ENTRADA

Al menos era algo tranquilizador que la poseída no fuera a recordar donde estaba. Que los de la Alianza descubrieran las localidades de los mágicos era bastante repulsivo, pues ellos no tenían escrúpulos para atacar lo que les diera la gana. Y aunque esa rehén no le parecía especialmente importante, sí que habían perdido una ligera oportunidad de congraciarse con los idiotas de la Alianza.

-Sí, esa parte, donde me detestan, la recuerdo muy bien.- Aclaró con puntuoso tono, echándole a Johan una miradilla por el rabillo del ojo. Él aún no sabía por qué se había unido a ellos ni por qué la totalidad de su enojo contra ellos, pero consideraba contárselo alguna vez que hubiera oportunidad. - Pero si nos llegaran a ver juntos y te capturan, puedo decir que yo te traje. ¿Quién no me trataría como heroína si les llevo al líder de los renegados? Aunque eso no quitaría que su supuesto amor sería una fachada por el tiempo que les sirviera para usarme en sus discursos.

Y por eso, quizás por lo hipócritas que eran en la Alianza, era lo que más les molestaba de ellos. Ella también podía jugar con esas condiciones.

Tienen dragones. Un dragón puede reconocer a otro fácilmente. Y tu padre... tu padre cayó también. No lo olvides. No hay nadie seguro.- Aclaró, pues aunque el chico quería hacerse el duro, la realidad era que tenía que hacerse una idea de la gravedad de la situación. No había nadie intocable. Y hasta ahora, el único enigma de la Alianza era acerca del origen de la magia y sus alcances.

- Sé que no van a dormir tranquilos si yo doy el primer turno, así que tomaré el segundo. O el tercero.- Murmuró, buscando entre las cosas de su bolsa un par de grandes abrigos abultados que les pasó a ambos. Estar en la intemperie, aun cuando la primavera había iniciado, era difícil. Los podían usar, hacer un fuerte encima de sus cabezas o tomar como almohadas.

Tomó una chaqueta para ella con gorro en negro y se la colocó. Se recostó en el suelo, con las rodillas dobladas hacia el cielo, observando el techo de hojas que ocultaba las estrellas del cielo más arriba.

- No creí que estar afuera sería más duro que los campos. -

Me levanto del suelo rápidamente al creer escuchar algo acercándose a la entrada de los campos, poniéndome alerta para adelantarme a lo que sea. Se trata de un jeep que entra al recinto tras las pertinentes comprobaciones, nada de lo que debamos preocuparnos por ahora. La distancia, la nocturnidad y el camuflaje boscoso juegan a nuestro favor, aunque eso no quita que si un centinela merodea por aquí nos pueda detectar. Murmuro un 'falsa alarma', aunque ya no vuelvo a sentarme en el suelo. Niego con la cabeza a lo que dice Ellyos sobre la posibilidad de que descubran que es un dragón, no está tan a salvo como cree.

- Tienen un tipo de escáner que llaman scooters...los soldados lo llevan en el ojo, y así pueden identificar al ser que tengan delante. No sé cómo funciona, pero los centinelas tienen otra cosa parecida. Así es como nos detectan, por mucho que nos transformemos o camuflemos. Lo sé, es una putada. - lo que me cuenta Ellyos sobre su padre me deja algo intranquilo, imaginando que si algo le perturba o cabrea nos puede liar aquí el apocalipsis climático. Yo creo que no le caigo muy bien, así que mejor evitar roces por si acaso. - Ya, supongo que se irá calmando poco a poco, el encierro afectaría a cualquiera. La furia de los dragones puede ser temible. Es a lo único que estaba acostumbrado hasta que conocí dragones que me mostraron un lado diferente. El dragón de la Alianza que mencionas no sé cuándo fue atrapado, lo mencionaban en un artículo de The Times, decían que enviaron al dragón a combatir a los renegados. Y ahora en el mensaje de la moneda dicen que la Alianza lo está persiguiendo, así que imagino que se les ha rebelado. Podemos intentar localizarlo para liberarlo o ayudarlo. ¿Alguna idea para encontrarlo? ¿Algún código dragón para llamar a otros?- miro de tanto en tanto hacia la zona a vigilar, tranquila y despejada por ahora. La posibilidad de ser atrapados si somos descubiertos es alta, pero no vamos a ser tan estúpidos como para acercarnos más ahí estando en una inferioridad númerica considerable y sin plan de ataque. Sólo esperamos a ver si la herramienta enviada regresa o si por el contrario resulta inútil. Le doy unas horas, pero no mucho más. Pongo cara de extrañeza cuando Ellyos piensa que digo cosas póstumas, no era mi intención que sonase así ni que piense que lo veo todo negro.

