Beinn Dearg, Ruinas de Ouroboros

Bueno, las cosas iban a avanzando, más allá de Leroy siendo Leroy, todos parecían entender que nadie estaba aquí por querer y mejor era hacer el asunto lo más soportable posible, así que ella se limitó a escuchar en silencio al menos de buenas a primeras, porque no había nada que hiciera falta decir.

Primero Catherine, que preguntó por Giordano y Markus, que la verdad sea dicha, quien sabe donde estarán, pero lo que la hizo suspirar con ya cierta tristeza fue la confirmación de que el ritual no iba a servir con la isla.

Luego, lo siguiente que ha dicho Mei, es algo que le ha provocado una terrible inquietud, porque bueno aunque el tucán parlante veloz ya había dicho algo que permitía intuir algo parecido, tenerlo confirmado era algo que asustaba, sobre todo al pensar que el viejo Rasputin estaba ahí, y que seguramente qué estaba en una mala posición...

Luego de eso Niko procedió a hacer preguntas importantes, de las cuales esperaba poder conocer la respuesta a decir verdad...

Y luego llegaron más pendragon, uno sin decir una palabra, y otra con algunas aclaraciones, mismas que la verdad han ayudado, así que no dudó en poner atención lo que tenía para decir.

Luego de eso, Adael ah tenido ideas, mismas que suenan todas interesantes, a excepción de una de ellas, la qué menciona la alquimia, porque la verdad no le suena como algo que deberían de hacer, ya que solo se le ocurre una cosa que la alquimia puede hacer con almas humanas, porque ellos no son así, los pendragon podrán ser todo lo dados a los sacrificios humanos qué quieran, pero...

Bueno en fin, que también había llegado el amargado de Oscurus. Qué parece que no esperaba recibimiento alguno, e hizo algunas preguntas más, pero bueno, varias tuvieron su respuesta cuando Wthyr habló, y ella tuvo que hablar también.

Debo secundar al Pendragon mayor en eso.

Procedería a ver Adael con seriedad, quizás la primera vez que levanta la mirada en toda la reunión.

¿Desde cuando tomamos ese tipo de acercamientos a los problemas? Puede qué sean espíritus poseídos por la venganza, pero también fueron personas, y condenar el alma de alguien a ser materia prima no me parece buena solución para ningún problema.

Podía caerle de lo peor el rey de los arrogantes, pero eso no significa que piense que convertir a sus antepasados en baterías esté bien.

Y luego de eso, Leroy, que puede jurar qué parece más que está haciendo una puesta en escena qué participando en una reunión, más teatral no puede ser, y además no pierde ocasión de ser mezquino incluso con quien no está por ahí, eso es de cobardes, para insultar a alguien bien debe de ser en su cara.

Pero en fin, fuera de eso, habló de un encantamiento, cosa que pensaba que podría ir perfecta, así que asintió un par de veces al respecto a la idea, sin importarle demasiado qué tuviera una espada de fábula en la mano, la verdad lo importante es que podría ayudarles.

Perfecto entonces, con ayuda de eso y el portal qué dijo Catherine en los mensajes podríamos tener suficiente para ir a buscar al viejo Matvey.

Porque combatir al árbol desde dentro, seguro no sería una buena, pues como bien a dicho Wthyr, que la verdad le está dando urticaria estar de acuerdo con ese sujeto, pero aún así es cierto lo que ha dicho, son demasiados, para enfrentarlos hará falta otra estrategia, sea cual sea, como la de invocar los espíritus.

Frunció un poco el ceño ante la frase de Sofía y se notó en su rostro que no se tragó lo que le dijo, no después de leer su mensaje -Haremos lo que podamos lo más pronto posible- Le dijo antes de que se fuera y escuchó el pensamiento de Wthyr, asintiendo con suavidad. Tuvo que contener un poco la risa cuando Wthyr le soltó aquel comentario a Leroy. Ah…revitalizante. Acabó mordiendo su labio inferior para controlar la mueca.

-Que tú no tengas nada que ofrecer- Miró de arriba a abajo a Merlín -No quiere decir que los demás no tengamos- Giró suavemente el rostro hacia Nikolaos y negó suavemente con la cabeza - No estoy del todo segura, han sido capciosos pero tengo la impresión de que Matvey tiene alguna especie de alianza con Lyosha Svensson, ahora, cabeza regente del gobierno Soul en Italia. Intentaré informarme al respecto-

En cuanto Mei dijo que sabía algo de Matvey, Catherine sintió un nudo en el estómago y la instó a hablar con la mirada pero la interrupción de los demás no le permitió hablar. Tuvo que respirar profundo varias veces para controlar los nervios y los mil y un mal escenarios que le venían a la mente. Tras ello finalmente escuchó a Mei y sintió que le recorría un escalofrío de pies a cabeza al pensar que… quizás las islas ahora no eran islas sino parte de la dimensión del Sanguis Ligno. Se humedeció los labios pensando en ello… -Si, lo están persiguiendo a él- Asintió con suavidad mirando a Mei -Pero eso significa que está vivo y que el mensaje que su aprendiz y yo enviamos… llegó a destino-

Alzó la cabeza para mirar al cielo como si pudiera ver las islas desde allí, pero no. La llegada de Cedric la pilló desprevenida porque entró en su campo de visión con aquella altura tan…. Se sorprendió de que le saludara, la última vez no habían quedado en buenos términos o eso era lo que Catherine había percibido. Aquí estaban, enfrentando las consecuencias de ello.  Sonrió de lado asintiendo -Hola Cedric- Momentos después llegó Gwen y Catherine parpadeó con cierta sorpresa al verla vestida de batalla. Se veía preciosa. ¿Qué demonios tenían los Pendragon que todos eran tan atractivos? También le dio un poco de envidia y se sintió estúpida yendo en ese vestido a una reunión que estaba planteada para batallar... Así que se concentró en seguir con la mirada a Alud, parecía recuperada.

