañana, que a esas horas siempre me hacía falta un chute de energía. Al llegar allí me encontré con Aldaron, al que saludé sonriente y de buen humor al verle preparando café. - Parece que el turno está tranquilo, ¿verdad? - comenté un poco de broma, porque siempre que decíamos eso invocábamos a la mala suerte y se llenaban las urgencias. Pasé a su lado dándole una palmada en el hombro antes de sentarme, echando un ojo al periódico de Ouroboros que había en la mesa. Todo noticias relacionadas con la inminente misión. Suspiré apartando el periódico, que aquello me ponía nervioso y me daba más retortijones que un café cargado.

- Creo que tenemos que preparar los cuadrantes para las fiestas que vienen, para ver cómo nos organizamos. Ponme al día de cómo están las cosas, que no sé si hay alguien que necesita pedirse más días. Tampoco sé si Anteia se cogerá la baja pronto o si se quedará casi hasta el último mes. No he tenido tiempo de hablar con ella. - me levanté para ir al frigorífico, sacando una cajita que me había traído de casa con pastas caseras, hechas con rayadura de corteza de bowtruckle.

Justo, tal y como había planeado, Lucio entró por la puerta con una sonrisa de oreja a oreja mientras a mi me comían las ojeras, que envidia tan cochina le tenía -Muy tranquilo y tu muy feliz... ¿el sexo con Sean bien, verdad?- la cafetera hizo su sonidito de estar lista y saqué un par de tazas para ponerme café y darle un poco a mi compañero.

Me senté en la mesa con el café en mano tendiéndole el otro a Lucio -Si, va a ser un caos todo aquello, supongo que harán la misma jugada de la otra vez, aparecerse hechos una mierda en urgencias o recepción ¿vas a bajar?- pregunté dando el primer sorbo al café, estaba asqueroso como siempre pero lo necesitaba -Podrías pedirle una cafetera de esas mágicas que dice Arleen a Giordano, a ver si con un café decente tengo menos ganas de morirme- di otro sorbo y me eché hacia adelante preparado para el salseo.

-Te cuento, pero lo primero ¿has hecho la evaluación de la feral? ahí hay salseo, tu te acuerdas de que Kyllian estaba con ella y todos pensábamos que era el padre de la niña porque parecían muy unidos, ¿no? pues ha dejado embarazada a otra de la brigada- di otro sorbo de café pensando que más podía contarle -Yaroslav huyó con su hermano como compinche... estúpido y sensual Thoren. El caso es que ahora es mi compañero de piso, oh! el chico de los Black también ha huido, ¿te acuerdas del tipo sexy con pinta de malote que apareció en el quirófano? pues es su padre y es un vampiro, le he dado una receta para que venga a por sangre, no sea que se meriende a alguien-

Le robé una de las pastas a Lucio que tenían muy buena pinta y me comí un par -lo de Vishous ya lo sabes así que... creo que no me queda nada por contarte, oh, he enchufado a Thoren a la guardia, me estoy ganando el cielo con él, si no me lo tiro mi juventud y atractivo sexual habrán acabado- con el informe dado ahora me quedaba pedir favores -Lucio, dame tu calcetín-

- Pues la verdad es que sí, para qué te voy a mentir. Eso sí, no te cuento nada más, que eres un cotilla. - respondí sonriente a Aldaron, esta vez menos cortado que otras veces por sus típicas preguntas. Lo que no iba a hacer era darle detalles. Mi cara se volvió algo menos feliz por lo de bajar a la misión, a lo que asentí resignado. - Sí... puede ser necesario, y no quiero dejar a Sean solo. Lo malo es que bajamos demasiados sanadores. Temo que el hospital se quede con poco personal para cuando regresen. - cogí el café que me tendió mi compañero, soplando antes de dar un pequeño sorbo. Ya estaba acostumbrado a aquel café medio malo de máquina, era como una droga necesaria. - Tal vez luego. Giordano anda muy liado últimamente con cosas de la misión. Es lo que ocupa todo el tiempo ahora. - sabía que se venían sus narraciones/actualizaciones de salseo por la cara que puso, aunque además aportaba información relevante. Puse toda mi atención, que en unos minutos saldría de allí estando al día de todo.

- Ah, sí...lo sabía. Lo estuve hablando con Leila en el interrogatorio que tuve que hacer. Ella no quiso decir nada sobre ellos, pero juraría que pudo tener algo que ver. No lo sé, es un tema incómodo y turbio. - recordé con malestar la charla, no había salido con buenas impresiones. Lo de las huidas de heridos me hizo suspirar con cara de "Merlín dame paciencia", pues todos nuestros pacientes eran  unos tercos.  - ¿Por qué huyen todos? ¿será que tenemos que mejorar la cocina del hospital? ¿acaso no los tratamos con cuidado y amor? No sé, tienen esa manía. - alcé el pulgar para aprobar el plan de contención de vampiros mediante las bolsitas de sangre, así se alimentaban y no desangraban gente. Me hizo reír con sus comentarios sobre Thoren, pues el elfo estaba empeñado en ligarse al ruso. - Juventud y atractivo tienes para rato, amigo. Si no funciona pues...siempre habrá muchos otros en la isla. O si no muchos, unos cuantos. - me quedé pillado unos segundos con el comentario del calcetín, aunque pronto asocié todo. Me hizo tanta gracia que casi escupo el café. - Vaale, Aldaron es un elfo libre. Tienes todos los días que quieras libres, que luego el día de la misión  tocará hacer guardias muy largas. Cuando regresen, claro.