- Qué va. Si lo viese todo negro hace años que habría huido de aquí y lo habría mandado todo a la mierda. Sigo aquí porque tengo esperanza. Me refería a dejarlo todo hablado por si acaso nos atrapasen a alguno en algún momento. No es descabellado, puede suceder. - Victorya ya parece tener un plan para eso, decir que fue ella la que me capturó y anotarse el tanto. Eso les haría creer que sigue trabajando para ellos, aunque dudo que la readmitiesen tras haber sido prisionera. - Te acabarían usando, tú lo has dicho. Pero al menos te salvarías de reingresar en los campos por el momento. - la idea de que la hayan soltado con un propósito vuelve a rondar mi mente durante unos instantes, pero lo descarto rápidamente porque pueden capturarnos sin la ayuda de Victorya. - Más sencillo, intentemos salir todos de aquí esta noche, las capturas las dejamos para otro día. - ella decide dejarnos el primer turno para ponerse a descansar, argumentando que no estaremos tranquilos si se queda ella. A mi me da igual, no desconfío de ella como para pensar que nos va a traicionar si coge el primer turno. No es que tengamos todavía una confianza mutua excesiva, pero estoy intentando conocerla un poco mejor ahora que va a pasar tiempo con nosotros y vamos a colaborar.

- De acuerdo. Descansa, te llamaremos para el siguiente turno. - hago un gesto a Ellyos para separarnos un poco de Victorya para que pueda dormir, esperando que se acerque a mí para que podamos hablar abiertamente. Me tomo unos segundos antes de empezar a hablar, pero no doy demasiados rodeos al hacerlo. - Ellyos...siento si dije antes algo que te molestase. ¿Fue lo del anillo, no? a partir de ese momento te quedaste bastante serio, no se te da muy bien disimular.

Parece ser que la Alianza lo tiene todo pensado, así que mi plan de parecer humano no va a servir de nada, pueden saber si soy un dragón por mucha apariencia humana que intente aparentar. También comenta de que el dragón del que hablan apareció en el periódico para capturar renegados y ahora está siendo perseguido por rebelarse, quizá no estaba tan domesticado como ellos creían. Me encojo de hombros si hay alguna manera de llamarlo o saber donde está, como no vayamos volando y mi olfato de dragón detecte a uno...

Johan me tranquilizó sobre lo de pensamientos negativos, realmente no era así, simplemente quería dejar algunas cosas claras por si acaso, aunque pretende que nadie sea capturado esta noche. Nos sentamos en un lado aparte para dejar a Victorya dormir antes de que le toque su turno de vigilancia. Es entonces cuando salta con el tema... delicado del momento, su anillo y mi extraño comportamiento y mi incapacidad para disimular, me empecé a poner rojo de vergüenza.

- N-no es que dijeras algo malo, es que en ese momento bajé de la nube, creo que me hice una idea equivocada de ti y de mi... - tomé suavemente su mano donde estaba su anillo - pero no me importa... quizás es algo interno de los dragones que debemos aprovechar al máximo el tiempo con los que nos rodean porque poco tiempo váis a durar... yo te seguiré amando igual, mi corazón te pertenece, le guste o no a mi padre y tu no puedas corresponderlo, hasta el día en que inevitablemente nos tengamos que separar - sonriendo pegué su mano contra mi cara.

El creciente sonrojo de Ellyos se hace evidente a pesar de la oscuridad, señal de que he dado en el clavo. Claro que no eran imaginaciones mías, se puso así justo en ese momento, justo cuando supo que estaba casado. Juraría que ya le había dicho algo al respecto, pero no lo tengo claro al 100% porque fue cuando estábamos chungos con lo del virus aquel. Suspiro con cierto pesar cuando dice lo de la idea equivocada, sin poder evitar sentir cierta culpabilidad aunque yo no le haya mentido en ningún momento. Dejo que tome la mano en la que tengo el anillo, bajando la mirada hacia la dorada alianza que llevo en el dedo.

- No era mi intención confundirte o hacerte pensar en que podía haber algo más...- lo cierto es que no soy de los que van dando falsas esperanzas a la gente, en lo que al terreno amoroso se refiere. Durante toda mi vida sólo he estado con una persona, la que luego se convirtió en mi esposa, y dudo que pueda volver a amar a cualquiera de la misma forma. Espero hasta que termina de hablar, con lo que le está costando decir esto no creo que sea buena idea interrumpirlo. Apoyo mi mano contra su mejilla cuando él la lleva hasta ahí, manteniéndola unos instantes. Sonrío levemente cuando me recuerda eso de que yo palmaré antes que él, asintiendo. - Así es...yo seré un viejo de 200 años y tú seguirás siendo un dragón fuerte. - bromeo con esa idea, aunque es la pura realidad. Bueno, en caso de que sobrevivamos a la guerra y demás.