Se quedó rumiando eso mientras oía a Wthyr. “Yo tengo esa piedra, fue la que usé para el ritual con Lé… ¿Qué?”, giró la cabeza hacia él con algo de sorpresa al oír que había invocado a Dana. “¿Estás bien?”, fue lo primero que pensó en su dirección al recordar lo afectado que había estado al conocer que su alma estaba allí. Tanto que Catherine había optado por cambiarlos de habitación para que pudiera conciliar el sueño en paz.

La voz de Gwen aclarando lo que eran hizo que tensara los labios y bajara la mirada al piso, algo contrariada. Ouroboros…no estaba hecho de guerreros sino de “eruditos”. Se suponía que el Consejo de los 20 debía proteger el conocimiento mágico… Los dejó hablar, oyendo y analizando -Charles- Respondió a Oscurus alzando la cabeza, tenía que hablar con él, y luego miró a Wthyr un instante decidiendo no seguir porque pareció tomar la palabra y lo dejó hablar. Ella no sabía mucho de estrategias así que sólo oyó. Inspiró profundo al escuchar lo de Desmond y miró un momento a Mei. ¿Estaría allí batallando? Seguramente, Desmond amaba Ouroboros. ¿Y Rhaegar? ¿Qué había pasado con él?

Lo de Adael y la posterior reacción de Wthyr hizo que retomara un poco la situación, Rosse resumió todo rápidamente y Catherine tragó en seco -Tengo que practicar. La apertura del portal en la dimensión del Sanguis Ligno, incluso con la piedra, no es tan sencillo. Se encuentra en una arista particular al ser… extraño. Aún así, tenemos que lidiar con el velo. Necesitamos protección - Indicó y… Leroy hizo de lo suyo.

Sabía que eso irritaría a los Pendragon porque… Joder, es que le irritaba hasta a ella. Esa espada pertenecía a Sean. Aunque no pudiera ni blandirla de lo flaco que era. Catherine ladeó suavemente la cabeza momentos antes de elevar una ilusión en la que la roca desaparecía de imprevisto, provocando que Leroy creyera la pérdida de la base de su épico “trono improvisado” y, con suerte, se caía de culo.

Antes de separarse del matrimonio Pendragón, le dedicó a Cath una mirada significativa. Agradecida porque tuviera en mente a su pequeña. No podían adelantar los tiempos del universo, lo sabía, pero era reconfortante el saberse apoyada, al menos en espíritu.

Se alejó de ellos con un suspiro en los labios, recibiendo después a Nikolaos junto a ella. Fue entonces cuando Mei comenzó a aclararle el panorama. Estaba confirmándole el peor panorama que conocía, si era sincera, pero al menos tenían algún tipo de realidad ante la cual prepararse. La mención de Matvey le hizo poner atención en la reunión. Sintió temor de saber que estaba ahí, pero que Mei lo viera le indicaba que... que no había muerto. No él. La muerte era su elemento, debía estar ahí sin intenciones de quedarse. Ese pensamiento la angustiaba. Esperaba al menos que su rostro no lo reflejara tanto, pues sonrió a Cedric a modo de saludo, levantando también la mano como un gesto para agradecerle por asistir. Ahora sentía que la reunión no podía ir tan mal.

Cuando Nikolaos preguntó, a ella no le competía definir lo que era el Sanguis Ligno, porque la verdad nadie la escuchaba, pero sí era su área de expertise el de la naturaleza.- Todo cuanto es material es espíritu. Un árbol es la materialización de presente, pasado y futuro al mismo tiempo. Normalmente el espíritu es uno solo, un alma líquida, un aura extendida por todo un bosque. Si en este caso es un ejército, las almas no han podido trascender, mezclarse con el universo. A mi ver, significa que la batalla la debemos librar en varios frentes, o en varios escenarios. En el álmico, en el físico, e incluso dentro de nosotros mismos. Quizás al mismo tiempo.- Y era ese "quizás al mismo tiempo" la que la tenía más desanimada. ¿Serían capaces de dejar de lado las luchas internas? ¿Los Pendragón serán capaces de luchar contra sus antepasados, contra los principios ancestrales de su familia? Si la respuesta a cualquier pregunta no era un "si" rotundo, la batalla ya está perdida a su parecer. Al menos el Sanguis Ligno no estaba formado en su totalidad por enemigos, sino también por aliados Pendragón que, seguramente, serían poderosos.

Sintió la mirada de Adael fijamente cuando escuchó aquello de la poción astral, pensando en que podría hacer algún tipo de variación.- La poción astral sirve si los fantasmas quieren hablar contigo.- Murmuró, un poco desanimada quizás, pero toda idea contaba. Escuchó Oscurus a la lejanía. Levantó la mano y le invitó a unirse al círculo. Sus ideas era adecuadas y bien recibidas, por lo que debería entrar al círculo como el valioso miembro que era. Le encantaría poder volver a ver a Snagov por tan solo un momento, así que su comentario le daba algo de esperanza. Seguro que habría tambien cada una de las generaciones de su familia, y aquello le llenaba el corazón. O eso... hasta que Leroy hizo de las suyas. Aquello no era un Si rotundo a colaborar, molestaría a los Pendragón y más y más rollo.- En lo que quede del bosque, del lago y del castillo principal se pueden absorber a los espíritus más débiles. Tendremos que exorcizarlos después, pero al menos nos liberaríamos de una buena parte si el ejército es demasiado extenso. Nos ayudarían a detener un poco a quienes vengan si invocamos a Charles a este mundo. Se supone que solo un dios puede volver de la muerte, así que si este es el camino, creo que deberíamos abrir las puertas o hacer los rituales en lugares que nos garanticen un poco de éxito, como en Atenas o en el Templo de Júpiter en Italia; aunque Matvey o Lyosha lo tendrán más claro.

Un portal se abrió en las inmediaciones de Beinn Dearg, no uno de esos que unian inframundo y tierra o dimensiones a parte, si no uno generado por la piedra de los tres mundos que portaba conmigo. Beinn Dearg, las ruinas de cuando Ouroboros estuvo a punto de caer y lo hizo...parcialmente.

En cuanto me había enterado de que celebrarían una reunión alli, no me demoré más de lo necesario tras lograr alcanzar las costas de irlanda sin ahogarme. Quizá llegaba a tiempo, quizá diera con ellos. Ver lo mucho que habian escrito en el brazalete me indicó que al menos la mayoría seguia con vida.

Donde creé el portal no había nadie (ya habría sido mucha casualidad aparecer en el punto exacto donde estaban reunidos) pero no me iría de alli sin buscar bien.

No resultó complicado ubicarlos....mi conexión con los espíritus se había vuelto mucho mas tangible, directa y presente. Había andado bastante tiempo en la tierra de los muertos y ahora hablábamos más que nunca, la misma lengua. Los susurros indicados me guiaron y sirvieron de brújula, no estaban lejos.

Me aproximé a ellos andando y al poco visualicé un circulo de gente reunida. Mientras me acercaba, habia vislumbrado el vuelo de unos dragones....

" así que ellos también están aquí"

Puede que la imagen que ofrecía no fuese la mejor del mundo, la de alguien que lleva sin dormir o comer en varios dias. No obstante, caminaba erguido. No sabía cuantos días habían pasado desde que me habia ido, me parecían una eternidad.... sin embargo, una tenue sonrisa asomó a mis labios conforme los veía reunidos, y ralenticé mis pasos hasta detenerme, fijando mi vista en Catherine.

Pero algo hizo tornar aquella sonrisa tenue en un gesto serio. Un susurro extraño. Un sonido familiar. Unas alas negras... miré a otro lado, donde nada había. Lo estaba imaginando? Ya no estaba allí....pero mis pulmones se encogieron como cuando sí. Pedí silencio sin darme cuenta, y con la otra mano un gesto lento indicando....que nadie respirara, que nadie se moviera aún.

La descendiente de Confucio miró a Oscurus cuando formuló sus dudas. No tenía respuestas para eso. Lo que habia visto era lejano, difuso.

- Supongo que si.


Respondió tranquilamente, mirando después al resto de hermanos Pendragon, sin sentirse amenazada por la presencia de ellos. Estaba en calma. Algunos, no tanto.

"Leroy, cálmate, por favor..."

Envió su mensaje telepático al descendiente de Merlin, nadie quería que ocurriese como aquella otra vez.

Asintió cuando Wthyr respondió que lucharían contra...Charles Pendragon, claro.

- ...si espílitus han salido antes del Sanguis, que les ata ahí? Quielo decil...pol qué no simplemente vagal y poseel un cuelpo

Suspiró cuando Leroy propuso el modo o mas bien, anticipó que sabía como cruzar el velo sin morir, y luego aquella piedra desapareció y...en fin. No estaban para chiquilldas.

- Sofía, cleo que.... - iba a decirle que lo de combatir en varios frentes sonaba bien, que probablemente fuera eso lo que tenian que hacer, cuando vio una silueta alta y oscura andar hacia ellos. Le costó un rato identificar que era Matvey....y para entonces solo atinó a quedarsele mirando en silencio.

Tras abandonar el hospital, me había desaparecido rumbo a aquel lugar. Desgraciadamente, no habia podido realizar el viaje de una, asi que habia tenido que dividir las desapariciones en varias tandas y....aquello me había llevado más tiempo del esperado. Asi que sí, llegué un poco bastante tarde, y rematadamente agotado....y con algo de mal humor, por cierto. Después me pasaría por el mercado de China Town o algo a por....obsidiana de troya, claramente. No es lo que parece.

- Buenos dias, diria que lamento la tardanza pero la verdad es que no lo lamento nada. - dije asi sinceramente nada mas aparecerme en el lugar de reunion, donde el circulo estaba ya bastante nutrido. - por qué habeis elegido este lugar? Es muy incómodo. - me quejé porque alli hacía frio y humedad de esa odiosa. Me había traido un fajo de pergaminos enrollados bajo el brazo. - En fin, que me he....? - avancé hasta el circulo para entrometerme y entonces mis ojos, despues de pasear por Niko, por Sofía, por Cath y por Wthyr, aterrizaron en Gwen. Me tropecé con una estupida piedra porque me la quedé mirando, embobado. Eran las trenzas? De pronto me entraron ganas de mandar todo a la mierda y simplemente, retratarla en este momento.

...Pero tendría que conformarme con capturarla en mi memoria y hacerlo despues, al mismo tiempo que me acordaba del tono de su ultimo patronus. Carraspeé y me erguí, recolocando los pergaminos bajo mi brazo y la camisa al mismo tiempo, que llevaba sin ninguna prenda mas encima, por cierto. Look de taller, y punto. Aparté la mirada de ella por fin y fue solo entonces cuando reparé en la presencia de Matvey.

"no jodas que hasta el muerto ha llegado antes que yo."

- Eres tú de verdad, Rasputín, o estoy alucinando? - era otro efecto secundario?

El descendiente de Moisés no tardó en tomar la palabra sugiriendo ciertas ideas controversiales a las que rápidamente Wthyr se negó y sorprendentemente McGonagall también. Incliné un poco la cabeza agradeciendo ese gesto por su parte por el respeto que mostraba hacia, al menos, algunos de nuestros ancestros.


Una vez más desvié la mirada a Adael, que continuaba hablando sobre la posibilidad de privarlos de magia. -¿Quién os dice que las raíces del Sanguis Ligno no están buscando tierra firme en este mismo momento? Desde el lugar donde me alojo puedo ver las islas y aunque aparentemente la fusión ha terminado las raíces siguen danzando y extendiéndose. No es algo que podamos descartar.-Informé para que tuviesen en cuenta aquella posibilidad. Si fuesen ciertas aquellas sospechas íbamos contra reloj.-Sin embargo a pesar de que sería una opción bastante productiva creo que nos enfrentamos a una magia que es difícil de apagar.-O nuestros antepasados lo hubiesen hecho años atrás.