- Escucha, Ellyos. Eres una persona que me importa, a pesar del poco tiempo que nos conocemos, y quiero que sigas presente en mi vida. Ojalá pudiese corresponderte, pero ya sabes que hay alguien más. Ella se llama Josephine, y es la única persona a la que he amado. No sé qué pasará entre nosotros, ni si ella me sigue queriendo. Tampoco sé si yo seré capaz alguna vez de olvidarla, no sé si seré capaz de estar con otra mujer. Tú tienes derecho a encontrar lo mismo para ti, alguien que pueda quererte con todo, nada de amores no correspondidos. No quiero ser el culpable de que te quedes esperando por algo que no puedo darte. Sé que no se puede mandar en el corazón, pero ten en cuenta lo que te digo. No desesperes, encontrarás a alguien. Te ayudaré. - sonrío para animarlo un poco, bajando la mano de su mejilla a su hombro. - Que no haya amor romántico entre nosotros no quiere decir que no nos queramos. Ven aquí, joder. - tiro de su hombro para atraerlo hacia mi y darle un fuerte abrazo, pues comprendo más o menos cómo debe sentirse en este momento. Yo tuve mucha suerte al ser correspondido por Josephine, pero ahora que estamos en incertidumbre creo entender un poco mejor qué puede sentirse al no ser correspondido de ese modo.

- No, Johan, no fue tu culpa, fue mia, no te preocupes

Sonreí al sentir la calida mano sobre mi mejilla, aunque internamente me llena un poco de tristeza la broma de que él la palmará antes que yo. Ya lo he vivido tantas veces que llega a cansar repetirlo una y otra vez, es gracioso pero con mi edad aún soy un adolescente. Mis pensamientos se ven interrumpidos por Johan tirando de mi hacia él para abrazarme, me rio en bajito para no hacer mucho ruido y me acurruco entre sus brazos y pongo la cabeza sobre su pecho.

- Johan, ya se que vamos a intentar recuperar a tu amor, pero... hay una cosa que debes confesar - dije bromeando - a ti te ponen los dragones, ¿verdad? Me has besado a mi, has besado a Juliet, ¿sabes lo celoso que estaba tu hermano Reiv? Cuando me lo encontré, no dejaba de beber, estaba tan enfadado que me empezo a decir cosas un poco... feas... - me quede pensativo un momento - Johan, ¿qué es zorrear? es que Reiv me preguntó si yo estaba zorreando, pero no me explicó qué es... La cosa es que aunque al principio pareció que chocamos, después no se porque me beso y se puso a pelearse con un chico de pelo blanco, tuve que cuidarlo porque aun tenía el brazo mal y se podía hacer daño. Me di de cuenta de que no estaba yo tan perdido, que aún podía hacer muchas cosas, que no estorbaba. No es mal chico, un poco cabeza loca y que suele ponerse una máscara para que no le hagan daño, pero tiene un buen fondo.

No se porque se me dio por cotorrear con Johan como si fuera una vieja del visillo, pero la verdad es que hacía tiempo que no teniamos un rato para hablar a solas los dos tranquilamente, sin nada que hacer, bueno estamos de vigilancia pero tampoco es gran cosa, llevabamos demasiados días de aquí para allí, sin parar y momentos así se agradecen.

Ellyos no me culpa en absoluto de haber podido crearle confusión, al contrario, se atribuye la supuesta "culpa" a él mismo. En realidad no creo que sea fallo de ninguno de los dos, simplemente ha sucedido y ya está, no hay que darle demasiadas vueltas. - De ninguno entonces.- resuelvo durante el abrazo que le doy, sonriendo entre divertido y sorprendido cuando menciona lo del beso con Juliet. No sé cómo se ha enterado, que yo sepa él no estaba allí. Me separo un poco de él para poder mirarlo a la cara, frunciendo el ceño con gesto algo confuso. - ¿Cómo sabes tú eso? - cuestiono pensando en el tema, bromeando después con eso de que me ponen los dragones. - Pues será eso...es que han pasado de querer chuscarrarme, matarme y comerme a ser buenos amigos. Eso confunde a cualquiera. - entonces menciona a Reiv, por lo que entorno los ojos como si empezase a cuadrar piezas. Puede que Ellyos o él nos vieran en el castillo, y que a mi hermano no le gustase enterarse de eso. Respecto a lo de recuperar a mi amor prefiero no decir nada, a veces creo que será misión imposible.

- ¿En serio? ¿por qué? No sabía que le interesase Juliet, tampoco es que ninguno de los dos me haya dicho nada al respecto, aunque deberían haberlo hecho...- ahora que lo pienso llevo tiempo sin saber nada de ninguno de los dos, excepto por lo que me dijo Lykaios en el mensaje de la moneda sobre que él estaba entre los heridos del incidente de la cueva. Pongo cara de mosqueo al escuchar que Reiv le dijo cosas feas, pudiendo imaginarme que estando borracho se pasaría de la raya con él. - No le hagas ni caso, sus formas nunca han sido las mejores. - no puedo evitar que se me escape una risa ante su pregunta de 'qué es zorrear', dándome cuenta de lo inocente que es Ellyos, aunque ya me lo imaginase. - Es un vulgarismo, tiene connotaciones negativas. Quiere decir que vas ligando con unos y con otros sin parar, o con todos a la vez. - le explico de manera breve para que pueda entender a qué se refería Reiv. Lo que me cuenta después suena bastante surrealista, entre besos y peleas con un peliblanco que posiblemente sea el Tolstoi, porque se llevan a matar desde siempre. Me llevo la mano a la frente para darme una pequeña palmada, negando con la cabeza. - Qué desastre de muchacho, parece alcohólico...- murmuro en referencia a mi hermano, suspirando después.

- Pues claro que puedes hacer muchas cosas, idiota. ¿Por qué ibas a estorbar? - replico de manera un poco brusca porque no me gusta que no se valore y piense así de sí mismo. - Las personas mediadoras y que cuidan de otras son muy necesarias, pero creo que a menudo se olvidan de pedir ayuda cuando la necesitan ellos... - suelto con segundas intenciones, pensando que él es de los que les cuesta decir algo cuando les hace falta. Me quedo algo pensativo por la descripción que hace de Reiv, a pesar de conocerlo poco a hecho un análisis bastante acertado, o eso creo. - Es un poco difícil...nunca supe cómo acercarme a él. Al menos creo que conseguimos que poco a poco se fuese dando cuenta de que era absurdo ser esbirro de aquel dictador mágico al que servía. - la situación entre nosotros ha mejorado mucho desde entonces, al menos sabemos que podemos contar con el otro si hay problemas. - Ahora que lo pienso...tú te llevas bien con casi todos los que conoces. ¿Cómo lo haces? ¿infinita paciencia?- de tanto en tanto miro hacia la puerta, no quiero que se nos pase cualquier movimiento de interés.

Me sonrojo de vergüenza cuando me pregunta como es que me he enterado de lo de su beso, puede que me haya ido un poco de la lengua, le miro un poco cortado y jugueteo con los dedos antes de responderle.
- Me lo dijo tu hermano, yo estaba fuera volando y el parece ser que volvio, os vio y se marcho cabreado y fue cuando me lo encontré y empezó nuestra extraña conversación, estáis un poco metidos en un triangulo extraño en el que nadie sabe lo que quiere.

Cuando Johan me dice lo que es zorrear, riendose antes por el hecho de que no se lo que significa, me pongo completamente rojo, ¿cómo podía pensar eso de mi? ¿Tan mala imagen estaba dando? Puede que Johan me atrayese desde un principio pero no quería cerrarme aún en banda, oh cielos, siento mucha mucha vergüenza, solo quiero que me trague la tierra en este momento.

- J-Johan, a ti ¿te parece que estea zorreando? Cierto es que te eché el ojo desde el primer momento, pero claro no pude evitar ver un cartel de citas en un bar donde te ayudaban a conocer a tu chico ideal y bueno, me apetecía probar un poco la experiencia... y-y no conocí a nadie, estuvo solo hasta que Reiv se vino a mi mesa y luego fue cuando se puso a pelear - me empiezo a poner más rojo de la vergüenza - y un periodista me vino a preguntar si la pelea era porque tenía celos de que alguien pudiera quitarme a mi amor y si me lo llevé a mi nido... - le miro muy avergonzado - por favor, no le cuentes nada de esto a mi padre...

Johan se enfada un poco por el juicio de valor que hago sobre mi mismo y me quedo pensativo sobre eso de pedir ayuda, ¿necesito yo ayuda? La verdad es que lo pienso detenidamente pero no se en lo qué, bueno, mi cabeza está bastante hecha un churro asi que no se exactamente a qué se refiere. Además de eso, me pregunta como hago para llevarme bien con la gente que conozco, la verdad es que no lo se, me encojo de hombros.

- No lo se... asi como paciencia tengo, también tengo mi mal genio, solo que ese no lo suelo sacar de paseo, no es algo que me guste mucho...

Jamás hubiese imaginado que alguien nos viera aquella noche en el castillo, pues estábamos completamente solos, a excepción del petrificado Thalos. Imagino que Reiv debió llegar justo durante aquellos minutos en los que nos besábamos, como si tuviese el don de la oportunidad. Tampoco podía imaginarme que fuese a molestarle hasta el punto de contarle todo a Ellyos, acabar montando una pelea y desaparecer por completo ya durante varias semanas. Frunzo el ceño un poco mosqueado, no me gusta estar en medio de este tipo de cosas. - ¿Qué...? no hay ningún triángulo amoroso extraño, al menos no por mi parte. No fue más allá de unos pocos besos, supongo que nos sentíamos solos, o que había algo de atracción, yo qué sé...sucedió sin más. Aclaramos que eso no significaba nada, que cada uno seguiría como hasta ahora. Al día siguiente me despedí de ella con un beso rápido de despedida, me parecía soso largarme sin más después de lo de la noche anterior. Espero que no se lo tomase a mal y esté evitándome...- me quedo un tanto rayado pensando en eso que me ha dicho, cruzando los brazos sobre el pecho y bajando la cabeza un poco. Al levantar de nuevo la vista me percato de que el sonrojo de Ellyos ha ido en aumento, parece que le preocupa eso de "zorreando".