Varios tomaron la palabra y atendí sin aportar más. Luchar fuera, luchar dentro...luchar contra nosotros mismos.-Descendiente Dioscórides, siento decir esto pero creo que lo que quede de todo aquello ahora mismo ya no es Ouroboros ni Avalon si las raíces los han alcanzado. Hasta que no lo sepamos no deberíamos contar con esa posibilidad.-Comenté con tono conciliador. Mi animadversión hacia Sofía era conocida y sin embargo en aquello tenía razón. Algo en mi interior aún dudaba sobre aquella locura que suponía luchar contra mis propias creencias pero Wthyr, mi rey y hermano lo había decidido así y yo no iba a abandonarle en su lucha.-No todas las almas tienen la misma fuerza.-Respondí al escuchar a Mei.-Deben tener una jerarquía de poder igual que las tenemos los vivos.

En ese momento hablaron de un portal, desconocía nada acerca de aquello. Miré a Catherine interesada en saber más ya que al parecer era una propuesta suya pero el Descendiente de Merlín tomó la palabra interrumpiendo. Clavé la vista en él mientras ejecutaba esa ostentosa presentación de Excalibur. Tensé la mandíbula con gesto contrariado y llevé la mano al pomo de la empuñadura de mi espada de sangre. No la había convocado, simplemente era eso, un trozo de metal sin hoja, bastaba un simple corte en mi muñeca para formarla y cortarle la cabeza a ese pomposo mago. Y a pesar de la aparición del Descendiente de Rasputín continuaba con la mirada clavada en aquel hombre luchando por no comenzar un conflicto en una reunión nuevamente.

Si lo pensaba bien en nuestras primeras reuniones a mi me habían atacado y herido. Si le cortaba la mano que sujetaba a Excalibur sería quedar a la par¿verdad?.  Por suerte algo, o más bien alguien, hizo que desviase mi atención sobre todo porque el Descendiente de DaVinci se había ido casi de bruces contra el suelo. Apreté mis labios apartando la mano de la empuñadura clavando la mirada en Giordano por un momento fijándome algo distraída en su atuendo y ese modo de colocarse antes de desviarla a Merlín nuevamente, eso sí, ahora esbozando una pequeña sonrisa.-Perfecto, estoy segura de que Charles irá directo a acabar con el portador de su espada. Espero que esté preparado Descendiente de Merlín.-Efectivamente aquello era una amenaza, una muy real, Charles disfrutaría destrozando a aquel ladrón. Apagué la sonrisa mirando ahora a Rasputín que parecía algo emparanoiado. Miré entonces a Wthyr como preguntando.¿Se había vuelto loco ahí dentro?

Fue consciente del poco tiempo que había tenido para hablar con Catherine al darse cuenta de que ni siquiera había hecho mención a la invocación del espíritu de Dana. Había sido después de la ruptura, y tras reencontrarse sucedieron demasiadas cosas en poco tiempo. Asintió de manera discreta a lo de estar bien, más por inercia que por otra cosa. Recordar aquel oscuro episodio en este preciso momento y en medio de la reunión no era lo que necesitaba. Trató de centrarse nuevamente en lo que iba diciendo el resto, arqueando un poco la ceja ante los comentarios místicos y profundos de Sofía. Seguro que se había fumado algo. Lo que más le sorprendió fue aquello de que Rosse estuviera de acuerdo con él con lo de no usar las almas para crear piedras filosofales.  - Algo de cordura, por fin. - mencionó fijándose en la mujer que había comprendido que usar a tus  familiares para eso era una aberración.

Dejó que Gwen comenzase respondiendo a la pregunta de Mei sobre los espíritus, sobre las jerarquías y por qué no iban por ahí vagando sin más. - Porque están allí atrapados, no pueden escapar. Sólo hay uno que lo ha podido hacer hasta ahora. - que era evidentemente el que controlaba todo. La aparición del nigromante provocó que se tensase levemente y apretase la mano de Cath un poco más casi sin darse cuenta. Seguía siendo de los que más detestaba del Consejo por todo lo que había hecho, desde controlar a su dragón muerto hasta meterle ese maldito demonio dentro. Rasputín parecía salido de una historia de terror por las pintas que llevaba, incluso su cordura parecía tocada. Al parecer Gwen pensaba lo mismo, a juzgar por la mirada que ambos intercambiaron. Tampoco le pasó desapercibido el gesto de Da Vinci cuando se dignó a aparecer por allí. El muy idiota se había quedado como atontado mirando a Gwen. Echó un vistazo de reojo a Cath como queriendo que le leyese la mente, para compartir su pensamiento.

"¿Te has fijado en cómo la mira? está claro que le interesa mi hermana"

Hubiese seguido fijándose en esos dos de no ser porque el repelente de Leroy se atrevió a sacar ante ellos una espada que supuestamente era la que ellos querían desde hace siglos, un reivindicación que habían mantenido desde que llegaron en la isla. Si realmente era esa espada o era una imitación no podía saberlo, pero el sólo hecho de vacilar de aquella forma ya se merecía un castigo. - Bravo. Cuando creía que no podías caer más bajo, lo haces. Debes ser muy idiota para venir aquí a alardear delante de nosotros con esa espada que no te pertenece. No eres digno de ella, ni saldrás de aquí portándola. - podía ser una amenaza, o una simple declaración de intenciones. Llevó lentamente la mano libre a la empuñadora de la espada rompemagia que portaba, cerrando el puño alrededor. Por el momento no tenía intención de usarla porque antes quería acabar con aquella reunión y llegar a una solución, pero...no fue precisamente su voluntad lo que cobró más fuerza en ese instante...

Un escalofrío recorrió su columna vertebral, dejándolo paralizado momentáneamente mientras contenía la respiración y un gesto carente de expresión, vacío. No era la primera vez que aquella sensación se apoderaba de él, pero en esta ocasión no fue doloroso, sino más bien como si lo drenasen por dentro y tuviese que luchar por mantener su propia voz. Antes de darse cuenta ya había desenvainado la espada. Trazó con ella el fatídico y rápido movimiento que condujo el filo hacia Catherine, con la única intención de hundir la hoja en su abdomen. Clavó en ella una mirada que ya no era la de Wthyr, sino una de pura satisfacción por la venganza.  Ya había advertido que estaría allí para tomar posesión cuando menos lo esperasen.