- No, no me lo parece. Pero si hicieses lo que se supone que dice la definición de esa palabra...pues tampoco me parecería mal. Cada cual que haga con sus relaciones lo que le apetezca. - sonrío un poco por la aclaración que hace de ir a lo de las citas a pesar de haberme echado el ojo, casi parece que se disculpe por "ponerme los cuernos". - ¿Y? hiciste bien, sólo querías conocer gente y divertirse, no estabas engañando a nadie.- la sorprendente historia del periodista que le preguntó provoca que no pueda contener una breve risa, eso es el remate de la noche surrealista que tuvieron. - ¿En serioo? ¿sigue habiendo reporteros del corazón que se molestan en ir a las puertas del burdel a ver a quién cazan? Joder...ya veo que tuviste una noche movidita. Hace mucho tiempo que no tengo una juerga de esas. Las historias de tus juergas están a salvo conmigo, no le diré nada a tu padre. -
recuerdo que el mío se preocupaba bastante cuando tuve esa mala época en la adolescencia en la que venía borracho a casa noche sí noche también, justo después de que hubiesen dado a mi madre por muerta en el ataque del ejército que hubo en el hospital San Mungo. Por eso entiendo que el padre de Ellyos se pueda preocupar por él si se entera de que se emborracha más de la cuenta.

- Claro, nadie puede estar de buenas todo el rato. Hay gente que se aprovecha de eso. - me entra curiosidad por saber qué tipo de cosas harían enfadar al dragón, hacerle sacar su mal genio. - A mi hay varias cosas que me ponen de mala hostia o que me hagan enfadar. Por ejemplo...- me pongo a pensar el tipo de cosas que no me agradan para contárselo, es una forma de conocernos mejor. - La intolerancia y ataques contra aquellos que no se pueden defender, o que quieran arrebatarte tu libertad o derechos, como el derecho a poder utilizar nuestra magia sin ser perseguidos. No entienden que magia y tecnología pueden ser compatibles, no son enemigos por ser de diferentes razas. También odio que ataquen a los míos de cualquier manera. La indiferencia de aquellos que no hacen nada por impedir que suceda lo que sucede. La gente que se deja comer la cabeza por las ideologías radicales que nos han llevado a esta guerra. Que me traicionen deliberadamente, me mientan, o jueguen sucio atacando por la espalda. Eso hace que pierda la confianza en esas personas. - termino de enumerar, aunque seguro que hay alguna cosa más por ahí. - ¿Y tú, que podría hacerte enfurecer y sacar tu lado más agresivo?

Parece que a Johan le ha rayado bastante lo que vio y malinterpretó su hermano Reiv y me aclaró que no había ningún triángulo amoroso, pues él y Juliet se habían dejado claro que no había nada entre ellos, asi que realmente fue un mal entendido. Tomé suavemente la cara de Johan por su barsbilla como acariciándolo y haciendo que levantase la vista para verme y sonreirle.

- Siento haberlo malinterpretado, no te preocupes, tampoco soy un dragón celoso - dije en broma para quitarle peso al asunto - creo que os vendría bien empezar a comunicaros un poquito más u os acabaréis encontrando en más situaciones así en cualquier cosa, entiendo que peuda ser complicado, que empzáis a entenderos y yo tampoco tuve ningún hermano como para entender vuestra relación.

Le vuelvo a dar otro abrazo, pero este lleno de mucho cariño, mientras estoy abrazado a él con la cabeza apoyada en su pecho puedo escuchar su corazón latir, sonido que desde muy pequeño me reconfortaba y me calmaba. Mientras estoy así Johan me intenta reconfortar diciendo que yo no hice nada malo, sonrio un poco, aunque me doy cuenta de que como siga así mucho rato acabaré quedándome dormido en el regazo de Johan. Nuestra conversación continua y me explica que cosas le hacen enfadar a él y me pregunta que cosas me hacen enfadar a mi. No se muy bien que responderle, es algo que nunca me paré a pensar y cuando sucedía era de manera muy natural. Intenté recordar algunas veces que me llegué a enfadar.

- Cuando estaba con tu hermano, intentando curarle y cuidarle de que no se hiciera daño porque su brazo aun estaba muy mal de cuando nos había ayudado y verlo dolorido luchando y que intentaba hacerse el fuerte me enfadé, no se si contará mucho porque estaba un poco... pedo... pero no me gusta ver a la gente sufrir y más cuando apenas puede hacer algo para defenderse, si atacan a uno de mis "pacientes" me enfadaré mucho, aunque... luego me siento mal por haberme puesto hecho una furia... Si te pasara algo a ti, también me enfadaría y si te hacen enfadar, yo también me enfadaré...

Lo notaba, el calorcito del cuerpo de Johan, la calma y el latir de su corazón estaba haciendo que los párpados me pesasen un quintal, como no sucediese muy pronto algo me iba a quedar más frito que unos huevos sobre el desierto del Sahara.