- Porque ya no me sirves. Porque ya conseguí lo que quería. Porque ya me cansé de ti. Porque quiero que tu linaje desparezca y el mío prevalezca. Por eso. - recitó saboreando cada palabra, repitiendo las palabras del antepasado de Catherine, Urien Le Fay.  - La venganza que te prometí...- susurró la voz cruel de Charles, disfrutando el instante que llevaba siglos anhelando. Que Catherine sintiera lo mismo que había sentido su hija al morir asesinada por la persona que amaba. No la soltó aún, sino que aprovechó la sangre para crear una afilada lanza que dirigió de inmediato hacia el del linaje de Merlín, tratando de atravesarle a la altura de la garganta.


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Dado 10 grado de control

El miembro 'Wthyr Pendragon' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado (10)' :

Puso los ojos en blanco un momento al escuchar a Catherine, pasando de contestarle al asunto de los Soul Reapers y lo que había que ofrecerles. Hizo mucho más caso a Sofía, le gustaba su idea de hacer el ritual mágico en un sitio especial, con energías más concentradas.  - Perfecto. Podemos ir a Stonehenge también. Debo asegurarme que todos quedamos protegidos por el ritual. - sin embargo pareció que a los demás no les agradó lo de sacarse la espada, como a Mei con su petición mental de calmarse. Ni caso, que se calmaran los otros. Por un momento le dio la impresión de que la roca en la que estaba subido desaparecía, acabando de bruces contre el suelo rocoso por culpa de aquella ilusión de Cath. No soltó el bastón ni la espada, pero se enfureció al darse cuenta de que la piedra en realidad seguía allí, de que le habían engañado. Tenía pinta de ser obra de la mocosa malcriada Le Fay. Decidió no darle el gusto de quejarse ni de reclamarle, volviendo a ponerse en pie sacudiéndose la túnica dignamente, recolocándose el pelo.

- ¿Dignos dices? Los Pendragon dejasteis de ser dignos de ella hace mucho tiempo, por eso se la quedó mi linaje. - la amenaza de Gwen sobre Charles le hizo abrir la boca con indignación, girándose hacia los demás para que lo tomasen en cuenta. - Amenazan en una reunión pacífica. Ya veis. - se detuvo en Matvey, que seguro que después de lograr salir del árbol venía con ganas de guerra. O no, porque tenía mala pinta en general. - Si lo sois, tendréis que demostrarlo como vuestros antepasados. A no ser que tengáis miedo a intentarlo... - Decidió clavar la espada en la roca en la que estaba, susurrando un conjuro mientras el metal se hundía en la piedra con un halo luminoso a su alrededor. Estando concentrado en eso, tardó unos segundos en darse cuenta del horror que acababa de desatarse.

- ¡¡Traición!! - gritó al ver que la espantosa escena de la espada atravesaba a Catherine, aferrándose a su báculo para conjurar un ataque hacia Wthyr. Todo sucedió tan rápido que ni siquiera tuvo tiempo para conjurar un escudo de protección con el que defenderse aquella lanza de sangre. Se clavó directa en su pecho, haciéndole caer herido al suelo desde la altura de la roca.

Vale, las cosas van avanzando... Primero que nada, Catherine hablando de las cosas que ha estado haciendo para ayudar, se nota que ha estado ocupada con ello, es algo que se le puede respetar sin lugar a dudas, parece que tiene muchos contactos y mucha gente a la que acudir en todo tipo de situaciones.

También dijo que tenía que practicar con lo del portal cosa que hizo que Rosse se límite a suspirar y asentir, porque supone que es una cosa de esas que es tan complicada qué simplemente no puede ser adelantada, tendrán que seguir esperando.

Luego, Sofía a empezado a hablar, soltando una metralleta de conceptos qué no le ha entendido ni la mitad, porque todo lo que escape del plano material es algo de lo que tiene ni una pista, pero supone que está diciendo lo que se puede hacer, y si alguien más sabe de cosas raras espirituales supone que lo hará con ella.

Luego, finalmente algo que le pudo entender, que viene a ser que aparentemente se pueden encerrar a los espíritus y sugiere algunos lugares para hacerlo, ella le pone atención por si acaso luego toca hacer algo que no pueda entender en esos lugares.

Luego.

¿¡Viejo Rasputin!?

Notó la llegada del hombre que tenía de haberse convertido él mismo en muerto viviente.

Bueno, joder... Eso le ahorra pasos al plan...

Tan asombrada estaba de ver que se ha librado solo que eso es todo lo que atinó a decir.

Vaya, parece que todos han subestimado el alcance de los poderes de ese viejo nigromante, si siempre fue capaz de hacer eso la mitad de todo lo que han intentado hacer ha sido un poco por impacientes, porque el viejo ya ha llegado y quien sabe que respuestas traiga consigo.

Lurgo siguió Mei con algunas preguntas reelevantes, luego Gio, que llegó de repente y ella lo saludó con un gesto antes de reírse por lo que ha dicho, la verdad que daba igual a que hora hubiera llegado, lo pondrían luego la corriente de todo lo que estaba pasando.

Luego de eso, bueno, parece que la hermana pendragon qué se había presentado tenía respuestas a todas las preguntas sobre los espíritus, mismas a las qué ella atendió con atención y también notó el gesto de asentimiento, mismo que ha decidido responder con uno igual, como una confirmación.

Y luego, el Pendragon mayor, y cuando lo escuchó se sintió en la obligación de decir.

Existen cosas que están más allá de cualquier justificación...