Salgo de la base tras mi visita a la zona de desarrollo tecnológico, llevando conmigo algunos planos que he conseguido en los archivos del lugar. Las órdenes que me fueron dadas para la misión consistían, en parte, en sacar información relevante relacionada con maquinaria de guerra de la Alianza y con los centinelas. Eso es precisamente lo que he hecho, coger lo que he entendido que podía tener interés. Otra cosa ya es si sirve o no, o si les resulta útil. Eso ya no es asunto mío, pues me he limitado a cumplir la orden. Los planos van doblados y guardados entre mi camiseta y la chaqueta militar, nada demasiado llamativo al no ser demasiado papel. Los guardias de la entrada no ponen ningún inconveniente a mi salida, simplemente controlan qué soldados entran y salen, para llevar un registro de actividad. Las enormes puertas metálicas se abren, permitiendo que salga del recinto militarizado. Hace tiempo que ha caído la noche, así que las patrullas de centinelas y soldados han comenzado a intensificarse en los alrededores.

Una vez fuera, camino varios metros para alejarme de la puerta, pero me detengo sin más al no saber a dónde ir. No sé regresar al castillo del que me sacaron, y aunque supiese debe estar muy lejos de aquí. Me quedo allí parada como un autómata que se ha quedado sin objetivo. No tengo a quien entregar lo que he cogido, y tampoco hay nadie importante de la Alianza por allí como para cumplir con otra de las órdenes. Mi propia voz interna trata de hacerse oír, intentando oponer resistencia al control mental, pero sigo sin conseguir actuar o pensar por mi misma.

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control mental 3 de 5

Guardo silencio tratando de interiorizar el consejo que me da Ellyos sobre la comunicación con mi hermano, que la verdad es que es bastante escasa por no decir nula. No he tenido la ocasión de agradecerle en condiciones la ayuda prestada cuando fueron a buscar lo de la cura, ni tampoco hemos podido hablar de cómo vamos cada uno ni de lo que queremos en este momento. Con algunas personas me resulta fácil comunicarme, como por ejemplo con Ellyos, Thalos, Yaroslav, Lyran...podría contarlos entre los amigos más cercanos, aquellos con quienes tengo verdadera confianza. Con Reiv esto no sucede.

- Llevas razón. La próxima vez que lo vea no se me escapa, nos debemos una charla. Y no me molesta que le interese Juliet, si ellos están bien con eso me basta. Lo único que puede haberme molestado un poco es que no me digan nada. - hago un sonido de fastidio, no me gusta ser el último en enterarme de las cosas, que es lo que me ha pasado esta vez. - Lo del hermano...yo me crié como hijo único. No supe de la existencia de Reiv hasta casi los 20, y algo similar con otro de mis hermanos pequeños. No he podido tener la típica relación de hermanos que crecen juntos, así que tampoco te creas que tengo mucha idea. Mis amigos puede que hayan sido lo más parecido a hermanos...- Ellyos podría entrar en ese grupo perfectamente, aunque haya llegado hace poco. En esta ocasión es él quien me da el abrazo, aunque de manera mucho más relajada, hasta el punto de que parece que se quedará dormido sobre mí de un momento a otro. Las cosas que dicen molestarle tienen que ver con que hagan daño a los otros, o con que éstos no sepan cuidarse.

- En ese sentido creo que comparto bastantes puntos contigo. Detesto que utilicen y dañen a otros sólo para manipular de ese modo al resto. La Alianza suele hacerlo mucho. No atacan al cuerpo o a la mente, sino al corazón. - obviamente me refiero en sentido figurado, a jugar con los sentimientos de una persona, con el miedo a perder a sus seres queridos. Tanta relajación hace que empiece a darme sueño, con Victorya durmiendo, Ellyos a punto...me tienta echarme una siesta. Lo único que me espabila es el sonido de las puertas principales abriéndose, así que rápidamente me pongo alerta. - Ey, Ellyos, siento fastidiarte la siesta, pero tenemos que movernos. - susurro sacudiendo un poco su hombro, sintiendo algo de frío nocturno al separarme del abrazo. Tiro de su mano para ayudarlo a ponerse en pie después de haberlo hecho yo, señalando hacia el lugar por el que va caminando Morgana. Ésta se queda parada, así que asumo que ya no sabe qué hacer. - Veamos si ha conseguido algo.- echo un vistazo a Victorya antes de moverme, por ahora está segura aquí. Después hago un gesto a Ellyos para que me siga, caminando hacia donde está Morgana. Cuando llego hasta ella me detengo, preguntando de manera pausada. - ¿Conseguiste lo que te pedí? ¿Alguien te ha hecho preguntas comprometidas? Entrégame lo que tengas.

Dejo mi guardia habitual por los pasillos del recinto en el momento en que recibo un aviso de los vigilantes de las cámaras de seguridad. Me informan, a través del comunicador, de que ha habido un movimiento sospechoso en el área de investigación tecnológica. El acceso era autorizado, pero las cámaras han captado algo extraño y quieren asegurarse de que todo esté en orden. Salgo de la base rápidamente para seguir a la recién regresada excapitana Wolf, dándole el alto para que deje de alejarse.

- ¡Alto! ¡Deténgase! - le pido a la mujer que sigo, sin apuntarla todavía con mi rifle. Por ahora el protocolo es saber qué ha sucedido, ver si nos lo puede aclarar y comprobar que no ha habido ninguna actividad ilícita en la zona de archivos. - Se la ha visto en una zona dedicada a la investigación y se ha detectado un movimiento sospechoso. Al parecer dicen que ha sustraído algo de la zona de archivos. Por favor, regrese dentro para aclarar el incidente. - Camino hacia ella informando del motivo por el que le he pedido que se detenga, pero levanto el arma enseguida al ver que se acercan dos personas más. Reconozco a uno de ellos, extrañándome no sólo de que esté aquí a las puertas de nuestra base, sino de que vaya a hablar con Morgana de manera aparentemente pacífica. Esa imagen me da muy mala espina, sobre todo teniendo en cuenta que la antigua capitana estuvo encerrada con ellos mucho tiempo. Tal vez se haya pasado al bando enemigo. Cojo el comunicador que llevo en el cinturón, avisando a por el canal común para que todos sepan que sí sucede algo realmente extraño.

- ¡Es una trampa! - en cuanto dejo el comunicador vuelvo a coger el rifle, pensando en una actuación rápida para que no se marche de allí y se lleve a Morgana de nuevo. Demasiado confuso todo, demasiadas preguntas por resolver. Apunto lo mejor que puedo, disparando a Johan que es el que tengo más a tiro y es el que estoy seguro que reconozco como hostil.

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dado opciones (para ver dónde va el disparo)

1-brazo
2- pierna
3-hombro
4-abdomen
5-costado
6-espalda
7-pecho
8-mano
9-brazo
10-cabeza

off: empiezo a interpretativo, podemos cambiar si luego queréis que vayamos a dados.

El miembro 'Soldado Alianza Humana' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado opciones' : 10

Mientras charlaba con Johan me estaba empezando a quedar dormido, estaba muy cansado, pero enseguida se escuchó el sonido de unas puertas abriéndose y Johan me espabiló un poco y me ayudó a levantarme, no pude evitar el bostezar mientras me levantaba. Ibamos a acercarnos a la chica para que Johan pudiera hablar cuando fuimos interrumpidos por un soldado que fue a hablar con ella para explicar su extraño comportamiento, cuando se percata de nuestra presencia no duda un instante en avisar a sus compañeros y después se oye el ruido de un disparo que va directo hacia Johan.

Agarro a Johan por la cintura y lo empujo contra el suelo para evitar que la bala le acierte, despues me levanto enfadado y señalo al soldado como diciéndole "ahora verás". El viento se empieza a acumular a mi alrededor con fuerza, alzo las manos juntas por las muñecas por encima de mi cabeza y este se empieza a acumular entre las palmas de la mano como una esfera, la tomo en una mano y la lanzo con todas mis fuerzas para derribarlo con un golpe de viento.

Desvío mi mirada perdida hacia Johan cuando éste hace acto de aparición. No muestro ningún tipo de emoción en el rostro, ni de ira ni de alivio, simplemente lo miro y asiento cuando me pregunta si he conseguido lo que me pidió. - No, no me han hecho preguntas comprometidas.- respondo mientras me saco los planos doblados, justo cuando me los pide. No aporto más información, sólo respecto a lo que me ha preguntado. Allí dentro no preguntaron demasiado, y los científicos estaban trabajando y no me prestaron demasiada atención.

Extiendo los papeles hacia él, pero en ese momento somos interrumpidos por un soldado que ha sido enviado para vigilarme. La bala que dispara a Johan pasa bastante cerca de mí, pero no me inmuto, sólo dejo caer los papeles al suelo para que los coja el que me los ha pedido. Después me doy la vuelta, mirando hacia el soldado con gesto de desinterés.

- Negativo. No voy a regresar dentro. No soy sospechosa.

Algo dentro de mi comienza a reaccionar, como si quisiese rebelarme contra aquel que me está controlando mentalmente. Puedo escuchar más clara mi propia voz interna, aunque por ahora todavía sigo a su merced. Me quedo ahí en medio plantificada, entre el soldado y el par de seres mágicos. Uno de ellos ataca con su magia de viento al soldado, así que al estar en medio también me veo afectada, siendo empujada hacia un lado por culpa de la ráfaga. Me quedo allí tirada y en posición fetal, sin participar en la pelea a menos que me lo digan.


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control mental 4 de 5

Aunque no había descansado en absoluto mientras oía las conversaciones y los sonidos del bosque, mejor hubiera sido quedarse dormida. No hubo nada de la conversación que realmente le incumbiese o tuviera una repercusión directa en ella. A veces hacía falta escoger mejor sus batallas, o en este caso las cosas que espiaba. Exceptuando tal vez lo que hacía enojar a ambos, que podía ser útil, todo lo demás era bastante personal.

Estaba a punto de decidir dormirse de verdad cuando Johan se levantó del piso y comenzó a caminar. Para cuando se sentó a observar la escena. Aunque la rubia no le parecía conocida, sí que se dio cuenta del soldado que había visto la escena.