Y no lo decía solo por eso de las piedras, desde que esté maldito conflicto empezó, a visto muchas cosas que... Francamente no le agradan, todo este parece estar degradando lentamente a los descendientes, a niveles qué le dan miedo, de formas qué no hubiera creído qué presenciaría dentro del consejo, la sensación le resulta... Perturbadora, ¿Qué les está pasando a todos? No tiene idea de sí los Pendragon siempre han sido salvajes... Una pequeña parte de ella aún quiere creer que no, quizás para no sentirse mal por cooperar con ellos, pero lo cierto es que han hecho cosas dignas de que los llamen de esa forma, ¿También estarán en decadencia? No lo sabe, pero ahora no puede evitar preguntárselo, y si no lo dice, es porque no es momento.

...

Y vaya que no es momento, hizo caso omiso de todo cuanto pasó con Merlin y su piedra, cuando vió a Wthyr empezar a actuar... Raro, tenía la vista fija en él y por eso se percató, de repente puso cara de nada, y de repente...

¿¡Pero que mierda!?

No sé retuvo, procedió a lanzar el hechizo de petrificación en contra del sujeto, que actuaba como poseído, porque hablaba diferente, así que a lo mejor si qué lo estaba, quien sabe y en este momento no es que importe...

Lo que importa es que tampoco puede dejar qué haga lo que le plazca, ya le ha pegado un buen espadazo a Catherine y mejor es no dejar que haga nada con ningún otro, supone que no pueden tener una reunión con estos tipos sin qué alguien los embosque.

Nota:

El miembro 'Rosse McGonagall' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Ataque' :

Tras hacer sus aportaciones escuchó al resto de sus compañeros. Sofía le añadía misticismo o tecnicismo a su aportación pero es cierto que sus palabras causaron desazón en Catherine. ¿En cuántos niveles iban a tener que pelear? Estaba incómoda ante esa idea.  La pregunta de Mei hizo que Catherine se dirigiera a ella para explicarle pero Gwen y Wthyr se adelantaron y la morena hizo un muy leve puchero que borró en seguida. Se tranquilizó también cuando Wthyr le hizo saber que estaba bien respecto a Dana pero sería un tema que hablarían más adelante.

La perspectiva de que el Sanguis Ligno estaba buscando alcanzar la tierra le recordó las historias sobre las raíces en Tintagel. Entonces…si no lograban controlar aquello, el Sanguis se extendería -Seguirá extendiéndose...- Suspiró quedamente, cerrando los ojos ante las palabras de Gwen aunque no le dirigió la mirada - Mei, cuando mencionaste lo de la proyección le pregunte a Johan Black si nos echaba una mano. Es un gran mentalista y creo que un buen aliado, estamos en buenos términos y lo he ayudado en Londres. Le explicaré más de la situación-

Todo iba viento en popa cuando vio a Leroy caerse y no escondió su sonrisa. Que supiera que había visto su burda puesta en escena y había aumentado la apuesta. Sin embargo, bien sabía que los Pendragon responderían …Y lo hicieron. Catherine suspiró suavemente mirando hacia Cedric y luego hacia Gwen que…tenía un arma? Iba a intervenir  cuando vio finalmente a Matvey.  No lo pudo controlar, se le salió un sollozo al verlo vivo…caminando. No sabía si era el embarazo o la certeza de que no lo había perdido, pero le era imposible contener las lágrimas. Hizo un gesto extraño como pidiendo silencio pero ella sólo quería correr y abrazarlo. El gesto de Wthyr de apretarle la mano fue lo que hizo que se quedara ahí siguiendo instrucciones de Matvey.

Empezó a limpiarse las lágrimas con el dorso de la mano cuando llegó Giordano tropezando y… Siguió su mirada y sonrió de lado, con un ataque de felicidad inesperado por la presencia de Matvey. Definitivamente, se veía preciosa. No había cortado su vínculo con Wthyr así que oyó perfectamente su pensamiento. “Sospecho que el interés es mutuo… ¿Sabes que cuando vino diciendo que estaba prometido pensé que había sido con ella? ¿Por qué lo prometiste con Shyvanna?”,

Se distrajo con toda la parafernalia de Leroy y la piedra, arqueando las cejas por la tontería que acababa de hacer -Pero… ¿Cómo vas a hacer eso? Es una de las opciones para atravesar el velo. ¿Eres tan corto de miras que te pones con este tipo de obstáculos por mero orgullo?- Espetó Catherine algo irritada cuando percibió algo raro en su conexión mental con Wthyr.

No pudo hacer nada, fue lenta en reaccionar quizás porque era incapaz de creer lo que sucedería. El dolor, tan familiar en su vida, la centró en Wthyr mientras una mirada fría y llena de odio se clavaba en ella. Shock y horror, puro y duro. Podía sentir cómo su ropa empezaba a humedecerse con la sangre que manaba de la herida. No podía respirar bien porque cada inspiración le dolía. Subió las manos para cogerse del jubón del Pendragon mientras escuchaba aquel juramento en una voz que no le pertenecía. No, no era Wthyr. Era Charles.

Francis Scott Fitzgerald escribió:“El momento más solitario en la vida de alguien es cuando está viendo cómo su mundo se desmorona, y lo único que puede hacer es mirar fijamente.”

Catherine alargó una mano hasta el rostro de su esposo mientras abría la boca con el único propósito de llamarlo, de centrarlo, pero al hacerlo sólo salió sangre de sus labios y una tos propia de quien se ahoga en su propio líquido vital. Las piernas empezaron a temblarle y podía sentir que el latido rítmico de su corazón empezaba ralentizarse. ¿Por qué le hacía eso? ¿Acaso no comprendía lo que hacía a Wthyr? Más allá de aquella venganza, estaba atentando contra su propio linaje al herir a su descendiente no nato. El recuerdo de su bebé activó algo en ella y los dedos de Catherine se convirtieron en garras, clavándose en la mejilla de Wthyr aruñándolo y buscando ese vínculo que los unía, que tantas veces le había servido de guía, para detener la hemorragia.

No estaba.
No había nada.
No había ningún rumor de magia.