Se ocultó entre los arbustos. Si bien sabía que no podía hacer mucho para defenderles, sí que era bueno tener un elemento sorpresa. Esperó a que la primera ráfaga saliera de la pistola del contrario y vio como Ellyos ayudaba a evitar heridas, cuando vio como Morgana tiraba papeles al suelo.

Se cubrió de sombras lo mejor que pudo y corrió hacia ellos. Como las sombras le cuchicheaban estupideces, las ignoró y les obligó a seguirla bajo la luz de la luna. Si bien no la cubrían como para que fuera una oscuridad definitiva, sí que cubrían su rostro como si no existiera nadie debajo de la capucha de su abrigo.

Tomó los papeles, observando a la chica rápidamente. No le conocía, de eso estaba segura, pero su nombre podría decirle muchas cosas si lo encontraba. Guardó los papeles en su bolsa infinita y trató de mantenerse en pie. Aún cuando los vientos habían cesado, eran suficientemente fuertes para arrastrarla.

Nos tenemos que ir. Tenemos que salir de aquí, ya tenemos lo que buscabas ¡No nos pueden capturar ahora!

El Centinela llegó rapido al area conflictiva porque a parte del refuerzo de patrullas por la caida de la noche ( a todos les gusta atacar cuando está oscurito, que manias) se habia dado la voz de alarma. El arma no tardó en acticvar sus sensores de magia y rapido localizó el punto caliente.

Voló hasta dicho área identificando tres objetivos bien claros, los escáneres le indicaron rapido de quienes se trataban al menos dos de ellos: Johan Black, y Victorya Norecuerdo. Ambos en busqueda y captura por diferentes motivos, siendo ella la mision mas reciente por su fuga hace no tan poco de los Campos de Concentracion. El otro fue identificado como un dragón, pero no tenían datos sobre él registrados. De momento, claro está....

-Personal no autorizado registrado en area restringida. Preparense para una rendición no pacífica.

Alzó el brazo mecanico hacia la mujer, y éste se convirtió en una metralleta. Al tiempo, sus ojos brillaron con un patrón en particular mientras silenciosamente ACTIVADA UN ÁREA DE DESAPARICION para evitar las fugas de los futuros prisioneros...





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25 dados + 25 base= 50 PS daño a Vyka

El miembro 'Robot Centinela' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Centinela ataque' :

Los problemas no tardan en llegar, parecía todo demasiado sencillo como para que pudiese salir bien. No consigo coger los papeles que me tiende Morgana, justo en ese momento sale un soldado que la increpa al darse cuenta de la situación. Apenas tarda unos segundos en disparar tras darle el alto, dirigiendo el cañón de su arma hacia mí. Ellyos resulta ser mucho más rápido que yo y no duda en derribarme en el suelo para sacarme de la trayectoria de al bala, salvándome con ese gesto. Maldigo en voz alta al puñetero soldado que nos ha jodido el plan, ya que hasta ahora iba bien. - ¡Joder! ¿cómo se han dado cuenta tan rápido? - protesto al aire, sin que sea en realidad una pregunta. Está todo muy vigilado, tarde o temprano pasaría. - Gracias, amigo.- murmuro a Ellyos antes de que se levante para plantar cara al soldado con su habilidad de control del viento. No tardo más de tres segundos en levantarme, no he sufrido daños gracias a su rápida intervención. Prefiero no pensar en lo que podría haber pasado de no haber sido derribado.

- ¡Lo noqueamos y nos largamos! ¡la misión de hoy no es de enfrentamiento! - sé que puede desenvolverse solo y lo hace bien, pero no vamos a pelear contra el soldado ahora que ya hemos cumplido el objetivo. Victorya se une a nosotros tras haber despertado, consiguiendo lo que yo no conseguí con el material que trae Morgana: cogerlo. No puedo estar más de acuerdo con ella, así que trato de engancharlos a ambos por el brazo para desaparecernos. No consigo hacerlo por culpa del maldito centinela que se acerca a nosotros, lo peor que nos podía pasar. Conjuro una barrera defensiva bastante básica ante el ataque del robot, una barrera que apenas dura unos segundos pero que espero pueda detener algunas de las balas que van en dirección a Victorya. Tras esto me adelanto unos cuantos metros en dirección al centinela, canalizando y concentrando energía mágica entre mis manos para después enviar una potente esfera que arrojo al centinela.

- ¡Ellyos, no podemos desaparecernos con el campo antidesaparición de los centinelas! ¡tendremos que marcharnos de aquí volando! ¡sal primero con Victorya y poned a salvo lo que hemos conseguido, os daré unos minutos para alejaros y luego os seguiré!



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ataque mágico:

dado 15 + 31 stat ataque mágico + 10 hab. especial + 5 canalizador= 61 al CENTINELA darkred

defensa mágica

dado 15 + 8 stat defensa mágica + 5 canalizador= 28 para Victorya

El miembro 'Johan Black' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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#1 'Ataque Mágico' :


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#2 'Defensa Mágica' :