Poco a poco el histerismo ocupó la mente de Catherine cuando se dio cuenta de que no había vínculo mental, tampoco podía llamar a su piel de ébano. No tenía magia… No podía hacer nada. Si los gritos dentro de su cabeza no eran suficientes, los que empezaron a sonar fuera la aturdieron. Empujó a Wthyr, a Charles, lejos de ella con escasa fuerza pero logró desensartarse. Se llevó las manos allí intentando mantener sus entrañas dentro de su cuerpo y sintiendo…que revivía su doloroso pasado

El dolor se irradió con cada movimiento mientras se tambaleaba en dirección a Matvey, mirando a Rasputin con un gesto desubicado ante las figuras dobles que apreciaba, pero las piernas le fallaron instantes después y se fue de bruces al piso,  poniéndose en posición fetal mientras se apretaba la herida con fuerza y pensaba…

En lo mucho que Wthyr odiaría a Charles y a sí mismo.
En que nunca volvería a ver a sus hijos ni a Ian.
No le había dado la documentación a Ian.
Tenía una deuda con Lyosha.
Se uniría finalmente a sus hermanos.

Y que ese sueño que Ian y ella habían tenido de dejar un mundo mejor a sus hijos… No fue más que eso, un sueño. Había fracasado en su misión más importante, ahora los dejaba sólos a merced de un árbol que bebería de su sangre impulsado por un odio acérrimo hacia su linaje.

“- Ahora vete. Vete de una vez. Nunca debimos dejar que esto pasase. Un Pendragon y una Le Fay...nunca podría acabar bien. “

Quizás debió hacerle caso. Pero era rebelde por naturaleza.


D10: +8 bebé sobrevive.
10 - Crítico - Sobrevive por cojones.

El miembro 'Catherine Le Fay' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado (10)' :

Las ideas comenzaron a fluir de manera más o menos civilizada mientras los presentes comenzaban a aportar. A pesar de que había buenas ideas, ideas que nos ayudarían, siempre había un revés. Miró a Gwen cuando llamó su atención con su nombre. No era tan ingenua como para pensar que la cortesía con la que hablaba era real, pero al menos estaba aportando algo. Algo que la inquietaba en demasía. Era como estar frente a dictadores. El juego se les había ido de las manos y ahora se presentaban cargando la oscura verdad de la extensión de su desastre. Asintió suavemente al comentario, aunque ella tenía una fe distinta a la de ella. Se rehusaba a ver a Ouroboros árido como el desierto que era Avalon.- Incluso la tierra serviría, lo podemos intentar. La vida buscará la manera.- Dijo, quizás de manera demasiado optimista. Paso entonces a las palabras de Leroy. Era cierto, Stonehenge podía ser incluso mejor, más cercano.- Te ayudaré en lo necesario, Leroy.

La atención se dividió entre el enfrentamiento de Leroy con los Pendragon y la llegada de Rasputín. Su mirada rápidamente se dirigió hacia donde Rosse la dirigía, encontrándose con él. Su cuerpo mismo liberó una tensión que había guardado por semanas al verle, que aunque un poco demacrado seguía siendo él mismo. Suspiró desde lo profundo de su alma, sintiendo como aligeraba su carga hasta que… la sonrisa de su querido amigo se esfumó de repente, y el aire comenzó a vibrar de manera diferente, siniestra. Como si se hubiera enfriado en un segundo en esa sensación que congelaba los huesos. Fue entonces que escuchó la voz. La voz extraña e infrahumana que buscaban desterrar se había hecho de Wthyr Pendragon sin previo aviso. Y sus ojos no daban crédito a lo que estaba viendo. La batalla dentro de Wthyr había empezado ya, y sus palabras no habían sido nunca más acertadas cuando vio aquella espada hundirse en Catherine y dejarla en el suelo. Entre los gritos de todos, entre todo el barullo que se había armado, su mirada estaba fija en ella, ignorando que en su cuerpo había más de una persona. Estar aferrada a Niko le impidió salir corriendo tras ella, pero también le ayudó a sentirse fuerte. No podía salir tras Catherine en ese preciso instante, pero hizo que el pasto la cobijara, que cubriera sus heridas y las apretara de manera que pudieran dejar de sangrar mientras detenían a aquella ánima y la alejaban de su cuerpo. Si a Charles había que atarlo a algo, las ruinas de lo que era Ouroboros también podían servir para encadenarlo al plano de los vivos. Pero aquellos rituales antiguos no eran fáciles de hacer, ni mucho menos rápidos.

La tierrra comenzó a temblar bajo sus pies, subiendo en intensidad a medida que los segundos pasaban. Tenía poca o nula idea de que hacer, pero inició maniatando al espectro de pies y manos antes de que otra cosa pasara. Si al menos podían retenerlo, algo se podría hacer.

El maldito hormigueo no desapareció, y la losa que se habia instalado sobre mi pecho se hizo más pesada. Un zumbido inundó mis oídos.... por qué no se callaban?

Gritaban más fuerte los muertos que los vivos? No tardé en darme cuenta de por qué....

Alcé la mirada de pronto y la clavé en Wthyr, solo décimas de segundo antes de que Charles tomara posesión de él.


- NO!!!
- El grito restalló como un trueno, pero el daño resultó inevitable y presencié incapaz de protegerla cómo Catherine era atravesada de lado a lado por "su amor".

Las reacciones de los demás tampoco se hicieron esperar, pero yo no pude quitar ojo de la mirada de ella cuando se apartó de la espada. Corrí en su dirección, intentando cogerla antes de que cayera al suelo y estiré la mano en su dirección, pero se fué de bruces al suelo y con ella mis esperanzas por llegar a tiempo. Llegué a su altura cuando la hierba de Sofía la envolvía.

- Tú.... - unos jirones de niebla fantasmal surgieron desde mis pies, que ondulaban y se estremecian incesantemente mientras ascendían para coronar mi cabeza, clavando una sombría mirada en Wthyr. Mejor dicho, Charles....

Por eso no lo había enconcontrado en aquel lugar? Habia estado buscando a Wthyr y Catherine? Este...era el cebo? Que no se hubiese ido despues de atacar a Merlin y Catherine...quería más? Era el momento de probar cuánto control podía ejercer sobre aquel espiritu corrompido y vengativo... Usando los poderes del demonio a mi favor, tendría al menos una posibilidad de hacerme con el control sobre él y hacer que se detuviese.

- Obedece!

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tirada de voluntad vs Charles 1d20 (Saber del espíritu: gobernar a los muertos) debe superar tirada para resistir orden

El miembro 'Matvey Rasputín' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado (20)' :

Aunque traté de ocultar el hastío que Leroy me producía no pude evitar responderle con bastante mala gana -Khan lleva toda la quincena ayudando en el hospital. Ha estado trabajando duro, seguramente mucho más que algunos- Recalcando ese algunos por Leroy y su prepotencia. Donde estuviese el muchacho no era de mi conocimiento, pero tampoco le recriminaría que decidiese descansar un poco, a decir verdad.

La idea de Adael y la piedra no me parecía una locura, a pesar de que no sea bien recibida por los Pendragon o por Rosse. Como último recurso no está mal, si los Descendientes juramos proteger la isla, podríamos hacerlo también muertos, ya habían tenido suficiente en vida, ahora que se sacrifiquen. Total, del linaje Galeno estarían los padres de Lucio, o los que decidieron que mis padres no eran dignos. Elucubré cruzándome de brazos desterrando al poco la idea.
Wthyr, el mismo que hacía unos meses que no le hubiera importado ahogarme en aquella piscina ahora parecía no querer sacrificar a otros. Bendito santurrón. Ladeé la mandíbula con molestia, dirigiendo una leve mirada a Catherine cuando fue ella la que respondió a la pregunta de Charles. La china pareció leerme la mente, iba a preguntar lo mismo y fue Gwen la que continuó. -Pero, ¿para qué el ejército? Se supone que ya ha conseguido su venganza. Llevarse por delante Ouroboros. Y Avalon como daño colateral. Si las raíces se están expandiendo, ¿podríamos verlo con el sónar que inventasteis Markus y tú, Giordano?- Que parecía haberse  ido del planeta Tierra con la Pendragonia de trenzas. A ver si es que le gustaba o algo. Qué entrañable. Pues a un hotel.

La idea de la poción podría ser interesante, claro que para eso tendría que prepararla la pelirroja de las hierbas y me daba en la nariz que no estaba muy por la labor, que por cierto, ¿mundo álmico? ¿qué se había fumado? Rechacé su invitación con una leve negativa con la mano, agradeciéndolo igualmente con la cabeza. La llegada de Matvey creó un silencio tan sepulcral como él, que sería roto al poco con el teatrillo de Leroy de las que tampoco se me escaparon por alto las amenazas de los Pendragon. Ya estábamos otra vez con la misma cantinela de siempre. Lástima no tener los dardos tranquilizantes de Aldaron.

Lo que no esperaba nadie es todo lo que ocurrió a continuación. Yo no reconocía aquella voz que, por supuesto, no pertenecía a Wthyr. Tampoco hubo mucho tiempo de reacción para evitar lo que acababa de ocurrir. Aparté de un empujón a los que tuviera delante para alcanzar a Catherine que estaba siendo sanada por... ¿hierba? ¿desde cuándo la mujer florero podía hacer eso? Chasqueé la lengua y me dirigí a Leroy, buscando en primer lugar signos de vida. Por muchas ganas que le tuviera no dejaba de ser compañero. Comprimí la hemorragia de la lanza para frenar el sangrado al canalizar magia, mientras avisaba a Arleen vía patronus que la cosa se había complicado y que necesitábamos su ayuda en urgencias. Alcé levemente la mirada a Charles, apretando los dientes y luego hacia los otros dos Pendragon. No había dicho dónde estábamos, así nadie podía seguirnos. Coloqué a ambos cuerpos heridos próximos y los desaparecí de allí rumbo a la asistencia sanitaria pertinente.

- Oh ya veo. Entonces la situacion es glave y no puede sel ignolada. - era todo muy serio si las raices buscaban tierra y el velo se expandia. Mei estaba tranquila pese a todo, o al menos, eso aparentaba.

Pero para variar, ni una reunion tranquila podían tener, y a ningun acuerdo o plan útil pudieron llegar porque el espiritu aquel tomó posesion de wthyr para hacer su drama vengativo y cargarse a Catherine.

Mei quedó horrorizada y en su horror, lo más que procuró fue meterse en la mente de Wthyr para controlarlo y obligarlo a dormir, de modo que el espiritu malvado no pudiera seguir usando su cuerpo para causar el mal, pero ademas de ser demasiado tarde para Cat y Merlin, fue inutil. La mentalista se sujetó la sien dolorida cuando al intentar meterse en Wthyr algo la rechazó bruscamente.

- No puedo entlal en su mente!!! Esta loco!!

"se le ha metido el demonio wei"

"bueno, de hecho sí que he leído algo interesante que podriamos utilizar...."

Escribí unas letras frente a mi cuando tanto Gwen como Catherine y todos explicaron sus cosas y el tontaina de Leroy se puso modo fantasioso. "CLM". En resumen estabamos jodidos.

Luego seguí escribiendo algo con aquellas letras magicas pero se emborronaron rapido, iba a aportar mi granito de arena cuando a Wthyr se le fue la pinza, habló con otra voz y apuñaló a dos de golpe. Las reacciones fueron rapidas y varias de ellas dirigidas contra mi hermano, otras encaminadas a poner a salvo a los heridos.

Miré a Gwen y le hice un gesto con la cabeza para que me ayudara, si lo había poseído Charles puede que siguiera intentando acabar con mas descendientes, aunque ya se debia haber quedado satisfecho el muy...

"no podemos dejar que hieran a Wthyr"

Controlé la sangre de su cuerpo obligandolo a frenar sus movimientos, el mejor plan era desmayarlo o algo por el estilo....obligar a Charles a dejarlo tranquilo.